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Problemática Se entiende por Ortotipografía al conjunto de reglas, normas  y convenciones (tanto ortográcas como tipográcas) que regulan el uso de las grafías y los recursos macro y micro ti- pográcos aplicables en el diseño editori al para garantizar la adecuada interpretación de los textos escritos. «Las normas ortotipográcas viven sujetas a la lógica in- terna de la lengua escrita, tanto por lo que hace referencia a las leyes de la gramática y la ortografía como a las que regulan la expresión gráca de la escritura. Gracias a su articulación como sistema de convenciones se han podido jar y norma- lizar los criterios para la producción de textos en cada ámbito lingüístico» (Simón i Ortoll, B.: «Usos y desusos del calderón», Box nº 3, Rosario, 2001). A lo largo de los siglos, y con particular énfasis desde la invención de la imprenta, el texto, escrito o impreso, se ha ido constituyendo como un objeto complejo, en el que se articulan y superponen cuestiones que tiene que ver con lo histórico, lo etimológico, lo lingüístico, lo cognoscitivo, lo discursivo y lo estético, por mencionar sólo algunas de las dimensiones que conuyen en él. Y dada esta complejidad, desde muy temprano se hizo evidente la necesidad de una normalización. Un texto se constituye siempre a partir de tres instan- cias: la de formación, la de procesamiento y la de interpreta- ción (Harris, R.: Signos de escritura, Barcelona, Gedisa, 1999). Estas instancias pueden coincidir secuencialmente en el tiempo y en el espacio, o bien acontecer en momentos y geo- grafías muy separados entre sí. Sea cual sea el caso, para que un texto sea ecaz, debe inscribirse en un universo cultural, y más precisamente en un marco de convenciones, reglas y formas compartidas por la comunidad que produce dicho texto. Sin este marco, la for- mación, el procesamiento y la interpretación de los textos es- tán sujetos a una incertidumbre tal que los vuelve confusos y equívocos algunas veces, o un artefacto inútil otras; poco más que una jerigonza a ser descifrada por especialistas. Durante siglos, el uso y la aplicación de aquellas con- venciones fue producto de una trabajosa negociación cul- tural, para quedar nalmente en manos de escribas, im prenteros, editores y autoridades institucionales y econó micas (del ignoto escriba a Alcuino de York y su carolingia, hasta Aldo Manuzio, los Didot, Paul Renner, Jan Tschichold, las Academias y la gran industria editorial, por citar sólo bre- vemente). Hoy , las computadoras y la autoedición ponen en manos de los diseñadores, redactores, tipiadores, correctores e im- prenteros un sinfín de recursos tipográcos cuya pertinencia  y oportunidad se ve velada por su misma uída e inmediata disponibilidad. La afortunada democratización de la produc- ción de textos que conlleva el uso extendido de las compu- tadoras genera también una enorme confusión respecto de los recursos que éstas proveen en el campo de la tipografía y el diseño editorial (confusión que se agrava no poco a causa de la «internacionalización» de las formas, la nomenclatura, la taxonomía y todas las especicidades del idioma inglés como lingua franca digital). Un folleto, un catálogo, una revista, un diario, y con más razón una enciclopedia, un manual o cualquier texto cientí- co, deben contemplar en su puesta tipográca las normas  y convenciones que la tradición y la legisl ación determinan en su respectivo ámbito lingüísti co (ámbito este cuya exten- sión y profundidad varía según qué temas en el interior de un mismo texto), a los nes de garantizar su máxima ecacia. Las versalitas, las cursivas, las negritas, los signos no al- fabéticos, en suma, el conjunto de recursos macro y micro tipográcos (junto a ciertos criterios de ortografía y sintáxis) tienen, más allá de la voluntad estética del diseñador, un uso especíco inscripto en el conjunto de reglas que construye la lógica del sistema de la lengua escrita. Desconocer y vio- lar esta lógica atenta contra la condición de posibilidad de la comunicación escrita: en un texto académico, lo que debería ir entre comillas (y no cualquiera de éstas) no debería ir de cursiva, so pena de inducir a graves confusiones y sospechas. El profesional del diseño de comunicaciones visuales debe ser un agente de aplicación, docencia y reproducción de este sistema de convenciones, tanto sea para garantizar la continuidad de sus efectos como para acompañar responsa- blemente y con conocimiento sus cambios y adaptaciones. Ortotipografía horacio f. gorodischer 01

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  • ProblemticaSe entiende por Ortotipografa al conjunto de reglas, normas y convenciones (tanto ortogrficas como tipogrficas) que regulan el uso de las grafas y los recursos macro y micro ti-pogrficos aplicables en el diseo editorial para garantizar la adecuada interpretacin de los textos escritos.

    Las normas ortotipogrficas viven sujetas a la lgica in-terna de la lengua escrita, tanto por lo que hace referencia a las leyes de la gramtica y la ortografa como a las que regulan la expresin grfica de la escritura. Gracias a su articulacin como sistema de convenciones se han podido fijar y norma-lizar los criterios para la produccin de textos en cada mbito lingstico (Simn i Ortoll, B.: Usos y desusos del caldern, Box n 3, Rosario, 2001).

    A lo largo de los siglos, y con particular nfasis desde la invencin de la imprenta, el texto, escrito o impreso, se ha ido constituyendo como un objeto complejo, en el que se articulan y superponen cuestiones que tiene que ver con lo histrico, lo etimolgico, lo lingstico, lo cognoscitivo, lo discursivo y lo esttico, por mencionar slo algunas de las dimensiones que confluyen en l. Y dada esta complejidad, desde muy temprano se hizo evidente la necesidad de una normalizacin.

    Un texto se constituye siempre a partir de tres instan-cias: la de formacin, la de procesamiento y la de interpreta-cin (Harris, R.: Signos de escritura, Barcelona, Gedisa, 1999). Estas instancias pueden coincidir secuencialmente en el tiempo y en el espacio, o bien acontecer en momentos y geo-grafas muy separados entre s.

    Sea cual sea el caso, para que un texto sea eficaz, debe inscribirse en un universo cultural, y ms precisamente en un marco de convenciones, reglas y formas compartidas por la comunidad que produce dicho texto. Sin este marco, la for-macin, el procesamiento y la interpretacin de los textos es-tn sujetos a una incertidumbre tal que los vuelve confusos y equvocos algunas veces, o un artefacto intil otras; poco ms que una jerigonza a ser descifrada por especialistas.

    Durante siglos, el uso y la aplicacin de aquellas con-venciones fue producto de una trabajosa negociacin cul-tural, para quedar finalmente en manos de escribas, im

    prenteros, editores y autoridades institucionales y econ micas (del ignoto escriba a Alcuino de York y su carolingia, hasta Aldo Manuzio, los Didot, Paul Renner, Jan Tschichold, las Academias y la gran industria editorial, por citar slo bre-vemente).

    Hoy, las computadoras y la autoedicin ponen en manos de los diseadores, redactores, tipiadores, correctores e im-prenteros un sinfn de recursos tipogrficos cuya pertinencia y oportunidad se ve velada por su misma fluda e inmediata disponibilidad. La afortunada democratizacin de la produc-cin de textos que conlleva el uso extendido de las compu-tadoras genera tambin una enorme confusin respecto de los recursos que stas proveen en el campo de la tipografa y el diseo editorial (confusin que se agrava no poco a causa de la internacionalizacin de las formas, la nomenclatura, la taxonoma y todas las especificidades del idioma ingls como lingua franca digital).

    Un folleto, un catlogo, una revista, un diario, y con ms razn una enciclopedia, un manual o cualquier texto cient-fico, deben contemplar en su puesta tipogrfica las normas y convenciones que la tradicin y la legislacin determinan en su respectivo mbito lingstico (mbito este cuya exten-sin y profundidad vara segn qu temas en el interior de un mismo texto), a los fines de garantizar su mxima eficacia.

    Las versalitas, las cursivas, las negritas, los signos no al-fabticos, en suma, el conjunto de recursos macro y micro tipogrficos (junto a ciertos criterios de ortografa y sintxis) tienen, ms all de la voluntad esttica del diseador, un uso especfico inscripto en el conjunto de reglas que construye la lgica del sistema de la lengua escrita. Desconocer y vio-lar esta lgica atenta contra la condicin de posibilidad de la comunicacin escrita: en un texto acadmico, lo que debera ir entre comillas (y no cualquiera de stas) no debera ir de cursiva, so pena de inducir a graves confusiones y sospechas.

    El profesional del diseo de comunicaciones visuales debe ser un agente de aplicacin, docencia y reproduccin de este sistema de convenciones, tanto sea para garantizar la continuidad de sus efectos como para acompaar responsa-blemente y con conocimiento sus cambios y adaptaciones.

    Ortotipografahoracio f. gorodischer

    01

  • Modalidad pedaggica El dictado se har con la forma de seminario bajo la mo-dalidad de transferencia (por lo que solo sern necesarios asientos con comodidades para tomar apuntes, can, pantalla y pizarra).

    Objetivos generales Que los cursantes perfeccionen sus saberes tipogrficos mediante la capacitacin en las problemticas de la or-totipografa, a los fines de: a) contar con atributos profe-sionales habilitantes para intervenir con solvencia y ex-perticia en el campo del diseo en general y del diseo editorial en particular; b) posibilitar la transmisin en el mbito docente de los conocimientos en cuestin; c) ad-quirir conocimientos e instrumentos que perfeccionen la produccin de textos acadmicos y/o profesionales.

    Visto el tiempo disponible para el dictado en el Centro de Estudios Gestalt, se har una aproximacin tanto a estos objetivos como a los contenidos propuestos.

    Objetivos particulares 1. Reconocer los aspectos tcnicos y normativos de la com-

    posicin tipogrfica para encuadrar la toma de deci-siones en diseo grfico y diseo editorial.

    2. Definir y precisar la terminologa tcnica, y aclarar las dificultades que se producen a partir del cruce entre el ingls, el castellano, el lenguaje del tipo en metal y los programas de autoedicin.

    3. Recorrer la experiencia acumulada en los principales problemas que se plantean en diseo editorial y pues-tas tipogrficas, y cmo se responde a ellos desde las convenciones ortotipogrficas.

    4. Conocer las normativas tipogrficas hispanoamerica-nas en el mbito editorial. Libros, publicaciones cien-tficas, revistas, diarios, catlogos, etc.

    ContenidosTemario

    Clasificaciones tipogrficas

    Factores que definen a una letra

    Redondas, cursivas, minsculas,

    maysculas y versalitas. Caractersticas y usos especficos

    Cifras y signos

    Alineaciones horizontales y verticales, sangras

    Diacrticos

    Divisin y separacin de palabras

    Titulacin

    Numeracin

    ndices

    Citas y citas bibliogrficas

    Evaluacin Por asistencia y participacin.

    02

  • BibliografaAcademia Espaola: Ortografa de la lengua espaola, Madrid: Espasa Calpe, 1999. Bringhurst, Robert: The Elements on Typographic Style, Vancouver: Hartley & Marks, 2001. Carter, Harry: Orgenes de la tipografa. Punzones, matrices y tipos de imprenta, Madrid: Ollero y Ramos, 1999. De Buen Unna, Jorge: Manual de diseo editorial, Asturias: Trea, 2008. Dreyfus, John, y Franois Richaudeau (dirs.): Diccionario de la edicin y de las artes grficas, Madrid: Fundacin Germn Snchez Ruiprez, 1999. Eco, Umberto: Cmo se hace una tesis. Tcnicas y procedimientos de estudio, investigacin y escritura, Barcelona: Gedisa, 1982. Gill, Eric: An Essai on Typography, Londres: Lund Humphries, 1988. Gorodischer, Horacio: Curiosidades tipogrficas, Santa Fe: UNL, 2010. Martin, Douglas: El diseo en el libro, Madrid: Pirmide, 1994. Martnez de Sousa, Jos: Ortografa y ortotipografa del espaol actual, Asturias: Trea, 2008. Diccionario de edicin, tipografa y artes grficas, Asturias: Trea, 2001. Manual de edicin y autoedicin, Madrid: Pirmide, 1999. Diccionario de ortografa tcnica, Madrid: Fundacin Germn Snchez Ruiprez, 1999. Montesinos, Jos y ot.: Manual de tipografa del plomo a la era digital, Valencia: Campgrfic, 2001. Morison, Stanley: Principios fundamentales de la tipografa, Barcelona: Ediciones del Bronce, 1998. Renner, Paul: El arte de la tipografa, Valencia: Campgrfic, 2000. Tschichold, Jan: El abec de la buena tipografa. Impresos agradables con una buena tipografa, Valencia: Campgrfic, 2002. The New Typography. A handbook for modern designers (trad. al ingls de Ruari McLean), California: University of California Press, 1995.

    03