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47 47 LIBROS AUTOAYUDA A ún recuerdo el impacto que me causó leer Edu- car con “co-razón” (DDB, 2005), mi primer libro de José María Toro, que alcanza ya la 15ª edición. Después de una temporada de varios chascos con lecturas de pedagogía fic- ción, me topé con él. Algunos títulos sobre educación me han activado, pero este ha sido el único que me ha emocionado profundamente. Recuerdo la- grimear en más de una ocasión mientras lo subrayaba. No sé si alguna vez seré capaz de aplicar verdaderamente su propuesta en el aula, pero sé que leerlo fue el nacimiento de un nuevo docente en mí. Mi alegría sobre el puente no es un libro solo para educado- res. Al menos no exclusivamen- te. Aquí Toro sigue poniendo el foco en el corazón y en la Vida a través de 64 reflexiones que, a modo de breves artículos, pueden constituir una estupen- da colección de textos para la contemplación semanal. Son contemplaciones del ámbito del crecimiento personal, pero en las que también pueden en- contrarse sutiles guiños a la tradición y al ser cristiano con su lenguaje delicado y abun- dante en símbolos, como los del puente o la orilla que dan sentido al título: “A veces leer un libro es como estar sobre un puente, mirando a un río, y contemplar la corriente como si fuese un espejo que nos de- vuelve nuestro más auténtico rostro. A veces, leer un libro nos permite reconocernos en lo escrito, recreando nuestro propio ser en el autorretrato que dibuja para nosotros su texto”. Índice temático Las 64 reflexiones se dis- ponen sin aparente orden a lo largo de las páginas, pero un ín- dice temático las reagrupa así: creatividad, cuerpo y emoción, descanso, meditación y silen- cio, educación, las estaciones, Un río donde soltar lastre EL REVÉS DE LA TRAMA MI ALEGRÍA SOBRE EL PUENTE Mirando la vida con los ojos del corazón José María Toro Desclée De Brouwer Bilbao, 2015 · 200 pp. C omparto la idea del es- critor argentino César Aira de que una cosa es la literatura y otra lo que se conoce como el mundillo li- terario. A veces, sin embar- go, es imposible desligar- los, y es entonces cuando merecen la atención de ‘El revés de la trama’. Viene a cuento todo esto por la polémica surgida estos días en torno a una entrevista del editor Chus Visor con el suplemento El Cultural. Aunque son más que discutibles y provoca- doras varias de sus respues- tas, la que ha levantado una marejada en el proceloso mundo de la poesía ha sido esta: “Lo siento, pero creo que la poesía femenina en España no está a la altura de la otra, de la masculina, digamos, aunque tampoco es cosa de diferenciar. Des- de luego, si vas a coger a las poetas desde el 98 para acá, es decir, todo el siglo XX, no ves ninguna gran poeta, ninguna, compara- ble a lo que suponen en la novela Ana María Matute o Martín Gaite”. Centenares de voces de la cultura reaccionaron inme- diatamente a las declara- ciones de Visor, por consi- derarlas machistas, con el manifiesto Justicia Poética ¡Ya! Dado que la propia editorial Visor está en el jurado de numerosos pre- mios de poesía convocados por ayuntamientos e insti- tuciones y publica las obras ganadoras, los firmantes piden a sus responsables que retiren la colaboración. Ante la avalancha de críti- cas hacia Chus Visor en las redes sociales y en algunos medios de comunicación, a veces muy subidas de tono, algunos de los firmantes –el caso más llamativo es el del escritor José María Merinohan retirado su apoyo al manifiesto por considerar que se estaba asistiendo a un linchamiento público. Al margen de polémicas, lo que sí parece claro, aparte del escaso fundamento y rigor de Chus Visor respec- to a la poesía escrita por mujeres, es que en este país deberíamos empezar a hablar de una vez por to- das de cómo se conceden los premios, en cualquier género, un sistema que no es equiparable al de ningún país de nuestro entorno. JAVIER MORALES ORTIZ Aguas revueltas en el mundo de la poesía blanda, misericordiosa y que no pretende cambiar al otro, que no compara ni etiqueta. Mirada que alegra, pues alegría significa estar aligerado, soltar pesos y pesares. Si quieres alegrarte, quizás este libro te ayude a tirar al río algunos de tus lastres. ISMAEL MENA MARTÍN mirada, las palabras, tiempo, trabajo, servicio y compromiso con la vida. Esta división puede ayudar mucho al lector si qui- siera recuperar capítulos para utilizar los textos o insertarlos en oraciones, meditaciones o reflexiones. Quién sabe, amigo lector, si acabas de encontrar un buen complemento a tu des- gastado libro de La oración de la rana (Sal Terrae, 1998). “Dos amigos están sobre el puente. Uno de ellos dice: ‘¡Con- templa la alegría de los peces en el río!’. Mas el otro le replica: ‘¿Cómo tú, no siendo pez, sabes de la alegría de los peces’. El primero responde: “Por mi ale- gría sobre el puente’”. Este bre- vísimo relato da título al libro, que se complementa con este subtítulo: Mirando la vida con los ojos del corazón. ¿Y qué es para el autor esta mirada? Este mirar a la vida con los ojos del corazón es hacer que el corazón se asome al mundo. La mira- da del corazón es una mirada Chus Visor

Un río donde soltar lastre

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LIBROS AUTOAYUDA

Aún recuerdo el impacto que me causó leer Edu-car con “co-razón” (DDB,

2005), mi primer libro de José María Toro, que alcanza ya la 15ª edición. Después de una temporada de varios chascos con lecturas de pedagogía fi c-ción, me topé con él. Algunos títulos sobre educación me han activado, pero este ha sido el único que me ha emocionado profundamente. Recuerdo la-grimear en más de una ocasión mientras lo subrayaba. No sé si alguna vez seré capaz de aplicar verdaderamente su propuesta en el aula, pero sé que leerlo fue el nacimiento de un nuevo docente en mí.

Mi alegría sobre el puente no es un libro solo para educado-res. Al menos no exclusivamen-te. Aquí Toro sigue poniendo el foco en el corazón y en la Vida a través de 64 refl exiones que, a modo de breves artículos, pueden constituir una estupen-da colección de textos para la

contemplación semanal. Son contemplaciones del ámbito del crecimiento personal, pero en las que también pueden en-contrarse sutiles guiños a la tradición y al ser cristiano con su lenguaje delicado y abun-dante en símbolos, como los del puente o la orilla que dan sentido al título: “A veces leer un libro es como estar sobre un puente, mirando a un río, y contemplar la corriente como si fuese un espejo que nos de-vuelve nuestro más auténtico rostro. A veces, leer un libro nos permite reconocernos en lo escrito, recreando nuestro propio ser en el autorretrato que dibuja para nosotros su texto”.

Índice temáticoLas 64 reflexiones se dis-

ponen sin aparente orden a lo largo de las páginas, pero un ín-dice temático las reagrupa así: creatividad, cuerpo y emoción, descanso, meditación y silen-cio, educación, las estaciones,

Un río donde soltar lastre

EL REVÉS DE LA TRAMA

MI ALEGRÍA SOBRE EL PUENTEMirando la vida con los ojos del corazónJosé María ToroDesclée De BrouwerBilbao, 2015 · 200 pp.

Comparto la idea del es-critor argentino César

Aira de que una cosa es la literatura y otra lo que se conoce como el mundillo li-terario. A veces, sin embar-go, es imposible desligar-los, y es entonces cuando merecen la atención de ‘El revés de la trama’.Viene a cuento todo esto por la polémica surgida estos días en torno a una entrevista del editor Chus Visor con el suplemento El Cultural. Aunque son más que discutibles y provoca-doras varias de sus respues-

tas, la que ha levantado una marejada en el proceloso mundo de la poesía ha sido esta: “Lo siento, pero creo que la poesía femenina en España no está a la altura de la otra, de la masculina, digamos, aunque tampoco es cosa de diferenciar. Des-de luego, si vas a coger a las poetas desde el 98 para

acá, es decir, todo el siglo XX, no ves ninguna gran poeta, ninguna, compara-ble a lo que suponen en la novela Ana María Matute o Martín Gaite”.Centenares de voces de la cultura reaccionaron inme-diatamente a las declara-ciones de Visor, por consi-derarlas machistas, con el manifi esto Justicia Poética ¡Ya! Dado que la propia editorial Visor está en el jurado de numerosos pre-mios de poesía convocados por ayuntamientos e insti-tuciones y publica las obras

ganadoras, los fi rmantes piden a sus responsables que retiren la colaboración. Ante la avalancha de críti-cas hacia Chus Visor en las redes sociales y en algunos medios de comunicación, a veces muy subidas de tono, algunos de los fi rmantes –el caso más llamativo es el del escritor José María Merino–

han retirado su apoyo al manifi esto por considerar que se estaba asistiendo a un linchamiento público.Al margen de polémicas, lo que sí parece claro, aparte del escaso fundamento y rigor de Chus Visor respec-to a la poesía escrita por mujeres, es que en este país deberíamos empezar a hablar de una vez por to-das de cómo se conceden los premios, en cualquier género, un sistema que no es equiparable al de ningún país de nuestro entorno.

JAVIER MORALES ORTIZ

Aguas revueltas en el mundo de la poesía

blanda, misericordiosa y que no pretende cambiar al otro, que no compara ni etiqueta. Mirada que alegra, pues alegría signifi ca estar aligerado, soltar pesos y pesares. Si quieres alegrarte, quizás este libro te ayude a tirar al río algunos de tus lastres.

ISMAEL MENA MARTÍN

mirada, las palabras, tiempo, trabajo, servicio y compromiso con la vida. Esta división puede ayudar mucho al lector si qui-siera recuperar capítulos para utilizar los textos o insertarlos en oraciones, meditaciones o refl exiones. Quién sabe, amigo lector, si acabas de encontrar un buen complemento a tu des-gastado libro de La oración de la rana (Sal Terrae, 1998).

“Dos amigos están sobre el puente. Uno de ellos dice: ‘¡Con-templa la alegría de los peces en el río!’. Mas el otro le replica: ‘¿Cómo tú, no siendo pez, sabes de la alegría de los peces’. El primero responde: “Por mi ale-gría sobre el puente’”. Este bre-vísimo relato da título al libro, que se complementa con este subtítulo: Mirando la vida con los ojos del corazón. ¿Y qué es para el autor esta mirada? Este mirar a la vida con los ojos del corazón es hacer que el corazón se asome al mundo. La mira-da del corazón es una mirada

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