Upload
others
View
3
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación
de una sociedad post-capitalista Barcelona, 7-12 de mayo de 2018
UN MUNDO ECOSOCIALISTA. APORTES MINIMALISTAS
DESDE UNA PERIFERIA TRAS MEDIO SIGLO DEL MAYO
FRANCÉS
Gabriel E. Videla Universidad de Buenos Aires
(y UNTReF, UAA, UPE y DES-Provincia de Buenos Aires, Argentina) [email protected]
A quienes luchan por la Pacha contra la devastación, los desmontes, la privatización.
A lxs trabajadorxs de empresas recuperadas, contra todo generando bienes e Historia.
A quienes enfrentan y denuncian la trata y el trabajo esclavo y sus complicidades. A quienes luchan sin transar contra las injusticias, la desesperación y el horror.
A quienes piensan y exploran qué otros mundos hacer y cómo. A Silvina, por todo
Este escrito intenta con modestia aportar vías de salida o mitigación para dos problemas
percibidos urgentes, relevantes y concatenados por innumerables científicxs, intelectuales,
políticxs, activistas y ciudadanxs: la “crisis ecológica” o las tendencias manifiestas e
inherentes al sistema dominante económico-social-cultural a trasformar y degradar las
condiciones físico-químico-biológicas en la Tierra que permiten la supervivencia de la especie
humana; y la “crisis civilizatoria” o ausencia de horizontes universalmente deseables que
ofrece un sistema cuya lógica de producción y acumulación incesante (mediante
procedimientos mundializados de explotación, opresión, desposesión, desvalorización y
alienación para las mayorías) rige, subordina y degrada los procedimientos reproductivos de
la humanidad y de la naturaleza1.
Ante esta doble constatación problemática y angustiante surgen varias respuestas. Entre las
pasivas domina la pura negación y elusión, el (sobre) vivir inercial; las infinitas adicciones
consumistas ofrecidas por el mercado; los fanatismos; la delegación ilusoria (algún vago
“otro” se ocupará de lo inquietante: “la tecnología”, “los científicos”, algún líder). Con
superior conciencia y recursos, los “proactivos” optan por microespacios de escape:
urbanizaciones cerradas, islas lujosas, cotos restringidos y privados, o los espacios
extraterrestres aptos para la vida humana que procura encontrar la NASA2.
1 Agradezco la valiosa colaboración de Sergio Esparza y de Gabriel Rodríguez (UNTReF, Argentina); las
críticas y aportes de edición de Silvina Quintero Palacios; la asistencia operativa de Lautaro Videla, y el estímulo
y provocación intelectual de María Andrea Nardi de Geografía Humana, KEG, Universidad de Lund, Suecia.
Los defectos, confusiones, errores y límites son de mi exclusiva responsabilidad 2 http://www.bbc.com/mundo/noticias-39206847 [8/3/2017. Consultado el 31 de marzo 2018 08.11hs de Buenos
Aires, - 3 GMT]
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
2
No obstante, la “hipótesis catastrofista” que afirma que, de mantenerse el modo, volumen e
intensidad de producción, circulación geográfica, consumo y contaminación en la biosfera
terrestre, se degradarán irreversiblemente las condiciones ecológicas necesarias para la
reproducción de la humanidad en la Tierra y/o de gran parte de la población mundial, también
generó respuestas teóricas y políticas.
La más difundida en los medios la dio el astrofísico Stephen Hawking3 en junio del 2017. En
el Festival de Ciencias Starmus en Trondheim, Noruega, instó a que la humanidad comience a
abandonar la Tierra: en 30 años (2047) hacia la Luna, en 50 años (2067) hacia Marte, y luego
a Alfa Centauri, nuestro sistema estelar más próximo.
Su llamado a colonizar muy pronto otros cuerpos celestes con humanos y especies terrestres
impacta. Sin embargo, su “vía transplanetaria de salida a las crisis” es tan audaz como
pesimista (renuncia a las luchas por salvar la Tierra), y finalmente es conservadora (ve en el
drenaje de recursos” y la “superpoblación” las únicas causas antrópicas del necesario
abandono), malthusiana y elitista (¿cuáles humanos emigrarían a no ser los de mayores
recursos y/o las y los “elegidos”?).
Diez años antes, el Informe 2007/2008 de las NN.UU. para el Desarrollo Humano advertía
que
El futuro de la solidaridad humana depende de un programa de colaboración masiva que ayude
a los países en vías de desarrollo a adaptarse a las conmociones del clima. El informe pide que
se eliminen los «obstáculos a la rápida distribución de las tecnologías con bajas emisiones de
carbono necesarias para evitar el peligroso cambio climático»; «no se puede permitir que los
pobres del mundo se hundan o naden con sus propios recursos mientras los ricos protegen a
sus ciudadanos tras fortificaciones que los defiendan contra el clima». «Dicho sin rodeos –
continúa–, los pobres del mundo y las futuras generaciones no pueden permitirse la
complacencia y la prevaricación que siguen caracterizando las negociaciones internacionales
sobre el cambio climático.» La negativa a actuar con decisión en nombre de toda la humanidad
sería «un fracaso moral de una escala inaudita en la historia»4
Existen otras respuestas a la vez teóricas y políticas, no elusivas ni filo-suicidas, orientadas a
construir una sociedad y geografía mundial diferente, con ínfima difusión y conocidas por no
más que puñados de intelectuales y activistas dispersxs por el mundo.
Hemos presentado cuatro propuestas en la comunicación presentada en el XIV Coloquio
internacional de Geocrítica5: el desarrollo a escala humana (DEH) de los chilenos Manfred
Max-Neef, Antonio Elizalde y Martín Hopenhayn6; el ecosocialismo tomando a Michel
Löwy7 como principal referente; el decrecimiento, en la versión “con equidad” promovida por
Luis Capalbo8 e influenciada por la perspectiva “del Sur global”; y el municipalismo libertario
3https://mundo.sputniknews.com/ciencia/201706221070179281-hawking-largaos-de-aqui/ [22/6/2017.
Consultado el 31 de marzo 2018 08.18hs] 4 En Mike Davis, 2010, p. 43, sobre el UN Human Development Report 2007/2008, pp. 6, 2. 5 Gabriel E. Videla, 2016 6 Max-Neef, Elizalde y Hopenhayn , 1998 7 Löwy, 2011 8 Capalbo, 2011
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
3
(ML) de Murray Bookchin9. No encontramos contradicciones insalvables entre ellas: pueden
–y deberían- confluir y fortalecerse mutuamente10.
En las cuatro confluyen utopías alter-capitalistas no productivistas y praxis, y ninguna apunta
a la “fuga planetaria”, pero sus énfasis y propuestas nucleares difieren. Aunque evita nombrar
al capitalismo, el DEH redefine “necesidades” y plantea valores y medidas que constituirían
valiosos pasos de transición hacia una civilización poscapitalista. El ML prioriza impulsar
formas organizativas democráticas de base, asamblearias y no burocráticas, sin eludir la
problemática ecológica (de hecho Bookchin también se consideró ecosocialista); y la
propuesta del decrecimiento, quizás la respuesta política más directa al diagnóstico
catastrofista, antepone la “caída de la producción y consumo” por sobre la cuestión
distributiva (¿quiénes deberían consumir menos? ¿la población mundial hoy rica o la pobre
con su hambre o extinción?).
En esta oportunidad, proponemos relevar la diversidad de perspectivas y matices políticos e
intelectuales asociados al referente “Ecosocialismo” (ES) en servicio de un “minimalismo
programático” que rescate y reafirme ejes comunes útiles para la acción.
Aspiramos clarificar ¿qué dimensiones y ejes configuran el Ecosocialismo?; ¿cuáles
elementos programáticos son comunes a quienes lo invocan?; ¿qué organizaciones
ecosocialistas se han conformado? ¿por qué vale y valdrá el esfuerzo de centrar al
Ecosocialismo en el horizonte ideológico de las “multitudes”, “gente” o “masas” como un
sentido común mundial hacia mediados del siglo XXI? y formular algunas propuestas.
Por cierto, hay múltiples modos y esferas de aportes en este sentido. Priorizamos identificar,
difundir y –de ser capaces- mejorar propuestas para un devenir humano en la Tierra
altercapitalistas y alterproductivistas tras haber adoptado tres axiomas.
Uno afirma, tras asimilarlo de Alain Badiou11, que el pensamiento político potente, creativo y
configurador de nuevas prácticas y realidades no es el reactivo a lo malo imperante, ni el
crítico a las perversiones del capital y sus adláteres, ni el que los resiste, sino aquel capaz de
afirmar “es posible lo imposible”, es decir, aquello que los poderes y su complejo ideológico-
mediático sentencian como “imposible” o “impensable”.
El segundo, quizás una hipótesis de interpretación histórica, podría formularse del siguiente
modo. Desde el siglo XVI, la economía-mundo europea y sus relaciones precapitalistas y
capitalistas de apropiación/despojo/destrucción y de acumulación/ explotación/
transformación han generado por doquier luchas incontables, heroicas e imposibles de
enumerar, que se siguen multiplicando como sus organizaciones políticas, sindicales o
ambientalistas. Pero más allá del corto plazo, estas luchas, al no disponer de una imagen
deseada alternativa más cautivante que los estímulos del sistema dominante, sucumben. Fue
sólo durante el período en que gran parte del lxs trabajadorxs, el campesinado y amplias capas
populares urbanas compartieron una utopía superadora –“el comunismo”-, cuando sus luchas
adquirieron poder a otra escala y consiguieron que el sistema les ofreciera concesiones al
9 Bookchin, 1984 10 Elizalde, A, 2008 11 Badiou, 1993 y 2000
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
4
percibirse seriamente amenazado. La implementación perversa del ideal comunista fracasó,
pero dejó una lección: una utopía, un nombre del deseo colectivo, una filosofía/instrumento
que, aún imprecisa, oriente la acción, es imprescindible para crear otro mundo.
El tercer axioma es identitario al interior de una pequeña comunidad. Un rol diferencial de lxs
geógrafxs es orientar entre procesos complejos (físicos y sociales) e interrelacionados a
diversas escalas. Si usualmente lo ejercen para los Estados, el capital o los organismos
supranacionales que lxs contratan, su corriente crítica, desde 1970, nos compromete a ofrecer
análisis y guía a quienes le disputan al par mercado/Estados.
Lo presentamos aquí por el prestigio ganado por los Coloquios de Geocrítica como ámbito de
ejercitación crítica entre las comunidades de la Geografía y las sociales peninsulares y
latinoamericanas; por su eventual difusión a colegas docentes y de la academia, y a través de
aquellxs y de la página en internet a nuestros destinatarios en primera y última instancia:
activistas, militantes, quienes luchan, crean y construyen generando nuevas prácticas y
trayectos. Si este esfuerzo les aporta algo útil, habrá tenido sentido.
El método utilizado es el análisis crítico y comparativo sobre manifiestos y programas
ecosocialistas, bibliografía y otros documentos pertinentes de diferentes formaciones
socioespaciales. El marco teórico es ecléctico y extenso pero no incoherente. Partimos de un
punto de vista ecocéntrico12 que juzga contingente la existencia (y la persistencia) de la
sociedad humana en la Tierra y que por ello desea, clama e impulsa a afrontar pública,
política, universal y conscientemente las amenazas.
América Latina acunó corrientes de pensamiento político y cultural con mayor énfasis en sus
diagnósticos y éxito en influir sobre políticas estatales (la dependencia, desarrollismos) que en
postular órdenes diferentes, expuesto en sus articulaciones subordinadas a los gobiernos
“progresistas” (populistas neoextractivistas y/o neodesarrollistas). Pero también generó
alternativas: el “bien-vivir”13, y el indianismo14.
Nos interesa poner en diálogo la (extensa) trayectoria teórica y política ecosocialista desde el
Norte y el Sur global15 con un enfoque teórico-político agudo y potente, el de la colonialidad
del poder.
Continúan cuatro partes. Definiciones de ecosocialismo y sus antecedentes teóricos; ¿qué
postula la teoría de la colonialidad del poder (TCP)?; hitos y organizaciones ecosocialistas; y
finalmente, propuestas programáticas y estratégicas minimalistas.
12 Michel Beaud, 1992; Guillermo Foladori, 2005 13 Aníbal Quijano, 2010; Ramón Grosfoguel, 2011 14 Maristella Svampa, 2010 15 Nuestras referencias principales, lejanas a agotar la diversidad de autores posibles, fueron James O’ Connor,
1998; el Manifiesto ecosocialista redactado por Joel Kovel y Michel Löwy 2001; el Manifiesto de Belém de Pará
del 2008; Ecosocialismo de Michel Löwy, publicado en Buenos Aires en el 2011, y un excelente estado de la
cuestión realizado por Lucila Muñecas en el año 2014.
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
5
¿Qué es y propone el ecosocialismo?
Claves diagnósticas de las perspectivas ecosocialistas
Es difícil superar las síntesis del sociólogo y filósofo franco-brasileño de origen austríaco
Michel Löwy, su máximo referente para el mundo latino:
Se trata de una corriente de pensamiento y de acción ecológica que hace propios los
conocimientos fundamentales del marxismo, al tiempo que se libera de sus escorias
productivistas. Para los ecosocialistas, la lógica del mercado y de la ganancia –al igual que la
del autoritarismo burocrático del extinto “socialismo real”– es incompatible con las exigencias
de protección del medio ambiente natural. Al tiempo que critican la ideología de las corrientes
dominantes del movimiento obrero, los ecosocialistas saben que los trabajadores y sus
organizaciones son una fuerza esencial para cualquier transformación radical del sistema y
para el establecimiento de una nueva sociedad, socialista y ecológica.
Esta corriente está lejos de ser políticamente homogénea, pero la mayoría de sus
representantes comparten ciertos ideales comunes: todos rompen con la ideología
productivista del progreso –en su forma capitalista y/o burocrática– y se oponen a la expansión
infinita de un modo de producción y de consumo destructor de la naturaleza. Esta corriente
manifiesta un intento original de articular las ideas fundamentales del socialismo marxista con
los conocimientos de la crítica ecológica16.
[…] El razonamiento ecosocialista se apoya en dos argumentos esenciales.
En primer lugar, el modo de producción y de consumo actual de los países avanzados, fundado
en una lógica de acumulación ilimitada (del capital, de las ganancias, de las mercancías), de
despilfarro de los RR.NN., de consumo ostentoso y de destrucción acelerada del medio
ambiente, de ninguna manera puede ser extendido al conjunto del planeta, bajo pena de crisis
ecológica máxima. De acuerdo a cálculos ya viejos, si se generalizara al conjunto de la
población mundial el consumo de energía medio de los EE.UU., las reservas conocidas de
petróleo serían agotadas en diecinueve días. Este sistema está basado necesariamente,
entonces, en la conservación y agravamiento de desigualdades flagrantes, empezando por la
que se da entre el Norte y el Sur (2011, 31).
En segundo lugar, […] la continuación del “progreso” capitalista y la expansión de la
civilización fundada en la economía de mercado –incluso bajo esta forma brutalmente
desigual- amenazan directamente, a mediano plazo (cualquier previsión sería azarosa), la
propia supervivencia de la especie humana. La protección del medio ambiente natural es, en
consecuencia, un imperativo para el hombre.
La racionalidad limitada del mercado capitalista, con su cálculo inmediatista de las pérdidas y
las ganancias, es intrínsecamente contradictoria con una racionalidad ecológica, que toma en
cuenta la temporalidad larga de los ciclos naturales. No se trata de oponer los “malos”
capitalistas ecocidas a los “buenos” capitalistas verdes: es el sistema mismo, basado en la
implacable competencia, las exigencias de rentabilidad, la carrera hacia la ganancia rápida, el
que destruye los equilibrios naturales. El pretendido capitalismo verde no es más que una
16 Löwy, 2011, p. 29 y 30
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
6
estrategia publicitaria, […] o en el mejor de los casos, una iniciativa local equivalente a una
gota de agua en el árido suelo del desierto capitalista17.
[…] Las reformas parciales son totalmente insuficientes: hay que remplazar la
microrracionalidad de la ganancia por una macrorracionalidad social y ecológica, lo cual exige
un verdadero cambio de civilización18.
El Ecosocialismo es una doctrina política surgida en el tránsito de los siglos XX y XXI que
articula las ideas fundamentales del socialismo marxista con las del ecologismo crítico. Los
ecosocialistas piensan que el capitalismo es un sistema inherentemente dañino tanto para la
sociedadcomo para el ambiente. Es una corriente a la vez teórica y práctica. Sus principales
ejes de discusión giran en torno a la concepción dela naturaleza en Marx, la revisión de la
teoría del valor y de las fuerzas productivas, la segunda contradicción del capitalismo entre
capital y condiciones de producción, y la superación de visiones ecologistas acríticas. La
disputa ecológica es también una disputa discursiva, por el sentido, llevada adelante por un
sujeto plural y heterogéneo que trasciende la escala nacional, regional, latinoamericana y
precisa, por definición, una articulación a nivel global19.
El Ecosocialismo o marxismo ecológico incluye una variedad de autores y matices en los
modos de concebir y retomar los aportes del materialismo histórico y la ecología crítica. Esta
diversidad enriquece los debates y mantiene encendidos el pensamiento y la acción política.
Para los ecosocialistas la crisis económica actual es indisociable de una crisis ambiental y
tiene orígenes que son también políticos y culturales. Demostrar lo indisociable de dicha
confluencia es quizá el aporte clave de esta perspectiva. La disputa por un cambio de
paradigma (productivo, cultural, civilizatorio en suma) no puede darse separando y aislando
los frentes. Medidas paliativas en el ámbito productivo (como el desarrollo de fuentes de
energía alternativas que disminuyan el impacto sobre el ambiente) resultan imprescindibles
para “lentificar la carrera hacia el abismo”, pero los cambios sustantivos sólo se alcanzarán
junto a los del plano del sentido, de ver la realidad desde distintos valores: el socialismo “sólo
puede llegar en bicicleta”20 con y hacia una ética solidaria, humanista, igualitaria y radical.
Todos los autores ecosocialistas coinciden en la necesidad de un cambio social radical.
En cuanto al aparato productivo, se impone la necesidad de reconversión tecnológica,
ocupando un lugar central la problemática energética, e insisten de todos modos en la
importancia de promover medidas paliativas para el “mientras tanto”, como por ejemplo
obligar a pagar impuestos elevados sobre insumos de materias primas y sobre ciertos
productos (automóviles, productos plásticos, envases desechables), “complementados con una
política de etiqueta verde que eximiría de impuestos a los productos genuinamente verdes21.
Promueven también políticas que subsidien masivamente la energía solar y otras fuentes
benignas y alternativas de energía, y los “ecoimpuestos”, siempre desde una lógica social
17 Löwy, 2011, p. 31 18Löwy, 2011, p. 31-32. Las cursivas en el original 19 Muñecas, 2014, p. 1 20 Jorge Riechmann, 2012 21 O’Connor, 1998, pág. 2.
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
7
igualitaria, que no caiga en responsabilizar únicamente al “ciudadano común” y que penalice
a los “responsables estructurales”. En palabras de Löwy “hacer que paguen los que
contaminan y no los consumidores”22. También acuerdan en que las luchas por reformas
parciales para mitigar impactos ambientales constituyen experiencias politizantes formativas.
Coinciden asimismo en poner en discusión el consumismo, como rasgo cultural intrínseco de
la sociedad capitalista. En este sentido, plantean la necesidad de una revolución cultural, un
cambio radical en las formas de ver, concebir y actuar, y de cuestionar el nexo íntimo entre la
lógica publicitaria y la capitalista, por el rol clave de la publicidad en manipular las
conciencias, sustento de la ideología consumista.
Joel Kovel23 postula que “el más grande de los logros del sistema (el que cumple plenamente
su destino de expansión) es la conversión al modo capitalista de pensar”. Es clave tener
presente las implicancias de otras instituciones en el mantenimiento del sistema vigente, el rol
de “la dirigencia científica, universitaria, docente, empresarial, barrial y hasta religiosa como
“paradigma ideológico” que garantiza la sostenibilidad social del modelo hegemónico24 y
disputar en el lenguaje y en la valoración otro tipo de civilización.
Antecedentes teóricos del ecosocialismo
El pensamiento ecosocialista (o marxista ecológico) posee una extensa prosapia. Un breve
registro diferencia dos contextos: los escritos de Marx y Engels a mediados del siglo XIX, y
la crítica radical al progreso y productivismo destructor de la Naturaleza de Walter Benjamin
en las décadas de 1920 y 1930.
En el primero, Löwy destaca la crítica marxista de la economía política, y la postura de Marx
de oponer al progreso destructivo capitalista una política económica basada en criterios no
monetarios y extraeconómicos: las necesidades sociales y el equilibrio ecológico. A su vez, el
poeta y novelista inglés William Morris durante las décadas de 1880 y 1890 promovió sus
ideas ecosocialistas en la Federación Socialdemócrata y la Liga Socialista.
En el contexto del comunismo estalinista, varios marxistas esbozaron sus críticas al
materialismo productivista. La obra del filósofo alemán Walter Benjamin es rica en críticas a
las nociones tradicionales de progreso, tiempo/historia, trabajo, técnica.
Retomando planteos del propio Marx, Benjamin insiste en la idea de que una “representación
materialista de la historia trae consigo una crítica inmanente del concepto de progreso”, que él
concibe no como evolución ad infinitum, continua, imparable, sino, antes bien, como
“catástrofe” y “tempestad”25, reflejo del impulso destructor del capitalismo.
En consecuencia, Benjamin, a diferencia del marxismo vulgar, insiste en la necesidad de un
nuevo pacto entre la sociedad y su medio ambiente26, redefiniendo la función de la técnica,
22 Löwy, 2011, p. 36 23 Kovel, 2002, p. 94 24 Jorge Rulli, 2011, p. 101 25 Benjamin citado en Löwy 2011, p. 78 26 Löwy. 2011, destaca la influencia en Benjamin de otro pensador: el socialista utópico Charles Fourier, como
pensador preocupado por la “reconciliación” entre sociedad y naturaleza.
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
8
como herramienta para controlar no ya a la naturaleza, sino a la relación entre la sociedad y la
naturaleza. Siempre pensando en la lucha de clases como motor de la historia, de lo que se
trata es de reconquistar la dimensión cualitativa del tiempo, construir una temporalidad
adecuada a las necesidades humanas y ecológicas, que tenga en cuenta la larga temporalidad
de los ciclos naturales.
Benjamin tomó distancia del marxismo productivista y evolucionista, poniendo en cuestión la
idea de que la revolución socialista era el resultado “natural” o “inevitable” del progreso
económico y técnico (la “primera contradicción del capitalismo” entre las fuerzas productivas
y las relaciones de producción). El planteó la revolución como “el acto por el cual la
humanidad que viaja en tren tira del freno de emergencia”, como la “interrupción de una
evolución histórica que conduce a la catástrofe”27.
Más allá de sus puntos de partida no siempre coincidentes, hubo pensadores que, sin
autoproclamarse ecosocialistas, contribuyeron al desarrollo de la corriente. Ignacio Sabatella
y Damiano Tagliavini28 destacan los aportes de investigadores soviéticos (Bujarín, Kasharov
y otros), que desarrollaron líneas de indagación en el sentido de un marxismo ecológico y que
fueron perseguidos, censurados por la burocracia estalinista, preocupada por el productivismo
e indiferente a consideraciones sobre los impactos de una industrialización acelerada en el
ambiente. Löwy destaca también los aportes posteriores de otros disidentes socialistas, como
Rudolf Bahro y su crítica radical en 1977 al modelo soviético y de Alemania oriental.
Ya en los años 1980 el estadounidense James O’ Connor teoriza su concepción de marxismo
ecológico y funda la revista Capitalism, Nature and Socialism. Por entonces el partido Die
Grünen alemán, una corriente de izquierda, se designa “ecosocialista”: sus referentes eran
Rainer Trampert y Thomas Ebermann.
En 1992 Penny Kemp, Frieder Otto Wolf, Carlos Antunes, Isabelle Stengers, Pierre Juquin29 y
Wilfrid Telkamper redactan el libro Europe’s Green Alternative, intento de manifiesto
ecosocialista europeo.
En Barcelona discípulos de Manuel Sacristán como Francisco Fernández Buey desarrollan
una reflexión ecosocialista. En 2001 Joel Kovel y Michel Löwy redactan el Manifiesto
Ecosocialista. En el año 2003 el congreso de la IV Internacional adopta el documento
“Ecología y Revolución socialista” de inspiración ecosocialista. En París en 2007 se funda la
Red ecosocialista internacional que durante el Foro Social Mundial en Belém do Pará, Brasil,
distribuirá un nuevo manifiesto ecosocialista internacional.
Otro referente ecosocialista es John Bellamy Foster, quien desde la Monthly Review, revista
de izquierda de los EE.UU., apela a una revolución ecológica con un programa socialista. El
marxismo ecológico del alemán Elmar Altvater es al mismo tiempo una crítica a la “ecología
de mercado” por no cuestionar al sistema capitalista, y del “socialismo productivista” que
ignora la cuestión de los límites naturales. En el siglo XXI el revolucionario peruano Hugo
27 Benjamin citado en Löwy, 2011, p. 82 28 Sabatella y Tagliavini, 2011 29 Löwy 2011, p. 15 lo califica ex dirigente comunista, “reformista converso a las perspectivas rojiverdes”
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
9
Blanco impulsa una reflexión sobre las relaciones entre indigenismo y ecosocialismo, y
surgen redes ecosocialistas en Brasil y Turquía.
De las “contradicciones fundamentales” a su eclosión: aportes al
ecosocialismo desde el enfoque de la teoría de la colonialidad del poder
Recordemos el diagnóstico de partida ecosocialista: la continuidad del modo de producción y
consumo capitalista agrava y acelera la degradación y erosión de los procesos reproductivos
naturales que han hecho posible la aparición de la humanidad y de sus civilizaciones, y por
ende debemos reemplazar con urgencia el orden capitalista y lentificar o revertir los procesos
que alteran la Tierra. Es coherente que el núcleo del pensamiento teórico ecosocialista aborde
la segunda contradicción del capitalismo entre capital y condiciones de producción, y que
cuestione los límites analíticos y propositivos del ecologismo acrítico.
Sin embargo, ¿son suficientes estas contradicciones, centradas en lo económico y que desde
allí incorporan aspectos culturales y ecológicos, para comprender por qué hay tantos factores
a la vez comunes y distintos en diversas geografías que dificultan una articulación
mundializada de luchas?
Dado el origen marxista del ecosocialismo, se entiende que sus pensadores partan de analizar
el proceso de producción material, la evolución del capitalismo, sus crisis y sus efectos
devastadores sobre la naturaleza y los grupos humanos. Es más: la teoría trostkista del
desarrollo desigual y combinado30 acepta el conocimiento establecido del desarrollo desigual
como una realidad observable de la condición histórica, y enfatiza al contexto internacional
para entender los desarrollos tanto económicos como políticos nacionales. Trotsky señaló que
es el proceso de creación de combinaciones el que engendra particularidades en el desarrollo
de las relaciones sociales de la producción.
De todos modos, el interrogante persiste: ¿alcanza la teoría marxista para comprender cómo la
humanidad se estaría acercando a su propio suicidio? Nuestra respuesta es no.
Un aporte potente, holístico e incómodo a las izquierdas y elites intelectuales del Norte lo
formula desde el Sur la teoría de la “colonialidad global del poder (TCP)”. No es éste el lugar
para desarrollarla en extenso31 pero es ineludible mencionar a su mentor, el sociólogo,
politólogo y militante peruano Aníbal Quijano y a otros de sus referentes: el filósofo
argentino/mexicano Enrique Dussel, el semiólogo argentino Walter Mignolo y el sociólogo
puertorriqueño Ramón Grosfoguel.
Este enfoque de modo alguno quita validez al análisis marxista, es más, lo adopta, pero
amplía y multiplica la consideración de las contradicciones y los ejes de
explotación/opresión/dominio devenidos con la expansión de la economía-mundo (europea
hacia el año 1500) a escala mundial. El concepto de “colonialidad del poder”, acuñado por
Quijano, refiere a un patrón de poder global surgido con la llegada y posterior dominio
30 O’Connor, 2003 31 Textos recomendables para introducirse a esta corriente son los de Aníbal Quijano 2000 y 2010, Ramón
Grosfoguel 2006 y 2009, y el de Pablo Quintero, 2010
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
10
europeo de América. La colonialidad del poder estaría constituida por dos ejes centrales: la
idea de “raza” como fundamento de todo el sistema de dominación a escala global, y la
articulación de distintos modos de producción en una única estructura de producción de
mercaderías para el mercado mundial: el capitalismo. Dicho patrón de poder colonial podría
haber sido impuesto, hipotéticamente, por diversas economías-mundo32 (la árabe, la china,
etc.) pero en el proceso histórico real fue un fenómeno originado en Europa, “eurocentrado” y
trasmitido por el eurocentrismo.
“Eurocentrismo” nomina a la imposición de un enfoque -o cosmovisión- propia de una
pequeña del mundo (Europa occidental) distorsionado sobre los dominados que los obliga a
verse con los ojos del dominador, anulando su propia perspectiva histórica y cultural bajo el
patrón de poder vigente. Por otra parte, el capitalismo desintegra y absorbe a los antiguos
patrones de control y organización del trabajo, y articula distintas formas de explotación en
múltiples contextos heterogéneos, reconfigurando un único orden mundial encarnado en el
actual patrón global del control del trabajo.
Las implicancias de este enfoque son múltiples.
Lo que es nuevo en la perspectiva de la «colonialidad del poder» es cómo la idea de raza y
racismo se convierte en el principio organizador que estructura todas las múltiples jerarquías
del sistema mundial. Por ejemplo, las diferentes formas de trabajo articuladas a la
acumulación capitalista a escala mundial son asignadas de acuerdo con esta jerarquía racial; el
trabajo coercitivo (o barato) es realizado por personas no europeas en la periferia y «fuerza de
trabajo asalariado libre» en el centro. […] La idea de raza organiza la población mundial en un
orden jerárquico de personas superiores e inferiores que se convierte en un principio
organizador de la división internacional del trabajo y del sistema patriarcal global. Contrario a
la perspectiva eurocéntrica, la raza, el género, la sexualidad, la espiritualidad y la
epistemología no son elementos añadidos a las estructuras económicas y políticas del sistema
mundial capitalista, sino una parte constitutiva integral e imbricada del amplio y entramado
«paquete» llamado el sistema mundo europeo moderno/colonial capitalista/patriarcal.33
El autor distingue el concepto “colonialismo”, referido a las administraciones coloniales
pretéritas, y el de “colonialidad”, que nos permite entender la continuidad de formas
coloniales de dominación después del final de las administraciones coloniales.
La «colonialidad del poder» se refiere a un proceso de estructuración social en el sistema
mundo moderno/colonial que articula lugares periféricos en la división internacional del
trabajo con la jerarquía global racial/étnica y la inscripción de los migrantes del Tercer Mundo
en la jerarquía racial/étnica de las ciudades globales metropolitanas. Los Estados-nación
periféricos y las personas no europeas viven hoy bajo el régimen de la «colonialidad global»
impuesto por los Estados Unidos por medio del Fondo Monetario Internacional (FMI), el
Banco Mundial (BM), el Pentágono y la OTAN. Las zonas periféricas permanecen en una
situación colonial aun cuando han dejado de estar bajo una administración colonialista34.
32 Peter Taylor, 1994, p.6 33 Grosfoguel, 2006, p. 26 34 Grosfoguel 2006, 29 y 30
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
11
Así como Wallerstein aboga por “impensar las ciencias sociales” para distinguir sus aportes
válidos de los puramente eurocéntricos35, Grosfoguel niega desde la TCP la primacía de
alguno de ambos polos de la teoría crítica (el “económico” y el “cultural”) considerándolo un
falso dilema, llama a “generar nuevos lenguajes” como el “transmoderno” y advierte que las
categorías críticas sólo pueden ser generadas por las y los oprimidas(os) de cada pueblo:
Durante los últimos 510 años del «sistema mundo europeo/euroamericano
capitalista/patriarcal moderno/colonial» pasamos del «cristianízate o te disparo» del siglo XVI
al «civilízate o te disparo» del siglo XIX, al «desarróllate o te disparo» del siglo XX, al
«neoliberalízate o te disparo» de finales del mismo siglo y al «democratízate o te disparo» de
comienzos del XXI. Sin respeto ni reconocimiento a las formas de democracia indígenas,
africanas, islámica u otras no europeas. La forma liberal de la democracia es la única aceptada
y legitimada. Las formas de alteridad democrática son rechazadas. Si la población no europea
no acepta los términos euroamericanos de la democracia liberal entonces se les imponen por la
fuerza en nombre de la civilización y el progreso. Es preciso reconceptualizar la democracia
en una forma transmoderna con el fin de descolonizarla de la democracia liberal, es decir, de
la forma de democracia de occidente, racializada y centrada en el capitalismo.36
Para orientar las luchas de los pueblos y nuevas formas organizacionales, Grosfoguel postula
su proyecto de “diversalidad anticapitalista descolonial, universal y radical”:
[…] Una forma de universalidad que haya dejado de ser un diseño global/universal
monológico, monotópico e imperial, de la derecha o la izquierda, impuesto por persuasión o
por la fuerza al resto del mundo en nombre del progreso y la civilización. Llamaré a esta
nueva forma de universalidad una «diversalidad radical universal descolonial anticapitalista»
como proyecto de liberación. En oposición a los universales abstractos de las epistemologías
eurocéntricas, que subsumen/diluyen lo particular en lo mismo, una «diversalidad radical
universal descolonial anticapitalista» es un universal concreto que construye un universal
descolonial respetando las múltiples particularidades locales en las luchas contra el
patriarcado, el capitalismo, la colonialidad y la modernidad eurocentrada desde una diversidad
de proyectos históricos descoloniales epistémicos/éticos. Esto representa una fusión entre la
«transmodernidad» de Dussel y la «socialización del poder» de Quijano.
La transmodernidad de Dussel nos conduce a lo que Walter Mignolo (2000) ha descrito como
«la diversalidad como proyecto universal» para descolonizar la modernidad eurocentrada,
mientras que la socialización del poder de Quijano abogue por una nueva forma de imaginario
universal radical anticapitalista que descolonice las perspectivas marxistas/socialistas de sus
límites eurocéntricos. Tal lenguaje común debe ser anticapitalista, antipatriarcal,
antiimperialista y contra la colonialidad del poder hacia un mundo donde el poder esté
socializado, pero abierto a una diversalidad de formas institucionales de socialización del
poder dependiendo de las diferentes respuestas éticas/epistémicas descoloniales de grupos
subalternos en el sistema mundial37.
Reproducir los diseños globales socialistas eurocéntricos del siglo XX, que partieron de un
centro unilateral epistémico y eurocentrado simplemente repetiría los errores que llevaron a la
izquierda a un desastre global. Éste es un llamado a un universal que sea pluriversal (Mignolo,
2000), a universal concreto que incluya todas las particularidades epistémicas hacia una
35 Wallerstein 1998 36Grosfoguel, 2006, 20-41 37Grosfoguel, 2006, 44
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
12
«socialización del poder descolonial transmoderna». Como dicen los zapatistas, «luchar por un
mundo donde otros mundos sean posibles»38.
De la teoría a la praxis. Hitos, organizaciones ecosocialistas, y programas:
un cuadro abierto a ampliarse
Habiendo apuntado que la expresión “ecosocialismo” surgió de un partido de izquierda
alemán a inicio de la década de 1980, el siguiente cuadro da una pequeña muestra del devenir
de hitos y organizaciones ecosocialistas, y algunos postulados que permiten identificar puntos
programáticos. El cuadro, por cierto, está felizmente abierto a ser mejorado y completado.
Cuadro 1. Muestra de (algunos) hitos, organizaciones y/o redes ecosocialistas
Hito u organización y
fuentes/ referentes 39
Fecha Algunas definiciones e iniciativas
Manifiesto Socialista
Internacional.
Michel Löwy y Joe
Kovel. París, Francia
2001
/ 09
“Un futuro reconciliado con la naturaleza y la propia humanidad exige
un cambio radical de perspectiva,en los modos de producción y
consumo, que pongan en el centro de la vida las necesidades básicas de
todas las personas, democráticamente determinadas y ajustadas a los
límites biofísicos del planeta (Ecosocialismo).”
SocialistResistence,
Reino Unido 40
2002 “Ecosocialista, feminista, revolucionario”
Rede brasileira
ecossocialista
Porto Alegre
Brasil41
2003 “El ecosocialismo retiene los objetivos emancipatorios del socialismo de
la "primera época", rechaza los objetivos reformistas de la
socialdemocracia y las variaciones burocráticas del socialismo. El
ecosocialismo insiste en redefinir la trayectoria y el objetivo de la
producción socialista en contexto ecológico. Lo hace específicamente en
relación a los "límites al crecimiento", esencial para la sostenibilidad de
la sociedad. El objetivo es la transformación de las necesidades, un
profundo cambio de dimensión cualitativa, no cuantitativa. Desde el
punto de vista de la producción de mercancías, esto se traduce en una
valorización de los valores de uso en detrimento de los valores de
cambio un proyecto de relevancia a largo plazo basado en la actividad
económica inmediata”
Primera Conferencia
Ecosocialista 42
2007 Desarrollada en Vicennes, París, Francia
Declaración
ecosocialista
internacional de
Belém do Pará
Brasil43
(Firmada por
ciudadanos de 36
países)
2008 “El movimiento ecosocialista tiene como objetivo detener y revertir el
desastroso proceso de calentamiento global en particular y el ecocidio
capitalista en general, y construir una alternativa radical a la práctica y el
sistema capitalista. El ecosocialismo se basa en una economía basada en
los valores no monetarios de la justicia social y el equilibrio ecológico.
Critica tanto ‘la ecología de mercado’ como el socialismo productivista,
que ignoraba el equilibrio de la tierra y sus límites. Redefine la ruta y el
objetivo del socialismo dentro de un marco ecológico y democrático. El
ecosocialismo implica una transformación social revolucionaria, que
conllevará la limitación del crecimiento y la transformación de las
38 Grosfoguel,2006, 45 39http://alterecosoc.org/manifiesto-final/?lang=es Joel Kovel y Michel Löwy 40http://socialistresistance.org 41http://www.terrazul.m2014.net/IMG/pdf/manifesto_ecosoc_f 42Ian Angus, Joel Kovel, Michel Lowy 43http://www.rebelion.org/docs/110041.pdf
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
13
necesidades por un profundo desplazamiento de los criterios económicos
cuantitativos a los cualitativos, el énfasis en el valor de uso en lugar del
valor de cambio.”
Art. 71 a 74
Constitución Ecuador
2008 Determina normativamente a la Naturaleza sujeto de derecho
Ley N° 71 Derechos
de la Madre Tierra,
Bolivia
(PachaMama o
Madre Tierra adopta
el carácter de sujeto
colectivo de interés
público)
2010
12-21
Artículo 2) Principio de Bien Colectivo en virtud del cual, “el interés de
la sociedad, en el marco de los derechos de la Madre Tierra, prevalecen
en toda actividad humana y por sobre cualquier derecho adquirido”. El
Principio de Garantía de regeneración de la Madre Tierra, establece
que “el Estado en sus diferentes niveles y la sociedad, en armonía con el
interés común, deben garantizar las condiciones necesarias para que los
diversos sistemas de vida de la Madre Tierra puedan absorber daños,
adaptarse a las perturbaciones, y regenerarse sin alterar
significativamente sus características de estructura y funcionalidad,
reconociendo que los sistemas de vida tienen límites en su capacidad de
regenerarse, y que la humanidad tienen límites en su capacidad de
revertir sus acciones”.En su complemento, el Principio de Respeto y
defensa de los Derechos de la Madre Tierra, establece que “el Estado y
cualquier persona individual o colectiva respetan, protegen y garantizan
los derechos de la Madre Tierra para el Vivir Bien de las generaciones
actuales y las futuras”; y a través del Principio de No mercantilización
se ha dispuesto expresamente que “no pueden ser mercantilizados los
sistemas de vida, ni los procesos que sustentan, ni formar parte del
patrimonio privado de nadie”
Manifiesto
Ecosocialista
argentino44
2010 “Una sociedad que se base en: a) igualdad social, b) democracia
participativa, c) nueva racionalidad de carácter ecológico, d)
colectivización de los medios de producción, e) planificación
democrática y participativa de la inversión, la producción y el consumo,
y f) nueva estructura ecológica-tecnológica de las fuerzas productivas”
EcosocialistHorizons
Nueva York.
EE. UU.45
2011 “Avanzar en el ecosocialismo como una cosmovisión y como un
movimiento capaz de ofrecer respuestas reales a las crisis causadas por
el capitalismo. Sean sociales, económicas o ecológicas, es necesario un
enfoque integrado. 1: Proporcionar noticias y análisis de la preocupación
ecosocialista a través de un sitio web y otras publicaciones; 2: Educar a
nuestros miembros para producir trabajo creativo y organizar eventos y
acciones. 3) Avanzar y luchar hacia un horizonte ecosocialista”
Partido Ecosocialista
de Murcia. España4647
2011 “…transformar la sociedad sobre la base de los principios de
la ecología social, la democracia participativa y el socialismo"
Venezuela48 2012 “En el 2004, la Revolución Bolivariana de Venezuela se declara
antiimperialista, en el 2006, socialista y en el 2012 como ecosocialista”.
Crea elMinisterio del Poder Popular para Ecosocialismo y Aguas.
RéseauÉcosocialiste,
Canadá 49
2012 Sintetiza una ecología anticapitalista y un socialismo libre de lógicas
productivistas
EcosocialistGoup.
Vancouver, Canadá 50
2013 “Es necesario cambiar el sistema al profundizarse la crisis climática
(…). Justicia social, derechos humanos, eliminación de racismo y
sexismo, derecho inequívoco de originarios a su autodeterminación, fin
de la guerra y el militarismo (…) . Estas luchas deberían orientar
44 Firmado por el Grupo Ecosocialista, que pronto se desintegró, en su redacción participaron Ignacio Sabatella,
Fernando González y Damiano Tagliavini, y contó con la colaboración del autor. 45http://ecosocialisthorizons.com/ 46http://ecosocialistasdelaregiondemurcia.blogspot.com.ar/2013/06/del-ecosocialismo-la-democracia.html#more 47http://ecosocialistasdelaregiondemurcia.blogspot.com.ar/ 48http://www.minea.gob.ve/ecosocialismo/ 49http:///ecosocialisme.ca/ 50http://ecosocialistsvancouver.org/
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
14
alianzas en causas comunes en todos los ámbitos como punto de
resistencia contra la extracción, producción y transporte de combustibles
fósiles”
Tercer Encuentro
Ecosocialista
Bilbao, España51
2016 “Extender conciencia ecosocialista y feminista en el planeta. Impulsar
una red ecosocialista internacional y propuestas legislativas que
favorezcan transiciones ecosociales. Confrontar tratados internacionales
que perjudican el medioambiente y las condiciones de vida. Sostener
experiencias que buscan construir embriones de una economía
democrática, equitativa y sostenible; de un consumo justo y responsable,
de una cultura alternativa que fomente las relaciones humanas basadas
en la igualdad y el apoyo mutuo. Abordar la ‘revolución de nuestra vida
cotidiana’. “Vivir simplemente para que otros puedan simplemente
vivir”.
MST (Movimiento de
Trabajadores al
Socialismo)
Argentina52
2017 “En lugar de un sistema basado en la producción de valores de cambio -
cosas para vender-, planteamos una orientación basada en la producción
de valores de uso -cosas necesarias socialmente. ¿Y quién decide qué es
útil socialmente? La mayoría de la clase obrera y el pueblo,
empoderados económica y políticamente (…) arrebatar al mercado la
decisión de qué producir y consumir. (…) Ese objetivo tiene que ser
compatible con la preservación del medioambiente. Es decir: socialismo
ecológico, ecosocialismo. Esto puede implicar necesariamente prohibir
industrias como la megaminería, el agronegocio, el fracking, la
cementación anárquica, la publicidad, el armamentismo. (…) Nuestra
razón de ser es garantizar el pleno empleo repartiendo las horas de
trabajo y reduciendo la jornada laboral con igual salario. Esto implica
reducir el volumen material de lo producido. (…) Garantizar también
comida suficiente, accesible y saludable. Energía basada en renovables y
limpias. Fomento del transporte público estatal con control social para
desincentivar el transporte individual. (…) Estos vectores para pensar un
programa política anticapitalista y ecosocialista son cruciales para la
renovación programática en la izquierda revolucionaria”
Elaboración del autor, con la colaboración de Sergio Esparza y Gabriel Rodríguez (UNTReF, Argentina).
El Cuadro 1 muestra el incremento de las definiciones programáticas y de su especificidad,
superando las últimas a las declamaciones más genéricas de los primeros documentos.
Además, permite advertir cómo la emergencia de ideas con un eje conceptual y político
común se han procesado en distintas expresiones políticas (manifiestos, puntos programáticos,
ministerios, artículos de Constituciones y leyes, etc.), articulándose con luchas específicas en
cada territorio, desde cada cultura y organizaciones diversas de distintas geografías.
Ecosocialismo plural. Proponiendo puntos programáticos desde el Sur
confluyentes con la teoría de la colonialidad del poder
En el cuadro 2, se contraponen dos tipos o “modelos” de sociedad. En una columna se
exponen descripciones de lo que hay, lo que da y ofrece el orden capitalista neoliberal para
distintas esferas de los imaginarios sociales y la praxis, cómo nos induce a percibir y pensar y
a conformar nuestros sueños y aspiraciones, y cómo el neoliberalismo realmente existente
51http://alterecosoc.org/manifiesto-final/?lang=es 52https://mst.org.ar/por-que-ecosocialistas/
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
15
ordena y gestiona esferas y procesos clave de la vida alienando a la sociedad humana y
destruyendo la naturaleza.
En la otra columna, ponemos a disposición del debate y la construcción colectiva “imágenes
deseables” o utopías de cómo podría ser, hacerse, soñarse una sociedad ecosocialista, y para la
discusión de la formulación de políticas sectoriales concretas.
Enunciamos cada propuesta específica desde un ánimo instrumental, plástico, como
instrumentos a ser moldeadas en cada lucha por el pueblo que la libre y en su propio contexto.
¿Podemos brindar mejor homenaje a las y a los protagonistas del glorioso Mayo francés que
echar a volar la imaginación hacia otros poderes, para una deriva del mundo distinta y mejor?
Gran parte de las propuestas programáticas ecosocialistas son comunes a sus organizaciones y
“clásicas” de esta corriente.
Otros imaginarios propuestos en el cuadro 2 quizás no reflejen de modo ortodoxo esa
tradición ya que fueron inspirados por el pensamiento latinoamericano y sus praxis colectivas:
la teoría de la colonialidad del poder, la del desarrollo a escala humana, la versión argentina
del decrecimiento53, los movimientos de ocupantes de tierras urbanas y campesinos, las
empresas recuperadas por los (los) trabajadores(as)54, el movimiento piquetero y las
asambleas antimineras, entre muchos otros.
Cuadro 2. (Algunas) perspectivas, postulados y propuestas capitalistas/neoliberales, y ecosocialista plural:
Campo /esfera En este mundo capitalista neoliberal… En un mundo ecosocialista plural…
Cosmovisión Rige el deseo inmediato (o
cortoplacista) del yo (individual,
grupal, social): que lo(s) demásen el
futuro se las arreglen
Formamos y somos parte de órdenes
cósmicos, planetarios, ecológicos y
socioculturales que nos trascienden: luchar
para su perpetuación y mejora
Imagen deseada
(y precio a pagar)
Consumo, riqueza material,
ostentación, acumulación individual y
de elites, erigir construcciones o
eventos monumentales como símbolo
de riqueza social. “Tener” y “ostentar”
vale más más que “ser”. (Devastación
y contaminación de la Naturaleza,
calentamiento global, derroche y
drenaje de recursos, amenazaa
supervivencia)
Solidaridad y armonía entre mujeres y
hombres (y niñxs y ancianxs) y la
Naturaleza y toda forma de vida. Riqueza =
biodiversidad, diversidad étnica, lingüística,
artística, científica, humana: “Ser” es más
que “tener”. Reparto de pocas horas de
trabajo para todxs y c/u (“ni
sobreexplotación laboral ni desempleo”).
Recomposición de ecosistemas naturales
(restricciones a consumos suntuarios)
Régimen político Democracia representativa del
mercado: quienes representan (a las
corporaciones) obtienen sus
recursos/poder para gestionar el orden
(lo que hay, capitalista) en que
aquellas se desenvuelven
Democracia participativa asamblearia,
autodeterminación, y modalidades de
consulta directa: el colectivo social delibera
y decide y otorga mandatos revocables a
referentes/voceras(os)
Principio 1) Generar valor + de cambio = + 1) Generar valores de uso: bienes y servicios
53 Capalbo, 2011 54 Andrés Ruggieri 2014
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
16
productivo ganancia = + acumulación de capital
(productos adictivos y suntuarios,
drogas, armas, etc.
2) La producción material (y su
consiguiente destrucción/alteración de
la Naturaleza) es per se positiva,
afirma al poder (superior) humano
necesarios para el “bien vivir” colectivo e
individual (no adictivo ni alienante).
2) La biosfera terrestre es el ecosistema más
rico de la humanidad: producir sólo lo
necesario, respetándolo y reparándolo
Derechos Priman los de las corporaciones, los de
la propiedadprivada, y del “hombre”
Priman a la vida, a la paz y al bienestar
colectivo y de minorías, y de la Naturaleza
Medio ambiente
mundial
Se reitera el ciclo “Conferencias
cumbre” – acuerdos débiles sobre
objetivos -incumplimiento – negocios
“verdes”
Naturaleza sujeto de derecho primordial a
escalas (sub) nacionales yexoestatales (aguas
internacionales, Antártida)
Relaciones
internacionales
Prima la fase “globalizada” del
imperialismo. El Norte (centros de
acumulación mundial) impone sus
normas, corporaciones, tecnologías,
agendas cultural mediática y científica,
recibiendo valor a escala mundial (a
costa de la pobreza, explotación y
degradación estructural en la periferia)
“Reconciliación histórica entre las
sociedades del mundo”: el Norte pide perdón
y se evalúan los costos generados por sus
genocidios y ecocidios en el Sur desde la
conquista europea del siglo XVI, más los
correspondientes intereses. Eventual
negociación por fin de toda deuda “externa”:
ni las del N ni las del S
Salud Prima valor de cambio (dinero por
cura) mercado de drogas y
complejidad alta para ricos, y poca y
pobre para pobres
Prima vida saludable, no alienada y
preventiva: armonía mente /cuerpo /afecto
/cuidados /integración/ emoción /entorno.
Energía Priman intereses de complejos
petrolero-automotriz, y nuclear
Prima ahorro energético (derroches
innecesarios) y limpias (eólica/ solar)
Transporte Prima el individual (automóvil) Priman los colectivos con calidad
Ramas
económicas
socialmente
“negativas”
Limitación a publicidad y consumo del
cigarrillo. Ilegalidad de algunas drogas
(complejo narco)
Limitación severa y/o prohibición selectiva
y/o total de industrias tabacalera, narco,
armamentista, publicidad, packaging, y
minería altamente contaminante entre otras
Paisaje urbano Prima privatización de tierras,
especulación y edificación para ricos
y/o pro renta
Prima preservación y regeneración de
ecosistemas, espacios públicos y edificación
selectiva: vivienda para todxs
Paisaje rural y
extraurbanos
Ha primado durante ¿300, 400 años?
desforestación, monocultivo, pastoreo,
pérdida de suelos, desertificación
Reforestación, remediación y recuperación
más pronta posible de ecosistemas
biodiversos, suelos, y que absorban CO2
Género Machismo. Primacía del hombre, del
patriarcado y de relaciones
heterosexuales
Equidad entre géneros y apoyo a luchas de
movimientos feministas y subjetividades que
luchan por igualdad de derechos
Lenguaje Machista. “El” hombre “re”presenta a
la mujer; “todos” también habla de
“ellas”
Unigénero cuando corresponde: ella(s)
es/son mujer(es), el(los) es/son hombre(s), y
ellxs (o elles) = mujeres y/+ hombres
Fechas honradas En general patrióticas, religiosas,
fiestas y de calendario
Las que cada sociedad decida, + “Día del
(la) defensor(a) de la Naturaleza”
Estatus/ prestigio Predominio racial blanco, por posesión
de capital, tierras y bienes y/o por
prestigio (meritocracia, los
“ganadores”)
Igualdad racial, étnica, de género y cultural.
Premio al “Mejor aporte del año a…” la
Naturaleza, la Humanidad, etc.
Circulación en
espacio mundial
Fluyen dinero, capital y mercancías
(físicas e intangibles) con escasas
restricciones: muros contra
inmigrantes
Flujo libre de circulación de ideas, cultura,
arte, ciencia, bienes y personas por el
espacio mundial, con restricción energética
Pobreza extrema Priman declamaciones
bienintencionadas, leyes financieras y
Shock de recursos para alimentación de
calidad, salud pública, vivienda digna y
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
17
el Banco Mundial no logra disminuir
mil millones de indigentes
educación masivas: eliminación de miseria
Para sobrevivir en la Tierra y el “bien vivir” ganar elegimos renunciar. Renunciar al confort
innecesario, al consumismo alienante, a la soledad confundida por redes sociales, a la
competencia sin sentido. Como cantó en los años 1990 una legendaria banda de rock
argentina, “-el futuro llegó hace rato. Todo un palo, ya lo ves55”.
Para disfrutar el planeta, para sobrevivir en un mundo deseable, debemos trabajar en disputar
los imaginarios y promover ideas, valores y propuestas ecosocialistas. ¿Por qué no podrían
constituir un sentido común ante los graves problemas del mundo en la segunda mitad del
siglo XXI? Con macizo financiamiento, esto logró el neoliberalismo desde su oscura
marginalidad política hasta el golpe militar en Chile en 1973.
Tenemos poco tiempo y recursos. Pero disponer de un nombre, Ecosocialismo, de una
consigna que tras décadas englobe y guíe a muchas luchas, de una palabra que sintetice paz,
bienestar y armonía entre humanas(os) y con la naturaleza, es vital como el aire.
Bibliografía
AA.VV. Declaración ecosocialista internacional de Belem do Pará. En LÖWY.
Ecosocialismo. La alternativa radical a la catástrofe ecológica capitalista. Buenos Aires:
Editorial El Colectivo, 2011, 147-157.
BADIOU, A. La Ética. Revista Acontecimiento nº 8, 11-93. Bs. As. 1993 y en internet
BADIOU, A. ¿Qué es la política? y ¿Qué es una política de emancipación?. Conferencias de
Alain Badiou 24 y 25 de abril del 2000. En
Revista Acontecimiento N° 19-20, Buenos Aires. [En línea]
http://antroposmoderno.com/antro-articulo.php?id_articulo=631 9 de enero 2016
BEAUD, M. A partir de la economía mundial: bosquejo de un análisis del sistema mundo. In:
AA.VV. El Nuevo sistema del mundo. Coloquio de la Sorbona, París, PresseUniversitaire de
France y K&AI Edic., Bs. As 1993, 1992, p. 84-100.
BOOCHKIN, M. Seis tesis sobre municipalismo libertario, Instituto de estudios anarquistas,
Chile. [En línea] http://www.scribd.com/doc/3930914/Murray-Bookchin-Seis-tesis-sobre-
municipalismo-libertario 9 de enero 2016
CAPALBO, L. ¿Decrecer con equidad? Un nuevo paradigma civilizatorio. Ed. CICCUS, Bs.
As., 2011, p. 5-15 y 143-179.
DAVIS, M. ¿Quién construirá el Arca?. In New Left Review en español n° 61, 2010.
55“Todo un palo” Patricio y Rey y los Redonditos de Ricota
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
18
ELIZALDE, A. Ecología, ética, epistemología y economía: relaciones difíciles, pero
necesarias. In: CAPALBO (comp.) El resignificado del desarrollo. CICCUS, Bs. As. 2008,
p.111-137.
FOLADORI, G. Una tipología del pensamiento ambientalista In: FOLADORI, Guillermo y
PIERRI, Naína (coords.) ¿Sustentabilidad? Desacuerdos sobre el desarrollo sostenible.
México, 2005. Miguel Ángel Porrúa.
GROSFOGUEL, R. La descolonización de la economía política y los estudios postcoloniales:
transmodernidad, pensamiento fronterizo y colonialidad global. In: Tabula Rasa N° 4, enero-
junio 2006, p. 17.46. Bogotá, Universidad Colegio Mayor de Cundinamarca. [En línea
http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=39600402 31/3/2018 21hs]
GROSFOGUEL, R. Izquierda e izquierdas otras. Entre el proyecto de la izquierda
eurocéntrica y el proyecto transmoderno de las nuevas izquierdas descoloniales. In: Tabula
Rasa, N° 11, julio-diciembre 2009, p. 9-29. Bogotá, Universidad Colegio Mayor de
Cundinamarca. [ http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=39617332001En línea 31 de marzo
2018 21.15hs]
HAN, B-C Psicopolítica. Neoliberalismo y nuevas formas de poder. Barcelona: Herder, 2014.
KOVEL Joel. El enemigo de la naturaleza. ¿El fin del capitalismo o el fin del mundo?
Buenos Aires, 2005 (2002). Tesis 11.
KOVEL, J. y LÖWY, M. Manifiesto ecosocialista internacional. In LÖWY, Michael.
Ecosocialismo. La alternativa… 2011, Opcit 2001, p.137-141)
[http://rcci.net/globalizacion/2002/fg259.htm En línea 31 marzo 2018 11.49]
LÖWY, M. Ecosocialismo. La alternativa radical a la catástrofe ecológica capitalista.
Buenos Aires: Editorial El Colectivo – Ediciones Herramienta, 2011.
MADORRÁN AYERRAC. La estrategia de los consumos colectivos. Curso de verano de la
FUHEM 2013. https://www.youtube.com/watch?v=XtfMD7MHpps (consultado el 2 de
enero de 2018)
MAX-NEEF, A., ELIZALDE, A. y HOPENHAYN, M. Desarrollo a escala humana.
Conceptos, aplicaciones y algunas reflexiones. Barcelona: Icaria Editorial, 1998.
MUÑECAS, L. Lecturas sobre Ecosocialismo. Aportes y propuestas. Escrito final
delSeminario de Graduación Problemas mundialescontemporáneos, planificación y
propuestasalter-desarrollo para eldevenir humano. Buenos Aires: Facultad de Filosofía y
Letras, UBA, 2014.
O’ CONNOR, J. Is sustainable capitalism possible? Natural Causes. Essays on ecological
Marxism. New Yok: The Guilford Press, 1998.
XV Coloquio Internacional de Geocrítica Las ciencias sociales y la edificación de una sociedad post-capitalista
19
O’ CONNOR, J. Desarrollo desigual y combinado y la crisis ecológica. In: Ambiente &
Sociedade Vol. VI nº. 2 (jul./dez 2003) [ http://www.scielo.br/pdf/asoc/v6n2/a02v06n2.pdf
en línes 31 de marzo 2018 19.25hs ]
QUIJANO, A. Colonialidad del poder, eurocentrismo y América Latina, 2000 [
http://www.decolonialtranslation.com/espanol/quijano-colonialidad-del-poder.pdf En línea 31
de marzo 2018 16.50 hs ]
QUIJANO, A. “Bien Vivir” para Redistribuir el poder. Pueblos indígenas y su propuesta
alternativa en tiempos de dominación global. In: Pobreza, desigualdad y desarrollo en Perú.
S/d, 2010, p.112-121.
QUINTERO, P. Notas sobre las teoría de la colonialidad del poder y la estructuración de la
sociedad en América Latina. In: Papeles de Trabajo Nº19. Buenos Aires: FFyL UBA. Centro
de Estudios Interdisciplinarios en Etnolingüística y Antropología Socio-Cultural, 2010 [
http://www.scielo.org.ar/pdf/paptra/n19/n19a01.pdf En línea 31 de marzo 2018 22.16hs.]
RIECHMANN, J. El socialismo sólo puede llegar en bicicleta. Ensayos ecosocialistas.
Madrid: Los libros de la Catarata, 2012.
RULLI, J. E. La violencia contra la naturaleza o el poder desnudo de las trasnacionales. In:
Revista Herramienta debate y crítica marxista N° 42 Buenos Aires 2009. [
http://www.herramienta.com.ar/revista-herramienta-n-42/la-violencia-contra-la-naturaleza-o-
el-poder-desnudo-de-las-transnacionales En línea 31 marzo 2018 21.47]
RUGGERI, A. ¿Qué son las empresas recuperadas? Autogestión de la clase trabajadora.
Buenos Aires: Peña Lillo y Ediciones Continente, 2014
SABATELLA, I., y TAGLIAVINI, D. Marxismo ecológico: elementos fundamentales para la
crítica de la economía-política-ecológica. In: Revista Herramienta N° 47. Buenos Aires, 2011.
[ http://www.herramienta.com.ar/revista-herramienta-n-47/marxismo-ecologico-elementos-
fundamentales-para-la-critica-de-la-economia-p En línea 31 de marzo 2018 15hs]
SVAMPA, M. Debates latinoamericanos. Indianismo, desarrollo, dependencia, populismo.
Buenos Aires: Editorial Endhasa, 2016
TAYLOR, P. Geografía Política. economía-mundo, estado-nación y localidad. Trama
Editorial México, 1994 (1993)
VIDELA, G.E. ¿Bosquejandomundos? Una revisión de propuestas y praxis alter-
productivistas y alter-capitalistas para un devenirhumanoen la Tierra. In: Scripta Nova.
Revista electrónica de Geografía y Ciencias Sociales. Universidad de Barcelona. ISSN: 1138-
9788. XIV ColoquioInternacional de Geocrítica Las utopías y la construcción de la sociedad
del futuro.2016 http://www.ub.edu/geocrit/xiv-coloquio/GabrielEsteban.pdf
WALLERSTEIN, I. Impensar las Ciencias Sociales. Mexico: Siglo XXI, 1998 (1991).