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REVISTA DE LA ASOCIACIÓN DE ANTIGUOS ALUMNOS COLEGIO SAN AGUSTÍN. SALAMANCA N.º 25 • ABRIL 2012

REVISTA DE LA ASOCIACIÓN DE ANTIGUOS ALUMNOS COLEGIO … · del Colegio San Agustín de Salamanca. Avda. ... moral y transparencia que adquirí en mis años de semina- ... día 25

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REVISTA DE LA ASOCIACIÓN DE ANTIGUOS ALUMNOSCOLEGIO SAN AGUSTÍN. SALAMANCAN.º 25 • ABRIL 2012

Editorial

DIRECTOR:Facundo Simón HierroE-Mail: [email protected]

JUNTA DIRECTIVAPRESIDENTE:Facundo Simón HierroVICEPRESIDENTE:Saturio Bajo GarcíaTESORERO:Sinforiano CuadradoSECRETARÍA:Ángel Pérez RodríguezVOCALES:Antonio Luis de Benito FernándezJosé Ramón López HernandezJulio Fraile SánchezASESORES:Francisco Cornejo SánchezJosé Luis Bueno Blanco

Edita: Asociación de Antiguos Alumnos del Colegio San Agustínde Salamanca.Avda. San Agustín, 11337005 SALAMANCATel.: 923 22 07 00Página web:http://www.asoagusa.orgDep. Legal:M. 47.652-1999Método Gráfico, SLAlbasanz, 14 bis, 1.ª Planta, Naves A y B

SUMARIO

Editorial .................................. 2

Camilo informa ........................ 3

En ruta..................................... 6

Saber y leer .......................... 14

El Rincón del Socio ................. 17

In Memoriam ......................... 20

Balance Ejercicio 2011 ........... 29

La Pepa ................................. 30

No resulta fácil resumiren un editorial la sem-blanza de una persona

cuando los recuerdos se agolpany las vivencias afloran. A pesarde todo, he aceptado con gustola sugerencia de escribir estetexto que me hizo mi amigoFacundo.

Nuestro amigo, Julián, falle-ció no hace mucho, de modocasi repentino, llenándonos atodos de una inmensa tristeza.

Había nacido en un pueblo de Extremadura, tierra que élamaba y por la que, no hace mucho tiempo, hicimos un reco-rrido, juntamente con Agustín Justel, disfrutando de los recuer-dos de su infancia y de la hermosa estampa del Valle del Jer-te. Estaba lleno de vida y de proyectos. Juntos planificamosvolver en la época de la floración para disfrutar de ese mara-villoso espectáculo que este valle nos ofrece. Ya no podrá ser,pues Dios lo ha llamado a disfrutar, sin duda, de la eterna belle-za del paraíso.

De niños, habíamos caminado juntos: Leganés, Salaman-ca. Días de estudio, de compromiso, de placer, de inquietud,de amistad y convivencia.

Después de meditarlo y sopesarlo, Julián emprendió otrocamino, formó una familia y buscó otro proyecto para reali-zarse. Siempre tuvo presente lo aprendido, como él mismo diceen el último número de nuestra revista PLAZA MAYOR: “Lomío ha sido montar casinos de juego para grandes empresas alo largo y a lo ancho del mundo. Todo ello con la dignidad, éti-ca, moral y transparencia que adquirí en mis años de semina-rio. Siempre he llevado la bandera agustiniana bien alta y elrecuerdo vivo de una época maravillosa que tuve el privilegiode vivir junto a muchos de vosotros y otros muchos que nosdejaron y nos esperan”.

Pero mucho más importante que su trayectoria profesionales su trayectoria como persona. Leal, amigo de sus amigos,amante de la verdad… Si tuviera que resumir su vida en unaspalabras diría que fue un hombre bueno, al que Dios llamóporque tal vez, la “mochila” a la que él hace referencia, yaestaba sobradamente llena de buenas obras. AMIGO, ¡¡¡Queen paz descanses, allí donde estés!!! Tus amigos siempre terecordaremos.

PACO ARIAS

Camilo informa

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En la Crónica anteriorterminábamos deseandoa todos una Feliz Navi-

dad y mucha suerte con la lote-ría. Pues la suerte nos sonrió,aunque fuera tímidamente, ynos tocó un pellizquito quesiempre es de agradecer.Mucha lata para los responsa-bles del asunto, pues había quepagar a mucha gente que lla-maba desde cualquier punto dela geografía española. Que selo digan a Saturio, siempre tanactivo y disponible, todas lasvueltas que hubo de dar paracumplir con todos los colabo-radores. Y se cumplió. Y quéagradecidos en la Misión deTolé y la propia AAA que se hapodido beneficiar algo de esteguiño de la fortuna. También,por cierto, hubo suerte con lalotería distribuida por laAMPA.

A finales de diciembre y enplenas vacaciones recibimos lavisita de los novicios de LaVid, acompañados por los PP.Eleuterio y José Luis Belver.También durante esos días ungrupo de profesos de El Esco-rial vinieron a disfrutar de

unos días de vacaciones y des-canso en nuestra Comunidad.

En el mes de enero, y justoen la Fiesta del Día de Reyestuvimos que lamentar la muer-te de uno de los padres de nues-tra Residencia de AtenciónEspecial. El P. José ManuelGuirau, que apenas llevaba unmes con nosotros, y que habíavenido desde la comunidad delMonasterio de El Escorial des-cansó en la Paz del Señor.

El 21 de este mes culminóen realidad la 2ª edición del tea-tro solidario llevada a cabo ennuestro salón de actos a lo lar-go de varias semanas. El brochefinal fue con música a cargo dela Banda de Música de Alba deTormes, dirigida por Mario Ver-cher y que ofreció un auténticoconcierto “de cine”, basado entemas de las mejores produc-ciones del 7º arte. Los benefi-cios económicos conseguidospor esta actividad que organizala ONG “Acción Verapaz” delos PP. Dominicos serán tam-bién para ayuda de la RESA deTolé (Panamá).

Un día después se llevó acabo en nuestro colegio una

concentración de niñosde diversas parroquias ycolegios para celebrar elDía de la InfanciaMisionera, en la queparticiparon especial-mente alumnos que sepreparan para recibir laPrimera Comunión. Fueuna gran fiesta llena de vida yentusiasmo misionero, propiode los niños.

Nuestra Comunidad felicitadesde estas páginas al P. ManuelSánchez Tapia por la obtencióndel título de Doctor en Teología,con la calificación de sobresa-liente por la Universidad Ponti-ficia de Comillas (Madrid).Reconocimiento que obtienetras la presentación y defensapública de su Tesis Doctoral“Jesucristo, el único iluminadorsalvífico, en la teología espiri-tual de san Agustín”, llevada acabo en el aula magna de la mis-ma universidad el día 27 de ene-ro de 2012.El P. Manuel, naturalde Martín de Yeltes, es religio-so de esta Comunidad y ha ejer-cido como profesor de religióny cultura clásica en nuestroColegio San Agustín, del quetambién es antiguo alumno.

Banda de Música de Alba de Tormes Grupo Scout “La Flecha” celebrando el 29 aniversario de su fundación

Camilo informa

El mes de enero terminabacon la celebración del DíaEscolar de la No Violencia y laPaz. Todo el colegio reunido enel salón de actos participó enuna celebración muy coloristay festiva que quiso ser un ges-to por la paz, ofreciendo nues-tras manos por tan noble cau-sa. Fue la actividad central deuna semana dedicada a refle-xionar y orar por la Paz.

Y no se despediría el messin pasar antes por el trance dela primera auditoría internaque vendría a evaluar nuestroplan de calidad del centro. La

prueba, que ya se nos vahaciendo familiar, fue supera-da satisfactoriamente.

Ya en el mes de Febrero,siempre hay que destacar lacampaña de Manos Unidas,con la tradicional “OperaciónBocata”, que este año se cele-bró del 6 al 12. En esta ocasióntrabajábamos a favor de “LASALUD, DERECHO DETODO” y ayudábamos a finan-ciar un proyecto en África. El“Bocata” fue una auténticafiesta de encuentro familiar enlos campos de deporte.

A lo largo de este mes, losdiversos grupos de pastoral delcolegio, Tagaste y Casiciacohan llevado a cabo conviven-cias y salidas de fin de semanaa distintos puntos de la geo-grafía salmantina. También elGrupo Scout “La Flecha” hacelebrado en este mes su 29aniversario de fundación, y loha hecho con un gran númerode actividades para todos losmiembros del grupo, terminan-do con una celebración de laEucaristía y fiesta familiar el

domingo, día 25. También enesta jornada recibieron su paño-leta los nuevos integrantes de laUnidad de Padres.

A tierras italianas se fueronlos alumnos de 1º de Bachille-rato en su excursión de fin deestudios. Según cuentan daenvidia lo bien que se lo debie-ron pasar durante una semana,conociendo lugares comoRoma, Pisa, Florencia…y encompañía de sus profesoresJosé Mª G. Solana y GabrielRamón.

Y el 22 de febrero llegó elcomienzo del tiempo cuaresmal.Y, como manda la tradición,pasamos todos, grandes y peque-ños para recibir un baño dehumildad y buenos propósitosbajo el símbolo de la ceniza.Fueron momentos también devivencia espiritual y puesta apunto con una invitación denuestro Padre san Agustín: “Vol-ved al corazón”. También porestos días retiro comunitario.

Y en el afán de adaptar yadecuar cada día más nuestrocentro a las necesidades realesde todos, la dirección del centro

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Grupo Tagaste

Grupo Scout “La Flecha”

Día Escolar de la No Violencia

Camilo informa

ha llevado a cabo ciertas remo-delaciones y arreglos de inte-rés, como ha sido la instalaciónde pasa manos en las escalerasde acceso al colegio, así comocarteles indicadores de nuestradirección, pues todavía algunoscreen que no tenemos número;pues sí, ahora está bien indica-do: Avda. San Agustín, nº 113.

El 3 de marzo se llevó a cabopor parte de los profesores delcentro una cena homenaje a losprofesores Gloria Martín yPedro Blanco con motivo de sureciente jubilación. Una muestradel agradecimiento y el cariño

de todos por su entrega durantetantos años (¡¡¡toda unavida….¡¡¡) a la tarea de la edu-cación. El P. Pedro, se jubilapero sigue en la brecha con múl-tiples actividades musicales enla comunidad educativa, asícomo desempeñando una mag-nífica tarea como responsable denuestra Residencia de Mayores.Por cierto, y cuando estamos apunto de concluir esta crónica,ya se pueden ver en el colegiolos carteles que anuncia un espe-cial CONCIERTO DE SEMA-NA SANTA para el día 31 demarzo a cargo del Coro SanAgustín, bajo la batuta de PedroBlanco. Un día antes tambiéndarán un concierto en la pobla-ción vasilloselatana de Alaejos.

Del 9 al 11 de marzo un gru-po de monitores que llevan losgrupos Tagaste y Casiciaco sehan desplazado hasta el alber-gue agustiniano “Molino deMadaura” en Archidona (Mála-ga), acompañados del queescribe estas líneas, para parti-cipar en un curso de formaciónde monitores de la ProvinciaAgustiniana Matritense juntocon otros jóvenes, hasta 40, dediversos colegios y parroquias.

Y voy terminando esta cró-nica en estos últimos días de

EL JAMÓN DEL ABUELOEspecialidades en Ibéricos

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Tel/Fax: 91 344 00 60

Cartel Concierto de Semana Santa

marzo en los que seguimos cla-mando al cielo que derrameagua sobre nuestras tierras, ynada, ni gota.

Del 22 al 26 de este meshemos celebrado la SemanaAgustiniana Vocacional con ellema JESÚS ESTÁ BUSCÁN-DOTE, así como una conviven-cia de catequistas de PrimeraComunión. Seguimos pidiendotambién al Señor, no sólo quenos mande agua, sino que sigahabiendo jóvenes decididos yvalientes que quieran apostarpor el Reino y puedan entregarsu vida en una Vocación decompromiso y de riesgo.

Pongo el punto final con lavista puesta en nuestro próxi-mo encuentro de AntiguosAlumnos para el próximo día29 de abril, en plena Pascuaflorida.

Y, un poco más adelante,os invitamos a participar enel tradicional Día Agustinia-no, el 5 de mayo en el Monas-terio de El Escorial. Luego nodigas que no lo sabías… Unabrazo.

JESÚS TORRES.

En ruta

Edificio del Ayuntamiento de Palacios del Arzobispo.

Hay pueblos que, imper-ceptiblemente, nos vancreciendo raíces con el

paso de los años. No arraigamosen ellos; nos arraigan: son tan-tos los momentos evocados, tan-tas las vivencias... Un buen díamiramos atrás y somos incapa-ces de aislar nuestros recuerdos;nuestras propias memorias semezclan con aquellas que noscontaron. Es momento, enton-ces, de acrisolar el recuerdo,porque en él está la historia ytodo pueblo merece que secuente la suya, historia que noes una, sino muchas: la de cadahombre o mujer que un día habi-tó sus suelos.

SITUACIÓNPalacios del Arzobispo se

encuentra situado en una hon-donada que lo protege de los frí-os vientos que azotan sus invier-nos, vientos que lo habríandestruido de haberse asentado ala intemperie sobre los más de800 metros que lo encumbranpor encima del nivel del mar.

33 kilómetros lo separan deSalamanca, la capital, y suscoordenadas son, aproximada-mente, las siguientes: 41º 9’56,0802’’ latitud norte y 5º 53’24,1362’’ longitud oeste.

El municipio pertenece a lacomarca de Tierra de Ledesma,en cuyo borde septentrional seenclava, y, asimismo, al obispa-do salmantino.

TOPONIMIAParece ser que el topónimo

Palacios, muy abundante en tie-rras castellanas, como compro-bará quienquiera que lo deseecon un simple vistazo a cual-quier mapa municipal, no serefiere a residencias reales o acasas suntuosas, como se podríapensar en principio. Señalan losestudiosos (Jairo Javier GarcíaSánchez, Atlas toponímico deEspaña, y Fernando Jiménez,De Salamanca: arte y otrascosas) que procede del latínpalatium, de donde deriva nues-tra palabra castellana, y desig-naba casas grandes de labranza.Estas eran, eso sí, mejores queel resto de las edificaciones rús-ticas medievales debido a sucarácter más lujoso, a su mayorvolumen arquitectónico y alhecho de tratarse de casas teja-das en lugar de viviendas contecho vegetal.

El sintagma preposicionaldel Arzobispo sería así un geni-tivo posesivo que indicaría lapropiedad de los “palacios” porparte del Arzobispo de Santia-go, probablemente D. Francis-co Blanco Salcedo, pues en elLibro de los lugares y aldeasdel Obispado de Salamanca(1604-1629) se dice: «Aquí ayun pósito de trigo para pobres[...] que al principio dexó elseñor Arcobispo Don FranciscoBlanco [...] y le augmentóAlonso Maldonado...». Esseguro que estaban emplazadoscerca de la iglesia, pero nadaqueda de ellos, sin embargo,que nos permita cerciorarnos desu uso, aunque parece lógico

suponer que se trataba de resi-dencias de recreo adonde huir“del mundanal ruido”.

Y sin embargo, estas misnotas no son sino pinceladas másguiadas por la imaginación quepor el estudio sistemático, asíque, para un estudio científicoexhaustivo, remito a los trabajosde D. Ignacio Coca Tamame,hijo del pueblo.

GENTILICIOResulta curioso reseñar cómo

se ha venido a asentar entre lasnuevas generaciones un gentili-cio espurio.

En principio, a los habitantesde Palacios se les llamaría “pala-ciegos”, pero resulta que haceaños tuvo lugar un incidente quevino a introducir un nombreextraño. Parece ser que, por razo-nes que hoy desconocemos ynadie recuerda, se produjo unrifirrafe entre unos del pueblo deal lado y otros de este. Como laescaramuza dio lugar a insultos,los de aquí llamaron a los otros“matacabras” (no sabemos conqué sentido) desde ese momento

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PALACIOS DEL ARZOBISPO

En ruta

en adelante y, en respuesta, losdel otro pueblo llamaron a losde este “belitres”, insulto quesignifica ‘pícaro, ruin y de vilescostumbres’. Pues bien, el tiem-po pasó y ya sabemos lo inesta-bles que son las vocales pretó-nicas, tan sujetas a desgaste yproclives a confusiones. El casoes que, probablemente por influ-jo de la vocal tónica cerrada, elcambio se produjo (/e/>/i/) yempezó a decirse “bilitres”.Además, con el paso de lasgeneraciones, el significado ori-ginal ha llegado a olvidarse, demodo que hoy en día los jóve-nes se autodenominan “bilitres”sin ningún sonrojo.

ORÍGENESE HISTORIA

De origen incierto, la histo-ria de Palacios del Arzobispocomienza, como la de los héro-es antiguos y los pueblos míti-cos, in medias res, pues no dis-ponemos de informacionesescritas relativas a este lugaranteriores al siglo XVI.

Si nos retrotraemos a losescritos de Estrabón, hemos desituar a los vettones (pueblo pre-rromano de origen celta emi-nentemente ganadero) como losmás antiguos pobladores cono-cidos de estas tierras. Ahorabien, como más al norte se asen-taron los vacceos (pueblo fun-damentalmente agrícola descen-diente de la cultura Hallsttat),quienes posteriormente seextendieron al Sur, bien pudoser Palacios una zona de con-tacto entre ambas tribus celtas.Con todo, no se conservan res-tos de castros, necrópolis niverracos que ofrezcan indiciosde su presencia, aunque sí exis-

tan pruebas arqueológicas enzonas cercanas, lo cual quizáconfirme la hipótesis del carác-ter fronterizo de estas tierras.

Parece ser, si nos atenemos alos testimonios de los historia-dores romanos, que esos pue-blos se sometieron rápidamentey sin apenas oponer resistencia.Es probable, puesto que no setrataría de pueblos excesiva-mente belicosos, aunque resul-ta dudoso que, para defender losuyo, no utilizaran siquiera laguerra de guerrillas como ellusitano Viriato.

Durante la dominaciónromana, esta zona formó parte,primero, de la Hispania Ulteriory, más adelante, bajo Augusto,de la Lusitania. Por tanto, nosería de extrañar que hubierarecibido la influencia de losromanos de Bletisa (actualLedesma).

Durante la Alta Edad Media,debido a la presencia musulma-na, estas tierras quedaron semi-despobladas.

Un dato digno de reseñar esla temprana presencia (en épocaanterior a 1181, al parecer) de laOrden de Santiago por estosparajes. Así parece atestiguarloel escudo conservado sobre elarco contiguo a la iglesia.

Uno de los primeros datostextuales, de 1592, aparece enel libro de fábrica de la Iglesiade San Juan Bautista. Y ya enel Libro de los lugares y alde-as del Obispado de Salamanca(1604-1629) aparece Palaciosdel Arzobispo así descrito:«Esta villa dista de SalamancaÇinco leguas, es de quarenta yquatro veÇinos y era del arÇo-

bispado de Sant Tiago, aora esde Salamanca...».

Además, en la Historia deSalamanca, de Manuel Villar yMacías, encontramos las siguien-te información: «Durante el pon-tificado de Clemente VII (1523-1534), se resolvió a favor de laSede salamantina la posesión delas villas de Vilvestre, Yecla,Vitigudino y Palacios del Arzo-bispo; fué don Francisco deBobadilla (1510-1529) el primerobispo que las poseyó».

HECHOS HISTÓRI-CO-LEGENDARIOS

De labios de mi madre, me hallegado una historia que le contó suabuela, Luisa Rivas Fernández delCampo, hija de Josefa y de Santia-go, todos ellos naturales de Pala-cios del Arzobispo. Aella, a su vez,se la había relatado su abuela(natural también de este pueblo)cuando era pequeña y, desdeentonces, se erigió en guardiana ytransmisora de los hechos maravi-llosos que le fueron narrados.Debió de suceder hacia 1833 y,según dicen, allá por la zona de lahoja sembrada, que aquel año esta-ba por la parte que llaman “de San-chomalo”. Un buen día de mayo

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El Molino

En ruta

(o, más bien, una buena noche)comenzó a producirse un sucesosobrenatural que se repitió en lasnoches sucesivas: una extraña luzvenía a posarse sobre los camposdonde se mecía el trigo; allí sedetenía unos minutos y luego,arrebatadamente, desaparecía.

Los hombres, dispuestos adesentrañar el misterio, se diri-gieron hacia el lugar armados conguadañas, hoces y tornaderas.Pero justo cuando se acercaban,la luz se dividió súbitamente endos y cada una de las luces escin-didas desapareció en el horizon-te, después de recorrer a ras lasmieses, paralela a la otra. —Vámonos —dijeron entonces—;esto no es cosa de hombres.

Meses después comenzabanlas guerras carlistas y aquellasgentes de campo interpretaron elextraño fenómeno como el vati-cinio de una España que se que-braba, una señal divina de lasluchas que se anunciaban entrecarlistas e isabelinos.

MILAGROSMe cuentan que cuenta la

leyenda que tuvo lugar en Pala-cios del Arzobispo un aconteci-miento milagroso. Dicen queallá por el siglo XVI, en la zona

que llaman “de la Vega”, habíaun toro semental que, por razo-nes desconocidas, abandonaba lamanada todos los atardeceresdurante al menos dos o treshoras. Ante hecho tan frecuentey a la vez tan inusitado, el mayo-ral y encargado de la ganaderíadecidió esclarecer los entresijosdel enigma, quizá sospechandoque este toro, en lugar de haber-se enamorado de la luna, sehabía prendado de los encantosde la puesta de sol. Pero no eraese el caso: el toro se alejaba y,tras saltar la pared de piedra quelo separaba de la parcela colin-dante, empezaba a escarbar latierra, como quien dice, con uñasy dientes, que en toro es másbien con cuernos y pezuñas.Después, fatigado, volvía a ladehesa a reunirse con la manada.Visto el comportamiento del ani-mal, el mayoral, ayudado por losvaqueros, se dispuso a desente-rrar el misterio ahondando elagujero esbozado por el astado.Pues bien, a poca profundidadhallaron los hombres una imagende la Virgen tallada en piedra. Laescultura, de un metro de alturaaproximadamente, sujetaba ensus brazos al Niño. Más adelan-te, justo en ese lugar, se erigióuna ermita como señal de honray veneración a la llamada, desdeel día de su descubrimiento, Vir-gen de la Vega. Dicen que seconvirtió en lugar de peregrina-je y a él acudían las gentes delpueblo en procesión al menosuna vez al año. Nada queda ya,salvo unas exiguas ruinas mus-gosas, del enigmático santuario.La imagen original, hoy tambiéndesaparecida, fue conservadadurante lustros en la iglesiaparroquial de Palacios del Arzo-bispo y todos los años, en mayo,

se llevaba en romería a los ves-tigios de la ermita para conme-morar el milagro.

Al final, haciendo ciertoaquello de que las palabras sonmás duraderas que el bronce,solo una copla se ha conservado:

Las mocitas de Palaciosllevan mantilla de sedacuando van en procesióna la Virgen de la Vega.También en forma de cuarte-

ta asonantada o tirana la recogeen su Cancionero salmantino,con ligeras variaciones propiasde la transmisión oral, DámasoLedesma.

LUGARES ÉPICOSEn las inmediaciones del

pueblo, por la zona que llaman“de la Vega”, se hallan variostesos. Destaca especialmente elque llaman “el teso del castillo”,pues, según cuenta la leyenda,daba acceso a un túnel cuyasgalerías subterráneas venían adesembocar, por un lado, en elcastillo del Asmesnal y, porotro, en el castillo de Peñausen-de. Se dice que fue excavado en

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Procesión de la Virgen, años 50

Arco que comunica la iglesia con el frontón viejo

En ruta

la época de la ocupación musul-mana (en tiempo de los moros,como comúnmente lo denomi-nan los lugareños), tal vez amanos de los pueblos islámicos,si bien podría haber desempe-ñado un papel importante en laReconquista. Cierto es que en loalto del teso, y más concreta-mente en una de sus caras, laque mira con languidez aponiente, se halla una gran rocaque semeja la entrada a una gru-ta subterránea. Sin embargo,nadie parece haber sido capaz,al menos desde hace siglos, decomprobar la veracidad de talhistoria y no se conservan fuen-tes documentales que atestigüenla existencia del castillo o la delas diversas entradas y salidas alos pasadizos que, según dicen,recorrían decenas de kilómetrosbajo tierra.

Se cuenta, además, que laimportante presencia mora sehace especialmente palpable enlos restos de pilas labradas en lapiedra que aún se vislumbran enlo alto del teso, pues en ellashabrían abrevado sus caballoscada noche, a resguardo de larapiña a la que se habríanexpuesto de haber permanecidoen el valle donde pacían y ramo-neaban durante el día.

LA PLAZAEn el corazón del pueblo está

ubicada la plaza, justo al final deuna loma que inicia un abruptodeclive al suroeste y desciendebruscamente al oeste. En sumargen occidental, la plaza seencarama hasta 3 metros sobreel nivel del suelo antes de caeren una empinada pendiente dehasta 50º. Esa afilada escarpaconvierte, pues, este extremo enel borde de un abismo dondePoniente deja de ser un puntocardinal o un mero espacio espi-ritual, ya que parece advertirnosde que puede convertirse en unocaso real.

La plaza constituye el centroneurálgico del pueblo y marca elpunto de escisión que lo divideen sus dos barrios: el nuestro yel otro. Y para todos, sean delbarrio que sean, el de arriba o elde abajo, el que no es el suyo es“el otro barrio”.

En el corazón de la plaza,frente a la iglesia, dormita elmoral, aguardando quizá, en susueño centenario, “otro milagrode la primavera”. La asociacióncultural La Morera, fundada ensu día por D. Manuel José Gon-zález, fue bautizada así en honora tan emblemático árbol.

LA IGLESIAEn el extremo norte de la pla-

za, mirando al Sur, se sitúa lajoya del pueblo, la iglesia de SanJuan Bautista, asentada sobre losrestos de un antiguo templorománico del que aún perduraparte del muro de poniente. Seconserva la sobria portada romá-nica con sus arcos de mediopunto y sencillos pero elegantescapiteles. Esta habría sido la

puerta de entrada a la primitivaiglesia románica, con perfectaplanta de cruz latina.

La portada actual, enmarca-da por dos grandes pilastras, es,en cambio, de sereno estilobarroco herreriano.

No fue tan magna obra arqui-tectónica hecha de una sentada.El distinto color de la piedra endeterminadas zonas denota lasdiversas fases de construcción,ya que la iglesia se levantó entres etapas.

Sobre ella se dice en el Librode los lugares y aldeas del Obis-pado de Salamanca (1604-1629): «...tiene una yglesia detres naves con unos arcos decantería y una muy graÇiosacapilla con un retablo de SantJuan Baptista a cuyo título estádedicada, tiene muy buenasymágines, muy buena sacristía ycon buenos ornamentos y buenacruz de plata...».

Y digno de especial menciónes el retablo del Altar Mayor,mudo testigo elocuente de júbi-los y penas. Durante más de tressiglos nos ha acechado este mag-nífico retablo escénico de estilo

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Moral frente a la iglesia

Iglesia San Juan Bautista

En ruta

barroco decorativo, resignadavíctima de múltiples expolios.

Mis recuerdos están íntima-mente ligados a este lugar, puesen la pila bautismal de este tem-plo fui bautizada y en su altarrecibí la primera comunión.

Evoco aquellos domingos enque los niños y las niñas ayudá-bamos a misa. Una de las tareasimplicaba el ascenso al campa-nario. Recuerdo que se subía poruna angosta y umbrosa escalerade caracol que se iba estrechan-do y oscureciendo cada vez mása medida que se ascendía. Y jus-to antes de recibir la cegadoraluz del sol en la cara, había unmomento de desorientación yangustia.

La iglesia se ha ido restau-rando paulatinamente desdehace unos quince años. En elproceso ha participado un equi-po dirigido por D. José ManuelTeijón Escudero, cuyas notas heconsultado para la elaboraciónde este artículo.

LOS DOSFRONTONES

Al sureste de la plaza estásituado el frontón nuevo, que elviejo era la pared aneja a la igle-sia a través de un arco de medio

punto, quizá exiguo resto de untemplo mayor o albergue deperegrinos, según dicen.

En el frontón viejo, aún man-tienen los quintos la tradición deplasmar sus nombres con pintu-ra de colores diversos, lo cual, alo largo de los años, a base dereescrituras, ha venido a formaruna especie de palimpsestoextraño donde las huellas gráfi-cas de los predecesores, ya ile-gibles, se han ido borrando natu-ralmente por la exposicióncontinua a las inclemencias deltiempo. Sobre sus piedras secu-lares, se vuelve así entelequia lamemoria pictórica de los mozosy mozas cuando dejan atrás surito iniciático.

El frontón nuevo, grande ysólido, se construyó siendoalcalde Malaquias Prieto Rivas.Se ha visto sometido a diversasmodificaciones y reformas a lolargo de los años hasta conver-tirse en la magnífica obra deingeniería que es hoy. Se edifi-có sobre lo que llamaban “lahuerta del cura”, pues se tratabade un terreno anexo a la casacural donde el párroco solíaplantar hortalizas y flores. Enella, según recuerdan algunos,solía pasearse el sacerdote mien-tras, en voz alta, iba compo-niendo sus sermones.

Este frontón no solo ha ser-vido para que adolescentes devarias generaciones pasáramoshoras y horas jugando al fronte-nis, sino que, en su día, losmozos jugaban aquí a la pelotacon la mano desnuda. Y hastallegó a albergar, en las fiestas,exhibiciones de profesionales,venidos de otros lugares parasatisfacer el goce visual decuantos disfrutaban contem-plando su destreza.

LAS ESCUELASEste edificio blanco que el

lector puede contemplar en lafotografía es la escuela a la queasistí. Antes se llamaba ColegioPúblico San Juan Bautista, peroen aquellos años se le cambió elnombre para rendir homenaje alque, según dicen, fue el mejormaestro que tuvo el pueblo: D.José Mesonero Moro. En aqueltiempo los muchachos y lasmuchachas debían trabajar des-de edad temprana, con lo cual nosolo iban poco a la escuela, sinoque tenían que abandonarlademasiado pronto, antes siquie-ra de haber podido aprender losrudimentos de la lectura, laescritura y el cálculo, tan nece-sarios para defenderse en lavida. Por eso, D. José Mesonerodedicaba las noches a enseñar aniños con abandono escolartemprano, a mozos y hasta aadultos, siempre de formaaltruista, sin cobrar absoluta-mente nada.

Hoy las escuelas están cerra-das como tales y su edificio essede de la Asociación de Mayo-res: 95 socios capitaneados porsus presidentes, Francisco Gar-cía Hernández y Francisco Gar-zón Mezquita.

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Las escuelas

Frontón nuevo

En ruta

FIESTAS PROFANASY RELIGIOSAS

Fiesta importante era (aún loes) el Ofertorio, que se celebra-ba siempre el primer domingode octubre. Se trata de un actode acción de gracias a la Virgenpor las cosechas recibidas. Mecuentan que cuatro señoras, casisiempre por voluntad propia,eran nombradas madrinas de laVirgen del Rosario. Cada madri-na debía ofrecer un bollo mai-món previamente cocinado, bienindividualmente, bien de formacolectiva, siguiendo la recetatradicional. La ofrenda se hacíapor la tarde, después de habersacado la Virgen en procesión.Todo el mundo daba tambiénalgo: dinero, los que podían; losque no, llevaban entonces unacuartilla de trigo, media fanegao una entera, según se podía. Yhasta los había que daban más;esto lo hacían los más pudientes,llamados “ricos”. Las ofrendasse ataban a un palo al que lla-maban “el ramo” y luego, aligual que los bollos ofrendados,se subastaba. Lo que se sacabalo guardaba el señor cura paraarreglos de la iglesia (correr eltejado, tapar una grieta...). Laceremonia concluía con cánticosy un baile de tamboril.

La fiesta más importante hasido siempre la de san JuanBautista, patrono del pueblo,que se celebra el 24 de junio.Esa noche, ancestrales ecospaganos y orgiásticos parecíanrevivir tan solo un momentoantes de ser purificados por elfuego. La pira, a modo de alam-bique, destilaba los miedos yacendraba el alma. Las gentescelebraban el solsticio de vera-no con danzas y saltos frenéticosen torno a las hogueras hastacaer exhaustas en una apoteosiscatártica. Luego, ya de madru-gada, era costumbre que losmozos fueran de ronda por elpueblo poniendo ramos en lasventanas de las mozas hasta elamanecer. También las mozas selevantaban entonces alboroza-das para comprobar si había unramo en su ventana y para verbailar el sol. Comenzaba enton-ces un día de conmemoracióneminentemente religiosa parahonrar el nacimiento de san JuanBautista, en honor del cual secelebraba una Misa Mayor a laque acudía todo el pueblo. Por latarde se bailaba al son de la flau-

ta y el tamboril. El día concluíacon la verbena.

Entre sus fiestas profanasdestaca el Carnaval. Parece serque no siempre gozó de plenaaceptación, pues, tras la guerra,se prohibió su celebración hasta1975, si bien es cierto que, yadesde mediados de los años 50,dejó de respetarse tal prohibi-ción. Se dice que la razón de talveto no residía en realidad en sucarácter festivo y poco religioso,pues, a pesar de su origen paga-no, en todo momento estuvoplenamente integrada en la tra-dición religiosa cristiana y siem-pre fue tolerada por la iglesiacatólica. Si se proscribió fuemás bien, según me contó mi

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Retablo y Altar Mayor

Música en las fiestas del pueblo, años 60

Cristo que se llevaba antiguamente a los entierros

En ruta

abuelo, para evitar escaramuzasy agresiones, especialmente fre-cuentes durante la posguerra,pues, tras las máscaras, los agre-sores podían actuar con absolu-ta impunidad.

La celebración del Carnavalduraba tres días. El domingo decarnaval eran principalmente lasmujeres quienes se disfrazaban.Solían pasearse por la plaza ata-viadas con las sayas antiguas desus abuelas y los famosos cru-ceros, pañuelos grandes al esti-lo de los mantones de Manila yasí llamados porque se atabancruzados a la cintura. El luneslas mozas y los mozos se disfra-zaban de pobres o gitanos, quese decía, con ropas viejas yandrajosas. Así, envueltos enharapos, salían a pedir por lascasas del pueblo. El martes decarnaval se reunían las gentes enla plaza y se sacaba “la vacabayona”. La vaca bayona con-sistía en un armazón de varas demadera, que constituía el esque-leto, el cual se tapaba con arpi-

llera o pellejos de animales y sele ataban unos cuernos de vaca.Una persona, por lo general elmozo más aguerrido y jaranero,se metía en su interior y embes-tía a diestro y siniestro contratodos los circundantes: unos laazuzaban, otros la hostigaban,algunos la citaban y hasta ledaban unos pases, pero la mayorparte huía gritando ante las fero-ces acometidas de sus astas. Nose sabe cuál es el origen de estatradición y no hay, que se sepa,documentación al respecto. Pue-de que su origen esté en la cos-tumbre de correr vacas en estosdías y hasta quizá haga alusióna los hecho acontecidos en 1808,que comenzarían con la ocupa-ción francesa de Pamplona el 16de febrero de ese año, seguiríancon las abdicaciones de Bayona,el 5 de mayo, y terminarían el 7de julio de 1808 con la Carta deBayona. No olvidemos, además,que hay constancia del paso porPalacios del Arzobispo, en laépoca de la invasión napoleóni-ca, de un ejército de dragones

número ocho. Incluso hay unacita, de 1811, acerca de la muer-te, en el término del pueblo, dedos oficiales del mencionadoregimiento a manos de guerri-lleros. Bien podría ser, pues, lavaca bayona una conmemora-ción de las hostilidades con lasque hubieron de lidiar y, comohabría dicho alguno de los vie-jos del pueblo, “¡cagüen,cagüen!, no digo yo que no sea”.

El caso es que la celebraciónde las carnestolendas no acaba-ba ahí: el último día se recitabatambién lo que llamaban la loa,especie de trova o composiciónen verso cuyo argumento estababasado en asuntos que hubieranacontecido en el pueblo. Lasiguiente, dedicada a tres mozossolteros que no encontrabanesposa, constituye un buenejemplo:

Olegario y Eladioy Adelio, el zapatero,piensan ir hasta Mayaldepa’encontrar novia, primero.Si en Mayalde no la encuen-tran,piensan seguir hasta ElCubo,mas si en el Cubo no cazanya no casan en ninguno.El antruejo concluía con un

gran baile en la plaza en el quese tocaba el tamboril.

EL CANZARÓNAntaño, molino de agua; hoy,

despojo del tiempo. El Canza-rón, que fue otrora un molinohidráulico, probablemente de losllamados “de caz”, hace muchoque se convirtió en abrevadero.Sus piedras musgosas entre loszarzales mantienen, no obstante,el recóndito encanto de las rui-

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Pila bautismal Antiguo pórtico de entrada a la Iglesia

nas, y la contemplación de sustranquilas aguas infunde en elánimo una paz atávica.

EL PUEBLO HOYPalacios del Arzobispo es un

lugar sencillo, sin vanidad,dedicado a la agricultura y a laganadería como tantos puebloscastellanos. El éxodo rural hadejado reducida su población,cada vez más envejecida, a unatercera parte del número dehabitantes que un día llegó aalbergar. Si bien es cierto que elpueblo, que parece aletargadoen invierno, despierta en prima-vera con la llegada de sus hijospródigos, que regresan parapasar el verano. La emigracióny el paso del tiempo hicieron,además, desaparecer diversosoficios: sastre, modisto, modis-ta, capador, herrero, cabrero...También la panadería desapare-ció, y el taxi, símbolo demodernidad cuando se puso enlos años 60. Las dos fraguas,hoy transformadas en talleres,son ejemplo de vitalidad ypequeña industria floreciente.

Una tienda de ultramarinos ydos bares son de los pocos luga-res de reunión y asueto que hay.El único establecimiento nuevoes la farmacia, regentada por unlibanés. Perdura el molino,como no podía ser menos en unpueblo agrícola y ganadero.Antiguo alumno del ColegioSan Agustín de Salamanca es elhijo del molinero, Antonio Ama-lio Prieto Sánchez. Y por lasaulas del San Agustín han pasa-do también otras personas vin-culadas de algún modo a estepueblo: Juan José, David, Mar-ta, Alejandro, Roji, Juan Agus-tín, Daniel...

PENÚLTIMASPALABRAS

Hay pueblos para vivir ypueblos para morir, pero ni sonlos mismos para todos ni coinci-den siempre. Hay también sitiosen los que nos nacen y lugaresadonde nos llevan de cuerpopresente, solo para descansarper secula seculorum. Mi bisa-buelo, que venía de tierras de

Sayago, llegó a morir a estoslares tras el cuerpo de su mujer.Viudo y sin esperanza de largavida, sobrevivió otros treintaaños en este municipio. La abue-la Luisa, mi bisabuela, naturalde Palacios del Arzobispo y des-cendiente de los primeros pobla-dores de estos terruños, terminósus días en la capital salmantina.Su hijo, sin embargo, mi abuelo,el señor Luis, el taxista del pue-blo (los pueblos tenían entoncesun par de coches), quien, por cir-cunstancias de la vida, vino anacer en zona zamorana, aquí seganó el pan como buenamentepudo, aquí murió y en este lugaryace, acompañado del puebloque en su mayor parte lo respe-tó y lo quiso hasta el último día.Ojalá que este mi retorno sea devida y no de muerte.

VALE.INMACULADA

DE LA NOGAL PANERO

(Antigua alumna del ColegioSan Agustín de Salamanca)

En ruta

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El Canzarón

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Saber y leer

ACADÉMICA PALANCA DE SU VISIÓN DE CASTILLASALAMANCAY MIGUELDE UNAMUNO

El pasado 31 de diciembre secumplieron los setenta y cincoaños de la muerte en Salamancade don Miguel de Unamuno. Aun-que vasco de nacimiento, Una-muno fue salmantino de adop-ción. En la ciudad del Tormes, quetanto amaba, vivió muchos años yallí murió. Unamuno fue profesorde griego, filósofo, poeta, perio-dista, escritor en suma. Buscadorincansable de la verdad, su obradespierta interés todavía en laactualidad. Voy a centrarme en lavisión que Unamuno tenía deEspaña, de la sociedad y de lapolítica de su tiempo. En tiempode crisis económica y de identidadcomo el nuestro es bueno recordarla visión de España que tenían losgrandes maestros de la primeramitad del siglo XX. Para tener unavisión global de su pensamientoes bueno acudir a sus ensayos,obras filosóficas, a sus novelas ya los testimonios de personas queconvivieron con él.

UNAMUNO EN SUJUVENTUD (1864-1891)

Miguel de Unamuno y Jugonació en Bilbao el 29 de sep-tiembre de 1864. Tradición yespíritu religioso son las notaspredominantes del ambiente quele rodea en sus primeros años.Ante la temprana muerte de supadre, serán su madre y sus abue-las quienes se encargarán de sututela. En su Bilbao natal presen-ciará el desenlace de la terceraguerra carlista, recordando des-pués románticamente los episo-dios de la lucha. Fruto de aque-llas impresiones será su primeranovela, Paz en la guerra, publi-

cada en 1897. Pensaba utópica-mente que era posible unir en paza todos los españoles. La nostal-gia de aquella guerra le hizo cre-er que la lucha era un medio deconocerse, de quererse, no unamáquina de muerte.

En su primera juventud, Una-muno fue vasquista, vascófilo yde sincera y profunda religiosidad.Pero durante su estancia en Madridpara realizar estudios universita-rios (1880-84) recibió la influenciadel krausismo y de la filosofíapositivista. El racionalismo hizoque su fe se tambalease, junto a susprincipios políticos. No obstante,todavía mantenía sus conviccionesliberales, quizá la idea política quetuvo siempre más clara.

A su vuelta a Bilbao, con eltítulo de doctor, Unamuno era unhombre distinto. Durante seisaños intentó en vano aprobar opo-siciones. En estos años de estudioe inquietud por el futuro se va fra-guando su nuevo pensamientopolítico. Por fin, en 1891, a losveintisiete años, obtiene el núme-ro uno en unas oposiciones a lacátedra de Griego. Elige Sala-manca, ciudad que “no le disgus-

ta porque es tranquila y se comebien en ella”.

UNAMUNO LLEGAASALAMANCA

La llegada a Salamanca signi-ficaría para él un auténtico rena-cimiento. Pronto se integra en loscírculos culturales de la ciudad yestá contento con su labor en lacátedra. Años después confesaríala euforia de aquellos momentoscon estas palabras: “Si continua-se algún día escribiendo la histo-ria de mi vida, saltaría desde losdieciséis años….hasta los veinti-siete por lo menos, en que empe-cé mi vida académica en esta Uni-versidad de Salamanca (Andanzasy visiones españolas, tomo VIII,p. 311, enero de 1914).

Unamuno en 1891 profesa lasideas liberales, la soberanía popu-lar y el antimonarquismo. Prontova teniendo fama como defensorde posiciones avanzadas. En 1894publica en la revista bilbaína Lalucha de clases una carta abiertaen la que declara su adhesión alpartido socialista. Por estas fechasaparece también su ensayo Entorno al casticismo, en el que cri-tica cierto concepto tradicional de

Estatua Miguel de Unamuno en Salamanca

Saber y leer

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entender España. Este ensayo leda a conocer a nivel nacional. En1895 estuvo a punto de ser elegi-do concejal de Salamanca por elpartido socialista. Pero no tarda-ron en aparecer sus primeras crí-ticas al marxismo, al que tilda de“materialista y grosero” y a susseguidores de “fanáticos neciosde Marx”.

La crisis religiosa que sufrióen marzo de 1897, que le llevó aretirarse durante tres días en elconvento de los dominicos deSalamanca, significó un nuevogiro en su visión del mundo.Parece ser que la causa inmedia-ta de la crisis fue la muerte de sutercer hijo, hidrocéfalo, pero enel fondo hay un desencanto vital.A raíz de esta crisis se apartadefinitivamente de las “pedan-tescas fórmulas del socialismollamado científico de Marx”.

LA IMPORTANCIADE SALAMANCA EN ELPENSAMIENTO DEUNAMUNO

En octubre de 1900 es elegidorector de la Universidad de Sala-manca. Pocos días después acudea Bilbao para dar una conferen-cia, que comienza con estas pala-

bras: “El vascuence se extingue,tenemos que olvidarlo”. Aunquedominaba perfectamente el vas-cuence, Unamuno pensaba que eraun impedimento para el progresode la cultura española y el libera-lismo. Ahora defendía “la dimen-sión vasco-española del País Vas-co”, en expresión del historiadorJ. P. Fusi. Expone que la historiavasca se confunde con la españo-la; los vascos tienen un espírituuniversal y no localista, que les hallevado a protagonizar dos gran-des gestas de la historia española:la conquista de América y la fun-dación de la Compañía de Jesús.

Se ha escrito mucho sobre lacastellanización de Unamuno. Elprofesor L. González Egido hademostrado la importancia deSalamanca en el pensamiento una-muniano. Si para el ilustre escritoren España existe un paisaje, es elpaisaje castellano; si hay una len-gua, es la castellana; si hay unahistoria, es la movida por Castilla.No hay que olvidar que Salaman-ca fue la “académica palanca” desu visión de Castilla. Se proponedefender la dignidad de Españaafirmando la personalidad ibéricay pasando del empeño de europei-zar España al de españolizar Euro-pa. Dirá que cada vez se siente

más español y más antieuropeo,hasta llegar a exclamar aquel“¡Que inventen ellos!”. Desprecia-rá todo lo que venga de Europa,incluida la ciencia, que según él esfruto del proceso racional. En cam-bio, propondrá el redescubrimien-to de la cultura española y ensal-zará la figura de san Juan de laCruz frente a la de Descartes, por-que los grandes místicos españolesdel siglo XVI son tan europeoscomo los jansenistas y cartesianosfranceses.

Por sus ataques a la monarquíade Alfonso XIII es destituido de sucago de rector en 1914. Al produ-cirse posteriormente el golpe deEstado de Primo de Rivera escribeun duro artículo contra el dictador,titulado El deber del profeta.Como consecuencia, recibe laorden de salir a exilio en febrero de1924. El lugar de su confinamien-to es la isla de Fuerteventura. Perohuirá a París y más tarde a Henda-ya, cerca de la frontera. Desde eldestierro continuará con sus ata-ques a Primo de Rivera. Su com-bate se personaliza: se trata de unalucha entre él y otro Miguel, el dic-tador. “Soy yo quien persigue aPrimo, no él a mí”, llegará a decirburlonamente el viejo liberal. En elexilio escribirá Cómo se hace unanovela, la más autobiográfica detodas sus obras. El protagonista, U.Jugo de la Raza, trata de autoafir-mar su existencia histórica, de lamisma forma que Unamuno inten-ta que su actuación pública seaalgo más que la representación deun papel inauténtico. Al igual quelos personajes de sus novelas, Una-muno se siente proscrito. Tiene unagran nostalgia de su tierra vasca, deSalamanca, de España. Harto denombres extranjeros, se recrea enla eufonía de esdrújulas y vocalesabiertas en esta poesía, escrita el 12de junio de 1928:Billete Libre Circulación

Saber y leer

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“Ávila, Málaga, Cáceres,Játiva, Mérida, Córdoba,Ciudad Rodrigo, SepúlvedaÚbeda, Arévalo, Frómista,Zumárraga, Salamanca,Turégano, Zaragoza,Lérida, Zamarramala,Arramendiaga, Zamora,sois nombres de cuerpo entero,libres, propios, los de nómina,el tuétano intraductiblede nuestra lengua española”Se le hace insoportable la leja-

nía de su querida Salamanca, que,como alguien ha señalado, es la“gran metáfora de Unamuno”.Asía canta a “su ciudad” en 1927:

“Te llevo en mí con mi vida,Salamanca,y el aire claro de Gredosdejó en mí verdad de Espa-ña…”“Del Almanzor en la cumbre,Salamanca,aprendí verdad-justicia,que es religión de la patria”.De la soledad del destierro sur-

gió el Del sentimiento trágico de lavida, su obra más conocida enEuropa, en la que afirma que solola solidaridad humana puede darsentido a la vida del hombre.

EL FIN DE SU VIDA ENSALAMANCA

A la caída de Primo de Riveravuelve a España. Es el mes defebrero de 1930 y en la PlazaMayor de Salamanca es recibidocon júbilo por una juventud enfer-vorizada. Reanuda sus cotidianastertulias en el Casino, aunque enrealidad eran monólogos, en losque hacía gala de un gran sentidodel humor al analizar los temascandentes del momento. Con lallegada de la República se acercade nuevo al socialismo, participaen la manifestación del Primerode Mayo en Madrid y es elegidodiputado por Salamanca.

Pero sus expectativas no sonsatisfechas por el régimen repu-blicano. Cree que la democraciaes un “mal necesario”. Sus críti-cas se dirigen especialmente con-tra Azaña.

En un principio se adhiere a lasublevación del 18 de julio, en laque ve el último intento de salvarEspaña. Pero después se ira dis-tanciando del Movimiento porquesospecha que va a poner fin alliberalismo en España. Para él loimportante no es vencer, sino con-vencer, intentar unir a todos paraacabar con la guerra civil-incivil.Inevitablemente tenía que ocurrirlo que ocurrió aquel 12 de octu-bre de 1936 en el Paraninfo de laUniversidad de Salamanca. El“¡Viva la muerte!” y “¡Mueran losintelectuales!” de Millán Astraysoliviantó a Unamuno. Tuvo quesalir del Paraninfo protegido pordoña Carmen Polo. Desde aqueldía se le hizo el vacío en Sala-manca. Sus propios compañerosfirmaron su cese como rector; enel Casino se le increpó al grito de“¡Rojo fuera!”. Esto último ledolió todavía más que su destitu-ción como rector. Se encerró ensu casa y murió de una hemorra-gia cerebral el día 31 de diciem-bre de 1936.

¿Qué es España para Miguelde Unamuno? Poco antes de sumuerte dejó escrito: “España esun valor comunal histórico, perodialéctico, dinámico con contra-dicciones íntimas. Lo que loshotros llaman anti-España, la libe-ral, es tan España como la quecombaten los hunos”.

JOSÉ MARÍA MARTÍN SÁNCHEZ(OSA)

Colegio Valdeluz

Unamuno Plaza Mayor Salamanca

Firma de Unamuno

El rincón del Socio

I. EL AUTOR

Antes de iniciar la reflexióny comentario, es obligado

hacer referencia al historial aca-démico y bibliográfico del autor,A. Manrique. Inició los estudiosde humanidades en el seminariomenor de Leganés. Los cursosde filosofía y teología los reali-zó en el Real Monasterio de SanLorenzo de El Escorial. Estasdisciplinas y las vivenciascorrespondientes dejarán laimpronta agustiniana que serefleja en buena parte de susescritos. Se licenció en Filosofíay Letras en la Universidad Com-plutense de Madrid; cursó Filo-logía Latina Cristiana en la Sor-bona de París y consiguió eldoctorado, con la tesis “Evange-lio y Comunidad,”en “Sciencies

Religienses” por Universidad deEstrasburgo.

Durante su estancia en París,recuperó, para la Biblioteca deEl Escorial, dos verdaderasjoyas desaparecidas en la Gue-rra Civil española: “Apocalipsisfigurado”, que el Duque deSaboya había regalado al ReyFelipe II y el “Libro de Horas”de Isabel, la Católica.

Abordaré ahora su faceta deescritor. La bibliografía de Man-rique es muy extensa. Los estu-diosos suelen clasificarla en dosapartados: obras de carácter teo-lógico-bíblico y libros de carác-ter histórico-científico. Ademásson numerosos los artículospublicados en revistas tan presti-giosas como: “La Ciudad de

Dios”, “Biblia y Fe” y “Studiamonástica”. Entre los títulos delprimer apartado citaré: “Teologíaagustiniana de la vida religio-sa”,1964. (Traducida al inglés yal italiano), “Patrística” (Dacti-lografiado) C.S.I.C., Madrid1965.” “La iglesia como comu-nión”. Marid 1977. Los libros decarácter histórico-científico sontambién muy aceptados por lacrítica. Por ejemplo: “Los testi-gos de Jehová”, Madrid 1977,“San Agustín, obispo”, Medinadel Campo 1986. “Hª y vida deun pueblo de La Valdavia, Con-gosto”. Palencia 2001.

Quizás uno de los másimportantes trabajos es el Teso-ro de los Secretos de EvónimoFiliatro (Conrad Gesner) ElEscorial 1996. Es una historia dela medicina hasta el s. XVI, don-de se recogen los textos másselectos de esta materia a travésde la Historia. En ella no sólo seidentifican los autores, sino que,además, se da lo que ha escritocada uno y la bibliografía que seha escrito sobre ellos. El libro sehallaba en la Real Biblioteca deEl Escorial entre los prohibidos.Ha sido reproducido por el Cir-culo Científico del PatrimonioNacional de Madrid, con el finde que llegue a las principalesbibliotecas del mundo.

REFLEXIÓN Y COMENTARIO SOBRE EL LIBRO,“A VINO NUEVO, ODRES NUEVOS”de Andrés Manrique Campillo, Madrid 2011

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A. Manrique Campillo

El rincón del Socio

II. LA OBRA

El contenido del libro queahora nos ocupa consta de: unprólogo, una introduccióngeneral a los Evangelios, el pre-ámbulo al Evangelio de sanMarcos, 37 capítulos y un índi-ce. Los epígrafes de los capítu-los son, entre otros, los siguien-tes: Curación de un leproso, latempestad calmada, multiplica-ción de los panes y de lospeces, el epiléptico endemonia-do, etc. En cada capítulo hayvarios apartados en los que va

explicando con nitidez el senti-do auténtico que el evangelistaquiere transmitir con esa histo-ria. Al final de los epígrafes seincluye una “síntesis teológi-ca”, magníficamente reflexio-nada para una comprensiónadecuada del relato.

El texto es fruto de la estan-cia del autor, durante algúntiempo, en Palestina. Al entraren contacto con el pueblo senci-llo, los beduinos, y constatarque, aún persistían costumbrescoincidentes con la manera de

pensar de la época de Jesús, todolo cual era sumamente intere-sante para comprender mejor losrelatos evangélicos. Manriquepublica en este libro los pasajesmás característicos del Evange-lio de san Marcos, incluidas lacrucifixión, muerte y resurrec-ción de Jesús, con la idea dehacer lo mismo con los otrosSinópticos y con san Juan.

Este primer volumen llevacomo título el dicho parabólicode Jesús: “A vino nuevo, odresnuevos”. Lo que viene a expre-sar es que, con él, comenzabauna nueva concepción del reinode Dios, con la que era incom-patible la vieja economía de laLey mosáica. Jesús constante-mente está haciendo referencia así mismo, como dispensador delvino nuevo en el banquetemesiánico.

Para los jefes religiosos judí-os, escribas y fariseos o, si sequiere sabios y letrados, refrac-tarios y ofuscados por su sabi-duría ante el pueblo sencillo, alque despreciaban, eran inacep-tables los nuevos planes deDios. Por eso esta revelación delreino que Jesús trae se les ocul-taba; mientras sí era reconocidapor la gente humilde y sencilla,que se acercaba al nuevo mesíasa pedirle que les curase susdolencias. Es más, Jesús escogíaprecisamente a ésta para humi-llar a los sabios soberbios.

El vino nuevo simboliza laBuena Nueva, el Evangelio quepredica Cristo, el Señor, frente alos odres viejos de las formas einstituciones judías de la Anti-gua Alianza, que se convertiránen anticuadas e inservibles.

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Portada libro de Andrés Manrique Campillo

El rincón del Socio

Bajo esta perspectiva sonanalizados y comentados nume-rosos relatos de milagros, p. ej.,el ciego de Betsaida, el ciego deJericó, etc., realizados por Jesúsen este original libro de A.Manrique. Los evangelizadoresy hombres de nuestro tiempocuentan con un material valio-sísimo para la catequesis y ser-mones. Tendrán que adaptarlos,sin duda, para que, como enotros tiempos, los sabios e inte-ligentes, no rechacen la doctri-na evangélica, porque se lespresente en odres o moldes lahistoria de la época de Jesús,tan distinta de nuestra concep-ción greco-romana o, si se quie-re, de nuestra historia críticacontemporánea.

Esta suele llevar al peligro deno comprender o distorsionar elevangelio con una visión perso-nalista o caprichosa, cuando noal género de novela histórica,planteándose problemas religio-sos de todo tipo. Con el fin deevitar este escollo, el libro quecomentamos, trata de aclarar enlos diferentes relatos la mentali-dad y el contexto histórico enque fueron escritos. Bajo esteprisma tanto sucesos, comomilagros, curaciones, etc.,adquieren el significado de vinonuevo, que le dio Jesús. Es decir,transmiten su historia propia,que no es otra que el contenidoy mensaje incluido en el relatosimbólico.

En efecto, nosotros estamosacostumbrados a preguntarnospor la historicidad de los rela-tos, o sea, si han sucedido o no.En cambio, Jesús y sus discípu-los los utilizan, inventándolos oadornándolos, para transmitiruna verdad, que es lo histórico

para ellos. A. Manrique tieneesto muy presente a lo largo detodo su libro al comentar losdistintos epígrafes de que cons-ta su obra.

Así, el relato de la crucifi-xión no está destinado –dice elautor– a conmover, según sepiensa en el ambiente popular,sino para reflexionar sobre lapersonalidad de Jesús y sobre suidentidad. Lo mismo sucede conla Resurrección de Cristo. Estaes una revelación divina que seexpresa a través de un géneroliterario, para indicar que todoslos creyentes también resucita-rán. Los evangelios no fueronescritos para que conozcamos loque sucedió en Palestina hacedos mil años –aunque indirecta-mente sí se dé a conocer en losrelatos– sino para que acepte-mos la doctrina y mensaje que,el Mesías, trajo al mundo y ten-gamos fe en Él. Lo dice clara-mente S. Juan: “Jesús realizó enpresencia de sus discípulos otrossignos (=relatos), que no estánescrito en este libro. Estos (=losque han sido escritos) son paraque vosotros creáis que Jesús esel Cristo, el hijo de Dios y, paraque creyendo en él, tengáis vidaen su nombre” (Jn 20,30-31).

Existe una estrecha relacióny vinculación entre los relatos yla confesión de fe. O, si se pre-fiere, a través de los relatoscomo signos se transmiten con-fesiones de fe y la doctrina queJesús vino a traer a la humani-dad. Todo ello se podría resumiren una sola idea: Jesús trajo elreinado de Dios al mundo. “Nodebemos centrarnos en una lec-tura literal o histórica, dice Man-rique, sino en lo que se transmi-te por medio de ella”

Cuanto llevamos comentadodebería ser tenido en cuentapara la predicación del Evange-lio en las parroquias. En lamayoría de ellas, una vez leídoel evangelio, sin expresar suauténtico mensaje y significado,se pasa inmediatamente a unaaplicación moral que, por muyinteresante que pueda parecer,no deja de ser un tanto subjeti-va y caprichosa. Lógicamente loprimero que debiera hacerse escaptar el verdadero sentido ydoctrina del relato, para luegoaplicarlo adecuadamente a lasnecesidades de esa comunidad oparroquia concreta.

En conclusión, lo que preten-de A. Manrique con esta obra, essubsanar esta deficiencia ofre-ciendo un instrumento utilísimopara la evangelización y la cate-quesis en el s. XXI.

En las líneas finales del Epí-logo insiste Andrés Manrique:“Para que el evangelio pueda sercreíble y produzca frutos de vidaeterna en el mundo de hoy,debemos transmitir su verdade-ra mentalidad, bastante distintade la nuestra.”

Recomendamos esta obra atodos los que deseen conocer elauténtico mensaje de Jesús,especialmente a los profesoresde Religión. El autor presentalos distintos apartados con enor-me claridad y muy pedagógicoscomo hacía de docente en el Ins-tituto Manuel de “Falla de Mós-toles”, en la Escuela Bíblica, enUniversidad Pontificia de Sala-manca, Universidad de El Esco-rial y en otros Centros dondeimpartió clases.

A. J. DE LOBAT.19

In Memoriam

IN MEMORIAMCONVERSACIÓN TELEFÓNICA CON JULIÁN GONZÁLEZ DE BEDOYA

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Querido Julián. He pensa-do escribirte estas líneas,para de alguna ilusiona-

da manera, contactarte, allí adonde iremos todos.

Mi hermano Victoriano mecomunicó la tragedia de tu muer-te y nuestro gran amigo Sinforia-no, que además creo fue el que selo comunicó a mi hermano, me loconfirmó, dándome muchos másdetalles, sobre esta desgracia.

Aquí quiero dejar constanciade algunos temas tratados ennuestra larga conversación tele-fónica a últimos de enero. Quisedarte las gracias y felicitarte portu magnífico artículo de “PLA-ZA MAYOR” nº 24, que titulas

“YES BELIEVE IN YESTER-DAY”. Hablas de tu “vuelta alredil” y recuerdas a aquel deca-no que tuviste en Leganés.

Los 54 años pasados, repre-sentan un antes y un después.Pero por desgracia, este después,no llegará a tomar forma y nostenemos que conformar conaquella conversación telefónica,que sirvió para poner las bases anuestros ilusionados contactosfuturos. Por eso el después, se haquedado en una ilusión.Es comoel corredor maratoniano que apocos metros de la meta, desfa-llece y no llega a cruzarla. Perogracias a ésta charla, hemos podi-do recorrer con la memoria, (y aritmo de velocista) 54 años denuestras vidas. No todos los ava-tares ni altibajos vividos, cruza-ron nuestros teléfonos. Sonmuchos y queríamos dejar algu-nos para otras charlas, que yanunca llegarán.

Cuando marqué tu número, lohice lleno de curiosidad, la que tuartículo había despertado en mí.Yo quería saber mucho más deaquel “enfant terrible”. Pudimosconstatar, que no solo coincidía-mos con una estancia en el mis-mo colegio y curso, sino que tusvivencias en varias ciudadeseuropeas, eran las mismas en lasque yo había vivido. Nos podía-mos haber topado frente a frente,a la vuelta de una esquina, tal vezdisculpándonos por un pequeñoempujón en París, o en Heidel-berg. Tu encuentro con el P. Fer-mín y el mío con el P. Carmona,no pudo ser más fortuito.

Así hemos podido hablar lar-go y tendido de lo que sabemos,que es mucho, de éstas dos ciu-dades. Te tocó Julián, vivir enpropias carnes, la revuelta estu-diantil del famoso Mayo del 68en la Place Saint Michel (París),donde no quedó un adoquín en sulugar; unos sirvieron para hacerbarricadas, otros para ser lanza-dos contra las fuerzas del orden.

Aquel año, yo ya era padre deuna hija y en aquel preciso mayo,desde Alemania, me puse a cru-zar Francia en un R-4, llegando ala Junquera con la última gota degasolina. Huelgas por doquier.

Querido Julián, todo esto ymucho más, fue comentadodurante nuestra charla. Hablamosde los encuentros fortuitos. Elmío, con el P. Felix Carmona.Fue en el metro abarrotado de laestación de Notre Dame desChamp. Yo había terminado en laAlianza Francesa y me apresuréa coger el metro para irme a tra-bajar a Citroen, en el turno de tar-de. El domingo siguiente, nosvolvimos a encontrar en SaintMichel, para visitar el palacio yjardines de Versalles. Recuerdosinolvidables, que han marcado elalbor de nuestras vidas de adul-tos, cuando todo lo teníamos porhacer. Te dije Julián, que sin Parísy Alianza, tampoco hubiese habi-do para mí, Alemania.

Julián —Estos son los mis-terios del amor que no conocefronteras. Te diré, Teodoro, queyo también estuve en Alemania.

Teodoro —¿Dónde? Pregunté.J. —En Heidelberg.

Teodoro Martín Manglano desde Alemania

Julián González de Bedoya en España

In Memoriam

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T. —¡Qué casualidad! Yovivo a 130 Km. de Heidelberg ymis dos hijas han estudiado y unade ellas, vive y trabaja en esa ciu-dad tan estudiantil.

J. —Pues podemos hablar dela Haupstrasse, calle peatonal,muy larga y llena de tiendas.Empieza en la Bismarkplatz ytermina en la plaza del ayunta-miento, donde se hace el Merca-do Navideño.

T. —Me dejas atónito,Julián, con todos estos detalles.

J. —Si cruzas el río Neckar,por el histórico puente llamadoAlte Brücke, te encontrarás alotro lado, una extensa pradera,donde en verano, la población sesolaza tendida en la hierba, o sen-tada en alguna terraza.

T. —Lo llaman la playa verde.J. —Allí, cerca de un chirin-

guito, otro chico y yo, tocábamosla guitarra.

T. —¿Con gorra o sin gorra?J. —Sin gorra. Los tiempos

de las vacas flacas, no llegaron atanto. Pero me recuerdas algo:

Un buen día, vemos a unaseñora acercarse a nosotros, condos marcos en la mano, comobuscando algo donde depositar-los. Habló con mi compañero deorquesta, quien me tradujo al cas-tellano (yo llevaba poco tiempoallí). Esta mujer, pregunta por lagorra. Dice que mañana puedetraer una de su marido. Pues dile,dije yo, que si llegamos a necesi-tarla, utilizaremos una caja dezapatos, que seguro tendrámenos piojos. Agárrate, Teodoro,con lo que pasó el domingosiguiente. La misma mujer seacercó, visiblemente contenta devolvernos a ver, y ¿sabes lo quesacó del bolso?, una gorra vieja,

que dijo haber lavado horasantes. Metió en ella un marco yse fue. Miré a mí amigo y dije: aésta mujer es imposible decirleque no. Es para creer en la huma-nidad, ¿verdad, Teodoro?

T. —Pues sí, Julián. Unavivencia interesante que marcaun montón.

J. —De Heidelberg tengorecuerdos maravillosos.

T. —¿Qué hiciste allí?J. —Yo fui el gerente y jefe

de una pizzería, situada alcomienzo de la Haupstrasse.

T. —Entonces conoces lafarmacia de al lado. En ésa mis-ma casa, hay varias consultas demédicos, donde trabaja mi hijamayor. También hay un nuevosupermercado, de aparatos elec-trónicos, a donde muy diplomá-ticamente, mi nieto me llevó, ennoviembre pasado, para enseñar-me un videojuego que anhelaba.Le vi superfeliz cuando lodesempaquetó en casa.

J. —Ya veo que podemoshablar un montón de Haidelberg.

T. —Pues ahora, Julián, tediré lo principal, lo que me segui-rá marcando el resto de mi vida,todo mi ser y toda mi alma. En elcementerio Bergfriedhof, está latumba de mi esposa. Sí Julián, laque conocí en la Alianza France-sa y la que fue premisa y condi-ción para cambiar de país. Estofue para mí, como para muchosalumnos, un valor añadido, alpaso por la Alianza Francesa.

J. —¡O tempora, o mores!Diría el P. Eloy. Tu vida ha sidomuy interesante, Teodoro.

T. —Pero sin comparacióncon la tuya, Julián. Yo no he cam-biado nunca de continente. Túhas vivido en una veintena de

países y de todos ellos tendrásmucho que contar.

J. —Desde luego que sí.T. —Tienes que escribir un

libro, Julián, sobre tus vivenciascomo “descubridor”, ya que lode “conquistador”, es mejordejarlo a nuestros paisanos dehace 400 años. (Risas).

J. —Hemos tenido una char-la superinteresante, al cabo de 54años. No deberían haber sido tan-tos. ¿Verdad Teodoro?

T. —Entonces no se habríacumplido lo que constato comouna gran coincidencia.

J. —¿Y qué es?T. —Mi número de alumno

en Leganés, el que todos tenía-mos marcado en nuestras ropas,era el 54.

J. —No me digas (Carcajadas)T. —Además éste número, el

54, reviste para mí, un carismaespecial de lógica matemática:Cuando salí del colegio, mi edadera la tercera parte del número yhoy el número, es las tres cuartaspartes de mi edad actual. ¿Quéedad tengo?

J. —Mejor sería no saber elnúmero de antemano, ni la edad.Yo lo tengo fácil, sé las doscosas. (Risas)

T. —Julián, de tu artículo yamencionado, quiero resaltar laconversación tan humanista quemantienes con tu vieja mochila.Hablas de las cicatrices que nosva dejando el paso de la vida, denuestras pobres defensas contralas adversidades y de nuestroconstante deseo de triunfar, ego-céntricos y deshumanizados.

J. —Pues sí, Teodoro, lopositivo es cuando al hacer unalto en el camino y un balance de

In Memoriam

tus recuerdos y vivencias, sien-tes un alivio al notar la mochilaaligerada.

T. —Yo también, Julián, ten-go por norma hacer viajes conmochila y en la mochila de misrecuerdos, veo a un compañerode colegio, con gafas, al que lla-mábamos Bedoya. Unas gafasque muchos años después, mehan sido recordadas por un per-sonaje llamado “Manolito Gafo-tas” (Carcajadas).

J. —Eran las gafas de la épo-ca. Ya veo que “Elvira Lindo”,también ha llegado a Alemania.

T. —En mi casa nos hemosreído mucho con sus gracias.Aquí hemos intentado vivir “tanalemán como necesario y tanespañol, como posible.”

J. —No hay que olvidar nun-ca tus raíces. Este ha sido milema por todos los países dondehe vivido.

T. —Me acuerdo también deaquellas impresionantes botas deBedoya. Las admirábamos todospor los punterazos que despedíanjugando al fútbol (Risas). Eranmás temidas que el “Ligero Ber-gantín,”pirata de nuestro paisanoEspronceda.

J. —Yo también las supeapreciar. Tanto fue así, que cuan-do empezaron a apretar, recé paraque crecieran con los pies (risas).

T. —Pero hay algo querecuerdo de Bedoya muy espe-cialmente: Tu valentía para escri-birme aquella carta, enviada a mipueblo, en la que resaltaba lapalabra “injusticia.” Palabra quepor primera vez, vi referida a mipersona. Hoy curtido por la vida,puedo decir, que una es siemprela primera vez.

J. —Aquella carta, Teodoro,fue el resultado de una sorpresaen todos nosotros, de una “voxpopuli”.

T. —En todo caso, Julián,desde ahora podré decir que ten-go un amigo en Madrid, que vivepor la Plaza Elíptica.

J. —Y yo podré decir, Teo-doro, que tengo un amigo en Ale-mania, que vive en Stuttgart.

T. —Yo te lo pongo másfácil, Julián. Desde hace años, misegundo domicilio está en Culle-ra, así es que allí quiero vertepronto, pasando los días quequieras con tu esposa. Tenemosmucho de qué hablar y el AVE,hace Madrid-Valencia en 90minutos.

J. —En todo caso, Teodoro,esta conversación es sólo un pró-logo y mientras Dios nos désalud, tenemos que aprovechar-lo. Es una forma estupenda dedarle las gracias.

T. —Tan bien lo has dicho,Julián, que suena a oración y sólome queda decir “amén”.

J. —En nuestra edad, hayque saber aprovechar, la vida quenos queda. El niño recién nacido,con toda su vida por delante, yanos da el ejemplo agarrando consus manitas, los dedos de sumadre como salvavidas.

T. —Además su preferido esel meñique, porque se adaptamejor a sus diminutas manos.(Risas).

Así, más o menos, terminóaquel diálogo telefónico, sin olvi-dar los deseos recíprocos habi-tuales y un “cuídate y hastapronto”.

Fue un diálogo ameno y pro-metedor de esperanzas y forjador

de futuros encuentros. Todo se haesfumado. Todo ha quedado enuna ilusión, porque nuestro ami-go y compañero “Julián Gonzá-lez de Bedoya”, pertenece ahoraal grupo de los que, como él mis-mo escribe, “nos dejaron y nosesperan.”

Los que aquí abajo quedamos,y mientras dura la espera, noshacemos muchas preguntas, quetodas ellas quedan en incógnitasmisteriosas.

En nuestros pueblos, de laExtremadura profunda, como esel mío y tu Tornavacas natal,Julián, las gentes simples, tienensu propia filosofía y llaman a lascosas por su nombre.

Después de un muy acompa-ñado y sentido entierro, uno delos condolientes, que parecíatener menos luces, habló al sacer-dote en estos términos: Mireusted, señor cura, a mí no se meva de la cabeza, que Dios conésta muerte, se ha equivocado.

No hijo, dijo el señor cura; loque pasa es que Dios escribe rec-to, con líneas torcidas. Y el“botarate” contestó: bueno,señor cura, y en estas líneas tor-cidas ¿Dios no podría escribirmás claro, así como en letrasmayúsculas, que todo el mundoentienda?

Mira hijo, contestó el cura, losdesignios divinos son inescruta-bles.

Aquí volvemos a las incógni-tas misteriosas. El hombre se vol-vió frustrado hacia uno de lossuyos y dijo: no sólo Dios escri-be torcido, sino que los curas noslo explican con palabras que noentendemos.

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Yo sólo puedo decir, Julián,que aquel “botarate” de mi pue-blo, me cayó simpático.

Querido Julián, te has ido denosotros tan de golpe, que todosnos hacemos las mismas pregun-tas que el hombre de antes. ¿Quéno hubiéramos hecho, para man-tenerte más tiempo con nosotros?

Aquí doy las gracias, a Sinforespecialmente. Gracias también,a todos los que te han acompaña-do en el desenlace final. ¿Y acuántos dedos, manos y brazosde tus seres queridos, no tehubieses amarrado tú, para seguiren nuestra compañía?

Tenemos que recurrir a Nues-tro Gran Padre san Agustín, paraencontrar unas pocas palabras deconsuelo: “Sólo en ti y contigo,Señor, encuentran nuestroscorazones, sosiego y paz.”

En cuanto a mí, diré, que enmi próximo paso por Cullera,

observaré las olas del Faro o dela Escollera, en silencio y triste,pensando en ti, Julián. Hablarécon ellas y sobre todo las diré que“no has podido venir.” Triste esno poder dialogar contigo,teniendo a las olas por testigo.

Amigo Julián, cuando escribotu nombre completo, encuentroen él una cierta poesía. Esto meha llevado a descubrir que sólo,SEÑOR, falta para tener ante losojos, un endecasílabo perfecto,digno del mejor de nuestros clá-sicos.

Pues no faltaría más, decimostodos los que hemos tenido lasuerte de conocerte y apreciarte.Además, seguro que Dios nonecesita lecciones de “MétricaPoética”, para abrirte sus puertasde par en par y dejarte entrarcomo un gran SEÑOR en susfeudos, donde Dios acoge a lossuyos, cuando han terminado

aquí abajo, el tiempo que llama-mos vida.

Tu vieja mochila, que tambiénllevas en éste tu último viaje,libre del lastre humano, molestoy superfluo, pero llega ante Dios,rebosante de “dignidad, éticamoral y transparencia.”

Estas virtudes, como escribes,han sido el lema de tu vida y fie-les compañeras en todos tus via-jes. ¿Qué otra cosa se puedeesperar de aquellas pulcras men-tes, forjadas y entrenadas, enaquel ayer de Leganés y Sala-manca? Cualquier otra conducta,hubiese sido un delito de LESAMajestad.

Amigo Julián, si entonces ter-minamos nuestra charla telefóni-ca con un “cuídate y hasta pron-to en Cullera, sólo digo ahora,“hasta que Dios quiera”.

DESCANSA EN PAZTEODORO MARTÍN MANGLANO

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CARTA DE EVILASIO MOYA A JULIÁN BEDOYA

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Estoy embargado por eldolor. No es fácil hablar.Sé que vosotros habéis

perdido un esposo. Un padre. Unhermano. Un amigo. Un compa-ñero. Yo he sido el gran perdedor.He perdido a un buen hermano.Un fiel amigo. Un compañero, ylo que es peor, mi ángel de laguarda. Julián, siempre veló pormí. Jamás me abandonó.

Quisiera continuar mis pala-bras con un poco de humor, queme permita disipar mi pena ypoder seguir hablando. Seguroque Julián, desde el cielo, meestá mirando diciendo: ¡¡Fermín!! Siempre he hablado yo de tiante los micrófonos, ahora tetoca a ti hablar de mí. Le estoyoyendo ahora mismo y lo hago,no sin dolor, pero con muchogusto. Estos momentos son tris-tes, pero no menos gloriosos quecuando tú presentabas mis expo-siciones. Ahora, gracias a tí,hemos unido el cielo y la tierradurante esta entrañable ceremo-nia. Esto supera a todas misexposiciones.

No soy la persona indicadapara dudar de la misericordia deDios, ni es éste el lugar parahacerlo. Pero estoy convencidoque Dios me perdonará y lo com-prenderá. Quiero pensar y llevaren lo más profundo de mi cora-zón, que la muerte de Julián hasido un error. Quizás, Dios,abrumado por el exceso de tra-bajo, envió un ángel a la tierra yle dijo: tala todos los árboles lon-gevos que veas. Necesitamosgente buena en el Cielo. El ángelbueno y obediente se puso manos

a la obra y empezó a cumplir elmandato de Dios. Es posible queel ángel no tuviese mucha expe-riencia, y cuando taló el árbol deJulián comprendió que se habíaequivocado. Justo, en el alma deltronco, empezó a brotar saviaviva, pero nada pudo hacer elángel, salvo llorar y lamentar lagran pérdida.

No obstante, el ángel bueno,quiso reparar el dolor. Buscó unacesta de mimbre. Colocó en elfondo blancos algodones y reco-gió todos los frutos restantes delárbol y los depositó dulcementeen la cesta. Y todos los frutos hanllegado a nosotros. Ese fruto,que tanto falta hoy día en lasociedad, “El fruto de la Huma-nidad”. Ese era el verdadero fru-to de Julián, su calidad humana.Yo, como hermano, tengo el fru-to que me corresponde. Madura-rá en mis manos, y, una vezmaduro, cogeré sus semillas ylas sembraré en tierra fértil, paraque las nuevas generacionessepan que hubo un hombrecabal. Un hombre bueno. Unhombre humano. “Julián”.

Sin lugar a dudas, san Agus-tín, Moisés, Galdeano, y cuantoscompañeros nos han dejado, lehabrán recibido con todos loshonores en el cielo. Julián jamásdejó de ser Agustino. Siempreque nos encontrábamos habíamomentos para nuestros buenosrecuerdos en el seminario yhablar de todos los compañeros.Pero, últimamente, se fue acer-cando con más intensidad a laorden Agustiniana, como si, deuna forma providencial, intuye-se su despedida o el encuentro

con san Agustín. Está bien claroque estaba dispuesto a morircomo un Agustino.

En el Hospital, en estado depre-coma, conectado a un osci-loscopio para ver su ritmo car-díaco, un sacerdote agustino, elP. Ángel Jorge, se desplazó paradarle la Extremaunción y losSantos Óleos, y, admírense,cuando Julián escuchó la voz delP. Ángel, el osciloscopio rompióesa línea plana y volvió por unosinstantes a funcionar con nor-malidad. Esa mejora súbita fue,sin duda, la alegría de Julián,como diciendo: ahora sí mepuedo morir tranquilo.

Muchas gracias, PP. Agusti-nos, por esta hermosa ceremoniallena de cariño. Julián se sentiráfeliz y orgulloso por tanto cari-ño. Gracias, queridos compañe-ros de seminario. Gracias atodos los presentes, amigos,familiares y a ti, Mari Carmen(cuñada), gracias especiales porhaber cumplido con tu promesa,esa popular frase que dice: has-ta que la muerte os separe. Hascumplido, querido y respetado aJulián hasta el final.

¡¡Juli!! intercede por mí.Habla con san Agustín, nuestroPadre y recuérdale que Él tam-bién fue pecador.

Muchas gracias a todos…FERMÍN G. DE BEDOYA

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EL CIELO SE EQUIVOCÓMis últimas palabras a mi hermano Julián

Último brindis de Julián con su hermano Fermín

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“Entre bastos peñascos serpentea,bajo la claridad de blanca lunaha perdido su rumbo y sin fortunava lamiendo los muros de la aldea.

***Oh! triste arroyo de agua turbia y fea;en gargantas naciste y fue tu cunael remanso vaivén de una lagunadonde el agua, te agita y balancea.

***Ahora mi vida corre lisonjeracon su sentir de eterna primavera.

***Oh! dulce arroyo, heme aquí tendido…arranca de tu seno una palabray dime si del cauce me he salido”.

“No sé si te habrás salido del cauce,papá… pero seguramente todos los caucesde la tierra se te han quedado cortos. Enten-demos, pues, por qué estás ahora surcandootros mares. Es más, estoy segura que, conla valentía que te caracteriza, pronto teharás con el timón del barco, porque, comotriunfador, eres inmortal. Ten por seguroque tu cauce ha sido inagotable y lo segui-rá siendo siempre. Y, como seguro estás lle-gando a buen puerto, sabemos te esperanmuy buenas compañías.

Recuerda que en éste otro puerto seguire-mos disfrutando de ti como si te hubiéramosvisto ayer.

Gracias en nombre de tus amigos, los queestán aquí y los que no han podido venir.

Gracias en nombre de tus hermanos ydemás familia.

Gracias en nombre de tus nietos, por lahuella que has dejado en ellos.

Gracias por darnos la vida a mi herma-no y a mí.

Y gracias por regalarle a “tu peque” ungran trozo de la tuya.

Te quiere y ya echa de menos,TU HIJA

Julián con su familia en El Escorial

CARTA A MI PADRE

Leída en la ceremonia que nuestraAsociación organizó en su memoria

en la capilla del R.C.U. María Cristina deSan Lorenzo de El Escorial el pasadonueve de marzo.

Querido “papi”, “Jota”, “Juli”, “Julián”,“Julián Tornavacas”… y otros.

Para qué lamentarse de lo que nos haquedado por vivir a tu lado, si podemoscelebrar lo que hemos vivido contigo. Nila mayor de las celebraciones podría ren-dirte homenaje.

Para mí el mejor de los músicos…Para mí, el mejor de los poetas.Y, como muchos de ellos, también cre-

aste un poema en el que el Río simbolizael paso por la vida.

Quiero recordarlo contigo:“

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BBaallaannccee eejjeerrcciicciioo 22001111

COMENTARIO AL BALANCE DEL EJERCICIO 2011En primer lugar, quiero dar las gracias a todas aque-

llas personas que desinteresadamente cooperan connosotros en la venta de la lotería. Sin ellas, los resulta-dos serían muy distintos.

Como consecuencia del atraso en la liquidación delas cuentas, entre importe recibido y pagado, por aque-llos que tienen que hacer esta labor (atraso que com-prendemos, porque todos desean quedar bien con aque-llas personas que les compraron participaciones), nopodemos dar los resultados finales.

Sí podemos adelantar que lo que no se ha queridocobrar está rondando los 6.000 €, importe nunca soña-do, dadas las circunstancias por las que atravesamos y,la verdad, es que en aquellos casos que he intervenidodirectamente, y que son muchos, la gente ha quedadoencantada con recibir este pequeño premio.

La Asociación ha tratado de quedar bien con todoslos interesados que han querido cobrar y creemos quelo hemos conseguido, porque así nos lo han hecho saber.Lo cobrado de la lotería han sido 81.000 €, de los cua-les 700 euros son de los décimos que se nos regalan porla compra de la misma y, por tanto, estos están inclui-dos en el superávit del ejercicio; el resto es lo que se haenviado, bien a los que compran participaciones, ingre-sando directamente el importe en la cuenta de la Aso-ciación, o enviado a los que han recibido talonarioscompletos y lo han vendido en cada caso.

Una vez tengamos las liquidaciones por parte detodos los receptores de talonarios, y, por tanto, impor-tes correspondientes, los resultados finales en cuanto alo no cobrado será ingresado en la cuenta de los PP.Agustinos para BECAS TOLÉ.

SINFORIANO CUADRADO

INGRESOS1. Publicidad revistas 23-24 900,00 €

2. Aportaciones particulares becas Tolé 3.345,00 €

3. Cuotas asociados ejercicio 2011 4.895,00 €

4. Venta lotería de Navidad 19.272,00 €

5. Aportación Caja Duero 800,00 €

6. Recaudación comida fiesta 2011 1.785,00 €

7. Recaudación venta libros Evilasio 180,00 €

8. Ingreso de asociados ayuda niña colegio 300,00 €

9. Ingreso premio lotería 2011 700,00 €

TOTAL INGRESOS: 32.177,00 €

GASTOS1. Donativo al colegio fiesta sta. Cecilia 300,00 €

2. Gastos descuentos remesas y otros 165,02 €

3. Gastos correo envío revistas y otros 527,43 €

4. Pago Método Gráfico revistas 23-24 y otros 3.486,68 €

5. Gastos papelería y otros 443,30 €

6. Pago comida fiesta 2011 1.480,00 €

7. Pago lotería Navidad 2011 16.000,00 €

8. Pago colegio ayuda niña colegio 300,00 €

9. Pago talonarios lotería Navidad 2011 120,00 €

10. Transferencia PP. Agustinos becas particulares 3.345,00 €

11. Transferencia PP. Agustinos venta lotería 2010 3.000,00 €

12. Pago seguimiento página web asociación 590,00 €

TOTAL GASTOS: 29.757,43 €

SUPERAVIT EJERCICIO 2011: 2.419,57 €

SALDO EN BANCO Y CAJA: 10.794,87 €

FFoorrmmaacciióónn

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BBiicceenntteennaarriioo ddee llaa PPeeppaa

Promulgacion de “La Pepa”

Ejemplares de la Constitución de 1812

31

BBiicceenntteennaarriioo ddee llaa PPeeppaa

Placa conmemorativa a lasCortes de Cádiz

OratorioSan Felipe Neri

Monumento a las Cortes de 1812