Upload
salma-
View
56
Download
0
Embed Size (px)
Citation preview
CAMPUS LOS MOCHIS
PSICOLOGIA EDUCATIVA II
“Aproximaciones psicológicas al aprendizaje y las habilidades
intelectuales”
INDICE
Introducción
Contenidos temáticos
- Resumen
- Análisis de contenido
- Esquema
Comentarios profesionales
Comentarios personales
Bibliografía
INTRODUCCION
En el siguiente portafolio de evidencias hablare sobre cómo está relacionado el
aprendizaje con la cognición. Dando a conocer de manera introductoria como las
habilidades cognitivas influyen en el aprendizaje tanto de manera positiva como
negativa para que se de este desarrollo en el individuo y obtenga los
conocimientos deseados.
Expondré primeramente un resumen del tema; posteriormente en lo explicare un
poco más en el análisis de contenido; después mostrare un esquema donde se
encuentran los puntos clave del tema.
Finalmente daré mi punto de vista tanto profesional como personal, en el que
tratare de relacionar el conocimiento adquirido con mis vivencias cotidianas; de
igual manera daré mi opinión de mi proceso de comprensión de dicho tema.
CONTENIDOS TEMATICOS
RESUMEN
Las intervenciones educativas derivadas de los diferentes puntos de vista reflejan
alcances y limitaciones generados por fundamentos teóricos, sus métodos de
análisis, los procedimientos de intervención que utilizan y las estrategias
diseñadas para la solución a los problemas prácticos.
Para Dennis y Sternberg las dos aproximaciones psicológicas que más han
aportado al campo educativa, la conductual y la cognitiva, difieren entre sí porque
operan en diferentes niveles de la ejecución, pero ambas tienen implicaciones
practicas al campo educativo dado que explican diferentes aspectos del
rompecabezas del aprendizaje y el desarrollo de habilidades.
Para estos autores en la perspectiva asociativa empirista, la naturaleza del
aprendizaje se fundamenta en la noción de asociación: asociación entre estímulos
y respuestas, entre condiciones y acciones, o entre nodos en una red
conexionista.
En este enfoque se utiliza el análisis de tareas para descomponer una tarea
compleja en asociaciones simples que pueden ser encadenadas durante el
entrenamiento. Así, a la práctica educativa le subyace la suposición de que las
habilidades complejas son aprendidas al adquirir componentes simples que, a su
vez, son combinados en habilidades conductuales más complejas.
Tal concepción de las habilidades como ensambles de respuestas simples ha
servido de base para evaluar la afectividad de la enseñanza en términos del
alcance logrado con relación a la meta establecida o para obtener un índice del
grado en el cual se ha beneficiado al aprendiz; también ha servido en la
construcción de sistemas de tutoreo inteligente, en el desarrollo de tecnologías
para proveer instrucción personalizada, y para manipular las actividades del salón
de clases de manera tal que tanto el material como la practica apropiada sean
presentadas eficientemente. La habilidad cognitiva en las teorías conductuales es
concebida como un paquete de información que puede ser adquirido por piezas,
con base en un orden prescrito.
Otro aspecto fundamental trabajado en la perspectiva asociativa es el control de
respuestas “libres de error”, lo que ha favorecido el diseño de métodos
instruccionales que evitan fortalecer la ejecución tendiente al error.
La tradición cognitivo racionalista ha demostrado ser útil para explicar la
adquisición de la comprensión conceptual, donde los aprendices construyen
activamente la comprensión, basándose en sus experiencias.
Se enfoca sobre los contenidos informacionales de las mentes de los estudiantes,
más que en sus conductas abiertas, por lo que en las prácticas educativas
orientadas bajo esta aproximación enfatizan la construcción de las
representaciones y procedimientos cognitivos, más que enfatizar la construcción
de habilidades conductuales.
Con base en el trabajo desarrollado en este enfoque, es posible distinguir cuatro
líneas generales que han impactado la acción educativa: a) la del desarrollo
cognitivo en los escenarios educativos; b) la identificación y modelamiento de las
estructuras conceptuales subyacentes a distintos dominios de conocimiento; c) el
procesamiento estratégico de la información; y d) la naturaleza social y situacional
del aprendizaje.
Desde que la investigación en aprendizaje e instrucción se interesó en el proceso
de comprensión, el aprendizaje es visto como un proceso activo de construcción
del conocimiento por parte del estudiante. En este contexto, aprender significa
“desarrollar comprensión”. Los conocimientos previos así como los conceptos y
principios que regulan las diversas nociones a ser aprendidas en un campo de
conocimiento determinado, son trabajados y articulados en un conocimiento
estructurado que los integra, significativamente, a la base de conocimientos del
aprendiz para que la comprensión sea exitosa. Así, el fomento de habilidades
cognitivas de carácter general, tanto como el de habilidades cognitivas
dependientes de contenidos específicos se constituyen en actividades regulares
de la practica cognitiva en los escenarios educativos y se prepara a los profesores
en una variedad extensa de técnicas que favorecen la utilización de mecanismos
responsables del cambio conceptual en sus estudiantes, en vías de modificar,
enriquecer o reestructurar concepciones cotidianas implícitas en concepciones
científicas explicitas.
Desde la perspectiva cognitiva, la habilidad de aprender debe construirse al igual
que otros tipos de rasgos, por ello se desarrollan ambientes de aprendizaje que
promuevan los hábitos de procesamiento cognitivo activo.
Con base a esto, la intervención cognitiva en el campo educativo esta
comprometida en desarrollar estrategias entre aquellos estudiantes que no las
tienen. Así se estudian, evalúan y modelan estrategias cognitivas diversas.
Al igual que las estrategias de aprendizaje, se reconoce que gracias al
conocimiento autorregulatorio y a la operación de las actividades de
autorregulación, el estudiante puede establecer la modificación, selección o
construcción de las estrategias necesarias para el logro de las metas deseadas.
Se concibe la autorregulación como un proceso interactivo complejo que
involucra, no solo autorregulación metacognitiva, sino también metamotivacional, y
ambas pueden ser enseñadas, vía el modelamiento que ofrezca el docente.
Ambas se entrelazan y afectan la inversión del esfuerzo del estudiante, por una
parte, y la calidad de ejecución en la tarea de aprendizaje, por la otra.
La ejecución compartida con otros estudiantes promueve un sentido de orientación
a la meta en la medida en que el aprendizaje se ajusta a los requerimientos y
recursos del ambiente. Gracias a la interacción social, los estudiantes desarrollan
y cuestionan sus definiciones de competencia al grado en el que observan como
razonan los otros y reciban retroalimentación de sus propios esfuerzos para
resolver problemas, así mismo, aprenden la facultar de dar y aceptar ayuda y
estimular este mismo rasgo en los demás.
Así, la tradición cognitiva ha identificado mecanismos que intervienen en aspectos
variados, por ejemplo: a) cuando se tiene éxito en un dominio, es decir, la
representación adecuada del espacio del problema, b) la elaboración de
interferencias acerca de un fenómeno científico, c) la construcción de ecuaciones
correctas para resolver problemas aritméticos presentados en prosa, y d)
comprender argumentos a favor o en contra de un curso de acción determinado,
entre otros aspectos de interés al campo educativo.
ANALISIS DE CONTENIDO
En este tema se habla de las teorías que han aportado más a la psicología
educativa las cuales son conductual y cognitiva; ya que ambas tienen mucha
practicidad en el ámbito escolar.
El enfoque cognitivo se interesa por los procesos internos que ocurren en el
individuo en su desarrollo de aprendizaje. Por lo que se enfoca en dos factores; el
cognitivo y la experiencia. Este enfoque habla de cómo se van relacionando estos
dos factores para acrecentar el conocimiento del individuo.
El enfoque conductual trata de generar estímulos reforzados a través de la
asociación de generadores de comportamientos. Para así ir eliminando y/o
adquiriendo nuevas conductas que favorezcan al desarrollo del individuo dentro
del aula.
La habilidad de adquirir el aprendizaje se debe construir ya que es un proceso, por
lo que se debe crear ambientes óptimos para que el aprendizaje se de y se
estimule la adquisición de conductas positivas.
Se debe orientar al estudiante a que desarrollen el establecimiento y cumplimiento
de sus metas, mediante el empleo de estrategias que lo ayuden en ese proceso y
así mismo que lo ayuden a demostrar el aprendizaje adquirido.
COMENTARIOS PROFESIONALES
Considero que todo individuo debe desarrollar las habilidades que tiene como
persona para que estas lo ayuden a su proceso de adquisición de aprendizaje
dentro del ámbito educativo.
Por lo que se debe buscar que el alumno pueda desarrollar y llevar a la práctica
sus conocimientos; ya sea esto mediante la planeación de los programas
escolares o una planeación del mismo sujeto.
Al ya haber adquirido el conocimiento este se debe moldear para que cuando se
trate de adquirir otro conocimiento este se vaya asociando con el que ya tenía
previamente el sujeto; ya que el conocimiento es una construcción por parte del
estudiante.
Como profesional esto me puede servir al momento de estar trabajando con
personas en cualquier rama de la psicología; porque así sabré como generar
aprendizaje en ellos y poder llegar a que comprendan y apliquen dichos
conocimientos.
COMENTARIOS PERSONALES
La lectura se me hizo algo corta pero aun así fue concreta en los puntos que
quería explicar, me sirvió como una buena introducción a los enfoques que tienen
más prominencia en el proceso de aprendizaje; ya que es un desarrollo que sin
darme cuenta lo fui adquiriendo.
Considero que se debe fomentar en el alumno el que adquiera un conocimiento
por medio de diferentes materiales didácticos y que se promueva la práctica de
dichos conocimientos para que así queden más reforzados.
BIBLIOGRAFIA
Sandra Castañeda Figueiras “Educación, aprendizaje y cognición. Teoría en la práctica. (Capitulo 4, págs. 53-56)”