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Viator Web COMMUNICADO DE LA DIRECCIÓN GENERAL Núméro 51 Septiembre 2012 Palabra del Superior genera Palabra del Superior genera Palabra del Superior genera Palabra del Superior general QueridosViatores, La llegada de un nuevo equipo pastoral es ya un hecho. El pasado 1 de septiembre, dis- frutando de la atenta acogida de la delegación de Francia, unos sesenta Viatoresse reunieron en el Berceau de Vourles para celebrar este evento en acción de gracias y esperanza. La iglesia parroquial del P. Querbes fue testigo de todo ello. Este número de Viator Web os permite com- partir aquellos momentos tan importantes. Aquí os presento el nuevo Consejo general de nuestra comunidad. Recuerdo, en primer lugar, los principios que me han guiado en su composición y dejo a la pluma de cada uno de ellos la posibilidad de expresar sus convicciones. Permitidme comunicaros el gozo profundo que experimento al trabajar con estas personas y el entusiasmo que me produce la nueva sinton- ía – que, ciertamente, debemos descubrir aú más – entre personas de diferentes culturas tan ricas y tan diversas. ¡Esto da al Consejo General una voz nueva! Nuestro mayor deseo es que esta revista web esté al servicio de la animación de toda nuestra Comunidad. Durante las próximas semanas adaptaremos su contenido para que pueda ayudarnos cada vez más a descubrir y apoyar, la vida y la misión de los nuestros. Obviamente, pediremos vuestra participación para que su contenido sea aún más interesante. Comunico a todas y a todos, la firme voluntad de los miembros del nuevo Consejo Ge- neral de empeñarse a fondo para estar al servicio pastoral de nuestra familia religiosa. P. Alain Ambeault, c.s.v., superior general

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Viator Web

COMMUNICADO DE LA DIRECCIÓN GENERAL

Núméro 51 Septiembre 2012

Palabra del Superior generaPalabra del Superior generaPalabra del Superior generaPalabra del Superior generallll

QueridosViatores,

La llegada de un nuevo equipo pastoral es ya un hecho. El pasado 1 de septiembre, dis-frutando de la atenta acogida de la delegación de Francia, unos sesenta Viatoresse reunieron en el Berceau de Vourles para celebrar este evento en acción de gracias y esperanza. La iglesia parroquial del P. Querbes fue testigo de todo ello. Este número de Viator Web os permite com-partir aquellos momentos tan importantes.

Aquí os presento el nuevo Consejo general de nuestra comunidad. Recuerdo, en primer lugar, los principios que me han guiado en su composición y dejo a la pluma de cada uno de ellos la posibilidad de expresar sus convicciones. Permitidme comunicaros el gozo profundo que experimento al trabajar con estas personas y el entusiasmo que me produce la nueva sinton-ía – que, ciertamente, debemos descubrir aú más – entre personas de diferentes culturas tan ricas y tan diversas. ¡Esto da al Consejo General una voz nueva!

Nuestro mayor deseo es que esta revista web esté al servicio de la animación de toda nuestra Comunidad. Durante las próximas semanas adaptaremos su contenido para que pueda ayudarnos cada vez más a descubrir y apoyar, la vida y la misión de los nuestros. Obviamente, pediremos vuestra participación para que su contenido sea aún más interesante.

Comunico a todas y a todos, la firme voluntad de los miembros del nuevo Consejo Ge-neral de empeñarse a fondo para estar al servicio pastoral de nuestra familia religiosa.

P. Alain Ambeault, c.s.v., superior general

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"Desde el comienzo de este Capítulo, nos hemos propuesto portantes, tanto para el futuro de la congregación como para el de la Comunidad viatoriana. La continuidad se impone por sí misma: ahora era necesario ofrecer o invitar a participar a persnas capaces de afrontar estos desafíos.

Desde el primer momento, señalé a los Superiores Provinciales y de la Delegación, que yo deseaba que el consejo respondiera no tanto a tener un miembro por provincia (éste es el representante de mi provincia) como una elección que abarcara al conjunto deestén donde estén. En concreto, solicité el apoyo de los superiores provinciales y de delegación a una visión global, a la diversidad de un equipo, a la capacidad de colaboración de sus miebros y a responder a la tarea que se nos ha coa ser.Para decirlo claramente, yo quería que hermanos de nuestras fundaciones estuvieran prsentes en el Consejo general.

Por eso quiero manifestar la estrecha colaboración que he recibido de cada uno deSuperiores de las provincias y de la Delegación. Adherirse a lo que yo les pedía se llama: genrosidad, sacrificio, y, sobre todo, una enorme solidaridad con el conjunto de nuestra Comunidad. ¡Que mi agradecimiento conlleve a la vez la flexibilidad y de cada uno de vosotros y de todas las personas a las que vosotros representáis!

Una comunidad como la nuestra está llamada a ofrecer al mundo ya la Iglesia una prsencia significativa, marcada por el don de la diversidad y de la gracia que produce la interación entre sus miembros, todos coherederos del mismo carisma y corresponsables de la misma misión. Nuestro título de catequista es muy idóneo para aceptar en el momento actual el dsafío de una nueva evangelización. Permaneciendo todos profundamente comprometidos en la toma de conciencia de la internacionalidad de nuestra comunidad y de la solidaésta nos llama, se nos presentan importantes desafíos con un carácter muy estimulante

El Consejo General

"Desde el comienzo de este Capítulo, nos hemos propuesto grandes desafíos, todos iportantes, tanto para el futuro de la congregación como para el de la Comunidad viatoriana. La continuidad se impone por sí misma: ahora era necesario ofrecer o invitar a participar a persnas capaces de afrontar estos desafíos.

Desde el primer momento, señalé a los Superiores Provinciales y de la Delegación, que yo deseaba que el consejo respondiera no tanto a tener un miembro por provincia (éste es el representante de mi provincia) como una elección que abarcara al conjunto de

En concreto, solicité el apoyo de los superiores provinciales y de delegación a una visión global, a la diversidad de un equipo, a la capacidad de colaboración de sus miebros y a responder a la tarea que se nos ha confiado, reflejo de la realidad en que hemos llegado

Para decirlo claramente, yo quería que hermanos de nuestras fundaciones estuvieran pr

Por eso quiero manifestar la estrecha colaboración que he recibido de cada uno deSuperiores de las provincias y de la Delegación. Adherirse a lo que yo les pedía se llama: genrosidad, sacrificio, y, sobre todo, una enorme solidaridad con el conjunto de nuestra Comunidad. ¡Que mi agradecimiento conlleve a la vez la flexibilidad y la fuerza capaces de tocar el corazón de cada uno de vosotros y de todas las personas a las que vosotros representáis!

(Extracto de la introducción del nuevo Consejo General, 16 de julio de 2012)

P. Alain Ambeault, c.s.v., Superior General

Nació el 28 de junio 1959 en Lachute, Canadá. Ingresó entre los CSV en 1980. Después de ejercer el ministerio parroquial durante diez años, siete de los cuales como párroco, fue llmado al servicio de autoridad en la comunidad.Consejo Provincial de Canadá de 1993 a 2006, asumió la reponsabilidad de Superior Provincial desde 1998 hasta 2006. Además, ocupó el cargo de Presidente de la Conferencia Cnadiense de Religiosos de 2004 a 2006. Está formado en telogía pastoral.

la nuestra está llamada a ofrecer al mundo ya la Iglesia una prsencia significativa, marcada por el don de la diversidad y de la gracia que produce la interación entre sus miembros, todos coherederos del mismo carisma y corresponsables de la misma

n. Nuestro título de catequista es muy idóneo para aceptar en el momento actual el dsafío de una nueva evangelización. Permaneciendo todos profundamente comprometidos en la toma de conciencia de la internacionalidad de nuestra comunidad y de la solidaésta nos llama, se nos presentan importantes desafíos con un carácter muy estimulante

grandes desafíos, todos im-portantes, tanto para el futuro de la congregación como para el de la Comunidad viatoriana. La continuidad se impone por sí misma: ahora era necesario ofrecer o invitar a participar a perso-

Desde el primer momento, señalé a los Superiores Provinciales y de la Delegación, que yo deseaba que el consejo respondiera no tanto a tener un miembro por provincia (éste es el representante de mi provincia) como una elección que abarcara al conjunto de nuestras personas,

En concreto, solicité el apoyo de los superiores provinciales y de delegación a una visión global, a la diversidad de un equipo, a la capacidad de colaboración de sus miem-

nfiado, reflejo de la realidad en que hemos llegado Para decirlo claramente, yo quería que hermanos de nuestras fundaciones estuvieran pre-

Por eso quiero manifestar la estrecha colaboración que he recibido de cada uno de los Superiores de las provincias y de la Delegación. Adherirse a lo que yo les pedía se llama: gene-rosidad, sacrificio, y, sobre todo, una enorme solidaridad con el conjunto de nuestra Comunidad.

la fuerza capaces de tocar el corazón de cada uno de vosotros y de todas las personas a las que vosotros representáis! "

(Extracto de la introducción del nuevo Consejo General, 16 de julio de 2012)

Superior General

Nació el 28 de junio 1959 en Lachute, Canadá. Ingresó entre los CSV en 1980. Después de ejercer el ministerio parroquial durante diez años, siete de los cuales como párroco, fue lla-

al servicio de autoridad en la comunidad. Miembro del ial de Canadá de 1993 a 2006, asumió la res-

ponsabilidad de Superior Provincial desde 1998 hasta 2006. Además, ocupó el cargo de Presidente de la Conferencia Ca-nadiense de Religiosos de 2004 a 2006. Está formado en teo-

la nuestra está llamada a ofrecer al mundo ya la Iglesia una pre-sencia significativa, marcada por el don de la diversidad y de la gracia que produce la interac-ción entre sus miembros, todos coherederos del mismo carisma y corresponsables de la misma

n. Nuestro título de catequista es muy idóneo para aceptar en el momento actual el de-safío de una nueva evangelización. Permaneciendo todos profundamente comprometidos en la toma de conciencia de la internacionalidad de nuestra comunidad y de la solidaridad a la que ésta nos llama, se nos presentan importantes desafíos con un carácter muy estimulante.

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P. Harry Célestin, c.s.v.,

Haití) en una familia de cinco hermanos donde él es el más jven. Después de sus estudios de teología, es llamado, (2002 a 2005), aser párroco de la comunidad cristiana de Grand Goave donde trabajan los Viatores.

estudiar la teología espiritual. Estos últimos años, ha permanecdo al servicio de la comunidad en la formación como maestro de novicios (2007colasticado

días hemos experimentado la bondad, la amistad, la ternura y la fidelidad de Dios. Un Dios que da su palabra de vida, que regnera, y da una alegría y una paz que nada ni nadie nos puede arrebatar.

Un Dios que da sentido a todo lo que somos y todo lo que podemos lograr. Este Dios nos pide, como a la Iglesia primitiva, avanzar mar adentro y abrir las velas de nuestra familia viatoriana al viento del Espíritu, el cual noscomprometidos, a testimoniar nuestra fe para seguir acompañando a los empobrecidos y los marginalizados para que recomiencen a

H. Luis Álvarez Torres, c.s.v.,

Luis nació el 22 de agosto de 1944 en (España).Ingresó en la Congregación en 1961. Es licenciado en ciencias químicas. Ha trabajado en el campo de la educación de 1963 a 1898 como profesor y como director en diversos colegios. Ha participado estrechamente de 1978 a 1989 en vnismos del mundo de la educación a favor del desarrollo de la libertad de enseñanza. Ha sido presidente de la Confederación Española de Colegios católicos de 1989 a 1998. De 2002 a 2004, fue administrador provincial de España y a partir de 2004 hsido el gestor financiero de los CSV de España. Finalmente, asume la administración de la Conferencia de los religiosos epañoles (CONFER) DE 2005 A 2011

Pienso que tanto la Comunidad Viatoriana como la tantes desafíos que convendrá afrontar con ánimo y confianza: El desarrollo de la Comunidad Viatoriana internacional, el sentirnos una gran familia que se apoya mutuamente en lo humano y lo material, la creación de vasos comunicantes entre Provincias, Delegación y Fundacidesde la claridad y justicia en el uso y distribución de los bienes, etc.

P. Harry Célestin, c.s.v., Vicario General

Harry nace el 5 de octubre 1964 en CapHaití) en una familia de cinco hermanos donde él es el más jven. Después de sus estudios de teología, es llamado, (2002 a 2005), aser párroco de la comunidad cristiana de Grand Goave donde trabajan los Viatores.

Posteriormente, pasa dos años en Roma (2005estudiar la teología espiritual. Estos últimos años, ha permanecdo al servicio de la comunidad en la formación como maestro de novicios (2007-2011) y más recientemente como director del ecolasticado.

A través de muchas personas y en la realidad de todos los días hemos experimentado la bondad, la amistad, la ternura y la fidelidad de Dios. Un Dios que da su palabra de vida, que regnera, y da una alegría y una paz que nada ni nadie nos puede arrebatar.

Un Dios que da sentido a todo lo que somos y todo lo que podemos lograr. Este Dios nos pide, como a la Iglesia primitiva, avanzar mar adentro y abrir las velas de nuestra familia viatoriana al viento del Espíritu, el cual nos invita a abandonarnos y a sercomprometidos, a testimoniar nuestra fe para seguir acompañando a los empobrecidos y los marginalizados para que recomiencen a esperar.

. Luis Álvarez Torres, c.s.v., Administrador General

Luis nació el 22 de agosto de 1944 en Villalba de Barros (España).Ingresó en la Congregación en 1961. Es licenciado en ciencias químicas. Ha trabajado en el campo de la educación de 1963 a 1898 como profesor y como director en diversos colegios. Ha participado estrechamente de 1978 a 1989 en varios orga-nismos del mundo de la educación a favor del desarrollo de la libertad de enseñanza. Ha sido presidente de la Confederación Española de Colegios católicos de 1989 a 1998. De 2002 a 2004, fue administrador provincial de España y a partir de 2004 ha sido el gestor financiero de los CSV de España. Finalmente, asume la administración de la Conferencia de los religiosos es-pañoles (CONFER) DE 2005 A 2011.

Pienso que tanto la Comunidad Viatoriana como la Congregación tienen ante sí impoque convendrá afrontar con ánimo y confianza: El desarrollo de la Comunidad

iatoriana internacional, el sentirnos una gran familia que se apoya mutuamente en lo humano y lo material, la creación de vasos comunicantes entre Provincias, Delegación y Fundacidesde la claridad y justicia en el uso y distribución de los bienes, etc.

Vicario General

Harry nace el 5 de octubre 1964 en Cap-Haitien (al norte de Haití) en una familia de cinco hermanos donde él es el más jo-ven. Después de sus estudios de teología, es llamado, (2002 a 2005), aser párroco de la comunidad cristiana de Grand Goave

s en Roma (2005-2007) para estudiar la teología espiritual. Estos últimos años, ha permaneci-do al servicio de la comunidad en la formación como maestro de

2011) y más recientemente como director del es-

s y en la realidad de todos los días hemos experimentado la bondad, la amistad, la ternura y la fidelidad de Dios. Un Dios que da su palabra de vida, que rege-nera, y da una alegría y una paz que nada ni nadie nos puede

Un Dios que da sentido a todo lo que somos y todo lo que podemos lograr. Este Dios nos pide, como a la Iglesia primitiva, avanzar mar adentro y abrir las velas de nuestra familia

invita a abandonarnos y a ser más acogedores y comprometidos, a testimoniar nuestra fe para seguir acompañando a los empobrecidos y los

ongregación tienen ante sí impor-que convendrá afrontar con ánimo y confianza: El desarrollo de la Comunidad

iatoriana internacional, el sentirnos una gran familia que se apoya mutuamente en lo humano y lo material, la creación de vasos comunicantes entre Provincias, Delegación y Fundaciones,

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Para ayudar a enfrentar esos desafíos, he aceptado hacerme cargo del servicio de la administración general, pues creo que es en esos ámbitos donde puedo ofrecer mis modestos conocimientos en la gestión y administración de los bienes materiales. Gestión que deseo hacer con criterios de transparencia, profesionalidad, solidaridad y en comunión con eneral y su Consejo.

F. Carlos Ernesto Flórez, c.s.v., Consejero

Nací de 1967 en Bogotá, Colombia. Ingresé a la comunidad Viatoriana en enero de 1991. Después de mis primeros votos en 1993, trabajé en el Colegio San Viator en Bogotá, como drector del departamento de Catequesis y luego enseñé religión (1995 tos perpetuos el 9 de enero de 1999. Luego en Marzo de 1999, viajé a Belice para ejercer mi apostolado en la Francisco Javier en Corozal, Belicelaicos, en diversos ministerios.

En una primera estancia a los EEUU, trabajé como ecargado del ministerio Hispano en la Parroquia de San Viator en Chicago, IL. 2004 – 2005. De vuelta a Belice por seis meses, ejercí mi ministerio en la Parroquia de San Francisco Javier en Corozal, como director de la oficina de trabajo social.

En los EEUU desde 2007 fui el Coordinador de la oficina de Admisiones de la Escuela San Martin de Porres en Waukegan, Illinois. 2006 – 2009. Después, hasta el Capitulo general 2012, trabajé en el Centro Provincial de ChicProvincial y en la residencia de los Viatorianos retirados.

Académicamente, tengo estudios filosóficos, teológicos, litúrgcos e historia de la Iglesia, un bachillerato en Administración y Supervisión Educativa, y un master en Psicol

Acepté esta nueva misión como Consejero General,Comunidad Viatoriana Internacional, ofreciendo apoyo y caminando junto con mis hermanas y hermanos Viatorianos para crear una nueva Comunidad viva y capaz de afrontar la realidad de nuestra Iglesia de hoy y del mundo. También porque puedo ofrecer nuevas y vibrantes ideas para la vida comunitaria, para nuevos apostolados, para vocaciones y el área administrativa. Finalmente, porque mi experiencia a nivel internacional, viviendo y sirviendo a la Comunidad Viatoriana en diferentes apostolados en Colombia, Belice y Estados Unidos, puede iluminar nuestro caminar en la propagación de la Misión del P. Querbes.

Para ayudar a enfrentar esos desafíos, he aceptado hacerme cargo del servicio de la administración general, pues creo que es en esos ámbitos donde puedo ofrecer mis modestos onocimientos en la gestión y administración de los bienes materiales. Gestión que deseo hacer

con criterios de transparencia, profesionalidad, solidaridad y en comunión con e

Carlos Ernesto Flórez, c.s.v., Consejero General

en Bogotá, Colombia. Ingresé a la comunidad Viatoriana en enero de 1991.

Después de mis primeros votos en 1993, trabajé en el Colegio San Viator en Bogotá, como drector del departamento de Catequesis y luego enseñé religión (1995 – 1998). Realicé mis tos perpetuos el 9 de enero de 1999. Luego en Marzo de 1999, viajé a Belice para ejercer mi apostolado en la Parroquia de San Francisco Javier en Corozal, Belice, encargado delos líderes

primera estancia a los EEUU, trabajé como en-cargado del ministerio Hispano en la Parroquia de San Viator en

2005. De vuelta a Belice por seis meses, ejercí mi ministerio en la Parroquia de San Francisco Javier en

de la oficina de trabajo social.

En los EEUU desde 2007 fui el Coordinador de la oficina de Admisiones de la Escuela San Martin de Porres en Waukegan,

2009. Después, hasta el Capitulo general 2012, trabajé en el Centro Provincial de Chicago como traductor del Provincial y en la residencia de los Viatorianos retirados.

Académicamente, tengo estudios filosóficos, teológicos, litúrgi-cos e historia de la Iglesia, un bachillerato en Administración y Supervisión Educativa, y un master en Psicología Comunitaria.

misión como Consejero General, porque quiero estar al servicio de la Comunidad Viatoriana Internacional, ofreciendo apoyo y caminando junto con mis hermanas y

para crear una nueva Comunidad viva y capaz de afrontar la realidad de nuestra Iglesia de hoy y del mundo. También porque puedo ofrecer nuevas y vibrantes ideas para la vida comunitaria, para nuevos apostolados, para vocaciones y el área administrativa. Finalmente, porque mi experiencia a nivel internacional, viviendo y sirviendo a la Comunidad Viatoriana en diferentes apostolados en Colombia, Belice y Estados Unidos, puede iluminar nuestro caminar en la propagación de la Misión del P. Querbes.

Para ayudar a enfrentar esos desafíos, he aceptado hacerme cargo del servicio de la administración general, pues creo que es en esos ámbitos donde puedo ofrecer mis modestos onocimientos en la gestión y administración de los bienes materiales. Gestión que deseo hacer

con criterios de transparencia, profesionalidad, solidaridad y en comunión con el Superior ge-

General

en Bogotá, Colombia. Ingresé a la comunidad Viatoriana en enero de 1991. Después de mis primeros votos en 1993, trabajé en el Colegio San Viator en Bogotá, como di-

1998). Realicé mis vo-

porque quiero estar al servicio de la Comunidad Viatoriana Internacional, ofreciendo apoyo y caminando junto con mis hermanas y

para crear una nueva Comunidad viva y capaz de afrontar la realidad de nuestra Iglesia de hoy y del mundo. También porque puedo ofrecer nuevas y vibrantes ideas para la vida comunitaria, para nuevos apostolados, para vocaciones y el área administrativa. Finalmente, porque mi experiencia a nivel internacional, viviendo y sirviendo a la Comunidad Viatoriana en diferentes apostolados en Colombia, Belice y Estados Unidos, puede iluminar

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P. André Simon Crozier, c.s.v.,

Nacido en 1946, Courzieuprimeros votos en 1965. Se formó en la "Escuela de catequistas" de Lyon obteniendo un diploma en enseñanza religiosa. Ha sido catequista y formador de catequistas, secretario al servicio de la Institución Luis Querbes, de la de la provincia de Francia, fue miembro de varios consejos proviciales y Vicario provincial.

Ordenado sacerdote en 1979, tras sus estudios en el seminrio de San Ireneo, fue nombrado inmediatamente párroco, ministrio que desempeñó durante 27 años: siete, en Chessy yveinte, en las cuatro parroquias que, en 2002, recibieron el nombre de "Sainte-Blandine du fleuve”, entrelas cuales, la de Vourles drante los últimos seis años. En 2006, fue nombrado Consejero y Secretario General para el segundo mandato del P. Mark Francis.

Al abordar esta nueva etapa, como miembro de otro Consejo General, deseo ardientmente reavivar en mí algunas convicciones. He descubierto un poco más nuestra Comunidad y soy consciente de esta gracia que se me ha dado de conocerla más para poder servirla aún mjor.

Las dos Asambleas generales de la Comunidad viatoriana y los últimos Capítulos generales me han asegurado una realidad que brilla ante los ojos de muchos de nosotros: el entusiasmimpulso, de los religiosos jóvenes, la experiencia y la serena perseverancia de los menos jóvnes y la estimulante participación de los Asociados.

Estos rostros, el de los Viatoresal encuentro y a la escucha: Un auténtico diálogo en vistas al desarrollo de nuestra acción común llama a una comprensión, un apoyo, un “acompañamiento” cercano, por parte de los que acaban de aceptar los desafíos planteados por las recientes reuniones internacionales.

Yo confío en el futuro de nuestra Comunidad: ella me parece haberse comprometido en un camino de solidaridad. Tendrá éxito si sabe potenciar a todos y cada uno de sus miembros, si consiente desplegar sus esfuerzos para su formación humana y espiritual, especialmente vitoriana. A su vez, todos serán testigos para conseguir lacorazón del mundo, según el ardiente deseo de Louis Querbes.

André Simon Crozier, c.s.v., Secretario General

Nacido en 1946, Courzieu (Rhône, Francia), emitió sus primeros votos en 1965. Se formó en la "Escuela de catequistas" de Lyon obteniendo un diploma en enseñanza religiosa. Ha sido catequista y formador de catequistas, secretario al servicio de la Institución Luis Querbes, de la provincia de Vourles y más tarde, de la provincia de Francia, fue miembro de varios consejos provin-

Ordenado sacerdote en 1979, tras sus estudios en el semina-rio de San Ireneo, fue nombrado inmediatamente párroco, ministe-

nte 27 años: siete, en Chessy y Chatillon y veinte, en las cuatro parroquias que, en 2002, recibieron el nombre

Blandine du fleuve”, entrelas cuales, la de Vourles du-rante los últimos seis años. En 2006, fue nombrado Consejero y Secretario General para el segundo mandato del P. Mark Francis.

Al abordar esta nueva etapa, como miembro de otro Consejo General, deseo ardientmente reavivar en mí algunas convicciones. He descubierto un poco más nuestra Comunidad y

sta gracia que se me ha dado de conocerla más para poder servirla aún m

Las dos Asambleas generales de la Comunidad viatoriana y los últimos Capítulos generales me han asegurado una realidad que brilla ante los ojos de muchos de nosotros: el entusiasmimpulso, de los religiosos jóvenes, la experiencia y la serena perseverancia de los menos jóvnes y la estimulante participación de los Asociados.

el de los Viatores de nuestros países de inserción. me atraen y me invitan al encuentro y a la escucha: Un auténtico diálogo en vistas al desarrollo de nuestra acción común llama a una comprensión, un apoyo, un “acompañamiento” cercano, por parte de los

r los desafíos planteados por las recientes reuniones internacionales.

Yo confío en el futuro de nuestra Comunidad: ella me parece haberse comprometido en un camino de solidaridad. Tendrá éxito si sabe potenciar a todos y cada uno de sus miembros,

iente desplegar sus esfuerzos para su formación humana y espiritual, especialmente vitoriana. A su vez, todos serán testigos para conseguir la irradiación del amor en Cristo en el corazón del mundo, según el ardiente deseo de Louis Querbes.

Al abordar esta nueva etapa, como miembro de otro Consejo General, deseo ardiente-mente reavivar en mí algunas convicciones. He descubierto un poco más nuestra Comunidad y

sta gracia que se me ha dado de conocerla más para poder servirla aún me-

Las dos Asambleas generales de la Comunidad viatoriana y los últimos Capítulos generales me han asegurado una realidad que brilla ante los ojos de muchos de nosotros: el entusiasmo y el impulso, de los religiosos jóvenes, la experiencia y la serena perseverancia de los menos jóve-

de nuestros países de inserción. me atraen y me invitan al encuentro y a la escucha: Un auténtico diálogo en vistas al desarrollo de nuestra acción común llama a una comprensión, un apoyo, un “acompañamiento” cercano, por parte de los

r los desafíos planteados por las recientes reuniones internacionales.

Yo confío en el futuro de nuestra Comunidad: ella me parece haberse comprometido en un camino de solidaridad. Tendrá éxito si sabe potenciar a todos y cada uno de sus miembros,

iente desplegar sus esfuerzos para su formación humana y espiritual, especialmente via-irradiación del amor en Cristo en el

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División de las tareasen el Consejo General

Estas son las responsabilidades que se han confiado a los miembros del Consejo General:

El padre Harry P. Célestin

• Vicario General. • Estudios para prepararse a ser procurador ante la Santa Sede (el mandato del P. José Antonio-

Lezama como procurador ante la Santa Sede se renueva por un tiempo indefinido). • Responsable de la vida espiritual local. • Estudios para llegar a ser postulador de la causa del P. Fundador. • Responsable de las Fundaciones de Burkina Faso y Costa de Marfil ante el Consejo General y

delegado de CCVAO.

El hermano Luis Álvarez • Administrador general. • Responsable de archivos específicos:

- Localización de la casa general. - Oficina central del desarrollo de la Misión.

• Relaciones de España con el Consejo General.

El padre André Simón Crozier • Secretario General. • Responsable del secretariado del Consejo General. • Responsable de los Archivo y la Biblioteca. • Relaciones de Canadá y Francia con el Consejo General.

El hermano Carlos Ernesto Flórez • Consejero general. • Relaciones de la Provincia de los Estados Unidos con el Consejo General. • Presidir las reuniones del Consejo General y del Consejo General extraordinario. • Superior local de la Casa general.

El padre Alain Ambeault • Superior General. • Vínculo con la Unión de Superiores generales y de los obispos. • Presidir las reuniones del Consejo General y del Consejo General extraordinario. • Coordinación general. • Visitas pastorales.

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Celebración de entrada en funciones del nuevo Consejo General Vourles, 1 de Septiembre de 2012

Réflexiones en Vourles

Por Thomas R. von Behren, c.s.v., Superior provincial de Estados Unidos

Cada vez que llego a Vourles, en Francia, experimento en mi corazón el mismo senti-miento y, de pronto, mi espíritu se eleva y se vuelve más luminoso. Un sentimiento de admira-ción se apodera de mí y me siento arrastrado en la inspiración que hace tiempo tuvo un hombre que recorrió estos caminos y viajó a través de estas hermosas colinas de la campiña lionesa, en el horizonte de este pequeño pueblo.

Es aquí donde el espíritu del Padre Querbes, fundador de los Clérigos de San Viator, sigue extendiéndose e inspirando a los Viatores y a los visitantes cuando peregrinan a Vourles. Aquí, en la década de 1830, siendo párroco, el Padre Querbes inspiró a sus feligreses, predicó el

Evangelio, celebro la Eucaristía y continuó su colección de cantos y de música. Realizó todo en la tran-quila certeza de que Dios estaba con Él por el Espíritu de Jesús y bajo la protección de María, Madre de Dios.

Y ahora, estoy de vuelta de mi visita a Vourles. En esta visita, el 1 de septiembre de 2012, el 1530 aniversario de la muerte del P. Querbes, fue donde Viatores de los cuatro continentes se reunieron para celebrar la entrada en función del

15º Superior general de los Clérigos de San Viator. Viatores representantes de cada provincia y de la delegación se congregaron en la iglesia parroquial de Saint-Bonnet, exactamente donde había sido párroco el joven sacerdote Padre Luis Querbes. Allí fueron testigos de la profesión de fe del padre Alain Ambeault y del padre de Harry Célestin, Vicario General, para señalar el comienzo de su mandato, y para ofrecerles su apoyo.

Este día especial comenzó en el cementerio parroquial donde una cincuentena de Viato-res se apiñó alrededor de la tumba del Padre Querbes, recordando esta fecha tan importante para los Viatores y agradeciendo al Señor por la vida y la visión de su fundador. Hemos orado juntos, hemos recordado el pasado y hemos dirigido nuestras miradas hacia el futuro ahora que estamos iniciando un nuevo capítulo de la historia viatoriana.

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A continuación fuimos a la iglesia donde la liturgia de la misa iba a ofrecer el marco ofi-cial de la entrada en función del nuevo Consejo. Durante la pro-cesión de entrada, cada delegado de las provincias y de la delega-ción avanzó llevando una vela en la mano y ofreciendo de parte de su provincia y de las fundaciones que dependen de ella un saludo internacional a toda la Comuni-dad allí reunida. Este mensaje ofrecía el apoyo de su provincia al padre Ambeault y a su nuevo Consejo, y afirmaba su voluntad de establecer una estrecha co-

laboración. Al final de la celebración, cada miembro del Consejo General - el padre de Harry Célestin, Vicario ge-neral, el Hermano Luis Álvarez, Administrador general, el Hermano Carlos Ernesto Flórez, Consejero general y el P. André Crozier Simon, Secretario general leyó, cada uno una parte, del "Mensaje a la comunidad viatoriana", que había sido escrito y aprobado al final del Capítulo general de 2012, en Ariccia, Italia. ¡Fue un momento muy inspira-dor!

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El espíritu de este día fue un espíritu de esperanza, el de una hermosa solidaridad inter-nacional, el de de poner en práctica las prioridades para los próximos seis años, especialmente una pastoral vocacional renovada y un nuevo compromiso para apoyar la paz y la justicia social a través de nuestra misión viatoriana y en la vida de la comunidad.

Sí, una nueva era se ha abierto para la comunidad viatoriana con un nuevo liderazgo y un compromiso renovado de llevar siempre la visión del Padre Querbes a nuestro mundo de hoy. Que Dios bendiga a nuestro nuevo Superior General y su Consejo y que estén siempre guiados por las palabras de nuestro fundador: ¡Que en todo, adorado y amado sea Jesús!

HOMILÍA

La Comunidad Viatoriana se ha reunido una vez más en esta parroquia, la Iglesia del Pa-dre Luis Querbes, donde hoy dejará un re-cuerdo de un nuevo momento de su historia. Reunidos aquí en Vourles, la gracia de la fundación es la que toca nuestro corazón de la misma manera que el árbol puede sentir la vida que fluye en él desde sus raíces. Reuni-dos en el "Berceau", es la fidelidad a las llamadas del Espíritu la que nos interpela más que nunca. Se trata del "aliento del ca-risma" que llevamos, desde hace ya 183 años, a muchos continentes, en los 15 países en los que trabajamos actualmente. Reunidos aquí, esta mañana, expresamos el peregrinar de los hijos e hijas del Padre Querbes, que han ve-nido para dar gracias al Padre de la esperan-za, que habita en ellos. Los diálogos que hemos tenido recientemen-te, tanto en la segunda Asamblea General de

la Comunidad Viatoriana en Bogotá en fe-brero de 2011, como en el Capítulo General este pasado mes de julio en Roma, indican bastante bien las características de lo que hemos estado viviendo durante estos años: convivir, hacer desaparecer todas las fronte-ras nacionales, el ardor de una juventud que quiere seguir adelante y establecer raíces en nuevos lugares y la sabiduría de otros que decididamente se proponen arrimar el hom-bro al carro, sin olvidar las lecciones de la historia y los imperativos del presente. Ricas culturas que se convocan e interpelan, siendo todos testigos del milagro del brote juvenil de la gracia de un carisma que es acogido en una nueva tierra y echa lenta-mente sus raíces y produce frutos inespera-dos. Hombres y mujeres han visto – y siguen viendo – que se entrecruzan los caminos de sus vocaciones. Reconocen, en el gesto del otro, algo que es único y que al mismo tiem-

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po se comparte. Y así llegan a la encrucijada del reconocimientos de una vocación: la de un carisma del que todos somos coherederos y corresponsables. Hoy más que nunca, los Viatores están con-vencidos de su rostro internacional que pro-clama claramente la necesidad que tenemos el uno del otro para mantener la belleza y la verdad de nuestra fidelidad. El retrato actual que nos ofrecen estos dos importantes even-tos de la comunidad, proclaman claramente que somos hombres y mujeres de esperan-za – no una esperanza que esconde nuestras debilidades, nuestras dudas o nuestros erro-res o que disfraza nuestro lado oscuro, sino una esperanza que progresivamente nos lla-ma y que permite el milagro de la presencia de Dios entre nosotros. Dejemos que estas palabras de la carta a los hebreos se impri-man con letras de oro al comienzo de esta nueva etapa que iniciamos juntos:

La fe es la manera de poseer ya lo que se espera y de conocer las realidades que no se ven. Y cuando la escritura rinde home-naje a los Patriarcas es a causa de su fe... Todos ellos murieron sin haber conocido el cumplimiento de las promesas; pero, en la fe, lo habían visto y saludado de le-jos. (Hebreos 11: 1-2; 13a)

Esta esperanza es el testimonio más hermoso que podemos ofrecer al Padre Querbes, la misma que le impulsaba tan a menudo, como una razón para seguir viviendo, a poner todo en las manos de la Divina Providencia. Ésta misma esperanza es, Padre Querbes, la que hoy día ilumina la mirada de tus hijas e hijos, muy conscientes de llevar su tesoro en vasi-jas de barro. Tu comunidad tiene siempre la mirada protectora del Señor; por lo tanto acogemos el futuro como una gracia que no cesa de abrirnos a un gran horizonte. Los miembros del nuevo Consejo General que me acompañan – permitidme agradecer-les su disponibilidad, su coraje y su deseo de asumir este gran reto pastoral – son muy conscientes del carácter imperativo del men-saje del Evangelio de esta mañana, un men-saje que abarca lo que todos estamos vivien-

do: ¡El pueblo tiene hambre! La respuesta del Señor no deja duda alguna: «¡Dadles vosotros de comer!» Este texto nos recuerda que cualquiera que sea nuestra realidad coti-diana, cualquiera que sea nuestro contexto vital, siempre se produce el milagro de Dios en el corazón de la indigencia de quien bus-ca a Dios sinceramente. Sólo una comunidad sencilla sabe dejar espacio, en el corazón de su misión, para el inesperado milagro de Dios. La sorprendente gracia divina pasará siempre a través de los más pequeños entre nosotros, del más pequeño con el que nos encontremos.

El texto de Juan nos dice: hay un mucha-cho joven que tiene cinco panes de ceba-da y dos peces.

Para terminar, quiero aseguraros que el nue-vo Consejo General pondrá toda su esperan-za, su profunda fe en la misión que es la nuestra, su juventud renovada, su diversidad cultural y su pasión, al servicio de lo que vivís en cada uno de vuestros compromisos. ¡Podéis estar seguros de que estaremos ahí! Estaremos, sobre todo, siendo portadores de la memoria de los consensos a los que re-cientemente hemos llegado, acciones inspi-radas, fieles a lo que estamos llamados a ser, con confirmaciones e interpelaciones que nos dinamicen... ¡creámoslo! Tenemos el corazón cogido por estos desaf-íos; ellos nos permiten poseer ya lo que se espera. Hermanos y hermanas, ¡vivid en esta espe-ranza! En contacto con la gente a quienes servís, reaprended, si fuera necesario, las palabras y la manera de emplearlas para que la gente deje espacio a la creación de Dios que continúa. Tararead las melodías popula-res de la vida que le dan otra presencia; re-gocijaos con la alegría de quienes la viven y descubrid los colores brillantes que transfi-guran los límites de la vida. Y, especialmente, ¡compartid esta esperanza allá donde os encontréis!

Alain Ambeault, c.s.v. Superior general

Vourles, 1 de Septiembre de 2012

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CAPÍTULO GENERAL 2012

"Para terminar, quiero añadir personalmente mi voz a los agradecimientos que André Simón dirigió ayer a Mark, en nues-tro nombre, con motivo de la visita a la Casa General. Mark, tú has sido nuestro pastor durante 12 años. Eso constituye una par-te importante de una vida. Tú lo has hecho poniendo al servicio de la Comunidad tus talentos, tu sentido de responsabilidad, tu preocupación por la verdad y la eficacia, y tu sensibilidad pasto-ral. Reconocemos en ti al hombre de fe, que sabe elegir las pala-bras para expresarla, los gestos para celebrarla y los compromi-sos para hacer que el mundo se transforme.

Lee en la mirada de los 39 capitulares y del personal de apo-yo el aprecio y la gratitud de todos sus hermanos y hermanas Viatores. Todos los desafíos que se presentan ante nuestros ojos llevan tu firma.

Gracias, Mark, y buena continuación de tu misión. "

Alain Ambeault, c.s.v., Homilía al final del Capítulo

NOTICIAS BREVES

Actas Capitulares 2012

El nuevo consejo se pone en marcha, y al mismo tiempo que aseguran la necesaria insta-lación y la aclimatación de todos, decide cómo va a funcionar. La prioridad sigue siendo la de presentar las Actas Capitulares 2012 en los tres idiomas lo más rápidamente posible. Los textos deberán ser armonizados, la traducción de la versión francesa oficial asegurada al inglés y al es-pañol y, finalmente, habrá que proceder a su impresión. Queremos aseguraros de que hacemos todo lo posible para que, cuanto antes, tengáis en vuestras manos la Nueva Carta de la Comuni-dad viatoriana y, a continuación, las Actas capitulares. Un testigo reconocido en Perú:

En una carta a Mons. Pedro Ricardo Barreto Jimeno, S.J, Obispo de Huancayo en Perú, el Padre Alain Ambeault, Superior General, unió su voz a muchas otras para felicitar al obispo de Huancayo galardonado con la Decoración del Orden Premio Unión Nacional del Perú. Subrayando hasta qué punto la acción pastoral de este obispo es un valioso testimonio de la acción del Espíritu Santo en nuestro mundo y una prueba viviente de que el Reino de Dios está realmente en construcción, el Padre General expresaba su gozo de que la comunidad viatoriana esté ya inserta en la Diócesis de Huancayo. Mons. Barreto está muy implicado en la defensa de las condiciones de vida de los agricultores afectados por las actividades mineras de grandes compañías internacionales.

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¡Felicidades!

• Al H. Pierre JeaninGaëtan que pronunció sus votos perpetuos en Haití, el 25 de agosto de 2012.

• A los HH. Ferry François, Jean-Yves Medidor y al H. Paul Pierre que fueron ordenados diá-conos en Haití, el 1 de septiembre de 2012.

• A los seis nuevos Viatores-asociados de la Provincia de España: Tomás Collado García, Elena García Batista, Ana Rosa Gutiérrez Manzano, María Montserrat Gómez López; Mertxe Moreno Ascanio y María José Martínez Remírez. Su compromiso se llevó a cabo el 15 de agosto de 2012.

Un nuevo noviciado en Burkina Faso

El 31 de agosto se abrió el noviciado de la Fundación de Burkina Faso. Se encuentra en Boassa. Acompañados por el Padre Julián Rainville, maestro de novicios, 3 jóvenes de Burkina Faso se han comprometido en este año de iniciación a la vida religiosa. Son los señores Michael-Pio Da; Hermann Pale y François Zoma.

Un nuevo blog viatoriano

Nuestro hermano de la Provincia de España Tomás Aranberri, bien conocido por su com-promiso con Serso, acaba de poner en línea un blog que abre una hermosa ventana sobre nuestra familia religiosa. Lo hace en una clara perspectiva de una de las dos prioridades del Capítulo 2012: la pastoral vocacional. Podéis visitarlo en: www.sanviator.net/

Confiados a nuestra oración • H. Yves LABERGE (Ca), el 28 de julio de 2012, a la edad de 89 años, en su 69º año de pro-

fesión religiosa.

• Sr. Richard GODIN (Ca), el 3 de agosto de 2012 a la edad de 71 años, en su 4e año de com-promiso en la comunidad viatoriana.

• F. Maurice BONY (F), el 9 de agosto de 2012, a la edad de 86 años, en su 62º año de profe-sión religiosa.

• F. Gérard LEMIEUX (Ca), el 12 de agosto de 2012, a la edad de 85 años, en su 67º año de profesión religiosa.

• P. Louis CHAUFFOUR (F), el 20 de agosto de 2012, a la edad de 98 años, en su 83º año de profesión religiosa et su 68º año de sacerdocio.

• H. Gilles BROCHU (Ca), el 15 de septiembre de 2012, a la edad de 84 años, en su 68e año deprofesión religiosa.

• Dña Gloria MARTÍN RODRÍGUEZ (E), el 17 de septiembre 2012, a la edad de 94 años, en su 31e año de compromiso en la comunidad viatoriana.

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Para alimentar nuestra reflexión

Los jóvenes nos peiden una vida religiosa más auténtica

En días pasados, en Quito, Ecuador, se llevó a cabo la 18ª Asamblea General de la Confedera-ción Latinoamericana y Caribeña de Religiosos y Religiosas (CLAR), du-rante la cual ha sido elegida como presidenta Mercedes Casas Sánchez. Es mujer y además, por primera vez, alguien originario de México. Recién llegada de Ecuador, Vida Nueva entrevista a la nueva presidenta.

- ¿Cual es la fuerza de la Vida Religiosa (VR) en Latinoamérica? El amor por ella. Se percibe el cariño a esta vocación, el creer en la fuerza y tesoro que es la Vida Religiosa para la Iglesia. Este amor se ve en el empeño de cada Conferencia por animar a sus religiosos, por vincularse y responder a la realidad que están viviendo y a las llamadas de Dios. La Vida Religiosa no ha perdido su capacidad de mirar la realidad, acompa-ñando a nuestros pueblos en sus luchas, gozos y momentos difíciles. Pero su gran fuerza es la misma gente, los pueblos a los que Dios nos envía y que siempre nos ayudan a que se defina más nuestra identidad como religiosos.

- ¿Cuáles considera que son los principales desafíos para la CLAR? Los desafíos brotan de la escucha de los clamores. Dios nos puso con el oído muy atento a escucharlos. Las voces vehementes de un crecimiento económico que excluye a muchos, de la explotación de la naturaleza inadecuada, de la trata humana, la migración, la corrupción, el nar-cotráfico; de los jóvenes y los movimientos sociales que se están gestando, indignados que piden justicia; el clamor de la situación de la mujer… También otro desafío que apuntaría es la renova-da opción por los pobres.

Los religiosos estamos llamados a vivir una profecía desde lo cotidiano,

desde la entrega del día a día, desde la comunión, más que desde el protagonismo o el estatus.

No hay que dejar de escuchar la voz de las nuevas generaciones de religiosos, así como la de los jóvenes que no lo son tanto, ya que ellos nos están pidiendo una vida más transparente y auténti-ca. Porque andan en búsqueda, aunque a veces no lo parezca tanto. Hay una sed de Dios muy grande, y sin embargo no encuentran en la Vida Religiosa la respuesta a sus inquietudes.

En conclusión, el gran desafío es seguir caminando en esta vida mística y profética, pero desde otras categorías. Tal vez no estemos llamados a ser los grandes profetas, pero sí a vivir una pro-fecía desde lo cotidiano, desde la entrega del día a día, desde la comunión, más que desde el pro-tagonismo o el estatus. Y en la mística, quizá no estamos llamados a ser los grandes místicos, que se leen, pero sí como la mística de la semilla de mostaza, del grano de trigo que muere, del grano que se siembra, crece y da fruto.

En el nº 2.814 de Vida Nueva.