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Ajedrez 221-Sep 1972 Ocr

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Ajedrez revista chess

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SEPTIEMBRE 1972 TOMO XIX NUEMRO 221

AJEDREZ REVISTA MENSUAL

Asesor Técnico: NORMANDO J. IVALDI

UNA PUBLICACION DE LA EDITORIAL SOPENA ARGENTINA

Miembro de la Asociación Argentina de Editores de Revistas

Bolívar 430, so piso T. E. 34-0748

Buenos Aires

Creemos oportuno volver sobre este tema tan olvidado o por lo menos descuidado en los círculos específicamente dedicados a la difusión y práctica del ajedrez.

En la actualidad pocas son las entidades que dedican especial interés en mantener una permanente o casi regular enseñanza del ajedrez, ya sea encargando para ello a algún destacado maes­tro de reconocida capacidad didáctica o comisionando a juga­dores de primera línea para que dicten y expongan determinados temas y puntos técnicos alternando en la planificación previa­mente elaborada.

Cabe finalmente una reflexión al aporte de los que enseñan individualmente, y que reemplaza en gran medida el vacío ob­servado en las instituciones que por motivos diversos no pueden cumplir con tal propósito.

Si la capacidad de aprender es generalmente característica de cada individuo, hacia allí debe, pues, estar encaminado el esfuerzo que consagran aquellos en quienes se deposita tan deli­cada misión, a la vez que procurar dar solución, por los medios oportunos, a los posibles obstáculos por los cuales esto no se realiza.

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450 AJEDREZ SEPTIEMBRE DE 1972

Novedades en Aperturas

l. DEFENSA PIRC

En la variante moderna de la Defensa Pire (denominada Ufimtsev, en la U. R. S. S.), después de los movimientos l. P4R, P3D; 2. P4D, CR3A; 3. C3AD, P3CR; 4. P4A, A2C; 5. C3A, 0-0; 6. P5R, CR2D, en la partida Wedberg v. Ritman (Fran­cia, 1970), se presentó un curioso sacri­ficio de peón: 7. P6R!?

Muchos caminos exploraron las blan­cas en esta variante, tratando de desarro­llar iniciativa con la mayor rapidez posi­ble en el flanco rey, pero las negras siempre hallaban suficientes recursos de­fensivos. Empero, los afectos a jugar esta variante con las blancas no se han re­signado y emprenden nuevos intentos.

Esta jugada relativamente nueva fue propuesta por A. Konstantinopolsky hace varios años.

7 ...... , PxP; 8. C5CR.

Por el maestro Y. Estrin

La recomendación pasó por primera vez la revisión práctica en la partida Razuvaiev v. Kremenetsky (Moscú, 1968). En esa oportunidad se jugó: 8. P4TR, C3AR; 9. A3D, C3A; 10. P5T!?, PxP; 11. P3T, A2D; 12. D2R, DlA; 13. C4R, A1R; 14. C(4)5C, ClD; 15. A4A, P4D; 16. A3D, y las blancas, a cambio de los dos peones entregados, obtuvieron buenas posibili­dades de ataque.

En la presente partida, en lugar de 8. P4TR, las blancas experimentan otra continuación.

8. . .... , C3C (más seguro es 8 . . . ... , C3AR); 9. A3D, C3A.

Malo es, desde luego, 9. . .... , AxP debido a 10. CxPT!

10. A3R, C5C; 11. P4TR, CxA+; 12. DxC, C4D.

Quizás correspondía devolver el peón mediante 12 ...... , P4R y poner en juego el alfil dama. Ahora, en cambio, el ata­que de las blancas se desarrolla sin im­pedimentos.

13. P5T, DlR; 14. 0-0-0, CxC; 15. PxC, A3A; 16. CxPT!

El punto 2TR en el campo de las ne­gras es sumamente débil y tarde o tem­prano este sacrificio de pieza tenía que ocurrir. Ya no hay defensa.

16 ...... , RxC; 17. PxP j. d., R2C; 18. T7T+, RlC; 19. T(l)lT, A2C; 20. TxA+, RxT; 21. T7T+, RlC; 22. P7C.

Las negras se rindieron.

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454 AJEDREZ SEPTIEMBRE DE 1972

APERTURA RUY LOPEZ

Schweber v. Rossetto

l. P4R, P4R; 2. e3AR, e3AD; 3. ASe, P3TD; 4. Axe, PDxA; 5. 0-0, ASeR; 6. P3TR, P4TR; 7. P3A, D6D; 8. PxA, PxP; 9. exP, A3D; 10. exD, A7T+.

Y la partida fue declarada tablas.

GAMBITO DE DAMA ACEPTADO

Rubin v. Pilnik

l. P4D, P4D; 2. P4AD, PxP; 3. e3AD,

Continuación muy poco común en esta posición, donde la línea principal co­mienza con 3. C3AR, y algunos análisis han rehabilitado la jugada 3. P4R; en tanto que es floja 3. P3R.

3 ...... , P3TD.

Pilnik sigue su gusto, pero evidente­mente no es ésta la forma de refutar la anterior jugada blanca; merecía in­tentarse 3. . .... , P4R.

4. P4R, e3AD; 5. A3R, e3A; 6. P5R, e4D; 7. AxP, exA; 8. Pxe, P3R; 9. e3A, A2R; 10. 0-0, 0-0; 11. TIA, A2D.

Como resultado visible de las mutuas originalidades del planteo, las negras tie­nen sus peones agrupados en sólo dos grupos y cuentan con la pareja de alfi­les; sin embargo, las blancas han refor­zado su centro, tienen ventaja en espa­cio, y una mejor coordinación de sus fuerzas.

12. D2R, P4eD.

Es comprensible que las negras traten de reaccionar, en vista de que su juego se halla muy restringido, pero ahora surgen debilidades de importancia.

13. A3D, ese; 14. Ale, P3e; 15. e4R.

Desde un punto de vista posicional, después de esta jugada la partida es di­fícil de sobrellevar para las negras, en vista de la debilidad del peón alfil dama atrasado, como así también las de los cuadros negros del flanco rey.

15 ..... , e4D; 16. esA, AIR; 17. D2AR, P5e; 18. P4TR, A4eD; 19. TRlR, Tle; 20. P5T, Axe.

Elimina un enemigo muy molesto, pe­ro cede una pieza clave para la defensa de las muchas debilidades de las casillas negras.

21. TxA, P4A; 22. PxP, PxP; 23. D3e, R2e; 24. ese, T3e; 25. T(l)lAD, TlT; 26. T6A!

Creando una interferencia en la de­fensa que hace insostenible al muy débil peón rey de las negras.

26 ....... , TxT; 27. TxT, T8T+; 28. RxT, DIT+; 29. Rle, AxT; 30. exP+, R2A; 31. e4A, exe; 32. Dxe, D4T; 33. A2A, A4D; 34. P6R+, AxP.

Perdía en el acto 34 ...... , RxP; 35. D5R+.

35. DxP+, RIC; 36. D8D+, R2e; 37. D7R+, A2A; 38. A3e.

Las negras no tienen defensa posible, ya que 38 ...... , P4C; las llevaría a un final totalmente perdido.

38. . .... , D7R; 39. DxA+, R3T; 40.

D8A+, R4T; 41. D8T+. Y las negras abandonaron.

DEFENSA SICILIANA

Pilnik v. Ferré

l. P4R, P4AD; 2. C3AR, P3R; 3. P4D, PxP; 4. exP, P3TD; 5. C3AD, D2A; 6. P3CR, C3AD; 7. A2C, C3AR; 8. 0-0, A2R; 9. RlT, 0-0; 10. P4AR, P3D; 11. C3C, A2D; 12. P4CR, P4CD; 13. P5C, CIR; 14. P3TD, C4T; 15. CxC, DxC; 16. A2D, D2A; 17. P5A, A3AD; 18. D4C, PxP; 19. PxP, D2C; 20. P6A, AxA+; 21. DxA, DxD+; 22. RxD, CxP; 23. PxC, AxP; 24. TxA,PxT;25.R3A,P4TR;26.C5D,R2T; 27. TICR.

Y las negras abandonaron.

DEFENSA SICILIANA Schweber v. Comes

l. P4R, P4AD; 2. C3AR, C3AD; 3. A5C, P3TD; 4. AxC, PCxA; 5. 0-0, P3D; 6.

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SEP'JJEMBRE DE 1972 AJEDREZ 455

PIR, P4D; 7. P3D, A5C; 8. C3A, P3R; 9. C4TD, D4T; 10. P3CD, C2R; 11. A2D, D2A; 12. A4A, C3C; 13. A3C, A2R; 14:. P3TR, A4T; 15. T1R, 0-0; 16. D2R, TRlD; 17. A2T, A:x:C; 18. DxA, C5T; 19. D2R, C4A; 20. P3AD, D4T; 21. P4CR, CIT; 22. A3C, TD1CD; 23. TRlD, T2C; 24. P4AR, C3C; 25. T2D, P3TR; 26. T1AR, TlR; 27. P5A, C1A; 28. P6A, AlD; 29. P:x:P,C3C;30.P4TR,R:x:P;31.P5T,C1A; 32. R2C, C2T; 33. D2A, P5D.

34. T2A, T2D; 35. PxP, P:x:P; 36. C5A, T2T; 37. D:x:PD, A3C; 38. A4T, C4C; 39. A:x:C, P:x:A; 40. D3R, T1CR; 41. T(1)2A, T2R; 42. P4D, R1A; 43. D3AR, T2CR; 44. D:x:PAD.

Y las negras abandonaron.

DEFENSA SICILIANA

Ke:x:el v. Schweber

l. P4R, P4AD; 2. C3AR, P3TD; 3. P4D, PxP; 4. CxP, C3AR; 5. C3AD, P4R; 6. C3A, A5C; 7. A2D, 0-0; 8. A3D, P3D;

. 9. C2R, AxA+; 10. C:x:A, P4D; 11. P3AD, CD2D; 12. P:x:P, C4A; 13. A2A, D:x:P; 14. C3AR, D3A; 15. 0-0, T1R; 16. D1R, A5C; 17. C3C, A:x:C; 18. P:x:A, DxP; 19. D2R, DxD; 20. C:x:D, TD1D; 21. TDlD, RlA; 22. TxT, T:x:T; 23. TlD, TxT+; 24.

A:x:T, R2R; 25. P3A, C4D; 26. ClA, C6R; 27. A2R, C5T; 28. R2A, C4D; 29. P4AD, C5A; 30. P3C, C6A; 31. AlA, C8D+; 32. RlR, C6R; 33. R2A, C:x:A; 34. R:x:C, R3D; 35. P4C, P4TD; 36. P3TD, P3CD; 37. R2A, PxP; 38. P:x:P, P4A; 39. R3R, P4CR; 40. R2A, P4T; 41. R3R, P5T; 42. R2A, R3A; 43. C2T, P4C; 44. P5A, C4D; 45. R2R, P5C; 46. P:xP, PxP; 47. R2A, P5R; 48. ClA, C:xP; 49. R3R, P6C; 50. P3T, C4D+; 51. RxP, P7C; 52. C2R, C6A+.

Y las blancas abandonaron.

DEFENSA NIMZOINDIA

Ferré v. Kirchmayr

Fue ésta la mejor partida de la se­gunda ronda del certamen. Con un inte­resante juego posicional, muy dentro del espíritu de la defensa ideada por Nimzo­vich, Kirchmayr atenazó la posición ad­versaria, privando a las blancas de todo contrajuego, y luego se impuso median­te ataque directo en el flanco rey. Buena demostración del estilo del mejor clasi­ficado local.

l. P4D, C3AR; 2. P4AD, P3R; 3. C3AD, A5C; 4. P3TD, A:x:C+; 5. P:x:A, P4AD; 6. C3AR, D4T; 7. A2D, P3D; 8. D2A, C3AD; 9.P4R,P4R;10.P5D,C2R;11.A2R,A2D; 12. P4TD, C1A; 13. C4T, P3CR; 14. P4AR, ClC; 15. 0-0, P3A; 16. P:x:P, PD:x:P; 17. DlA, C3D; 18. A3D, 0-0-0; 19. A3R, P4CR; 20. C5A, CxC; 21. P:x:C, P4TR; 22. D3T, P3C; 23. A4R, C3T; 24. P3TR, C2A; 25. D3C, C3D; 26. A2AD, TD1C; 27. T2A, P5T; 28. TD1AR.

LIBRERIA CAISSA

Especialidad en libros, revistas y publicaciones ajedrecísticas .

Lavalle 1346 - oficina 9

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De 15 a 19 horas

Page 10: Ajedrez 221-Sep 1972 Ocr

456 AJEDREZ SEPTIEMBRE DE 1972

28 ...... , R2A; 29. A3D, P5C; 30. PxP, TxP; 31. R2T, T6C; 32. T2R, AlA; 33. T(l)2A, A3T; 34. TIA, T(l)lCR; 35. T(1)2A, T(l)5C; 36. T3A, P5R; 37. TxT, PxT+; 38. R3T, PxA; 39. TlR, T5R.

Y las blancas abandonaron.

SISTEMA CATALAN

Rossetto v. Rubín

Mario Rubín, otro destacado ajedrecis­ta local, jugó de igual a igual frente al gran maestro Rossetto. Lamentablemen­te, un serio error una jugada antes de las 40 movidas lo privó de la posibilidad de entablar la partida.

l. P4D, P4D; 2. C3AR, C3AR; 3. P4AD, P3R; 4. P3CR, A5C+; 5. A2D, A2R; 6. A2C, P4A; 7. PxPA, AxP; 8. 0-0, C3A; 9. PxP, PxP; 10. A5C, A2R; 11. C3A, 0-0; 12. AxC, AxA; 13. DxP, DxD; 14. CxD, AxP; 15. TDlC, A6TD; 16. C2D, A5CR; 17. T3C, A4AD; 18. C4R, A5D; 19. P3R, A3R; 20. PxA, AxC; 21. C6A+, PxC; 22. AxA, CxP; 23. TxP, C7R+; 24. R2C, C6A; 25. A3C, P4TD; 26. T1A, TDlA; 27. T7T, T4A; 28. T1R, C4D; 29. T4R, T1C; 30. T4TD, T(l)4C; 31. T8T+, R2C; 32. T4C+, R3T; 33. T8T, T5C; 34. TxT, CxT; 35. T8T, C6D; 36. T7T, R3C;

37. AxP+, R4A; 38. A3C, P4T; 39. T7D, R4R??; 40. TxC.

Y las negras abandonaron.

DEFENSA PIRC

Schweber v. Ferré

l. P4R, P3D; 2. P4D, C3AR; 3. C3AD, P3CR; 4. C3A, A2C; 5. A2R, 0-0; 6. 0-0, P4R; 7. A5CR, CD2D; 8. D2D, P3A; 9. P4TD, D4T; 10. TRlD, P3TD; 11. PxP, PxP; 12. P3T, TlR; 13. D3R, ClA; 14. C2D, A3R; 15. C4A, AxC; 16. AxA, C3R; 17. AxC(6R), TxA; 18. T3D, TlD; 19. TDlD, TxT; 20. DxT, D2A; 21. D8D+, DxD; 22. TxD+, C1R.

23. C5D, P3T; 24. C7A, A3A; 25. AxA. Y las negras abandonaron.

DEFENSA FRANCESA

Rossetto v. Comes

l. P4R, P3R; 2. P4D, P4D; 3. C3AD, C3AR; 4. A5C, A5C; 5. P5R, P3TR; 6. A2D, AxC; 7. PxA, C5R; 8. A3D, CxA; 9. DxC, P4AD; 10. C3A, C3A; 11. 0-0, D4T; 12. PxP, DxP(4A); 13. TRlR, 0-0; 14. TDlC, P3T; 15. D4A, P4CD; 16. T3R, C2R; 17. C4D, A2D; 18. T3CR, RlT; 19. D4C, TlCR; 20. T3T, P3C; 21. D4A.

Y las negras abandonaron.

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SEP1 JEMBRE DE 1972 AJEDREZ 457

DEFENSA SICILIANA

Pllnlk v. Kirchmayr

l. P4R, P4AD; 2. C3AR, P3CD; 3. P4A, A2C; 4. C3A, P3R; 5. P3TD, C3AR; 6. PSD, P3D; '7. P3CR, A2R; 8. A2C, 0-0; 9. 0-0, C3A; 10. ClR, C5D; 11. P5R, AxA; 12. PxC, AxT; 13. PxA, DxP; 14. RxA, P4A; 15. C2R, P4R; 16. CxC, PAxC; 1'7. RlC, P5A; 18. D2R, P4CR; 19. P4CD, DSA; 20. P3A, T2A; 21. D4R, T(l)lAR; 22. T2T, D3R; 23. T2CR, T2CR; 24. A2C, D2AR; 25. P4C, D2C; 26. DxD, TxD; 2'7. P5C, TIA; 28. C2A, P4D; 29. PxP, T4A; 30. P4TD, TxPD; 31. C4C, T4A; 32. T2R, T2D; 33. CGA, P4TD; 34. R2A, T2AD; 35. CxPR, T2R; 36. C4A.

Y ]as negras abandonaron.

APERTURA BIRD

Kichmayr v. Schweber

l. P4AR, P3CR; 2. C3AR, A2C; 3. P3CR, P4D; 4. A2C, P4AD; 5. 0-0, C3AD; 6. P3A, C3A; '7. P3D, 0-0; 8. P3R, D2A; 9. CD2D, P4R; 10. CxP, CxC; 11. PxC, DxP; 12. P4R, A5C; 13. DlR, D4T; 14. T4A, PxP; 15. CxP, CxC; 16. TxC, AGA; 1'7. AxA, DxA; 18. A3R, P3C; 19. D2A, D4T; 20. T'7R, D4D; 21. P4D, PxP; 22. AxP, AxA; 23. DxA, D4CR; 24. TDIR, TDID; 25. D3R, D4TD; 26. P3TD, D5T; 2'7. DGT, T8D; 28. D3R, T(l)1D; 29. D2A, TxT; 30. TxT, DGC; 31. D2R, P4TD; 32. TlAR, P4T; 33. D7R, TSD; 34. D8R+, R2T; 35. D2R, TxT+; 36. RxT, P4CD; 37. R2C, P5TD; 38. P4T, D4D+; 39. R2T, R2C; 40. D2AR, RlA; 41. D3R, D4AR; 42. D2R, D4D; 43. D3R, R2C; 44. D2A, DGD; 45. R2C, RlA; 46. D5A+, R1R; 47. DGA+, R2R; 48. D5A+, R3R; 49. DGA+, R4A; 50. D8A+, R3A; 51. D8T+, R2R; 52. DSR+, R2D; 53. D4A, D7R+; 54. R3T, R3R; 55. DlAD, R4D; 56. D4A, D5R; 57. D2D+, R5A; 58. R2T, RGC; 59. D7D, D7R+; 60. RlC, DSR+; 61. R2C, DSR+; 62. R2T, D7A+; 63. RlC, D4A; 64. D4D, D8C+; 65. R2T, DxP+; 66. R3T, DxPA; 67. D5D+, D5A.

Y las blancas abandonaron.

RUY LOPEZ

Schweber v. Pilnik

l. P4R, P4R; 2. C3AR, C3AD; 3. A5C, P3TD; 4. A4T, P3D; 5. 0-0, A2D; 6. P4A, P3CR; 7. P4D, PxP; 8. CxP, A2C; 9. CxC, PxC; 10. P5A, PxP; 11. C2D, C3A; 12. C3C, D2R; 13. D2A, 0-0; 14. CxP, AlR; 15. P3TR, C4T; 16. A3R, TIC; 17. A3C, P4T; 18. TD1D, T4C; 19. P4TD, T5C; 20. P4A, D5T; 21. T3A, D2R; 22. P5R, P4C; 23. C3D, PxP; 24. ASA, D4C; 25. CxT, PxC; 26. P5T, AxP; 27. AxT, RxA; 28. D5A+, D2R; 29. DxD+, RxD; 30. PGT, A2D; 31. P7T.

Y las negras abandonaron.

DEFENSA HOLANDESA

Biancotti v. Pelikán

Aquí el maestro internacional Pelikán es batido en uno de sus planteos favori­tos, la defensa holandesa, en partida elo­cuente sobre las condiciones de los me­jores jugadores locales. Biancotti no re­currió al fianchetto rey, como es habitual en esta línea de juego, y con un juego agresivo y claro castigó las debilidades de Pelikán, en forma instructiva.

l. P4D, P4AR; 2. P4AD, C3AR; 3. C3AD, P3R; 4. C3A, A2R; 5. A4A, P3D; 6.P3R,0-0;7.A3D,DlR;8.D2A,C3A; 9. P3TD, AlD; 10. A5C, D4T; 11. P3T, P3TR; 12. AxC, TxA; 13. A2R, D2A; 14. 0-0-0, C2R; 15. P4CR, PxP.

¿Cómo estudiar y practicar aje­drez, a un tiempo? ¿Cómo hacer amistad con aficionados del exte­rior? ¿Cómo jugar diversos tor­neos desde el lugar más apartado?

Escriba a la

Liga Argentina de Ajedrez por Correspondencia

Congreso 1846 - Haedo - Bs. Aires

¡25 años de Teleajedrez!

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458 AJEDREZ SEPTIE]dBRE DE 1972

16. e5R, DlA; 17. exP, T3e; 18. A3D, e4A; 19. e2R, P4TR; 20. e4A, T4e; 21. T2T, Pxe; 22. PxP, e3T; 23. T(l)lT, TxP; 24. A7T+, R2A; 25. A6e+, R2R; 26. D4R, Txe; 27. PxT, P3A; 28. P5AR,

exP; 29. T8T, D3A; 30. Axe, DxA; 31. D4T+, D3A; 32. DxD+.

Y las negras abandonaron.

DEFENSA INDIA DEL REY

Rubin v. Schweber

l. P4D, e3AR; 2. P4AD, P3eR; 3. P3eR, A2e; 4. A2e, 0-0; 5. e3AD, P3D; 6. P3R,eD2D;7.eR2R,P4R;8.0-0,TlR; 9. P3eD, P5R; 10. D2A, D2R; 11. A3TD, P4TR; 12. e5e, DlD; 13. e(5)3A, D2R; 14. ese, elA; 15. P5A, D2D; 16. e(5e)3A, P4D; 17. P4eD, e(1A)2T; 18. P5e, P5T; 19. TRIA, D4A; 20. e4A, P4e; 21. A3T, P5e; 22. A2e, e4e; 23. PxP, e6A+; 24. RlA, exPD; 25. D2D, e6A; 26. Axe, PexA; 27. e(3A)xPD, exe; 28. Dxe, A4R; 29. TDlC, A3R; 30. exA, Pxe; 31. D4A, TDlD; 32. T4e, T7D.

Y las blancas abandonaron.

La Combinación

Cuando se ha ideado bien una combi­nación «las fuerzas han de seguir inexo­rablemente la línea de las mayores res­tricciones progresivas» (Lasker). Pero los compositores, generalmente, suelen darle apariencia paradójica a esta ley, procurando demostrar su valor relativo, creando así los motivos o temas de sus producciones.

Por otra parte, también se da el caso que el finalista se haya propuesto des­arrollar una idea preconcebida, siguien­do fielmente la susodicha ley, pero ocu­rre que al resolver detalles de la com­binación, y por esas paradojas que tiene el ajedrez, aparecen líneas accidentales de juego que da por tierra con todo el mecanismo ideado. Y así, inopinadamen-

Por José Mugnos

te, surgen nuevos motivos de composi­ción que hasta pueden llegar a tener un alto grado de originalidad.

El final que presentamos a continua­ción es una muestra cabal de lo dicho, y, además, confirma en un todo los fun­damentos del desaparecido maestro che­co Josef Moravec al crear su conocida modalidad de presentación de una idea, los Ults, que no son otra cosa que la ta­bla de salvación para aquellas ideas que se malogran al aparecer obstáculos insu­perables. Con los Ults, como ya lo hemos señalado, se determina en cuántas juga­das se llega a una posición claramente definitoria, y se salva, como en este ca­so, el final.

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SEP'llEMBRE DE 1972 AJEDREZ 459

José Mugnos <In,dlto)

Dedicado al Dr. Raúl A. castelli

A) Juegan las blancas y ganan B) ULT en 7 jugadas

La teoría de los finales de caballo y peón, contra caballo y peón es muy li­mitada y cautelosa. Y con razón: no se pueden establecer reglas ni principios porque todo depende de la posición que ocupan las piezas en el tablero. Pero ge­neralizando, salvo contadas excepciones y las posiciones creadas ex profeso, pue­de decirse que por la paridad de fuerzas el final es prácticamente tablas, espe­cialmente en las columnas centrales. Tanto es así, que aún contra caballo solo es incierto y problemático el triunfo con un peón de ventaja. Veamos la so­lución de este final, que por cierto es más elocuente e ilustrativo que cuanto podamos decir al respecto.

A) l. R3C!

El rey debe llegar exactamente en tres tiempos a la casilla clave 5R.

1 ...... , R5C!

Prácticamente única. Las negras están en una singular posición de semi zug­zwang. Por eso pierden. No pueden ju­gar l. ..... , R4C; 4D o 5A, porque el caballo blanco sale con jaque y corona el peón. Tampoco se puede jugar l. .... , R5D; por 2. C7C!, C2A; y 3. C6R+, etc.

Y si l. ..... , R3C, es evidente que por ese sector el paso está bloqueado y se ha perdido inútilmente un tiempo, ya que el peón no puede moverse por C6A! y C5D+, etc.

2. R4A, R6C!

Si 2 ...... , P4A; 3. R5R!, P5A; 4. C6A!, C2A; 5. C5D+, etc.

3. R5R!, P4A; 4. C6A(!?) (téngase en cuenta esta jugada). Si 4. R6D?, C3C!! (amenaza ClA!); 5. R7A, C4D+; y 5 ...... , CxP tablas. Si 4. R6R?, P5A!; 5. C6A, C2A+; 6. R7A, P6A!!; etc., y tablas. Y si 4. C7C?, C2A; 5. R6D, P5A!; 6. RxC, P6A; 7. P8R=D, P7A!, y tablas porque el caballo ha quedado marginado.

4. . .... , C2A; 5. R6D, P5A; 6. RxC, P6A; 7. PBR=D, P7A; 8. DlR, R7C; 9. D2D!

Obsérvese cómo falla aquí la clásica maniobra de este tipo de finales. Si 9. D4C+?, RlT; 10. D3A+, R7C; 11. C4R, P8A=D; 12. C2D+, R2T!!, y tablas.

9 •..... , RBC; 10. C4R(5D), PBA=D+; 11. C3A+, y ganan.

Este sería el final en su faz artística. Pero como existe un dual inevitable en la 41!- jugada, no hay otra manera de sal­var el trabajo que presentarlo en forma de mt; con lo que queda demostrada prácticamente la importancia de esta nueva modalidad de presentación de una idea.

B) He aquí la solución del Ult.

4. C6D(!?).

Ironías del ajedrez; justamente la ca­silla «reservada' para su rey.

4 ...... , C2A; 5. C5C!!, ClR; 6. R6R, R5C; 7. R7A!, y ganan.

Caballo y peón, contra caballo, ganan en determinadas posiciones. Veamos al­gunos ejemplos para completar la parte instructiva de este tema.

(Véase el diagrama siguiente)

Conviene aclarar que con un peón la­teral resulta más fácil ganar, porque al

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SEPTlEMBRE DE 1972 AJEDREZ 461

Sistema Algebraico de Anotaciones

El tablero del «juego de los reyes:., como suele llamarse a nuestro entrete­nimiento predilecto, con su división cua­drada bicolor, que, a veces sirve para un motivo decorativo, es un escenario de interesantes sucesos no exentos de dramatismo.

Todos sabemos que la división forma 64 casillas y que debemos familiarizar­nos perfectamente con este espacio cua­drado.

Hasta la fecha, usando la anotación descriptiva, hemos concentrado nuestra atención más a los fugaces movimientos sin registrar minuciosamente las huellas de los mismos, pues las casillas en esta anotación no tienen nombres invariables, iguales para ambos conductores de las piezas.

Sin embargo, para un ajedrecista ave­zado estos escaques no son iguales y pa­ra seguir bien lo que sucede en este escenario no podemos descartar la ano­tación orientadora.

La anotación descriptiva nos presenta el cuadro de la acción entera, sin desve­lar la particularidad de las situaciones intermediarias de las cuales se compone. Puede decirse que es una anotación na­rrativa.

Su noble competidor, para anotar mi­nuciosamente el juego, es el sistema al­gebraico, cuya creación data de siglos y que con el correr del tiempo se «estable­ció» como preferido, en la mayor parte del mundo ajedrecístico.

En el próximo Congreso de la Fede­ración Internacional, que se va a llevar a cabo en el próximo mes de octubre de 1972, en la ciudad yugoslava de Sko­plie, va a tratarse la proposición de va­rias federaciones afiliadas, para que se recomiende a las federaciones afiliadas,

Por el Dr. Carlos Skalicka

que hasta hoy se sirven de la anotación descriptiva, que divulguen e implanten la anotación alfebraica, a fin de hacer uniforme la literatura ajedrecística.

Cabe destacar que en el ámbito de la rama de la cpoesía:. ajedrecística (de los problemas, finales artísticos y del ajedrez de la «fantasía») hace ya más de diez años que fue implantado el sis­tema algebraico para las anotaciones, facilitando así el entendimiento y rela­ciones de los cultores de esta rama del ajedrez en el orbe.

En mundo se moderniza y por eso con­sideramos oportuno enseñar a nuestros lectores el sistema algebraico, para que juzguen imparcialmente su conveniencia de aplicación en nuestro ambiente.

En los siguientes dos diagramas pre­sentamos la nueva descripción del ta­blero para la anotación algebraica.

Amable lector, no se deje atemorizar con este laberinto de letras y cifras. El principio sobre el cual se basa la ano­tación algebraica es muy simple.

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SEPTIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 463

minarse en la abreviatura de los peones, quedando sólo señalado el traslado de una columna a otra, por ejemplo: c2xd3, puede abreviarse: cd3. La captura con las piezas puede indicarse también agre­gando detrás de la cifra dos puntos (:). Por ejemplo: Dxf4 se puede anotar tam­bién con Df4:

En cuanto al anotar posiciones, se pro­cede de la misma manera ya explicada, pero, al indicar la ubicación de los peo­nes se antepone la letra P.

Si un peón toma al paso se agrega de­trás de la cifra abreviado a. p.

La anotación algebraica facilita repro­ducir las partidas de los libros y revistas extranjeras, aun los de Rusia, pues sólo la indicación de la pieza figura allí con la letra del abecedario ruso, lo que no es dificil de aprender, por tratarse sola­mente de cinco letras.

A fin de que el lector pruebe practicar la <<algebraica» insertamos a continua­ción una partida con este sistema de ano­tación:

GAMBITO DE DAMA

Dr. C. Skalicka v. Dr. Michel (Suiza) Torneo de las Naciones, Praga, 1931

1 d2-d4 d7-d5 2 c2-c4 e7-e6 3 Cb1-c3 Cg8-f6 4 Ac1-g5 Cb8-d7 5 e2-e3 Af8-e7 6 Cg1-f3 c7-c6 7 a2-a3 O-O 8 Af1-d3 d5xc4 9 Ad3xc4 c6-c5

10 O-O b7-b6 11 Dd1-e2 Ac8-b7 12 Tfl-d1 c5xd4 13 Cf3xd4

Se amenaza 14. Cxe6, fe6; 15. Axe6+, Rh8; 16. Axf6, y las blancas recuperan la pieza con la ganancia de dos peones.

13 14 Ag5xe7

Cf6-d5 Cd5xc3

Después de 14 ...... , Dxe7, las blancas ganan un peón: 15. Axd5, ed5; 16. Cf5, De6; 17. Cxd5!, Axd5; 18. Txd5!, Cf6; 19. Tb5, a6; 20. Cd4, y la torre blanca se salva.

15 De2-g4

El prólogo a una bonita combinación.

15 16 Cd4xe6!

Dd8xe7 f7xe6

Las negras no encuentran la mejor defensa: 16 ....... , g6; 17. Cxf8, Ce5; 18. Td7!, Dxf8!; 19. Dd4!, Cxc4; 20. Dxc3, Ac8!; 21. Td4, Ce5; 22. Dc7, Dc5!; 23. Td8+, Rg7; 24. Tc1, Dxc7; 25. Txc7, Ab7; 26. Txa8, Axa8; 27. Txa7, y no es fácil para las blancas forzar la victoria.

17 Tdlxd7!

Malo sería 17. Axe6+, Rh8; 18. Txd7 por 18 ...... , Df6; 19. f3, Ac8!, 20. Td6, Cb5, y las negras ganan una pieza.

17 De7-f6 18 Dg4xe6+ Df6xe6 19 Ac4xe6+ Kg8-h8 20 Td7xb7 Cc3-e4 21 Tb7-f7 Tf8-f7 22 Ae6xf7 Ce4xf2 23 Rglxf2 Ta8-f8 24 Rf2-e2 Tf8xf7 25 Tal-fl! Abandonan.

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464 AJEDREZ SEPTIEMBRE DE 1972

V Torneo Abierto de A ¡edrez 11Centro de lo República 11

1 Córdoba 1972 Con la participación de 78 jugadores,

se desarrolló este torneo abierto, que se cumple por quinta vez en la ciudad de Córdoba. La organización estuvo en ma­nos de la Unión Cordobesa de Ajedrez, entidad que desarrolla sus actividades en la ciudad docta con reconocida popu­laridad y eficiencia, estando la dirección y codirección en dos idóneos dirigen­tes porteños: Antonio Martín y Antonio Francia, respectivamente.

Entre los concurrentes actuaron tres grandes maestros, dos maestros interna­cionales, varios maestros nacionales y un grupo numeroso de destacados juga­dores de distintas localidades. El triunfo, después de cumplidas nueve ruedas, co­rrespondió al joven campeón de La Plata Carlos H. García Palermo. Sobre sus condiciones para el ajedrez, en distintas oportunidades la hemos destacado y con este triunfo se corrobora lo aseverado tiempo atrás, de su fuerza y calidad. Co­mo único invicto destacamos el desem­peño del maestro internacional Alberto Foguelman. A continuación el cuadro completo del certamen y una selección de partidas:

DEFENSA SICILIANA

García Palermo v. Horacio García

l. P4R, P4AD; 2. C3AR, P3R; 3. P4D, PxP; 4. CxP, P3TD; 5. A3D, D2A; 6. 0-0, C3AD; 7. CxC, PCxC.

También era posible: 7 ...... , PDxC; y después P4R.

8. D2R, P4D; 9. C2D, C3AR; 10. P3CD. Similar a Spassky-Petrosian (Campeo­

nato Mundial 1968.

10 ...... , A2R.

Era de considerar 10. . .... , A3D. 11. A2C, 0-0; 12. P4AD!, A2C; 13.

TlAD!

Estas dos últimas jugadas de las blan­cas favorecen mi posición. Las negras deciden anular la presión blanca en la columna AD, a costa de debilitar su es­tructura de peones.

13 ...... , PxPR; 14. CxP, TRlD; 15. CxC+.

Podría haber sido 15. P5A.

15 ...... , AxC; 16. AxA, PxA; 17. PSA.

Si 17. D4C+, RlA! Ahora las blancas tienen su alfil más activo, además de mayoría de peones en el flanco dama y mejor estructura de peones.

17 ...... , D4R; 18. DxD, PxD; 19. A4A, T7D; 20. P4TD.

Horacio García ha obtenido cierto do­minio del centro, de la columna dama y de la séptima fila. Sin embargo, las blan­cas parecen tener mejores chances, ya que la séptima no daría oportunidades a las negras de complicar la tarea blanca.

20 ...... , P4TD.

Presionaba más 20 ...... , T(l)lD; 21. T3A, con el plan P3TR - T3AR - TlR -T(1)3R - T3D.

21. T(D)lD, T(l)lD; 22. TxT.

A 22. T(D) IR, las negras podían obte­ner chance táctica a cambio del peón, basada en el incremento de la movilidad de su alfil. Por ejemplo: 22 ...... , P3A; 23. AxP+, RIA; 24. P4A, A3T; 25. R2R,

(Continúa en página 468)

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V Torneo Abierto 11

República 11

1972 Centro -Participantes (Ciudad) la. 2a. 3a. 4a. 5a. 6a. 7a. 8a. 9a. Pts.

1 García Palermo, Carlos H .. La Plata) .......... +76 +30 -3 +31 +18 +10 +2 +6 =12 7% 2 García, Horacio ........... (Capital Federal) .. +27 +25 +B +15 =3 +14 -1 +13 = 6 7 3 Pilnik, Herman ........... (Capital Federal) .. +51 +32 + 1 + 5 = 2 +16 -6 +14 =7 7 4 Herrera, Fernando ........ (Tucumán) ........ -8 +65 -18 +69 +55 +30 +42 = 5 +16 6% 5 Pleci, Isaías ............... (Capital Federal) .. +20 +26 +72 -3 =28 +15 =11 =4 +19 6% 6 Rossetto, Héctor D ......... (Capital Federal) .. +56 +35 -7 +53 +29 + 9 +3 -1 =2 6% 7 Bosco, Ricardo ............ (Capital Federal) .. +58 +23 +6 = 9 -14 =42 +36 =11 = 3 6 8 Bronstein, Luis ............ (Córdoba) ......... +4 +39 -2 +55 -11 +24 -41 +30 +31 6 9 Calneggia, Aldo •••••• o ••• (Pcia. de Córdoba) . +70 +12 +55 = 7 =13 -6 -19 +53 +35 6

10 Diani, José ................ (Córdoba) ......... =36 =28 +68 +57 +32 -1 =17 =35 +27 6 11 Foguelman, Alberto ....... (Capital Federal) .. =52 =37 =21 +66 +8 +41 = 5 = 7 =14 6 12 Fraile, Jorge .............. (Pcia. de Bs. Aires) . +43 -9 -17 =20 +77 +59 +28 +41 = 1 6 13 Laurencena, Alberto ....... (Paraná) • 00 ••••••• -42 +71 +20 +72 = 9 =19 +22 -2 +29 6 14 Redolfi, Argentino ........ (Córdoba) ......... +73 +34 +57 =18 + 7 -2 +35 -3 =11 6 15 Studenetzky, Moisés ....... (Capital Federal) .. +61 +21 +59 -2 =35 -5 =40 +33 +24 6 16 Bazán, Gerardo ............ (Córdoba) ......... +71 =42 =47 +67 +22 -3 +26 =19 -4 5% 17 Castellanos, Jorge ......... (Córdoba) ......... +54 -55 +12 =41 =24 +64 =10 =29 =22 5% 18 Eliskases, Erich ............ (Córdoba) ......... =28 +52 +4 =11 -1 =29 =33 =34 +41 5% 19 Incutto, Carlos ............ (Capital Federal) .. =25 -24 +60 +62 +51 =13 + 9 =16 -5 5% 20 Ramadán, Máximo ......... (Córdoba) ......... -5 +49 -13 =12 =66 +38 +51 =21 +40 5Yz 21 Reinhardt, Enrique ........ (Capital Federal) .. +22 -15 =11 -37 +39 =51 +25 =20 +42 5% 22 Salvador, Jorge ............ (San Luis) ......... -21 +61 +70 +64 -16 +56 -13 +36 =17 5% 23 Barki, Nelson .............. (Córdoba) ......... +40 -7 =56 -24 -25 =68 +70 +51 +53 5 24 Bazán, Osvaldo ............ (Córdoba) ......... =33 +19 -42 +23 =17 -8 +58 +47 -15 5 25 Calneggia, Raúl ........... (Pcia. de Córdoba) . =19 -2 =48 =43 +23 =58 -21 +59 +44 5 26 Chavich, Tomás ............ (Córdoba) ......... +49 -5 -35 +61 +57 +53 -16 -27 +46 5

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27 De Las Heras, Juan C ..... (Córdoba) ......... -2 -69 +63 +65 +59 -33 +72 +26 -10 5 28 Fabrega, E. •• o ••••• o ••• o o (Panamá) ••••• o ••• =18 =10 +50 +36 =5 -35 -12 +55 =34 5 29 Gaete, Rodolfo ............ (Córdoba) ......... -47 +77 +75 +33 -6 =18 +46 =17 -13 5 30 Kolodziej, Carlos .......... (Córdoba) ......... +38 -1 -32 +34 +31 -4 +30 -8 +48 5 31 Maldonado, Osear .......... (Córdoba) ......... +41 -59 +34 -1 -30 +69 +32 +61 -8 5 32 Marchetti, Francisco ....... (Córdoba) ......... +78 -3 +30 +47 -10 -36 -31 +71 +58 5 33 Ochoa, Raúl ............... (Córdoba) ......... =24 +62 =64 -29 =40 +27 =18 -15 +47 5 34 Páez, Luis ................. (Córdoba) ......... +75 -14 -31 -30 +52 +43 +49 =18 =28 5 35 Pelikán, Jiri ............... ( Balcarce) ......... +44 -6 +26 +42 =15 +28 -14 =10 -9 5 36 Rubín, Mario .............. (Trelew) .......... =10 +48 =67 -28 +71 +32 -7 -22 +50 5 37 Russo, Osear .............. (Pcia. de Bs. Aires) . =45 =11 =39 +21 -41 -40 =50 +52 +59 5 38 De los Santos, Silvio ...... (Capital Federal) .. -30 =76 +52 -46 =45 -20 +67 =57 +69 4Y:! 39 González, Héctor .......... (Córdoba) ......... +65 -8 =37 -51 -21 +77 -59 +60 +62 4Y:J 40 Gutiérrez, Aníbal .......... (Córdoba) ......... -23 -58 +44 +48 =33 +37 =15 =42 -20 4% 41 La plaza, Jorge ............. (Capital Federal) .. -31 +45 +69 =17 +37 -11 + 8 -12 -18 4Y:! 42 Paglilla, Carlos ............ (Capital Federal) .. +13 =16 +24 -35 +46 = 7 -4 =40 -21 4'% 43 Phagouape, Armando ...... (Córdoba) ......... -12 -70 +49 =25 =62 -34 +66 =56 +61 4'% 44 Addler, Alfredo ............ (Pcia. de Bs. Aires) . -35 -56 -40 +78 +70 -61 +68 +64 -25 4 45 Bago, Jerko ............... (Córdoba) ......... =37 -41 -66 +76 =38 -55 +69 -50 +65 4 46 Beltrán, Jorge ............. (Córdoba) ......... -55 +54 =51 +38 -42 +50 -29 =48 -26 4 47 Caglieri, Osvaldo .......... (Pcia. de Córdoba) . +29 =64 =16 -32 -53 +66 +56 -24 -33 4 48 Corti, Héctor .............. (Córdoba) ......... =66 -36 =25 -40 =68 +54 +62 =46 -30 4 49 Fernández, E. L. . ......... (Córdoba) ......... -26 -20 -43 +74 +65 +67 -34 -58 +64 4 50 González, Alberto ......... (Córdoba) ......... -57 +63 -28 +75 =58 -46 =37 +45 -36 4 51 Litovicius, Miguel ......... (Córdoba) ......... -3 +78 =46 +39 -19 =21 -20 -23 +71 4 52 Meloni, Ricardo ............ (Córdoba) ......... =11 -18 -38 =54 -34 +73 +76 -37 +66 4

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SEPTIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 471

CxP; 12. C5D, A3R; 13. C5C, A2D; 14. A4A, P4R; 15. CxC, DxC; 16. A3R, C5D; 17. AxC, PxA; lS. D3C, P3TR; 19. C3A, A3R; 20. DxD, PxD; 21. P5R, TRlD; 22. TRlD,TxP;23.TxT,AxT;24.TxP,TxT; 25. CxT, AxP; 26. C5C, AxP(7); 27. AxP, RlA; 2S. P4A, R2R; 29. R2A, R2D; 30. R3R, A5A; 31. A6T, P4T; 32. P5A, P4C; 33. R4R, A3A; 34. ASA+, R3A; 35. C3T, ASA; 36. R3R, R2A; 37. R2A, A6T; 3S. A6T, AxP; 39. A4A, A3C; 40. R3R, R3A; 41. A3D, AxA; 42. RxA, P4C; 43. C2A, R4A; 44. C3R, P5CD; 45. C5A, P6C; 46. C6T, P7C; 47. R2A, R4D; 4S. P4C, PxP; 49. CxPA, R5R; 50. C6D+, R6A; 51. C4A, A5D; 52. C2D+, R7C; 53. C4R, RxP; 54. CxP, AlT; 55. C4R, P6C; 56. CxP, RxC.

Y las blancas abandonaron.

DEFENSA FRANCESA

Pellkán v. Redolfi

l. P4R, P3R; 2. P3D, P4D; 3. CD2D, C3AR; 4. P3CR, P4AD; 5. A2C, C3A; 6. CR3A, A2R; 7. 0-0, 0-0; S. TlR, P3CD; 9. P5R, ClR; 10. CIAR, P3A; 11. A4A, A2D; 12. P4TR, PxPR; 13. CxP, CxC; 14. AxC, A3AR; 15. P4AR, TlAD; 16. P4AD, C2AD; 17. C2T, AxA; 1S. TxA, A1R; 19. PxPD, PxP; 20. C4C, D3D; 21. C3R, R1T; 22. CxPD, C4C; 23. D4CR, A2D; 24. D5T, C5D; 25. A4R, P3CR; 26. D5C, C3A; 27. P5TR, A4A; 28. PxPC,

PROGRESE

con

el maestro internacional

ISAIAS PLECI

Clases individuales

T. E. 69-7643 o 40-1327

AxPC; 29. AxA, CxT; 30. DxC+, DxD; 31. PxD, PxA; 32. C7R, R2C; 33. CxT, TxC; 34. T1R, R2A; 35. TIA+, R3R; 36. T6A+, RxP; 37. TxPCR, TlD; 38. T7C, TxP; 39. TxP, TxP+; 40. R2A, T6TR.

41. T7R+, R5D; 42. T7D+, R5A; 43. T2D, R5C; 44. R2R, TST; 45. T6D, T7T+; 46. RlD, TxPC; 47. TxP+, R6A; 4S. T6T, T8C+; 49. R2R, P5A; 50. P4T, R7A; 51. P5T, P6A ;52. T6C, T7CD; 53. R3R, RSC; 54. R3D, P7A; 55. T6AD, T7T; 56. T6C+, RSA.

Las blancas abandonaron.

DEFENSA FRANCESA

García Palermo v. Rossetto

l. P4R, P3R; 2. P4D, P4D; 3. C3AD, A5C;4.P5R,D2D;5.D4C,P4AR;6.D3C, P3CD; 7. A2D, A3T; S. AxA, CxA; 9. C(1)2R, P3AD; 10. 0-0, TlAD; 11. C4A, AlA; 12. P4TD, D2AR; 13. C(3)2R, C2R; 14. P4TR, C3C; 15. C3T, A2R; 16. P5T, ClA; 17. D3AR, C2D; 18. T(R)lA, 0-0; 19. P6T, P3C; 20. D3D, C2A; 21. P5T, TIT; 22. P4AD, P4AD; 23. C5C, AxC; 24. AxA, PDxP; 25. DxPAD, C4D; 26. C3A, P5A; 27. D5C, P6A; 28. P4CR, CxC; 29. PxC, T(R)lA; 30. D6T, PCxP; 31. T(lA)lC, T2A; 32. P5D, PxP; 33. P6R,

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478 AJEDREZ SEPTIEMBRE DE 1972

al mismo tiempo un goce estético de alambicada cultura. Ya no son más, és­tos, cansados actores envueltos en las polvaredas desatadas a veces por algún peón surgido del anonimato, sino que se erigen en honestos intérpretes, en sus legítimos heraldos.

En esta secuencia, aparecen cuatro de los peregrinos del ajedrez, pertenecien­tes a la camada de «libres», que transi­taron un trecho de sus vidas por las ca­lles porteñas.

l. Robert Byrne (nacido en Brooklyn, 20/4/1928), tres veces campeón de los Estados Unidos), enviado a Buenos Aires por Daily News. Fue su primer trabajo periodístico. Tiene en preparación su te­sis de doctorado (ca. 400 pp.): «The Me­taphysics of Paul Weiss», cuyo discípulo se considera.

Le formulé cuestiones acorde a esta su altura intelectual. Me interesaba po­der comunicar a los lectores de Ajedrez cuál de los presidentes del país del norte ha sido el mejor ajedrecista y qué es­tilo ha preferido. También si la pujante mentalidad hacia el Far West y hacia las Nuevas Fronteras, las características de la «lucha por la vida» y su inevitable «stress» quedan visibles en la modali­dad del jugador norteamericano frente al tablero. ¿Qué relación podría ser des­cifrada como consecuencia de estas con­diciones específicas y de los factores psi­cosomáticos de sus oponentes en cuanto estilo? Si considera que el noble juego alberga en sí mismo la fuerza de ele­varse al nivel contemporáneo de cultu­ra, una especie de actualizarse similar al empeño, en otro plano, de la Santa Iglesia Católica? Cómo hay que analizar el cambio total ideológico ocurrido des­de la fórmula inicial de Paul Morphy: «Que el ajedrez reemplace los juegos de azar, y un gran mejoramiento se hará visible en la Moral de la comunidad», hasta las últimas interpretaciones psico­analíticas (psa): «el complejo de Edipo», la «degradación del padre al nivel del niño», el <<superar al progenitor», la «agresividad y la homosexualidad», la

«satisfacción del ego y de la libido», las «gradas del desarrollo analo-phálico», la «actitud respecto al pene», etc., formula­das por Reuben Fine en «La Psicología del Jugador de Ajedrez» (New York, 1967)? Además, ¿cómo se entiende que este pensamiento de Paul Morphy fuera aplicado en el ámbito educacional [no en U.S.A., pero] en los países socialis­tas, especialmente en Rusia?

Le dije que tengo mis respuestas, pero que las quería confrontar con sus opi­niones, seguramente más directas. Me prometió, y le pedí nuevamente por car­ta a su despacho. Yo no perdí aún la esperanza. Por ahora, estas preguntas equivalen a uno de aquellos dibujos subrayados con la leyenda: «Sin pala­bras».

2. Isador S. Turower (nacido en So­chacvew, cerca de Varsovia, en la mis­ma ciudad de Miguel Najdorf, el año 1892) conoció el ajedrez a los 12 años de edad y sostuvo partidas serias en el Club de Diamantes de Amberes, mien­tras se desempeñaba como cortador y pulidor de esta clase de piedras precio­sas. Más tarde, y en U.S.A., comerciante en maderas, se enfrentó en el Reis Club de New York con Duras, Jaffe, Grom­mer, etc. De aquella época me contó el chiste hecho por un médico que asistía a una partida decisiva entre Oldrich Du­ras y Charles Jaffe. En la cuarta juga­da, defensa eslava, Duras se puso a pen­sar, y el médico, Fremdlich, fue llamado de urgencia a la casa de una clienta suya, parturienta. Al volver, contaba las calidades del niño que había nacido, y, mirando el tablero, continuó: «Pero, ¡cómo! ¿Duras todavía no dio a luz su movida?»

Turower fue campeón de Baltimore (1916) y tres veces de Washington. Para que se jugara con más interés, depuso el título e instituyó el trofeo de plata «Copa Turower». Después del año 1923, no participó más profesionalmente. Sos­tuvo, en cambio, partidas con Marshall, .Janowsky, Alekhine. En 1931, cometió un grueso error en una partida con Ca.

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:8EP'fJEMBRE DE 1972 AJEDREZ 481

(Ver soluciones en la página 513)

N9 1 - Juegan las blancas y ganan N9 3 - Juegan las blancas y ganan

N9 2 - Juegan las blancas y ganan N9 ol - Juegan las blancas y ganan

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SEPTIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 483

A la izquierda el ganador del V Torneo Centro de la República. Córdoba 1972

Gran maestro Yuri Averbach Maestro Isador Turower

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484 AJEDREZ SEPTIEMBRE DE 1972

SECCION PROBLEMAS

J. G. West Game of Chess. 1882

N\1 1 - Mate en dos

O. Dehler Neue Welt, 1919

N9 11 - Mate en do•

(Ver soluciones en la página 513)

W. Pauly Deutsche Schachzeltung, 1905

N\1 3 - Mate en tres

B. Borwitz Chess Player' s Chronlcle, 1847

N\1 4 - Mate en euatro

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SEPTIEnaBRE DE 1972 AJEDREZ 485

Match Mundial Spassky - Fischer

Reykiavik, 1972 DEFENSA NIMZOVICH

Spassky v. Fischer

Primera Partida

l. P4D, CR3A.

Spassky inicia la primera partida del match por el campeonato del mundo mo­viendo el peón dama. El pretendiente, que llegó con siete minutos de atraso a la iniciación del juego, escoge una res­puesta muy habitual en él.

2. P4AD, P3R.

Fischer evita la Defensa Grünfeld, con la cual en el pasado ya había perdido dos partidas con Spassky, y prefiere ju­gar lo que se presentaba con poca fre­cuencia en sus partidas; es evidente que lo hace por temor a variantes prepara­das en el laboratorio de su adversario.

3. CR3A, P4D; 4. C3A, ASC.

Por lo que vemos, el gran maestro nor­teamericano detiene su elección, en for­ma bastante sorpresiva, en la Defensa Ragozin. Es sabido que en la posición sur­gida es una buena continuación para las blancas 5. PxP, PxP; 6. A5C, pero el campeón del mundo prefiere trasladar la lucha, por transposición de movimien­tos, al cauce de una de las variantes só­lidas y analizadas de la Defensa Nim­zovich.

5. P3R, 0-0; 6. A3D, P4A; 7. 0-0, C3A; 8. P3TD.

Esta posición se ha presentado cientos de veces en la práctica y se la puede en­contrar sin dificultad en cualquier ma­nual de aperturas. La respuesta más di­fundida aquí es 8. . .... , AxC.

8 ...... , A4T; 9. C2R.

Una jugada al estilo del difunto gran maestro A. Tolush, en su tiempo entre­nador de Spassky. Aprovechando, por consideraciones de orden general, la cir­cunstancia de que el alfil rey adversa­rio se halla alejado del flanco rey y en lugar de su habitual ubicación en 2R está en 4TD, las blancas estarían gusto­sas de iniciar el ataque en este flanco y tratan de concentrar aquí la mayor can­tidad posible de piezas; en este caso el caballo ocuparía su lugar en 3CR.

9 •..... , PxPA; 10. AxP, A3C.

A Fischer no le gustan las indefinicio­nes: está dispuesto a perder un tiempo más en el movimiento del alfil con tal de llevar claridad a la posición. Sin em­bargo y sin sobreestimar las posibilida­des de ataque de las blancas, las negras, por lo visto, debieron proseguir 10. PxP; 11. PxP, A2A.

11. PxP.

Por cuanto las piezas blancas se halla­ban fuertemente trabadas con la defen­sa del punto 4D, Spassky adopta la ple­namente natural decisión de llevar el juego a un final mejor. He tenido más de una vez la oportunidad de jugar con las blancas finales análogos, surgidos del Gambito Dama Aceptado y de la Defen­sa Nimzovich. Una situación similar sur­gió en un encuentro de mi match con Tal y en el torneo de Hastings con Ba­lashov. Habiendo aventajado al adversa­rio en desarrollo, las blancas tienen por añadidura mayor espacio. Todo ello, vin­culado con la posibilidad de aproximar rápidamente el rey al centro, les ase­gura cierta superioridad.

11 ...... , DxD.

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486 AJEDREZ SEPTIEMBRE DE 1972

Fischer teme la iniciativa que podría surgir en manos de las blancas después de 11. ..... , AxP; 12. D2A.

12. TxD, AxP; 13. P4CD, A2R.

Lo curioso es que este alfil vino a ocu­par su posición habitual en 2R después de haber realizado un peregrinaje casi alrededor del mundo, por las casillas 1AR-5CD-4TD-3CD-4AD-2R. Por supues­to que tal pérdida de tiempo no podía resultar gratuita.

14. A2C, A2D.

Esta es, precisamente y por lo visto, la novedad por la cual el gran maestro norteamericano entró en toda la varian­te. Krogius, en el año 1958 jugó contra Spassky aquí 14 ...... , P3CD, y fue de-rrotado. Explotando la circunstancia de que es improcedente ahora 15. AxC, AxA, y la torre blanca queda atacada, Fischer se apresura a completar el des­arrollo de su flanco dama.

15. TD1A.

Quizás había que aproximar en segui­da el rey hacia el centro: 15. R1A, o re­tirar con anticipación el alfil a 2TD. Me­recía atención, asimismo, 15. P4R, tra­tando de reducir aún más el espacio de las negras. Los numerosos cambios pos­teriores simplifican demasiado la posi­ción.

15 ...... , TRlD; 16. C(2)4D, CxC; 17. CxC, A5T; 18. A3C, AxA.

No, por supuesto, 18. . .... , TxC, en vista de 19. AxA, y las blancas quedan en el final con la pareja de alfiles.

19. CxA, TxT+.

Correcta decisión. Las negras no tie­nen nada que temer porque las blancas ocupan la columna dama, pues el punto 2D lo tienen sólidamente protegido.

20. TxT, T1AD; 21. R1A, R1A.

Así las negras paralizan la amenaza 22. AxC, AxA; 23. T7D, a lo cual segui­ría ahora 23. . .... , T6A.

22. R2R, C5R.

Las negras renuncian a 22 ..... , T7A+; 23. T2D, TxT+; 24. CxT (o RxT) y pro­vocan el cambio de la última pareja de piezas mayores en otra versión.

23. T1AD, TxT; 24. AxT, P3A.

Profilaxis poco comprensible. Más pru­dente era llevar el rey directamente al centro: 24 ...... , R1R. Por ejemplo: 25. C5T, C3D; 26. R3D, R2D; 27. C4A, P4CD, con tablas.

25. C5T.

También era de considerar una distin­ta disposición de fuerzas: 25. P3A, C3D; 26. C5A.

25 ...... , C3D; 26. R3D, A1D.

En vista de que las blancas podían re­forzar su posición mediante P4R, Fischer se apresura a cambiar los caballos. La partida va adquiriendo cada vez más una configuración de nulidad.

27. C4A, A2A; 28. CxC, AxC; 29. P5C.

29 ...... , AxPTR.

Momento crucial. Como se verá poste­riormente, esta jugada de Fischer está basada sobre un error de cálculo. Des-

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SEPTIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 487

pués de 29 ...... , R2R; 30. P3T, P4R, y 31. ..... , R3R, las negras debían lograr tablas, pues no corrían el riesgo de per­der ni el final de peones ni el de alfiles.

30. P3C, P4TR; 31. R2R, P5T; 32. R3A.

Condenando su alfil a una voluntaria reclusión, Fischer suponía que de esa manera lograría el empate lo más rápi­damente posible. Es evidente que sólo aquí el pretendiente descubrió que 32 ..... , P6T no ervía debido a 33. R4C!, A8C; 34. RxP, AxP; 35. A2D!, y el alfil perece a pesar de todo.

32 •..... , R2R; 33. R2C, PxP; 34. PxP, AxP; 35. RxA, R3D; 36. P4T.

Spassky defiende el peón y se dispone a dar juego al alfil. A pesar de que las negras sólo tienen a cambio del alfil dos peones, el problema de concretar la ven­taja material es bastante complejo para las blancas.

36 •..... , R4D.

A la derrota debía llevar: 36. . .... , R4A; 37. A3T+, R5A; 38. ASA, P3CR; 39. A7R.

37. A3T, R5R.

Ya este movimiento provoca dudas. Las negras alejan su rey del flanco da­ma (adonde posteriormente tendrán que retornar de todos modos) y ceden el con­trol sobre el punto A4D. Merecía consi-derarse 37 ...... , P4R.

38. ASA, P3T.

Pierde en seguida 38. . .... , P3CD en vista de 39. AxP!, PxA; 40. P5T.

39.¡ P6C!

Según quedará aclarado por el poste­rior desarrollo de los acontecimientos, las blancas sólo de esta manera conser­van las posibilidades de triunfo. Si las negras pudieran realizar uno de los cam­bios de peones en el flanco dama o en este momento lograran, después de 39.

P6C provocar P5T de las blancas, la par­tida pronto terminaría con la división del punto.

39 ...... , P4A.

También aquí se insinuaba 39. . .... , P4R, y si 40. ASA, entonces 40 ..... , P3C (40 ...... , RxP; 41. AxP, R5D; 42. AxP, R4A; 43. A8D, R5C; 44. R3A, RxP; 45. R4R, R4C; 46. R5D!, P5R; 47. R6D, P4T; 48. R7A, R3T; 49. A5C!, P5T; 50. AlA! coloca a las negras en posición de zug­zwang, proporcionando la victoria a las blancas).

40. R4T.

El campeón del mundo conduce el fi­nal con técnica y visión de largo alcan­ce; aquí ya se ha preparado para el raid de su monarca con destino al punto 7AD.

40 ...... , P5A.

Esto facilita la labor de las blancas. Más tenaz era 40 ...... , R4D; 41. ASA, P3C, tratando de cambiar el peón rey blanco sin romper por ello su cadena de peones.

En esta posición la partida fue suspen­dida y el análisis me dio el convenci­miento de que la posición de las negras estaba ya perdida.

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SEFTIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 489

silla 4AD, con el caballo en circunstan­cias más ventajosas.

9 •..... , 0-0; 10.0-0, T1R; 11. D2A, C4T!?

Original maniobra de flanco, condu­cente a una interesante lucha táctica. En caso de 12. P4A, A5D+; 13. RlT, C(2)3A, las negras obtienen buenas perspectivas de ataque en relación con la amenaza 14 ...... , C5C.

12. AxC.

Cardinal solución del problema. Cier­que a cambio de los peones doblados so­bre la columna TR, las negras conservan la pareja de alfiles. Esto da al juego un carácter recíprocamente agudo. Si 12. TlD, es posible 12 ...... , C5A; 13. AlA, C4R; 14. C4A, P4CR, y los caballos ne­gros ocupan posiciones activas.

12. . .... , PxA; 13. C4A, C4R; 14. C3R, D5T; 15. A2D.

No lograba objetivo 15. C5C en vista de 15 ...... , D2R; 16. P4TD, P3TD; 17. C3A, P3C, y las negras concretan luego el avance P4C.

15 •..... , C5C; 16. CxC, PxC; 17. A4A.

No es suficientemente enérgico. Mejor parecía 17. C2R con la idea de trasladar el caballo a 3CR y el alfil a 3AD. Si entonces 17 ...... , P4A, seguir 18. C3C, PxP; 19. TRlR, devolviendo el peón.

A 17. C2R lo correcto es responder 17 ...... , A4A; 19. C3C, A3C; 20. TDlR, P4TR; 21. A3A, con posibilidades recí­procas.

17 ...... , D3A; 18. P3CR.

Difícilmente pueda aprobarse esta con­tinuación. Ahora las blancas tienen de­bilitada la posición del rey. Además, su peón rey no puede ser sostenido median­te P3A, merecía preferencia 18. D2D.

18. . ..... , A2D; 19. P4TD, P3C; 20. TR1R, P3TD.

La superioridad de las negras es indis­cutible; éstas preparan metódicamente el avance P4C, sin que las blancas estén en condiciones de oponerse a ello. Si 21. T3R entonces 21. ..... , D3C y después P4C. Las blancas no tienen contrajuego y se ven condenadas a una pasiva espec­tativa.

21. T2R, P4C!

Plenamente acertado. En caso de 22. PxP, PxP; 23. TxT, TxT; 24. P5R, T8T+; 25. R2C, PxP; 26. TxP, P5C; 27. C4R, D3TD, las amenazas de las negras de­ciden.

22. T(1)1R, D3C; 23. P3C, T2R; 24. D3D, TIC; 25. PxP, PxP; 26. P4C.

Impide 26 ...... , P5C, seguido de A4C. Pero ahora se forma un peón pasado de­fendido en la columna AD.

26 •..... , P5A; 27. D2D, T(1)1R; 28. T3R, P4T.

Las negras pueden no apresurarse a ganar el peón rey y proseguir reforzando la posición. Las blancas no disponen de jugadas útiles.

29. T(3)2R, R2T; 30. T3R, R1C.

Las negras repiten movimientos para ganar tiempo. Antes de entrar en la va­riante forzada con la ganancia del peón, quieren determinar el lugar más cómodo para su rey.

31. T(1)2R, AxC; 32. DxA, TxP; 33. TxT, TxT; 34. TxT, DxT.

Como resultado de la operación de cambio las negras ganaron un peón. Ha

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SEPTIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 491

traataque de las negras. Si las blancas hubieran tenido consciencia de todos los peligros de la posición, seguramente op­tarían ahora por la continuación 19. D3C, DxD; 20. PxD, A3T (o 20 ...... , P5T; 21. A4A, A3T; 22. T4A); 21. P4T, AxC; 22. PxA, A5D; 23. P3A, AxPR; 24. P4C, TRlD; 25. TRlD, A2A; con el resultado verosímil de tablas.

19. D2R, TD1D; 20. TD1D, TxT; 21. TxT, P4T!; 22. e6D, A1T; 23. A4A.

Se hace necesario adoptar urgentes medidas de defensa; el fuego de los alfi­les negros, de largo alcance, «perfora» todo el tablero, mientras el avance del peón TR amenaza conmover la posición del rey blanco.

23 ...... , P5T; 24. P3T.

En caso de 24. C4R, DxPR; 25. CxA, DxC; 26. P3T, TlC, las negras, con igual­dad de material, conservan la iniciativa.

24. . .... , A6R; 25. D4e.

Si 25. A3D, entonces 25. . .... , A5A; atacando el peón rey y amenazando si­multáneamente 26. . .... , D6C.

25 ...... , DxP.

El prosaico paso al final mediante 25 ...... , DxD; 26. PxD, A5A; 27. TlR, P6T; 28. AlA, P3A también dejaba no malas perspectivas. Pero el juego de ata­que por parte de las negras con la pre­sencia de damas está plenamente justi­ficado.

26. DxPT, P4e. Bien jugado. A 26. . .... , A4C se ha­

llaba la respuesta 27. D4D, D6C; 28. C4R, AxC; 29. DxA, A5A; 30. RlC, y las blan­cas mantienen el equilibrio.

27. D4e, A4A.

No logra objetivo 27. . .... , TlD a causa de 28. CxP!, TxT+; 29. DxT, D5R (29. . ..... , RxC; 30. D7D+, etc.); 30. C6T+, R2C; 31. DlAR!, y las blancas se salvan. Además de la jugada del texto,

también sería buena 27 ...... , R2C; 28. AlA, TlD; 29. C4A (29. CxP, TxT; 30. DxT, D4AR), 29 ...... , TxT; 30. DxD, D6C; 31. CxA (31. D4C, AxP+; 32. AxA, D8R+), 31. .... , DxP+; 32. RlC, DxC+; 33. RlT, D7A, y las blancas están en di­ficultades.

Si 28. TlR, entonces 28. . ..... , TlD. Sólo la jugada 28. A2R deja posibilidades de resistencia.

28. ese, R2e; 29. e4D, TlT.

No resultaba 29 ...... , A3D debido a 30. C5A+! Pero 29 ...... , TlD! conser-vaba la ventaja. Por ejemplo: 29. . .... , TlD; 30. C5A+, R3A; 31. C6T, R3C y se pierde el caballo. Contra 29. . ..... , TlD se hace obligado 30. P3A. Entonces sigue 30 ...... , TlT; 31. C3A, AxC; 32. DxA, A3D; 33. RlC, T5T, con ataque de­cisivo.

Mejores posibilidades de salvación des-pués de 29 ...... , TlD; 30. P3A, TlT deja 31. TlAR!

30. e3A, Axe; 31. DxA, A3D; 32. D3A.

Gracias a la clavada de la dama, las blancas se salvan. Fischer en esta par­tida literalmente logra «salir del agua sin mojarse». Ahora el juego entra en un final donde las posibilidades se equi­libran.

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492 AJEDREZ SEPTIEMBRE DE 1972

32 •..... , DxD; 33. PxD, A4R; 34. T7D, R3A; 35. R1C, AxP; 36. A2R, A4R; 37. R1A, T1AD; 38. A5T, T2A; 39. TxT, AxT.

Con el cambio de las torres el empate se torna inevitable. Siguió todavía:

40. P4TD, R2R; 41. R2R, P4A; 42. R3D, A4R; 43. P4A, R3D; 44. A7A, A6C; 45. .P5A+.

Tablas. Comentó Vasily Smyslov

* * * Comenta Miguel Tal

La segunda semana del match tuvo un desarrollo muy desafortunado para Spassky. Nos resulta sumamente dificil juzgar sus causas. Existen todos los fun­damentos para suponer que los despro­pósitos del pretendiente actuaron sobre los nervios de Spassky. Yo tengo la plena seguridad de que Boris no quería en ab­·soluto obtener el punto sin jugar, como ello ocurriera en la segunda partida, si bien no tenia derecho para discutir la ·decisión del árbitro principal.

No se excluye tampoco la posibilidad ·de que en el estado de ánimo del cam­peón del mundo haya influido el hecho de que ya en su análisis en casa hallara el procedimiento ganador en la cuarta partida. Como quiera que fuese, pero tanto la quinta como la sexta partidas las jugó Spassky con mucha inseguri­dad. Yo, como un antiguo amigo suyo, .en realidad hubiera preferido no comen­tar precisamente esos encuentros. Em­pero, la experiencia de competencias tan maratónicas indica que jugar semejante match con la misma fuerza y en un mis­mo alto nivel no ha logrado nadie. E inseparables de los momentos ascenden­tes, cada uno de los principales ajedre­cistas, ya fuese el campeón del mundo o -el pretendiente a ese título, ha tenido también sus fracasos.

Por eso pienso que los simpatizantes de Spassky no deben tener fundamentos para el pánico. El match es largo, la lu­cha prosigue y diré, adelantándome un poco, que en el plano de la forma depor­

. ti va del campeón del mundo los índices

barométricos en la segunda mitad de la séptima partida tenían un aspecto con­siderablemente más favorable para él.

DEFENSA NIMZOINDIA

Spassky v. Fischer

Quinta Partida l. P4D, CR3A; 2. P4AD, P3R; 3. C3AD,

A5C;4.C3A,P4A;5.P3R,C3A;6.A3D, AxC+.

Si la Defensa Nimzovich no se ha pre­sentado con tanta frecuencia en las par­tidas de Fischer, el sistema que ha em­pleado en esta partida no se había ob­servado en su actuación hasta ahora en absoluto. Las negras tratan de dar al juego un carácter cerrado, en el cual la pareja de alfiles blancos no obtendrá espacio. En forma semejante ya había tratado la apertura su inventor. En los últimos tiempos esta variante se pre­senta en las partidas de Korchnoi y de Hubner.

7. PxA, P3D; 8. P4R. La elección del plan es en considerable

medida cuestión de gusto. Así, por ejem­plo, Botvinnik se abstiene de adelantar el peón rey, tratando, después de P4R de las negras, de conservar la casilla 4R para las piezas.

8 •..... , P4R; 9. P5D, C2R; 10. C4T, P3TR •

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SEPTIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 493

11. P4A.

Muy enérgica en apariencia. Pero, qui­zás la siguiente jugada de Fischer ya hace dudar de que esta continuación sea la más fuerte. Me parece que tanto 11. P3A como 11. P3C no son, en todo caso, inferiores.

11 ...... , C3C.

Es suficiente una rápida mirada sobre la posición para convencerse de que la persecución de una ventaja material: 11. ..... , PxP; 12. AxP, P4CR, puede terminar tristemente para las negras después de la natural 13. P5R.

Fischer provoca el cambio de la última figura liviana blanca que podría alterar el carácter cerrado de la posición. En lo que respecta a los peones doblados, en primer lugar: el rey negro estará ubi­cado muy tranquilo, y, por otra parte, los peones 3AD y 4AD blancos tampoco embellecen la posición adversaria.

12. CxC, PxC; 13. PxP.

En mi opinión, las blancas no debieron apresurarse y definir la posición en el centro, pues si el cambio lo iniciara el adversario se animarían algo los alfiles blancos y difícilmente cabía temerlo. Sencillamente 13. 0-0, 0-0; 14. P3TR me gusta más.

13 ...... , PxP; 13. A3R.

Posiblemente después de este movi­miento las perspectivas de las negras se tornan preferibles. Spassky no encuen­tra un plan algo activo y permite a las negras realizar sin obstáculos la dispo­sición ideal de sus fuerzas. Las blancas podían luchar por la iniciativa, según me parece, sólo después de la continua­ción recomendada por Polugaievsky: 14. 0-0, 0-0 y 15. P4TD. En tal caso las negras tendrían que permitir ya sea el avance P5TD o (después de 15 ...... , P4TD; 16. T1C) a las blancas les resul­taría considerablemente más fácil coor-

dinar sus fuerzas en vista del posible traslado de la dama a 3CR.

14 ...... , P3C; 15. 0-0, 0-0; 16. P4TD.

Vierte agua en el molino adversario. En la presente situación, la prácticamen­te ya obligada respuesta de Fischer re­sulta ser sencillamente una fuerte ju­gada. La debilidad en la casilla 3CD de las negras no se percibe. Tanto ahora como igualmente después, las preocupa­ciones por el peón 4TD pueden llegar a ser para las blancas bastante gravosas.

16 ...... , P4TD; 17. TIC.

En realidad, jugado ya sin plan, pues es evidente que las negras podrán de­fender el peón 3CD sin dificultad. Quizás ya había que pensar, con fines de profi­laxis, en trasladar el alfil de las diago­nales blancas a 3A para impedir el salto del caballo a 4TR.

17 •..... , A2D; 18. T2C, TIC; 19. T(2)2A, D2R; 20. A2A, P4CR.

El gran maestro norteamericano re­fuerza gradualmente su posición.

Se ha creado una situación muy de su gusto: el rival debe esperar el des­arrollo de los acontecimientos.

21. A2D, DlR; 22. AlR, D3C; 23. D3D, C5T.

N o hay otro camino para reforzar la posición. Después del cambio de torres las negras conservan notoria superiori­dad posicional; pero ésta, evidentemen­te, por el momento no es suficiente para lograr cualesquiera objetivos reales.

24. TxT+, TxT; 25. TxT, RxT; 26. AlD.

Da la impresión de que a Spassky lo ha alterado mucho la marcha de los acontecimientos en esta partida. Después de la sencilla 26. P3C, yo creo que con­servaba una posición plenamente defen­dible. Al permitir al caballo enemigo ubi­carse en 5AR, las blancas dejan la par­tida bajo la directa amenaza de la de­rrota.

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494 AJEDREZ SEPTIEMBRE DE 1972

26 ...... , C5A; 27. D2A.

Semejantes descuidos son sumamente raros en la práctica del campeón del mundo. Yo personalmente puedo recor­dar un solo error similar: en la tercera partida del «Match del Siglo» con Lar1 sen. Por otra parte, la situación aquí de las blancas ya es alarmante. En respues­ta a la mejor, 27. D1C, las negras tras­ladarían el rey a 2AD, privando al rival del último contrajuego; luego, o comen­zarían a avanzar los peones del flanco

rey o tratarían de ubicar el caballo en la mejor casilla de bloqueo: 3D. Des­alojar el caballo de 5AR mediante P3C tampoco resulta en este caso muy con­veniente, ya que el caballo se acomoda con todo confort en 6TR. Por supuesto que nosotros sólo podemos conjeturar si el campeón del mundo salvaría esta par­tida o no. Mientras que ahora el desen­lace se presenta sin demora.

27 ...... , AxP.

Las blancas abandonaron. Después de 28. DxA, DxP la derrota

es inevitable. Antes de iniciarse el match, al hablar

de los participantes, todos los observa­dores sin excepción señalaban como uno de los defectos del pretendiente su limi­tado repertorio de aperturas, especial­mente notorio en el juego con las blan­cas. Está perfectamente claro que Fis­cher, a igual que Spassky, antes del match por el campeonato del mundo ha­brá realizado una gran labor y, natu­ralmente, pudo haber arribado a con­clusiones de lo más inesperadas. Una de tales conclusiones fue la primera ju­gada en la sexta partida del match.

Aiedrez Maratónico y Microscópico

1) PARTIDAS MARATONICAS

191 jugadas. Pilnik 1/2, Czerniak 1/2. Mar del Plata, 1950.

171 jugadas. Makogonov %, Tchejover 1/2. Bakú, 1945.

168 jugadas. Wolf 1, Duras O. Carlsbad, 1907.

161 jugadas. Duras O, Janowsky l. San Sebastián, 1911.

159 jugadas. Lipschütz O, Bird l. Nueva York, 1889.

Por Roberto l. Castaño

150 jugadas. Pilnik 1!2, Freitas 112. Mar del Plata, 1950.

144 jugadas. Mason O, Chigorin l. Monte­cario, 1902.

143 jugadas. Boleslavsky lf2, Radulesco 112. Bucarest, 1953.

141 jugadas. Pinkus 1, Denker O. Nueva York, 1941-42.

139 jugadas. Pillsbury lf2, Süchting 112. Hannover, 1902.

La partida más larga disputada en un match por el campeonato del mundo es:

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SEPTIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 495

121 jugadas. Tal lh, Botvinnik: lh. 201!­partida Campeonato Mundial 1961.

ll) PARTIDAS MICROSCOP:ICAS

2 jugadas. Se conoce como el «mate del loco)). 4 jugadas. Combe O, Hasenfuss l. Torneo de las Naciones, Folkestone, 1933.

4 jugadas. D. De Mingrelia 1, Doubra­va O.

5 jugadas. Michel 1, Iliesco O. Mar del Plata, 1943.

5 jugadas. Amillano 1, Loeffier O. V. Torneo Ab. Mar del Plata, 1972.

5 jugadas. Klein 1 (Ecuador), Mjagmar­suren O (Mogolia). Torneo de las Na­ciones, Leipzig, 1960.

5 jugadas. Palau 1 (Argentina), Kala­bar O (Yugoslavia). T. de las Nacio­nes, Londres, 1927.

6 jugadas. Kostjoerin 1 (Mónaco), Lant­sias O (Chipre). XVII Olimpíada (La Habana), 1966.

7 jugadas. Bartis O, Mazzoleni l. Torneo Metropolitano, Buenos Aires, 1970.

lli) RECORD MUNDIAL DE SIMULTANEAS A CmGAS

Lo tiene el ajedrecista húngaro Janos Fleech, que el 16 de octubre de 1960 jugó en Budapest 52 partidas sin ver el table­ro, de las cuales ganó 31, empató 18 y perdió 3, tras 12 horas de juego. El re­cord anterior estaba en poder del gran maestro argentino Miguel Najdorf, que el 24 y 25 de enero de 1947, en la Galería <<Prestes Maia)), de San Pablo (Brasil), jugó 45 partidas sin ver el tablero, con el siguiente resultado: 39 victorias, 4 ta­blas y 2 derrotas. La prueba se prolongó 22 horas y 40 minutos.

IV) RECORD MUNDIAL DE PARTIDAS SIMULTANEAS

Lo tiene el gran maestro argentino Mi­guel Najdorf, que el 14 y 15 de junio de

1950, en la galería «Prestes Maia:., de San Pablo (Brasil), jugó 250 partidas si­multáneas con el siguiente resultado: 227 victorias, 14 tablas y 9 derrotas. La prue­ba comenzó a las 20, y 34 horas, y ter­minó a las 7,55 del día siguiente.

V) RECORD MUNDIAL DE PARTIDAS CONSECUTIVAS

El 29 de agosto de 1941, el maestro sueco Gedeón Stahlberg inició en el Ins­tituto «Domingo Faustino Sarmiento», de Santos Lugares, provincia de Buenos Ai­res, una sesión de 400 partidas consecu­tivas en varias series de partidas simul­táneas, que se prolongó durante 36 horas. Resultado final: 364 victorias, 14 tablas y 22 derrotas.

VI) FANTASIA MICROSCOPICA DE MATE INVERSO

De Alejandro E. N. Brunt

Negras: 3 piezas

Blancas: 3 piezas

Juegan las blancas y obligan a las ne­gras a darle mate en cero (0) jugadas: l. PSC (pide peón negro, el cual pasa a ocupar su casilla de origen, o sea 2CR de las negras, quedando el rey blanco en posición de mate, sin ninguna jugada de las negras!).

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496 AJEDREZ SEPTIEMBRE DE 1972

Tercer Memorial Aleiandro Alekhine, Moscú, 1971 (1)

Para mí el ajedrez no es un juego sino un arte. Efectivamente; yo considero que el ajedrez es un arte y asumo las obli­gaciones que éste impone a sus adictos.

• + • Por medio del ajedrez he educado mi

carácter. El ajedrez, ante todo, enseña a ser objetivo. En ajedrez se puede Uegar a gran maestro sólo teniendo conciencia de sus propios errores y defectos, exacta­mente igual como en la vida.

• + • Considero indispensables para el éxito

los tres factores siguientes: 19 Comprensión de la fuerza propia y

de la debilidad. 29 N ación cabal de la fuerza y de la de­

bilidad del adversario. 39 Poseer un objetivo superior a una

momentánea satisfacción. Este obje­tivo lo veo en los logros científicos y artísticos que colocan el juego de ajedrez a la par de otras artes.

Alejandro Alekhine

TRABAJADOR DEL AJEDREZ

«No sólo como trabajador del ajedrez de largos años sino también como hom­bre que ha comprendido la enorme im­portancia de lo que ha sido logrado en la U.R.S.S. en todos los dominios de la vida cultural, envío un sincero saludo a los ajedrecistas de la U.R.S.S .... :.

Cita de una carta de felicitación en­viada por Alekhine con motivo del 189

(1) Comenzamos en este número, para conti­nuar en los posteriores, la publicación completa de este Importante torneo internacional.

aniversario de la revolución rusa. Asom­brosa autocaracterización: ¡Trabajador del Ajedrez! No los enormes éxitos de­portivos ni su título de campeón del mundo sino la labor volitiva y constan­temente orientada en pos de un objetivo fueron para Alekhine la cualidad más va­liosa de un ajedrecista. Así era en efecto. Desde su tierna infancia hasta su muer­te sorpresiva Alekhine jamás se separó de sus 32 amigos invariables, e inclusive el fin de su vida lo sorprendió haciendo un análisis de ajedrez .

Por primera vez se presentó Alekhine en la arena internacional en 1908, siendo un niño de 15 años, en el torneo de afi­cionados de Dusseldorf. Luego ganó sen­dos matches a Bardeleben y a Blumen­feld. A los 16 años ganó el torneo pan­ruso de aficionados y por primera vez recibió en Rusia el título de maestro.

En 1910 Alekhine intervino por pri­mera vez en el torneo internacional de Hamburgo, y desde entonces, en el trans­curso de 36 años, lograba siempre nuevos éxitos, inclusive (el mayor de ellos) la conquista del título de campeón del mun­do, que Alekhine (¡el único de entre sus colegas de título!) conservó hasta la muerte.

Pero Alekhine no llegó de inmediato a ser el más fuerte entre los fuertes (!). Un trabajo ininterrumpido, metódico y tenaz en el transcurso de toda su vida en el autoperfeccionamiento; una ince­sante búsqueda de nuevos caminos; un entrenamiento permanente; un análisis profundo, que obtuviera su reflejo en una serie de notables libros de Alekhine: ésos fueron los peldaños de la alta esca­lera por la cual Alekhine alcanzó el Olimpo.

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498 AJEDREZ SEPTIEMBRE DE 1972

INAUGURACION

El 23 de noviembre de 1971, en el Club Central de Ajedrez de la U.R.S.S. tuvo lugar la solemne inauguración del más importante torneo internacional, consa­grado a la memoria del gran maestro ruso Alejandro Alekhine.

Los participantes del torneo fueron presentados a la concurrencia por el di­rector del Club Central, doctor V. Ba­turinsky.

El vicepresidente del Comité Deportivo de la U.R.S.S., V. Ivonin, agradeció a todos los grandes maestros que respondie­ron a la invitación de participar en la destacada competencia, que indiscutible­mente sería un acontecimiento importan­te en la vida ajedrecística y dejaría una imborrable impresión en todos los aman­tes del juego-ciencia.

El vicepresidente de la F.I.D.E., B. Ro­dionov, destacó que el torneo donde par­ticipa el campeón del mundo y tres de sus predecesores, indefectiblemente en­riquecería el acervo del arte ajedrecís­tico mundial.

El árbitro principal del Memorial Ale­khine, gran maestro A. Kotov, anunció el reglamento de la competencia, según el cual las 17 ruedas se realizarían des­de el 24 de noviembre al 18 de diciembre en la Casa Central de Cultura de los fe­rroviarios, en tanto que las sesiones com­plementarias tendrían lugar en el Club Central de Ajedrez.

EL BAROMETRO ANUNCIA TEMPESTAD

El brillo del torneo circular no ha em­palidecido, a pesar de que en los últimos años han adquirido popularidad los mat­ches. Cada torneo tiene su estilo carac­terístico que lo distingue de otros tor­neos. Aquí tenemos 18 magníficos solis­tas, pero ¿cómo será el sonido de la or­questa? En el Memorial Alekhine no se realiza ninguna selección. Todos los par­ticipantes son grandes maestros y prác-

ticamente ya no pueden mejorar su ca­tegoría. Las excepciones son: V. Savón, V. Tukmakov y Y. Balashov. Estos toda­vía no han logrado el título de gran maestro internacional. De acuerdo con la escala propuesta por el profesor Elo, es un torneo de 141!- categoría. La más alta es 151!-. La norma para el rango de gran maestro aquí son 8 puntos. Un con­junto tan fuerte no había sido visto nun­ca por las paredes de la Casa Central de Cultura de los Ferroviarios, casa rica en recuerdos ajedrecísticos.

Al gran maestro búlgaro M. Bobotsov, que no llegó, lo reemplazó D. Bronstein, quien sólo se disponía a presenciar el torneo como espectador y a ilustrar sus alternativas en el diario «lzvestia». Ha­bía alcanzado a publicar cómputos de acuerdo con los coeficientes individuales de los participantes y ahora tendrá que introducir una corrección: su propio co­eficiente es superior al de Bobotsov. In­esperadamente se convirtió en espectador de la la. rueda V. Savon. Su adversa­rio, V. Hort se demoró en Praga, y en el escenario, bordeado con nueve table­ros murales, había ocho mesas dispues­tas por el sistema 3 - 3 - 2.

En la primera fila, en función de cen­tro delantero juega el dueño del campo B. Spassky. No está lejos su match por el título del más fuerte del mundo, y esto acrecienta el interés.

PRIMERA RUEDA

Korchnoi ..... . Stein ........ . Smyslov ..... . Savon ........ . Parma ....... . Olafsson ..... . Lengyel ..... . Gheorghiu ... . Byme ........ .

O Petrosian 1 1 Bronstein O

1h Tukmakov . . . . Y2 Y2 Hort .......... Y2 Y2 Karpov ....... % 1 Tal . . . . . . . . . . . O O Spassky . . . . . . . 1

Y2 Uhlmann . . . . . . % 1 Balashov . . . . . . O

Olafsson v. Tal

En el ex campeón del mundo, M. Tal, siempre y con toda razón se depositan las esperanzas como en el principal al-

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noo AJEDREZ SEPTIEMBRE DE 1972

Parma v. Karpov

El gran maestro más joven del torneo, A. Karpov, desarrolló con las negras el sistema Paulsen en la Defensa Siciliana contra B. Parma (a propósito: ambos rivales en su tiempo fueron campeones del mundo entre los jóvenes; también lucieron ese título, de los participantes del torneo, Spassky y Gheorghiu). Pron­to los contornos de la posición adquirie­ton un evidente «carácter francés». Par­ma cambió los alfiles que controlan las diagonales negras, lo que en la partida francesa suelen ser a menudo una carta de triunfo para las blancas. Pero Karpov maniobró tranquilamente y el ataque de las blancas no se desencadenó; apremia­do por el tiempo, Parma cometió un error que le costó un peón. En la posi­ción suspendida, Karpov y su entrena­dor Furman seguramente estarán bus­-cando el camino del triunfo.

Stein v. Bronstein

Bronstein cayó al escenario a último momento. De acuerdo con las supersti­ciones ajedrecísticas, tal circunstancia es la base de la fortuna. No obstante, su adversario decidió firmemente luchar contra las supersticiones. Con las blan­cas opuso contra las artimañas indias antiguas la estrategia clásica de ofensiva en el centro. La lucha se tornó compleja y enredada. Stein sacrificó calidad ob­teniendo peligrosos peones pasados. La partida quedó sin definir. <<Estoy, desde luego, en posición inferior», dijo Brons­tein.

En la primera jugada (l. P4AD, P4AD) Bronstein, por supuesto, pensó más de lo que acostumbran todos. ¡Eso ya es su monopolio!

Lengyel v. Spassky

El campeón del mundo, con las negras, hizo un desarrollo original de la Defen-

sa Holandesa y creó sutiles amenazas para el enroque (corto) adversario. Hu­b" un momento en que sus admiradores se amargaron: hizo una jugada apacible en lugar de ataque violento.

Empero, el desarrollo de los aconte­cimientos demostró que las negras con­trolaban el curso de la lucha. Mediante el sacrificio de calidad Spassky organi­zó un potente ataque.

NQ 1 - DEFENSA INDIA DEL REY

Bmyslov v. Tukmakov

l. C3AR. CR3A; 2. P4A, P3CR; 3. C3A, A2C; 4 P4R, P3D; 5. P4D, o-<>; 6. A2R, P4R; 7. P5D, P4TD; 8. o-o, C3T; 9. TlR, C4A; 10. AlA, C4T; 11. A5C, P3AR; 12. A3R, P3C; 13. P3TD, P4A; 14. PxP, AxP; 15. P4CO, PxP; 16. PxP, TxT; 17. DxT, C6D; 18. AxC, AxA; 19. C5CR, 020; 20. C6R, TlA; 21. P5A, PCxP; 22. PxP, A4A; 23. P6A, D2A; 24. D2T, C3A; 25. C5CR, D2R; 26. P3A, TlA; 27. C(5)4R, P3T; 28. CxC+, TxC; 29. D4A, T2A; 30. C4R, A3A; 31. TlT, R2T; 32. T7T, AxC; 33. DxA, OlA; 34. P4T, P4T; 35. P3C, A2C; 36. R2C, A3T; 37. A2A, R2C; 38. AlR, DlCD; 39. T7C, DlTO; 40. A3A, D7T+; 41. T2C, D6T; 42. D4CD, D3T; 43. D5C, D6T; 44. D3C, 04A; 45. T2R, R2T; 46. AlR, OSA; 47. A2A, A7D; 48. T4R, A4T; 49. T4T, A8R; 50. A3R, A7D; 51. T4AD, DxT; 52. DxD, AxA; 53. D4R, A4A; 54. D4T, TlA; 55. 04R, R2C; 56. R3T, T2A; 57. R2C, TlA; 58. P4A, PxP; 59. PXP, T2A; 60. R3A, A3C; 61. R2R, A4A; 62. D4T, T2R+; 63 R30, T6R+; 64. R2D, T2R; 65. OlT+, R2A; 66 DlAR, R3A; 67. OlT+, R2A; 68. P5A, T4R; 69. PxP+, RxP; 70. OlT, A3C; 71. 02C+, R4A; 72. 03A+. R3C; 73. R2A, R2C; 74. 02C+, R3A; 75. R30, T6R+; 76. R4A, T4R; 77. R5C, T4A; 78. 04R, T4R; 79. 03A+. T4A; 80. 03A+, R3C; 81. D4A, R3A; 82. R6T, R4R; 83. R7C, T7A; 84. 030, T4A; 85. R8A, R5A; 86. R7D, R5C; 87. 04R+, T5A

Tablas.

NQ 2 - DEFENSA SICILIANA

Parma v. Karpov

l. P4R, P4AD; 2. CR3A, P3R; 3. P40, PxP; 4. CxP, C03A; 5. C03A, P3TD; 6. P4A, 02A; 7. A3R, P4CD; 8. C3C, C3A; 9. A30, P3D; 10. o-O, A2R; 11. 03A, o-O; 12. P4TD, P5e; 13. ele, P4TO; 14. C(1)2D, A3T; 15. A2A, TRlA; 16. TDlR, P40; 17. P5R, e2D; 18. 03T, P3e; 19. RlT, elD; 20. C3A, D2e; 21. A4T, AxA; 22. OxA, e lA; 23. C (3e) 40, AxA; 24. PxA, 020; 25. ose, P4T; 26. 06T, e3A; 27. e5eD, e2R; 28. e(3) 40, e4A; 29. exe, PRxe, 30. 05e, T7A; 31. P3eD, T(l) lA; 32. 03e, P50; 33. 03A, T7e; 34. TleD, TxT; 35 TxT, e3R; 36 eso, T6A; 37. P3T, D3A; 38. 03eJ TSA+; 39. TxT, OxT+; 40. R2T, OxP; 41. e4A, D8A; 42. D3A, 08R; 43. 03e, 06A; 44. exP, R2e; 45. 03A. P5T; 46. e4A, DxPe; 47. P5T, D7T; 48. D7e, e4e; 49. P5R, D7AR; 50. PxP, OSe+; 51 RlT.

Tablas

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SEPTIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 501

NO 3 - DEFENSA UFIMTSEV (PIRC) Savon v. Hort

l. P4R, P3D; 2. P4D, C3AR; 3. CD3A, P3CR; 4. P4A, A2C; 5. C3A, G--0; 6. A3D, C3A; 7. P5A.

7 ...... , C5CD; 8. PxP, PTxP; 9. A5CR, CxA; 10. DxC, P4D; 11. P5R, A4A; 12. D3R, C5C; 13. D2D, P3AR; 14. P3TR, CxP; 15. PxC, PxA; 16. DxP+, DxD; 17. CXD, P3R; 18. C7R+, R2A; 19. CXA, PRxC; 20. Tll>, TD1R; 21. T7D+, RIC; 22. o--o, P5C; 23. PxP, PxP; 24. C2T, TxT+; 25. RxT, TxP; 26. TxP, T5R; 27. T8A+, R2A; 28. T7A+, RIC; 29. TBA+.

Tablas.

N9 4 - DEFENSA INDIA DEL REY (Por transposición)

Olafsson v. Tal

l. P4D, C3AR; 2. P4AD, P4A; 3. CR3A, PxP; 4. CxP, P3R; 5. C3AD, A5C; 6. C(4)5C, 0-0; 7. P3TD, AxC+; 8. CxA, P4D; 9. A5C, P3TR; 10. AxC, DxA; 11. P3R, TlD; 12. PxP, PxP; 13. D4D, D4C; 14. P4TR, D4A; 15. A3D, D3R; 16. 0-0-0, C3A; 17. D4AR, P5D; 18. PxP, TxP; 19. D7A, A2D; 20. TRlR, D3A; 21. T4R, TlAD??; 22. DxT+.

Las negras abandonaron.

N9 5 - DEFENSA SICILIANA

Byrne v. Balashov

l. P4R, P4AD; 2. CR3A, P3D; 3. P4D, PxP; 4. CxP, C3AR; 5. CD3A, P3TD; 6. A3R.

Continuación poco frecuente. Las blan­cas no temen 6. . .... , C5C, a lo cual puede seguir 7. A5CR, con juego agudo.

6 ...... , P4R.

Balashov pone en práctica el plan ha­bitual para esta variante. Merecía aten­ción la idea de pasar al carril de la va­riante Sheveningen buscando la cons-trucción 6 ...... , CD2D, 7 ...... , P3R, 8. . .... , P4CD, 9. . .... , A2C. En tal caso la ubicación del alfil blanco en 3R podía resultar prematura.

7. C3C, A3R; 8. D2D!

Maniobra fuerte. Las blancas logran evitar el avance 8. . .... , P4D, ya que después de 9. PxP, CxP; 10. 0-0-0, A5CD; 11. A4AD las negras pierden una pieza.

8 ...... , CD2D.

Era preferible 8. . .... , A2R, dejando libre la casilla 2D para la posible reti­rada del otro caballo.

9. P3A, A2R; 10. 0-0-0, TlAD; 11. P4C!

Byrne conduce la lucha en forma muy consecuente. La última jugada tiene por objetivo no solamente desalojar al ca­ballo de su posición activa, sino también crear la premisa para el ataque en el flanco rey.

11 ...... , C3C; 12. P5C, CR2D; 13. TIC, D2A; 14. RlC, C5A; 15. AxC, DxA; 16. P4TR, P4C; 17. D2C.

Se prepara para asumir la ofensiva en el flanco rey y para retomar con una pieza en 5D después de 17. . .... , P5C; 18. C5D, AxC, ya que el peón de 2AD ahora queda defendido.

17 ...... , P5C; 18. C5D, AlD; 19. P4A.

El gran maestro norteamericano ha obtenido ventaja posicional y además ha tomado la iniciativa totalmente en sus manos; por consiguiente, es muy natu­ral que Balashov haya decidido enredar el juego.

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504 AJEDREZ SEPTIEMBRE DE 1972

Spassky v. Gheorghiu

Una variante poco frecuente del siste­ma Saemisch condujo a una original po­sición, en la actual las blancas tenían la ventaja de la pareja de alfiles ... y peo­nes doblados débiles. Con operaciones consecuentes, el campeón del mundo con­siguió abrir el juego. En posición inferior Y agotadas por una penosa defensa, las negras se excedieron en el tiempo re­glamentarios.

Karpov v. Olafsson

En el sistema Paulsen Karpov optó por el esquema basado sobre 6. P4AD. Los partidarios de 6. A4AR están bus­cando actualmente nuevos caminos para el desarrollo de la iniciativa. Olafsson supo realizar el movimiento de libera-ción 14 ...... , P4D, lo cual, como ocurre a menudo, condujo a una gran simpli­ficación de la posición.

ltorchnoi v. Stein

Una lucha muy tensa se planteó en esta partida. La nueva e interesante con­tinuación 12. A4A condujo a un juego estratégicamente complejo y nada tri­vial. Las blancas irrumpieron por la co­lumna AR, no obstante lo cual Stein, después de un oportuno golpe en el flan-co dama (24 ...... , P5C) obtuvo contra-juego. Después se arribó a un final con alfiles de distinto color, que finalizó con la división del punto.

N° 10 - DEFENSA SICILIANA

Tukmakov v. savon

l. P4R, P4Al:>; 2. CR3A, P3D; 3. P4D, PxP; 4. CxP, eR3A; 5. C3AD, P3TD; 8. A2R, P3R; 7. Q-0, A2R; 8. P4A, D2A; 9. P4TD, esA; 10. RlT, Q-0; 11. ASR, A2D; 12. ese, e4T; lS, P5R, ClR; U. CxC, DxC; 15. D2D, D2A; 16. P5T, ASAD; 17. A4D, P3CR; 18. A3D, C2C; 19. C4R, AxC; 20, AlEA, P4D; 21. A3D, P4T; 22. PSCR, TD1A; 23, D2A, C4A; 24. A8C, D3A; 25. TR1R, R2C; 26. R1C, T1TR; 27. T2R, D2D; 28. R2C, TSA; 29. TllD, DlA; SO. T1CD, A4A; 31. AxA, TxA; S2. P4CD, T6A; 33. PGC, T6T; 34. D6C, D6A; 35. T2A, P5T; 36. P4C, P6T+; 37. R1T, CST; S8. T1C, T8T; 39. TxT, DxT+; 40. T1A, D6A; 41. PxP, PxP; 42. D1C, DxPT; 43. PSA, D7D.

Tablaa.

NO 11- DEFENSA INDIA DEL REY

Uhlmann v. Byme

1. P4D, CR3A; 2. P4AD, PSCR; S. C3AD, A2C; 4. P4R, P3D; 5. A2R, Q-0; 6. A5C, P3TR; 7. ASR, P4A; 8. PxP, D4T; 9. A2D, DxPA; 10. CSA, AGC; 11, o-o, CSA; 12. ASR, D4TD; 13. D2D, R2T; 14. P3TR, ASR; 15, P3T, TDlA; 16. P4CD, D1D; 17. TD1A, P4TD; 18. P5C, C1CD; 19. D2T, C(D)2D; 20. TR1D, C4A; 21, P5R, C(3)5R; 22. CxC, CXC; 23. D2A, C4A; 24. PxP, PxP; 25. C4D, D2R; 26. ASA, PST; 2'1. CxA, PxC; 28. A5T, TSAR; 29. P4T, C&C; 80. AxP+, R1C; 31. D4R, CXT; 82. Txe, P4D; 33, PxP, TxT+; 34. AxT, D4A; 35. A3R, DxPD; 38. P8C, DxD; 3'1. AxD, T2A; 38. A2A, AlA; 39. A(2)xP, AxP; 40. A3C, T2R; 41. P4C.

Tablas.

NI' 12 - DEFENSA SICILIANA

Karpov v. Olafsson

l. P4R, P4AD; 2. eRSA, CD3A; 3. P4D, PxP; 4. CXP, P3R; 5. C5C, P3D; 8, P4AD, e3A; 7 CU)3A, P3TD; 8. C3T, A2R; 9. A2R, Q-0; 10. Q-0, P3CD; 11. A3R, A2C; 12. TlA, TlC; 13. D2D, e4R; 14. P3A, P4D; 15. PAxP, PxP; 18. CXP, AxC; 17. PxA, CxP; 18. TR1D, CxA; 19. DxC, D1R; 20 DxC.

Tablas.

N9 13 -DEFENSA INDIA DEL REY Spassky v. Gheorghiu

l. P4D, C3AB; 2. P4AD, P3CR; 3. CD3A, A2C; 4. P4B, P3D; 5. P3A, P4A; 6. PxP, PxP; "l. DxD+ BxD; 8. A3B, CB2D; 9. 0-0-0, P3C; 10. P4A, AxC; 11. PxA, A2C; 12. C3A, BlB; 13. P5B, AxC; 14. PxA, P4A; 15. PxP, CxP; 16. P5A, C3A; 17. PxP, PxP; 18. A5C, B2A; 19. P4TB, TDlD; 20. TlB, T3D; 21. T2T, C2T; 22. A2D, C3A; 23. B2A, T3B; 24. TxT, BxT; 25. A3D, B2A; 26. A4A, C4TB; 27. A5C, C2C; 28. T3T, C4TB; 29. P4A, C3A; 30. T3C, TICK; 31. P5A, C4B; 32. PxP+, CxP; 33. T3B, CIA; 34. ASA, P3R; 35. A3T, T3C; 36. P4T, C(3)2T; 37. A4A, T3A.

Las negras perdieron por tiempo.

N9 14- APERTURA INGLESA Tal v. Lengyel

l. P4AD, P3B; 2. CB3A, CB3A; 3. C3A, A5C;4.D3C,P4A;5.P3C,C3A;6.P3TD, A4T; "l. A2C, P3TD; 8. 0-0, 0-0; 9. P3D, P3D; 10. TIC, TIC; 11. D2A, P4CD; 12. A5C, AxC; 13. DxA, P4B; 14. PxP, TxP; 15. P4CD P3T; 16. AxC, DxA; 17. PxP, TxP; 18. D2D, A5C; 19. CIR, C5D;

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506 AJEDREZ SEPTIEMBRE DE 1972

N9 16 - APERTURA SIMAGIN-LARSEN

Hort v. Parma

l. P3CD, P4AD; 2. CR3A, CD3A; 3. A2C, P4D; 4. P3R, C3A; 5. A5C, A2D; 6. 0-0, P3R; 7. PSD, A2R; 8. A(5)XC, AxA; 9. C5R, TlAD; 10. C2D, 0-0; 11. CxA, TxC; 12. D2R, TlA; 13. P4R, D2A; 14. P4TD, PxP; 15. PxP, D5A; 16. P3C, D5C; 17. DxD, CxD; 18. C4A, TR1D; 19. TR1D, R1A; 20. P3AR, C3A; 21. R2A, ClR; 22. A5R, ASA; 23. AxA, PxA; 24. R3R, R2R.

Tablas.

N9 17 - RUY LOPEZ

Bronsteln v. Smyslov

l. P4R, P4R; 2. C3AR, CD3A; 3. A5C, C3A; 4. 0-0, CXP; 5. T1R, C3D; 6. CXP, A2R; 7. A4T, CxC; 8. TxC, Q-0; 9. P4D, ASA; 10. TlR, C4A; 11. P3AD, P4D; 12. C2D, A2D.

Tablas.

NO 18 - DEFENSA GRtlNFELD (Por transposición)

Korchnol v. Steln

l. P4AD, CR3A; 2. CD3A, P4D; 3. PxP, CxP; 4. P4D, P3CR; 5. P4R, CxC; 6. PxC, A2C; 7. A4AD, 0-0; 8. C2R, P4A; 9. 0-0, C3AD; 10. A3R, D2A; 11. TlA, TlD; 12. A4A, D2D; 13. P5D, C4T; 14. A3D, P4R; 15. A3R, P5A; 16. A2A, D2R; 17. 020, P3C; 18. P4A, PxP; 19. AxPA, C3A; 20. T2A, C4R; 21. C4D, A2D; 22. T(l) lA.

22. . .... , P4CD; 23. AxC, DxA; 24. TxP, P5C; 25. DlR, PxP; 26. C3A, DSD; 27. C5C, TlAR; 28. R1T, P3TR; 29. TxT+, TxT; 30. TxT+, DxT; 31. C6R, AxC; 32. PxA, D3D; 33. D2A, D7D; 34. DxD, PxD; 35. R1C, R1A; 36. R2A, R2R; 37. R2R, A6A; 38. A4T, A5C; 39. A7D, P6A; 40. RlD, R3A; 41. A4T, RxP; 42. R2A, R4R; 43. A8R, P4C; 44. P3TR, RxP; 45. P4TD, R5A; 46. A5T, R6C; 47. A3A, R5T; 48. AlD.

Tablas.

Campeonato de Polonia Se jugó en la ciudad de Wroclaw del

8 al 25 de febrero ppdo., con 18 parti­cipantes, entre ellos el campeón del año anterior, maestro internacional W. Schmidt, como también los ex varias ve­ces campeones y maestros internaciona­les E. Kostro y Z. Doda.

La lucha fue sumamente tensa hasta el final, pues los resultados del torneo también debían determinar la conforma­ción del equipo nacional para la próxima Olimpíadas Internacional de Ajedrez.

Con sorpresa para muchos, el título de mejor ajedrecista de la república fue conquistado por el maestro Zszisztof Py­tel con lllf2 puntos sobre 17. También hubo sorpresas en los puestos subsiguien­tes de la tabla de posiciones. A medio punto del ganador, terminó segundo el

maestro veintiañero A. Sznapik. Ahora ya se puede decir que la cuestión del primer puesto la decidió en realidad la partida que poco antes de terminar el torneo disputaron entre sí los nombrados ajedrecistas.

En un momento dado, en el tablero se presentó una posición de tablas, pero Sznapik iba atrasado y, tratando de ga­nar a toda costa, se dejó llevar por la tentación, arriesgó demasiado y perdió.

39 y 49 finalizaron Bednarski y Schmidt con 10%. 59 Sliva con 10. Los siguientes tres participantes, Doda, Petrusiak y Gon§iorowski, reunieron 9Ih cada uno. J. Kostro, uno de los favoritos, actuó con muy poco acierto y ocupó uno de los últimos lugares.

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SEPTIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 509>

LA FANTASIA EN AJEDREZ

N9 IS - M. s. Locker "Problemas", 1969 (3 x 2)

SERIE NEGRA.

Mate de ayuda en 18

Las negras realizan 18 jugadas seguidas y luego las blancas dan mate en su primera movida

N9 6 - Eduardo Kelly (inédito)

Ahogado con ayuda en 4

Juegan las negras (3 x 4)

Por Virgilio Fenoglio

l\9 7 - José M. Martínez (4 "2) "Schach-Echo", 1969

Mate de ayuda en 2

Gemelo: en lugar del alfil negro una torre negra (4 x 2). Mate en dos jugadas, ayudado.

NO ,8 - R. C. Galll (3I4)

"Ajedrez Mágico" - Septiembre 1970

Mate de ayuda en 3 Juegan primero las negras

Los problemas Nros. 6, 7 y 8 pertenecen a miem­bros de la "Pefia del mate ayudado" - (Bs. Aires)

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510 AJEDREZ SEPTIEMBRE DE 1972

Macedonia Olimpíada - 1972

II

En esta parte de la Península Balcánica Jos vestiglos arqueológicos Indican también un subs­tratum pre-inrZoeuropeo, que, en el siglo pasado, fue rotulado bajo el titulo de •camltlco'. se co­noce Inclusive una escuela filológica tildada como 'pelasgomanla'.

Los documentos, que Jas excavaciones ofrecen, cada dla más novedosos y convincentes, comprue­ban la presencia de corrientes migratorias pre y protohistóricas hacia el Medlodla desde el sep­tentrión, donde, en el Paleolltico, existía una ex­tensión lacustre de 50.000 km2 ., denominada el 'Lago Gético' por los geólogos. En su Jugar apareció, formado por Jos aluviones del caudaloso Danubio durante milenios, el Baragan, planicie rumana que cubre Jos yacimientos petrolíferos, la 'pampa' va­Jaca prolongada en el Bugeac moldavo. A las ori­llas de ese ambiente natural, parece haberse per­feccionado e¡ proceso antropogenétlco del hombre europeo. Esas agrupaciones aborlgenes, con sus culturas y clvlllzaclones escalonadas sin Interrup­ción, podrla decirse, hasta nuestros dlas, se es­parcieron alrededor a medida que las condiciones climáticas deshelaban Jos glaciares. El mismo avan­ce del bronce lo demuestra: en el Iller. milenio a. c., con sus más primitivos moldes en el valle del Danubio, el bronce dominaba al mismo tiempo en Sumer y en e¡ espacio egelco; hacia el afio 2000 llegaba a Bohemia y alrededor del 1600 entraba en Dinamarca; recién en el 1er. milenio a. c. el hombre lo llevaba más allá de los Urales, en la estepa siberiana. Las tlplcas cerámicas, Jos uten­slllos de aquel antepasado hacedor y sus armas (predomina el corto sable corvo, originado en el modelo de la hoz, Invento de esta primera cultura agraria) llenan los museos de los paises balcáni­cos, donde casi no hay aldea sin jactarse con el suyo.

Empezando aproximadamente en el afio 1900 a. C., otras migraciones, Igual desde el norte, em­pujaron pueblos enteros y Jos desplazaron primero hacia el Peloponeso. Parte de Jos Tracios (1), de los Frigios y de los Misios se establecieron entre Jos pueblos asiánlcos (lyci, lyrZi, cari, luvi, hattili, nesiti, etc. l del Asia Menor, donde se diversifi­caron otros procesos etnogenéticos. Hacía el si­glo XII a. c., desde la región de Lusatia (Alema­nia Oriental), desde Bohemia y Transilvania. ba­jaron nuevos Indoeuropeos (lE¡ de la familia de

01 El Primer Congreso rZe Traciologia tuvo lugar en Bulgarla (Sofía, 5/10 de julio de 1972), organl­:<ado por los académicos v. I. Georgiev y Dlmlter P. Dimitrov. Se trató también el tema del posible origen local de la escritura, basándose los espe­cialistas en Jos datos arqueológicos descubiertos por Nicolae Vlassa (IV milenio a. c. en Transil­vanla), y en aquellos de Bulgaria (Karanovo y Graclanica, III milenio a. C ) .

Por Dumitru Taraoiu

los Ilirios. cuyos vestiglos sobrevivieron entre los itálicos y más aún en Dacia (2), lo que parece ha­ber repercutido en el avance de los aqueos, quie­nes, empufiando sus armas nuevas de hierro, des­truyeron la ConterZeración Troyana y con ella el resplandeciente periodo del bronce descartado en cuanto utilidad bélica.

Al entrar en la Historia, los Macedonios son ya una amalgama, una resultante del substratum pelasgo y de Jos IE definidos como tracias, Ilirios y griegos. Pero aunque Estrabón habla dejado constancia clara sobre la existencia de una nueva comunidad humana, de un pueblo diferente, ellos fueron considerados más ilirios (N. Iorga), más helénicos (Otto Hottmann y M. Kiessling), o más tracias por otros Investigadores.

En la Península Calcidica, vlvla la tribu tracia de los Migdoni, vocablo transmitido por los griegos, naturalmente, alterado en su fonética. El nombre de la ciudad de Mikene está emparentado. Homero habla del 5Q pueblo cretense, aquel de los KirZoní. No es arriesgado, pues, intentar descubrir el mismo onomástico de MacerZonia, a pesar de sus norma­les cambios de pronunciación y de sus grafías: Mi[a 1 + k[g]doni[a].

Los tractos (se conocen unas cien denominacio­nes tribales o regionales) dejaron como herencia sus hondos vestiglos en la cultura clásica. Aparte de las obras de arte, Clement de Aleiandria enu­mera: Esquilo y Sófocles eran tracias; Platón pres­tó de ellos los 'santos epodos' y aprendió de un sacerdote (sarablteru) de Zamolxe la curación del alma; Hipócrates estudió la medicina de Herodicos. un traclo de Seymbre, y juró por sus leyes; la madre de Demóstenes era tracia, como también la mujer de Iphicratos; Tuc!dldes era medio tracto; Aristóteles era macedonio.

Herodoto ofrece Jos primeros datos historiográ­ficos. Nos enteramos de que el fundador del reino macedonio fue Perdicas (a. 729-678), apellido con­tinuado hasta hoy por los arumáni del lugar, y tuvo la capital en Aegae, llamada Juego Edesa 1la aldea actual de vodena). Felipe II trasladó la ca­pital en la provincia de Migdonia, ciudad de Pella, donde nació Aleiandro Magno. la genial persona­lidad que gestó por sus hazafias la unificación del mundo antiguo, aun gastando la energía vital de casi todo su pueblo. Aristóteles, el genio orienta­dor de la cultura humana, discípulo de Platón pero adversario de éste y continuador del espíritu cien­tífico de Demócrito, habla inculcado en la edu­cación del pequefio rublo Alejandro la necesidad histórica para difundir aquella cultura tracia en sus orígenes, cuyos nombres de dioses y cuya fi­losofía de Jos misterios asimilaron los griegos (3). El nuevo imperio macedónico significó un reen-

121 Massimo Pallottino. Etruscologia, Buenos Al­res (1965).

(31 Según HesiorZo Cf V. Magnien: Les Mystere d' Eleusis, Parls (1950).

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SEPTIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 511

cuentro de las tradiciones y de las variantes cul­turales m de la India, de Babilonia, Persla y Egipto, camino predestinado hacia un proceso sln­crétlco primero, proceso que Iba a originar la revelada alntesls espiritual cristiana. cuando los apóstoles en Betanta (dentro del área de los ri­tuales aramaleos y luego del rito mosaico) avisa­ron que lo querían visitar unos viajeros de habla griega, CRISTO aceptó hablarles (Juan, 12, 20-26) pero del misterio que encierra en si la muerte fruetffera del grano de trigo, origen de la euca­dstia, lo que constituía la esencia litúrgica en Eleusls del culto de la gran Diosa Madre, Deme­ter. Según Maccioro (Orjeo e Paolo), el llbro aa­grado de los órficos (teniendo éstos por dios su­premo a Zamolze, de los Dacios), denominado Dta­thekat <= Testamento) fue traído como aporte bá­sico por los cristianos de la primera hora, Incor­porándolo en la nueva forma religiosa.

Desde Macedonia se perfeccionó el largo proceso de unificación espiritual hacia una conciencia uni­versal. Faltaba aún el devenir histórico, el as­pecto material, cuyo genio estaba personificado en Roma, con su Ideal de restablecer el mítico equi­librio arcaico deshecho por la calda de Troya. Roma persiguió el 'cumplimiento del milenio' y en éste su Itinerario llegó a Macedonia como conti­nuadora de Alejandro Magno. El último rey (4), Perseu (a. 168), vencido, fue llevado en cautividad a Roma, donde pereció atrozmente torturado: no se lo dejó cerrar los ojos (5). Pero los patricios del Imperio fueron eximidos de Impuestos por 150 afios (6). Tan grande fue el botln que los romanos sacaron de Macedonia, donde, solamente en la pro­vincia de Eptro, quemaron 70 ciudades, Un botln que, en rigor a la verdad, lo hablan traldo los victoriosos macedonios al saquear las ciudades per­sas, cuyos amos, a su vez . . . Andriscus, nieto de Perseu, organizó el último Intento de salvación nacional, pero los traclos, sus vecinos, no encontra­ron politica mejor que entregarlo a los vencedores (a. 148). Roma transformó al otrora centro del mundo antiguo IE, Macedonia, en una simple pro­vincia (a. 146). Ciento cincuenta mil macedonios (7) fueron trasladados a los latifundios Itálicos, siendo reemplazados por elementos romanos. A esto pro­bablemente se refiere Ovidto cuando dice que en la ciudad de Tomis, junto al Mar Negro, donde vivía exilado por Augustus, los Getas hablaban como en Jos suburbios de Roma. La romanización de Europa empezó desde Macedonia hacia el norte: Tracia iprimero), Moesla, Iliria (a. 9), Pannonia (a. 6 d. C.) y, por último, Dacia (a. 107). As! aparece en la Historia la .Romanitas Orientalis, que marca la grandeza del Imperio, cuyas consecuencias son ya universales: orden jur!dlco mundialmente vá­lido. la evolución cultural y la dirección religiosa; Inclusive las Américas (desde California hasta Ma­gallanes), habla su idioma hispanizado.

Al incorporar a los Macedonios, con su espíritu y su destino histórico claramente delineado por Aristóte!e& y por Alejandro Magno, se concretó la fase grandiosa, pero cruel, del imperio romano, llegándose, después de la conquista de Dacia por Trajano, a su máxima extensión. En aquel afio (107), también Dacia fue transformada en provin­cia, y las primeras series de veteranos, colonizados en este último reducto histórico del mundo traco­dacio, pertenecieron a la V-a Legión Macedónica, establecida en potaissa (actualmente Turda, en Transilvania).

(4) Tito Livio, libro XLIII 15) Plutarco, libro Pau!o Emilio, XXXII. 16) Jbid. 17) Tito Livio, ib

Estos pueblos balcánicos, en cuanto idioma • Instituciones latinizados y hasta el siglo vn proto­rumanos, prolongaron un milenio más la existen­cia misma de Roma y su misión continental, Inclu­sive bajo la forma bizantina. Desde el siglo VII y desde el mismo norte danublano, otras migracio­nes de pueblos IE, que no hablan sido alcanzados por el proceso de romanización, bajaron hacia el sur. Entre éstos, los eslavos, nombre genéricos y designación más bien llngü!stlca. Descendientes de aquellos establecidos en Macedonia, surgieron los hermanos Metodto y Ctrilo, que supieron adaptar, de los signos tradicionales y de las letras griegas. un alfabeto apropiado para el Idioma llamado el paleoeslavo. Lograron as!, junto con Clement, su adicto y todavía de habla rumana, que fuera re­conocido como tercera lengua litúrgica (bajo los papas Adrtdn II y Juan VIII), y determinaron la catequizaclón apostólica de los eslavos del norte, de algunos tribus germánicas y de los lituanos. sus esfuerzos se concretaron en el poderlo orto­doxo moscovita bajo el mito de la Tercera Roma.

Con la calda de Btzancto (a. 1453), hombro a hombro con los demás pueblos del sudeste europeo, los macedonios soportaron la dominación turca. Hasta el principio de este siglo, casi todas las revoluciones sociales y de liberación nacional en los Balcanes se originaron en Macedonia.

Desde su República Autónoma, los macedonioa, que llevan en su sangre las cualidades humanas seleccionadas antes ya de los albores de la His­toria, 1'esptran 11 anhelan.

La mayor gesta deportivo-intelectual, entre sus mejores pensadores en acción frente al tablero, la actual Olimpiada de ajedrez, lleva consigo a Sko· plle también un sello de buen augurio.

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512 AJEDREZ SEPTIEMBRE DE 1972

11 Torneo Escolar de Aiedrez Ciudad de Buenos Aires

Salón de juego en el Instituto Manuel Belgrano (Pampa 2210, Capital) en el día inaugural

El 19 de agosto prox1mo pasado dio comienzo la denominada fase externa de este certamen, reservado para alumnos de escolaridad primaria dependientes de los siguientes organismos: Consejo Na­cional de Educación, Superintendencia Nacional de la Enseñanza Privada y Ad­ministración Nacional de Educación Me­dia y Superior, del Ministerio de Cul­tura y Educación, establecidos en ju­risdicción de la Capital Federal.

La primera de las cuatro etapas de la mencionada fase, tuvo como escenario 25 colegios, en los que participaron 1.200 niños.

La Vascongada S. A., otorgará pre­mios a los alumnos mejor clasificados y a los establecimientos cuyos represen­tantes hayan acumulado mayor número de puntos consideradas todas las etapas del torneo.

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SEPTIEMBRE DE 1972 AJEDREZ 513

SOLUCIONES A ¿COMO SE GANA? (De la página 481)

NI! l. Puiggrós - Pedrosa, Buenos Aires, 1970. l. AxP+, RxA; 2. D4A+, RlA; 3. C6T!

N9 2. Suetin-Nielsen, Copenhague, 1965. l. AxP, PxA; 2. T7D!, CxT; 3. DxC+, RlA; 4. D7T ganando.

N9 3. Barcza-Torma, Debrecen 1969. l. CxP!, TxC; 2. T7A, RlA; 3. AxT, RxA; 4. T(l)lA ganando.

N9 4. Libich - Bradacek, Checoslovaquia 1953. l. AxP+, RxA; 2. C5R+, RlR; 3. D6C+, R2R; 4. D7A+, R3D; 5. C4A+, R4A; 6. D5D+, R5C; 7. A2D+, R5T; 8. P3C mate.

SOLUCIONES A PROBLEMAS (De la página 484)

N'! l. l. D7C! NI! 2. l. T7D! N9 3. l. P8C=T!, R6T; 2. T4CD, R7T;

3. T8T mate. l ...... , R6C; 2. T2C, R6T; 3. T3A mate.

Si l. P8C=D? (no ..... , R8T?; 2. T2A, R1C; 3. D2T mate), R6T! y el rey se escapa del mate en tres.

N'! 4. l. C8A!, R4D; 2. R3D, R5A; 3. D6C+, R4D; 4. D6D mate.

Aparecerá

Suplemento N'! 32

XXXIX Campeonato Soviético

(Leningrado) - 1971

Contiene las 232 partidas dispu­tadas entre los 22 participantes.

Los principales puestos fueron ocupados por: Savon, Smyslov, Tal, Karpov, Balashov, Stein, Brons­tein, Polugaievsky, Taimanov, Ka­pengut, Krogius, Lein, Platonov, Geller, etc.

SOLUCIONES DE «LA FANTASIA EN AJEDREZ»

(De las páginas 508/09)

N9 l. (Dr. O. T. Blathy) :: l. RxC, D8T; 2. P3T!!, ..... ; 7. P8T=C, 8. C7A, 9. C8D, 10. C6R, 11. CxP, 12. C7C, 13. C5T, 14. CxP, 15. C5T, DST; 16. CxT mate (si 2. P4T?, no será posible dar mate con el caballo).

N9 2. (E. Skowronek): l. A6D, P4T; 2. P5A, P5T+; 3. R4A, P6T; 4. R5D, P7T; 5. P4A, PxA=cualquiera; 6. T6A+, CxT (doble) mate.

N9 3. (Autor anónimo): l. P3A, PxP; 2. RlA, P7A; 3. P4R, PxP; 4. RxP, P6R+; 5. RlR, P7R; 6. P5D, PxP; 7. RxP, P5D; 8. R2D, P6D; 9. P6A, PxP; 10. RxP, R2C; 11. R4A, RlT; 12. R5A, R2C; 13. R6D, P4A; 14. P8T=D+, RxD; 15. R7A, y mate en tres.

N9 4. (V. Fenoglio): Las blancas devuel­ven l. 0-0-0?? y juegan l. T3T mate.

NI! 5. (M. S. Locker): De la jugada 1 a la 8 el R realiza un recorrido has­ta situarse en 6R; sigue después 9. P8C=A, 10. A7A, 11. ASR; 12 a 17 vuelve el rey negro situándose en la casilla 3TD; 18. A4T- l. ASA mate.

N'! 6. (E. Kelly): l. P8A=A; C7A, A4C; CxA, P8C=C; CxP, C6A; 4. CxC (ahogado).

N9 7. (J. M. Martínez): l. . .... , AxP; 0-0-0, R6C; 2. T3D mate. Ge-melo: l ...... , TlTD; T4CD, T5T; 2. T3C mate.

N9 8. (R. C. Galli): l. . .... , A2T; A6C, T4A; AlC, A6D; 3. A2T mate.

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