5

Click here to load reader

Importancia de Los Rituales Iniciaticos

Embed Size (px)

Citation preview

  • 1

    IMPORTANCIA DE LOS RITUALES INICIATICOS EN LA MASONERIA

    Por Antonio LAS HERAS

    Hemos advertido que, ya avanzado el siglo XX, comenzaron a pronunciarse las autoridades de algunas ordenes masnicas tanto en Amrica como en Europa en el sentido de definir a la Masonera como una institucin filosfica, filantrpica y progresista quitando lo que a nuestro juicio da su impronta, siendo a su vez raz y esencia, que es la condicin Inicitica a partir de la cual puede definirse tanto como distinguirse sta hermandad. Investigando con detenimiento advertimos que ya en el siglo XIX hubieron organizaciones masnicas que tambin prefirieron utilizar aquella versin restringida. Resulta obvio que entidades constituidas para realizar tareas filosficas o bien filantrpicas o de inquietudes progresistas las hay y en abundancia, en todo el mundo. Y tambin es claro que eso no las convierte en agrupaciones masnicas. La Masonera Universal de hoy en da es descendiente directa de las ms antiguas Escuelas de Sabidura o de Misterios en las que se formaron aquellas personas que cimentaron el crecimiento espiritual, intelectual as como tcnico y cientfico de la Humanidad. A modo de ejemplo podemos traer aqu la Escuela Inicitica del Templo de Sais, dedicado a la diosa Isis, en Egipto, donde Soln obtuvo el conocimiento de la Atlntida, tal como lo refiere Platn en dos de sus dilogos. Y qu finalidad cumpla sta escuela? Plutarco lo explica con toda precisin y claridad cuando escribe: El nombre mismo que recibe el templo de Isis da clara indicacin de que es amparo del conocimiento y de la ciencia del ser que es. Este templo lleva el nombre de Isein, es decir, la casa donde se puede adquirir la ciencia del ser, si pasamos piadosamente y con devocin los portales de los santuarios consagrados a Isis. Qu son estos portales a los que se refiere Plutarco? No otra cosa que una forma metafrica para hablar de los rituales de iniciacin. Atravesar cada uno de ellos implica capacitarse para la adquisicin de esta ciencia del ser que para decirlo de manera moderna y comprensible a todos es la capacidad de lograr poner en acto y de manera

  • 2

    armnica todas las potencialidades que cada persona cuenta pero slo suele mantener en potencia. All radica la importancia del proceso inicitico. Cada ceremonia de Iniciacin (y recordemos que hay una para el logro adecuado de cada grado masnico) es una oportunidad para enfrentar miedos personales, temores inhibidores, abrirse a un ms preciso conocimiento de s mismo y quedar dispuesto a atravesar con serenidad, fuerza e inteligencia nuevos horizontes que el devenir de la existencia presentan. Como continuadoras de aquellas originarias entre las que tampoco podemos olvidar a las que pertenecieron los Magos venidos del Oriente que se mencionan en los Evangelios ni a la Orden de los Esenios que habit en el Kirbet Qumram, a la vera del Mar Muerto, y donde fueron iniciados Juan el Bautista y Jess el Nazareno las ordenes masnicas tienen que tener en cuenta la importancia de la prctica del Sendero Inicitico tanto como el hecho de poner en primer trmino la palabra Inicitica cuando se trata de definir a sta Antigua y Augusta Orden. A la importancia de los rituales de Iniciacin en el marco de escuelas esotricas, espirituales o de sabidura como se las quiera llamar entre las cuales, necesariamente, ha de estar incluida la Masonera hizo referencia el sabio suizo Carl G. Jung haciendo notar el vnculo entre tales rituales y uno de los smbolos presentes en el Cuadro de Primer Grado; o sea el de Aprendiz, que es la escala (o escalera). Explica Jung que en esos ritos las escala planetaria de siete peldaos desempea un papel considerable, como lo sabemos por ejemplo por Apuleyo. Los ritos de iniciacin del sincretismo de la Antigedad tarda, sigue expresando Jung que ya estaban fuertemente penetrados por la alquimia, se ocuparon principalmente del ascenso, es decir, de la sublimacin. Tambin se represent con mucha frecuencia el ascenso con la escalera de mano, de ah que figure tambin una pequea escalerilla para el Ka del muerto entre los objetos que los egipcios ponan en las tumbas. La idea del ascenso, a travs de los siete crculos planetarios, significa el retorno del alma a la divinidad solar de la que proviene El misterio de Isis que nos describe Apuleyo culmina en lo que la alquimia de la primera parte de la Edad Media a travs de la tradicin rabe se remonta directamente al tesoro cultural de Alejandra llam solificatio: el iniciado era coronado como Helios. (1.-) Obsrvese que, a partir de este conocimiento, comprendemos que la escala que aparece en el Cuadro de Primer Grado es algo bastante ms complejo que la explicacin a travs de la Escalera de Jacob que suele usarse como elemento de interpretacin en la

  • 3

    literatura masnica. Aqu nos estamos remitiendo a un smbolo varias veces milenario entramado con los rituales de Iniciacin que los adeptos deban cumplir para su permanencia en aquellos templos originarios hasta convertirse en sacerdotes o, lo que es lo mismo, lo que hoy denominamos maestros. A mayo abundamiento, Jung anota: El Siete corresponde a la grada suprema y representara por lo tanto, en el sentido de la iniciacin, lo que se ansa y desea. (2.-) Y, finalmente, esta otra cita junguiana: considrense por ejemplo los frescos de la Villa de los Misterios de Pompeya, en donde la embriaguez y el xtasis no slo estn muy cerca la una del otro, sino que hasta son una y la misma cosa. Pero puesto que desde pocas remotas las ceremonias de iniciacin tienen tambin un sentido de curacin (3.-) Comprndase la implicancia de esta ltima transcripcin. Pues hace referencia a las cualidades teraputicas que tiene recorrer el Sendero Inicitico. El recorrido del Sendero Inicitico, a travs de las ceremonias y rituales correspondientes, permite acceder a nuevos y siempre valiosos estados de personalidad donde la integracin de los opuestos se convierte en hecho cotidiano. El tan conocido smbolo masnico del piso de mosaicos blancos y negros armnicamente dispuestos remite, precisamente, a ese hecho de sumar y no restar. Cuando en masonera se habla de Ciencia no es en la definicin obliterada vulgar que remite a instrumentos de medicin. Es eso pero con ms lo interno: lo espiritual. Es el laboratorio pero tambin el oratorio; los dos lugares de frecuentacin ineludible por los alquimistas cabales. Es la razn con la intuicin. Es la percepcin sensorial con lo paranormal. Es el pensamiento con la creatividad que surge de lo inconsciente imbuido de la vitalidad que slo lo Inconsciente Colectivo puede dar. Es la persona til para si capaz de integrar el criterio de nos, de nosotros superador del miserable ego y que lleva progreso; es decir, Verdadera Luz, a la comunidad. Y como la profanidad a avanzado con sus indiscreciones puertas adentro del templo, ser menester dejar aqu sentado que no existe la autoiniciacin. Iniciacin implica transmisin. Una transmisin de la palabra al odo que slo puede ser realizada por quien ya pertenece a la hermandad contando con su experticia en la materia. Ya en 1661 dej constancia de esto el annimo francs Theatrum chemicum VI cuando leemos: raro, secretsimo, inextinguible fuego de los mismos. Mas, por mucho que yo diga, es empero punto menos que imposible descubrir y experimentar cul sea la verdadera y

  • 4

    nica materia de la piedra de los sabios, si no es fielmente revelada por un amigo que la conozca (4.-) Sobre dicha comunicacin de los secretos y misterios y ciertas claves de las mismas, expresa Jung: Qu es, pues, lo que un adepto susurra al otro al oido, mirndolo en torno temeroso de que alguien traicione o mejor adivine? Es nada menos que la incorporacin en el hombre, o la atraccin a su propio mbito, por medio de esa doctrina, del Uno y el todo, lo Sumo en la figura de lo mnimo, Dios mismo en sus eternos fuegos (5.-) La autntica Masonera, de la misma manera que ocurre con todas las organizaciones iniciticas las que, por serlo, tienen el requerimiento de condicin esotrica y espiritualista, cumple, mediante el sagrado trabajo en sus templos, aquella funcin que permite dotar a cada persona (varn o mujer) de las herramientas necesarias para que en una autntica transmutacin pueda hacer aquello que pidi Pndaro en la sentencia: Convirtete en lo que eres. El mundo profano de hoy, dominado por el Dios Mercado, acucia en todas las formas posibles para que hombres y mujeres busquen lucir mscaras de todo tipo. Tales mscaras no son otra cosa que significantes del engao, la mentira y la tergiversacin y, por ello, llevan a niveles de vaco existencial de los que slo se cosecha frustracin, insatisfaccin, mediocridad y banalidad. El Iniciado persigue lo opuesto. Diluir todas sus mscaras. Enfrentarse ante la autenticidad. As lo ense Clemente de Alejandra quien en su Paedagogus (II, I) manifiesta: Es, pues, segn parece, la mxima doctrina el conocerse a s mismo. Pues si un hombre se conoce a s, reconocer a Dios. O sea, hallar en s mismo nada menos que aquella chispa divina que es esencia constituyente de lo humano. Pues la Verdadera Luz esa que disipa toda tiniebla, ahuyenta cualquier fantasma, elimina la duda y la confusin no se encuentra en otro sitio ni lugar que no sea en el alma inmortal de cuyo convencimiento no tuvieron vacilaciones los hermanos y hermanas masones que nos precedieron en otros siglos.

  • 5

    REFERENCIAS.

    (1.-) JUNG, Carl G. Psicologa y Alquimia. Obra Completa. Volumen 12. Editorial Trotta. Madrid, 2005. (Pg. 51.) (2.-) JUNG, Carl G. Psicologa y Alquimia. Obra Completa. Volumen 12. Editorial Trotta. Madrid, 2005. (Pg. 55.) (3.-) JUNG, Carl G. Psicologa y Alquimia. Obra Completa. Volumen 12. Editorial Trotta. Madrid, 2005. (Pg. 97.) (4.-) Annimo. Theatrum chemicum VI. Instructio de arbore solari Paris, 1661. (Pg. 163) (5.-) JUNG, Carl G. AION. Contribucin a los simbolismos del s-mismo. Paids. Barcelona, 1992. (Pg. 155.)

    Antonio LAS HERAS es doctor en Psicologa Social, magster en Psicoanlisis y profesor en la Universidad Argentina John F. Kennedy. Preside ACARMAS, Academia Argentina de Masonera, Ciencias Iniciticas, Primordiales y de la Tradicin Hermtica; es Gran Hospitalario del Supremo Consejo Argentino del Grado 33 y ltimo del Rito Escocs Antiguo y Aceptado. Venerable Maestro de la Respetable Logia Santo Sepulcro de Jerusaln N 14 de la Gran Logia Simblica Argentina. Gran Prior Magister para la Argentina de la Soberana Orden Militar del Templo de Jerusaln. www.antoniolasheras.com mail: [email protected] Twitter: @LasHerasAntonio. Telfax: 54 11 4371 4788