MARIE, Jean Bernard. Los mecanismos de protección de los derechos humanos de las Naciones Unidas 1.

La organización de las Naciones Unidas es la mayor organización internacional existente fundada en 1945 tras la Segunda Guerra Mundial por 51 países que se comprometieron a mantener la paz y la seguridad internacionales, fomentar entre las naciones relaciones de amistad y promover el progreso social, la mejora del nivel de vida y los derechos humanos. La Organización trabaja en una amplia gama de temas fundamentales, desde el desarrollo sostenible, medio ambiente y la protección de los refugiados, socorro en casos de desastre, la lucha contra el terrorismo, el desarme y la no proliferación, hasta la promoción de la democracia, los derechos humanos, la igualdad entre los géneros y el adelanto de la mujer, la gobernanza, el desarrollo económico y social y la salud internacional, la remoción de minas terrestres, la expansión de la producción de alimentos, entre otros, con el fin de alcanzar sus objetivos y coordinar los esfuerzos para un mundo más seguro para las generaciones presentes y futuras.

Los derechos humanos hacen parte de los problemas que más trata la organización. Entre sus funciones principales apaece la humanización de la guerra, reafirmar la fe en los derechos fundamentales del hombre, crear las condiciones para que se pueda mantener la justicia y el derecho internacional y promover el desarrollo social.

El escrito se divide en capítulos distribuidos de la siguiente forma: el primer capítulo titulado progresos normativos: un código internacional de derechos humanos, en el que se expone la importancia jurídica que ha desarrollado la carta de las Naciones Unidas, aceptada actualmente por 192 estados alrededor del mundo, y la influencia que esta ha tenido tanto en el desarrollo jurídico de estos como en las organizaciones no gubernamentales que se regulan por la carta. Habla además de las especializaciones que se dan en la organización diferenciando los campos de acción descritos en cartas que desarrollan estos temas, entre las que aparece todo lo relacionado sobre derechos humanos, en segundo lugar violaciones específicas de estos derechos y la protección que se debe a estos en las diversas circunstancias, en tercer lugar se nos habla sobre convenciones que buscan proteger a grupos específicos de personas y por último todo lo referente sobre la discriminación y la lucha sobre esta. El capítulo termina con un recuento de las convenciones y cartas más importantes.

El segundo capítulo desarrollos institucionales: una red de órganos internacionales de protección de los derechos humanos, es una presentación de los diversos órganos con los

que cuenta la organización entre los que destaca la comisión internacional de derechos humanos.

En el tercer y último capítulo, necesidades y prioridades: el futuro de la protección internacional de los derechos humanos, se plantea el futuro de los derechos fundamentales como base de los derechos, al tiempo que se cuestiona sobre las medidas que deben ser tomadas para que se produzca mayor adhesión a las convenciones y tratados, y que sean estos la base y el futuro de la función normativa.

El autor desarrolla su tesis basado en la importancia de la creación, adhesión conocimiento y unificación de los derechos fundamentales por medio de convenciones y tratados que permitan una evolución de la sociedad basada en la justicia y garantía de dichos derechos.

El texto pertenece a las Naciones Unidas y hace parte de un grupo de publicaciones que realiza la organización mediante las cuales además de emitir su posición frente a los diversos temas tratados tiene en cuenta las posiciones y opiniones de los Estados miembros lo que remite a la colaboración interestatal de la que se habla dentro de la organización buscando así un mayor cumplimiento de las convenciones y tratados por parte de estos.

Es importante el texto porque ayuda a conocer más el funcionamiento de la organización y su deseo por crear condiciones más justas a nivel mundial. No obstante lo anterior la tesis del autor no me parece muy convincente porque se ha evidenciado que aun dentro de los Estados existen lineamientos de conductas que propugnan una protección a los derechos humanos pero que pasan de ser simples escritos que en la realidad no se cumplen.

Critico al autor la importancia que le da a las convenciones y tratados porque aunque no les niego el carácter que poseen, la realidad demuestra que lo escrito y lo real no concuerda. Considero que los tratados existentes ya son suficientes y que lo importante es encontrar políticas efectivas de acción que permitan proteger a cada individuo de las atrocidades cometidas incluso por estados integrantes de la organización.