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Revistas políticas y culturales como la figura de la historia intelectual latinoamericana La ruptura epistemológica conocido se produjo en la historiografía y desencadenó la ciudad alsaciana de Estrasburgo a finales de la tercera década del siglo XX, que promovió la división de la marcha de la historia, la narrativa, de hecho y de derecho hacia la historia- problema, holístico e interpretativo, y ha venido desarrollando desde entonces, generación tras generación, siempre con novedades traídas al estudio del ser humano convirtiéndose no sólo en una reformulación y ampliación de la noción de documento, también, como el historiador de la actitud hermenéutica hacia lo que quiere penetrar. Esta nueva actitud tiene, por definición, la formulación de problemas, su poder crítico. "Papá entonces me explica que sirve a la historia", le preguntó el chico estimado por Marc Bloch (-) el padre historiador. En blague tono, co-fundador de los Annales señaló en sus manuscritos que la historia "sirve" al menos para la diversión. Para los incansables buscadores de funciones de utilidad en todo lo que se quiere untadas con crema muy fina la ciencia, esto es una observación muy provocativa. De todos modos, más allá de esa función noble e inusual, utilitario o no, la historia ha registrado que la universidad para ofrecer un terreno fértil para la formulación de preguntas, permaneciendo siempre abierto a las infinitas posibilidades de respuestas, aclaraciones de la nuevas interpretaciones, etc. Teniendo en cuenta que tratar de establecer el imperio de la complejidad y el cuidado, el historiador ya no será mera historia portavoz, coleccionista de hechos apáticos y autorreferencial exegeta improfanáveis documentos, guardando inmutables y absolutos sentidos coherencias.

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Revistas políticas y culturales como la figura de la historia intelectual latinoamericana

La ruptura epistemológica conocido se produjo en la historiografía y desencadenó la ciudad alsaciana de Estrasburgo a finales de la tercera década del siglo XX, que promovió la división de la marcha de la historia, la narrativa, de hecho y de derecho hacia la historia-problema, holístico e interpretativo, y ha venido desarrollando desde entonces, generación tras generación, siempre con novedades traídas al estudio del ser humano convirtiéndose no sólo en una reformulación y ampliación de la noción de documento, también, como el historiador de la actitud hermenéutica hacia lo que quiere penetrar. Esta nueva actitud tiene, por definición, la formulación de problemas, su poder crítico.

"Papá entonces me explica que sirve a la historia", le preguntó el chico estimado por Marc Bloch (-) el padre historiador. En blague tono, co-fundador de los Annales señaló en sus manuscritos que la historia "sirve" al menos para la diversión. Para los incansables buscadores de funciones de utilidad en todo lo que se quiere untadas con crema muy fina la ciencia, esto es una observación muy provocativa. De todos modos, más allá de esa función noble e inusual, utilitario o no, la historia ha registrado que la universidad para ofrecer un terreno fértil para la formulación de preguntas, permaneciendo siempre abierto a las infinitas posibilidades de respuestas, aclaraciones de la nuevas interpretaciones, etc. Teniendo en cuenta que tratar de establecer el imperio de la complejidad y el cuidado, el historiador ya no será mera historia portavoz, coleccionista de hechos apáticos y autorreferencial exegeta improfanáveis documentos, guardando inmutables y absolutos sentidos coherencias.

Deje, por lo que sobre los nuevos objetos de estudio que esta ruptura epistemológica ayudó a emerger como una revista político-cultural, implica, en primer lugar, para el profeta, en retrospectiva, la precipitación inevitable en un torbellino de preguntas. Por lo tanto, la forma de estudiar las revistas político-culturales a través del prisma de la historia? ¿Por qué es una revista, más valiosa fuente, un objeto de análisis para el historiador y el que las cadenas - algunos de ellos - el pensamiento historiográfico han expresado su interés en la actualidad en el estudio de este objeto?

Una revista cultural durante la mecanización de la actividad crítica

La fundación de las revistas culturales han demostrado, en la historia de América Latina, acto de afirmación de las identidades colectivas y diseños estéticos / ideológicas, lo que hace el periodismo político y cultural, cuajaron lugar social de las relaciones de poder, para el análisis instrumento privilegiado de la constitución, y las transformaciones del pensamiento crítico hispana, así como

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para el estudio de la "formación" y " redes intelectuales "que con el tiempo crean dentro o en las proximidades de estos proyectos agregadores. "Desde su origen, el periodismo cultural se ha vinculado a las ciudades en el espacio del poder y de la cultura letrada." Uno puede escuchar, en publicaciones efímeras o duraderas que sacudieron la vida cultural del subcontinente, las tensiones, fracturas, concordancias y reconciliaciones que han dado forma a la visión del mundo dominante y los que estaban en el espacio de la disidencia. Se puede decir, en términos de Raymond Williams, que por cada época histórica, hay revistas usados hegemónicas y contrahegemónicas. Entre sí y jugaron un papel crucial en el desarrollo de la cultura moderna de América Latina.

Ambos conductos estimuladores de la doxa, la opinión actual, ya que los canales que infunden coraje de valores contrarios al discurso social hegemónico, aprobada por las revistas culturales en América Latina, que, para que la producción y circulación de estas ideas, usted puede hacer que los partidarios materiales en los que la historia intelectual latinoamericana

Usted puede encontrar las claves abundantes análisis. Dado que las revistas son los vehículos a través del cual se expresan los colectivos humanos, ya sean políticos, sean literarias, artísticas, académicas o filosóficas, la producción impregna todas las esferas de la cultura. Mientras que las revistas intelectuales, culturales colectivas, como se ve por Beatriz Sarlo, por lo general intervienen en la esfera pública con una propuesta de reorganización de la tradición política y cultural. En cierto modo, será posible-mirada en ellos, así como cifras de esa tradición.

Como uno de los "essentielles armaduras intellectuel du champ" a "vivier intellectuel", según lo propuesto por François Dosse, o "estructura elemental de la sociabilidad", como se sugiere Sirinelli, el estudio de una revista puede revelar la dimensión política y la vida intelectual de una era. ¿Qué François Dosse identificado como la aspiración constante de Esprit, fundada por el filósofo Emmanuel Mounier, de unos treinta años, se puede entender, en general, cómo me largo para una revista político-cultural "d'une assurer présence à son temps , d'une réponse à l'événement offrir, al laisser ébranler par lui ". Un diario es, además, un lugar de reclutamiento y la consagración de los discursos, posiciones estéticas y teóricas, y como tal, requiere una cierta aproximación histórica que tiene en cuenta varios parámetros:

approche historienne d'un lieu de sociabilité comme une revue ne peut donc faire l'impasse sur l'intrincación de les Nombreux incluant paramètres Enjeux théoriques, les modos d'inscripción ainsi de Me politique et Emotionnelle parte afectiva de toute vie colectiva.

Como señaló José Aricó en el editorial del primer número de la revista Pasado y Presente, "todas las revistas es del siempre la grupo Expresión de la ONU de Hombres que Tiende a expresar Una Voluntad compartida, Proceso de la ONU de

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semejante maduración, Una posicion Común Frente a la realidad" . Suscripción a una genealogía, revistas representan grupos y proporcionan una plataforma, una posición de enunciación en el que las identidades colectivas se construyen autoatribuídas. Unidos por un "cuerpo de la práctica o de un ethos que distinguen" a estos grupos, a su vez, se encuentran en el campo de fuerzas en el que lucha contra ellos con sus contrapartes para el reconocimiento y la primacía ideológica y cultural. Cuanto mayor es la fuerza de atracción que cada uno juega en esta plagado de relaciones de poder, el campo más eficiente es su capacidad para influir en el espacio público en el que operan:

Conseguir revistas y analizarlos, sus vínculos con el contexto en el que circulaba, significa seguir su camino y lucha - en silencio o fuerte, victorioso o no - que desarrolló la consolidación de un espacio privado en el terreno político y cultural. Circunscripciones en cada buscaron no sólo atraen a ciertas partes de la opinión pública, lo que es ganar lo suficiente para extender la legitimidad cultural y política y, finalmente, desplegar sus ideas y proyectos.

Si la figura del intelectual surgió en la época en la esfera pública moderna comenzó a balbucear, las revistas eran, y, posiblemente, han sido, desde su asamblea más concurrida, coloque la tertulia más jugado. "Intelectuales revistas hijo dobl UÑA EN EL presencia revulsivo de su modernidad imaginario." Aggora confrontación volátil de ideas y vehículo, por definición, la intervención en el espacio público, las revistas vienen con casi indiscrimidamente un indissimulável modernización pretensiones. Aunque hay personas que están de pie en la parte posterior (L ~ Acción Française, Anauê, La Orden, El offensiva etc), deportivo más anhelado, la salvaguardia y, a veces jugar la marca de la modernización (Klaxon, marzo, Contorno, Origines, Sur, Orpheu , Amauta, Root & Utopia, Les Modernes Tempes etc.) "Hijas de la modernidad y de la Constitución de La Más Temprana esfera pública", "laboratorios de ideas", las revistas culturales pueden ofrecer al investigador como fuente, es el mismo que el objeto de investigación, la oportunidad de acceder a una instancia de construcción y deconstrucción de los discursos, críticas, consagración de valores, constitución de cánones, la producción y la reproducción de las ideas, si no de purgas, animosidades y truculências, un espacio, un "entrelugar" que refleja la sensibilidad social y cultural de una era :

[... ] Ninguna historia cultural del icono literario podía prescindir - la ONU armadura riquísimo corte Riesgo de religaciones - del recurso presentado por `ESE entrelugar" multitud de fragmentos de la ESA es La Más que la suma de todas las riquezas y Cuya Ellos permite Una Lectura De Una Compleja Sensibilidad Social y Cultural era uña de.

"Una revista que publica." Este recurso se habrá pronunciado innumerables veces por un intelectual latinoamericano a sus compañeros. Entre las "estructuras elementales de sociabilidad", las revistas son "un lugar precioso para el análisis del movimiento de las ideas." En el expediente de Benjamín, Mabel Moraña sugirió que

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la revista "es Una PIEZA central, tanto en la reproductibilidad informes técnicos, programas y discursos, de como en el fortalecimiento de la auratización debilitamiento su". Jean-Marie Domenach, atronador autor del libro "Ta Propagande Politique" y director de Esprit durante casi veinte años, de una, señaló que: "[... est la revista l'outil le mieux l'intervención se adapte dans les domaines de la culture et de l'ideologie, raisons vierten trois Principales:. périodicité sa, sa souplesse diversité et sa " Entendida como una base de apoyo social, material y producción de propuestas e informes que circulan en el espacio público moderno, la revista puede considerarse corpus documental por excelencia:

[... Las revistas abren Una fuente privilegiada a Hoy que se llama la historia intelectual. Instituciones que generalmente se ejecuta por los informantes colectivos de la ONU acerca de ellos Costumbres Intelectuales período de las naciones unidas sobre Las Relaciones de Fuerza, poder, prestigio en el Campo de la Cultura, que en costumbres Medición Measurement Y repiten de Manera sencilla las que pueden leerse con baño Los libros editados simultáneamente .

La historia intelectual y el estudio de las revistas

"En América Latina eran principalmente investigadores de la crítica y la historia literaria de los responsables de hacer la revista objeto de estudio sistemático." Si el análisis crítico de las revistas culturales como fuentes y objetos de interés para el estudio más amplio de la primaria la historia, que se encuentra en Brasil, hasta el decenio, barreras de los prejuicios de órdenes distintos, permaneciendo siempre bajo sospecha y el impacto de varias conmociones cerebrales epistemológicos en el siglo XX, renovado polimorfo universo de las humanidades, incluyendo debe contar, en particular el giro lingüístico (giro lingüístico, el desafío semiótica), la historiografía ha mirado con interés en este "laboratorio donde experimentan Propuestas estéticas y POSICIONES ideológica".

Hay una fuerte tendencia dentro de la investigación que se ha llevado a cabo en revistas culturales, para el "contagio" saludable, por el desprecio hacia las fronteras, más institucional que de hecho esencial, entre las diferentes disciplinas. Por estas franqueáveis áreas serán vecinos intercambiarán conceptos, objetos y herramientas de análisis, múltiples sesgos que hacen que el estudio de las revistas culturales espacio fructífero para el diálogo y la convergencia interdisciplinaria. La historia, o más precisamente, la historiografía, ha participado en este diálogo a través de las contribuciones procedentes de algunas de sus ramas, como la historia intelectual y la historia política.

En la etapa actual, que se caracteriza por preguntas y reformulaciones, la historia intelectual o de la historia de los intelectuales, con su vocación de globalización y su característica "indeterminación épistémologique" parece ser un descendiente casi inclasificable de la historiografía en el curso de la subida de la transdisciplinariedad, la disminución del conocimiento totalizante y

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especialización excesiva. En línea con este contexto, la historia intelectual, de acuerdo con Ricardo da Silva, "se compone de un particular al margen del imperio de ortodoxias práctica disciplinaria." Incluso si usted ha formado un campo autónomo de estudio, su corpus teórico y metodológico se sigue caracterizando por una cierta turbidez, con parámetros imprecisos, por lo que es una disciplina que rayas redondas de indecidible. Probabilidad esto indecidibibilidade producto de esa crisis, todavía sin igual, tal vez, en el que Dominick LaCapra hecho un comentario en su conocido artículo? ¿O es que su etiología en algún fenómeno desconocido engendrada por el malestar de la condición posmoderna, la fuerte desregulación propensión que esta condición se cumple y lleva a los extremos? De todos modos, esta crisis no parece ser el privilegio de la historia intelectual, sino más bien co-producir los efectos que operaron cambios en diversas dimensiones de las ciencias humanas. Al igual que sus contrapartes en el universo de estas ciencias, historia intelectual se ha definido como "un campo de estudio marcada por la indeterminación de los objetos y la búsqueda de una verdadera identidad."

En busca de alguna sistematización, tal vez, Carlos Altamirano, en un artículo reciente, reconociendo que aburrido paisaje, esbozó un programa de investigación sobre la historia intelectual. En su diseño, se sugiere en los monumentos históricos desde una perspectiva que hace uso de la pluralidad, la combinación de los tres sub-áreas de conocimiento histórico para el estudio de la historia intelectual, a saber: "Historia Política, Historia de las élites culturales y el análisis histórico de la literatura` ~ de las ideas ". Altamirano ofrece aquí y allá, las pistas a tiempo a la investigación de la historia intelectual. Pinzas, con precisión, un comentario que sirve como un postulado general:

Si la vida social no tiene una estructura simbólica, no puede entender cómo vivimos, cómo hacemos las cosas y las ideas de proyectos en estas actividades, no hay manera de entender cómo la realidad puede llegar a ser una idea, o cómo la vida real puede producir ilusiones.

De esta cuenta enigmático y expresivo, utiliza como lema, y la comprensión de la historia intelectual como una interpretación fundamental de las estructuras simbólicas que constituyen la vida social y las ideas que agilizan el ensayista argentino analiza fugazmente en la aplicación de métodos y marcos teóricos de esta rama de la historiografía en el estudio de una enunciación apoyo en particular de las ideas, es decir, el registro textual, el texto escrito . Tierra Vast para la producción y difusión de este género que Altamirano, parafraseando a Marc Angenot define como "literatura de ideas", abundante en América Latina en los siglos XIX y XX en el contexto de la formación de los Estados-nación, los textos y, por extensión, la loci que son puerto privilegiado para la investigación sobre las fuentes de los procesos sociales e intelectuales.

¿Qué tan importante esta "literatura de ideas", producidos dentro de límites más estrechos y fuertemente marcados por el componente indígena, se refiere al

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ejemplo de la tradición ensayística de interpretación de la realidad latinoamericana. En la formación del pensamiento social latinoamericano y los momentos posteriores de su desarrollo fueron prolíficos intentos para explicar las realidades regionales y sus dimensiones históricas, sociales y culturales. Ahora recomendar el impulso modernizador, a veces dando más importancia al fortalecimiento de la identidad, las matrices de intelectuales de diferentes países del subcontinente trataron de construir, dentro de los marcos de cada uno de estos extremos, los sistemas de interpretación y definición de los elementos constitutivos de sus sociedades. Para la cadena de la proa del análisis y la crítica a favor de tal o cual la polaridad se afirmó infaliblemente por estas dos corrientes de pensamiento social en América Latina, una posición de la verdad, la legitimidad discursiva.

Para Altamirano, esta autodefinición ensayístico se basó en los criterios de lo que Marc Angenot define como discursos "doxológicos y persuasiva", vagamente presentes en la misma clase genérica que Angenot traducido la expresión "literatura de combate", y en su mayoría probablemente la apreciación del contenido moral o político. Entender revistas como un espacio muy hospitalario en relación con la clase particular de discurso que, como una mala clasificación, el poder designaría como "predicación laica" es plausible que se integren en los campos de una forma de expresión y floreció bastante cultivada en la esfera pública moderna, es decir, la "palabra panfletaria" término también acuñado por Angenot, en su contribución a la tipología de los discursos modernos. La palabra folleto es de la corporeidad, a veces a través de la sátira, a veces a través de la controversia.

Ambas realizaciones adquiridas por esa palabra "beligerante", la ironía es, la controversia es, todo lo que uno prefiere llamarlos, tienen una fuerte presencia en las revistas culturales, y, a veces, como en el ejemplo de la controversia, puede llegar incluso a , para autorizar a una revista.

La historia intelectual de origen francés que ha estado definiendo y estableciendo en el Instituto de Historia del Tiempo Presente (IHTP, en sus siglas en francés) de laboratorio es contextual y algo refractario a los excesos del formalismo sólo está interesado en los elementos y estructuras internas el texto, tal como se manifiesta en los modelos de análisis textual en boga en Francia en el año, con su peso en vacío por esquemas de interpretación casi matemáticos. Este campo historiográfico ", ubicado en la intersección de las historias políticas, sociales y culturales", ~ significa "el estudio de los intelectuales como actores políticos", y concede gran importancia a la vida social de manera irrevocable. A pesar de haber adquirido prominencia en la historiografía francesa, la historia intelectual se mantuvo, al menos en las zonas que se hacen eco de la Marsellesa, marginados durante mucho tiempo. La fuerza del enfoque cuantitativo, entonces considerado atributo indispensable de cualquier conocimiento que ambicionasse tener

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legitimidad científica, se centran en las "masas" y reactividad visceral en contra de "positivista" prevaleciente en la historia del pensamiento historiográfico francés relegado esta época, largos, entre los Pirineos y Reno, la historia de los intelectuales al "purgatorio de subobjetos de la historia." Se alegó que el ambiente intelectual francés era muy baja barrera de investigación que aspira a utilizar métodos estadísticos. Sin mucho esfuerzo, la mera referencia a la presente magro medios condujo espontáneamente el pensamiento hacia las áreas de influencia de una élite, una palabra que, en ese contexto, una glorificación de las "masas", provocó repugnancia. La historia intelectual, para ganar legitimidad en la historiografía, por lo tanto, debe ser separado de la historia de las elites. La desestabilización del ambiente intelectual francés, su crecimiento en la escala que con el tiempo dio lugar a su "masificación" a lo largo del siglo XX y los enfrentamientos ideológicos de la década fueron factores contribuyentes en Francia, para el derrocamiento de los prejuicios en contra de la historia intelectual de . Así, "cuando comenzó a ser profanado que intelectual puede convertirse en un objeto de la historia sobre la que el historiador no dudó en lanzar su red".

Revisando el libro Helenice Rodrigues da Silva, historiador IHTP asociado, titulada "Fragmentos de la historia intelectual: entre las preguntas y perspectivas", loo Marcos Antônio Lopes señala que el autor, en su texto, las búsquedas "no refutaron la trayectoria del intelectual el mundo histórico y las circunstancias en las que vivían y trabajaban. "lol Continúa aún más, haciendo hincapié en la necesidad de" rodear el análisis de los textos de una teoría de la acción. " Incluso el establecimiento de reservas sobre el enfoque de los aspectos de la historia intelectual francesa con la historia intelectual Inglés, la divisoria de aguas entre ellos aparece a lo largo del argumento Lopes, pierden efectividad y causarle una erosión de tal manera que lo que se observa en el desarrollo de este argumento encontrar y es un fuerte mezcla de aguas de estas corrientes.

Aunque no dedicar la misma atención a todos los nombres que presumiblemente subyacen en el marco teórico a partir del cual el autor de la obra reseñada hace uso de los intelectuales para analizar las vías y los contextos con los que se relacionan, al referirse más énfasis en la historia intelectual francesa alianzas con sus distancias y teórico horizonte conceptual que revela a los lectores de su revista es, sin embargo, una referencia subliminal a las consideraciones de Lopes Quentin Skinner en el artículo publicado después rechazado por varias revistas, la prestigiosa revista de EE.UU., de la Universidad Wesleyan , Historia y Teoría, titulado deliberadamente vago así que loa significado y la comprensión de la historia de las ideas. ios Las críticas a las notas de Skinner que son en este artículo sobre las dos cadenas o "ortodoxias" para usar el término propio, siendo muy popular en ese momento, y el enfoque contextualismo "textualista" del autor, llegaron a los estudios clásicos historia intelectual. Situado en lo que se conoce comúnmente como "Escuela de Cambridge", Skinner, aunque se considera el más obstinado de formalizar la metodología contextual, aunque pasó la mayor parte de

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las cincuenta páginas de su polémica recolección invectiva mordaz ya veces irónica contra el procedimiento "textualista" salvo, como se subraya, contextualismo. Hay que aclarar, por lo que tipo de contextualismo está enfocado cuando se desea hacer referencia a la metodología del historiador de Cambridge.

Sin embargo, el tamaño es el espacio ocupado por la preocupación por las condiciones sociales, económicas y políticas en los estudios históricos dirigidos al examen de ciertos productos, los edificios o las representaciones culturales que una relación de hecho casi mecánicamente se produce cuando les sugerimos la noción de contexto. Esta es la relación, tal vez reductiva, entre esta noción con los procesos y las contradicciones de la vida pública en la polis. Por lo tanto, al considerar el contexto, la primera asociación que tiende a surgir es con el tejido socio-político. Contra esta asociación un Skinner priori reservado algunas flechas del carcaj de su elocuencia. No hay que suponer, sin embargo, que la crítica que se ha formulado en el presente documento tiene como objetivo la negación categórica del argumento de que estas condiciones externas particulares pueden ayudar a explicar el esquema de ideas que constituye algunos textos. Lo que querían era impugnar los métodos postulan que la comprensión de estas ideas como meros epifenómenos de las bases materiales que optimizan las sociedades humanas. Estos soportes orden más objetivo, por lo tanto, sería para los fans de los métodos impugnados por Skinner, no sólo predictores de expresiones de una idea, sino también los factores únicos que deberían contribuir a la explicación del conjunto de ideas de algunos textos . Bueno, ese tipo de contextualismo si está disertando si se tienen en cuenta las declaraciones polémicas de Skinner?

Es el contextualismo lingüístico, cadena teórico-metodológico que Skinner es la figura más representativa, tal vez porque es el que, entre sus pares, como J. JGA Pocock y Dunn, quien, siguiendo los pasos de Peter Laslett, han sentado las primeras bases de la "Escuela de Cambridge", ha mostrado más dispuesto a ir al centro de atención, armado con argumentos para rebatir críticas y defender la legitimidad de la situación epistemológicas su perspectiva intencionalista, a veces acusado de relativismo, a veces objetivista, ahora exaltado a propagador de un historicismo conservador. La simultaneidad de tan numerosos y variados como las reservas Contextualismo lingüísticas paradójicas sólo muestra su propagación en las humanidades y calidad para dar lugar a desacuerdos. Independientemente de la valoración que desea asignar, el método de Skinner, al tiempo que destaca la importancia de la fuerza ilocucionaria contenida en el discurso, es decir, para fortalecer la relevancia de la intención y la acción que empujan ideas para la comprensión de su aplicación en determinados contextos , es una contribución a la investigación en la heurística historia intelectual en general y para el estudio de las revistas culturales en particular. En otras palabras, como señala Ricardo da Silva comentando sobre el método de Skinner: "Es la dimensión ilocucionaria de una emisión radica su fuerza como fuerza de acción que se identifica con la intención

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de que el agente de decir algo en un determinado contexto de las convenciones lingüísticas. "

Distanciándose de la comprensión del platonismo, según la cual el mundo de las ideas está formado por la especulación hipotética, inmutable, incorruptible y anistóricas esencias premisa de estudios escritos bajo el título de la historia de las ideas, el ejemplo más paradigmático posiblemente haber sido grande El cadena del ser, Arthur O. Lovejoy, Skinner, a partir de Robin G. Collingwood, Ludwig Wittgenstein y John L. Austin, defiende la importancia de una variable que los entusiastas de la historia de las ideas, que estaban muy ocupados con el análisis de los "documentos de gran tamaño", poco o nada se había tenido en cuenta, es decir, la formulación inherente de una agencia de idea, el escribir un texto, como se ha señalado en este comentario que hizo en el registro informal, lo intenta de nuevo, aclarar malentendidos solicitantes acerca de su pensamiento:

Cuando hablo de la intencionalidad de los autores, no me refiero al significado de los textos o declaraciones, pero el significado del acto de escribir el texto o dar un discurso. En realidad, mi teoría de la interpretación, a diferencia de otras teorías más tradicionales, da un gran énfasis a lo que yo llamo actos lingüísticos.

Sería un error suponer que el historiador de Cambridge, con su tenaz insistencia en la perspectiva intencionalista, sugiere que el historiador debe tener la ambición de tomar posesión, magistralmente, una declaración, incluso antes del momento en que fue concebido, lo que sería casi tan proponer un malabarismo formidable de la empatía. En la furia de cuestionar más la interpretación "tradicional" de los textos y también en el esfuerzo que se ha llevado a replicar objeciones al método que defiende las teorías de Skinner puede haber reducido la atención prestada a la claridad y el hecho que sus argumentos en algunas ocasiones, un tanto confundido. Cierto es que, confrontado por varios flancos, ha revisado algunas de sus formulaciones, pero mantiene la esencia de su punto de vista inicial. Resumiendo, se puede afirmar que el meollo de su argumento es la opinión de que "las palabras son también una acción" y pensar, como el Austin Cómo hacer cosas con palabras, que una idea expresada en el texto escrito es, por otra parte, un "acto de habla", capaz de transformar la realidad. El autor de un texto es, pues, un agente, cuyas ideas son susceptibles de causar efectos sociales. Teniendo en cuenta todavía Collingwood, un texto manifiesto pensó "podría ser ¬ en una intención, es decir, que` los efectos sociales del autor destinado a producir con su escritura. Contextualismo Skinner se deriva directamente de esta línea de interpretación. " Hecho este paréntesis, vale la pena volver a las sugerencias Lopes en el libro de la IHTP investigador, siendo más aguda ahora, lo que hace que la alusión implícita al contextualismo lingüística:

La historia intelectual, de acuerdo con la defensa de Helenice Rodrigues, invierte en la capacidad del hablante, la fuerza ilocutiva de expresión, la capacidad del sujeto para mentir como actor en el mundo, como un agente activo [sic] que se

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opone a los actores reales, como un coeficiente de fuerza que deseas darle a un blanco en su existencia histórica concreta.

Percibir mejor a sí mismos, en el medio, todo lo no dicho costura contextualismo lingüístico esta crítica extracto Lopes referencias. Por tanto, estos resultados ponen de manifiesto la presencia, en el método y el marco teórico del texto revisado, un paradigma de la historia intelectual que reconoce la creación y el producto de la lengua un documento que equipa el historiador para analizar el sentido de que los actores sociales, dotados de la acciones realizadas. Este paradigma tiene otra ambición importante: comprender cómo los discursos producidos por estos actores, embebidos en ciertas convenciones lingüísticas históricamente determinadas, no necesariamente lineal y de forma unilateral, sino que siempre opera como una referencia para ser absorbidos o negado, entender cómo estos discursos resuenan, medida que se reciben en el contexto que les dio las condiciones de la manifestación.

Entre las posibles formas en que el contextualismo radical Skinner puede ser de utilidad para el estudio, en particular, las revistas culturales, es precisamente el énfasis que le da la posibilidad de compartir las ideas que contiene, en la medida en que una revista de crítica cultural y política, cuando no es estrictamente institucional, tiende a surgir identificado con un celoso preparado, dirigido y sostenido por las formaciones intelectuales celosos de la independencia crítica del pensamiento y, más significativamente, el diseño de su posible impacto que estos proyectos se pueden ubicar en el conflicto espacio más allá de la zona de amortiguamiento que existe en la uniformidad de opiniones corrientes. En esta zona de conflicto en el que se inscriben las páginas de una revista, hay un lugar reservado para el estimulada y bastante polémico, son venales, son capital. Una revista es algo más que una revista, plegado sobre sí mismo y agotando a sí mismos dentro de los confines de sus pequeños círculos cerrados. ¿Quieres ir más lejos, quiere intervenir, modificar y, finalmente, promover el mantenimiento de una normatividad ya establecida. Así que es un espacio de acción o reacción, o la construcción o demolición, nunca un refugio para la inacción. Dicho de otra manera, se puede suponer que una revista de caza crítico o desestabilización de que la uniformidad, o la perpetuación de la atmósfera de un letárgico pax social y cultural mohoso.

Portavoz y el tirano: Las dualidades del intérprete

En la otra orilla del Atlántico Norte, una rama distinta de la historia intelectual de la Anglo-Saxon linaje, pero el crítico contextual perspectiva Skinner, formó filas para poner un poco de orden en el "movimiento browniano" de la teoría y su inclinación irresistible a la inestabilidad. Durante la década, hubo una sensación (sensación, digamos de paso, no parece todo lo que se ha disipado) que el campo de estudio de la historia intelectual pasó por un momento de crisis. Profesor del Departamento de Historia de la Universidad de Cornell, Dominick LaCapra dio

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cuenta en ese momento de la entropía teórico una oportunidad para que los profesionales en este campo de los estudios históricos pueden ser más elocuente en relación a la actividad artesanal que profesaban. Buscando reunir un arsenal transdisciplinario de perspectivas que conforman el ejercicio crítico, el historiador, el mencionado, también publicado en Historia y Teoría del artículo, escribió, casi en forma de manifiesto, la defensa de un enfoque en términos teóricos, se considera más fructífera para la historia intelectual, en particular, y para todos los sujetos, en general, se trata de "análisis de textos". Aversión a todo tipo de archivos binarios, no defendido por el análisis de los textos es, como en su momento abogó por la Nueva Crítica norteamericana y postula como la orientación de la corriente teórica conocida como internalismo ni énfasis en examinar los contextos y ni una síntesis reconciliadora , estrategia de salida que tiende a suceder más. Sostuvo, más bien, la disolución de la dualidad de texto / contexto. La adopción de la actitud de un oyente atento y paciente el pasado, o más bien, que se esfuerza por entablar conversaciones con el pasado, una actitud que se adhiere a la noción de la comprensión de la historia que reconoce en Heidegger y Gadamer, LaCapra argumenta que la historia intelectual es , al menos en parte, un diálogo con el pasado. Presenta este postulado respecto, la oposición al parecer, la otra corriente de la historiografía se basa en la reconstrucción documental del pasado, teniendo en cuenta que todo el documento como el producto de las negociaciones con la realidad, se encuentra inmerso en la textualidad: una comprensión histórica de cualquier contexto se refiere a textualizadas indefectiblemente se rompió el pasado para siempre impregnada de la lengua. "Para el historiador, el reconstrucción del 'contexto' o la 'realidad' se lleva a cabo sobre la base de los" restos textualizados "del pasado." No desdeña, sin embargo, la importancia del documental diseño, que, por cierto, considera el componente crucial para cualquier enfoque que afirma un predicado histórico, pero sostiene, en base a la evaluación que los historiadores no podrían ser buenos lectores, la propiedad de las herramientas para la interpretación texto aplicado en otras disciplinas: "la vida individual y social tiene en la estructura textual parte y está involucrada en procesos textuales son Que menudo más complicada que la imaginación histórica está dispuesto a permitir."

Incluso si uno se ha propuesto estudiar los textos canónicos, LaCapra, a diferencia de la historia de celebración de las ideas, tiene la inteligencia de que: "Estos textos no son absolutamente únicas, y los procesos que no son del todo peculiar revelan a ellos." Su intención es hacer hincapié en estos textos, que no va a cumplir con las esencias universales e imperecederos, una philosophia perennis como se prefiera clasificar estas esencias, sino acceder a un texto tipo de registro en el que "el uso del lenguaje se explora de una manera especialmente enérgica y crítica - la forma en la cola intérpretes nos involucra en una conversación particularmente convincente con el pasado ". Su enfoque es, en una palabra, dialógica, y la opción que hace que el estudio de los clásicos proviene de la ambición de tomar este

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enfoque hasta sus últimas consecuencias. Para LaCapra, una historia intelectual que plantea cuestiones importantes y que a su vez no elude, por tanto, su propia historicidad es aquella que se basa en una relación dialógica e histórica con el pasado sin ser "historicista" o "presentista" comprender textos como eventos, también revestido con la textualidad, en la historia de la lengua.

Perspectiva sostenida por el historiador de Cornell, por tanto, se distancia, por un lado, el historicismo, con su anhelo de una objetividad todopoderoso, y por otro, el presentismo, con sus concesiones dóciles a la entereza de la subjetividad. Historiografía, según reza este punto de vista, es la exaltación narcisista común cuando se incline, aferradamente, en la creencia de que "[... la investigación histórica del pasado es sólo la sombra de la investigación histórica en el presente." Cuando, por el estudio del pasado, sucumbiendo a los llamamientos acríticos a lo que Freud denomina modo de "transferencia", tiránicamente interpelando el objeto que desea conocer mejor, es decir, los significados que atribuyen que son más en sí mismos y en su propias circunstancias, la historiografía está haciendo caso omiso de la libre determinación de lo que fue en el pasado. Una incursión unilateral en el pasado que tiene como punto de partida la idea de que lo que no era más que una proyección de lo que se entiende, de acuerdo con este enfoque, como ciertamente no intervencionismo truculento desinteresado.

En otras palabras, ahora pensando en el texto como objeto de análisis, esta historiografía que no tienen o quieren tener el control de la ansiedad de la transferencia es, por LaCapra, "una cola agresión subjetivista ignora las formas en que los textos pueden realmente desafiar el intérprete y lo llevará a cambiar de opinión ". La manera de hacer esta conversación con los restos de lo que fue, y con frecuencia sigue siendo, romper el curso de la historia, en lugar de imponer un prevaleció irrumpieron junto a él para robar el acoso resiliencia de interpretación debe tener en cuenta el flujo y reflujo de que la idea del diálogo implica:

Incluso si se acepta la cola metáfora presenta la interpretación de la "voz" del lector histórico en el "diálogo" con el pasado, hay que reconocer activamente Que el pasado tiene sus propias "voces" que deben ser respetados, especialmente cuando se resisten o matizar las interpretaciones que nos gustaría colocar en ellos. El texto es una red de resistencias, y el diálogo es un asunto ¬ dos vías; también un buen lector es un oyente atento y paciente.

El "buen lector" estará atenta a los intersticios, las zonas opacas. Como LaCapra parece sugerir, el intérprete sabe que cumplan con las "voces" del pasado tal vez conseguir un interlocutor consecuente a soplar una brisa, incluso en urnas selladas donde a menudo estas "voces" en busca de refugio. Oxigenada estas encuestas con una fuerte brisa, sus juntas de resistencias podría verse perturbado. Corresponderá entonces responsable ante el lector, el historiador prezadíssimo Cornell como "oyente y paciente atento," buscar, en la huella de Heidegger, "pensar lo impensable" que está ubicado en los acontecimientos, en textualidades y la

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historia de la lengua. Joseph D'Costa Barros Asunción sugirió una interesante interpretación del método dialógico defendida por LaCapra:

El historiador dialógica asume la posibilidad de interpretaciones alternativas de examen desde muchos puntos de vista sin que el "voto decisivo" inclinarse hacia uno. Aunque expresar críticamente su particular punto de vista, la voz del historiador mismo es sólo una de muchas voces. El historiador dialógica que sería capaz de argumentar a favor de todos y cada uno, mientras que el argumento por sí mismo.

Cualquier cosa que uno prefiere pensar en los problemas que esto implica para el diálogo historiográfico hacer, parece inevitable llegar a la conclusión de que "[... que la temporalidad es Cierto mala manera constrictiva el intérprete proprio, circunscrita dentro Actuales coordenadas debate que sea interpretado para, accesible a sucesivos intérpretes en diferentes coordenadas ".

Hay otra fuente de pensamiento filosófico, alegórico, e historiográfico que si quieres añadir más, porque aquí es un pensamiento verdaderamente ubicuo y, como Michel Lowy inferir irreductible a la clasificación, que no escatimó energías en la búsqueda de este diálogo con el pasado. Para Walter Benjamin, la escritura de la historia, se mueve entre lo teórico y poético, invertir sin descanso en el movimiento dialéctico entre la cercanía y la distancia, a vagar por caminos erráticos, recogiendo fragmentos dispersos, descubre el parpadeo del pasado en el presente:

El camino es la aparición de una cercanía, sin embargo lejos de lo que queda. El aura es la aparición de algo lejano, sin embargo cerrarla es que evoca. En consecuencia, nos apoderamo la cosa: en el aura, que se apodera de nosotros.

Aunque LaCapra no ha mencionado en su artículo fundacional, Benjamin, de alguna manera, parece estar presente en el método dialógico presentado en Rethinking Intellectual History. Para el pensador alemán: ". Realizar el aura de algo significa invertir el poder para defenderse de la mirada" también reside allí, posiblemente, la capacidad de recuperación de las voces del pasado, el reto de las interpretaciones del pasado que el presente, a A veces, la búsqueda le endilgar.

En la medida en que las revistas culturales conforman "estructuras elementales de sociabilidad" que realicen simultáneamente a través de sus redes, las dinámicas socioculturales inclusivos y exclusivos, uniendo en muchas circunstancias sólo pequeñas fracciones, grupos, formaciones, cuyas perspectivas y definiciones tienden a ser autoatribuídas vuelven consideraciones absolutamente pertinentes LaCapra sobre estos intersticios del texto al que sus intérpretes deben ser siempre conscientes de que, al igual que sostiene Raymond Williams, el análisis social y cultural de cualquier tipo de grupo organizado tiene que "tener en cuenta no sólo

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las ideas y actividades abiertas, pero también las ideas y posiciones que están implícitos o incluso que se aceptan como un lugar común. "

Discursivamente producido como artefactos bajo ciertas condiciones materiales y subjetivas, cuyos productos son también, a la inversa, los agentes de estas condiciones falsificadores, revistas culturales son documentos que pueden informar acerca de la sensibilidad cultural de un tiempo en el clima político de los contextos específicos, así como reveladores muchos esfuerzos desde perspectivas subalternas para romper el "consenso fabricado", pero supuestamente evidentes. Del mismo modo, hay sin duda los que acompañan la marcha de ese propalam el continuo del desarrollo histórico. Programa de tendido, poseer y defender proyectos de intervención política y cultural como una razón de ser, éstos se ajustan y las estructuras importantes de la sociabilidad y de la organización de núcleos de intelectuales, formaciones progresistas o conservadores, derramando tinta para hacer la defensa de diversas visiones del mundo ya sea de los que se presentan como heraldos de la nueva, trae un proyecto contraria, ya los que ya se cristalizó en la intersubjetividad, transubstanciado en las políticas culturales dominantes:

Como instrumento de la cultura Mediación (que actúa en la zona de contacto entre las políticas hegemónicas Culturales Proyectos y alternativos entre los grupos de receptores Y CREACION artísticas, entre el sector académico y el de el Lector es intelectual que productos culturales al introducido a través de diferentes Interpretación la la Selección que le publication presentación la), la CASI Siempre es Una empresa educativa revisada - la política pedagógica y - aunque porciones de mar Las mas en Maneras de organización y en los informes filtrados IDENTIDAD Y los enlaces entre Traza campo Cultural El afueras y Sus (Regionales , Nacionales, Internacionales). Es, asímismo, sin vehicle Sociales del gusto en ciertos sectores de la Intelectuales que proponerlo Buscan, difundirlo, legitimarlo, a través de diferentes diversos conceptuales Operaciones, y de diferentes Apuestas estéticas e ideológicas.

Visto como un instrumento de mediación cultural, que "organiza y filtros" informes de la identidad, la revista parece alcanzar una posición de casi el deus ex machina, que aparece de repente para armonizar, con autoridad, lo que no es estructurado. Por lo tanto, incluso si es razonable entenderlos como mediadores culturales, para hacerlo-también está tomando un riesgo, es decir, considerarlos sólo como productores de discursos, como los constructores y ordenar la maraña caótica de las representaciones de mundo "real", sin tener en cuenta la influencia que esto incluso circulando, "reales" "superficie ESA resistente, cruzado por su tensión de significaciones, Hechos fragmentos Y del discurso [...]", hace que la constitución sus formulaciones. La revista no sólo manipular, "interpretar" y "seleccionar", sino también el argumento de la LaCapra, como intérpretes de un "verdadero"

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textualizados, tienen sus definiciones y perspectivas afectados por el objeto de tratar de desentrañar o incluso transformar.

Además de estar situado en contextos que aspiran a cambiar en varias ocasiones en las que tratan de formular interpretaciones inevitablemente influenciados por estos contextos, las revistas también representan un estudio crítico de artesanía y la práctica teórica:

El Medio pecado Puede del intelectual en referencia a que se pensó editorial Medio de la ONU, esa pecado esfera de la existencia produzca la la la Evolución de prensa y del periodismo; Instituciones pecado como organizations específicos u la Universidad de los Intelectuales como ellos les academias las revistas.

Para responder a esta necesidad, Sirinelli señala que las revistas son "estructuras de sociabilidad." Hemos comido en muchos casos, el estatuto jurídico e institucional, plasmados en un código de reglas con las funciones y prerrogativas debidamente formalizadas, como las revistas científicas y las instituciones. De todos modos, es interesante destacar que las revistas, especialmente en América Latina, han proporcionado un espacio supranacional de pertenencia y la convivencia en una comunidad intelectual a menudo tomado como aislados por barreras lingüísticas, geográficas, sociales, culturales y tantas otras rutas límites . De hecho, el "país real", que está encerrado en moneda fuerte, se puede sustituir por el omnipresente "país intelectual." En los diarios de América Latina, "hogar intelectual" de la intelectualidad del subcontinente, la transculturación propuesto por Ortiz y posteriormente revisada por Ángel Rama ocurrieron con menos obstáculos.

Si la historia intelectual, a través de las aportaciones de sus varios aspectos, proporciona un estudio teórico-metodológica sólida del marco de las revistas culturales, la historia política renovada a raíz de la cual, vale la pena recordar, la propia historia intelectual francesa recibió la flotabilidad también proporciona un marco conceptual sólida para la investigación en revistas.

La historia política de Francia, pasó mucho tiempo después del ejercicio predominio indiscutido en el siglo XIX, una especie de chivo expiatorio de la historiografía que surgió en el siglo XX. En su "lucha por la historia", los fundadores de la escuela de los Annales llamados, uno que impulsó el movimiento para romper la marcha de la historia, la narrativa, de hecho y de derecho hacia la historia-problema, holístico e interpretativo, desafiado, efusivamente, corriente de pensar que estaban en boga en los albores de la historiografía moderna, con el positivismo el más notorio representante de estas corrientes. Anatematizado positivismo era pequeño gesto que se hizo uso de la palabra todo lo que mantuvo algún vestigio de los principios epistemológicos que animaban las doctrinas influidas por comtismo, con su compromiso característico de cientificismo y la hostilidad hacia el idealismo. La historia política, tan en boga en el siglo XIX y abundante presencia en

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los libros de texto y los textos escritos bajo el título de positivismo, difícilmente habría sido indemne ante la furia iconoclasta de las nuevas generaciones. Desdeñado por el nuevo pensamiento historiográfico, la historia política, en ese contexto de la controversia y la refundición »era un cuadro perfecto ejemplo de la historia y dijo de hecho o de événementielle" que estaba siendo interrogado.

De hecho, hasta ahora la historia política siempre había sido construido en estrecha relación con las vicisitudes del poder y quién tiene, habida cuenta, en primer lugar, los hechos asociados a las transiciones y los espacios en los centros de poder y por lo tanto, coyunturas adyacentes. Si bien la historia política practicada en el Antiguo Régimen dio primacía a las monarquías y dinastías hereditarias, que se produjo después de la revolución liberal y la burguesía no era diferente modo sustantivo de su predecesor, salvo nominalmente, pues en lugar de monarcas y los linajes hereditarios, dieron atención a los jefes de Estado de las repúblicas nacientes. La irrupción turbulenta de las fuerzas sociales y sus manantiales que ardía Europa durante el siglo XIX reclamó el papel de las "masas". Había llegado el momento de poner en tela de juicio la máxima de que la historia la escriben los vencedores. "Ha llegado el momento de pasar de la historia de los tronos y dominaciones para las personas y las sociedades." El surgimiento de la democracia, el socialismo, el parlamentarismo, aunque el aumento concomitante del individualismo defendido con uñas y dientes por las fuerzas liberales, sacudió, poco a poco, el dominio intocable de los individuos y de los "grandes hombres", no sólo en la historia, sino también en la historiografía. Fez también sacudir la supremacía de cortos periodos de tiempo en los estudios históricos, es decir, ya no les interesaba apoteóticos actúa individuos excepcionales y distinguidos practicados en su ruta hacia el glorioso poder. Por lo tanto, los mecanismos más persistentes, con sus cimientos erigidos en el curso de una temporalidad abarcável sólo un metro que va mucho más allá de los éxitos anecdóticos, comenzaron a ser más relevante, independientemente de la escala alcanzada por estos éxitos: "Con ganas de llegar al fondo de cosas, para captar la esencia de la realidad, la nueva historia se sentían más real y los factores determinantes de las estructuras durables que los accidentes de medio ambiente. 's "Después de un largo período en que se mantuvieron en los bordes de la vacante en el siglo XX, transformaron radicalmente la conocimiento histórico, la historia política, en Francia, fue renovado a partir de los años ochenta, a raíz de la circulación de dos tipos de factores: externos e internos.

Por un lado, entre los factores exógenos que contribuyeron, por primera vez en el contexto nacional de Francia, para el rejuvenecimiento de la historia política se destaca, según René Remond, una tendencia de aumento de la "politización" de la sociedad contemporánea en el país de la Bastilla. En pleno auge en las sociedades de consumo y el creciente dominio de la lógica del individualismo, la catarsis política y colectiva caprichosa Eros pequeña burguesía se convirtió en un espectáculo juvenil en las barricadas de París, otro elemento externo cuya

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motivación para el rejuvenecimiento de la historia política no dejarse de lado: ". 's movimiento, a través de un uso extenso y algo abusivo del concepto de poder no ha contribuido poco a poner en primer plano la reflexión política" Así que, si los temas anteriores como con la moral, la religión, ecología, género órbita fuera de la esfera de la política, que se acercaba por el sesgo socioeconómico y casi siempre tan simple inferior secuelas de la infraestructura, con esta "politización" de un marco se vio como apolítica cimentado el camino para la retour de la historia política.

Por otra parte, tal rejuvenecimiento se inscribe, también llamada la "crisis" de las humanidades en general ", marcado por el fracaso de los sistemas globales de interpretación y paradigmas dominantes proporcionadas por el marxismo y el estructuralismo." En el flujo general de esta crisis como un factor interno de renovación, debe tenerse en cuenta también en relación con el retorno de la historiografía política, un momento de intensa y objetiva "re-examen de los conceptos y las prácticas tradicionales," esos mismos conceptos y prácticas que, en su época de esplendor, había dado lugar a los retratos que pintó ingenuos, forma idealista, el individuo como héroe de la historia.

En resumen, se podría decir que la historia política renovada, para ganar la plena ciudadanía en las áreas de influencia de la historiografía hegemónica que destronó a su antiguo campo epistemológico, tuvo que asimilar la perspectiva fundamental del nuevo paradigma guiar la escritura de la historia, experimentando así un cambio radical de dirección, como se ha señalado Remond:

Abrazando a la gran cantidad de trabajo en la duración, la toma de posesión de los fenómenos globales, mirando profundamente en la memoria colectiva, o inconsciente, las raíces de las convicciones y los orígenes de la conducta, la historia política describen una revolución completa.

En lugar de organizar todo el interés por los reyes y las intrigas de palacio o restringido a los avances y retrocesos de la razón de Estado, estudió a la luz de una perspectiva lineal y cuestiones de hecho, la historia política, para abrirse a otros objetos y actores comenzaron a estructurarse teniendo en cuenta una nueva comprensión de las dimensiones temporales. En verdad, esta comprensión no es nueva en absoluto, ya que claramente atravesada por la concepción plural braudeliana de tiempo, con sus tres niveles de periodización: corto, mediano y largo plazo. La terminología solicitante aplicada en las investigaciones de la historia política aparecerá aquí en adelante asociada con algunas de estas dimensiones del tiempo plural. Con pocas palabras, aparecerá golpes relacionados, revoluciones, etc decisiones ministeriales. Con una duración media, la historia de las partes, la "historia cíclica de compromiso intelectual." Por último, en el largo plazo, la cultura y la ideología política.

Aunque el curso de sus historias puede alcanzar un máximo de la duración media, ya que tienden a existir experiencias como efímeras, revistas culturales refugio en

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sus interiores, sus textos, el pulso frenético de los tres niveles de periodización , la historia en su conjunto muy flojo habitan sus discursos. Por cierto, ¿cómo podría reflejar más detenidamente acerca de la relación de revistas culturales y conciencia crítica que albergan con el momento en que se publican y leen?

Anacronía deliberada contra Pseudodoxia

"Sin duda vérsela ASI: malo que la ONU Desafío Desafío al Tiempo la revista it Tiempo ONU en el." Con esta frase del tema, Pablo Rocca introduce el primer párrafo de su ensayo sobre revistas culturales. Libro, en primer lugar, para el libro, el reino de sincronización, el largo plazo. Por otro lado, para la revista, el lugar de la diacronía, lo efímero, el don que le resulta esquiva. Mientras que el libro está concebido bajo el manto de lo sagrado, se pretende perdurable, eterno, si no eterna, la revista a menudo, hace que el conjunto de las relaciones de poder con problemas en los discursos de latencia, como una instancia de consagración autor, cánones, cultural, ideologías políticas. De todos modos, el tortuoso camino de auratização un libro a menudo se puede encontrar una revista cultural.

Cuando se considera la relación de revistas culturales con otros tipos de medios de comunicación, como los periódicos, las condiciones pueden ser revertidas. He aquí, pues, la antinomia identificados en la fórmula (en diferido, se extendió de pasajeros frente a transitorios) se en el periódico, publicado con frecuencia diaria, el lugar del fait divers, una información rápida sobre el momento inmediato y concreto y en la revista de la cultura, por lo general semanal o mensual, tendrá la marca de abstracción y análisis que dominan su densa ya veces impenetrable topografía discursiva. Esta inversión de términos, la revista cultural será, por tanto, el lugar de publicación de los textos producidos bajo el signo de desapego o enajenación derecho en relación con lo que ocurre en el instante fugaz de la turbulencia. Cuando Borges pensó que una revista se hace en el olvido, posiblemente haber imaginado, también, en contradicción consigo misma, que la polifonía de voces que orquestan, a menudo bajo la guía de un maestro calificado, como Victoria Ocampo en Sur, tiene como objetivo, con frecuencia, la realización de una canción sin coda, un sonido que no se disipa, un proyecto intelectual que quiere establecer. En cualquier caso, efímero o duradero, por lo menos tiene que ver con el periodo en el que circula, la revista de la cultura es, por definición, un área de la conciencia crítica y, como tal, puede poseer diferentes temporalidades. Entre las diversas dimensiones del tiempo abrazado por el ejercicio crítico, la anacronía no debe ser descuidado. Como bien observa el grupo editor de El Ojo Mocho, Argentina periódica definida como "crítico revista política cultural y":

[...] Implica dimensión crítica, del siempre, sin ser Cierto destiempo Frente a la Actualidad. Una anacronía que la búsqueda en el Pasado origen donde participantes Posible desde la fundación de su experiencia campana corriente que simplemente se encuentra en EL para juzgar desde do horizonte, el presente. Del modo Mismo surge en el porvenir como necesssary a usted evaluar que todo el

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tiempo acaece prospectivo. Desde ¿QUÉ TIEMPO Venimos? y ¿QUÉ HACIA TIEMPO somos? parecen ser ¿Tienes dudas? Las que atraviesan la crítica.

Este posicionamiento involuntario de la actividad crítica en relación con el presente, obviamente, no el aislamiento conlleva una obstinada y orgullosa del autismo en relación con las demandas urgentes del mundo circundante. El tamaño crítico, donde se manifieste, tendrá como objetivo estar marginalmente con respecto a la centralidad espacial y temporal, quiere estar fuera de tiempo y "fuera de lugar". O más bien, tienen más bien una tendencia a desconfiar del centro y periferia dualidad que subyace en el supuesto de que las ideas pueden ser en o fuera de lugar. La aceptación de esta hipótesis implicaría el acuerdo con una especie de "eugenesia" ideológicos según el cual existen, en primer lugar, aquellas ideas que son vírgenes y, por otra, las que están sucias, son malas palabras o degeneración pureza protegida bajo el manto de la unidad, universalidad.

Chance, una idea "en el lugar" no es la mejor traducción de la misma un lugar común, el estereotipo? ¿Cuál es el estereotipo, pero la quintaesencia de un discurso fijo y dominante catalogado, como señaló Raúl Antelo: "El estereotipo es signo irrefutable de necrosis verbal Donde hay un estereotipo, hay un discurso del poder, brecando la posibilidad de sentidos antagónicos. complejo o incluso parecen contradictorias. "conceptos de" unidad "y la" pureza ", estos dos pilares de la racionalidad moderna, ya sea los que están asociados con las ideas, ya sea que pertenezcan a la materia intangible menos, cuando ejercía con el objetivo de servir como estímulo para la formulación de axiomas tienden a dar lugar a resultados desastrosos, como recuerda Bauman:

Los delitos graves, a menudo dirigidos por grandes ideas. Pocas grandes ideas se manifiestan completamente inocente cuando sus seguidores inspirados tratan de convertir la palabra en realidad - pero algunos casi nunca pueden ser aceptados sin los dientes para descubrir y perfeccionar sus dagas. Entre este tipo de idea, ocupa la posición privilegiada de la visión de la pureza.

Cuando se ponen a la orden de la prueba, puede desatar una fuerza desestabilizadora de la creación. Sin unidad y sin casticismo que queda es el nombre ni quedar embarazada con posibilidades: "Lo que no tiene nombre, no tiene lugar, es poder puro también puede llegar a pasar, pero si ocurre, siempre se dividirá .. una fuerza que viene de arquipassado.o "Es que la fuerza con la que América Latina y sus revistas culturales, con vocación crítica que poseen, puede mover la atmósfera asfixiante de una cultura occidental estancada?

La principal contribución de América Latina a la cultura occidental viene de la destrucción sistemática de los conceptos de "unidad" y la "pureza": estos dos conceptos pierden el contorno exacto de su significado, pierden su estrangulamiento, su signo de superioridad cultural, contaminación de la labor de los Estados latinoamericanos, demuestra ser más eficaz. Latinoamérica establecer

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su lugar en el mapa de la civilización occidental gracias al movimiento de la desviación, activa y destructiva, que transforma los elementos hechos inmutables y que los europeos exportaron al Nuevo Mundo.

Esto sugiere que el Santiago opuesto con la noción de que entrelugar discurso crítico en su expresión latinoamericana, sería tal vez algo similar a la antigua heliodrômico mito, con brillo sol grande estrella y llevar la historia a un resultado glorioso. La crítica que sucumbe a la atracción seductora de este discurso mítico será, según lo indicado por Santiago, irónicamente, el destino de ese fotógrafo atraídos por la promesa de la redención contenida en una teleología que anuncia a sus fieles seguidores, la ruta segura hacia la mayor estrella:

El discurso crítico que habla de las influencias que han determinado la estrella como valor único que cuenta. Encuentra la escalera y conseguir que la deuda que se puede reducir al mínimo la distancia entre él insoportable estrella mortal e inmortal: este sería el papel del artista latinoamericano, su papel en la sociedad occidental.

La consecuencia de este mito hegeliano es la aceptación de un "fin de la historia", la culminación de un viaje a lo largo de un camino de ferrocarril, su irreversible hacia un paraíso hecho de un valor supremo que define la forma de Santiago " estrella inmortal ". Progreso cúmulos ni menos fuerzas inmanentes, este lugar edénico ha albergado anhelo expresado por la redención, a veces en la parusía, ahora el regreso del rey desapareció, ahora en la democracia liberal, a veces en la revolución, tomar este camino en busca del Grial o el telos manera que más le convenga. En cualquier caso, la periferia continúa queriendo ser como el centro y el centro permanece en su búsqueda Promethean para el infinito, y nunca lo encuentra, como han sugerido la evasiva Pitia Kadmon en su incansable búsqueda de la hermana de Europa perdida. A tener en cuenta que la conciencia crítica está siempre en movimiento y sin solución alguna parte, ya sea en el interior o en el exterior, o en el centro o la periferia, excepto tal vez en entrelugar, esta zona opaca y difícil de alcanzar imaginado por Santiago.

En definitiva, una revista cultural, actuando de producción tan importante vivero es, por definición, el espacio para los estereotipos, independientemente de cómo se manifestará, conservador o progresista. Puede haber un paralelismo entre los predicados de una revista cultural y colegios agente secreto de Joseph Conrad, que se entromete en las ideas dominantes, convirtiéndolos desde una perspectiva crítica, por un lado y por el otro, para que sean completamente anodino en su sentido original. Guardianes de los proyectos político-culturales no sólo se preocupan por jugar, sino también para cuestionar e intervenir. Como bien dice Beatriz Sarlo: ". Sintaxis la la ONU al revista rinde homenaje presente precisamente porque es Voluntad do intervenir para modificarlo" Porque no toda intervención aspira a cambiar el ámbito de la cultura o de las fuerzas de mesa complejas de conflictos sociales, también hay revistas con matriz contrarreformista geografía

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ideológica inclinados a "síndrome termidoriana." De todos modos, poco se puede prescribirlo o anularse sin autorización previa de su legitimación o escrutinio iconoclasta.