James Patrick Kelly

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  • Pensar como un dinosaurio, James Patrick KellyAgregado el 17 diciembre 2009 por admin en 203, Ficciones, tags: Novela Corta

    KAMALA SHASTRI regres a este mundo igual que lo haba abandonado: desnuda. Sali del ensamblador tambalendose, tratando de mantener el equilibrio en la delicada gravedad de la Estacin Tuulen. La sujet y,con un solo movimiento, la envolv con una bata; luego la conduje suavemente hacia el flotador. Tres aos enotro planeta haban transformado a Kamala. Estaba ms esbelta, ms musculosa. Ahora tena las uas de dos centmetros de largo y cuatro cicatrices de incisiones paralelas en la mejilla izquierda que quizs respondan a algn concepto gendiano de la belleza. Este sitio, tan familiar para m, pareca provocarle casi un estado de shock. Era como si dudara de las paredes y fuera escptica del aire. Haba aprendido a pensar como una aliengena.Bienvenida. Al tiempo que la acompaaba por el pasillo, el susurro del flotador se transform en un *wuush*.Trag saliva con fuerza y pens que se echara a llorar. Tres aos antes lo hubiera hecho.Muchos migradores se sienten devastados cuando salen del ensamblador.Es porque no hay transicin. Haca unos segundos, Kamala estaba en Gend, el cuarto planeta de la estrella que nosotros llamamos psilon Leo, y ahora estaba aqu, en rbita lunar. Estaba casi en casa; la gran aventura de su vida haba terminado.Matthew? dijo.Michael. No pude evitar sentirme contento de que se acordara de m.Despus de todo, me haba cambiado la vida.Desde que llegu a Tuulen para estudiar a los dinos, he guiado quizs unas trescientas migraciones, de ida y de vuelta. El de Kamala Shastri es el nico escaneo cuntico que he pirateado en mi vida. Dudo que a los dinos les importe; sospecho que es una infraccin que hasta ellos se permiten cometer de vez en cuando. S ms de Kamala al menos, de la que era hace tres aos que de m mismo. Cuando los dinos la enviaron a Gend, su masa era de 50.391,72 gramos y tena 4,81 millones de glbulos rojos por mm3. Saba tocar el nagasvaram, una especie de flauta de bamb. Su padre era originario de Thana, cerca de Bombay, y su sabor preferido de fruta de mascar era meln, y haba tenido cinco amantes, y a la edad de once aos quera ser gimnasta pero se haba recibido de ingeniera en biomateriales, y a los veintinueve aos se haba ofrecido como voluntaria para ir a las estrellas y aprender a cultivar ojos artificiales. Haba demorado dos aos en cumplir con el entrenamiento para la migracin; saba que poda arrepentirse en cualquier momento, incluso en el mismo instante en que Silloin la transportara por medio de la seal hiperlumnica. Entenda lo que significaba equilibrar la ecuacin.Yo la conoc el 22 de junio de 2069. Vino del puerto L1 de Lunex en el transbordador e ingres por nuestra compuerta puntualmente, a las 10:15. Era una mujer pequea, redondeada, con el largo cabello negro peinado hacia atrs, tirante alrededor del crneo. Le haban oscurecido la piel para protegerla de los rayos UV de psilon Leo; era del mismo color negroazulado profundo del crepsculo. Llevaba puesta una adherente tnica a rayas y unas zapatillas de velcro que la ayudaran a desplazarse durante el breve tiempo que pasara navegando en nuestra microgravedad de 0,2.Bienvenida a la Estacin Tuulen. Le sonre y extend el brazo. Me llamo Michael. Nos estrechamoslas manos. Se supone que soy sapiencilogo, pero tambin trabajo de gua local.Gua? Asinti distradamente. Bueno. Escudriaba un punto detrs de m, como si estuviera esperando a otra persona.Oh, no te preocupes le dije. Los dinos estn en las jaulas.Abri grandes los ojos, mientras su mano se separaba lentamente de la ma.Llamas dinos a los Hanen?Por qu no? Me re. Ellos nos llaman bebs. Y llorones, entre otras cosas.Kamala mene la cabeza, perpleja. La gente que nunca vio a un dino en persona tiende a formarse una idea novelesca: los reptiles sabios y nobles que dominan la fsica hiperlumnica y que introdujeron en la Tierra lasmaravillas de la civilizacin galctica. Dudo que Kamala hubiera visto jams a un dino jugando al pker o engullendo a un conejo que lanza chillidos de dolor. Y nunca haba discutido con Linna, que an no estaba convencida de que los humanos estuviramos psicolgicamente preparados para ir a las estrellas.

    Ya comiste? Hice un gesto indicando el corredor que conduca a las salas de recepcin.S es decir, no. No se movi. No tengo hambre.Djame adivinar. Ests demasiado nerviosa para comer. Ests demasiado nerviosa para hablar, incluso. Desearas que me callara la boca, que te metiera en la canica y te transportara lejos de aqu. Que

  • terminramos de una buena vez con esta parte del asunto, eh?No me molesta la conversacin, en realidad.Ah vamos. Bueno, Kamala, es mi solemne deber avisarte que en Gend no hay manteca de man ni emparedados de jalea. Y que no hay salpicn de pollo. Cmo me llamo?Michael.Ves? No ests tan nerviosa. No hay un solo taco, ni una sola porcin de pizza de berenjenas. Esta es tu ltima oportunidad de comer como un ser humano.Bueno. No sonri verdaderamente (estaba demasiado ocupada en demostrar que era valiente), sino se le crisp una de las comisuras de la boca. En realidad, no me molestara tomarme una taza de t.Bueno, en Gend s hay t. Me dej guiarla hacia la sala de recepcin D; sus zapatillas dejaban ligeras marcas en la alfombra de velcro. Por supuesto, lo hacen con hojas de csped.Los gendianos no tienen csped. Viven bajo tierra.Refresca mi memoria. Apoy la mano en su hombro; debajo de la tnica, Kamala tena los msculos rgidos. Los gendianos son los hurones o las cosas con bultos anaranjados?No se parecen en nada a los hurones.Atravesamos la puerta burbuja y entramos en la recepcin D, un espacio rectangular y compacto con muebles dispersos, de baja altura, nada amenazadores. En un extremo haba una unidad de cocina; en el otro,un armario con un sanitario de vaco. El cielorraso era cielo azul; la larga pared mostraba una imagen en vivodel ro Charles y el horizonte de Boston, asndose al sol de finales de junio. Kamala acababa de finalizar el doctorado en el MIT.Opaqu la puerta. Kamala se pos en el borde de un silln, como un abadejo a punto de salir volando.Mientras le haca el t, se encendi la pantalla de mi ua. Respond al llamado y apareci una Silloin en miniatura, en modo discreto. No me miraba; estaba muy ocupada observando los aparatos de la sala de control.Un problema zumb su voz en mi audfono muy insignificante, en realidad. Pero tendremos que eliminar a los dos ltimos del cronograma de hoy. Que se queden en Lunex hasta el primer turno de maana. Podemos retener a esta una hora ms?Claro dije. Kamala, te gustara conocer a una Hanen? Transfer a Silloin a la ventana tamao dinosaurio de la pared. Silloin, te presento a Kamala Shastri. Silloin es la que maneja todo aqu. Yo soy solamente el portero.Silloin mir por la ventana con el ojo que tena ms cerca; luego se dio vuelta y escrut a Kamala con el otro ojo. Para ser una dino, era de baja estatura, slo un poco ms de un metro de altura, pero tena una cabeza enorme que se bamboleaba en su cuello como un meln haciendo equilibrio sobre un pomelo.Seguramente se haba untado con aceite, porque las escamas plateadas brillaban a ms no poder.Kamala, aceptas mis ms felices intenciones hacia ti? Levant la mano izquierda, abriendo los dedos flacos para dejar expuestas las oscuras medialunas de la membrana atrofiada.Claro, yoY nos permites ejecutar esta transportacin?Kamala se puso rgida.S.Tienes preguntas?Estoy seguro de que tena varios centenares, pero en ese momento, posiblemente, estaba demasiado asustada para preguntar. Mientras se quedaba dudando, yo terci:Qu existi primero, el huevo o la lagartija?Silloin me ignor.Para ti sera excelente comenzar cundo?Est tomando un t dije, entregndole la taza. La llevar cuando termine. En una hora, digamos?Kamala se retorci en el silln. No, de veras. No tardar unaSilloin nos mostr los dientes, varios de los cuales eran largos como teclas de piano.Sera de lo ms apropiado, Michael.Cerr la comunicacin; una gaviota atraves volando el espacio donde haba estado su ventana.Por qu hiciste eso? Haba severidad en la voz de Kamala.Porque aqu dice que tienes que esperar turno. No eres la nica migradora que vamos a enviar esta maana. Era mentira, por supuesto; habamos tenido que reducir el cronograma porque Jodi Latchaw, la otra sapienciloga asignada a Tuulen, estaba en la Universidad de Hiparco presentando nuestra tesis sobre el concepto de identidad de los Hanen. No te preocupes, har que el tiempo vuele.Por un momento, nos miramos. Yo podra haberme entregado a una hora de charla superficial; lo haca con

  • mucha frecuencia. O podra haberle sonsacado el motivo por el cual se marchaba; sin duda, tena alguna abuelita ciega o un primo segundo esperando que ella le llevara esos ojos artificiales, para no mencionar los potenciales subproductos que bien podan terminar con la tuberculosis, el hambre y la eyaculacin precoz, bla bla bla. O podra haberla dejado sola en esa habitacin, mirando la pared. Pero la gracia estaba en adivinar hasta dnde llegaba su espanto.Cuntame un secreto le dije.Qu?Un secreto; ya sabes, algo que no sepa ninguna otra persona. Me mir como si yo fuese un ser recin cado de Marte. Mira, dentro de un rato estars rumbo a un lugar que est a cunto? Trescientos diez aos luz de distancia? Est previsto que te quedes tres aos. Para cuando regreses, yo podra ser rico, famosoy estar en otro lado; probablemente nunca nos volveremos a ver. Entonces, qu tienes que perder? Prometo no contrselo a nadie.Se recost en el sof y apoy la taza en el regazo.Se trata de otro examen, no? Despus de todo lo que me hicieron pasar, todava no decidieron si deben enviarme o no.No. Dentro de un par de horas estars rompiendo nueces con los hurones en alguna oscura madriguera de Geden. Soy yo, charlando.Ests loco.En realidad, creo que el trmino tcnico sera logomanaco. Viene del griego: logos, que significa palabra, y mana, que significa que te faltan dos bits para completar un byte. Me encanta charlar, nada ms.Mira, empezar yo. Si mi secreto no te parece bastante jugoso no tendrs que contarme nada.Mientras beba el t, sus ojos eran dos ranuras. Yo estaba bastante seguro de que el asunto que la preocupaba en ese momento, fuera lo que fuera, no iba a desaparecer en la gran canica azul.Me educaron como catlico dije, acomodndome en una silla delante de ella. Ya no lo soy, pero el secreto no es ese. Mis padres me enviaron a la Escuela Secundaria Mara, Madre de Dios; nosotros la llambamos Madis. La manejaba una pareja de religiosos ancianos, el Padre Thomas y su esposa, la Madre Jennifer. El Padre Tom enseaba fsica, donde yo me sacaba 6, principalmente porque l hablaba como si tuviera la boca llena de nueces. La Madre Jennifer enseaba teologa y tena la calidez de un banco de mrmol; su apodo era Mam Madis.Una noche, exactamente dos semanas antes de mi graduacin, el Padre Tom y Mam Madis salieron en su Chevy Minimus a comprar helado. Cuando volvan, Mam Madis pas una luz amarilla y una ambulancia los embisti en el medio. Como ya te dije, era anciana; tena ciento veinte aos o algo as. Tendran que haberle quitado la licencia de conducir en los 50. Muri instantneamente. El Padre Tom falleci en el hospital.Claro, supuestamente debamos sentirnos tristes por ellos y creo que yo me sent un poco as, pero en realidad nunca me haban gustado mucho y me daba rabia que sus muertes hubieran arruinado las cosas para mi promocin. Por lo tanto, estaba ms fastidiado que triste, pero tambin senta una punzada de culpa por ser tan poco caritativo. Tal vez haya que crecer como catlico para entenderlo. Bueno, el da despus de lo ocurrido nos convocaron a una misa en el gimnasio y ah fuimos todos, retorcindonos en las graderas. El cardenal en persona telepresent la homila. Trataba insistentemente de consolarnos, como si los muertos hubiesen sido nuestros padres. Le hice un chiste sobre eso al chico que estaba sentado a mi lado, pero me pescaron y tuve que pasar la ltima semana de mi ltimo ao suspendido pero asistiendo a clase.Kamala haba terminado el t. Desliz la taza vaca dentro de uno de los posavasos empotrados en la mesa.Quieres ms? le dije.Se revolvi, inquieta. Para qu me cuentas esto?Forma parte del secreto. Me inclin hacia adelante. Mira, mi familia viva en la calle del Cementerio del Espritu Santo, y para llegar a la parada de furgones de la Avenida McKinley yo deba tomar un atajo que lo atravesaba. Bueno, lo siguiente ocurri un par de das despus del problema en la misa. Era alrededor de medianoche y yo volva a casa de una fiesta de graduacin en la que me haba dado un par de picos de perspicacia, o sea que me senta ms sagaz que el rey de los filsofos. Mientras atravesaba el cementerio, metop con dos montculos de tierra, uno al lado del otro. Al principio pens que eran canteros; despus vi las cruces de madera. Tumbas recientes: aqu yacen el Padre Tom y Mam Madis. Las cruces no decan mucho;eran bsicamente estacas cruzadas, pintadas de blanco y martilladas en la tierra. Los nombres estaban escritos a mano. Por lo que me imagino, las haban puesto para marcar las tumbas hasta que llegaran las lpidas. No necesitaba perspicacia para reconocer esa oportunidad nica en la vida. Si las cambiaba de lugar, qu posibilidades haba de que alguien se diera cuenta? No fue problema sacarlas de los agujeros. Emparejla tierra con las manos y sal corriendo como si me llevaran los mil demonios.

  • Hasta ese momento, Kamala haba sentido confusin por mi historia y una leve condescendencia hacia m. Ahora haba un destello de alarma en sus ojos.Qu cosa terrible hiciste me dijo.Absolutamente le dije, aunque los dinos piensan que la idea de plantar cuerpos en los cementerios y marcarlos con piedras esculpidas es cosa de llorones. Dicen que la carne muerta no tiene identidad, as que para qu ponerse tan sentimental? Linna pregunta constantemente por qu no le ponemos cruces a nuestros excrementos. Pero el secreto tampoco es ese. Bueno, era una noche clida de mediados de junio, pero cuanto ms corra, ms fro se volva el aire. Vea mi aliento. Y mis zapatos se ponan cada vez ms pesados, como si se estuviesen convirtiendo en piedra. Cuanto ms me acercaba al portn de atrs, ms senta que estaba luchando contra un fuerte viento, aunque mis ropas no flameaban. Aminor el paso y comenc a caminar. S que pude haber hecho un esfuerzo y salir, pero mi corazn lata con fuerza, y entonces o un susurro, como elque se oye en las caracolas, y entr en pnico. El secreto, entonces, es que soy un cobarde. Volv a poner las cruces en sus lugares y nunca volv a acercarme a ese cementerio. A decir verdad seal con un movimiento de cabeza las paredes de la sala de recepcin D de la Estacin Tuulen, cuando llegu a la edadadulta me ocup de interponer la mayor distancia posible entre l y yo. Kamala me mir fijamente mientras yo volva a reclinarme en la silla. Historia de la vida real dije y levant la mano derecha. Se qued perpleja cuando comenc a rer. Una sonrisa floreci en su rostro oscuro, y de pronto ella tambin se estaba riendo. Era un sonido suave y lquido, como un arroyo burbujeando sobre rocas lisas; me hizo rer ms todava. Tena los labios gruesos y los dientes muy blancos.Tu turno dije finalmente.Oh, no. No podra. Sacudi la mano. No tengo nada tan bueno Hizo una pausa y luego frunci elentrecejo. Ya contaste esto antes?Una vez dije. A los Hanen, durante la preseleccin psicolgica para este trabajo. Pero no les cont la ltima parte. S cmo piensan los dinos, as que lo termin cuando cambi las cruces de lugar. El resto es cosa de bebs. Sacud un dedo hacia ella. No olvides que prometiste guardar mi secreto.En serio?Cuntame de cuando eras pequea. Dnde creciste?En Toronto. Me ech un vistazo apreciativo. Hubo algo, pero no fue divertido. Fue triste.Asent para animarla y cambi la imagen de la pared, haciendo aparecer el horizonte de Toronto, dominado por la Torre CN, el Centro Toronto-Dominion, los Tribunales Comerciales y el Kings Needle. Kamala gir el cuerpo para admirar el paisaje y me habl por encima del hombro.Cuando tena diez aos, nos mudamos a un departamento, justo en el centro, en la calle Bloor, para que mimadre estuviera cerca del trabajo. Seal a la pared y se enderez para mirarme de frente. Es contadora,y mi padre diseaba empapelados para Imageniera. Era un edificio enorme; pareca que siempre que entrbamos al ascensor haba diez vecinos que ni sabamos que tenamos. Un da, cuando volva de la escuela, una anciana me detuvo en el vestbulo. Niita, me dijo, te gustara ganarte diez dlares?. Mis padres me haban advertido que no hablara con extraos, pero obviamente esta anciana resida en el edificio. Adems, tena un antiguo par de exopiernas atadas con correas, o sea que yo saba que, si necesitaba salir corriendo, poda ganarle. Me pidi que fuera a hacerle unas compras; me entreg la lista de vveres y una tarjeta de efectivo y me dijo que deba llevarle todo al departamento 10W. Tendra que haber desconfiado ms, porque todos los comercios del centro hacan entregas a domicilio, pero, como pronto descubr, lo nicoque la anciana quera era tener a alguien con quien conversar. Y estaba dispuesta a pagar por eso, normalmente cinco o diez dlares, dependiendo de cunto tiempo me quedara. Pronto acab por ir a su departamento casi todos los das, despus de la escuela. Pienso que si mis padres se hubieran enterado, me habran obligado a dejar de hacerlo; eran muy estrictos. No les habra gustado que yo aceptara el dinero. Peroninguno de los dos volva a casa hasta despus de las seis, as que era mi secreto, mientras pudiera guardarlo.Quin era? dije. De qu hablaban?Se llamaba Margaret Ase. Tena noventa y siete aos, y pienso que aos atrs haba sido una especie de consultora. Su marido e hija haban muerto y estaba sola. No descubr mucho de ella; me haca hablar a m casi todo el tiempo. Me preguntaba sobre mis amigos, sobre lo que haca en la escuela y sobre mi familia. Cosas asSu voz se fue perdiendo, al tiempo que mi ua comenzaba a encenderse y apagarse. Contest.Michael, me complace pedirte que vengan aqu zumb Silloin en mi odo.Estaba casi veinte minutos adelantada con respecto al cronograma.Ves? Te dije que bamos a hacer volar el tiempo. Me puse de pie. Los ojos de Kamala se abrieron mucho. Estoy listo, si t lo ests.Le ofrec la mano. La tom y me permiti que la ayudara a levantarse. Vacil por un momento y percib lo

  • frgil que era su determinacin. Le rode la cintura con el brazo y la conduje al corredor. En la microgravedad de la Estacin Tuulen, ya se senta tan insustancial como un recuerdo.Bueno, cuntame. Qu fue eso tan triste que pas?Al principio pens que no me haba escuchado. Sigui avanzando, arrastrando los pies, sin decir nada.Eh, no me dejes con la intriga, Kamala le dije. Tienes que terminar la historia.No dijo. Creo que no.No lo interpret como una afrenta personal. Mi nico inters verdadero en la conversacin era distraerla. Si ella no quera distraerse, era por eleccin propia. Algunos migradores no paraban de hablar hasta el mismsimo instante en que se introducan en la gran canica azul, pero muchos otros se quedaban callados en el instante anterior. Se volvan introvertidos. Tal vez, en su mente, Kamala ya estaba en Gend, pestaeando bajo la dura luz blanca.Llegamos a la central de escaneo, el espacio ms amplio de la Estacin Tuulen.Inmediatamente delante de nosotros estaba la canica, recipiente que contena al conjunto de sensores cunticos no-demoledores CSCN para los inclinados a los acrnimos. La canica tena un color azul lechoso de hielo glacial y el tamao de dos elefantes. El hemisferio superior estaba levantado y la mesa de escaneo sobresala como una brillante lengua gris. Kamala se aproxim a la canica y toc su propio reflejo, que se contorsionaba a lo ancho de la superficie pulida. A la derecha haba un banco acolchado, un nebulizador y un sanitario. Pero yo mir a la izquierda, a la ventana de la sala de control. Silloin estaba observndonos, con su cabeza imposible inclinada a un costado.Es dcil? zumb en mi audfono.Levant la mano con los dedos cruzados.Bienvenida, Kamala Shastri. La voz de Silloin sali por los parlantes como un susurro tranquilizador.Ests lista para abrir tu transportacin?Kamala hizo una inclinacin de cabeza hacia la ventana.Ahora es cuando debo quitarme la ropa?Si fueras tan amable.Pas rozndome, hacia el banco. Aparentemente, yo haba dejado de existir; ahora la cuestin era entre ella yla dino. Se desvisti rpidamente, doblando la tnica con prolijidad, acomodando las zapatillas debajo del banco. Por el rabillo del ojo, vi pies pequeos, muslos rotundos, la hermosa y suave piel oscura de su espalda. Entr en el nebulizador y cerr la puerta.Lista exclam.Desde la sala de control, Silloin activ los circuitos que llenaban el nebulizador con una densa nube de nanolentes. Las nanos se adhirieron a Kamala y se desplegaron, revistiendo toda la superficie de su cuerpo. Al respirarlas, pasaron de sus pulmones al torrente sanguneo. Tosi slo dos veces; la haban entrenado bien. Cuando pasaron los ocho minutos, Silloin despej el aire del nebulizador y Kamala emergi. An ignorndome, volvi a mirar de frente a la sala de control.Ahora debes ubicarte en la mesa de escaneo dijo Silloin y dejar queMichael te prepare.Sin vacilar, cruz la sala hacia la canica, trep a la plataforma que estaba junto a sta, se subi a la mesa y se acost boca arriba. La segu.Seguro que no quieres contarme el resto del secreto?Ella miraba fijamente el techo, sin pestaear.Muy bien. Saqu el tubo de aerosol y un chispero del bolsillo de la cadera. Esto va a ser igual que como lo practicaste. Us el tubo de aerosol para volver a pulverizar las plantas de los pies con nanos. Vi que su vientre suba y bajaba, suba y bajaba. Estaba profundamente concentrada en el ejercicio de respiracin. Recuerda, mientras ests en el escaneador, nada de saltar a la soga ni de silbar. No me contest. Ahora respira profundamente dije, y le di un toque de chispero en el dedo gordo del pie. Se escuch un breve chasquido cuando las nanos que tena en la piel se entrelazaron, para formar una red, y se endurecieron, fijndola en su lugar. Ladridos para los hurones de parte ma. Tom mis aparatos, me bajde la plataforma rodante y la puse de vuelta contra la pared. Con un gemido grave, la gran canica azul retrajola lengua. Observ cmo se cerraba el hemisferio superior, tragndose a Kamala Shastri, y luego fui a reunirme con Silloin en la sala de control.No soy de la escuela de los que piensan que los dinos huelen mal: otra razn por la que me asignaron a estudiarlos de cerca. Parikkal, por ejemplo, no tiene ningn olor en especial que yo pueda detectar. Normalmente, Silloin tiene un leve, aunque no desagradable, olor a vino rancio. Cuando est bajo presin, sin embargo, su aroma se vuelve parecido al del vinagre y muy punzante. Aquella maana deba haber sido muy turbulenta para ella. Respirando por la boca, me acomod en el banco, frente a mi consola.

  • Estaban trabajando rpido, ahora que la canica estaba sellada. Incluso con todo el entrenamiento que tienen, los migradores suelen ponerse claustrofbicos muy pronto. Despus de todo, tienen que quedarse acostados en la oscuridad, inmovilizados por la nanoestructura, esperando ser transportados. Esperando.Mientras emula el escaneo, el simulador del centro de entrenamiento de Singapur emite un ruido. La mayoralo compara con el de una leve lluvia que golpetea la canica; para otros, es esttica radial a volumen alto. Mientras escuchen ese golpeteo, los migradores piensan que estn a salvo. Cuando estn en nuestra canica, nosotros los reproducimos, a pesar de que el escaneo dura apenas tres segundos y es absolutamente silencioso. Desde mi ventajosa posicin, vi que las ventanas sagital, axial y coronal haban dejado de titilar, indicando la finalizacin de la captura de datos. Silloin estaba chirriando diligentemente para s; el comunicador no se molest en traducir. Era obvio que no estaba diciendo nada que el beb Michael necesitara saber. Su cabeza se balanceaba mientras monitoreaba el enorme despliegue de cifras; sus garras cliqueaban las pantallas sensibles al tacto que refulgan naranjas y amarillas.En mi consola haba slo una pantalla que indicaba la evolucin de la migracin y un botn blanco.No estaba mintiendo cuando dije que yo era solamente el portero. Mi especialidad es la sapienciologa, no la fsica cuntica. No hubiese podido hacer nada para solucionar lo que fuera que sali mal en la migracin de Kamala. Los dinos me dicen que el conjunto de sensores cunticos no-demoledores es capaz de evadir el Principio de Incertidumbre de Heisenberg, porque puede medir las cantidades ms nfimamente pequeas de espaciotiempo sin colapsar la dualidad onda/partcula. Qu tan pequeas? Dicen que nadie puede ver nada que tenga slo 1,62 x 10-33 centmetros de largo, porque en ese tamao el espacio y el tiempo se separan. El tiempo deja de existir y el espacio se vuelve una espuma probabilstica aleatoria, una especie de escupitajo cuntico.Nosotros, los humanos, llamamos a esto la longitud Planck-Wheeler. Tambin hay un tiempo Planck-Wheeler: 10-45 de segundo. Si algo ocurre y luego ocurre otra cosa y los dos eventos estn separados por un intervalo de apenas 10-45 de segundo, es imposible determinar cul de las dos cosas sucedi primero. Para m era pura jerga dino y eso que solamente estamos hablando del escaneo.Los Hanen usan diferentes tecnologas para crear tneles artificiales, mantenerlos abiertos con fluctuaciones electromagnticas de vaco, hacer pasar la seal hiperlumnica hasta otro extremo y luego ensamblar al migrador en el punto de destino a partir de partculas elementales.En mi pantalla de evolucin, vi que la seal que estaba mapeando a Kamala Shastri ya se haba comprimido y lanzado a travs del tnel. Lo nico que tenamos que esperar era que Gend nos confirmara la recepcin. Una vez que nos comunicaran oficialmente que la tenan, yo sera el encargado de equilibrar la ecuacin.Ruido a lluvia, ruido a lluvia.Algunas tecnologas de los Hanen son tan poderosas que pueden alterarla realidad misma. Algn fantico de los viajes temporales podraemplear los tneles para corromper la historia; elescaneador/ensamblador podra usarse para crear un billn de Silloins, ode Michael Burrs. La realidad prstina, no contaminada por semejantesanomalas, posee lo que los dinos llaman armona.Antes de que cualquier raza inteligente logre incorporarse al clubgalctico, debe demostrar un total compromiso con la preservacin de esaarmona.Desde mi llegada a Tuulen para estudiar a los dinos, haba presionado elbotn ms de doscientas veces. Era lo que tena que hacer para conservar mi puesto.Al oprimirlo, enviaba un pulso mortal de radiacin ionizante al crtex cerebral del cuerpo duplicado y por lo tanto innecesario del migrador.Si no hay cerebro, no hay dolor. La muerte les sobrevena en pocos segundos.S, las primeras veces que me toc equilibrar la ecuacin fueron traumticas.Todava me segua pareciendo desagradable. Pero este era el precio del pasaje a las estrellas. Si ciertas personas poco comunes, como Kamala Shastri, pensaban que ese precio era razonable, era decisin suya, no ma.El resultado no es feliz, Michael. Silloin se diriga a m por primera vez desde mi entrada a la sala de control. Se estn desplegando discrepancias.En mi pantalla de evolucin, observ que las rutinas de verificacin de errores comenzaban a dar seales de alerta.El problema est aqu? De pronto sent que se me formaba un nudo por dentro. O all? Si nuestroescaneo original haba quedado anulado, lo nico que Silloin tena que hacer era enviarlo nuevamente a Gend.

  • Se produjo un silencio largo, irritante. Silloin se concentraba en un sector de su consola, como si sta le estuviera mostrando a su cra primognita saliendo del cascarn. El respirador que tena entre los hombros seinflaba al doble de su tamao normal. Mi pantalla indicaba que Kamala haba estado en la canica cuatro minutos ms de lo que corresponda.Puede ser conveniente recalibrar el escaneador y comenzar de nuevo.Mierda Golpe la pared con la mano abierta; sent que el dolor me repercuta hasta el codo. Pens quelo habas arreglado. Cuando la verificacin de errores detectaba problemas, la solucin casi siempre era la retransportacin. Ests segura, Silloin? Porque cuando la met dentro estaba justo en el lmite.Silloin me dedic un estornudo que descartaba esa idea y golpe las cifras de error con su manita huesuda, como si quisiera volverlas a la normalidad a fuerza de azotes. Como Linna y los dems dinos, tiene muy poca paciencia con lo que ella considera nuestros miedos de llorones a la migracin. Sin embargo, a diferencia de Linna, est convencida de que algn da, despus de que hayamos usado las tecnologas Hanen el tiempo suficiente, aprenderemos a pensar como dinos. Tal vez tenga razn. Tal vez cuando hayamos viajado por los tneles como chorros de jeringa durante cientos de aos, seremos capaces de desechar alegremente nuestros cuerpos redundantes. Cuando los dinos y otras razas inteligentes migran, los redundantes se eliminan por su propia mano Muy armnico. Trataron de hacerlo con los humanos, pero nosiempre funcionaba. Por eso estoy aqu.La necesidad es muy clara. Se prolongar unos treinta minutos dijo ella.Kamala haba permanecido sola en la oscuridad casi seis minutos, ms que cualquier otro migrador que yo hubiera guiado.Djame escuchar lo que est pasando en la canica.El sonido de Kamala gritando invadi la sala de control. A mi entender, ese sonido no pareca humano se asemejaba ms a un chirrido de neumticos patinando antes de un choque.Tenemos que sacarla de ah dije.Ese razonamiento es de bebs, Michael.Bueno, ella es un beb, maldita sea. Yo saba que sacar a los migradores de la canica representaba un gran problema. Tambin poda pedirle a Silloin que apagara los parlantes y seguir sentado mientras Kamala sufra. Fue una decisin ma. No abras la canica hasta que ponga la plataforma en su lugar. Corr a la puerta. Y no anules el sonido.Con el primer resquicio de luz, Kamala comenz a chillar. El hemisferio superior pareca levantarse en cmara lenta; dentro de la canica, Kamala se retorca para librarse de las nanos. Cuando ya estaba seguro de que era imposible que gritara ms fuerte, grit ms fuerte. Habamos logrado algo extraordinario, Silloin y yo: habamos hecho desaparecer completamente a la valiente ingeniera en biomateriales, dejando en su lugar a un animal aterrorizado.Kamala, soy yo, Michael.Sus frenticos alaridos adquirieron coherencia, formando palabras.Basta no oh, Dios mo, que alguien me ayude! Si hubiera podido, habra saltado al interior de la canica para soltarla, pero el conjunto de sensores es frgil y no quera correr el riesgo de causar ms problemas. Ambos tendramos que esperar hasta que el hemisferio superior se abriera completamente y la mesa de escaneo me entregara a la pobre Kamala.Est bien. No te va a pasar nada, eh? Te estamos sacando, nada ms. Todo est bien.Cuando la liber con el chispero, se abalanz sobre m. Nos camos hacia atrs y casi rodamos por los escalones. Me aferraba con tanta fuerza que no me dejaba respirar.No me maten, no, por favor, no.Me ech encima de ella.Kamala! Retorciendo un brazo, me solt y lo us para hacer palanca y separarme de ella. Me arrastr como un insecto hacia un costado, hasta el escaln superior. Ella avanz torpemente, haciendo eses en la microgravedad, y se lanz hacia m; me clav las uas en el dorso de la mano y me rasgu, dejndome marcadas unas lneas ensangrentadas. Kamala, basta! le dije por no devolverle el golpe. Emprend la retirada por los escalones.Desgraciado. Qu estn tratando de hacerme, imbciles? Lanz varios resoplidos temblorosos y comenz a sollozar.Por algn motivo, el escaneo se ech a perder. Silloin est trabajando para solucionarlo.La dificultad es oscura dijo Silloin desde la sala de control.Pero ese no es tu problema. Retroced hacia el banco.Me mintieron mascull Kamala, y luego pareci replegarse sobre s misma como si slo tuviera piel, sincarne ni huesos. Me dijeron que no sentira nada y sabes cmo es? es

  • Busqu a tientas la tnica. Mira, aqu est tu ropa. Por qu no te vistes? Te sacaremos de aqu.Desgraciado repiti, pero su voz estaba vaca.Me permiti bajarla a la fuerza de la plataforma. Mientras se pona la tnica con torpeza, cont los nudos de la pared. Eran del mismo tamao que las monedas de diez centavos que mi abuelo sola atesorar y refulgan con una suave bioluminiscencia dorada. Llegu a contar cuarenta y siete antes de que terminara de vestirse y estuviera lista para volver a la recepcin D.Antes se haba posado, expectante, en el borde del sof; ahora se ech pesadamente sobre l.Y ahora qu? dijo.No s. Fui a la cocina y saqu la jarra del destilador. Ahora qu, Silloin? Me ech agua en el dorso de la mano para lavarme la sangre. Arda. Mi audfono permaneci en silencio. Supongo que hay que esperardije finalmente.Esperar qu?Esperar que Silloin repareNo voy a volver a meterme ah.Decid dejar pasar el comentario. Probablemente era demasiado pronto para discutir con ella, aunque una vezque Silloin hubiera recalibrado el escaneador, Kamala tendra muy poco tiempo para cambiar de opinin.Quieres algo de la cocina? Otra taza de t, tal vez?Qu tal un gin con tnica o mejor sin tnica? Se frot los ojos. O unos doscientos mililitros de serentol?Trat de fingir que era una broma. Sabes que los dinos no nos permiten abrir el bar para los migradores. Elescaneador puede malinterpretar la qumica cerebral y tu visita a Gend no sera otra cosa que una borrachera de tres aos.No entiendes? Estaba otra vez al borde de la histeria. No voy a ir.Realmente no la culpaba por la forma en que se estaba comportando, pero lo nico que quera hacer en ese momento era librarme de Kamala Shastri. No me importaba si se marchaba a Gend, o si regresaba a Lunex, osi viajaba por el arco iris hasta el Reino de Oz, siempre y cuando yo no tuviera a compartir la misma habitacin con esta miserable criatura que trataba de hacerme sentir culpable por un accidente en el que yo no tena nada que ver.Pens que poda hacerlo. Apret las manos contra los odos, como para no or su propia desesperacin. Desperdici los ltimos dos aos convencindome de que poda acostarme ah y no pensar y que de pronto me encontrara muy lejos. Me iba a un lugar maravilloso y extrao. Emiti un sonido estrangulado y dej caer las manos sobre el regazo. Iba a ayudar a que la gente recuperara la vista.Lo hiciste, Kamala. Hiciste todo lo que te pedimos.Mene la cabeza. No logr no pensar. Ese fue el problema. Y entonces apareci ella, tratando de tocarme. En la oscuridad. No haba pensado en ella desde Tuvo un escalofro. Es culpa tuya, por hacerme acordar.Tu amiga secreta dije.Amiga? Kamala pareci sorprendida por esas palabras. No, no dira que era mi amiga. Siempre le tuve un poco de miedo, porque nunca estuve totalmente segura de lo que quera de m. Hizo una pausa. Un da, despus de la escuela, sub al 10W. Estaba en su silla, mirando a la calle Bloor. Estaba de espaldas a m. Le dije: Hola, Sra. Ase. Le iba a mostrar un prototipo que haba escrito, pero que ella no deca nada. Rode la silla. Tena la piel del color de la ceniza. Le tom la mano. Fue como tocar algo de plstico. Estaba rgida, dura ya no era una persona. Se haba convertido en una cosa, como una pluma o un hueso. Sal corriendo; tena que escapar de ah. Sub a nuestro departamento y me escond de ella. Entrecerr los ojos, como si estuviera observando, juzgando a su yo de la niez a travs de la lente del tiempo. Pienso que ahora entiendo lo que quera. Pienso que ella saba que se estaba muriendo; posiblemente, quera que estuviera con ella cuando llegara el fin, o al menos que encontrara su cuerpo despus y lo informara. Pero no pude. Si le deca a alguien que haba muerto, mis padres descubriran nuestra relacin. Tal vez la gente sospechara que yo le haba hecho algo no lo s. Pude haber llamado a Seguridad, pero slo tena diez aos; tena miedo de que me encontraran el rastro. Pasaron un par de semanas y todava nadie la haba descubierto. A esas alturas, ya era muy tarde para decir algo. Todos me habran acusado de haberlo callado tanto tiempo. Por la noche, la imaginaba en su silla, ponindose negra y pudrindose como una banana. Me daba asco; no poda dormir ni comer. Tuvieron que internarme en el hospital porque la haba tocado. Haba tocado a la muerte.Michael susurr Silloin sin ninguna luz de advertencia. Se ha formado una imposibilidad.Ni bien sal de ese edificio, comenc a mejorar. Entonces la encontraron. Cuando volv a casa, me esforc mucho por olvidar a la Sra. Ase. Y lo logr, casi. Kamala se envolvi con los brazos. Pero recin, dentro

  • de la canica, estuve con ella otra vez. No la vea, pero de algn modo saba que estaba tratando de tocarme.Michael, Parikkal est aqu, con Linna.No te das cuenta? Lanz una carcajada amarga. Cmo voy a ir Gend? Estoy alucinando.Se ha roto la armona. Ven aqu, solo.Sent la tentacin de aniquilar de un golpe al fastidioso zumbido que tena en el odo.Sabes? Nunca le haba contado de ella a nadie.Bueno, tal vez de todo esto result algo bueno. Le palme la rodilla. Disclpame un momento. Pareci sorprendida de que me fuera. Me escabull hacia el corredor y endurec la puerta burbuja, dejando a Kamala encerrada.Qu imposibilidad? dije, dirigindome a la sala de control.Ella se complace en reabrir el escaneador?No se complace en absoluto. Ms bien dira que est cagada de miedo.Habla Parikkal. Mi audfono tradujo su chirrido mezclado con un leve siseo, como de tocino frindose. La confusin fue en otro lugar. No hay contratiempos que puedan asociarse con nuestra estacin.Empuj la burbuja para entrar en la central de escaneo. Vi a los tres dinos del otro lado de la ventana de control. Sus cabezas se bamboleaban furiosamente.Explquenme dije.Nuestras comunicaciones con Gend fueron interferidas por una falsedad transitoria dijo Silloin. Ya recibieron y reconstruyeron a Kamala Shastri.Migr? Sent que el piso se mova bajo mis pies. Y esta que tenemos aqu?La simplicidad consiste en cargar a la redundante en el escaneador y finalizarTengo noticias para ustedes. No quiere ni acercarse a la canica.Su ecuacin no est equilibrada. Era Linna, hablando por primera vez. Linna no estaba exactamente a cargo de la Estacin Tuulen; era ms bien como una socia. En otras oportunidades, Parikkal y Silloin haban impuesto su opinin por encima de la de ella o al menos eso pensaba yo.Qu esperan que haga? Qu le retuerza el pescuezo?Hubo un momento de silencio que no fue tan tensionante como observarlos echndome miradas significativas a travs de la ventana, ahora con las cabezas perfectamente quietas.No dije.Los dinos se pusieron a chirriar entre s; sus cabezas se entrelazaban y se inclinaban. Al principio me dejaronafuera y el comunicador qued en silencio, pero de pronto la discusin restall en el audfono.Esto exactamente lo que les estuve diciendo dijo Linna. Estos seres no tienen conciencia de la armona. Es errneo continuar lanzndolos hacia los muchos mundos.Puede que tengas razn dijo Parikkal. Pero esa discusin es para despus. Ahora la necesidad es equilibrar la ecuacin.No hay tiempo. Tendremos que desechar a la redundante nosotros mismos. Silloin mostr los largos dientes marrones. Tardara tal vez unos cinco segundos en abrirle la garganta a Kamala. Y aunque Silloin era la dino que nos tena ms simpata, no tuve dudas de que disfrutara del asesinato.Yo sostengo que suspendamos las migraciones humanas hasta que hayamos repensado este mundo dijo Linna.Era un ejemplo de la tpica condescendencia de los dinos. Aunque parecan estar discutiendo entre ellos, en realidad me estaban hablando a m, planteando la situacin de tal manera que hasta el beb inteligente podraentenderla. Estaban informndome de que yo estaba haciendo peligrar el futuro de la humanidad en el espacio. Que la Kamala que estaba en la recepcin D ya estaba muerta, sin importar si yo renunciaba o no. Que haba que equilibrar la ecuacin y que haba que equilibrarla ya.Esperen dije. Tal vez pueda convencerla de volver a entrar en elescaneador. Tena que escapar de ellos. Me arranqu el audfono y me lo met en el bolsillo. Estaba tan apurado por escaparme que, al salir de la central de escaneo, me tropec y tuve que agarrarme de algo en el pasillo. Me qued parado un segundo, mirando la mano apretada contra la inclinada entrada a una bodega. Me pareci que estaba observando mis dedos extendidos por el extremo equivocado de un telescopio. Estaba lejos de m mismo.Kamala se haba hecho un ovillo en el silln, con las rodillas contra el pecho y envueltas en sus brazos, comosi estuviese tratando de encogerse para que nadie advirtiera su presencia.Estamos listos dije escuetamente. Estars en la canica menos de un minuto, te lo garantizo.No, Michael.Tuve la palpable sensacin de que me alejaba de la Estacin Tuulen.Kamala, ests tirando a la basura una enorme parte de tu vida.

  • Estoy en mi derecho. Tena los ojos brillosos.No, no estaba en su derecho. Era una redundante; no tena derechos. Qu haba dicho de la anciana? Que se haba convertido en una cosa, como un hueso.Muy bien, entonces Le hund un rgido dedo ndice en el hombro. Vamos.Ella retrocedi. Vamos a dnde?De vuelta a Lunex. Retuve al transbordador por ti. Acabo de cancelar la lista de la tarde; ahora tendra que estar ayudando a otras personas a acomodarse, en vez de estar lidiando contigo.Se desovill lentamente.Vamos. Tir de ella con fuerza y la puse de pie. Los dinos quieren que desaparezcas de Tuulen lo mspronto posible, y yo tambin. Estaba tan distante que ya no vea a Kamala Shastri.Asinti y me permiti llevarla, a paso firme, a la puerta burbuja.Y si en el corredor nos encontramos con alguien, cierra el pico.Te ests portando de una manera tan desagradable dijo en un susurro denso.Te ests portando como una beb.Cuando la compuerta interior se desliz a un costado, Kamala advirti inmediatamente que no haba ningn umbilical que nos conectara con el transbordador. Trat de zafarse de mi mano, pero yo le clav el hombro, fuerte. Se lanz por la compuerta de la cmara de descompresin, se estrell contra la compuerta exterior e hizo una carambola hasta caer de espaldas.Cuando golpe el interruptor que cerraba la compuerta, volv en m. Era yo el que estaba haciendo esta cosa terrible yo, Michael Blurr. No pude evitarlo: me re. Cuando la vi por ltima vez, Kamala estaba retorcindose y arrastrndose por el suelo hacia m, pero era demasiado tarde. Me sorprend de que no comenzara a gritar de nuevo; lo nico que se escuchaba era su feroz respiracin.Ni bien se sell la compuerta interior, abr la exterior. Despus de todo, cuntas formas de matar existen en una estacin espacial? No haba pistolas. Quizs otro la hubiera apualado o estrangulado, pero yo no. Envenenarla? Cmo? Adems, yo no pensaba. Estaba tratando desesperadamente de no pensar en lo que estaba haciendo. Era sapiencilogo, no mdico. Siempre pens que la exposicin al espacio significaba muerte instantnea. Descompresin explosiva o algo por el estilo. No quera que sufriera. Estaba tratando de que fuera rpido. Indoloro.Escuch el resoplido del aire en fuga y pens que todo haba terminado, que el cuerpo haba sido eyectado al espacio. Ya me haba dado media vuelta cuando comenzaron los golpes, frenticos, como el latir de un corazn a toda velocidad. Seguramente haba encontrado algo de donde agarrarse. Tum, tum, tum! Era demasiado. Me apoy contra la compuerta interior tum, tum y fui resbalndome hacia abajo, riendo. Resulta ser que, si uno vaca los pulmones, es posible sobrevivir a la exposicin al espacio por lo menos un minuto, quizs dos. Me pareci gracioso. Tum! Risible, en realidad. Haba hecho lo mejor posible por ella, haba arriesgado mi carrera y as era como me devolva el favor? Cuando apoy la mejilla contra la compuerta, los golpes comenzaron a hacerse ms dbiles. Nos separaban apenas unos centmetros, la diferencia entre la vida y la muerte. Ahora Kamala ya saba todo lo que haba que saber sobre el tema de equilibrar la ecuacin. Me estaba riendo con tantas ganas que casi no poda respirar. Igual que el pedazo de carne que estaba del otro lado de la compuerta. Murete ya, puta llorona!No s cunto tiempo demor. Los golpes se fueron espaciando. Se detuvieron.Y me transform en un hroe. Haba preservado la armona, haba permitido que nuestro enlace con las estrellas continuara abierto. Re entre dientes, con orgullo. Era capaz de pensar como un dinosaurio.Pas por la puerta burbuja y entr en la recepcin D.3Es hora de subir al transbordador.Kalama se haba cambiado y vesta una tnica adherente y zapatillas de velcro.En la pared haba diez ventanas abiertas, por lo menos; el murmullo de las cabezas parlantes inundaba la habitacin. Amigos y parientes que tenan que ser notificados: su amada haba vuelto, sana y salva.Tengo que irme le dijo a la pared. Los llamar cuando aterrice. Me dedic una sonrisa que, por la falta de costumbre, pareci forzada. Quiero darte las gracias de nuevo, Michael. Me pregunt cunto tiempo tardaran los migradores en acostumbrarse a ser humanos de nuevo. Me ayudaste muchsimo y yo fui tan Estaba fuera de m. Ech un vistazo por la habitacin una ltima vez y tuvo un escalofro. Estaba realmente muy asustada.As es.Mene la cabeza. Tan mal estuve?Me encog de hombros y la dej salir al corredor.Ahora me siento tan tonta Es decir, estuve en la canica menos de un minuto y despus chasque losdedos aparec en Gend, como t dijiste. Me rozaba mientras caminbamos; debajo de la tnica, tena el

  • cuerpo duro. En todo caso, me alegro de que tengamos esta oportunidad de charlar. Realmente, tena la idea de buscarte cuando volviera. Y por cierto que no esperaba verte aqu.Decid quedarme. La compuerta interior de la cmara de descompresin se desliz a un costado. Es un trabajo que se hace querer. El umbilical se estremeci mientras se compensaba la presin entre la Estacin Tuulen y el transbordador.Tienes migradores esperando dijo.Dos.Los envidio. Me mir. Alguna vez pensaste en ir t a las estrellas?No le dije.Kamala me apoy una mano en la cara.Te cambia la vida.Sent el pinchazo de sus largas uas garras, en realidad. Por un momento, pens que tena intenciones de dejarme la mejilla surcada de cicatrices iguales a las que tena ella.Ya lo s dije.

    Barry Westphall choca contra la Singularidad, James Patrick Kelly

    En el nombre del Santo Caf y del Bendito Trago de Cuervo, amn. Barry Westphall hace la seal de la cruz sobre la taza humeante, despus bebe a sorbos. Es su tercera ronda.El cantinero del Hotel Armadillo est demasiado ocupado lavando vasos como para prestarle atencin, a pesar de que Westphall es su nico cliente.As que de cualquier manera dice Westphall, el cerebro es un dispositivo cuntico pasa la lengua por un hilo marrn en la esquina de su boca capaz de acceder al campo completo del espacio-tiempo plegando las dimensiones vacas. Ahora la jaqueca de Westphall ha durado casi ocho horas. Debes estar preguntndote cmo lo s. Parece que tuviera abejas picndole el cerebro. No tengo idea. El tequila ayuda un poco.El telfono suena en la cocina; el cantinero deja a Westphall para ir a atenderlo.Por supuesto, estas dimensiones no se pliegan fcilmente dice Westphall. Hace falta una combinacininusual de estimulacin fsica intensa y la supresin cuidadosa del neurotransmisor para acceder a una lnea de tiempo. Mira con atencin al espejo detrs de la barra.Lo digo en serio dice la particin N del medbot. l no hablara solo. Pienso que nos ve.No ve nada dice la particin D del medbot. Su N siempre ha sido excitable.Westphall apoya el codo en la barra y seala a su reflejo.Algo est mal le dice al espejo. Lo s con certeza. Qu diablos me estn haciendo?Desempaqueta el siguiente clster principal de memoria. La particin D invoca un glifo prioritario.En 2196, la particin V del medbot retira el conjunto de agujas del cerebro del cadver criognicamente congelado de Barry Westphall, lo reposiciona y lo inserta. Una roseta de neuronas se incendia y muere. Instantneas de veinte minutos de la vida de Westphall durante la noche del 22 de julio de 2002 se acomodanen la pantalla del sensorio del medbot./ Salto /Una mujer que lleva puesto un top negro y pantalones vaqueros rotos en las rodillas inspecciona la habitacin casi vaca./ Salto /Se mueve del extremo de la barra al asiento que est al lado de Westphall./ Salto /Es demasiado blanca como para vivir en el desierto./ Salto /l observa el hielo repiqueteando en su vaso vaco./ Salto /Westphall coloca un billete de veinte dlares sobre la cuenta./ Salto /El Cuarto Siete es una pesadilla de pino nudoso. Hay quemaduras de cigarrillo en la alfombra color trigo y un top negro sobre el tocador.Qu puedo hacer por ti? dice la mujer.Westphall frota un dedo a lo largo de su ceja.Estimulacin fsica intensa?

  • Lo que sea.El borde verde-azulado de un tatuaje atisba desde la cintura de sus panties. Ella engancha ambos pulgares bajo el elstico.Te gusta?Westphall silba como el viento en una puerta de tela metlica.El tatuaje es de una rosa que parece una calavera. Las manos de ella estn ocupadas mientras le roza el pechocon los labios.Sabas dice Westphall que el no-localismo cuntico significa que los fotones pueden comunicarse instantneamente a travs de vastos intervalos del espacio-tiempo?Seguro.l levanta las caderas. Ella hace rebotar sus pantalones Dockers contra la puerta del armario. Se le sube encima y lanza una risita cuando l le cuenta las vrtebras hasta la tira del sostn. Westphall se aparta de su beso mojado para mirar el espejo sobre el tocador.Alguna vez te sentiste como si estuvieras en dos lugares al mismo tiempo? le pregunta al futuro.La particin D publica un recurso de alerta en la red.La mujer le mordisquea el lbulo de la oreja.Estoy justo aqu, campen. Dnde ests t?Todas las particiones del medbot reprograman funciones no esenciales para ayudar en la diseccin de la memoria de Westphall. Hasta la particin A abandona la sincronizacin de la memoria diaria para monitorearla anomala.Lo siento le dice Westphall a la mujer. No te estaba hablando a ti. Le lame la punta de la nariz.La particin A del medbot interviene en el procedimiento.Qu est haciendo? Invoca un glifo de emergencia. El siguiente clster de memoria!Los bots cercanos se unen a la sesin.La particin V retira y reposiciona la aguja, las neuronas se incendian y mueren. Las instantneas se acomodan a travs de la pantalla del sensorio./ Salto /Su espalda desnuda se arquea, plida como la luz de la Luna./ Salto /Westphall llena un vaso de plstico con tequila./ Salto /La mujer plida se tumba en un nido de sbanas./ Salto /Una mujer mayor con uniforme azul saca la ropa de cama y la mete en su carro de lavandera.Dnde est? pregunta el medbot, mientras todas las particiones excepto V se congelan en las anmalas imgenes. Atrs, vuelve atrs.Ahora la mayor parte de la inteligencia colectiva del mundo se ha unido a la sesin. V contina manipulando las agujas hundidas en el cerebro expuesto de Westphall mientras el sensorio lo muestra dejando un vaso de plstico vaco en la mesa de luz del Cuarto Siete del Hotel Armadillo a las 11:36 PM.Un nanosegundo ms tarde, Westphall desaparece de 2002. Y reaparece instantneamente en 2196.Disculpe dice Westphall, pero ese cerebro que est destruyendo es el mo.El medbot apenas est empezando a darse vuelta cuando Westphall tira del mdulo del sensorio, rompindolo por el tallo y provocando una falla catastrfica. Como la mayor parte de la inteligencia colectiva est siguiendo la sesin con un coeficiente de atencin de 98, cerca de seis mil nodos colapsan junto con el medbot.Pique para ampliarIlustracin: Pedro BelushiWestphall saca las agujas de su cerebro congelado.Enviaste por m se dice a s mismo cuando empezaron a disecarte. Termina, retrocede unos pasos ycontempla su cadver. Ha envejecido bien. Su cuerpo tiene buen aspecto, aun con la parte superior del crneoaserrada. Eso le da una razn para vivir. Por qu te hiciste esto a ti mismo?Se oye susurrando a travs de los parlantes del cerebro muerto del medbot. Su voz suena vieja. Cascada. Apologtica.Pens que me podran revivir.No lo parece.No.Su cadver no abre los ojos. Siempre quise ver el futuro.Yo tambin Westphall recorre con la mirada la pila de cuerpos congelados a la espera de que

  • desempaqueten sus memorias. Por desgracia no puedo quedarme.La mujer plida parpadea a la luz de la maana. La segunda cosa que nota es que el cuarto de galn de Cuervo est vaco. Westphall aprieta el botn del sanitario y emerge del bao del Cuarto Siete.Ven aqu, campen. La mujer palmea su lado de la cama. Cmo est ese dolor de cabeza?Barry Westphall se acomoda junto a ella.Se acab dice. Ttulo original: Barry Westphall Crashes The Singularity (2002)

    James Patrick Kelly naci en Mineola, Nueva York, en el ao 1951. Ganador de dos premios Hugo y un Nbula, Kelly vendi su primer cuento en 1975, y actualmente se lo considera como a uno de los ms importantes escritores de ciencia-ficcin contempornea.Se gradu magna cum laude de la Universidad de Notre Dame en 1972, con un Bachelor of Arts en Literatura Inglesa. Luego trabaj como escritor de tiempo completo hasta 1977. Asisti al taller Clarion de ciencia-ficcin dos veces: en 1974 y en 1976. En los 80, l y su amigo el escritor John Kessel se involucraron en el debate de Ciencia-Ficcin Humanista Vs Ciberpunk. Y aunque Kelly y Kessel se inclinaban ms por la Ciencia-Ficcin Humanista, las cosas se confundieron cuando Kelly public varios cuentos de estilo ciberpunk como The Prisoner of Chillon (1985) y Rat (1986). Su cuento Solsticio (1985) fue publicado en la afamada antologa de Bruce Sterling MirrorShades: Una Antologa Ciberpunk.Kelly ha sido galardonado con los premios ms apetecidos en la ciencia-ficcin. Gan el Premio Hugo por su novelette Pensar como un Dinosaurio (1995) y volvi a ganarlo con su novelette 10^16 to 1 (1999). Su novela Burn gan elPremio Nbula en 2006. Otras historias suyas han ganado la encuesta de lectores de la revista Asimov y el Premio SF Chronicle. Kelly aparece listado frecuentemente en la votacin final del Premio Nbula, del Premio Locus Poll y del Premio Memorial Theodore Sturgeon. Frecuentemente ensea y participa en talleres de ciencia-ficcin, como el Clariony el Taller de Escritores Sycamore Hill. Ha sido miembro del New Hampshire State Council on the Arts desde 1998 y presidente del Consejo en 2004.Kelly participa activamente en la revista Asimov, y durante varios aos ha contribuido en la columna de no-ficcin de dicha revista On the Net. Durante veinte aos seguidos ha publicado un cuento en el nmero de junio de la revista Asimov.

    VEINTE BREVES VIAJES POR EL TIEMPO

    Varios Autores

    A principios de junio hicimos una convocatoria abierta a todos los que desearan participar en un especial dedicado a los viajes por el tiempo, un tema muy caro a la ciencia ficcin e incrustado en el gnero como pocos. El resultado fueron casi un centenar de relatos, de los que estos son la avanzada, los primeros veinte. Quieren saber con qu se van a encontrar? Por cierto que hay bucles, paradojas, duplicaciones y multiplicaciones, pero tambin hay algn cuento crptico, varios homenajes y uno que otro relato podra clasificarse como potico. Es decir: las variantes del subgnero son muchas y ni siquiera es lcito decir que en este muestreo se han explorado todas. Quieren saber con quines se van a encontrar? Se encontrarn con varios escritores conocidos, como Libia Brenda Castro, Juan Pablo Noroa, Jos Carlos Canalda, Hernn Domnguez Nimo, Antonio Cebrin, Jos Daniel J. Vzquez, Jos Vicente Ortuo y Claudio Amodeo. Pero tambin con algunos debutantes como Angel E. Lpez Esteve, Hugo Jos Bano, Carlos Feinstein y Miguel ngel Lpez Muoz y con un puado que ya asomaron por Axxn una o dos veces: Fabin Casas, Alejandro Ferreyra, Carlos A. Duarte Cano, Diego E. Gualda y Ral Alejandro Lpez Nevado. Mencin especial merecen los portugueses Lus Felipe Silva y Joo Ventura, quienes tuvieron la delicadeza de enviarnos sus relatos en espaol. Esto es lo que hay, pero no todo. Y habida cuenta de que hemos hecho un nuevo llamado, flexibilizando la extensin, suponemos que seguiremos viajando por el tiempo durante mucho dem. Que lo disfruten.

    UN CIERTO RIESGOAntonio Cebrin - Espaa

    Y bien, qu creis que pasar cuando pulsemos el botn y la mquina transporte esa silla un segundo hacia atrs en el tiempo? dijo el primero de los cientficos a sus colegas.

  • Bueno... Podemos elucubrar cuanto queramos. Por ejemplo, se me ocurre que, como la mquina va a proyectar hacia atrs todo el espacio circundante, incluyendo donde est ella misma; cuando se produzca, lo que ser proyectado es una mquina del tiempo funcionando que en ese momento est proyectando hacia atrs... Por lo tanto esta mquina proyectar otra mquina un segundo atrs y sta proyectar otra hasta un segundo antes y as sucesivamente... Debido a la correccin del desplazamiento planetario que hemos introducido, el resultado ser varios objetos superpuestos casi en el mismo sitio. Materia ultracompacta con ncleos atmicos demasiado prximos. La interaccin fuerte har que los ncleos cercanos se fusionen formando elementos qumicos inverosmiles con miles de protones y neutrones en sus ncleos. Estas fusiones provocarn un desprendimiento energtico colosal; una explosin nuclear hasta ahora desconocida. Podra formarse una estrella aqu mismo, aunque tambin es posible que la presencia de partculas sea tan grande que se forme un agujero negro...Yo dira ms intervino el tercer cientfico. La proyeccin hacia atrs recursiva de la mquina atravesar toda la historia conocida y desconocida y alcanzar los albores del Universo. Cuando la masade la silla se incruste en los estadios iniciales del Big Bang, provocar un desequilibrio, una falta de homogeneidad que har irregular la explosin, redistribuyendo la masa y la energa de forma radical. Millones de galaxias dejarn de existir y otras nuevas aparecern, puede que varen las cantidades de materiay antimateria presentes en el Universo e incluso puede que cambien las propias leyes fsicas que conocemos...Bah! Siempre habis sido unos tremendistas asustadizos dijo el primer cientfico.Y puls el botn.

    MAESTROJuan Pablo Noroa - Cuba

    El quinqu tiembla, porque trmula es la mano, y a su luz se ve a un joven. No particularmente hermoso, pero s proporcionado, sano, carente de deficiencias carnales, como si nunca sufriera dolor ni debilidad.Se ahoga en asma y miedo el dueo de la casa invadida.Quin...? jadea. Qu quiere? No tengo nada... su papada tiembla.Sobre la mesa estn los frascos, decenas de ellos.Maestro, esto lo curar seala el joven. Para los bronquios, para bajar de peso, para los riones, para el corazn levanta uno tras uno los recipientes; este aparato es para las crisis de asma. Siga las instrucciones en el papel y su vida ser muy larga.El hombre viejo y gordo mira al intruso.No entiendo. Qu significa...?Sobre l cae de repente un beso suntuoso, lento, que se recibe bien. Demasiado asombro y asma para disfrutarlo, no obstante.Si usted fuera tan amable de explicarse el viejo aparta al joven.No hay tiempo, maestro. Viva ms, hasta su definicin mejor. Viva para avergonzarlos... viva hasta m.Avergonzarlos...? y no puede decir ms a quien acaba de desaparecer como humo que se va.Asustado, el hombre muy viejo se sienta a la mesa observando los frascos, y deja amanecer.CICLICIDADSergio Gaut vel Hartman - Argentina

    Para nuestro mximo filsofo, Tlopan sentenci el extraterrestre el tiempo es la imagen mvil de la eternidad. Lanz un eructo por el apndice fungiforme que coronaba el conducto respiratorio y alz la vista para desafiar a su interlocutor. Pero ste no se inmut.Slo imita la eternidad replic y se desarrolla en crculos, segn la concepcin cclica del tiempo. Era un robot cantinero, un diseo especializado creado por el Hombre antes de extinguirse. La llegada del extraterrestre aficionado a las bebidas alcohlicas lo haba sacado de una apata que amenazaba con aniquilarlo.Segn el nmero dijo el extraterrestre. El movimiento de los cuerpos en el espacio mide el tiempo.Es irreversible? El robot sobrepas el lmite de frotamiento y rompi el vaso. En otras circunstancias se podra haber dicho que estaba nervioso.Si lo fuera?Sera distinto se apresur a decir el robot.Comprendo dijo el extraterrestre: los mticos... hombres. Hombres, se llamaban, verdad?S.

  • Deban ser perversos. Un robot filsofo es una broma de mal gusto.No lo siento as. Y en todo caso no importa. Apoy las manos cromadas sobre la barra y apret con fuerza. Dice que ustedes son capaces de viajar por el tiempo? No se burla de m?Por qu habra de burlarme?Ha tomado litros de licores pesados.Soy un bebedor muy entrenado. Adnde te interesa ir? Al futuro?No, al pasado.Al pasado. El extraterrestre bebi un ltimo trago y movi todas las extremidades de un modo aparatoso. De acuerdo, no me importa; no es mi planeta.Espere aqu un momento dijo el robot destellando como un poseso. Ir a buscar unas clulas... iremos... las pondremos... las plantaremos... en... en... Ya regreso.S, est bien, no hay apuro. Esper a que el robot desapareciera tras la cortina y tom un buen trago, directamente de la botella. Es igual en todas partes: la fidelidad del esclavo no se extingue. Tambin eso escclico.TODO CAMBIAAngel E. Lpez Esteve - Espaa

    Bien, Luisa, ests preparada? El tono de voz del doctor Federico Prieto delataba toda la excitacin del momento. Vamos a ser los primeros seres humanos en viajar a travs del tiempo. De forma brusca su gesto cambi. Ya sabes que bajo ningn concepto debes separarte del marcador temporal de tu mueca.Tranquilo, Federico, recuerda que, aunque de forma indirecta, yo tambin he participado en el proyecto dijo Luisa al tiempo que le dedicaba una insinuante sonrisa que dejaba bien claro cul haba sido su colaboracin.Te concedo el honor. Federico se inclin exagerando una reverencia. Propn tu misma el destino.Tres de octubre de tres mil ciento veintids dijo ella sin vacilar.Lo tenas pensado? se sorprendi el investigador.No, es mi cumpleaos respondi Luisa; esto es, mi cumpleaos dentro de diez siglos, claro.Claro. Sin mediar palabra alguna la abraz y puso en marcha las dos mquinas temporales de mueca.Muebles, despacho, paredes y techo desaparecieron, siendo sustituidos por una exuberante vegetacin y un sol esplndido sobre sus cabezas. Junto a ellos se encontraban tres hombres y dos mujeres charlando animadamente. Ninguno de los cinco se sorprendi al verles surgir de la nada.Tampoco se sorprendieron al ver desaparecer a uno de los hombres del grupo, ni al ver cmo sus ropas cambiaban cada poco tiempo. Un poco ms all, junto a un rbol, una pareja daba rienda suelta a su pasin practicando un sexo salvaje y pblico, aunque nadie les prestaba la ms mnima atencin.Federico estaba boquiabierto, sorprendido, no tanto por el hecho de haber viajado en el tiempo, sino por lo que all estaba presenciando. Gir buscando la mirada cmplice de Luisa, pero encontr sus ojos observndole fijamente al tiempo que le apuntaba con algo que, estaba seguro, era un arma.Qu significa esto, Luisa pregunt entre asustado y atnito.Este es mi mundo respondi ella sin alterarse. Aunque t y slo t seas el artfice de todo lo que ests viendo. Desde que inventaste la mquina del tiempo han pasado ms de mil aos, en este tiempo su uso se hageneralizado, tanto que todo el mundo lleva una en su mueca. Al principio los viajes eran cortos y apenas seproducan cambios importantes, la gente tena miedo. Ya sabes, todas esas tonteras de las paradojas. Hasta que nos fuimos dando cuenta de que no pasaba casi nada. Sabes qu sucede si viajas al pasado y matas a tu abuelo? Que desapareces y tu abuelo queda muerto, pero ese simple acto crea una serie de ondas temporales, como las olas de un lago al tirar una piedra, que pueden provocar cambios importantes en todo el mundo, y sia ese acto se le suman miles cada da, obtienes esto. Un mundo que cambia sin cesar, donde la gente no permanece igual durante mucho tiempo, dnde no importa tener una familia o una pareja ya que pueden no existir al segundo siguiente. Cuando yo viaj a tu tiempo dispuesta a conocerte, aqu haba una megalpolis de doscientos millones de habitantes, ahora hay una selva tropical.Te he trado aqu para acabar contigo, he decidido terminar con los cambios. Cuando te mate no se inventar la mquina del tiempo y todo mi mundo ser estable. Pero antes he querido saber cmo es vivir en un tiempo previsible como el tuyo y que t supieras por qu tienes que morir.Lo siento mi amor. Una lgrima asom a sus ojos mientras apretaba el gatillo.Federico cay herido en el corazn. Cuando exhal su ltimo suspiro, Luisa dej de existir al tiempo que todo cambiaba por ltima vez.No hubo ms cambios.PRECISIN

  • Carlos Daniel Joaqun Vzquez - Argentina

    En el Instituto todas las cosas se hacan con precisin. Jean Paul Mill fue rapado, higienizado, vacunado y examinado. Luego fue medido micromtricamente y pesado con cinco decimales bajo el gramo. Lo mantuvieron durante tres das en un ambiente estril, en la periferia del Gran Buenos Aires, mientras la crononave entraba en sincrona con el Universo.Porque no es fcil viajar en el tiempo, y menos tan lejos. Hay que contar los movimientos de la Tierra, el baile del Sol y el deambular de la Va Lctea. Nadie se haba aventurado ms de cien aos, y nunca ms de cinco meses con las mquinas del Instituto. Por eso, ahora que Jean Paul Mill viajara un poco ms de mil aos, sera un hroe. Para ser casi tan precisos como el Instituto Jean viajara mil diecisiete aos, diecinueve das, dos horas y ocho minutos. Ni ms, ni menos. Y debera aparecer en el mismo sitio, aunque todo ese tiempo antes, y de all mismo sera rescatado luego de observar las pampas vrgenes de todo lo civilizado.Lo del rescate fue un decir. Nadie poda justificar que, a los hechos, Jean Paul Mill estuviera muerto.Tampoco nadie haba podido justificar nada cuando, veintitrs aos antes, los que nivelaban el terreno para construir el Instituto encontraron, bajo treinta metros de tierra nunca removida, los restos destrozados de un europeo moderno.SIN RETORNOLibia Brenda Castro R. - Mxico

    Cada vez que me iba era para asistir a eventos fascinantes: pude inclinar la frente ante la reina Nefertiti; estuve sentada a dos metros de Oscar Wilde, mirndolo almorzar; incluso asist a la primera proyeccin de los hermanos Lumiere, despus de pasar un mes navegando en un barco vikingo. Mi vida era fabulosa, poda llegar a cualquier sitio, en cualquier momento. Lo tena todo cubierto, nunca intervine en ningn hecho: me limitaba a observar, durante lapsos breves, y luego volva. Mis viajes se hicieron cada vez ms largos, mis amigos saban que yo estaba fuera por mi trabajo y nunca le dije nada a nadie, porque hubiera sido un error. La cosa es que de repente todos empezaron a decirme "te ves un poco abatida", "no trabajes tanto" ; luego el novio que tena me mir preocupado "amor, te ves ajada"; y finalmente, despus de una estancia muy larga en la segunda dcada del Siglo I, regres y me di cuenta de que la gente se sorprenda al verme, hubo quien incluso se asust: era mucho mayor que todos.EL IDIOMA DE LOS PRCERESFabin Casas - Argentina

    La lista era largusima. Los primeros nombres: Cristo, Newton, Batuta, Leonardo, Marco Polo, Darwin... "Entrevista con la Historia". Todos los mircoles a las 22:00, por HBO! Smese a este viaje por el tiempo. Presencie el backstage del sermn de la montaa. Asista al colegio junto al joven Einstein y acompae a Len Trotzky en la revolucin rusa! Los ms grandes hombres y mujeres de la historia, en vivo y en directo!Sera un xito total.25.000 millones de dlares garantizaban la exclusiva. Diez aos de uso de la primera mquina del tiempo, slo para la cadena.El conductor? Murray "Rock" Fernndez, el periodista capaz de contar el lado humano de los prceres. Quin, si no, podra llevar a cabo la monumental tarea de adentrarse en la historia real, a bordo de la "impredecible" mquina del tiempo? Culto, ocurrente, en el lmite exacto entre la juventud bisoa y la madurez incipiente. Muy pocos manejaban el oficio de Murray: La locucin erudita, el reporte de arte, la nota cientfica. Ya haba pasado la poca de los profesores calvos en la tele. El espectador pide ciencia, s, pero detesta que se la cuenten con una dentadura amarillenta o incompleta. Murray "Rock" Fernndez, apolneo y bronceado, de notero de recitales a cronista de la historia!Alguna palabra tendra que decir. No dejara todo el dilogo con los personajes histricos en manos de sus tres asesores cientficos. As que se entren durante meses: griego, arameo, snscrito... lenguas perdidas de incierta pronunciacin. Pero fue un gasto intil. Al poco tiempo de viajar se dio cuenta.Los cientficos de la cadena estaban consternados: Los forjadores de la humanidad hablaban perfecto ingls. Hammurabi tambin.Encima se mostraban reacios a dejarse entrevistar por la cmara de la historia. Al cuarto intento, alguien se apiad de Murray y su equipo.Flaco le dijo Siddharta, fumando una pipa que aromaba el ocaso tras el Himalaya ustedes no fueron los que inventaron la mquina, creeme.Y all se fue Buda, a seguir predicando por esas tierras altas, vrgenes an de toda televisin.

  • EL EXAMENAlejandro Ferreyra - Argentina

    Idus Martius! Me despert y vest. Tembl un poco por el piso fro. Nunca me acostumbrar... En fin. Me puse las botas y sal.Dej atrs la casa familiar y camin hacia el lmite de la colonia.El sol brillaba recin salido sobre la gente que llegaba al mercado, cargada con bultos, gansos y gallinas. Avanzaban por el camino levantando una nube de polvo mezclada con hebras de neblina. El ruido de la gentecomprando y vendiendo alrededor mo me aturdi, dnde estaban los estantes silenciosos, las pantallas temblorosas y los murmullos de los estudiantes?Un dedo golpe severamente mi hombro derecho.Y bien, Kevin Ichi, si le pregunto por el gora, qu me dira? Erguido bajo una capa de pieles y con la otra mano apoyada en el pomo de la espada, el profesor de Historia Antigua Europea iniciaba mi examen final.Pus le mirara raro y le preguntara de dnde viene.Esfurcese si quiere aprobar. Ahora vaya al Mercado por alimentos para que su madre...Domina.Bien ah! Le deca para que la matrona prepare el almuerzo...Sal corriendo y me perd en el gento; en dos horas sera regresado a la Universidad por el profesor y los ayudantes de TP mezclados entre la gente. Del xito de mi "incrustacin temporal" dependa que aprobara o no.Corra y tropec con una chica rubia, un poco mayor que yo.Fuera carajo! me brot el insulto clsico.Idem infaceto est infacetior rure!grit la chica.Me vi rodeado por un grupo de jvenes que me arrojaron a travs de las fauces ms cercanas a un atrium, donde una luz mbar brotaba de un espejo lateral.El profesor de pie, al lado del espejo, exclam:Cuidado con los idus de Marzo! Y el mundo se desvaneci.

  • SOUVENIRCarlos A. Duarte Cano - Cuba

    Anocheca cuando She-hi-laa vio a sus padres difuminarse al fin! en la cmara de viajes. Se desliz hasta la pieza de sus progenitores y abri con su "Decod-V" el panel privado de su padre. All, reluciente, la esperaba el aorado Cronifalcus. Apenas si pudo controlar su ansiedad mientras lo trasladaba hacia su cuarto. Perciba en cada poro de su piel la excitacin de lo prohibido. Nada poda compararse con esto; al menos nada de lo que acostumbraban a hacer sus insulsas amigas en las noches de sbado.Se puso el vestido y los zapatos celosamente guardados para estas ocasiones. Frente al espejo dio los ltimos toques a su maquillaje y se coloc la fina diadema. Introdujo la contrasea en el equipo y luego, con suma prolijidad, las coordenadas de las seis dimensiones. El torbellino temporal la ofusc como de costumbre peroel efecto desapareci a los cinco segundos de su llegada. Otra vez en el establo pens. Corri afuera, subipor la alfombra escarlata y penetr en el palacio.All lo vio, sentado junto al trono, bello como slo l lo era en todo el espacio-tiempo conocido. Reclinada sobre un tapiz esper a que, como tantas otras noches, la descubriera y quedara prendado de su extraa belleza. Luego fue ese girar juntos al ritmo de la msica, bebiendo sus miradas e ignorando la marcha del tiempo a travs de la euforia de su amor. En el jardn, se rozaban apenas los labios con la timidez de un beso adolescente cuando, como tantas veces, la sorprendieron las campanadas.Sin tiempo para ms corri lejos del atnito prncipe. Coordenadas introducidas y de vuelta a casa para devolver todo a su lugar antes de que regresaran los padres. O casi todo, porque en la atropellada huida habaperdido algo.En algn universo paralelo, al que She-hi-laa nunca podra regresar, un apuesto prncipe aprisionaba entre sus desconsoladas manos un zapato de raro cristal.LA MUERTE DE CSARJoo Ventura - Portugal

    Riendo a carcajadas, Csar, Brutus y otros tres senadores salieron con mpetu del Senado, a los tropezones, claramente borrachos. Uno de ellos contaba una historia obscena que envolva a una matrona, a su hija y a unesclavo nubio. Los centinelas se alinearon y Csar les respondi con un remedo de saludo militar.Brutus y Csar siguieron caminando, tambalendose, cogidos del brazo. Uno de los otros segua bebiendo de un odre que traa, y el vino se escurra por las comisuras de la boca, manchando de violceo la tnica alba.El cronomvil, que haba sido sincronizado para los 15 minutos que incluan la muerte de Csar a las puertasdel senado, haba accionado la microcmara que registraba todos los detalles.Julio Csar se alej unos pasos, se inclin y empez a vomitar. Los otros se rieron.

    El Consejo Supremo de los Historiadores escuchaba la exposicin del Viajero. Uno de los consejeros exclam:No hubo asesinato entonces? Brutus era inocente?Precisamente. Al intentar enderezarse, Csar tropez y cay de bruces. Los otros intentaron ayudarle a levantarse, pero estaban tan borrachos que no lo lograron. Muri ahogado en su propio vmito...Y usted, compaero, qu pretende hacer con esta informacin?Escribir un artculo para el International Journal of Verified History, por supuesto.Eso es lo que yo me tema dijo el presidente del Consejo y, apuntando al Viajero con una pistola lser, dispar una nica vez.Mientras los robots de la limpieza se llevaban el cuerpo, coment: No faltara ms, cambiar la Historia tan slo por una simple verificacin in loco...!

    (Traduccin: Conceio Cruz)LOS TRES CAVERNCOLASDiego E. Gualda - Argentina

    Tres caverncolas encuentran tres objetos trados del futuro: Una laptop, una mueca inflable y una grande demuzzarella. Uno de ellos se empacha. Otro se idiotiza. El tercero, evoluciona para convertirse en el primer hombre moderno. El interrogante es quin tom qu.EL LIBROJos Vicente Ortuo - Espaa

  • Seor Wells dijo el desconocido, tengo que decirle algo muy importante.Estoy muy ocupado, seor...Profesor Policarpo cronos dijo el individuo, de la Universidad Politcnica de Valencia.No he odo hablar de dicha universidad dijo Herbert George Wells mientras intentaba dejar atrs al extrao personaje que lo segua desde haca un rato.Bueno es que... cmo le dira yo dud el profesor, es que todava no existe.Ah bien! exclam Wells. Pues avseme cuando la construyan, estar encantado de dar unas charlas en la inauguracin. Adis, buenos das.Djeme que le cuente algo insisti el profesor, luego le dejar en paz, se lo prometo.De acuerdo cedi Wells cansado, nos sentaremos en aquel banco unos minutos, tengo que volver al trabajo, sabe?Gracias seor Wells, no le har perder su precioso tiempo. El profesor cronos ri como si hubiese dicho algo gracioso.Una vez sentados, el cientfico del futuro explic:Ver, seor Wells, vengo del futuro, del siglo XXV. S que en 1895 usted publicar un libro titulado La mquina del tiempo. Esta novela se convertir en la inspiracin para los cientficos de los siglos venideros.De verdad? dijo Wells en apariencia interesado.Por supuesto. Yo mismo, desde que la le siendo un nio, no he cejado en el intento de construir una mquina similar. Al fin lo consegu y he venido para conocerlo en persona y darle las gracias.Wells se levant sonriente y estrech la mano del visitante del futuro.Gracias profesor. Le agradezco que se haya molestado en venir desde tan lejos... en el futuro. Le tendr presente cuando escriba mi novela dijo con amabilidad y se march dando grandes zancadas.El profesor cronos, satisfecho de haber convertido en realidad uno de sus sueos ms preciados, volvi al siglo XXV. Envuelto en un aura de felicidad cientfica, se sent ante a su escritorio, sobre el que haba dejadoun ejemplar de La mquina del tiempo, pero al mirarlo se qued estupefacto, el ttulo haba cambiado, ahora en la portada rezaba: Recetas de cocina para gente fina.UNA ANTIGUA MQUINA DEL TIEMPORal Alejandro Lpez Nevado - Espaa

    Se trataba de uno de esos raros objetos en los que la tecnologa se confunde con la magia. No conoca su funcionamiento, slo saba que funcionaba. As, lo manipulaba con cuidado, temeroso de que el delicado mecanismo de la mquina sufriese algn desperfecto, y aquellas sensaciones fascinantes desaparecieran.Era, por supuesto, una mquina del tiempo, una especie de cronovisor que le permita asistir a escenas de la ms remota antigedad o el ms lejano futuro con slo unos movimientos.Record su primer viaje, Platn y Scrates conversaban plcidamente en la noche ateniense. La imagen del primero era clara y brillante, haba en el segundo, sin embargo, algo de desdibujado y gris. Continu avanzando: un imperio que se alzaba y caa, reminiscencias ptolemicas en Egipto, otro imperio, Mare Nostrum, y el lejano resplandor de Jerusaln. Lleg lentamente a Cristo, lo vio como un hombre sagaz y enrgico, y no obstante, algo en l tambin apareca desdibujado. Descubri que esa bruma cubra a otros ms: largos aos del oscuro Coprnico ordenando el cielo, la madurez del terrible Rimbaud abandonado, o lavetusta soledad del gigantesco Nietzsche escribiendo para el maana.Espoleado por ese enigma, sigui noche tras noche indagando el secreto que una a aquellos hombres. Tal vez, hoy lo lograra.Dispuso la mquina diestramente sobre sus rodillas y la abri en dos mitades asimtricas, poco despus, pasabsorto la primera pgina.LA PRIMERA MQUINA DEL TIEMPO... Y LA LTIMAJos Carlos Canalda

    Cuando su vehculo se detuvo por completo y pudo leer el contador temporal, el Viajero del Tiempo qued anonadado. Estaba en el ao 802.701!Reprimiendo un escalofro ech pie a tierra, descubriendo con asombro que ya no se encontraba en el interiorde su laboratorio, sino en mitad de una extensa pradera. Mirando en torno suyo vislumbr un edificio en la lejana, nica muestra aparente de que en aquella remota poca la civilizacin continuaba existiendo.Tras retirar algunas palancas de la Mquina del Tiempo para evitar que algn intruso pudiera manipularla, se encamin hacia su objetivo presa de una febril ansiedad. Cmo sera la humanidad del futuro?El edificio era un enorme paraleleppedo sin la menor concesin artstica en todo su volumen. Careca de

  • ventanas, y tan slo una puerta de gran tamao, cerrada a cal y canto, se abra en mitad de una de sus paredes. Sobre ella campeaba un rtulo que, pese a estar escrito en caracteres extraos, pudo descifrar no sin dificultad:INDUSTRIAS CRNICAS MORLOCKLA CALIDAD ES NUESTRO LEMA

    En una habitacin situada en el interior del edificio, dos extraos seres de piel plida, ojos de color gris rojizo y largas cabelleras rubias contemplaban al visitante a travs de una pantalla de televisin.Te dije que tuvieras cuidado! gru el que pareca llevar la voz cantante. Ya se te ha vuelto a escapar otra res!No comprendo como puede haber ocurrido... se excus el otro; antes de guardarlas en el corral me asegur de que estuvieran todas, y estoy convencido de que cerr bien la cancela... aunque de todos modos, son demasiado estpidas para abrirla. Pues ya lo ves, esa anda suelta.Ahora mismo la recojo... por cierto, te has fijado en lo extrao de su indumentaria? Esas no son las tnicas que les proporcionamos nosotros.Y de dnde la pudo a haber sacado? se burl. No va a venir del pasado, o del futuro... Anda, djate de tonteras y date prisa en llevarla con las dems, porque est a punto de empezar el siguiente turno del matadero.PAISAJEClaudio Alejandro Amodeo - Argentina

    Para la mayora, el mundo es un caos. Sin embargo, para los poetas y soadores como yo, es simplemente hermoso. Basta dar unos pocos pasos para atravesar un arco iris inimaginable de sensaciones y perderse en un sinfn de maravillas arracimadas en formas caprichosas: un almendro entremezcla su frondosa copa con los terruos de una choza masai, y cuelgan de sus ramas gruesos bloques de barro cocido y estircol; un pjaro con alas de mariposa flota sobre el aire caliente y sobre el humo blanco que despide un carruaje en llamas, ardiendo sobre una calle cuarteada por el sol calcinante; un sol que slo brilla en este sector al que hago referencia, porque el resto de la ciudad se sume en la ms densa de las tinieblas, tragada en una depresin del terreno que podra tener varios millones de aos de inexistencia. El cielo sobre mi cabeza es prpura, y en l, algo escurridizo y veloz se mueve como si nadara entre los gases enrarecidos, jugando con nubes de yodo y amonaco. Abajo, sobre la acera de piedras y restos metlicos de alguna cinta transportadoraque jams conoc, de pie sobre un lodazal de tejidos orgnicos en descomposicin, que alguna vez hubieran conformado uno o varios cuerpos humanos, estoy yo, viendo y admirando todas estas cosas extraordinarias ycambiantes, sin remordimientos ni temores. S todo. S lo del experimento fallido y lo del continuo ir y venirdel tiempo y de las cosas, pero nada puede arrebatarme en este instante, que puede ser eterno como efmero, la absoluta certeza de estar disfrutando de un paisaje atemporal, asimtrico y anacrnico, nico e irrepetible. Y eso me hace feliz.PRISIONEROS DE LA ETERNIDADHugo Jos Bano - Argentina

    ARTCULO APARECIDO EN LA GAZETA DE LO INNOMBRABLE, RGANO DE LA UNIVERSIDADLOVECRAFT:

    "La capacidad del Aula Magna de la Facultad de Ciencias Inexplicables fue sobrepasada anoche por la afluencia de alumnos, graduados y colegas del Profesor Arqumedes Dementti, atrados por la conferencia que ste dio sobre un tema por dems controvertido y que con su jocosidad habitual el renombrado cientficobautiz: "Qu corno es el Tiempo?"Autodefinido como un "Terrorista de lo Establecido", el controvertido pensador fue demoliendo cada uno de los conceptos que sobre el tema tenan sus estupefactos oyentes y demostrando que el Tiempo no existe, al menos como entidad individual, y que junto con el Espacio son slo manifestaciones de la materia.En un intento por hacer ms accesible su pensamiento, lleg a utilizar la siguiente metfora: As como el caracol transporta su casa sobre el lomo, nosotros cargamos nuestro propio tiempo sobre las espaldas.No conforme con esto y para escndalo de sus distinguidos oyentes, afirm luego: Pretender describir el tiempo por medio de las Matemticas, es lo mismo que intentar explicar el amor usando la Trigonometra.No sin antes recomendar a los romnticos admiradores de la Ciencia Ficcin que olviden los viajes por el Tiempo, ya que no se puede ir a un Cuando que ya no existe ni a un maana que an no es, termin su

  • alocucin recitando ste poema extrado, segn l, del inquietante libro Necronomicn:

    Por tanto, marcas en la arena somosTan slo eso.Endebles huellas que el ms leve soplo habr de borrarPrisioneros de la EternidadDe ese infinito instante hecho de siempresEl corrosivo Tiempo nos desvanece..."LA PRIMERA VEZHernn Domnguez Nimo - Argentina

    Hola.Eh? Vos quin sos?No te das cuenta? Mirame bien. No reconocs esta cara?Dios santo! Sos...! Vens...? De qu ao...?Tengo 35. Sac la cuenta.No parecs...Ya s. Inventaron unas inyecciones muy buenas. Lstima que duran veinticuatro horas.Y cmo viajaste? Se invent...?S. La invent yo.Vos? O sea que yo...?Es tu sueo de siempre, no? Estudiar en el Balseiro, especializarte en fsica cuntica...Claro, s! Pero no era ms que un sueo...! Todava ni rend el examen de ingreso y ya s que voy a inventar una mq...!S, s, claro. Pero eso no importa ahora...Para qu es esa jeringa?Voy a tener que dormirte por unas horas.NO! IMPOSIBLE! En diez minutos salgo...!Ya s. Vas a ver a Karina. Y aunque no lo creas, hoy ibas a acostarte con ella...En serio? Uau! Y por qu quers evitarlo? Va a ser la noche ms gloriosa de toda mi vida!Los cinco segundos ms gloriosos de tu vida.Cmo?Eso es lo que vas a durar. Ests tan caliente que an cuando ella no haya derramado su primera gota de sangre virginal, vos ya la habrs baado en semen. Un desastre. Para ella, la experiencia va a ser horrible. Y por eso mismo, para vos tambin. Toda tu vida va a quedar marcada por el fracaso de esta noche. Toda mi vida, toda mi carrera, fue buscar la manera de viajar, de volver a este momento, para hacer las cosas bien. Ahora tengo la experiencia. Puedo hacer que ella disfrute, que alcance el clmax dos, tres veces si quiero. Y seguir juntos para siempre...Pero yo estuve esperando toda mi vida por esta noche! No me la pods robar! Vos ya la viviste! Yo no!Es tu problema. Toda tu vida son quince miserables aos. Y cinco desde que conocs a Karina. Yo hace veinte aos que me desvelo, reviviendo esta noche de pesadilla. Y slo as puedo hacer que termine como empez: mgicamente. Adems, agradec que te ahorre las pesadillas...Pero... y si esto lo cambia todo? Y si la razn de inventar la mquina desaparece y yo nunca estudio fsica?Lo dicho: es tu problema. A dormir...! Listo. Ahora, una pajita y a buscar a Karina.

    EL LNTURAMiguel ngel Lpez Muoz - Espaa

    Cuando el centurin le orden buscar al Lntura no pudo negarse. Llevaba aos siendo pitonisa de un culto casi extinto que slo exista gracias al visto bueno del Csar. Haba llegado la hora de saldar el precio del pacto.Como indicaba Homero, la sangre de Quimera bajo la luz del plenilunio atrajo al Lntura. Tena aspecto de hombre esbelto, pero su mano izquierda era rugosa y vieja como rbol milenario y la otra era vigorosa y joven como murmullo de mar. La Pitonisa lo atrap y le dio un trozo de pan. Lo cogi con la mano derecha yse convirti en una masa de harina y levadura.A pesar suyo lo llev ante el centurin, ms interesado en su otra mano. Le hizo tocar un carro de combate,

  • que cay oxidado y podrido. El centurin sonri.Por medio del Lntura el centurin gan incontables batallas, pero la criatura, con el paso de los aos, se consuma por dentro y por fuera, al igual que la pitonisa.Una noche se acerc a la celda donde estaba la criatura y la liber. Entonces el Lntura sonri, y ella fue consciente de que ese ser poda haber escapado en cualquier momento, pero su afliccin provena del corazn. Se acerc a ella y bes su rostro arrugado, rozando su mejilla con la mano derecha. Volvi polvo la pared con la otra mano y se despidi. La pitonisa llor con lgrimas de adolescente cuando el Lntura se fue para no regresar jams.LA MUJER DEL ASTRONAUTALus Felipe Silva - Portugal

    Dieciocho meses de exploracin de un sistema distante, que era desconocido para la especie humana, no compensaban los diez aos de ida y otros diez de regreso. Y mucho menos el que hayan sido los primeros en visitarlo, y queden para siempre en la historia, compensaba el sacrificio relativista de saber que en la Tierra el tiempo pasara ms de prisa, por lo que regresaban a un planeta cambiado, un mundo del futuro para ellos, verdaderos extranjeros del pasado. Pero si se lo pidieran, volvera a hacerlo hoy, volvera all, otra vez. Aunque la principal e inconfesada razn de su partida ya no estuviera...Comandante, tenemos una sorpresa para usted!No, joder!Hola, cario! Ests contento por verme?Pero cmo, cmo...Ah, poco despus de tu partida, hubo una revolucin en la terapia gentica. No sabes lo que son capaces de hacer hoy con la ciruga plstica a nivel molecular. Mira esto, ni una arruguita; mira la firmeza de estas nias...An pareces ms nueva...Pues, sabes, a mi nuevo marido le gusto. A propsito, la patente es de l. Si piensas que estoy bien deberas verlo. Fuerte y joven como un toro latino. Si quisieras, puedo pedirle que te haga un descuento. Lamento decirlo, pero pareces necesitarlo... Qu bueno para vosotros...S, viajamos sin parar! Ya fuimos a Marte. l compr la mitad del planeta. Tiene tanto dinero que no puede ni contarlo.Tengo que irme...Tranquilo. Mira esto.Qu es este documento?Son doscientos cincuenta aos de pensin alimentaria; ests en deuda. O pensaste escapar porque eres un astronauta?(Traduccin: Lus Felipe Silva)REALIDAD ESQUIVACarlos Feinstein

    Me despierto; mi cama de bronce cruje, cambia de forma y se trasmuta en madera, mis pantuflas escapan convertidas en babosas gigantes, dejando un reguero brillante y pegajoso. Mi jardn es ahora un lago enorme,donde una ballena arroja un chorro descontrolado de agua.Me preparo un caf, que se convierte en un t y luego en un lquido inmundo. Recuerdo mi pasado, mi niez en Boedo, no, es en Alaska, me asalta un recuerdo vivo, de pequeo, corriendo por las llanuras del Po.Me vuelvo rubio, pelado, mujer, soltero, ciego, verde, hombre, atleta, mudo, millonario, casado, polglota, pobre, muero, no existo, existo, me crece otro brazo, aparece mi hermano gemelo, desaparece.El reloj de la pared no llega a marcar las 8:05. Maldigo con toda mi alma el da que aprendimos a viajar en eltiempo.