Esta expresión es encon-
trada 78 veces en la Biblia.
Moisés, Samuel, Elías, Da-
vid y Timoteo son de esta
manera designados.
L a s p a l a b r a s
“ E v a n g e l i s t a ” y
“Evangelistas” son encon-
tradas tres veces en el
N u e v o T e s t a m e n t o
(Hech.21:8; 2 Tim.5:4;
Efe.4:11).
El Lugar o Propósito para los Predicadores, los Hombres de Dios, o
Evangelistas en los Asuntos de Dios
Siempre han existido los
proclamadores de la Pala-
bra de Dios, heraldos de
las buenas y malas noticias.
En 2 Corintos 1:21, Pablo
escribió que “agradó a
Dios salvar a los creyentes
por la locura de la predica-
ción”. Hoy, a lo largo de
esta nación y alrededor del
mundo, han incontables
multitudes de fieles, capa-
ces y dedicados predicado-
El Predicador Raymond Harris
Enero-Febrero 2019 Vol. 19, Número 1
El Expositor
“Predica la
Palabra, in-
siste a tiem-
po y fuera
de tiem-
po” (2 Tim.
4:2—LBLA)
El Predicador
Raymond Harris
1
Una Genera-
ción llevada
por los Senti-
mientos
Sewell Hall
3
La Iglesia y el
Evangelio So-
cial
Robert F. Turner
4
Ganar Almas es
un Deber del
Cristiano
Phil Sanders
6
res. Sin embargo, hay
otros en nuestros púlpitos
que no creo que entien-
dan la misión y la obra de
un predicador del Evange-
lio.
Es dicho hace muchos
años que un predicador
pionero, quien tuvo una
escuela para predicadores,
dijo a los jóvenes en el
mismo primer día de cada
año, ”Chicos, no predi-
quen a menos que tengan
que predicar”. ¡Este es un
buen consejo para hoy! A
menos que un varón sea
conducido por un amor
hacia (1) Dios (El Padre, el
Hijo y el Espíritu Santo),
(2) La Palabra, (3) La Igle-
sia, (4) Las Almas de los
perdidos, él debiera per-
manecer a un lado del púl-
pito. El propósito para
predicar debe ser convertir
a los pecadores y edificar
a los creyentes. El propósi-
to de la predicación no es
para agradar, entretener o
hacer sentir bien a la au-
diencia.
L a p a l a b r a
“predicador” es en-
contrada once veces en la
Biblia. En 2 Pedro 2:5, Pe-
dro se refiere de Noé como
u n “ p r e g o n e r o
[“predicador” KJV, NASB]
de justicia”. En el libro de
Eclesiastés, Salomón se
refiere así mismo siete ve-
ces como “el predicador”
En 1 Timoteo 2:7 y en 2
Timoteo 1:11, Pablo se re-
fiere así mismo como un
predicador. Y en Romanos
10:14 Pablo escribe de pre-
dicadores en general.
En el Antiguo y Nuevo
Testamento, los predicado-
res son también descritos
como un “hombre de Dios”
La predicación es se-
mejante a una pecera
donde todos te podrán
ver. Pequeñas quejas so-
bre tu esposa, sobre tus
sermones, y sobre tus
clases. Muchas de estas
quejas vendrán de aque-
llos que nunca han predi-
cado un sermón o ense-
ñado una clase en toda su
vida. Puede ser una vida
donde no recibirás un
aumento en tres o cuatro
años en conformidad con
el costo de las cosas. Y los
hermanos todavía se sor-
prenden y se preguntan
porque el predicador
piensa en mandarse tan
frecuentemente.
Algunos Predicado-res Renuncian
Es común escuchar de
hermanos que renuncian
a la predicación y se van a
trabajar en lo secular. Se
desilusionan, se desalien-
tan, se decepcionan y al-
gunas otras veces caen en
pecado. Per esto no es
nada nuevo. Sabemos
que en 2 Timoteo 4:10
Demas cometió la misma
cosa.
Algunos Predicado-res Debieran Renun-
ciar
A través de los años,
algunos predicadores han
dejado un rastro de Igle-
sias cortadas, fracturadas,
rotas y heridas. ¡Me sor-
prendo por esto! ¿Por
Página 2 Vol. 19, Número 1
que los hermanos conti-
núan llamándoles a predi-
car? Parece que algunos
gastan su vida haciendo
daño a la Causa de Cristo.
Y cuando terminan su mal
trabajo en un lugar, sim-
plemente se mueven a la
otra congregación y co-
mienzan de nuevo. Y, al-
gunas veces la Iglesia
procederá tan lejos como
para atreverse a
¡recomendar al predica-
dor demoledor a otra
congregación!
Algunos Predicado-res Han Renunciado
y no lo Saben
Si, ellos han renuncia-
do a la predicación contra
el baile, la bebida social,
las apuestas, el vestuario
inmodesto, el divorcio no
Escritural, las albercas
mixtas, los programas de
Televisión insanos, las
películas insanas, la forni-
cación, la música instru-
mental en la adoración, el
preemilenialismo, el insti-
tucionalismo y el denomi-
nacionalismo. Esta
“hambre de la pala-
bra” (Amos 8:11) está lle-
nado a las Iglesias con
miembros débiles no en-
raizados en el conoci-
miento de la Palabra de
Dios.
Otros que se conside-
ran positivos en su predi-
cación ya no establecen la
exclusividad de la Iglesia
de Cristo. Enseñan poco
Hace Cincuenta Años fui Enseñado en Tér-minos Bien Claros:
● Si quieres ser un
payaso, únete al circo!
¡pero mantente fuera del
púlpito!
● Si quieres hablar de
política, ve a Washington,
¡pero mantente fuera del
púlpito!.
● Si quieres ser un co-
mediante, ve a la radio (o
Televisión), ¡pero man-
tente fuera del púlpito!
● Si quieres ser un dra-
maturgo, sube al escena-
rio, ¡pero mantente fuera
del púlpito!
● Si quieres parecer un
intelectual, ve a enseñar
al Colegio, ¡pero manten-
te fuera del púlpito!
● Pero si quieres pro-
clamar seria, sobria y sim-
plemente la Palabra de
Dios, entonces, ¡por todos
los medios, toma el Púlpi-
to!
La Vida de un Predi-cador del Evangelio
siempre será una Ba-talla
Muchos de los que en-
tran a la predicación no
tienen un concepto de lo
que se están involucran-
do. Por otro lado, la vida
de un predicador puede
ser estimulante, emocio-
nante y espiritualmente
satisfactoria. Pero no to-
do será comer pollo frito,
glamur y brillantez.
sobre la “única Iglesia
verdadera”. Hace varios
meses escuché un juego
de sermones en casete
de cerca de cuarenta
minutos cada uno. No
recuerdo haber escu-
chado un versículo cita-
do o leído en su totali-
dad. Cada sermón con-
tenía no más de dos o
tres referencias a un
pasaje Bíblico.
Algunos predicadores
parecen empeñados en
verse como administra-
dores, consejeros, moti-
vadores o promotores
de la Iglesia más bien
que proclamadores de
la Palabra de Dios. Hoy,
también hay muchos
predicadores que están
citando a Swindoll, Lu-
cado, Dobson, Graham,
Colson o Stanley en lu-
gar de citar a Jesús, Pe-
dro, Santiago, Juan o
Pablo.
H e r m a n o s ,
¡necesitamos aprender
que usted no puede ir a
los Filisteos o a los Sa-
maritanos para enseñar
lo que convertirá a los
pecadores o edificará a
los creyentes!
— Fuente: Truth Ma-gazine, Vol. XLV, No.
8, Abril 19, 2001
¿¿ Se han dado
cuenta cuán
m u c h o m á s
importante parecen ser
los sentimientos ahora
que en el pasado?
Quizás únicamente las
personas mayores lo
habrán notado, pero los
sentimientos se han
convertido en la
motivación más grande
de nuestra cultura
actual.
En la publicidad, los
sentimientos han
tomado el lugar de los
hechos. Por ejemplo, las
publicidades para los
automóviles una vez
destacaron tales cosas
como el poder del
motor, el consumo del
c o m b u s t i b l e , l a
confiabilidad y el
precio. Ahora, la
publicidad de la
Televisión muestra un
vehículo a toda
velocidad por las calles
o saltando en la arena
del desierto o siendo
admirado por una joven
hermosa. La idea parece
ser cuán maravilloso
usted se sentiría si
compra esa marca de
automóvil.
En la política, muchos
eligen candidatos más
por su “pasión” que por
Página 3 Vol. 19, Número 1
La Familia
Los sentimientos han
sido intercambiados por
el amor en la relación
moderna. El amor Bíblico
es un compromiso a la
fidelidad “en la enferme-
dad y en la salud, en la
prosperidad y en la ad-
versidad, para lo mejor y
para lo peor”. El amor
“nunca deja de ser” (1
Cor.13:8), pero los senti-
mientos son volubles. Los
sentimientos nos contro-
lan solamente mientras
ellos son placenteros.
Muchos matrimonios se
han roto en recientes
años porque simplemen-
te uno de los dos cónyu-
ges ha “perdido la atrac-
ción” [el sentimiento] por
el otro. Todas las prome-
sas del día de la boda de
amar y honrar y cuidar
hasta que la muerte nos
separe” han sido olvida-
das en la devoción del
sentimiento.
Los padres a menudo
descuidan a sus hijos por-
que no sienten el com-
promiso de hacer los sa-
crificios necesarios para
ser los buenos padres
que debieran ser. Los hi-
jos son criados por una
niñera porque los padres
no sienten el compromi- —Continúa en la Pág.8
sus conceptos y experien-
cia. En los empleos, los
sentimientos se han con-
vertido en un substituto
del deber. Hubo una vez
cuando las personas to-
maban cualquier empleo
que estuviera disponible
y se dedicaban a el por-
que consideraban su de-
ber de proveer para si
mismos y para su fami-
lias. Con demasiada
frecuencia ahora, las per-
sonas toman un trabajo
solamente si ellos consi-
deran que lo van a disfru-
tar y que solamente irán
cuando les apetece. Aun
más delicado es el predo-
minio de los sentimientos
en algunas otras áreas.
Las Drogas
Los sentimientos a
menudo nulifican la dis-
creción. ¿Por qué las per-
sonas abusan de las dro-
gas, sabiendo que estas
han destrozado las vidas
de muchísimas personas?
La respuesta: Porque a
ellos les gusta sentir las
emociones a flor de piel.
Esto es el caso ya sean
las drogas la marihuana,
la cocaína, el alcohol, los
narcóticos prescritos u
otras drogas que alteran
la mente. La adicción se
produce cuando los efec-
tos desaparecen y el
usuario no se siente bien;
por lo que debe volver a
las drogas para recuperar
la sensación deseada.
P r o n t o e s t e
"sentimiento elevado" se
considerará normal, y
cantidades cada vez más
grandes de la droga se
necesitarán sólo para
sentirse "normal"
Una Generación Llevada por los Sentimientos Sewell Hall
L a primera edición de este año
(2019) se ha preparado con el objetivo inalterable de contribuir a nuestra edificación y crecimiento. El hermano Raymond Harris en su artículo El Predicador nos presenta unos breves pero destacados puntos de lo que debiera ser y ocuparse un siervo. Siempre recibiremos con beneplácito las observaciones de un obrero experimentado. El hermano Sewell Hall escribió este magnífico articulo Una Generación Llevada por los Sentimientos en la revista Biblical Insights en su última edición después de 15 continuos años de circulación. El autor como ofrece un análisis reflexivo del cambio conductual que se ha manifestado en las diversas áreas de la vida. El hermano Robert F. Turner en su tema La Iglesia y el Evangelio Social desarrolla el origen de esta tendencia hasta nuestros tiempos. En Ganar Almas es un Deber del Cristiano, el hno. Phil Sanders nos habla con bastante claridad de este mandato divino que descansa sobre cada Cristiano y la forma en que podemos testificar.
El Expositor Enero-Febrero 2019 COLUMNA EDITORIAL
Página 4
por vuestro cuerpo, que
habéis de vestir…. Mas
buscad primeramente el
reino de Dios y sus justicia,
y todas estas cosas os se-
rán añadidas” (Mateo 6:19,
20, 24, 25, 33). O considere
esto: “Si alguno quiere ve-
nir en pos de mí, niéguese
a sí mismo, y tome su cruz,
y sígame… Porque ¿qué
aprovechará al hombre, si
ganare todo el mundo, y
perdiere su alma? ¿O qué
recompensa dará el hom-
bre por su al-
ma?” (Mat.16:24, 26). La
primera preocupación de
Jesús fue por el alma y la
eternidad.
Muchas cosas han cons-
pirado para cambiar este
énfasis, pero observaremos
dos cosas en particular: El
“evangelio social” y el
“concepto del hombre to-
tal”. El Catolicismo Roma-
nos tuvo un extraño con-
trol sobre Europa Occiden-
tal antes de la Reforma. La
“Iglesia” coronaba o depo-
nía reyes, y dirigía la vida
social y religiosa de las
personas. Cuando llegó la
rebelión no solamente fue
está religiosa, sino política
y social también. Como un
ejemplo, la Revolución
Francesa derrocó el control
de “la Iglesia” y rechazó las
limitaciones morales. Pero
las personas pronto apren-
E l periódico The Min-
neapolis Star una vez
publicó una encuesta he-
cha entre personas de to-
da fe religiosa, preguntan-
do, “¿Qué usted cree que
es más importante que
debe hacer la Iglesia —
convertir personas a una
creencia espiritual de mo-
do que puedan obtener
una vida feliz después de
la muerte, o enseñar a las
personas como vivir mejor
cada día con el resto?”
Únicamente el 17 % de los
entrevistados creyó que la
conversión a una creencia
espiritual era más impor-
tante. Pudiéramos pregun-
tar de manera diferente, y
creemos que Jesús sabía
que la vida Cristiana es
mejor para el aquí y el
después, pero no hay duda
que donde él colocaría el
énfasis. La respuesta de las
así llamadas personas
“religiosas” es una clara
indicación del grado en el
que “el evangelio social”
ha comprometido el ge-
nuino Cristianismo.
Jesus enseño, “No os
hagáis tesoros en la tie-
rra… sino haceos tesoros
en el cielo… Ninguno pue-
de servir a dos señores…
Por tanto os digo: No os
afanéis por vuestra vida,
que habéis de comer o
que habéis de beber; ni
dieron que la “libertad”
no fue gratis. Sin restric-
ción, la anarquía reinó y
la vida se convirtió into-
lerante. La llamada
Francia sin Dios se vio
obligada a revisar su
postura hacia la religión;
pero sus teólogos mo-
dernistas cambiaron su
énfasis para satisfacer
las “necesidades de este
mundo”. La compasión,
el trabajo ético, la preo-
cupación social, etc.
(todo inherente en el
Cristianismo, pero no su
meta) recibió su máxima
facturación, y el
“evangelio social” flore-
ció.
Algún tiempo después
en Alemania (no necesa-
riamente relacionado
con el evangelio social)
algunos hombres letra-
dos desarrollaron el con-
cepto educativo “del
hombre total”. Se volvió
aparente para ellos que
la escolaridad era mas
que simplemente trans-
mitir información a los
estudiantes. El lado físi-
co, social y espiritual
debe ser desarrollado
como también su lado
intelectual; y a esto se le
llamó la educación “del
hombre total”. Creo que
su concepto fue válido, y
ha logrado mucho en
La Iglesia y el Evangelio Social Robert F. Turner
El Expositor Ene-Feb. 2018 Pág. 5
Es pura y simple supo-
sición usar este pasaje
para justificar el apoyo
de la Iglesia hacia escue-
las seculares, gimnasios y
clubs sociales. Esto se
vuelve un ataque sobre
el papel distintivo de la
Iglesia.
El Cristianismo afecta a
todas las relaciones hu-
manas. En el campo do-
mestico, este vuelve a un
marido o esposa mejor y
también a los hijos. En el
mundo de los negocios
este aporta diligencia y
honestidad (Col.3:17 y
siguientes). Enseña el
respeto hacia el gobierno
civil y hacia los vecinos
(Luc.10:29 y siguientes).
Pero esto esta muy lejos
de querer colocar a la
Iglesia en los asuntos
seculares, o “Centros de
Vida Familiar”. Pablo dijo
en 1 Corintios 11:22
“Pues qué ¿no tenéis ca-
sas en que comáis y be-
báis?”. Mostramos un
desprecio a la Iglesia de
Dios cuando mezclamos
su adoración con sus
funciones domesticas. El
problema no fue dónde
ellos estaban (la Iglesia
podía reunirse para la
adoración en un lugar
privado); sino porque o
para que ellos estaban
reunidos. La Iglesia orga-
nizada son los santos
unidos para obras parti-
cularmente espirituales.
La Iglesia distributiva y
colectivamente tiene un
papel de enseñanza (1
Tim.3:15; 2 Cor.11:7-8). Es
“la columna y baluarte de
la verdad” divina declaran-
do por palabra y ejemplo
las buenas nuevas de salva-
ción en Cristo. La asocia-
ción de los santos promue-
ve la adoración y la edifica-
ción. (1 Cor.11:18 y si-
guientes; Heb.10:24-25), y
la oportunidad para reunir
fondos para el evangelismo
y la benevolencia (Fil.4:15;
1 Cor.16:1-2). El énfasis es
espiritual, como es visto en
toda las Escrituras con res-
pecto a la Iglesia en acción.
Es una institución espiritual,
para administrar las necesi-
dades espirituales.
Las contribuciones Escri-
turales son (o debieran ser)
hechas con propósitos au-
torizados en mente. Y rom-
pemos la confianza con los
demás contribuyentes y
con el Señor cuando usa-
mos estas contribuciones
(ofrendas) para algo dife-
rente.
Hermanos, el Cristianismo
hace un mundo mejor hoy
— pero su efectos sobre eta
vida son un sub producto
de una razón más grande
de su existencia. El objetivo
del Cristianismo es prepa-
rarnos para una vida en el
cielo; y no debemos permi-
tir que el llamado
“evangelio social” y el con-
cepto “del hombre total”
nos desvié de ese destino
eterno”
— Fuente: Guardian of
Truth, Vol. XXXIV, Un.11,
Junio 7, 1990, Págs.. 7-8.
mejorar los sistemas
educativos cuando so
mantenidos en el debido
balance. Pero el concep-
to del “hombre total” no
se detiene en las escuelas
públicas. A través de li-
bros y cursos religiosos
para entrenamiento de
los maestros, a menudo
escritos o enseñados por
personas con un trans-
fundo en educación se-
cular han logrado intro-
ducir el concepto “del
hombre total” a
“nuestras” clases de Bi-
blia. Fue “natural” mez-
clar esto con lo que ha-
bíamos aceptado del
“evangelio social”, y con-
cluir que “la Iglesia” esta-
ba obligada a aportar “al
hombre total”.
Si usted pide por la
Escritura que aparente-
mente respalde este
“concepto” usted proba-
blemente obtendrá Lucas
2:52, “Y Jesus crecía en
s a b i d u r í a
(intelectualmente) y en
estatura, (físicamente) y
en gracia para con Dios
(espiritualmente) y los
hombres” (socialmente).
Ahí lo tienes, con los co-
mentarios habituales en
paréntesis. ¿Hay alguna
duda que Jesús creció en
todas estas formas? ¿Hay
alguna duda que todos
los individuos debieran
crecer en estas formas?
¡Ninguna duda debiera
existir en la mente! Pero
que tiene que ver esto
con hacer la obra de una
Iglesia organizada?
NUNCA TE RINDAS Hugh Clark
Edmund Burke, el gran
estadista Inglés, una vez
sintetizo su consejo
extraído de toda una vida
activa y fructífera batalla,
en estas palabras: “Nunca te
desesperes pero si lo haces,
sigue trabajando
desesperado”. Pablo
escribió que Dios tiene
preparada la vida eterna
para “los que, perseverando
en bien hacer, buscan
gloria y honra e
inmortalidad” (Rom.2:7).
La palabra “perseverar” ha
llegado a significar la
disposición de no quejarse
o murmurar de la situación
de uno en la vida. La queja
no es nunca una virtud, es
siempre un vicio. Pero la
perseverancia es mucho
más que la ausencia de las
quejas y los lamentos. La
perseverancia siempre
someterá al enemigo bajo
sus pies.
EL EXPOSITOR es una publi-
cación de artículos sanos, edifi-
cantes y relevantes al desempe-
ño del fiel Expositor de la Palabra
de Dios. Cualquier comentario
diríjalo a su editor responsa-
ble: Armando Ramírez 1 de
Mayo # 214 Valle Hermoso,
Tamps. 87501 México. E-Mail:
Página 6 El Expositor Enero-Febrero 2019
UU n día ella preguntó
sobre la enferme-
dad terminal de un padre
de cuatro hijo si él estaba
dispuesto a estudiar la
palabra de Dios con un
predicador, él dijo que
estaba dispuesto. Al ter-
mino de un tiempo cinco
de los seis miembros de
esa familia obedecieron el
Evangelio.
Uno nunca puede
estar plenamente cons-
ciente que el predicar las
buenas nuevas constante-
mente tendrá efecto en
futuras generaciones.
Use Sus Habilidades
Nadie tiene las mismas
habilidades. La Iglesia es
un cuerpo con muchos
miembros (Rom. 12:4-5)
cualquiera que sean sus
habilidades son dones
que Dios nos ha dado y
debemos usarlos en servir
al Señor y en edificar al
cuerpo de Cristo (Ef. 4:11-
16). La obra principal de la
Iglesia es predicar el Evan-
gelio y hacer discípulos de
todas las personas (Mt.
28:18-20; Mr. 16:15-16).
Cada uno de nosotros
debiera usar sus habilida-
des o dones para ganar
almas. “Cada uno según el
don que ha recibido, mi-
nístrelo a los otros, como
buenos administradores
de la multiforme gracia
de Dios” (1 Ped. 4:10). Si
no podemos enseñar pú-
blicamente, podemos
demostrar nuestra fe an-
te los incrédulos (3:1). Si
nos sentimos inadecua-
dos para enseñar un es-
tudio bíblico personal
podemos conducir a un
amigo perdido, que le
pueda enseñar. Sino po-
demos hablar pública-
mente podemos entre-
garle una primera lección
de un curso Bíblico por
correspondencia, un tra-
tado del Evangelio, o in-
vitar a un amigo a los
servicios de adoración.
Muchas personas
comparten sermones del
evangelio grabados en
discos compactos que
ellos han escuchado en la
Iglesia u otros materiales
evangelistícos tomados
de la red, el punto es que
todos podemos hacer
algo para ganar un per-
dido para Jesús.
No hacer nada pudiera
costar a alguien su alma
o muchas almas. No ha-
cer nada significa que no
estamos tomando la obra
fundamental de la Iglesia
con seriedad. No hacer
nada significa que somos
oyentes que nos engaña-
mos a nosotros mismos
al no ser hacedores de Su
Palabra (Stg. 1:21-25).
No hacer nada para
traer a aquellos que es-
tán en la oscuridad es
cruel. No hacer nada pa-
ra dar esperanza al abati-
do es egoísmo; y no ha-
cer nada cuando las al-
mas están perdidas es
trágico. No deseamos ser
identificados con aquel
siervo malo y negligente
que escondió su talento
en la tierra más que mul-
tiplicarlo como debió
(Mt. 25:14-30). El Señor
un día nos llamará a
cuentas ¿Qué obras le
mostrarán nuestras vi-
das?
El Amor por el Señor y
el amor por las almas
debiera motivarnos ha
hacer algo que provea
una oportunidad para
que le perdido escuche el
Evangelio, cuando Jesús
llamo a Leví, él se levantó
y le siguió (Mar. 2:14).
¿Cómo Dios Alcan-
za Almas?
Dios llamó a un hom-
bre llamado Cornelio
quien era temeroso de
Dios, rápido para ayudar
al pobre, devoto y hom-
bre de oración. Sin em-
bargo él no había escu-
chado el Evangelio, y no
se había convertido en
un Cristiano.
Dios envió un ángel a
Cornelio; pero este no le
dijo como convertirse en
Cristiano. Más bien el le
dijo a Cornelio que en-
viará a buscar a por Pe-
dro quien te hablará
“palabras por las cuales
serás salvo tú, y toda tu
casa” (Hech. 11:14). Poco
antes de este evento
Dios observó un hombre
viajando desde Etiopía
Jerusalén para adorar en
el templo.
Ganar Almas es un Deber del Cristiano Phil Sanders
Él vio su profundo in-
terés en la Palabra de
Dios cuando leía Isaías.
Pero Dios no le hablo
directamente a él. Más
bien un ángel le dijo a
Felipe unirse al viajero, y
Felipe le enseño el Evan-
gelio de Cristo (Hech.
8:26-40).
Jesús vio el celo y la
dedicación de un hom-
bre llamado Saulo y Él
sabía que este hombre
actuaba con limpia
consciencia aunque aso-
laba a la Iglesia. Jesús
apareció a Saulo en ca-
mino a Damasco; pero Él
no le dijo a Saulo como
corregir su pecado. Más
bien Jesús le dijo “entra
en la cuidad, y se te dirá
lo que debes ha-
cer” (Hech. 9:1-6). En-
tonces Jesús envió a
Ananías que le dijera le
dijo a Saulo “levántate y
bautízate, y lava tus pe-
cados, invocando su
nombre” (22;16).
Dios tuvo la oportuni-
dad de hablar las pala-
bras de salvación direc-
tamente a cada uno de
estos hombres, pero no
lo hizo; como tampoco
lo hace hoy. Mas bien,
Dios a confiado el Evan-
gelio a los Cristianos y
espera que nosotros
“vayamos a todo el
mundo y prediquemos
el Evangelio a toda crea-
tura” (Mar. 16:15).
Vol. 19, Número 1
Dios no revela perso-
nalmente el mensaje de
salvación a la humani-
dad hoy. Tampoco nos
habla directamente o
nos salva por una opera-
ción directa del Espíritu
Santo. Más bien Dios
usa humanos que com-
partirán su Evangelio
inspirado con otros que
están perdidos. Su men-
saje salva, pero Dios usa
personas para compartir
su mensaje. “Pues ya
que en la sabiduría de
Dios, el mundo no cono-
ció a Dios me-ante la
sabiduría, agradó a Dios
salvar a los creyentes
por la locura de la predi-
cación” (1 Cor. 1:21).
Cuando Pablo animó
a La Iglesia a orar por los
perdidos é no les estaba
pidiendo orar por una
operación directa del
Espíritu. Mas bien, él les
dijo que debieran dedi-
carse a la oración para
que ”él Señor nos habrá
puerta para la Palabra a
fin de dar a conocer el
misterio de Cristo” (Col.
4:2-4; cf, Ef. 6:18-19).
Pablo enseño que
somos purificados por
nuestra obediencia a la
verdad y por el nuevo
nacimiento, “no de si-
miente corruptible, sino
de incorruptible, por la
Palabra de Dios que vive
y permanece para siem-
pre” (1 Ped.1:22-23).
Página 7
endo en la obra del Se-
ñor siempre, sabiendo
que vuestro trabajo en
el Señor no es en
vano” (1 Cor. 15:58).
— Fuente: Gospel Ad-vocate, , Vol. 158, No.
11, Noviembre de 2016
“Y esta es la palabra que
por el evangelio os ha
sido anunciada” (v.25).
La Cosecha es
Abundante
Jesús nos recuerda
que “A la verdad la mies
es mucha, mas los obre-
ros pocos. Rogad, pues,
al Señor de las mies, que
envié obreros a sus
mies” (Mt. 9:37-38). Mu-
chas almas hoy están
hambrientas por un
mensaje de esperanza y
vida eterna. Las perso-
nas cansadas de este
mundo pecaminoso bus-
can por algo mejor y
mas elevado. Poseemos
el Evangelio precioso, las
palabras de vida eterna.
Debemos compartirlas
con aquellos que las
buscan y con todos
aquellos que sean capa-
ces de escucharlas.
“No nos cansemos de
hacer el bien” (Rom.
2:7). No nos encerremos
en nuestras vidas o ocu-
paciones privadas. Este-
mos siempre ocupados
compartiendo las pala-
bras de Jesús con todas
las almas que escuchen.
No podemos descan-
sar hasta que cada per-
sona haya escuchado
cada corazón haya sido
tocado y cada alma haya
sido ganada “Así que,
hermanos míos, estad
firmes y constantes, cre-
Un Maestro del Evangelio
Bill Cavender
Un buen maestro vive
lo que enseña. Se esfuerza
en dejar un ejemplo de su
santidad y piedad ante los
demás. Lee la Biblia y ora
diariamente. Prepara sus
lecciones con diligencia.
Asiste a todos los servicios
de la Iglesia. Dedica al
Señor su tiempo, sus
pensamientos, su energía,
sus esfuerzos, su dinero y
su influencia. Habla la
Palabra con denuedo,
firmeza, amor, y
compasión por las almas.
Enseña la verdad y expone
el error. No se
compromete en aquello
que es impío y
cuestionable. Viste
decorosamente y su forma
de vida es sincera, formal
y dedicada en el servicio
del Señor. Reconoce su gran
responsabilidad en conducir
las almas al camino de la
verdad y la justicia. Las
bendiciones que el puede
traer al enseñar la verdad
serán medidas únicamente
en la eternidad.
El Desafío más Importante que Enfrenta
la Humanidad por Larry Rouse
La Batalla por la verdad y por
la mente que busca la verdad
ocurre en muchos niveles. Las
Escrituras indican que una
honestidad básica debe existir
en el corazón de uno, a fin de
que este pueda ser efectivo.
Jesús dijo que solamente “el
buen y honesto corazón” dio
fruto de la Palabra de Dios en
la parábola del sembrador
(Lucas 8:15). Un reciente
columnista se refirió a la batalla
que enfrentan las personas para
distinguir la fantasía de la
realidad: “He pedido hablar
sobre lo que considero el
desafío más importante que
enfrenta la humanidad, y tengo
una respuesta fundamental que
dar. El desafío más importante
que enfrenta la humanidad es
el desafío de distinguir la
realidad de la fantasía, la
verdad de la propaganda.
Debemos diariamente decidir si
las amenazas que enfrentamos
son reales, si las soluciones que
ofrecemos realizarán algún
bien, si los problemas que se
nos dice existen son en realidad
problemas o no lo son. Cada
uno de nosotros tiene un
sentido del mundo, y todos
sabemos que este sentido nos es
dado en parte por lo que otras
personas y la sociedad nos dice;
en parte generado por nuestro
estado emocional, el cual
proyectamos hacia el exterior;
y en parte surgido de nuestras
percepciones genuinas de la
realidad. Nuestra batalla para
determinar lo que es verdadero
es la batalla para decidir que tanto de nuestras percepciones es
genuino, y que tanto son falsas
debido que ellas han sido
transmitidas o venidas o generadas
por nuestras propias esperanzas y
temores” (Michael Crichton,
columnista de The New York Times (Sep, 5, 2005).
— Viene de la Página 3
miso con el tiempo, el cui-
dado y la ternura que ellos
necesitan.
La Religión
Los sentimientos han
remplazado el creer. Las
personas dicen que ellos
sienten ciertas cosas como
verdaderas más bien que
decir que las creen. Las
falsas creencias pueden
ser corregidas por medio
de las Escrituras y la lógi-
ca, pero ¿Quién puede
argumentar con una per-
sona sobre lo que él o ella
siente?.
Cuando los sentimien-
tos se convierten en auto-
ridad, todo razonamiento
es inútil. Los servicios de
adoración son juzgados
por los sentimientos emo-
cionales que ellos produ-
cen y una Iglesia es elegi-
da sobre la base de su ca-
lidez y amistad. Algunos
comparan un buen senti-
miento con la salvación y
la recepción del Espíritu
Santo.
Aun aquellos cuyo
propósito es seguir las
Escrituras pueden ser ten-
tado a guardar silencio
por una mayor preocupa-
ción por los sentimientos.
Algunos de nosotros pre-
feriríamos ser golpeados
físicamente en lugar de
que nuestros sentimientos
sean heridos por el ridícu-
lo o el rechazo.
El Expositor Enero-Febrero 2019 Página 8
regularmente empren-
den su camino a los ser-
vicios de adoración a pe-
sar de sus dolores y ma-
lestares. Y están todavía
aquellos discípulos que
han crucificando “la car-
ne con sus pasiones y
deseos” (Gál.5:24) más
bien que “gozar de los
deleites temporales del
pecado” (Heb.11:25).
Dios nos dio senti-
mientos. Él recompensa
con buenos sentimientos,
una conciencia limpia o
la cosecha del buen fruto
de nuestro trabajo. Pero
Dios también nos ha da-
do la voluntad que pre-
tende que sea conforma-
da a Su voluntad, sin im-
portar los sentimientos.
Si hay un recompensa
por los sentimientos, es
por el dolor que se sufre
por causa de la justicia
“Mas si haciendo lo
bueno sufrís, y lo sopor-
táis, esto ciertamente es
aprobado delante de
Dios” (1 Ped.2:20). Re-
cuerde también que “si
sufrimos, también reina-
remos con él” (2
Tim.2:12).
— Fuente: Biblical
Insights, Vol. 15, Num.12, Diciembre de
2015, Pág.9
Nuestro servicio al Se-
ñor puede ser gobernado
más por los sentimientos
que por la fidelidad. Al-
gunos solamente hacen
lo que a ellos sienten sin
importar de lo que ellos
saben que le agradaría.
Ellos algunas veces argu-
mentan, “No me sirve de
nada si no siento ganas
de hacerlo”. Esta es una
falacia delicada. Las ora-
ciones de nuestro Señor
en el Jardín claramente
revelan que Él no se sen-
tía atraído por los sufri-
mientos de la Cruz, pero
Él lo soportó de todas
maneras debido a que
esto era la voluntad de
Dios. Los verdaderos dis-
cípulos serán “como su
maestro” (Luc.6:40) al
hacer la voluntad de Dios
ya sea que lo sientan o
no.
Excepciones
Gracias a Dios hay no-
tables excepciones aun
en nuestro tiempo: Mari-
dos y esposas permane-
ciendo juntos aun cuan-
do la relación no es la
ideal. Padres luchando
con sus hijos al “criadlos
en la disciplina y amo-
nestación del Se-
ñor” (Efe.6:4). Padres tra-
bajando largas horas en
empleos nada agrada-
bles. Madres cansadas
perdiendo el sueño para
proveer para sus familias.
Cristianos de edad mayor