PREDICA DEL DOMINGO

Hemos comenzado una serie que hemos llamado el Reino, refiriéndonos

exactamente al evangelio que el Señor Jesucristo predicó, y por supuesto el

que nosotros debemos predicar, si predicamos otro evangelio estaríamos

errando en el blanco, y estorbando los propósitos de Dios, al darnos

salvación.

Este es un cambio importante en la iglesia para esta temporada, esto está

produciendo una crisis en las mismas estructuras, y por supuesto trae mucha

oposición de gente con falta de humildad que quiere mantener su posición

como una organización.

La religión no ha dado las respuestas al mundo, porque no es la solución que

trajo nuestro Señor Jesucristo, por eso la crisis mundial no encuentra

respuestas en la religión y se burlan de ella. Esta crisis en el mundo romperá

con tradiciones sin efectividad, la crisis marca el fin de una tradición.

El entendimiento del evangelio del Reino nos llevará a tener una mentalidad

diferente y a una nueva forma de hablar, de acuerdo a los principios de la

cultura del Reino y traerá respuestas para la crisis mundial.

Por ejemplo, muchos de ustedes están pensando en este momento, que es

muy difícil salir de esa situación en la que vive, y así será mientras usted no

sea reformado en sus pensamientos de acuerdo a la cultura del Reino.

Si quiere salir de su situación, solo tiene que cambiar de manera de pensar

para que el cambio se produzca.

Toda la predicación de nuestro Señor y la de los discípulos era sobre una

nueva cultura, la del Reino, una nueva forma de pensar:

Juan el bautista les decía a los religiosos judíos que querían bautizarse:

Mateo 3:7 Al ver él que muchos de los fariseos y de los saduceos venían a su bautismo, les decía: ¡Generación de víboras! ¿Quién

os enseñó a huir de la ira venidera? Mat 3:8 Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento,

Ellos no querían cambiar de manera de pensar, por eso les dice “generación de víboras”, solo es por fuera, pero esto es una revolución de pensamiento

Mateo 3:9 y no penséis decir dentro de vosotros mismos: A Abraham

tenemos por padre; porque yo os digo que Dios puede levantar hijos a Abraham aun de estas piedras.

Muchos de nosotros pensamos esta situación es difícil y me va a

hundir, pero la gente del Reino dice: esta situación es una

oportunidad para crecer.

Esta serie del Reino nos despertará a la realidad que, por el Espíritu

Santo, vamos a cambiar nuestra forma de pensar y de ver las cosas

que están afectando nuestro entorno.

Ojo aquí no estamos diciendo que tiene que negar la crisis o la

realidad de un problema, estamos diciendo que cuando nos ubicamos

en el Reino vamos a responder de otra forma a esa realidad o a

esa crisis, tendremos que cambiar de disciplinas, algunos quieren

entrar en el Reino indisciplinados y recibir las bendiciones, no se

puede, dañarás el Reino, no se te dejará entrar sino cambias tus

actitudes.

Nuestro Señor Jesucristo dijo: En el mundo tendréis aflicción,

pero confiad que yo he vencido al mundo.

Esto es importante que entendamos, la gente piensa que entra en en

evangelio del Reino y ya no tendrá problemas, no a lo mejor

aumentarán, porque el enemigo te quiere desanimar, pero tu

cambiarás de manera de pensar y ningún problema te va a derrotar

ni a meter en depresión, sino que avanzarás.

Oiga solo así los apóstoles pudieron avanzar, ¿se imagina usted

hablar de Cristo y sufrir persecución y cárcel? pero no se detuvieron,

el Espíritu Santo les cambió la manera de pensar sobre los problemas,

antes ni fueron a la crucifixión, se escondieron, ahora salieron

adelante y conquistaron lo que los guerreros de otras naciones no

pudieron conquistar. ¿Cuántos? 12 ó 120 al principio.

No solo cambiaremos nuestra forma de pensar sino la de hablar.

Nuestro Señor Jesucristo tenía una forma de hablar diferente,

hablaba como el Reino de su Padre:

Lázaro tu amigo está enfermo, se pondrá bien.

Lázaro se agravó, se pondrá bien.

Lázaro se murió, no no está muerto, está dormido.

Pro 18:20 Del fruto de la boca del hombre se llenará su vientre; Se saciará del producto de sus labios.

Pro 18:21 La muerte y la vida están en poder de la lengua, Y el que la ama comerá de sus frutos.

¿Qué vas a recibir? Lo que hables. ¿Quieres vida?, habla vida, ¿quieres muerte? habla muerte ¿Cómo reaccionas cuando tienes problemas? ¿Cómo es tu lenguaje? Eso es lo que vas a recibir. Este evangelio del Reino levantará una generación con nuevos

diseños, Gloria a Dios por las crisis, estas nos llevarán al Reino. Los

mejores economistas del mundo no pudieron con al crisis en los

Estados Unidos, entonces tendrán que salir mejores textos de

economía y mejores enseñanzas en las universidades.

Todo lo que tenga que ser removido será removido. Los hijos de Dios

son gente creativa que trae respuestas a los problemas y soluciones.

En otras palabras si tendremos problemas, pero nos llevarán a

delante y cumpliremos los propósitos para los que fuimos creados.

El mundo mira la crisis como un problema, nosotros debemos mirar

la crisis como una oportunidad. Cualquiera que esta sea: Económica,

emocional, cualquiera.

Las crisis nos llevarán a adoptar otra forma de pensar sobre las

cosas, tendremos que romper tradiciones que nos tienen atado a un

pasado y tenemos que pensar de otra manera, adquirir nuevos

hábitos, esto es El Reino.

Estos son principios de Reino.

Decíamos que El nunca predicó religión ni de una organización, El se

fue en contra de las religiones establecidas en esa época y los mismos

supuestos seguidores de su Padre Celestial, fueron los que lo mataron

en la cruz.

Lo más lógico hubiera sido que El se uniera a su pueblo y a la religión

Judía, pero no lo hizo, porque ellos también habían errado el camino,

a pesar de que hablaban de la ley de Moisés, no es que la ley de Moisés

hubiera sido mala, sino que ellos la habían convertido en una religión

para su propio beneficio.

Otra cosa que vimos en la clase pasada en el libro de Génesis que el

propósito de Dios al crear la humanidad era hacer seres humanos

a su imagen y semejanza, y que en la tierra fuera como en el cielo,

pero Adam por su desobediencia perdió ese dominio y lo traspasó a toda la

humanidad por herencia, hasta que vino el hijo de Dios se hizo hombre y

pagó por el pecado de la humanidad, para que el propósito de Dios sea

restaurado.

Es decir el que se levante una generación de hijos que formen una

nación, con su mismo ADN, para eso les entregó el Espíritu Santo,

para que reciban poder y así restablecer el Reino sobre la tierra.

Sin ese poder no se puede hacer nada, no es en nuestra sabiduría ni en

nuestros diseños, sino en la sabiduría y el diseño del cielo.

Obviamente esta tarea está muy incompleta, la humanidad no

refleja lo que está en el cielo, fue una tarea que comenzó nuestro Señor

Jesucristo, la continuó los apóstoles, y luego el enemigo la

transformó en religión, para causar división y guerras y detener

el avance del Reino. Pero ahora al Espíritu Santo le ha placido marcar

un tiempo en que una generación con carácter apostólico, se levante

para bajar los diseños del cielo: justicia, paz y gozo, en el Espíritu.

La pregunta del siglo es ¿Por qué no se ha establecido el Reino? Si han

pasado más de 2000 años ¿Si hay gran parte de la humanidad que

cree en nuestro Señor Jesucristo, y tienen el Espíritu Santo? ¿Si hay

muchas religiones y denominaciones que dicen tener al mismo Señor

como Salvador?

Y la respuesta está en que no hemos descubierto el poder que tenemos

en el Espíritu Santo, definiendo poder como:

“La habilidad para controlar e influenciar todas las

circunstancias”

Este concepto es importantísimo, y debe de ser revelado en todo

nuestro ser. Para ser efectivos y gente de influencia en la esfera que

nos toque desarrollarnos, no todos podemos ser pastores,

necesitamos banqueros, médicos, gente de negocios, amas de casa,

músicos, artistas, profesores, pero llenos del poder del Espíritu Santo,

para influenciar su área de dominio, para la que fue creado por Dios.

Un pueblo con otra cultura: La cultura del Reino.

Hoy vamos a ver cuáles son las buenas nuevas del

evangelio del Reino que El Señor predicó.

El vino para cumplir los propósitos de su Padre Celestial y Su Padre

nunca quiso establecer una religión, sino una nación, un pueblo que

siguiera sus leyes y estatutos y que los plasmara en la tierra.

La religión ha sido usada para establecer guerras, matar gente, hacer

terrorismo en el nombre de Dios.

En su Reino, Dios no mata gente, no incendia escuelas, este

no es el Reino de Dios.

EL REINO DE DIOS NO ES UNA INVASIÓN FÍSICA, sino

una invasión de las partes internas del alma, del alma del

hombre capturando su mente, su corazón, para sus

propósitos.

Entender esta definición es importantísimo, no es una

invasión física, sino interna que cambia tus pensamientos y

te dirige de una nueva manera.

Nosotros no somos llamados a tomar gente por el cuello y decirle “vea

la luz”.

El Reino de Dios ya vino cuando nuestro Señor Jesucristo vino a la

tierra, y su objetivo no es sino los corazones de la gente, no es un

lugar físico.

¿Sabe por qué?

Veamos Salmo 24:1

Salmo 24:1 De Jehová es la tierra y su plenitud; El mundo, y los que en él habitan.

Sa 24:2 Porque él la fundó sobre los mares, Y la afirmó sobre los ríos.

Sa 24:3 ¿Quién subirá al monte de Jehová? ¿Y quién estará en su lugar santo?

Sa 24:4 El limpio de manos y puro de corazón; El que no ha elevado su alma a cosas vanas,

Ni jurado con engaño. Sa 24:5 El recibirá bendición de Jehová,

Y justicia del Dios de salvación. Sa 24:6 Tal es la generación de los que le buscan,

De los que buscan tu rostro, oh Dios de Jacob. Selah

Entonces: ¿De quién es la tierra?

De Jehová es la tierra y su plenitud, dice el verso 1

O sea las guerras de las cruzadas para defender a Jesucristo y tomar

la tierra para El fue un error y solo trajo muerte y desastre a la

humanidad. La misma conquista de América para imponer con

violencia el evangelio, lo único que hizo fue esconder los verdaderos

propósitos del hombre la riqueza material.

El no tiene que levantar un ejército para invadir territorios

y tomar lo que ya es de El. La tierra ya le pertenece.

Y luego pregunta:

¿Quién va a subir con Jehová?

El limpio de manos y corazón puro.

Entonces ¿qué quiere el Señor?

Corazones y mentes de Reino.

¿Para qué?

Para darles lo que les pertenece, la tierra por herencia, de El

es y El la entrega a quien quiere.

La tierra es entonces la herencia de los hijos, no el cielo, la tierra,

algunos todavía están pensando en Dios para que los salve y cuando

se mueran vivan en el cielo por la eternidad, eso no dice la palabra.

Dice que la tierra es nuestra herencia, no el cielo.

Veamos:

Mateo 25: 31-34

Mat 25:31 Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en su trono de gloria,

Mat 25:32 y serán reunidas delante de él todas las naciones; y apártalos unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos.

Mat 25:33 Y pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda.

Mat 25:34 Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo.

El Señor explica en esta parábola, que cuando El venga por segunda vez, se sentará en su trono de Gloria a Juzgar a las naciones, no solo a los hombres sino a las naciones, y pondrá las naciones ovejas a un lado y los cabritos a otro lado, y a las ovejas le dirá:

“Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para

vosotros desde la fundación del mundo.” ¿Cuál es el reino que vamos a heredar? El que está preparado para la humanidad desde la fundación del

mundo. ¿Cuál es? La tierra. No nos preparó el cielo Dios para nosotros, allí está Su Reino, El creó

la tierra y luego creó al hombre y le dijo, ejerce dominio sobre ella, para que se haga en la tierra así como en el cielo.

Nuestra herencia no es Jesús mismo, nuestra herencia es un Reino, el

diablo la robó cuando Adam y Eva pecaron, pero Jesucristo la

recuperó.

Jesucristo es como el que cuida del reino hasta que seamos maduros.

Es como el niño que sus Padres mueren y hereda una fortuna, pero se

nombra alguien que la administre hasta que tenga edad suficiente

para reclamarla.

Eso es Jesús, nadie puede entrar en el Reino, ni reclamar herencia

sino acercándose a El.

Por eso en los versículos que leímos dice: que la herencia estaba

preparada desde la fundación del mundo.

La herencia está lista pero no se puede tomar sino nos acercamos al

administrador de esta herencia Jesucristo.

¿Qué necesitamos para reclamar cualquier herencia?

Una prueba de nuestra identidad, y que cumpla los

requisitos de madurez.

Cuando se comprueba que todo está en orden entonces se transfiere la

herencia a su dueño.

Por eso dice nuestro Señor Jesucristo:

Juan 10:9 Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos.

Para entrar en el Reino se necesita atravesar una puerta, Jesucristo,

cuando cruzamos esa puerta cumplimos lo requisitos para entrar en el Reino.

Entonces veamos los pasos para entrar en el Reino. 1.- Primer paso: Entrar por la puerta, y comenzar a vivir, a pensar a actuar como

verdaderos hijos del Rey. Pero este es el primer paso y la gente se queda en el umbral de la

puerta y hace una tienda para el resto de su vida, pero hay mucho mas que se recibe en el Reino. Dice entrará, saldrá, hallará pastos, esto me huele a mucha libertad y provisión.

La puerta es hermosa, pero el objetivo de la puerta es que entres y

disfrutes de lo que hay más allá, el Reino, algunos por la religión se quedan solo en la puerta y viven un mundo desdichado

Imagínese que yo le digo entra por esa puerta y encontrarás tu

palacio, con muchas habitaciones, felicidad, gozo, paz, capacidad para transformar toda situación, y tú me dices, ya está bien pero me quiero quedar en la puerta es muy bonita, yo no quiero seguir mas allá. ¿Es loco verdad?

Mire lo que dice después:

Juan 10:10 El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en

abundancia. ¿Cómo dice que es en el Reino?: ¡Que tengan vida y vida en

abundancia! Esta es nuestra herencia, ¡vida de la buena!, no termina en la puerta, la gente acepta al Señor, pero se queda en la puerta, esto es lo que hace la religión, y pasa el tiempo y no experimentas esa vida abundante, esperando que Cristo venga por segunda vez.

Reclamar su herencia, no se trata de pertenecer a una religión, o a

una denominación, no tiene nada que ver con hacerse religioso, es

entrar a ser ciudadanos de un Reino, con otros principios y otras

leyes, ahora puedo vivir como un hijo de Dios, ahora tengo su Espíritu

Santo, que me ayudará a pensar como hijo.

Juan 10:7 Volvió, pues, Jesús a decirles: De cierto, de cierto os digo: Yo soy la puerta de las ovejas.

Juan 10:11 Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas.

Jesús dice que el es el pastor, ¿Qué hace un pastor? Lleva a las ovejas a donde hay pasto para comer, pero no las obliga a comer, depende de ellas el comer o no, El no obliga a la oveja, nuestro alimento dependerá del nivel de disposición que tengamos para comer buen pasto.

El estaba dispuesto a dar su vida por las ovejas y al final dice

refiriéndose a un pueblo que no sería judío:

Juan 10:16 También tengo otras ovejas que no son de este redil; aquéllas también debo traer, y oirán mi voz; y habrá un rebaño,

y un pastor.

2.- Debemos de cambiar nuestra nacionalidad.

Ya no somos ciudadanos del mundo sino del cielo, vivimos en el

mundo pero somos “embajadores” de nuestra nación el cielo, nos

volvemos diplomáticos del Reino en la tierra, y ayudamos a otros a

buscar la puerta.

En cualquier momento podemos pedir los recursos del Rey, para

ejercer nuestra embajada efectivamente en la tierra.

Esto hacía Jesús, cuando los discípulos vieron 5000 que los seguían, le

dijeron a Jesús, no podemos dar de comer a tanta gente despídelos, y

El Señor los reprendió y pidió de la abundancia del cielo y sobró

comida.

Cambiemos nuestra mentalidad de pobreza por la mentalidad de

provisión, esto nos mantendrá enfocados en el Reino.

3.- Debemos predicar el evangelio que nuestro Señor Jesucristo predicó:

Mat 4:17 Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.

Juan el bautista estaba preso, entonces el COMENZÓ, fue su primera prédica,

ARREPENTIRSE que EL REINO DE LOS CIELOS SE HA ACERCADO.

Primero nos llama a cambiar de corazón y de manera de pensar, a ser lo

suficientemente humildes para reconocer que nuestros caminos no son sus

caminos y luego dice el porqué.

Escuche no dice “arrepiéntanse que el reino de los cielos vendrá sobre ustedes

cuando se mueran Y SE VAYAN AL CIELO”

NO

Dice “EL REINO DE LOS CIELOS SE HA ACERCADO”

¿Dónde?

A la tierra.

Ese es nuestro fin, el cielo es un lugar temporal, para cuando te mueras, pero

la tierra es nuestra morada para siempre, pero con el Reino establecido.

Por eso dice en Apocalipsis

Apocalipsis 5:10 y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y reinaremos sobre la tierra.

¿Dónde reinaremos? sobre la tierra, esta es la buena nueva del reino,

una generación de hijos que pongan los diseños del reino en su vida, para afectar su medio de influencia.

¿Qué religión debemos predicar?

NINGUNA

Debemos de predicar el evangelio del Reino La palabra evangelio

significa:” buenas nuevas”.

Cada buena noticia es un evangelio, estrictamente hablando, por

ejemplo si llego y le digo que su hijo es un hombre de honor y buen

comportamiento en el colegio, esto es hablar una buena noticia, el

evangelio.

Pero las buenas nuevas que Jesús nos mandó a predicar son las del

Reino, no estamos llamados a traer predicaciones que lo entretengan,

somos llamados a decirle como Jesús, la buena noticia: “el Reino se ha

acercado”

Oiga a decirle a la gente, salga de la confusión, y ENTRE en el Reino,

aquí hay la capacidad para enfrentar los desafíos diarios y vencer.

En definitiva el arrepentirse de la vida que se lleva y aceptar a

nuestro Señor Jesucristo, nos permite entrar al Reino y ver otra

posibilidad superior de vida, este evangelio es un estilo superior de

vida en la tierra que debe de ser infectado en todo el planeta, y que

comienza con tu vida.

Entonces el mensaje de Jesús era simple para los simples, no les decía,

tienen que hacerse unos eruditos conocedores de la Biblia, no, solo

arrepiéntete de tu actual manera de vivir y podrás ver el Reino de los

cielos.

Luego entonces podrás entender las enseñanzas del Reino.

Oiga: La vida es dura, hay mucho sufrimiento, dolor, confusión,

desempleo, divorcios, mucha ansiedad, problemas económicos.

Jesús decía, les tengo “buenas noticias en medio de todo esto”. Hay

una capacidad para resolver todas estas situaciones.

Las buenas noticias son que El Reino de los cielos se ha acercado, para

todo aquél que lo desee.

¿Qué necesito para entrar a esas buenas noticias?

Arrepentirme de mi pasada forma de vivir, y aceptar al Señor como el

que sufrió por mis pecados, entonces podré ver un mundo mejor.

Seguir a Cristo significa tener un mejor estilo de vida y un mejor

futuro, este es el mensaje de esperanza que trajo el Señor.

4to. Avanzar a vencer toda dificultad.

Juan 16:33 Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.

Escuche esto, no dice entra en el reino y sal de este mundo, estamos en

este mundo pero no somos de este mundo. No dice: acéptame como la puerta y el camino y nunca más tendrás

más problemas. No no dice eso, lo que dice es en mí tendréis paz, y confianza para

vencer al mundo, porque Yo estoy con ustedes. 1 Juan 5:4 Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y

esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe. 1 Juan 5:5 ¿Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que

Jesús es el Hijo de Dios?

¿Qué le pasa al que se arrepiente y cree en nuestro Señor Jesucristo? VENCE AL MUNDO. No hay nada en el mundo que nos pueda vencer, porque tenemos la

capacidad de tener su naturaleza, su fe, su confianza, su poder para controlar toda circunstancia.

Este mensaje no tenía que ver con ir al cielo, sino con vencer en este

mundo. ¿Estamos viendo el nacimiento del evangelio correcto de acuerdo a la

palabra de Dios? Ya no somos víctimas de las circunstancias que vivimos, si somos

vencidos por el mundo, entonces nos hemos quedado en la puerta y en el mensaje, nosotros tenemos recursos ilimitados dados por Dios para salir de toda situación.

Las buenas nuevas son que debes de vivir en victoria cada día de tu

vida. Entonces es importante y primero creer en Jesús y arrepentirse pero

debemos avanzar a las buenas nuevas del Reino, yo sé que hay muchos que aman a Jesús pero que todavía no hemos entendido a cabalidad el evangelio del reino y sus beneficios.

Terminemos:

Mat 6:9 Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.

Mat 6:10 Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra.

Veamos: 1ro dice que es Padre nuestro, padre de todo el que cree en nuestro Señor Jesucristo. 2do. dice que está en los cielos, este es el lugar de su habitación, no muy lejos de nosotros por cierto, porque cuando morimos vamos para allá.

3ro- Dice “venga tu reino” no dice llévanos al cielo sino trae el cielo a la tierra 4to, dice: “Hágase tu voluntad” O sea lo que tu quieres en tu plan. ¿Cuál fue el plan original de Dios, crear una tierra con los diseños del cielo, y un hombre que sea hijo, que escuche su voluntad y la establezca en la tierra. Así que prediquemos ese evangelio y tomemos la decisión de implantar el reino en donde estemos, y tendremos victoria sobre toda circunstancia, para eso murió nuestro Señor Jesucristo, para que tuviéramos acceso a este REINO. Así que oremos, y si alguien no ha entrado todavía en el Reino y quiere rendirse a Cristo puede hacerlo en forma personal donde está, y tu vida tendrá una nueva esperanza, ahora y ya. Bendiciones Hugo Oberti