Upload
eh-bildu-bizkaia
View
226
Download
1
Embed Size (px)
DESCRIPTION
Â
Citation preview
POLÍTICAS SOCIALES
1. DIAGNÓSTICO DE LA SITUACIÓN
En este diagnóstico de Políticas Sociales no abordamos el conjunto de políticas
sociales, sino que se complementa con otros diagnósticos más específicos que
hemos realizado en torno a personas mayores, diversidad de cultura y origen,
vivienda, diversidad funcional,… Nos centraremos en dos ámbitos: pobreza y red de
servicios sociales.
1.1. EN BIZKAIA, CADA VEZ MÁS POBRES
Bizkaia no va bien, al menos las personas que vivimos en Bizkaia no vivimos bien.
Aunque oímos una y otra vez que estamos saliendo de la crisis, los problemas
socioeconómicos de la mayoría de la ciudadanía siguen existiendo. En el último
trimestre de 2014 disminuyó el paro, pero en enero de 2015, subió de nuevo,
dejando en evidencia que no estamos remontando la crisis.
BIZKAIA TOTAL TASA
Trimestres 4º - 13 4º - 14 Enero – 2015 4º - 14 Enero – 2015
Hombres 47.053 45.665 46.928 15.7%
Mujeres 46.902 47.153 49.719 18.4%
TOTAL 93.955 92.818 96.647 16,32% 17.0%
BIZKAIA < de 25 años de 25 a 44 años > de 44 años
Trimestres 4º - 13 4º - 14 Enero – 2015 4º - 13 4º - 14 Enero – 2015 4º - 13 4º - 14 Enero – 2015
Hombres 3.006 2.802 2.969 24.174 22.910 23.698 19.873 19.953 20.261
Mujeres 2.733 2.593 2.817 23.540 23.517 24.975 20.629 21.043 21.927
TOTAL 5.739 5.395 5.786 47.714 46.427 48.673 40.502 40.996 42.188
El último trimestre de 2014, entre las comarcas de la CAV, las tasas más altas de paro
se daban en Margen Izquierda (18,72%), Bilbo (18,68%) y Encartaciones (18,05%). En
ese trimestre, la tasa de paro en Bizkaia era de 16,32%, un punto mayor que la de la
de la CAV (15,33%).
La situación se agrava, porque no todas las personas paradas cobran el subsidio de
desempleo. En diciembre de 2014, 38.500 personas cobraban la prestación por
desempleo en Bizkaia. En ese mes, según los datos de LANBIDE, había 92.833
personas paradas. Es decir, el 58,5% de las personas paradas de Bizkaia no cobran
dicha prestación.
Y entre quienes tienen ingresos, éstos no siempre son suficientes como para
garantizar una vida digna. En Bizkaia, por ejemplo, las mujeres viudas cobran, en
promedio, 748 €. De cada 10 personas con empleo, 2 viven por debajo del umbral de
la pobreza y de cada 10 trabajadores o trabajadoras, 4 (con o sin empleo) son
pobres.
Según la Encuesta sobre Necesidades sociales realizada por el Gobierno Vasco en
2014, queda claro que la pobreza cada vez es mayor. Aunque se utilizan diferentes
índices para medir la pobreza, se suelen distinguir cuatro grandes categorías:
Pobreza de mantenimiento: vinculada a una situación de escasez de medios
económicos; en concreto, con no tener medios suficientes para satisfacer, de
manera regular, las necesidades básicas (especialmente, las vinculadas a los
gastos de alimentación, vivienda, ropa y calzado).
Pobreza de acumulación: situación de precariedad para conseguir bienes de
consumo necesarios para hacer frente a medio y largo plazo a un nivel de vida
suficiente, en especial, en relación a disponer de una vivienda adecuada y
bien abastecida, siempre cumpliendo una mínimas condiciones de
habitabilidad.
Pobreza real: cuando hay una evidente situación de riesgo de imposibilidad
de satisfacer las necesidades básicas y esa situación no se compensa en el
modo de vida cotidiano de la ciudadanía, no, al menos, de forma que pueda
acceder a un mínimo nivel de bienestar, fuera de la pobreza.
Ausencia de bienestar real: incluye cuestiones como la existencia de una
situación de falta de bienestar en las dimensiones tanto de mantenimiento
como de acumulación; algunas situaciones no incluidas en la categoría de
pobreza real relativas a la falta de bienestar de mantenimiento en personas
con pobreza acumulada.
En 2012, en Bizkaia se daban las peores niveles en las cuatro categorías; en 2014,
sigue en la peor posición en pobreza de acumulación, mientras que en las otras tres,
la pero posición corresponde a Araba. En Bizkaia, en las cuatro categorías ha
aumentado la pobreza.
Evolución de las situaciones de pobreza y de precariedad real por Territorio Histórico. 2008-2014
Población en viviendas familiares
Incidencia en %
Tipo de pobreza o precariedadÁlava Gipuzkoa Bizkaia Total
% % % %
Pob.Mantenimiento
2008 5,8 3,9 6,7 5,7
2012 7,3 6,3 7,9 7,3
2014 10,5 6,6 8,5 8,2
Pob.Acumulación
2008 1,8 0,4 2,1 1,5
2012 1,1 0,9 1,8 1,4
2014 1,5 1,5 2,5 2
Pobreza real
2008 4,1 2,5 5,2 4,2
2012 5,6 3,8 6,1 5,3
2014 8,2 4,2 6,4 5,9
Ausencia de bienestar real
2008 6,5 5,7 10,1 8,2
2012 9,7 8,2 11,3 10,1
2014 15,3 7,7 12,8 11,5
Fuente: EPDS 2008-2012 y EDSS-ENS 2014
Y analizando la situación por comarcas, Bilbo se sitúa en el primer lugar (mayor
pobreza) salvo en cuanto a pobreza real, donde pasa al segundo lugar, detrás de
Gasteiz. Y detrás de Bilbo y Gasteiz se encuentra la Margen Izquierda, salvo en
pobreza de acumulación, donde ocupa un desgraciado segundo puesto.
Evolución de las situaciones de pobreza y de precariedad real por comarca. 2008-2014
Población en viviendas familiares
Incidencia en %
Comarca
Pob.Mantenimiento Pob.Acumulación Pobreza real Ausencia de bienestar real
2008 2012 2014 2008 2012 2014 2008 2012 2014 2008 2012 2014
% % % % % % % % % % % %
Gasteiz 6,1 7,4 11,3 1,7 1,3 1,3 4,4 6,2 8,9 6,6 10,8 15,9
Ayala 4,3 6,4 5,6 2,1 0,1 2,4 2,3 2,2 4,4 6,2 3,5 11,3
Margen Derecha 5,3 5,5 5,2 0,2 0,7 0,5 3,0 5,1 3,3 5,7 9,1 7,3
Bilbao 10,1 10,6 11,4 2,3 2,3 3,5 7,6 9,5 8,4 13,8 13,6 15,9
Margen Izquierda 5,8 8,0 9,2 3,3 2,7 3,5 5,6 5,8 6,5 11,8 12,4 14,1
Bizkaia-Costa 3,2 6,9 6,3 1,3 1,1 0,7 2,0 2,9 5,9 5,2 6,0 11,7
Duranguesado 5,3 3,8 4,9 1,1 0,2 0,6 2,8 2,4 4,3 3,5 10,3 8,4
Donostialdea 4,7 6,9 7,0 0,4 0,8 1,6 3,1 4,1 4,0 6,6 8,7 7,7
Tolosa-Goierri 2,1 6,8 5,1 0,3 2,4 1,8 1,3 4,5 5,0 4,7 6,7 7,5
Alto Deba 1,2 2,5 4,8 0,9 0,1 0,2 0,4 2,0 4,1 1,9 8,4 8,5
Bajo Deba 3,4 4,9 8,4 0,0 0,2 0,6 1,8 2,2 3,8 4,9 6,9 6,7
Total 5,7 7,3 8,2 1,5 1,4 2,0 4,2 5,3 5,9 8,2 10,1 11,5
Fuente: EPDS 2008-2012 y EDSS-ENS 2014
Una de las conclusiones de la encuesta mencionada es la importancia del paro en situaciones de pobreza real. En general, en la Comunidad
Autónoma Vasca, el 43,1% de las familias que tienen algún miembro en paro vivían en pobreza real en 2008; en 2012, era el 65,6% y en
2014, el 72,8%. Según estos datos, en las familias, cada vez hay mayor relación entre pobreza y diferentes formas de paro.
En cuanto al tipo de familia, los mayores niveles de pobreza en las cuatro categorías se dan en familias monoparentales, siendo la cabeza de
familia una mujer menor de 45 años con ocupación no estable. Mientras que los menores niveles de pobreza se dan en hombres que viven
solos, menores de 45 años y con ocupación estable.
Evolución de las situaciones de pobreza y de precariedad real por tipo sociodemográfico del hogar o de su persona principal. 2008-2014
Población en viviendas familiares
Incidencia en %
Tipo de pobreza o precariedad
Pob. Mantenimiento Pob. Acumulación Pobreza real Ausencia de bienestar real
2008 2012 2014 2008 2012 2014 2008 2012 2014 2008 2012 2014
% % % % % % % % % % % %
Muj.Fam.monop.no oc.estable <45 años
47,1 60,7 58,3 24,4 12,8 11,5 60,7 63,8 50,3 82,8 79,8 77,6
Muj.Fam.monop.no oc.estable >= 45años
15,4 20,3 17,0 2,2 1,4 2,7 9,7 18,8 16,2 19,3 31,9 29,1
Muj.Fam.monop.oc.estable 6,7 3,7 7,9 3,7 1,0 2,0 6,9 2,7 7,2 12,6 11,0 13,7
Muj.sola.no oc.estable < 45 años 5,4 24,0 41,8 8,5 4,1 0,5 5,4 16,1 22,5 27,6 48,4 45,2
Muj.sola.no oc.estable >= 45 años 44,5 42,4 44,2 1,6 3,6 3,2 30,1 23,3 24,1 39,4 38,2 32,2
Muj.sola < 65 oc.estable 9,4 0,7 3,1 2,2 0,0 0,2 4,1 0,7 2,0 6,7 4,4 8,3
Hom.solo < 65 oc.estable 1,3 0,9 1,3 0,2 0,5 0,0 0,0 0,5 0,0 1,7 3,3 3,0
Hom.solo < 65 no oc. estable 35,5 29,6 37,6 6,7 2,3 2,8 24,1 22,6 20,7 29,0 35,5 34,9
Gr.fam.< 45 años no oc.estable 13,5 21,7 27,5 9,7 7,9 9,6 19,1 19,0 21,8 26,1 24,5 32,0
Gr.fam.>= 45 años no oc.estable 5,9 7,1 16,2 1,4 0,8 1,5 2,8 3,9 9,3 5,6 10,4 18,0
Gr.fam.< 45 años oc.estable 3,8 3,3 1,9 0,9 0,0 0,0 1,3 0,6 0,9 5,0 2,0 2,6
Gr.fam.>= 45 años oc.estable 1,2 0,9 1,6 0,2 0,1 0,3 0,8 0,6 0,4 3,2 2,1 3,5
Hombres > 65 años 2,8 3,4 1,4 0,9 1,6 1,0 1,1 1,0 0,8 3,3 4,4 4,3
Mujeres >65 años 4,1 5,8 3,5 2,2 2,6 1,0 2,4 3,1 1,6 8,0 11,7 8,1
Países no UE 35,0 38,6 47,6 4,5 3,7 18,7 34,5 37,3 47,2 51,1 59,6 67,2
Hombres Fam.monoparentales 14,6 25,0 5,2 0,0 5,1 3,6 7,4 18,2 2,8 10,8 21,3 15,1
Total 5,7 7,3 8,2 1,5 1,4 2,0 4,2 5,3 5,9 8,2 10,1 11,5
Fuente: EPDS 2008-2012 y EDSS-ENS 2014
Esta encuesta ha evidenciado también que las desigualdades son cada vez mayores.
Uno de los indicadores utilizados para analizar la situación de desigualdad es el
coeficiente de GINI que mide la concentración de la riqueza. En la CAV, hasta 2012, este
índice fue decreciendo: en 1996 era 28,0, en 2008, 25,2 y en 2012, 25,3. Pero entre
2012 y 2014 tomó la dirección contraria, creciendo en 2014 hasta 27,1, mostrando un
nivel de desigualdad similar al existente ene l año 2000.
Otro indicador de desigualdad es el cociente entre los ingresos del 20% más rico y los
ingresos del 20% más pobre (S80/S20). El comportamiento de este indicador ha sido
similar: al principio, este cociente decrece, en 1996 era 4,2 y en 2008, 3,6, mientras
que en 2012 crece un poco (3,7) y en 2014 se produce un crecimiento mayor, llegando
a 4,2, una cifra similar a la de los años 1996 y 2000.
Indicadores de desigualdad en la C.A. de Euskadi. 1996-2014
Coeficiente de Gini en %, Ratio S80/S20 y % de participación del 10% depersonas más pobres en los ingresos totales
Coeficiente deGini
Ratio S80/S20% ingresos del10% más pobre
1996 28,0 4,2 3,68
2000 27,3 4,1 3,55
2004 26,0 3,9 3,76
2008 25,2 3,6 3,88
2012 25,3 3,7 3,75
2014 27,1 4,2 3,41
Fuente: EPDS 1996-2012 y EDSS-ENS 2014
Los datos más preocupantes son los de la última columna: el porcentaje de ingresos
que corresponde al 10% de las personas más pobres. En el año 2000 eran el 3,55% y
en 2008, el 3,88%, es decir, se incrementó; pero en 2012, en cambio, este indicador
decreció al 3,75% y en 2014, al 3,41%, el peor valor desde 1996.
Finalmente, estos datos nos dejan una conclusión clara: mientras las personas pobres
son cada vez más pobres, las personas ricas son cada vez más ricas.
Otro tipo de análisis de los ingresos nos llevan a la misma conclusión: los ingresos
netos medios por persona entre el 50% más rico son mayores en 2014 que en 2008,
mientras que, entre el 50% más pobre, son claramente menores.
La disminución de los ingresos en el periodo 2008-2014 es mayor a medida que
bajamos en la escala de los ingresos. Así, mientras que en los deciles 4 y 5 se produce
una disminución del 1% al 2,6% (en la distribución del 30% al 50% de la población), en
el tercer decil la disminución es mayor (4,4%) y aún más en el segundo decil (8,2%). La
mayor disminución se da entre el 10% de las personas más pobres de la CAV, donde se
da una disminución del %13,4 desde 2008 al 2014.
Ingresos medios equivalentes per cápita por decilas de ingresos (ingresos mensuales netos corrientes)
Periodo 2008-2014
Decila de ingresos
Ingresos mensuales netos corrientes per cápita
2008 2012 2014 Evolución Evolución Evolución
Media Media Media 2008/2012 2012/2014 2008/2014
1. 10 más pobre (D1) 575 564 498 -2,0 -11,6 -13,4
10-20% (D2) 820 818 753 -0,2 -8,0 -8,2
20-30% (D3) 973 980 930 0,8 -5,1 -4,4
30-40% (D4) 1.137 1.147 1.108 0,9 -3,5 -2,6
40-50% (D5) 1.289 1.304 1.276 1,2 -2,2 -1,0
50-60% (D6) 1.438 1.474 1.441 2,5 -2,2 0,2
60-70% (D7) 1.607 1.650 1.631 2,7 -1,2 1,5
70-80% (D8) 1.813 1.882 1.857 3,8 -1,3 2,4
80-90% (D9) 2.094 2.191 2.187 4,7 -0,2 4,4
10 % más rico (D10) 2.999 2.943 3.032 -1,9 3,0 1,1
Total 1.475 1.495 1.471 1,4 -1,6 -0,3
Fuente: EPDS 2008-2012 y EDSS-ENS 2014
Personas sin hogar
Según la última encuesta realizada por el EUSTAT, en Bizkaia había más de 1.000
personas sin hogar, la mayoría hombres. El mayor albergue está en Bilbo y en él se
agrupan la mayoría (93%). En esta encuesta solo se contabilizan aquellas personas que
residen en albergues o pisos de acogida, no quienes viven en la calle. Y se estima que,
en Bilbo, hay al menos 140 personas que viven en la calle. En 2013, murieron 6
personas que vivían en la calle.
Personas sin hogar por país de nacionalidad según territorio histórico y municipio del centro, sexo yedad. 2012
Territorio del
centro Municipio del
centro Sexo Edad
C.A. de EuskadiAraba-Álava Bizkaia Gipuzkoa Bilbao
Donostia-San
Sebastián
Vitoria-Gasteiz
Hombres Mujeres
18-29
años
30-44año
s
45-64
años
65 ymásaños
País de nacionalidad
Total 2.090 328 1.139 623 1.057 393 328 1.701 389 724 679 639 48
- España 833 144 455 234 444 166 144 624 209 88 225 474 46
- Extranjero 1.256 183 684 389 613 227 183 1.076 180 635 454 165 2
Francia 5 . 2 3 2 . . 3 2 5 . . .
Portugal 18 11 3 3 3 3 11 17 1 2 7 9 .
Rumanía 28 9 13 6 11 . 9 20 8 3 12 13 .
Resto de Europa 51 13 12 26 12 18 13 29 22 3 40 8 .
Argelia 149 25 45 79 39 42 25 132 17 58 79 12 .
Congo 13 3 9 2 9 2 3 10 3 1 3 9 .
Marruecos 558 32 356 169 315 96 32 520 38 366 154 38 .
Resto de Africa 271 55 173 43 156 29 55 236 35 147 94 30 .
Bolivia 8 1 4 2 4 2 1 6 2 . 3 4 .
Brasil 9 . 4 4 2 1 . 3 6 3 3 2 .
Colombia 11 4 7 . 7 . 4 8 3 4 1 4 2
Resto de América 90 12 38 40 36 22 12 62 28 20 39 31 .
Otros países 46 17 17 12 17 12 17 30 16 23 17 5 .
Fuente: EUSTAT. Encuesta sobre las personas sin hogar
Ante esta situación, ¿qué hacen las Administraciones Públicas?
En la CAV existe la Renta de Garantía de Ingresos mínimos. En Bizkaia son 40.553
personas (16.628 hombres y 23.922 mujeres) las que cobran la RGI en enero de 2015.
En contra de la idea que se está difundiendo desde posiciones xenófobas, la mayoría
no son personas extranjeras, solo un tercio de quienes cobran la RGI son
extranjeros/as.
Pero la RGI no sirve para salir de la pobreza. Según la mencionada Encuesta de 2014
sobre Necesidades sociales, 71.092 personas (un 10,4% más que en 2012 y un 68,6%
más que en 2008) no han salido de la pobreza, aun recibiendo ayudas. En este
colectivo se encuentra el 3,3% de la población de la CAV, porcentaje que en 2012 era
del 3% y en 2008 del 2%.
Hay que tener en cuenta que, bajo el Gobierno de Patxi Lopez, se endurecieron las
condiciones para acceder a la RGI, ampliando el periodo de empadronamiento de 1
año a 3 años o exigiendo como condición imprescindible el estar inscrito en Lanbide
(en la práctica, un único día de baja en Lanbide supone la pérdida de la RGI). Y a eso
hay que añadir el mal funcionamiento de Lanbide que implica un largo espacio de
tiempo para conseguir la RGI o las decisiones erróneas de solicitar la devolución de
dinero. Hoy en día no es suficiente este sistema de protección social, no vale para
garantizar el derecho a una vida digna a todas las personas en riesgo o en situación de
pobreza.
La situación es aún más grave en el caso de las Ayudas de Emergencia Social en las que
el dinero lo pone el Gobierno Vasco y son gestionadas por los Ayuntamientos: no hay
presupuesto suficiente y en pocos meses se agota.
En Bizkaia, la Diputación Foral gestiona las Ayudas Especiales de Inclusión. En teoría,
estas ayudas están dirigidas a quienes no pueden acceder a la RGI, pero la Diputación
las ha desvirtuado por completo. Después de que el Gobierno vasco ampliase el tiempo
de empadronamiento de 1 a 3 años para poder acceder a la RGI, la Diputación de
Bizkaia amplió el tiempo de empadronamiento para poder acceder a las Ayudas
Especiales de Inclusión de 6 meses a 30 meses. Junto a esto, otro cambio fundamental
fue que, mientras antes se podía acceder a estas ayudas si no se cumplía alguna de las
condiciones para acceder a la RGI, tras la aprobación del Decreto Foral de 21 de
diciembre de 2011, solo se puede acceder a estas ayudas si no se tiene la edad
suficiente (23 años) para solicitar la RGI. Como consecuencia de esta decisión, estas
ayudas se han convertido en ayudas dirigidas, en exclusiva a jóvenes que han estado
bajo la tutela de la Diputación, dejando a miles de bizkaitarras sin ninguna ayuda.
(Datuak)
Mientras hay cada vez más necesidades, la Diputación Foral de Bizkaia endurece las
condiciones para acceder a las ayudas y disminuye el presupuesto:
La Diputación dice que no hay más peticiones, pero el problema está en el Decreto de
21 de diciembre de 2011 que ha endurecido las condiciones de acceso a esas ayudas.
Y los servicios para personas en situación o en riesgo de exclusión (albergues, centros
de día,…) están todos en manos del tercer sector. La Diputación no tiene ningún
servicio público en este ámbito. El Ayuntamiento de Bilbo tiene el albergue de
Elejabarri (71 plazas) y el de Uribitarte (83 camas), pero la Diputación, ninguno.
Además, la mayoría de servicios se concentran en Bilbo: en Deustu, Lagun Artean (32
plaza); en las siete calles, el centro Hontza para drogodependientes (19 camas),
gestionado por Caritas; otras 10 camas en la residencia Federico Ozanam y otras 25 en
la residencia de Caritas en Rekalde. Fuera de Bilbo, en Durango hay 40 plazas en el
albergue Etxepel gestionado por Caritas. En Barakaldo, el Ayuntamiento pone 26 camas
en el polideportivo de Lasesarre, de noviembre a marzo. ¿Para cúando un albergue
público permanente en la margen izquierda, por ejemplo?
Los comedores sociales también se concentran en Bilbo: Franciscanos de Irala,
Apotólicos del Corazón de Jesús, Conde Aresti o Siervas de Jesús. En total ofrecen 522
comidas. Fuera de Bilbo, únicamente, los comedores de las Hijas de la Caridad de
Getxo, San Jorge y San Juan de Santurtzi y el de Caritas de Barakaldo.
1.2. LA SITUACIÓN DE LOS SERVICIOS SOCIALES EN BIZKAIA
La propaganda que hace la Diputación Foral de Bizkaia dice que “la Diputación Foral de
Bizkaia dedica casi la mitad de su presupuesto a Acción Social”. Pero miente, no es
cierto que dediquen el 42,8% del presupuesto a Acción Social. Solo el 28% del
presupuesto que gestionan los Departamentos de la Diputación se dedica a Acción
Social. Es decir, de cada 10 euros, no llegan a 4 euros los que se dedican a Acción
Social. De hecho, para llegar al 48% habría que incrementar en 240 millones de euros el
presupuesto de Acción Social.
La Ley de Servicios Sociales de 2008 de la CAV está sin desarrollar y, en consecuencia,
se han creando desequilibrios entre provincias, dado que es cada Diputación la que,
mediante decretos, desarrolla sus servicios sociales. A su vez, no hay una clara
distribución de competencias y un servicio puede ser ofertado por diferentes
administraciones. Y, finalmente, están los desequilibrios financieros, dado que los
Ayuntamientos no tienen financiación para ofertar los servicios que le corresponden.
El pasado diciembre, el Gobierno Vasco, las tres Diputaciones Forales y EUDEL firmaron
un acuerdo en torno al mapa de servicios sociales. Tenemos que manifestar, en primer
lugar, que el acuerdo llega tarde 6 años más tarde que la Ley y, además, el acuerdo se
pondrá en marcha en 2017. Pero, además, el gran problema al que tenían que hacer
frente, que era acabar con los desequilibrios territoriales, sigue sin resolverse, no se
garantiza una oferta igualitaria en los diferentes territorios (el acuerdo solo plantea
que la cobertura será al menos del 80%). En lo que respecta a los ayuntamientos se
crea un fondo: en 2016, se dotarán 10 millones, y a partir de 2017, 20 millones cada
año, pero no es suficiente. La propuesta de Gipuzkoa era crear un fondo de 500
millones en 5 años.
De cara a acordar el Mapa de Servicios Sociales, las diferentes Diputaciones han tenido
que presentar sus datos, y ha quedado en evidencia que la situación de los servicios
sociales de Bizkaia no es tan buena como la presenta la Diputación, ni mucho menos. Si
comparamos los niveles de cobertura, en la mayoría de los casos, Bizkaia se sitúa en el
último lugar. Y eso, a pesar de que se han considerado como servicios sociales públicos
los que se ofertan mediante convenio.
Y los niveles de cobertura que se plantean alcanzar para 2017 dejan bien a las claras
que los actuales desequilibrios seguirán existiendo:
Cobertura 01/01/2012 01/01/2017PERSONAS MAYORES Araba Bizkaia Gipuzkoa Araba Bizkaia GipuzkoaCentros de día (> 65 años) 1,016% 0,571% 0,999% 1,016% 0,593% 1,006%Residencias (> 65 años) 2,519% 2,388% 3,123% 2,611% 2,430% 3,006%Servicios de respiro (> 65 años) 0,479% 0,014% 0,011% 0,479% 0,028% 0,020%Prestación económica paracuidados en el entorno familiar
7,989% 4,571% 7,287% 7,228% 4,650% 7,759%
Ayudas favorecedoras de laautonomía personal
0,430% 0,527% 0,757% 0,493% 0,536% 1,021%
DISCAPACIDAD Centros de día + centrosocupacionales para personas condiscapacidad
0,267% 0,311% 0,378% 0,342% 0,365% 0,508%
Centros de día para personas condiscapacidad (incluidosenfermos/as mentales)
0,069% 0,140% 0,187% 0,102% 0,169% 0,223%
Centros de día para enfermos/asmentales
0,007% 0,045% 0,045% 0,016% 0,055% 0,053%
Centros ocupacionales parapersonas con discapacidad(incluidos enfermos/as mentales)
0,198% 0,171% 0,191% 0,240% 0,196% 0,285%
Centros ocupacionales para enfermos/as mentales
0,009% 0,013% Sin dato 0,023% 0,014% Sin dato
Residencias para personas condiscapacidad
0,205% 0,176% 0,198% 0,270% 0,240% 0,271%
Residencias para enfermos/asmentales
0,072% 0,028% 0,032% 0,101% 0,048% 0,064%
Servicio específico de respiro parapersonas con discapacidad (incluyeenfermedad mental)
0,292% 0,003% 0,001% 0,360% 0,005% 0,003%
Servicio de tutela para personasadultas incapacitadas
0,064% 0,135% 0,130% 0,120% 0,223% 0,190%
Servicio de intervención social enatención temprana
0,834% 0,700% 0,370% 0,925% 2,213% 1,723%
Cobertura 01/01/2012 01/01/2017DESPROTECCIÓN Araba Bizkaia Gipuzkoa Araba Bizkaia GipuzkoaCentros residenciales parapersonas menores de edad
0,328% 0,377% 0,336% 0,349% 0,305% 0,256%
Centros residenciales para mujeres 0,02% 0,03% 0,01% 0,02% 0,04% 0,01%Servicios de intervenciónsocioeducativa y/o psicosocial confamilias
1,263% 0,355% 1,146% 1,297% 0,357% 1,228%
Servicios de atención socio-jurídicay psicosocial/ maltrato domésticoy/o agresiones sexuales
0,190% 0,148% 0,396% 0,208% 0,157% 0,792%
Servicio de promoción y apoyotécnico al acogimiento familiar
0,042% 0,015% 0,044% 0,046% 0,016% 0,061%
Servicio de promoción y apoyotécnico a la adopción
0,010% 0,010% Sin dato 0,010% 0,010% Sin dato
EXCLUSIÓN Centros de día para atendernecesidades de inclusión social
0,000% 0,066% 0%0 (154) 0,043% 0,074% 0,044%
Centro de acogida nocturna paraatender necesidades de inclusiónsocial
0,000% 0,002% 0,000% 0,002% 0,002% 0,003%
Centros residenciales parapersonas en situación de exclusióny marginación
0,022% 0,047% 0,096% 0,058% 0,058% 0,120%
Y estos niveles de cobertura se refieren al conjunto de Bizkaia, los desequilibrios son
mucho mayores entre comarcas.
En un informe realizado por la Diputación Foral de Bizkaia sobre residencias en 2013,
se daban estos datos: el nivel de cobertura de residencias públicas era de 2,25, mayor
que el nivel de cobertura de residencias privadas (1,98). Y entre ls públicas, la
cobertura de las dependientes de la Diputación era de 2,07, mientras que la cobertura
de las dependientes de los ayuntamientos era solo de 0,18. Analizando la situación por
comarcas, entre las de la Diputación, los niveles de cobertura más bajos se dan en Lea-
Artibai (1,57), Bilbo (1,58) y Barakaldon (1,59). Las mayores, en cambio, en Zona
minera (4,65), Nerviói (4,34) y Encartaziones (4,13).
Pero, además de un nivel de cobertura escaso, nuestra crítica se centra en el modelo
de servicios sociales. En la presentación de los Presupuestos de 2015, JL Bilbao dijo que
la prioridad ere “mantener los servicios sociales dependientes de la Diputación Foral de
Bizkaia y los servicios públicos.” Otra nueva mentira. La inmensa mayoría de los
servicios sociales de la Diputación Foral de Bizkaia no son públicos, están
subcontratados.
Si comparamos el dinero que recibe el IFAS con el que se paga por los servicios
ofertados por empresas externas, está claro a quién favorece la DFB: 1,2 millones más
en 2015 para el IFAS y 11,2 millones más para las empresas privadas.
En el caso de las personas mayores, es muy significativo analizar lo que pasa con las
plazas de residencias: las plazas del IFAS (las que son públicas) son 334; las conveniadas
con ayuntamientos son 532 y las concertadas con residencias privadas, 2.543. La
Diputación Foral de Bizkaia paga 81 € por cada plaza concertada a la empresa privada.
Y ahora, según las explicaciones dadas en los presupuestos, quieren subir a 2700 las
plazas concertadas. ¿Y cuándo se van a incrementar las públicas?
La Diputación dice que son “servicios de responsabilidad pública”, pero, a decir, verdad,
la Diputación no tiene un comportamiento muy responsable en relación a estos
servicios: les da el dinero y poco más. Realiza inspecciones ordinarias, sí, con aviso
previo, y además, la Diputación no ha actualizado las ratios establecidos en la Ley de
Servicios Sociales de 1998. En Bizkaia no hay un catálogo de servicios sociales, en el
que se establezcan las ratios que debe cumplir cada servicio, en función de los
diferentes grados de dependencia. En la situación actual, las inspecciones no son
efectivas de cara a garantizar la calidad del servicio.
Otro claro ejemplo de subcontratación lo encontramos en la evaluación de la
dependencia. Este servicio está subcontratado a la empresa Médicos Bizkaia y en los
presupuestos de 2015 esa partida ha tenido un incremento del 10%:
¿Por qué la Diputación no crea más puestos de trabajo públicos para realizar la
evaluación de la dependencia, como establece la propia Ley?
Entre las prestaciones que se plantean en la Ley de Dependencia, la Diputación Foral
de Bizkaia impulsa la Prestación para el Cuidado ene l Entorno Familiar (49,2 millones
de euroa) y no la prestación para Asistencia personal (350 mil euros). De esta forma, se
impulsa el binomio mujer = cuidadora, precisamente, porque, dentro de la familia, la
cuidadora será una mujer, o, con esa prestación, se pagará a una mujer extranjera (mal
y sin contrato) para que se haga cargo de la persona dependiente. En cambio,
mediante la Prestación para Asistencia personal se contrata a una persona externa y se
crea empleo. En Gipuzkoa, el presupuesto para 2015 de cara a la prestación para
asistencia personal es de 16,277 millones de euros.
Finalmente, hay que señalar la existencia de incompatibilidades entre prestaciones y
servicios que fijan cada una de las Diputaciones. La de Bizkaia, precisamente, es la que
impone las incompatibilidades más amplias de las tres provincias, dificultando el
acceso necesario a diversos servicios y/o prestaciones.
2. LO REALIZADO HASTA AHORA
1. Garantizar el derecho al cuidado:
Hemos exigido dar prioridad a la Prestación económica para Asistencia
personal.
Hemos criticado de manera continuada el impulso dado a la Prestación para el
Cuidado ene l Entorno Familiar.
Hacer compatibles prestaciones y servicios: no hemos conseguido todas las que
proponíamos, pero sí una parte ene l último Decreto de la PEAP.
Hemos criticado el Servicio de Inspección y Control, solicitando datos y
comparándolos con las exigencias de los diferentes Decretos. En el caso de
Menores de edad no se cumplen los requisitos.
Hemos trabajado por la mejora de las condiciones laborales del sector,
trabajando en colaboración con los sindicatos de cara a los nuevos pliegos de
condiciones de las plazas concertadas.
La lucha contra la subcontratación ha sido permanente, más allá del debate de
los pliegos.
Necesidad de definir el catálogo de servicios sociales.
2. Residencias, Centros de día y Centros de acogida:
Hemos denunciado la privatización de las residencias junto a trabajadores/as y
sindicatos, trabajando de manera conjunta.
Además, hemos puesto encima de la mesa el debate sobre las condiciones
laborales y nos hemos reunido con la Diputada de cara a desbloquear la
negociación sindical.
Hemos hecho una visita secreta de cara a observar in situ las condiciones de
trabajo del IFAS y valorar el servicio dado. Hemos obligado a la Diputación a
realizar cambios.
Menores de edad. Hemos conocido la realidad de estos centros por medio de
las y los trabajadores y sindicatos. No se cumplen los ratios y así se lo hemos
hecho saber a la Diputación.
Ratios/perfiles: Las ratios o no se cumplen (como ene l caso de menores), o, si
se cumplen, es necesario actualizar el descreo, porque no son suficientes. No se
cumplen los perfiles y las categorías profesionales, lo que hemos criticado
continuamente.
3. Medidas contra la exclusión
Denuncia de los recortes realizados: endurecer las condiciones para acceder a
lasayudas especiales a la inclusión es recortar. Hemos denunciado este recorte y
hemos propuesto, tras contrastarlo con diferentes agentes sociales, la
modificación del Decreto de 21 de diciembre de 2011.
Sin hogar
Hemos criticado duramente el Plan Foral de Vivienda, hemos solicitado que
las viviendas vacías se pongan a disposición de las personas desahuciadas, y
aunque así se aprobó, todavía son numerosas las viviendas del Plan que
siguen vacías.
Hemos exigido que la Diputación Foral de Bizkaia se comprometa a que no
haya más familias deshauciadas en Bizkaia, pero no hemos conseguido una
respuesta positiva.
3. BASES IDEOLÓGICAS
1. Crear un sistema de servicios sociales público y universal.
2. Garantizar los derechos sociales de todas las personas sin excepción.
3. Procurar a cada ciudadano y ciudadana los recursos suficientes para una existencia
digna.
4. Reconocer y dignificar el trabajo de cuidados.
5. Garantizar cuidados libremente elegidos y ejercidos.
6. Promover la plena integración de todas las personas combatiendo la exclusión
social y la desigualdad.
Los servicios sociales constituyen un pilar del Estado de Bienestar, y deben configurarse
como un derecho universal y subjetivo. Sin embargo, nos encontramos ante un sistema
de servicios sociales débil, incapaz de garantizar estos derechos; un sistema que
siempre ha estado infradotado financieramente, con una intensa privatización y un
fuerte desequilibrio territorial.
Ante esta realidad, debemos crear un modelo de responsabilidad pública directa que
dé cobertura a todos los derechos sociales de todas las personas sin excepción.
Garantizar el ejercicio efectivo de estos derechos implica, necesariamente, la
construcción de un Sistema Vasco de Servicios Sociales público, universal y común a
todos los territorios, concebido como columna vertebral del Estado de Bienestar.
Nuestro modelo debe adecuarse a los principios de igualdad, justicia social y
redistribución de la riqueza a sus políticas sociales.
El ámbito competencial de las políticas sociales afecta a una esfera parcial de los
cuidados, en concreto, a aquellos que son más especializados e intensivos. En este
marco, es innegable que la familia ocupa un lugar central en el sistema de cuidados en
Hego Euskal Herria y, dentro de las familias, son las mujeres quienes mayoritariamente
asumen estas tareas. Esta realidad no es fruto de una libre elección de las mujeres. La
imposición de una ética reaccionaria del cuidado se encuentra entre los principales
motivos, y a ello se suma la infl uencia que tienen las diferentes políticas públicas en la
configuración de un sistema más o menos familiarista. En la actual situación de crisis,
además, son los hogares, y dentro de estos, las mujeres, el colchón que está
absorbiendo el coste de los brutales recortes del gasto público en cuestiones claves
para el bienestar colectivo.
Frente a esta situación, demandamos unos cuidados dignos y de calidad. Para ello, es
imprescindible incidir en la necesidad de la percepción de salarios dignos en los
servicios sociales, el reconocimiento de los derechos laborales de las trabajadoras y la
visibilización de un sector social que ha sido relegado al olvido.
Al hablar de “dignidad” nos referimos también a que los cuidados dados y recibidos
sean sufi cientes en cantidad, y a que sean de calidad. Pero el acceso a unos cuidados
dignos para unos, no puede ser a costa de cuidados precarios para otras, sino que han
de tener una vocación universal. Es decir, los cuidados deben ser satisfactorios y
libremente elegidos. Que cada quien, tenga libertad para decidir cómo quiere cuidarse
o que le cuiden; o cómo, cuánto y a quién quiere cuidar.
La libertad real no puede desligarse de las condiciones materiales que garanticen su
ejercicio práctico. Quien no dispone de una base material sufi ciente para garantizarse
una existencia social autónoma tendrá que sobrevivir pidiendo permiso a terceras
personas y, por lo mismo, se verá en mayor o menor medida sometido a la voluntad de
éstas. Es por ello que todo el mundo debe tener acceso a una base material mínima
que garantice su derecho a la existencia y, por tanto, al ejercicio pleno y real de la
libertad.
Si bien la ausencia ingresos hace que una parte importante de nuestra población
malviva en la pobreza, conviene diferenciar esta situación de la exclusión social, que no
sólo tiene una dimensión monetaria. Empleo, vivienda, salud, educación, relaciones
personales, participación política y social, entre otros, son los ámbitos que defi nen la
inclusión de una persona en la sociedad. Por ese motivo, las acciones contra la
exclusión deben ser articuladas el marco de las políticas integrales de servicios sociales,
salud, vivienda, educación o empleo, así como desde otros ámbitos como el
urbanismo, el transporte o la cultura.
La inclusión puede ser normativizadora -es decir, puede requerir a la persona que
renuncie a su diferencia si quiere ser socialmente aceptada- o puede ser una inclusión
abierta a la pluralidad, lo que signifi ca una actitud activa en favor de la coexistencia de
identidades y modos de vida diferentes, que serán aceptables en tanto no atenten
contra las identidades y modos de vida de otras y otros. Nos situamos, por lo tanto, en
la perspectiva de articular relaciones entre diferentes y no en la de normativizar y
uniformizar el conjunto social.
4. MEDIDAS CONCRETAS
Sistema público y universal de Servicios Sociales
o Garantizar en los Presupuestos de Bizkaia la dotación económica suficiente para
los servicios sociales.
o Reforzar el carácter público del sistema de servicios sociales. Incrementar la
presencia de la Diputación de Bizkaia en la gestión directa y el control.
o Establecer límites a la entrada de la iniciativa privada en los servicios sociales de
Bizkaia.
o Mayor convergencia del sistema de servicios sociales para superar los
desequilibrios y desigualdades entre territorios, comarcas y municipios.
o Potenciar la participación social tanto en la elaboración, gestión y toma de
decisiones en la planificación, desarrollo y evaluación de políticas y acciones de
los servicios sociales de Bizkaia.
o Reducir progresivamente la aportación de la persona usuaria al suponer una
barrera de entrada al sistema:
1. Avanzar a través del incremento de los mínimos exentos y de la gratuidad
de las prestaciones sanitarias y asistenciales.
2. Priorizar la reducción de la aportación de la persona usuaria en aquellos
servicios que tienen una clara competencia por parte de la economía
sumergida.
o Actualizar las condiciones que deben cumplir tanto residencias como Centros
de Dia a nivel de incremento de ratios, tipo de servicios a ofrecer, ...
o Garantizar la provisión de los servicios previstos en las diferentes Carteras,
ampliándolas en su caso. Su provisión se desarrollará desde un punto de vista
descentralizado, comunitario y de proximidad.
o Incrementar las coberturas existentes existentes en Bizkaia para reducir las
listas de espera para el acceso a los servicios.
o Impulsar el espacio sociosanitario.
o Implicación activa en la promoción de convenios laborales sectoriales, en
especial, en aquellos ámbitos de los servicios sociales que carecen de ellos.
o Establecer medidas para que la diferencia salarial entre las trabajadoras del
sector público y concertado sea inferior al 20%.
Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de
dependencia
o Frente a los recortes del reino de España, desarrollar una política propia en el
ámbito de la dependencia.
o Extender a todos los grados de dependencia los derechos reconocidos en la Ley
de Dependencia.
o Ampliar en Bizkaia las compatibilidades entre prestaciones económicas y
servicios.
o Priorizar los servicios frente a las prestaciones económicas. Y entre las
prestaciones económicas, dar prioridad a la Pretación para Asistencia Personal,
frente a la Pretsación para Cuidados en el entorno familiar.
o Incidir en las condiciones de contratación de trabajadores y trabajadoras para la
Asistencia personal, para garantizar los derechos laborales de trabajadores y
trabajadoras.
o Financiar el convenio especial de cuidadores no profesionales de personas
dependientes.
o Analizar la configuración de los sistemas de cuidado de corta duración, con el
objetivo de fortalecer el descanso. Impulsar los servicios de residencia
temporal.
o Tener en cuenta la prescripción de los servicios sociales de base, en especial en
situaciones de vulnerabilidad.
o Analizar y adecuar el modelo de reconocimiento de la dependencia, para poder
dejarlo en manos de los Servicios Sociales de Base.
o Incorporar en la formación de las cuidadoras informales contenidos sobre el
autocuidado y la negociación intrahogar para el reparto de los cuidados desde
una perspectiva empoderante.
o Desarrollar programas de promoción de la autonomía y prevención de la
dependencia.
o Fortalecer el Servicio de Ayuda a Domicilio mediante la asignación de nuevas
funciones, el incremento de la intensidad del servicio y la disminución del
precio público y los niveles de aportación de la persona usuaria.
Protección a la infancia y a la adolescencia
o Impulsar los programas de intervención familiar en situación de desprotección.
o Analizar el actual modelo de residencias de acogida: Programas, estrategias
educativas, perfiles profesionales, ratios,...
o Evitar situaciones de exclusión social que pueden presentarse al llegar a la
mayoría de edad, mediante el fortalecimiento de los medios de emancipación.
o Impulsar el acogimiento familiar:
- Desarrollar diferentes modelos de acogimiento (de urgencia,
profesionalizado...)
- Impulsar la adhesión tanto a la familia de acogimiento como a la familia
biológica, haciendo seguimiento y tomando medidas de formación y
apoyo.
Una inclusión no normatizadora
o Adaptar los modelos de intervención y los requisitos de acceso a la red de
atención para adaptarse a los cambios sociales y al perfil de las personas
usuarias, evitando la existencia de situaciones sin ninguna alternativa de
atención.
o Potenciar la creación de recursos de atención diurna y nocturna en Bizkaia.
o Descentralizar los recursos de resocialización en las diferentes comarcas de
Bizkaia.
o Reforzar con profesionales la red de atención secuandaria.
o Reforzar los programas de acompañamiento a personas con especiales
dificultades para una gestión autónoma.
o Coordinar junto a Sanidad la adecuada atención a perfiles con enfermedad
mental y exclusión residencial.
o Impulsar recursos de cara a personas reclusas y ex-reclusas.
Lucha contra la pobreza
Mientras avanzamos a un marco en el que nos hayamos dotado de nuevos derechos de
ciudadanía, planteamos la necesidad de reformas a corto y medio plazo en el Sistema
Vasco de Rentas Mínimas Condicionadas
o A corto plazo:
Las Ayudas Especiales para la Inclusión que gestiona la Diputación Foral
de Bizkaia deben ampliarse a todas las personas que tienen necesidades
y no pueden acceder a la Renta de Garantía de Ingresos. Esto exige
derogari el Decreto Foral 207/2011. La Diputación Foral de Bizkaia debe asumir la gestión íntegra de la
modalidad de complemento de pensiones de la Renta de Garantía de
Ingresos. Recuperar el nivel de cobertura establecido originalmente por la Ley
18/2008 para la Garantía de ingresos y la inclusión social. Derogar la reducción de un 7 % en las prestaciones contempladas en la
Ley 18/2008. Adaptación a las nuevas realidades fruto de la crisis económica:
Aumentar la protección temporal de las situaciones de endeudamiento y
dar cobertura a la falta de cobro de salarios. Adaptar las cuantías de las rentas mínimas al tamaño de la unidad de
convivencia para reducir así los índices de pobreza infantil. Reducir la edad para percibirla a los 18 años. Lanbide debe corregir aquellas directrices/órdenes de carácter
restrictivo o limitativas de derechos, en especial aquellas que resulten
contrarias a la Ley. Ante la situación de colapso en la gestión de la prestaciones económicas
por parte de Lanbide, se deben tomar medidas inmediatas para
garantizar los derechos de la ciudadanía, poniendo los medios humanos,
técnicos y económicos necesarios para cumplir la legalidad vigente en
cuanto a plazos y procedimientos, así como para asegurar la atención de
calidad que merecen las personas en situación de necesidad.
Desligar la percepción de la Prestación Complementaria de Vivienda de
la Renta de Garantía de Ingresos. Incrementar su cuantía en función de
las personas miembro de la unidad de convivencia.
o A medio plazo:
Dotar a los programas de rentas mínimas de mayor universalidad,
individualidad e incondicionalidad. Establecer un programa de deducciones (o créditos) fiscales
reembolsables orientada a todas las familias con hijos/as a su cargo,
para reducir la pobreza infantil.
Haciendo frente a la violencia machista:
o Enfocar los servicios de atención a lograr el empoderamiento de las mujeres
que enfrentan la violencia machista.
o Reforzar los servicios de atención a las mujeres que enfrentan la violencia
machista con recursos humanos y medios presupuestarios adecuados.
o Descentralizar los recursos de atención a las víctimas de violencia machista
(servicio socio jurídico, servicio de atención psicológica y servicio de acogida e
intervención psicosocial) en las diferentes comarcas de Bizkaia.
o Analizar la efectividad delprograma Bitartekari y adoptar las medidas
correspondientes tras el mismo.
o Impulsar la gestión directa del Observatoria de la Violencia de Género.