Fabricante de Sueños

8/6/2019 Fabricante de Sueños

http://slidepdf.com/reader/full/fabricante-de-suenos 1/35





Alvaro Morales RI'~s

abricantede suefios

* * *Co .ip , robac io l1 :es

-- --- -

, ~·l.A1/1i,I . ~'ANE . . " - I I

. ----

[hi rO~E~



Primera edicion: noviembre 1991

Reservados todos los derechos

© 1991

Alvaro Morales RiDS

© 1991PLAZA & JANES

Editores Colombia Ltda.

Calle 23 No.7· 84

Santafe de Bogota, D. C., Colombia

ISBN 958-14-0221-7

Preparacion editorial: Divulgar Editores Ltda.

Impreso por: Tercer Mundo Editores

Printed inColombia



Fabricantede suefios



A A ,d ,.io .n a , U : a r ill ~I

esposaY '

soporte 'dem li li,m o'g inac ion ,.

A,Vero ' l1 l , i l c a : ,

p 'e 'que i ia , fr 't lcc ' il )ll I, d e !

u:ni lJerso q 1 u e l iustif i '~'Q

su tOltal idad', .



O·l :gen,

D· .. -t o boca-s c ... '," ~"i',I,--,'-lb"-' '.',.,.'-'t>n11 1 - b , . , " , , . " , , ' , 1,,- nd'.",rI,n , '"' " '. o c a ,,. ,s eno r,a m i a " S ,U nomre eS 'LaJ 8L a ,enl,eyenas

Y 'a"l 'enturas, de ' siglos ido s .Su va lo r, su clandes t ine pasion"

pa rec /f a ir e s tr emec iendo 1 0 ' que en tn silen cio ,Runcahab fas

'VI· ly l; l i 'O~'ra , 0 · · . . pe, , ! C . "9,r de s ' , U · . o ro " p - ' . , : 1 · . : 8 ' .h l sto ' .'~a- ' )1 a -qu ' , e ' ~ 'h : u - b ' . · · ' + 1 ' e ra ' S < '" ', _ ,IU .. ~, " ,' ' " . , ." '_ , ' , ,.'1"11 , ,_" '", "','" .·,iIl, , ""," ,', '. ' """, .'.

-;- '. ',' '.'. c,,'" ,n·, 1 1 , ' . d "." ' • •b s " .,'.',' .'., ,·...._·,-L", •.•....o t e l b e l l equo' VIV,I,r~ r8,laea,as su nomore: ,-3nce, ,0 e ll , . , 0,

el mejorde todos los caballeros, ,e i eterno enamorado de.....', ')I " I ·d d A ' "£': 5 U - s en ora .ie ,I,e ars erv ie or c e su rey,.>,sll'ue" maestra,

como esapasion elema,.-pa so a mis propias debilidadea y

se file convirtiendo en deseo illmite. Armame, le gritaba

a la nochev p a ra qu e e lla te co n ta ra de m i a sp iracio n .

Dame las armas, l , a fuerza, la integridad de tu soledad,

I d e t u nostalgia. D~Jaque es te p equ e fio ap rendiz de ceba....Ilero recoja en tu simiente la de 61,~Asf me in sp ira ra s 'e SI

tem pes tu o sa vo lu n tad, p a ra . qu e e n . su tiempo y e o m l

esp acio p u eda ejercer el mejo r de to do s lo s o ficio s de la

caballerfa.la pasion p o r ti, seno r a mfa...

9



N-_.

,lb,IO

No v:a lY..··.3 " s a esca pa.. d e ' m ! - ' C I " me m '0 , · r · l - a · · . seno ra R e C ". ue r· · d ·a_ . '_ ' _ ,.,1 r ,__ • __ , • _ :_ I _ - _ ,I _ _ . ', '_ '. - ," " ,,_:_, , -.:I,I-..:!!! I". r ._ _ ~ i

queentre tu s recuerdos vive un nino simple q ue te deseo

desde la so ledad Ide ),0 ingenue que tie indujo a p en sa r

le n el pecado, [e n Ia pureza de es e pecado, Sonrfe se f io ra ,

como cuando estas guardada bajo la almohada blanca de

mi corta historia; :00 olvides que e se es m i a lim en to , m .iul t im'o recurso contra el tiempo, Ya sabes que des[p ue s

de morir, entremis huesos conse rva re tu des /e o ..

10



Lucha

S610 fue necesario que sonrieras para que toda la fuerza

visitara mi alma inquieta. Alli debera pennanecer hasta

que la luz etema que emana de tu sonrisa se apague. EI

objeto de mi lucha es impedirlo.

11



Can sado de du ra , Y la rg a s batallas Lance l o t decline sus

a rmas , ba j l6 de SU , montara y qu iso de scan ss r ju n to a u n

athol humedo ,., In va did o p o r u n can san cio secu la r em pez6

a olvidarlas razones de S , ' U luchac Decididc a no dejarse

sorprender por n ada , .1 0 so rp rendio una doncella toda

b lan ca qu e con vo z te n u e in dag ab a p o r su suerte, "Esque acabo de olvidar quien soy"'_ respondio, HEres Lan-

celot", afirmo la 'blanca doncella .. "Que tonto soy" se

dijo, 'he perdido otra bata l la y yano cuento con mis

armas", Mira a ia doncella y so l o , recibio de ella una

mirada por montara y una sonrisa por espada, Aunhoy

se ve a Lan ce lo t vag a r p a r lo s m as extra fio s cam p o s de

b u ']' ,',', ~"ndo - 'J - o d " e - ' de U'-,"'-,---"',, 0-'~ " e ' ' - , r-,' -,

xuaua, ensenanoo e p __ u~ $ .1 S armas, tncen que av ,e c -e sle acom pa fia unamujer, blanca toda "y cuando esto

su cede to do se llen a de ca lo r y depaz, La historia cuen t a

qu e Lan ce lo t e s irn b a tib le ; qu e to da su fu e rza e s ta s iem p re

pres ta a derrotar , de nuevo, a 'fa tristeza,

1'2



Cuando los dos homibres aparecieron e intentaron robar

,8 la nina la poca temura que lie quedaba, aparecio el,

como un caballero medievalv y la arrebato al peligro.

Huye r o n despavoridos mientras la nifia sollozaba ICO'D

IUS ,tope ro CO lDun renovado brillo en sus o jos y una hicida

onri a, De esta manera, fortuita, la n i na podria seguir'__ camino y llegar adonde tenia que Ilegar. Pecos dias

de pu e s los salteadores Ie buscaron para, tomar venganza ,~'l I · d '. huvo E _,'- I--·, ..·. ," ',, '.- I -""~ . -, ,, -. :~.: - _-. ',,", :. =r. _ . - -."' .- .'- ".-: .: '," I - ", , ,I ' -,," ..oero e , contra er consejo __ sus amigos, no uyo, espero

len su sitio CO lD una serenidad que por sf misma infundla

ternor. Allf le encontraron y quisieron arrebatarle la vida"

ero las armas que intentaban despojarle I d e su aliento

'vital no surtian efecto: se desviaban 0 no llegaban, La

gent le" sorprendida, no a tinaba a descubrir por qu e le i n i... '. b d " ' h "1aquiera miraoa a sus aaversanos, que _uy e r o n ante ta

prodigio. 'y aunque quisieran no habrian podido descu-

b ri r a ' 1 0 ' le jo s ·1- son ri s a- iri d I ~ S 'ce nte de ' la n ," '-a ,_ " i ': .1 .1 ,_ . - . . ' · · I J , . . · .. ~ 1 , I . · . ~ " . ': : . I . _ , _ _ : , . l _ "I. _ _.1 1 I~ __ .. " ,1 . , . , , ' , _ _ ' ,. . '_ , ' , . IP r , ' , ' . '

13



Lluvia

Encerrado 'e n la 'mas, profunda mazmorra de l castillo,

Lancelot sinti6 un amanecer nuevo" sin verlo, Supo que

caminabas pausadamentepor un sendero del bosque, en

busca de un. poco die calor. Sintio deseos de poseerte, de

invadir las mas reconditas partes de tu cuerpo, Haeiendo

uso ,de los prodigies otorgados por e l valor del de s e o , se ,convirti6 en lluvia, fue a buscarte, y despue s de encon-

trarte I c a y ' o sobre ti con sus gotas calidas, cristalinas, Y

tu piel se fue mojando de una deliciosa posesion, Lancelot

adn p e rm anece en e l castillo, pero p ron t o saldra, Mien t r a s

tanto, cada que quieres, recuerdas ese instante primero

y 't -es ien te a hi imeda , die calor , Lancelot, en su mazmorra ,

se re tu e rce de p lace r .





Viaje

Atin recuerdo l e s e , instante en 'que me decidf aviajarhacia

tu noche, atu 'mirada habitada por tinieblas. Mi brioso

co rce l a u n n o hab fa extraviado e l rum bo p e ro fue precise

que bajaras tu puente. Asi, sin llevar Ialuz, Lancelot

penetro entu ciudad y se hizo el dla que juntos pudimos

contemplar, esperanzados y absortos .. La neche parecia.. I hi 0' d i " J id ) . ,J':.~,· -~-I-"'I": ",-, .-' I . _ - ' , " I : · · ' : - " 1 " ' , " _ - : . : ; - : ' - , - - ' - - " - , , _ ' _ : - . : 1 - - ~ " rrr ..-~ .... -,.:- 'I ':~, _- - · - ' ~ ' r . : - : 1,, ,"-,"" « : 1 ' " , : , , ' , , , , , ': : - ;.1Slmp)c ,.,rstona cuanao esa aurora ca 1_a nos envorvic Y

permitie quehabitara en ti basta otm atardecerqne llorarfa

luego m i auseneia ..Recuerdo que t uve quepartir 8. librar

n u eva s b a ta lla sv p e ro siernpre Icon ,ei deseo fu r io so die

retomar cad,am,aD.an8.Y siempre para derrotar a eS8.

h ~ , . b a h . ,, . . , d '-

noc he tnste quenatnta en tu mira a,

16



Ventana

Sofie qu,e habia despertado y tuve temor de rnirar bacia

to estrella. Cuando senti' que la soledad todavia era un

recuerdo, fui descubriendo entre las sabanas que tu deseo,

como el rnfo, seguia intacto. Tus enormes ojos verdes

contemplaban mis tristezas del pasado y cuando pude

asomarme a ellos supe q ue atin estaba atado a tu inmen-

idad, como asornado a 1 8 , m i s s gigantesca ventana hacia

el universe. Al despertar seguia sofiando.Y segul viendo

estrellas de dfa,

17



No supe cuando, ni por que, el joven Lancelot se vio

cabalgando solo, desprotegido y amerced del frfo y la

oscuridad de una neche traidora, dirigiendose a su propia

desolacion, Cansado en su montu rav agotado en su deseo

y con el recuerdo de su sefiora devastandole el alma, notenia ya siquiera fuerza para imaginar otrn combate. Exa-

nirne , casi in rnovi l y a punto de sucumbir ante su tristeza,

el reflejo de tu mirada Ie oblige a deshacerel malignc

encanto que Ia perfidia estaba inoculando en su alma,

ICon su furia intacta y-u valor redivivo arranco a la

noche su oscuro manto con un grito que produjo miedo

aI miedo mismo. Era que el sol habia sido ocultado por

la perversa luna, celosa y desencantada por tu brillo,

Sintiendo entonces la ternpestuosa fortaleza de Lancelot,

empezo a dar paso a la luz, que no era tal, sino, qUle del

cielo misrno empezaba a emanar tu sonrisa, que era el

sol rnismo, y tu figura toda fue haciendo el dfa, Ahi

estabas. desnuda, Ilenandolo todo con la iridiscencia de

un cuerpo blanco fabricado con rnispropios deseos. Lan-

celot ya s610 tenia que marchar nuevamente haeia ti.

18



Prisionera

A veces, cuando la lluvia cae, voy mirando sus gotas. Y

te descubro en cada una de elias: como prisionera de una

jau la de lluvia ".

19





Retorno'

Hace muchos afios, en.un lugar y un tiempo que parecen

muy lejanos, el joven Lancelot exponia su vida, con el

solo poder de sus armas, para enfrentar ala tragedia qu~

segaba cientos de alegnas. Era cuando los ninos no son-

reian con la plenitud que poseen, cuando su mirada ham-

brienta revelaba una total ausencia de futuro. Perp Lan-

celor, como todos los mortales, de tanto convivir con eJ

dolor se acostumbro a el. Ahora, de nuevo, se le ve en

todos los campos de batalla, riguroso y ' certero, indomito

e indulgente, Nadie sabe como se llama esa pequefia que

con voz inaudible le hablo una noche desde su historiapara decirle que tenia frio. Nadie sabra como se Haman

todos esos nines.

21



Lagrlma

Si yes esa pequefia gota que rueda silenciosa por mi

mejilla, no te quedes contemplandola: Yen ami, bebe

de ella, deja que te inunde esta temura que he estado

inventando. Te arne siendo nina. Aun te amo, y aun eres

nina, pero el momenta ha lIegado y ya puedes dejar que

la gota que va brotando de mi te posea, placidamente, y

navegue como un barco sin rumbo por los mares de tu

cuerpo, de los que s610 tu sabes cuales son puertos segu-

ros. Cuando sea el momento de atracar, recuerda recor-

darmelo: Quiero poder extraviar la bnijula. Y que nadie

intente rescatamos.

22



Invocaci6n mortal

Has rondado demasiado por mi entorno, has opacado

tanto el cielo que protege mis huestes, has marchitado

tantas sonrisas, que ya, 6yelo bien, no te soporto. Y

uunque habia dejado limpiamente mis armas, y aunque

habfa evitado tu mortal contacto, tu beso fatal, recojo de

nuevo mi Impetu y te reto. Un reto mio y limpio, con

tus armas 0 las mias. Acercate a mf s i quieres, que tengo

III fuerza que has arrebatado a quienes querfa, y la mia

propia, que no es poca cuando la invoco. Se que me

lnvitaras a combatir a tu noche eterna, Parca inmunda,

y ulIli ire a combatirte. Y cuando penetre tu frfa noche

v 'nls como va a iluminarse paulatinamente, porque elias,

los que amaba y me quitaste, aiin brillan con potente

. nergfa en mi. Es mejor que 10 sepas ahora, muerte

.uprichosa y amafiada, para que te batas en retirada y no

digus luego que 10 hiciste pa r voluntad propia. Ya no te

tolero, ni te temo, ni te respeto: s610 quiero que desapa-

rezcas de rnis campos y dejes volar las miles de palomas

qu e se elevan de las bocas de mis amigos cuando sonrfen.

[Fuera de nuestras vidas! Ve a ejercer tu deliciosa tenta-

'i6n adonde la neeesiten. Y si no quieres haeerlo asf,

entonces arremete, intenta contra mi fortaleza para que

I : " sientas, como te sentiras, estrellada ante una potente

23



roca. Que cuando s e a . nuestra hora s610 el poderoso desig-

nio de nue s t r o Creador nos llame a SD servicio, La , fuerza

es el dolor que se a.gita en mi, capaz de crear las m as

tenebrosas tem p es ta de s e n co n tra tuya: capaz d e o scu re ce r

aun mas tu negro, manto; capaz de fascinar a Ia muerte

en lamuerte misma para que te consurnas ,en,un aliento

flamfgero y misterioso, que no deje sino una este1a de

malos recuerdos que pronto olvidaremos. Y aunque sabe-

mos que en algiin Juga r de], tiempo y Ia distancia aun

blandes to ' diabolica guadafia, porese misterioso designio

de mi fuerza, nopodras acercarte a nosotros nuevamente.

Sera 0 ' ue vam en te "nim av e ra e .mestra ' S ' " a l m as . y. c'a'l"d~sI_ . _ . _ c . c c V " " " - pn . .... en D - . " - ' . ,_m , , ·.., _ l c O - ,

inviernos, y romanticos otofios, 'y fascinantes vera-

nos. Sera dia etemo y luz que alimente vida, la nuestra,

y el recuerdo de aquellos que, aunquelos llevaste .3 tu

tetrica morada, ann viven cobijados pornuestras estacio-De s p a ra darnos Ia fu e rza co n . qu e te hemos derrotado. Y

que sea hasta siempre, muerte, para bien nuestro yma l -_

diclon t uya ,

24



Regreso

Siempre regrttso a ti, senora, para comprobar que existes

mas alia de mi deseo, para descubrir que no hay mejor

refugio que la temura tuya, que me roza el alma cuando

vuelan tus caricias. Par eso te amo en esa dimension

extrafia que tiene mi vida desde que te rodea ese pequefiosatelite que con seis diminutos dientes me sonde y trans-.

porta a esos espacios siderales de donde proviene el re-

cucrdo nuestro. Asi, cuando no las yeo, creo enloquecer

1I1descubrir los Iimites de la felicidad, Y vuelvo a ti,

s ·tiora, despues de penosos viajes, para comprobar que

no eres invenci6n mia.

2 5



Tu mundo

Yo" entretodas las damas dieesa corte, solamente queria

robarte a , ti. En mi reino, que tam:poco es de este mundo,

serfas feliz. Estaba seguro. Es 'mas " aiin 10 creo. Pero Ia

tentacion tuya e ra viv ir dos mundos, ta l , vez presenciar

1a guerra de dos universes por t i . . Ahoralo sabes: yo nopuedo enfrentarlos, porque mi reino es distinto. No serfa. ' . ' . 1 1 )Justo y equ ita n vo '.. para er os.

26



A tu encuentro

Marche hacia ti, senora, con la tentacion nostalgica de

1 0 repetidamente imposible. No se si querta verte, dejarme

arrancar la aparente tranquilidad por esa volcanica pasion

que siempre habla desatado en mi cuerpo tu presencia.

Sin embargo 10 hice y me arriesgue a enfrentar la magia

de tu palabra, la tentaei6n de tu sonrisa, los peligros de

IIImirada. Y ahf estabas, senora, incolume ante el tiempo,

pcro reducida la fuerza de tu volcan, Y otra vez la potencia

tclurica de un terremoto sacudio mi cuerpo y dejo ausentes

mis silencios, para ubicarme en un lugar en el cual has

vivido conmigo durante todo el tiempo; en una distancia

y en un espacio err los que siempre has sido feliz, senora

uita. Por eso, cuando marcho hacia ti, no puedo resistirme

II la fascinaci6n de robarte para mi nostalgia. Que importa

que tu tristeza se moleste.

2 7



Dolido de ardnas y duras batallas, de fieros combates

contra elmundo, el joven Lancelot hizo un alto em el

camino para disfrutar los beneficios de un suspire. Ab-

sorto estaba en sus' recuerdos cuando una doncella pu,ra

, e : " , , ' - - ' ~ ' ) - " , diio: " ' L ' ' . , ' 1 :' ' . ' , e l " ',t- . " - , , 1 , , ' t ' , ' - - , " ' . ' , ",-C - -" c·' "', ' "".'

se acerco y e . ,Ijo,.anceo-, e eterno, se ve mejor ybrill a m as cuando baja de su caballo", E I, caballero, sor-

prendido, respondie: "Pero no atino graciosa n : i , n a " , a

eombatir con nadie sin estar sobre mi montara ..Mis me-

jores armas de nada sirven s i no cabalgo". Sin dejar

terminar la veloz respuesta la doncella afiadio: "Yo, que

s o y el destine de Lancelor, he sabidodesdeel comienzode los tiempos que tu fuerza no , ,esta ni siquiera en tu

armadura, Tu fuerza es tanta que no es menester mostrar

las armasttus enemigos temen mas alpropio Lancelot

que a . ellas' ~

Ahora Lancelot cabalga sobre una certeza, y sin mostrarsus armas le respetan, aunque ya no, le te,men.A veces

su palabra dulce, su verdad enhiesta, han ganado para su

pueblo las m as duras batallas. Especialmente cuando esa

doneella le acompafia.



Luz

I';sta manana lleg6 primero tu sonrisa. Despues fue como

., i la luz toda se envolviera en tu cuerpo, de donde no la

dejaste escapar en todo el dia. A cada paso que dabas,

II I cxtrafia fragancia que brotaba de tu cuerpo atraia a

todos los colores que, enamorados, se apretujaban porcntrar en tu inmensidad. ASI pude descubrir c6mo los

rlos f lu lan de tus ojos, verdes y profundos, distantes y

c .rcanos. Tu piel parecia de flor enamorada, can la tersura

de un verano fresco; con la delicadeza que s610 tiene una

paloma cuando vuela. OHa todo tu cuerpo como a la

tierra y sus mejores frutos, como a los continentes, desa-nunda todos los vacfos de la nostalgia nuestra, como si

'I sol te hubiera poseido, se hubiera deleitado en t i y

lucgo se hubiera ida: fue el instante en que dejaste de

sonrefr cuando empezamos a pensar en otro dia y cual

de Ius siete maravillas Ilegana primero esa manana. Y

surgi« la pregunta, cuya respuesta presumimos: ~Seraque por la noche te vuelves luna?

29



El mundoentero se complace alrededor tuyo. Tienes bajo

tu seduccion a los astros mismos, que parecen haber sido

creados para ser testigos de tu bri 110, del exito que parece

regocijarse en t i. Yo 10 nolo, porque so y parte de ese

universe .. Pero a . veces me veo ta n lejano, que tengo latentacion de hacer . 1 0 que hacen t a g , estrellas pequefias:

explotar en un conffn de la galaxia para que algun despre-

venido transeunte 0 un ebrio enamorado admire e~brillo

Ide su ) ,UZ: de los ultimos y definitivos destellos de esta

luz, 'Tal vez asf descubras la manera como los demas

a s t ro s se p ren dan die 'lo s tuyos,

30



Demencia

He de buscar en tu cuerpo el origen de esta locura que

me tiene atado a tu fortaleza. He de llegar a tu temura,

III alma simple y pura que la produce, a la mirada que la

d eja escapar, a la sonrisa que la presenta, a la piel que

III ejecuta, He de penetrar, muchacha, en ti. No preguntes

para que, pues posiblemente este intentando espantar rnis

Iuntasmas. Cuando ese extasis repentino nos sacuda, sa-

I r del momenta exacto en que se produjo rni demencia.

Mafiana indagaremos por la tuya.

31



EI ad. ius de Glnebra

L· I - I , - " " ' · " 1 " · ' 1·.·' ... ··. '. -- i .,andc ..,'- 'L'mcelot '-"....enfa coic e , g a s c e , senora mra, cuan , _ 0 1 ya . ance ro no tenia c i on

quien medir la fuerza Ide sus armas, aeostumbrado ya a

una leyenda conquistada en batallas remotas. Eso fue lo

que entendiste 'en aquellos dfas de marzo, Ginebra mla

cuando insuflaste le n tu cansado caballero'el iento deci ...

sivo para enfrentarse ,8 supropia vida, Y 1 8 la tuya, que

tanta soledad arrastraba y tanta t e rnu ra habia derrochado,

segun el testimonio de tu, mirada ..

Hiciste de Lancelot un instrumentc Idetu poder creador,

le diste p o r nuevas armas Ia certeza de un talento Y'sem-

braste en e 1 una duda que 11,'eg6hasta el celo para que

I nunca pudiera espamarte de su alma y amara atodas las

mujeres en ti, senora mia. Entre el viento y la mariana

se e nca rg aro n de difundir al mund o el n acido ro man ce @

Ll. --' ,~.'1 [' : c _ ; L-'",~ el ''~' 1 1 , - ' . . . . • " . - . . . 'd , " - 1 0 ' 1 t , 1 - 't, ..•... he ·• .t ' 1 1 1 , - - " .'. ~ -, ,e va s e a .a n c eO ll, . 0 re c u e r _ _o _ aRLO, .a s a . & : 1 or lg .en

mismo Ide su nostalgia, hasta su m as remoto origen y le

,a yu da s te a no' caer prisionero de sus propios f an t a smassolitaries.

Recuerda, senora mfa, como Lancelot exhibia nuevos

bnos, como se enfrentaba sin temor a 10 innombrable.

Multiplicabas su presencia en los campos de batalla y



hactas huir la noche cuando era inconveniente. Hubo

otras noches, Ginebra, que no eran oscuras. Y tenias

sobre ella el poder de ahuyentarla con el solo prodigio

de tu fresca y cristalina sonrisa blanca. Noches y dias de

una absoluta intensidad en ias que fuiste protagonista y

t e s t igo de la manera como se iban disipando dudas y temo-

res en el alma del bravio Lancelot. Til misma, senora mia,

r e cupe ras t e un reino que parec fa perdido.

ncontraste en los motivos de la lucha de tu caballero

un faro bacia d6nde dirigir la ernbarcacion de tu deseo.

Pudo ver el joven Lancelot en el finnamento de tu mirada

'6mo se producian en su interior las mas terribles bataUas,

unas triunfales cuando llegaste, y las abismales derrotas

cuando amenazo el adios, Recorriste junto a Lancelot los

m4s tenebrosos caminos, senora mia, sin ningun temor,

purque tenias en ese remozado guerrero la fortaleza tuya

y J a de e l , No habia espacio para el miedo. Todos los

mo re s careclan de fundarnento.

Td venlas de la noche, Habias transitado por un tiempo

n destine y solo esperabas que los horrores del pasado

I - 'd'eJaran un poet. de espacio para sentirte existente.

, ndo Ginebra, tenias la profunda voluntad de vida que

) stino ha obligado a las mujeres sefialadas con esa

nllmlilindeleble del deseo y la temura. Eras como un

n 0 oceano en calma, unas veces. Otras.eras la ab-

l u t a y desgarradora tempestad. Todo en ti, y nadie 10

bra . .Todo estaba dado por el destino para que dos seres

l omo Lancelot y Ginebra se encontraran en ese lugar del

- pCio y el tiempo.

-nec lo t escuch61a rrnisica de tu euerpo, inhale tus mas

-'6nditas fragancias, presintio el fragor de tu -nostalgia

33



y adivino la fuerza que desde tu interior podia mover el

rnundo. S610 habfa que echar a andar la historiay Lancelot

1 0 ' intento con todos sus encantos en una tarde gloriosa

en que pudo acceder hasta tu piel y despues de p o s a r sus

labios sobre ti echo a rodar un tiempo que se habra dete-

nido para los dos. Todo desaparecio 'para ti y Lancelot,

senora mia, a excepcion de las cosas bellas. Todos los

dias fueron mas Iuminosos y el frio solo se percibia en

el lamento de algun trovador solitario. Lancelot tuvoque

arnarte, a pesar de ,que fueras su gran senora. No podia

ser de otra manera, Tu valor y astucia comp r end i e r o n

esto y tambien te diste al guerrero con total fascinacion,

Tu cuerpo fue su patria, todo su territorio, ypor sus leyes

se rigic ..Tu piel le dicto las no rma s de tu deseo y Lancelot

te arno como nunc a fue amada ningunamujer sobre 1 3

faz de esta tierra. Siempre fue buscando dentro die ti,

hurgando basta encontrar clnacimiento de esa fuente de

pasion que te bacia estremecer con fa po t enc i a de un

terremoto y que bacia sonar bajotu pie} a todos los rfos

cmbravecidos. Siempre hahia que buscar.

Pero qu e placidez, senora mia, significaba reposar atu

lade, contiguo a ese enorme cuerpo continental que se

extendia hasta ,e~infinite. ,Apesar de que permitiste , R los.

labios de Lancelot descifrar toda tu desnudez, hubieras

necesitado darle toda tu cxistenciapara que tuvieratiempo

de indagar en sus misterios. Tus encantos hicieron impo ...sible a Lancelot 3. otrasmujeres ymuchas vecestuvo que

soportar e~ rencor de otras doncellas que Io amaban ~Y

es que el temor que el imprimis sobre los hombres, la

fascinacion que ejercfa sobre lasmujeres, eraninsignifi-

cantes frente a las posibilidades de tu deseo solitario ,I .#

senora rrua.

34



Encontraste a Lancelot agotado, viviendu de la gloria

conquistada en precocidad. Solo, sin embargo, su alma

se debatia en las aeongojantes penumbras del reneor. Suvida, vale decirlo, era total oseuridad. Por eso primero

lc ensefiaste a ser justo y bondadoso antes de medirse en

combate con los de su clase, que nunca tuvieron la forta-

Icza para enfrentarle. Pero un caballero sin el ejercicio

del combate termina por olvidar los motivos de su lucha.

La aparici6n tuya, senora mfa, fue como remover la his-

toria detenida, como derretir inmensas capas de oscuridad

que irnpedian el paso a la luz. Lancelot escucho tu palabra

y creyo en ella mas que en los Evangelios. Tu Ie diste

su vida, Ginebra, y el contempl6 en la estrella doble de

Ills ojos su futuro y el tuyo. Desde ese momento te invito

II vivir a ese castillo que sin eneantos eneantaba y cuyos

elementos eran el agua, la luz, la temura y todo 10 tuyo.

No hubo hombre mas feliz ni caballero mas esforzado

por servir a su senora, Ginebra. No hubo poeta que pu-

diera cantar las sensaciones que desplegaban ese noble

.aballero y esa gran mujer que paseaban por bosques y

valles llenandolo todo de paz y calidez. No hubo rmisica

posible que lograra imitar los acordes del viento al verlos

pasar. S610 quien supo amar pudo haber intuido un poco

lu profunda fascinaci6n que esa pareja de suefios podia

'jen.:er sobre e I mundo. En ese castillo rodeado de bos-

"lues, Lancelot y ni, senora mia, vivieron la mas absoluta

fcl icidad.

Bubo un dia, como en todas las historias de este genero,

que Lancelot tuvo que salir a enfrentar otra batalla. Partie

con la complacencia de tus virtudes y march6 a cumplir

su cornetido. Pasaron los dias y Lancelot, al ver que no

podta retomar tan pronto como habia prometido, te envi6

SU s bellos y tiemos mensajes con las hadas del viento,

35



unas veces y otras en la luz indescifrable de las estrellas ~

Por fin, cuando t e rmino su aventura, vo lv io a buscar el

a :m or de su senora p a ra co n ta r le de su s an dan za s y nu eva s

proyecciones. Tti ,senora mla, no loesperabas en el puen ...

te, comoaco turnbrabas.Ya el enorrne fuego de tu.s ojos

estaba nublado por 'Iatristeza y de tu sonrisa solo escapaba

una debil penumbra. Lancelot comprendio todo y sint io

qu e el mundo y su h is to r ia se derrumbabanlentamente

dentro de e l . , Una vez habfapasadovcuando la muerte

de su reina madre, yo lo con tu ayuda lagro reconstruirse,

Sentirnientos multiples que fueron desde la colera basta

la c om pren s io n , desde la desesperacion y l e I p esa r , desde

113 incred U · 11]'~d.ad hasta la l O n e dulg en · C · · ' I · 'a ' b - · O · · ' ( T - - g , F i o · · · n · 'c····o·:,·n,re-l c . _ , · , , ~ , . _ . . . ' , . ' ,I. " '.,_ '.....'._ , __ .'. '. c: '.'~ ' ,..' " . ,~, UJ.'. , .., . ,...

mendo zarpazo las motivaciones mas profundas Ide suid R·· d -. .. 1· b . . .. , - 1 1 " •Vlatl_,ecuer·~ a senora que to b e sa s te co n tus iagnmas

y Ie dijiste simplemente adios y siempre te voy a querer,para encerrarte en tu propio castillo, frfo y oscuro, del

qu e p ro m etis te :n o 'vo l ve r a salir ,

L I·· d . '" ibilid d d ...ance ot c e j o caer sus armas y sus PO'SI nuda tes de exisnr

y se interne en un bosque oscuro y peligroso de demencia

a esperar el sablazo insidioso de la despedida.Marl

c:h6,ann con el calor de tu recuerdo y eso 5:0]0 le ha permitido

no sucumbir aI frio y la derrota 'total. Ademas, todavfa

puede mirar desde un clare del bosque, senora mta, hacia

ese cuarto de tu castillo, desde el que espera se prenda la

enorme sonrisa de tu luz y salgas a gritarle al viento y

la tempestad: "Digan a Lancelot que rn i C 'ue rpo l1 0 nece . . .sita, Diganle que regrese a su patria". Aun e ,n e l exilic,

Lancelot triste no ha escuchado es,e gri toc Pero aquf a

punto de s u eumb i r triste, solo, empapado y enamorado,

sigo amandote, senora mia Ginebra de mi historia y Ia

tuya, esperando que algun dla esa leyendanuestra pueda

co n tin ua r ,co 'n el cau ce vo lu m in oso y delirante co n que

3 6 ,



en algun instante de una existencia bella y total, decidirnos

smprender la aventura amorosa mas tentadora y hermosa

de todos los tiempos. Lancelot, senora mfa, espera aunpor su Ginebra y toda su temura. Que sea hasta siempre,

esc rnomento de la historia en que todo es posible.

Documents

Fabricante de Sueños