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  1 Revista ÁPICES DIGITAL REDACCIÓN Magdalena Cámpora Diego Ribeira Luis Ángel Della Giovanna Raúl Lavalle Editor responsable: Raúl Lavalle Dirección de correspondencia: Paraguay 1327 3º G [1057] Buenos Aires, Argentina tel. 4811-6998 [email protected]  nº 19    2015  Nota: La Redacción no necesariam ente com parte las opini ones vertidas en esta  publicación.

19 Ápices Digital

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19 Ápices Digital

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  • 1

    Revista PICES DIGITAL

    REDACCIN

    Magdalena Cmpora

    Diego Ribeira

    Luis ngel Della Giovanna Ral Lavalle

    Editor responsable: Ral Lavalle

    Direccin de correspondencia:

    Paraguay 1327 3 G [1057] Buenos Aires, Argentina

    tel. 4811-6998

    [email protected]

    n 19 2015

    Nota: La Redaccin no necesariamente comparte las opiniones vertidas en esta

    publicacin.

  • 2

    NDICE

    Santiago Molina Cueli. Lunes p. 3

    Santiago Molina Cueli. No existe mujer fea (poema) p. 5

    Olga Fernndez Latour de Botas. Respuesta potica a un

    soneto de Lupercio p. 6

    Alfredo Bernardi. Nacimiento p. 8

    Ral Lavalle. El tango fuera del tango p. 9

    La lgrima y el rayo de luz (Luciano Maia traduce al poeta rumano Lucian Blaga) p. 15

    Elena Liliana Popescu. Si supieras p. 18

    Carlos Enrique Berbeglia. Amanecer p. 20

    Notas y reseas p. 21

    Minucias varias p. 24

  • 3

    LUNES1

    Solo a tres tipos de persona les pueden gustar los lunes: los

    tragas, los que no hacen nada y van al colegio solo para divertirse, y los

    enfermos. Yo pertenezco al tercer grupo. Soy un enfermo y te invito a

    conocer de qu.

    Es lunes. Falta un da menos. Hoy empieza otra semana que

    luego terminar y ser tachada en la agenda. Hoy es lunes. Otro menos.

    Estoy ms cerca de las vacaciones, del desmesurado sueo de largos das

    y noches de calor, pileta y salidas con amigos todo el tiempo.

    Un lunes menos para ser feliz. Dentro de menos tiempo me

    pondr de novio. Hoy es lunes, te ver tras el fin de semana. Hoy es

    lunes! Tres das y podr ser otra vez, ya lo es, ya, juntos, contamos cuatro. En unos ms, una semana, la primera. Un lunes menos para el

    mes. Un lunes menos para el bimestre, y as hasta el primer ao, el

    segundo, el tercero

    1Las fotos que ilustran este escrito no fueron idea del autor, sino que expresan

    simplemente mi libre asociacin ante la nocin de lunes. [R.L.]

  • 4

    Un lunes menos para comprarnos nuestra propia casa para los

    dos. Hoy es lunes, uno menos para casarnos. Estamos ms cerca. Otro

    lunes, falta menos para tener nuestro primer hijo. Lunes, lo tuvimos ya,

    ambos, innumerables veces en nuestras manos y nuestros anulares

    izquierdos le dejaron marquitas. Un lunes menos para que diga dad; otro, mam; otro, mam, dec pap, mam; otro, al fin, pap. Ya habla. Falta otro lunes menos para tener otro. Hoy es lunes! Van al

    jardn y a la primaria. Hoy es lunes. Tan rpido? Ya terminaron la

    secundaria, ya se recibieron, ya trabajan, ya se van.

    Falta un lunes menos. Para qu? Para morir? Ah voy,

    entonces. Otro lunes tachado para ese ltimo respiro. ltimo lunes todava soy. El lunes es, pero yo tambin sigo siendo. Hoy es lunes, falta

    uno menos para que nos juntemos de vuelta y para siempre. Este lunes se

    derrite ante el calor de mi espera. Pronto, tal vez, mis cenizas lleguen a

    algn campo y nutran a un fruto y, sin saberlo, lo compres y yo forme

    parte de vos. El calendario vuela ahora, como yo. Un lunes menos, ya

    llega el momento. Ahora vols vos tambin. Ahora falta un lunes menos,

    de esos infinitos que quedan, para que, con ayuda del viento, del mar, del

    hombre, de la mugre, de lo que sea, tal vez se crucen partculas de

    nosotros, y si se cruzan, cambien de rumbo, se enfrenten, y vayan,

    agarradas de sus electrones, durante el resto de los lunes.

    SANTIAGO MOLINA CUELI

  • 5

    NO EXISTE MUJER FEA

    No existe mujer fea, sino que hay hombres ciegos. Qu le pasa a la gente? Todas lindas siempre veo! No es tan difcil eso de observar. Yo me puedo enamorar con mirarlas. Es fcil, tengo el secreto: dirigir los ojos mos a los suyos, justo al centro negro, profundo y brillante, de nix puro. Son perfectos.

    SANTIAGO MOLINA CUELI1

    Isabella (foto de Nicols Alejandro Valentini)

    1 Este bello y original poema de un jovencsimo escritor fue publicado en la revista

    pices (Buenos Aires, 2015). Agradecemos que nos permita incluirlo aqu. Aadimos

    una artstica foto de otro joven, Nicols Valentini. Creo que hay una perfecta simbiosis

    entre ambas cosas: la fotografa es una suerte de poema verbal; el poema hace que

    evoquemos muchas imgenes bellas de muchachas. Quizs una palabra clave que usa

    es fcil: en efecto, la belleza surge inmediatamente, para quien quiere verla. [R.L.]

  • 6

    RESPUESTA POTICA A UN SONETO DE LUPERCIO

    Porque el mundo es redondo y giratorio y en torno al sol cambiando va de ropa, octubre es para m un mes que evoca la primavera, tiempo promisorio.

    Comienza octubre y ya el da dos vivimos la fiesta de los ngeles custodios, providenciales seres no ilusorios que con tanta frecuencia percibimos.

    Cmo no recordar lo que vivimos en Crdoba, remedo de Baviera, cuando a su Oktoberfest nos remitimos!

    Y si lo que bebimos fue proeza vaya en octubre, a General Belgrano, un brindis afectuoso con cerveza.

    OLGA FERNNDEZ LATOUR DE BOTAS

    Antes de comenzar octubre de 2014, envi a mis conocidos Llev tras s los pmpanos octubre, de Lupercio Leonardo de Argensola (1559-1613). Su hermano, Bartolom Leonardo de Argensola, tambin fue poeta. Algunos no

    conocan el texto; cosa bastante comprensible, pues casi nadie lo lee hoy. No

    obstante, le tengo un especial aprecio. El profesor Arturo lvarez Hernndez,

    latinista experto en Propercio, disfrut mucho de l y llam la atencin sobre el

    lugar comn del lamento junto a la puerta de la amada. El profesor Cristian

    Mitelman se emocion con el recuerdo, porque para l los Argensola fueron

    los mejores sonetistas del barroco.1 Nuestra colega y amiga Olga Fernndez Latour de Botas, poseedora de una gran vena potica, me envi la respuesta

    literaria que encabeza este artculo. Me ha gustado especialmente, porque

    traslada el fro octubre a la primavera de estas tierras; en particular a Crdoba,

    la de antao y la de la pequea Alemania con su prosit de fiesta de cerveza.

    Hizo muy bien, en lo que a m respecta, porque la nieve de las sierras de

    Moncayo revive en el paisaje de La Cumbrecita y Villa General Belgrano. El

    lector puede ver abajo el soneto de Lupercio.

    1 El prof. Mitelman es l mismo un muy buen sonetista.

  • 7

    Llev tras s los pmpanos octubre

    y con las grandes lluvias, insolente,

    no sufre Ibero mrgenes ni puente,

    mas antes los vecinos campos cubre.

    Moncayo, como suele, ya descubre

    coronada de nieve la alta frente

    y el Sol apenas vemos en Oriente

    cuando la opaca tierra nos lo encubre.

    Sienten el mar y selvas ya la saa

    del Aquiln, y encierra su bramido

    gente en el puerto y gente en la cabaa.

    Y Fabio, en el umbral de Tais tendido,

    con vergonzosas lgrimas lo baa

    debindolas al tiempo que ha perdido.

  • 8

    NACIMIENTO

    Recibe el hombre la frugal comida que algn dios apart de su merienda y ese detalle convirti en leyenda a la epopeya que llamamos vida.

    Resplandece en la aurora reprimida, multiplica los gramos de su hacienda y encuentra en la alborada nueva senda con marca propia y cscara atrevida.

    Explora el bosque, la distancia, el cielo, las voces sigilosas, las texturas y se replica amando ciegamente.

    Viajando en la orfandad de su desvelo, colmado de preguntas prematuras, su chance de vivir no se resiente.

    ALFREDO BERNARDI

    1

    1 Un salmo deca algo as como en pecados me concibi mi madre. Creo que este

    soneto de Bernardi, poeta argentino actual, tambin nos ensea que nacemos con

    deseos de hacernos preguntas. Algunos llaman a eso filosofa. [R.L.]

  • 9

    EL TANGO FUERA DEL TANGO

    RAL LAVALLE

    Debo admitir, querido lector, que no me gusta mucho el ttulo de

    arriba. Lo que quise expresar es que me ocupar aqu de tres menciones,

    por as decir, que ms all de nuestras fronteras se han hecho del tango.

    Vamos primero a Barbera e champagne, tema cantado por Giorgio

    Gaber, con msica del propio Gaber y letra de Sandro Luporini. Cabe

    aclarar que la letra procede de la Red, donde no siempre hay seguridad

    en cuanto a puntuacin y ortografa; y yo disto mucho de dominar la

    lengua italiana. Puse puntos y comas segn mi modesto saber y entender.

    Triste col suo bicchiere di barbera,

    senza lamore a un tavolo di un bar, il suo vicino in abito da sera

    triste col suo bicchiere di champagne.

    Son passate gi quasi tre ore:

    Venga, che uniamo i tavoli signor. Voglio cantare e dimenticare

    coi nostri vini il nostro triste amor.

    Barbera e champagne stasera beviam per colpa del mio amor pa ra pa pa,

    per colpa del tuo amor pa ra pa pa.

    Ai nostri dolor insieme brindiam,

    col tuo bicchiere di barbera,

    col mio bicchiere di champagne.

    Comeran tristi e soli quella sera senza le donne a un tavolo di un bar!

    Longo, Fanfani, Moro e gi barbera,

    Gianni Rivera, Mao e gi champagne.

    Guardi, stia attento, lei mi sta offendendo! Uhel,1 come ti scaldi ma va l! Vieni, balliamo insieme questo tango,

    balliamo insieme per dimenticar.

    1 Entiendo que esta palabra es una interjeccin. No la encontr en diccionarios italianos

    y se halla escrita, en otras versiones de letra que hay en la Red, de otros modos.

  • 10

    Colpa di quel barista che un cretino ci hanno cacciato fuori anche dal bar.

    Guarda, non lo sapevo, gi mattino,

    si fatto tardi ormai, bisogna andar. Giusto per vorrei vederla ancora: io sono direttore allOnest. Molto piacere, vede, io per ora sono disoccupato, ma chiss.

    Es infinito el nmero de ejemplos: un parroquiano, agobiado

    por las tristezas del amor, se refugia en un bar, con la callada

    compaa de un vaso y del tabernero. Pensamos nada ms en La copa

    rota (del puertorriqueo Benito de Jess) y en Tomo y obligo, letra de Manuel Romero. Pero aqu son dos los fracasados de la vida y de Venus,

    y tienen la peregrina idea de unir mesas y lastimosas cuitas! Juntos son dinamita, habran dicho las pelculas viejas.

    Pero permteme, querido lector, una ficcin dentro de la ficcin.

    S, yo mismo me imagino en una mesa vecina y me acerco a estos dos

    bebedores buranos, tomo asiento y me mezclo en sus dilogos. Las digo

    que no me interesan los polticos (gurdense entonces a Luigi Longo, a

    Amintore Fanfani, a Aldo Moro y a esa desinflada revolucin cultural).

  • 11

    Hablamos ms bien de esa delantera de oro talo-brasilea: Mora,

    Dino, Altafini, Rivera y Amarildo. Y sigamos con la que derrot a los

    pincharratas, la del brasileo Sormani y Pierino Prati. Pero no nos

    olvidemos del Inter de: Sarti, Burgnich y Facchetti; Jair, Peir, Mazzola,

    Surez y Corso. Y crucemos el Canal y hablemos del beatle George

    Best, del colorado Alan Ball y de Bobby Charlton; y de Gordon Banks,

    el que le sac el cabezazo a Pel. Pero me dej llevar por las copas de mi

    desenfrenada parlera, junto con las del vino llamado barbera.

    Pero cul es la msica ms apropiada para acompaar los llantos

    per una donna, por lo que pudo haber sido y no fue? Es la tarantela?

    Son los aires de una chitarra romana? No, es el tango milonguero y

    compadrito, pero tambin llorn y sentimental que, como la luna

    paseandera, acompaa a los amantes. Y quieren bailarlo al modo

    antiguo, entre hombres y en la calle, como en Un guapo del 900.

    Conozco, no por propio protagonismo, dos clases de borracheras

    (seguro hay ms). Una es la que crea agresividad y peleas, verbo et

    opere; otra, la de cierta familiaridad y afecto. No alabo la segunda pero

    aqu, salvo reproche al barista, quien plausiblemente se sac de encima

    tan incmodos clientes, Baco uni con sus nctares dos almas gemelas.

    Ms an, uno tiene un cargo en los conocidos Magazzini AllOnest1 y ofrece trabajo a su ocasional compaero. En fin, copas, amores, tibios

    enojos (lei mi sta offendendo), amistad Nuestro tango triste se halla en su salsa en ese pedacito de la Italia de los 60. Pero ahora nos espera un tanguero brasileo.

    1 Cf.: http://it.wikipedia.org/wiki/Magazzini_All'Onest%C3%A0.

  • 12

    Segn la Red, Nelson Gonalves (1919-1998), oriundo de Rio

    Grande do Sul, es el segundo mayor vendedor de discos de la historia de Brasil, con ms de 75 millones de copias vendidas, slo atrs de

    Roberto Carlos, con ms de 120 millones, y del do de msica sertaneja

    Tonico y Tinoco con aproximadamente 150 millones. Su mayor xito

    fue la cancin A volta do bomio.1 El gran poeta brasileo Luciano Maia me habl del tema llamado Carlos Gardel. Es de 1954 y fue

    compuesto por Herivelto Martins (msica) y David Nasser (letra). Copio

    la versin del sitio TODOTANGO.2

    Tangos, bandoneons e uma guitarra que geme

    num ritmo de amor desesperado.

    Um cabar que fecha suas portas,

    uma rua de amor e de pecado.

    Um guarda que vigia numa esquina,

    um casal procura de um hotel,

    um resto de meloda,

    um assovio, uma saudade imortal,

    Carlos Gardel.

    Carlos Gardel,

    Buenos Aires cantava no teu canto,

    Buenos Aires chorava no teu pranto

    e vibrava em tua voz, Carlos Gardel.

    O teu canto era a batuta de um maestro

    que fazia pulsar os coraes

    na amargura das tuas melodas.

    Carlos Gardel,

    que cantava a tragdia das perdidas,

    compreendendo suas vidas

    perdoava seu papel.

    Por isso enquanto houver um tango triste,

    um otrio, um cabar e uma guitarra,

    tu vivers tambm, Carlos Gardel.

    La letra que canta Gonalves difiere un poco de la arriba citada.

    Si bien creo que, con alguna ayuda del diccionario, leo bien el portugus,

    no hago una traduccin: el sentido general me parece que se entiende

    con claridad. El segundo verso dice bandoneons, que parece una mezcla luso-brasilea: mi diccionario de portugus trae bandnion.

    1 Cf.: http://es.wikipedia.org/wiki/Nelson_Gon%C3%A7alves.

    2 Cf.: http://www.todotango.com/musica/tema/6258/Carlos-Gardel/.

  • 13

    Pero dejemos a Doa Gramtica y pensemos en los muchos

    encantos, adems de la voz y prestancia de Gonalves, de las palabras de

    David Nasser. Tribut sentido homenaje a nuestra msica urbana

    mediante lo que los latinos haban llamado congeries, acumulacin. En efecto, como en un collar, perlas de palabras se unen en evocacin:

    guitarra, calle del pecado, otarios, saudade de Buenos Aires. Carlos

    Gardel me lleva al pensamiento de la amistad entre Argentina y Brasil.

    Es cierto que algunos tontos, de uno y otro lado, caen en un

    patrioterismo barato, pero a m me alegra ver hoy las calles con la

    alegra educada de los brasileos (y la belleza de sus divinas muchachas

    do corpo dourado); y nosotros tambin vamos muy contentos de visita,

    quizs porque all es ms fcil decir a la tristeza: vai embora. Pero ahora vamos ms al norte todava, a los Estados Unidos.

    El choclo tiene msica de Villoldo. Hubo ms de una letra pero la

    ms difundida es la de Enrique Santos Discpolo y Juan Carlos

    Marambio Catn. Esto no significa que ambos escritores hayan hecho

    juntos la letra: Discepoln trabaj sobre la de Marambio Catn. Hubo muchas versiones, pero cito al sitio TODOTANGO: Con el ttulo Beso de fuego (Kiss of fire) se conoce a un tango estadounidense que, en 1952,

    firmaron en letra y msica Lester Alien y Robert Hill, pero todo aquel

    que lo haya odo no puede dudar que su meloda reproduce las notas de

    El choclo que ngel Villoldo compuso en 1903.1 Copio el texto en ingls, tal como lo encuentro en la Red: intento poner, como malamente

    puedo, la puntuacin.

    1

    Cf. TODOTANGO: http://www.todotango.com/historias/cronica/127/El-choclo-El-

    choclo-y-su curiosa-adaptacion-en-ingles/.

  • 14

    I touch your lips and all at once the sparks go flying,

    Those Devil lips that know so well the art of lying.

    And, though I see the danger, still the flames grow higher,

    I know I must surrender to your kiss of fire.

    Just like a torch, you set the soul within me burning,

    I must go on along the road, no returning.

    And, though it burns me and it turns me into ashes,

    My whole world crashes without your kiss of fire.

    I can't resist you. What good is there in trying,

    What good is there denying you're all that I desire?

    Since first I kissed you, my heart was yours completely.

    If I'm a slave, then it's a slave I want to be Don't pity me, don't pity me!

    Give me your lips, the lips you only let me borrow,

    Love me tonight, Devil take tomorrow.

    I know that I must have your kiss, although it dooms me

    And though it consumes me your kiss of fire.

    Ah, burn me.

    Los labios elogiados por Satchmo hacen varias cosas: brillan,

    mienten, son demonacos (Devil lips), inflaman, son como el loto (no returning, una vez que se los ha tocado), son irresistibles, convierten en cenizas, ponen patas arriba cualquier forma de pensar. Son labios

    tangueros, pues el mismsimo Don Carlos cantaba: Por tu boca roja / que me ha fascinado / la vida en un trago / yo quiero beber. Tambin son medievales, pues el caballero, despus del beso embriagador, se hace

    un slave de la dama de los labios color borgoa. Ni siquiera Dios llama a la conciencia: olvidemos el maana (Devil takes tomorrow). Su beso sella mi destino (dooms me).

    En fin, me haba propuesto hablar de tres temas extranjeros que

    se ocupan del tango. Solo me vinieron a la memoria tres, aunque, llegado

    ya a puerto, me viene un cuarto (Amor de tango, que canta el cataln

    Dyango, pero no s nada sobre su autor).1 Lo que importa, si pude

    ayudar en algo, es que t, querido lector, escuches estos y otros

    homenajes a los tangos de mi flor.

    RAL LAVALLE

    1 Se puede escuchar aqu: https://www.youtube.com/watch?v=3zQpKuFwY3E. Quizs

    alguna vez escriba algo sobre este tema.

  • 15

    LA LGRIMA Y EL RAYO DE LUZ

    Lacrima i raza

    O lacrim Desprins dintre genele unei plpnde amintiri Ce st ascuns-n fundul unui suflet Czu Pe albul unei fragede petale... O raz dete peste ea i-i zise: "Simt din cldura ta c nu eti bob de rou... De unde vii i ce eti?" n vreme ce se destrma n pulbere de soare, Rspunse lacrima: "Eu sunt un strop de suflet i sunt Ca picurii izvoarelor fierbini: Vin totdeauna din adncuri - mari!"...

    LUCIAN BLAGA1

    1 Blaga (1895-1961) es uno de los ms grandes poetas rumanos. Gracias al eminente

    escritor y acadmico brasileo Luciano Maia, publico este bello poema. En la siguiente

    pgina puede verse una versin portuguesa, obra del propio Maia, gran conocedor del

    rumano y de las lenguas de la latinidad. Despus hago un humilde ejercicio de

    traduccin espaola, ayudado de un diccionario rumano y del texto portugus. [R.L.]

  • 16

    A LGRIMA E O RAIO DE LUZ

    Uma lgrima

    desprendida de entre os clios de uma delicada lembrana

    escondida no fundo de uma alma

    caiu

    sobre o branco de uma frgil ptala Um raio de luz deu por ela

    e lhe disse:

    Sinto pelo teu calor que no s uma gota de orvalho De onde vens e o que s?

    Enquanto se desfazia na poeira do sol,

    respondeu a lgrima:

    Eu sou uma gota de alma e sou

    como o gotejar das fontes clidas:

    venho sempre dos abismos profundos!...

    (Lucian Blaga, in Addenda, traduo de Luciano Maia)

    En esta ocasin acompa a Luciano, quien luce su casi

    infaltable gorra, a un estudio de televisin de

    Fortaleza, Brasil. El poeta presentaba

    su ltimo libro (AD 2011)

  • 17

    La lgrima y el rayo de luz1

    Una lgrima,

    desprendida de las pestaas de un dbil recuerdo

    y escondida en el fondo de un alma,

    cay

    sobre el blanco de un frgil ptalo Un rayo de luz por ella descendi

    y le dijo:

    Siento, por tu calor, que no eres gota de roco De dnde vienes y quin eres?

    No bien se deshaca en polvo de sol,

    respondi la lgrima:

    Yo soy una gota de alma y soy como el gotear de hirvientes manantiales:

    vengo siempre de los mares profundos.

    Aqu tambin, como hice otras veces, pido perdn al lector por el intento de traduccin. Me permito sealar dos cosas (bastantes ms podran indicarse). Una es la belleza de la tradicional imagen de las honduras del alma. Nuestro espritu (suflet, voz sin duda relacionada con el latn sufflare) no es tan grande como las fosas abisales, pero tiene sus recnditas profundidades, que ms de una vez se hacen llanto. La otra, cierta hermandad entre los extremos. En efecto la idea de hervir el francs y el italiano la dan con la raz de bullire; en cambio, portugus y espaol siguen a fervere: all se suma el rumano fierbe, hervir. Doy entonces infinitas gracias a mi amigo brasileo por haberme enviado esta joyita de Blaga, por su traduccin y por permitirme hacer un nuevo juego literario, con estos tres nobles hijos de la lengua de Roma. [Ral Lavalle]

    1 El original dice La lgrima y el rayo. Con buen criterio Maia vierte raz como rayo

    de luz, para evitar la confusin con el que muestra el relmpago.

  • 18

    SI SUPIERAS DAC AI TI Dac ai ti, Si supieras ct de dor mi-e de tine, cmo te aoro, dei eti n inima mea aunque ests en mi corazn, i ct de mare este tristeea y cun grande es la tristeza de a nu te vedea de verte dect n visul meu. slo en mis sueos. Ct de mult mi lipseti, Cmo te aoro, dei eti mereu cu mine aunque ests siempre conmigo, i ct de adnc este durerea y qu hondo es el dolor de a nu te auzi de orte dect n gndurile mele. slo en mis pensamientos. Ct de greu mi este Qu duro me resulta cnd te caut n jurul meu buscarte a mi alrededor i nu te gsesc dect atunci y encontrarte solamente cnd vrei tu s te pot afla... cuando t quieres que te encuentre...

    ELENA LILIANA POPESCU

    Versin espaola de JOAQUN GARRIGS

    Este poema de Elena Liliana Popescu, inspirada poetisa rumana actual, ha sido traducido a doce lenguas. Me permito unir mi humilde voz, la

    de un amante del latn, a ese concierto de voces mejores. Agradezco a Liliana

    que me lo haya enviado y me permita publicarlo aqu, acompaado de la

    versin espaola de Joaqun Garrigs. Mi amistad con la autora me permite

    saber que ella tiene aqu presente, de modo muy especial, a su difunto esposo

    Nicolae, a quien tambin tuve el gusto y el honor de conocer.

    Pero, ms all de un sentimiento personal de ella, siento que tambin

    yo recibo la admonicin de pensar en los seres queridos que ya no estn

    conmigo. Casi nadie vive de lo que escribe, pero los escritores (incluso uno

    muy malo como yo) tenemos algunos privilegios. No pienses que soy soberbio

    por lo que digo, querido lector: digo que tenemos, por ejemplo aqu, el

    privilegio de poder recrear, a travs de la pluma, las imgenes de los parientes

    y amigos que nos ayudaron a caminar por estas soledades. Pero lo importante

    es que leas a Liliana. Vers que, aunque te pueda resultar dura la ausencia, hay

    una profunda alegra en el rencuentro de la memoria. Si quieres, podrs leer en

    la siguiente pgina mi intento de versin latina, que ojal dea Roma no

    rechace del todo. [R.L.]

  • 19

    SI NOSSES

    Si nosses

    quomodo te desiderem,

    etsi es meo in corde,

    et quam magna sit

    tristitia te videndi

    solummodo in meis somniis.

    Quomodo te desidero,

    etsi semper mecum es!

    Quam fortis dolor est

    te audiendi

    solummodo meis in cogitationibus!

    Quam durus mihi est

    te in circuito quaerere et solummodo te invenire,

    cum volueris ut te ego inveniam.

  • 20

    AMANECER

    De qu otra forma manifestar la vida cuando resta nicamente la palabra y el mundo, alrededor, como la niebla al poniente del sol, se levanta desde las marismas y la ciudad, sin luz. se opaca en cada uno de sus edificios, plazas, habitantes, y el transente solitario, en m, se recluye en un tardo caracol que lo transporta, si no al cielo al menos a un lejano amanecer donde los lazarillos aguarden su voz y la respuesta sea un silencioso andar hacia su propio sino?

    CARLOS ENRIQUE BERBEGLIA1

    Pinamar, octubre 2011

    1 Agradecemos al autor el permiso de reproduccin. Es de Amaneceres vedados al

    tiempo (Buenos Aires, La Luna Que, 2013, p. 25). Mucho puede decirse de tan

    inspirado y profundo poemario. Eleg el que copio, por las razones que intento dar. En

    solapa leemos sobre el autor: vido investigador de las razones humanas y las sinrazones tambin, la Dramaturgia es una de sus pasiones y la Poesa su salvacin. Parto de all y me identifico con el transente solitario que, incapaz (al menos yo) de dar respuestas, se refugia en peripatticas reflexiones. No soy entonces tan solitario,

    porque me siento acompaado por espritus sensibles, como el de Berbeglia. [R.L.]

  • 21

    NOTAS Y RESEAS

    Libro de Pablo Palermo sobre Sarmiento

    Pablo Emilio Palermo es escritor literario e histrico. En el n 18

    de esta revista publicamos un artculo de l sobre Antiguos caminos de Buenos Aires y su legislacin. Tuvo la gentileza de obsequiarme dos de sus libros. Me ocupar muy brevemente de Los viajes de la vejez de

    Sarmiento Buenos Aires, Proa, 2009). No conozco historia pero disfrut

    mucho de las palabras sarmientinas que se citan, de las ancdotas que se

    cuentan y de los peculiares puntos de vista del sanjuanino sobre las

    provincias del pas y sobre Chile, Uruguay y Paraguay. Selecciono solo

    dos pasajes, con el nico criterio de mi arbitrariedad (de mi gusto

    personal. Una vez en Rosario, en 1883, se lamentaba por la falta de

    argentinidad de algunos inmigrantes, que no terminaban de afincarse del

    todo aqu: Hasta hoy ha reinado el escndalo de hombres sin patria, aunque afecten llevar una en la cartera o en la memoria, elevando la

    nostalgia a un culto! La nostalgia es una enfermedad del espritu, es la

    desmoralizacin de la familia, el desarrollo del egosmo, es el legado que

    dejan a sus hijos los ignorantes ensendoles a despreciar la tierra, las

    leyes, la libertad y la igualdad misma que los eleva y enriquece (p. 48). No es que est en desacuerdo con Sarmiento, quien, como

    dirigente poltico que era, deba velar por el sentido nacional, ms all de

    las grandezas que podan traer los inmigrantes desde sus tierras de

    origen. Pero no puedo negar que me choc un poco: si tengo un alumno

    que se llama Aguirre, lo considero vasco; si otro es Fagan, irlands; si La

    Valle, de la bella Italia. Lo que comento pido disculpas es una tontera de mi parte. Pero voy al segundo pasaje. Me refiero a una carta escrita en

    Asuncin, en 1887, a Adolfo Saldas, donde leemos: siento que no est vivo el viejo Vlez para pedirle breve epitafio en latn para mi tumba

    (nico terreno que poseer, y quisiera dejar cultivado) (p. 134). Entiendo que Vlez es Dalmacio Vlez Sarsfield, gran latinista

    adems de hombre de leyes. Me permit cumplir con el deseo, sin poner

    el texto que l mismo propona: Una Amrica toda / asilo / de los dioses todos / con / lengua, tierra y ros / libres para todos (ibidem). El que compuse para su etreo epitafio (en realidad est solo en este aire de la

    Red), est en metro trocaico acentual, con ms de una licencia potica.

    rbes dos nivsti,

    glria aetrna schlarm:

    mgistr tu vcabris,

    tiam mrtuus ns docs.

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    [Uniste dos orbes, / gloria eterna de las escuelas: / te llamaban maestro, /

    incluso muerto nos enseas.]

    Poca importancia tiene lo que acabo de escribir. Lo que vale es

    recomendar la lectura de este bello y jugoso libro.

    R.L.

    Libro de Pablo Palermo sobre Nicols Avellaneda

    Siempre digo y vuelvo a afirmarlo que no soy competente en cuestiones histricas. En este caso estoy ms a gusto: ignoraba que

    Nicols Avellaneda era un gran amante de la literatura y que escriba

    muy bien, sobre todo en lo que respecta a la oratoria pblica. Palermo

    cita y comenta seria y claramente varios pasajes de la pluma del prcer.

    Desde ya invito a leer este muy interesante libro, pero me detendr en un

    solo pasaje. El 11 de noviembre de 1875, en la inauguracin de parte del

    Parque Tres de Febrero, ley una declamacin. Un fragmento de ella:

    Los paseos pblicos, ejerciendo una atraccin irresistible sobre la masa de los habitantes, sirven para mejorar, ennoblecer y

    elevar los sentimientos de las multitudes; y pueden contribuir a

    dar formas cultas y suaves a las luchas duras y severas que

    engendra la vida democrtica. []

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    Horas melanclicas del crepsculo de las tardes, rayos primeros

    del sol naciente, murmullos de los vientos que formis sobre

    las aguas y en los bosques las voces incomprensibles de las

    noches: coloco bajo vuestros inefables misterios, que os ligan

    con los movimientos ms secretos del corazn humano, las

    avenidas, los lagos, los jardines del Parque Tres de Febrero.

    Cada generacin vendr a mezclar verdades, sueos, pasiones,

    al movimiento de las hojas de sus rboles, hasta que la

    naturaleza y el hombre, con sus estrechos enlaces y sus afinidades

    ntimas, desciendan igualmente bajo el eterno reposo. (p. 25)

    Sabemos que hoy sera imposible pensar en tan consumada

    retrica, al menos para un discurso al pueblo. Pero esto no impide gozar

    de la lectura. Particularmente, cuando hace una mutatio personarum, un

    cambio de personas (disculpe el lector la pedantera de mis latinajos). El culto literato abandona por un momento el t del pueblo y personifica

    a bosques, aguas y vientos. Al modo de una oracin pagana, les pide que

    protejan el naciente parque citadino. En efecto nada aquieta ms nuestros

    agobios y temores que el epicreo descanso en madre natura. Si me

    permite el lector una vuelta a aos mozos (iuvenilia), nunca olvidar las

    tardes pasadas bajo los bichitos de las tipas, pescando tarariras y

    chanchitas en ese lago de Lamartine que tenemos los porteos. Sus

    nutrias (hasta un carpincho), su isla y tupida vegetacin, todo ello me

    llevaba a una suerte de Tempe. Disculpa, querido amigo, mi desordenada

    evocacin. Me gustara que disfrutaras de las pginas de una obra

    documentada, bellamente escrita y muy bien editada.

    R.L.

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    MINUCIAS VARIAS

    Un verdadero titn

    Un gran placer es reunirme con Fidel Farez en La Giralda, en

    Corrientes (en esta nueva Corrientes angosta). Un da tuvimos un

    invitado a nuestra tertulia cafetera, pues acert a pasar por la vereda el

    inmenso Al Bargach. Me disculp y sal ms rpido que una bala a la

    calle; lo corr unos metros y le ped me firmara un autgrafo. Lo ms

    prctico resultaba que volviramos atrs, a la mesa de La Giralda. Hice

    mi rentre en compaa del dolo, a quien present con Fidel. La

    sorpresa fue mayscula, pues le dijo al pancratista estas emotivas

    palabras: Ali, recorriendo mi infancia, record que mi mam se paraba a conversar en rabe con usted, que era profesor de gimnasia en la

    Asociacin Cristiana de Jvenes (la iumen, como le decan los pibes), que est al lado de mi colegio primario. Permtame estrechar su mano. Se emocion tanto que nos abraz y nos obsequi sendas fotos

    autografiadas, donde exhiba su musculatura de otrora. De casualidad yo

    llevaba un libro de reciente aparicin; me refiero a Titanes en el Ring,

    joya de la semitica, obra de Daniel Antoniotti, tanguero de alma que

    me honra con su amicitia. El Titn me lo dedic y nos despedimos con

    mximo afecto. El nico lunar que tuvo esa tarde fue que un parroquiano

    que sigui en silencio la escena, despus de la partida de Al, se acerc e

    hizo la siguiente correccin. Disclpeme, seor dirigindose a Fidel. Escuch que usted dijo Gimnasia. En realidad, como pedagogo debo

    sealarle que lo correcto sera Educacin Fsica. Tuvimos ganas de mandarlo a frer albndigas, pero le agradecimos el comentario y nos

    dedicamos a saborear el glorioso encuentro.

    R.L.

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    Foto a la italiana

    La foto de abajo nos tiene, de izquierda a derecha, a Silvia

    Breccia, a Daniel Capano y a m. Fue tomada por una querida exalumna

    ma, Cynthia Callegari, en un aula de la tambin muy querida

    Universidad de Morn, donde nos hemos desempeado, Tenemos en

    comn varias cosas; entre otras, la literatura y la ascendencia y el amor

    por Italia. Este recuerdo es un regalo para m mismo y tambin para mis

    amigos. Esta trada italiana se transforma en un cuarteto, porque exhibo

    un curioso libro sobre los bulli (una suerte de guapos citadinos) de

    Roma. [R.L.]