14
Teoría Lingüística TEMA 4. EL FORMATO DE UNA GRAMÁTICA GENERATIVA 1. LA ARQUITECTURA DE UNA GRAMÁTICA GENERATIVA Las gramáticas generativas de las diferentes lenguas están articuladas en torno a tres componentes fundamentales: un componente sintáctico, que tiene un carácter generativo o explícito, y que se encarga de la construcción de sintagmas a partir de palabras; y dos componentes interpretativos (el componente semántico y el componente fonético). Es decir, las gramáticas mentales (generativas) están compuestas de un conjunto de operaciones combinatorias, reglas primitivas, que no se pueden derivar de nociones semánticas o discursivas. El lenguaje consta de una serie de primitivos que no son semánticos ni discursivos, y su organización está determinada por factores internos, no externos. Por tanto, el lenguaje debe entenderse como un sistema autónomo e independiente, que serviría de mediador entre las propias estructuras internas de la lengua y sus posibles motivaciones externas (p.ej., factores sociales, comunicativos, culturales, etc.). Toda esta hipótesis, una de las más controvertidas en la historia de la lingüística, se conoce con el nombre de “la autonomía de la sintaxis”. La arquitectura del modelo consta de dos niveles de representación: la estructura profunda y la estructura superficial. La estructura superficial de una oración corresponde a la secuencia de palabras que pronunciamos. La estructura profunda se genera a partir de dos componentes autónomos: un léxico y un conjunto de reglas sintagmáticas de reescritura. A su vez, la estructura superficial se deriva al aplicar una regla transformacional a la estructura profunda. 2. EL FORMATO DE LAS REGLAS EN LA GRAMÁTICA GENERATIVA Chomsky distingue dos tipos de reglas: las reglas sintagmáticas de reescritura, que generan la estructura profunda de una oración, y las reglas transformacionales, que operan sobre la estructura profunda para generar la estructura superficial. Las reglas sintagmáticas de reescritura generan de forma explícita la estructura interna de los sintagmas y de las oraciones. El formato típico de una regla de este tipo es el siguiente: X → Z, donde el símbolo “→” es un símbolo de Página 1

teoria linguistica 4

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: teoria linguistica 4

Teoría Lingüística

TEMA 4. EL FORMATO DE UNA GRAMÁTICA

GENERATIVA

1. LA ARQUITECTURA DE UNA GRAMÁTICA GENERATIVA

Las gramáticas generativas de las diferentes lenguas están articuladas en torno a tres componentes fundamentales: un componente sintáctico, que tiene un carácter generativo o explícito, y que se encarga de la construcción de sintagmas a partir de palabras; y dos componentes interpretativos (el componente semántico y el componente fonético). Es decir, las gramáticas mentales (generativas) están compuestas de un conjunto de operaciones combinatorias, reglas primitivas, que no se pueden derivar de nociones semánticas o discursivas.

El lenguaje consta de una serie de primitivos que no son semánticos ni discursivos, y su organización está determinada por factores internos, no externos. Por tanto, el lenguaje debe entenderse como un sistema autónomo e independiente, que serviría de mediador entre las propias estructuras internas de la lengua y sus posibles motivaciones externas (p.ej., factores sociales, comunicativos, culturales, etc.). Toda esta hipótesis, una de las más controvertidas en la historia de la lingüística, se conoce con el nombre de “la autonomía de la sintaxis”.

La arquitectura del modelo consta de dos niveles de representación: la estructura profunda y la estructura superficial. La estructura superficial de una oración corresponde a la secuencia de palabras que pronunciamos. La estructura profunda se genera a partir de dos componentes autónomos: un léxico y un conjunto de reglas sintagmáticas de reescritura. A su vez, la estructura superficial se deriva al aplicar una regla transformacional a la estructura profunda.

2. EL FORMATO DE LAS REGLAS EN LA GRAMÁTICA GENERATIVA

Chomsky distingue dos tipos de reglas: las reglas sintagmáticas de reescritura, que generan la estructura profunda de una oración, y las reglas transformacionales, que operan sobre la estructura profunda para generar la estructura superficial.

Las reglas sintagmáticas de reescritura generan de forma explícita la estructura interna de los sintagmas y de las oraciones. El formato típico de una regla de este tipo es el siguiente: X → Z, donde el símbolo “→” es un símbolo de expansión o reescritura que puede traducirse como “sustitúyase X por Z con independencia del contexto en el que aparezca X”.

Ejemplos de reescritura sintagmática sería:

O → SN + AUX + SV

SV → V + SN

SN → (Det) + N

Es decir, una oración se puede reescribir en un sintagma nominal, un auxiliar y un sintagma verbal; un sintagma verbal se puede reescribir como

Página 1

Page 2: teoria linguistica 4

Teoría Lingüística

un verbo y un sintagma nominal; y, finalmente, un sintagma nominal se expande en un determinante y un nombre.

Por otro lado, las reglas transformacionales constituyen una de las aportaciones más significativas a la investigación lingüística contemporánea. Estas reglas responden a un doble propósito:

Establecer las relaciones entre oraciones que tienen una misma representación semántica, si bien son estructuralmente distintas (p.ej., las oraciones activas y pasivas o las interrogativas parciales). Por ejemplo, tomando las siguientes frases:

Mis tíos han comprado una casa.

Una casa ha sido comprada por mis tíos.

¿Qué han comprado mis tíos?

Son oraciones estructuralmente distintas, puse los SN ocupan posiciones diferentes, pero todas ellas tienen una misma representación semántica, pues los dos SN desempeñan siempre la misma función: agente y paciente, respectivamente. Esta relación entre las tres oraciones queda reflejada asignando la misma posición al objeto de comprar en la estructura profunda, mientras que posteriores transformaciones (reglas transformacionales) permiten obtener diferentes representaciones.

Diferenciar las representaciones sintácticas iniciales (estructura profunda) correspondientes a secuencias estructuralmente ambiguas. En la frase “la invitación del gobernador” existen dos posibles lecturas. Las reglas transformacionales proporcionan una solución, pues si se trata de un genitivo objetivo respondería a una descripción estructural del tipo X invitará al gobernador, mientras que si es un genitivo subjetivo, sería el gobernador invitará.

Un ejemplo de regla transformacional se da en las oraciones pasivas. Por ejemplo, “el ejecutivo compró nuestra casa” → “nuestra casa fue comprada por el ejecutivo”.

Podría darse el caso de que la estructura profunda coincidiera con la estructura superficial, lo que significa que no habría ningún tipo de regla transformacional. Por ejemplo, en Ricardo canta ópera, su estructura profunda coincide con su estructura superficial.

Con el paso del tiempo, el número de reglas transformacionales aumentó tanto que llegó un momento que para cada construcción que aparecía en una lengua determinada o para la explicación de un fenómeno lingüístico local, se proponía una nueva regla. El resultado fue un número inabarcable de reglas (p.ej., una transformación para la pasiva con ser, otra para la formación de construcciones interrogativas parciales, otra para las construcciones de relativo, etc.), de modo que la teoría perdía dos de los requisitos que una buena teoría debe satisfacer: economía y simpleza.

Además, uno de los objetivos principales de la Gramática Generativa es formular una teoría lingüística que proporcione una respuesta al problema de la adquisición del lenguaje. Una teoría llena de reglas planteaba problemas muy serios. En este sentido, la aparición de la Teoría de Principios y Parámetros, según Chomsky, “proporcionó un marco para

Página 2

Page 3: teoria linguistica 4

Teoría Lingüística

superar el conflicto entre los objetivos de describir una lengua y explicar la adquisición del lenguaje”.

Por tanto, el modelo inicial, basado en reglas, comienza a ser sustituido por uno basado en principios abstractos y sumamente restrictivos, que permiten sustituir un número apabullante de reglas por principios de máxima generalidad y de gran alcance explicativo.

3. LA TEORÍA DE PRINCIPIOS Y PARÁMETROS (TPP)

Si partimos de un estado inicial común a todas las lenguas (la Gramática Universal), una pregunta que se plantea es cómo podemos explicar la variación lingüística, es decir, los rasgos propios de cada una de las lenguas, de los que hasta entonces se ocupaban las reglas.

El sistema reglar se mostró poco eficiente, pues se advirtió, como señala Delmonte, “que con tales dispositivos pueden producirse demasiadas gramáticas y, por tanto, no puede caracterizarse la gramática”. Por ello, la Gramática Universal comienza a regular de manera precisa y restrictiva el funcionamiento individual de cada lengua a partir de principios generales más abstractos, que bien se pueden entender como generalizaciones que son relevantes al conjunto de varias reglas.

La TPP se articula en un conjunto de subsistemas (o teorías y módulos) y una única regla, Muévase α, que da cuenta de forma unitaria de todas las reglas transformacionales. Este conglomerado de subsistemas se manifiesta en cuatro niveles de representación, como se muestra en este esquema:

Se aprecian cuatro niveles de representación: dos sintácticos (la Estructura-P y la Estructura-S), uno semántico (la forma lógica) y uno fónico (la forma fonética). Además, sobre estos niveles se aplican un conglomerado de teorías que aparecen señaladas mediante un óvalo. De todas ellas, destaca la Teoría X-barra, por ser una de las más representativas e ilustrativas del

Página 3

Page 4: teoria linguistica 4

Teoría Lingüística

funcionamiento de la maquinaria computacional (es decir, del sistema de reglas explícitas) de las que consta la gramática, pues esta teoría establece las condiciones formales básicas que explican la manifestación y estructura de los constituyentes de una oración.

4. LA TEORÍA X-BARRA

Según el Principio de la Dependencia de la Estructura, todas las operaciones gramaticales (p.ej., la formación de oraciones interrogativas, de relativo, etc.) no actúan sobre las palabras que aparecen de forma lineal en una oración, sino que operan sobre unidades mayores, los sintagmas. Por tanto, el conocimiento lingüístico de una lengua y las reglas gramaticales que tiene un hablante son sensibles a la estructura y a la organización jerárquica (que no lineal) de cada uno de los constituyentes que forman parte de la oración.

Si las reglas gramaticales operan sobre sintagmas que, a su vez, son constituyentes, habrá que definir, en primer lugar, qué es un constituyente.

4.1. La noción de constituyente

Existen tres tipos de operaciones que permiten distinguir si una secuencia de palabras forma un constituyente y, por tanto, se comporta como una unidad. Estos criterios son los siguientes:

Coordinación: sólo aquellas secuencias que forman un constituyente del mismo rango pueden coordinarse. Por ejemplo, en “Juan escribió una novela y un poema de amor lleno de versos”, pueden coordinarse los dos sintagmas nominales (“una novela” y “un poema de amor lleno de versos”), pues, a pesar de su diferente longitud, los dos forman dos constituyentes del mismo rango (son SN). En cambio, en la frase “Juan escribió una carta y a su primo”, su estructura es agramatical, pues se está coordinando un SN y un SP, lo que no está permitido, pues sólo dos constituyentes del mismo rango pueden ser coordinados.

Sustitución: sólo aquellas secuencias que forman un constituyente pueden ser reemplazadas por una palabra. Por ejemplo, en la frase “Los jugadores quieren un nuevo entrenador y el público también lo quiere”, el SN “un nuevo entrenador” forma un constituyente, ya que puede sustituirse por un pronombre.

Desplazamiento: sólo aquellas secuencias que forman un constituyente pueden desplazarse. Es decir, los elementos que pueden desplazarse, es decir, que pueden aparecer en una posición distinta de su posición canónica en la oración, son siempre constituyentes. Hay que tener en cuenta que sólo los constituyentes frasales pueden desplazarse, es decir, sólo las categorías del tipo SN, SV, SP, SAdj, SAdv, podrán desplazarse.

Capacidad para formar preguntas y respuestas: sólo aquellas secuencias que forman un constituyente sirven para formar una pregunta o formular una respuesta o réplica. Igual que en el caso anterior, se trata únicamente de constituyentes frasales (SN, SV, SP, SAdj, SAdv)

Página 4

Page 5: teoria linguistica 4

Teoría Lingüística

4.2. La ambigüedad estructural

La ambigüedad estructural se da en aquellas oraciones que están sujetas a dos posibles interpretaciones. Para resolver este conflicto estructural, la noción de constituyente es clave.

Por ejemplo, en la frase “La policía disparó a los secuestradores con rifles”, la ambigüedad radica en el ámbito de aplicación del sintagma preposicional “con rifles”, que o bien puede modificar al verbo “disparar” o al sintagma nominal “a los secuestradores”. En el primer caso, el sintagma preposicional formará un constituyente, que es parte del sintagma verbal. Así, la interpretación que se obtiene es que la policía utilizó rifles para disparar a los secuestradores.

El árbol sintáctico quedaría de la siguiente forma:

En una segunda lectura, si el SP “con rifles” ya no modifica al sintagma verbal, sino al sintagma nominal “a los secuestradores”, y entonces la cadena “los secuestradores con rifles” forma un único constituyente, un sintagma nominal. En este caso, la lectura que se obtiene es que la policía disparó a un grupo de secuestradores que llevaban rifles. Su árbol sintáctico sería el siguiente:

5. LA ESTRUCTURA INTERNA DE LAS CATEGORÍAS LÉXICAS

En español, los cinco tipos de sintagmas básicos tienen el siguiente formato:

Página 5

Page 6: teoria linguistica 4

Teoría Lingüística

Esta representación recoge la jerarquía estructural de cada sintagma. Además, se advierte un patrón uniforme en el desarrollo categorial de cada uno de los sintagmas, de modo que todos se ajustan al siguiente esquema mínimo de representación:

Página 6

Page 7: teoria linguistica 4

Teoría Lingüística

Donde X es una variable (que puede ser cualquier categoría léxica) y X’ y XP son las proyecciones intermedias y máximas respectivamente. X’ se pronuncia “X con barra”, y X’’ (o XP) se pronuncia “X doble barra”. Esta representación viene generada por las siguientes reglas:

XP → (Esp) X’

X’ → X’ (YP)

X → X (ZP)

Un núcleo X se expande en dos niveles de proyección: una proyección intermedia X’ y una proyección máxima X’’, mientras que YP y ZP, que son opcionales, actúan como modificaciones y están sujetos a variación paramétrica en cada lengua.

Ejemplos de los sintagmas básicos en español serían:

La disputa de la ciudad – Sintagma Nominal.

Los Normandos [conquistaron la ciudad] – Sintagma Verbal.

Los Normandos estaban [deseosos de una victoria] – Sintagma Adjetival.

Los Normandos avanzaron [hacia el norte de la isla] – Sintagma Preposicional.

Los Normandos se situaron [enfrente del castillo] – Sintagma Adverbial.

Cada una de las reglas que conforman la Teoría X-barra deben cumplir los siguientes requisitos:

a) Endocentricidad: todo sintagma debe tener un único núcleo.

La figura 27 consta de dos núcleos, X e Y, por lo que, de acuerdo al principio de la endocentricidad, esta representación no es correcta.

Página 7

Page 8: teoria linguistica 4

Teoría Lingüística

b) Maximidad: toda categoría xn domina a un x que corresponde al nivel inmediatamente inferior, xn-1.

Como se ve en la figura 29, no se puede pasar de una categoría máxima X’’ a una terminal X.

c) Ramificación binaria: de cada nudo, salen dos ramas.

La figura 31 no respeta el principio, por lo que se clasifica como agramatical.

5.1. Complementos y adjuntos

No todos los modificadores tienen el mismo estatus; de hecho, se distinguen dos tipos: los complementos, que son modificadores que son seleccionados semánticamente por el núcleo, y los adjuntos, que son modificadores opcionales. Esta distinción se refleja en el siguiente árbol sintáctico:

Página 8

Page 9: teoria linguistica 4

Teoría Lingüística

Un complemento mantiene una relación de fraternidad estructural con una categoría X, mientras que un adjunto es hermano de una categoría X’. De hecho, todos los sintagmas vienen modificados por complementos y adjuntos.

En la frase “el diseñador de bañadores de Milán”, el SN (“el diseñador”) está modificado por un complemento (“de bañadores”) y un adjunto (“de Milán”).

Para aclarar la distinción entre complementos y adjuntos, se puede recurrir a las siguientes propiedades:

Orden de palabras: Los complementos deben situarse próximos al núcleo, ya que éstos son seleccionados por aquéllos. En el caso de los adjuntos, al no ser seleccionados semánticamente por el núcleo, pueden situarse más lejos de éste. Por esta razón, si permutamos el orden entre un complemento y un adjunto, la oración resultante será agramatical: “El profesor de medicina de Salamanca” (Correcta) – “El profesor de Salamanca de medicina” (Agramatical).

Recursividad: Se puede generar un número infinito de adjuntos que actúen como modificadores de un núcleo. Por ejemplo, “el vendedor de ordenadores de Japón, con el pelo largo, un abrigo negro y gafas oscuras”. Todos los SPs que modifican al núcleo nominal “vendedor” son adjuntos, pues aportan información adicional. Así, podemos agrupar cuantos adjuntos deseemos, lo que no sucede con los complementos pues, al ser seleccionados semánticamente por los núcleos, su número es finito.

Coordinación: Sólo aquellos constituyentes que tienen el mismo rango pueden coordinarse. Por tanto, esto implica que podremos coordinar un complemento con otro complemento o un adjunto con otro adjunto, pero si coordinamos un complemento con un adjunto (el primero es una categoría X y el segundo una categoría X’), la construcción resultante será agramatical. Por ejemplo, “el debate sobre los impuestos y en el parlamento fue áspero” (Complemento + Adjunto = Agramatical); “el fabricante de tornillos y de lámparas halógenas ha cerrado la fábrica” (Complemento + Complemento = Gramatical).

Ambigüedad estructural: En la frase “el diseñador de moda de Londres” existe una doble interpretación: el diseñador que diseña

Página 9

Page 10: teoria linguistica 4

Teoría Lingüística

moda (y no otra cosa), o el diseñador que ahora está de moda. Si consideramos la primera interpretación, el sintagma preposicional “de moda” actúa como complemento, pues el núcleo nominal “diseñador” selecciona una entidad que especifica qué es lo que diseña. Sin embargo, si partimos de la segunda interpretación, el SP “de moda” ya no funciona como complemento, sino como adjunto, pues nos ofrece una información adicional (que está de moda).

Página 10

Page 11: teoria linguistica 4

Teoría Lingüística

Página 11