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JUMISE

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Revista JUvenil

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Apóstol de los Sagrados Corazones de Jesús y de María, un

hombre que apostó por la misericordia.

Nació en Ri (Francia), el 14 de noviembre de 1601.

Hijo de una pareja de buenos normandos y fervorosos cristia-

nos, recibió desde pequeño la mejor formación que un hogar

podía dar entonces. Recibió una etapa de estudios bastante

completa en el colegio de los Jesuitas, y un proceso de discer-

nimiento espiritual que lo llevará a optar por el sacerdocio en

la Congregación del Oratorio. Fue un gran místico popular,

misionero, predicador incansable, escritor espiritual. Fundó la Orden de Nuestra

Señora de la Caridad en 1641, para ofrecer a la mujer vulnerable, un refugio don-

de pudiera restaurar su vida. Fundó también la Congregación de Jesús y María

(eudistas) para la formación de los sacerdotes.

Para San Juan Eudes dentro de las grandes preocupaciones y prioridades de la fe

de un cristiano, eran, formar a Jesús en nuestros corazones y la devoción a los

Sagrados Corazones de Jesús y María. También al apostar por la misericordia,

aprendió a encontrar a Dios y su voluntad en cada acontecimiento de su vida y

descubrir que su deseo máximo y único era que Jesús viva y reine en su corazón

y en el de los demás.

El camino de santidad, que él recorrió y propuso a sus discípulos, tenía como

fundamento una sólida confianza en el amor que Dios reveló a la humanidad en

el Corazón sacerdotal de Cristo y en el Corazón maternal de María. Y no sola-

mente Jesús vive y permanece continuamente en el Corazón de María, sino que

El mismo es el Corazón de su Corazón. Por eso, allegarse al Corazón de María

es encontrarse con Jesús; honrar al Corazón de María es honrar a Jesús; invocar

al Corazón de María es invocar a Jesús. Juan Eudes quería recordar a las perso-

nas, a los hombres, y sobre todo a los futuros sacerdotes que deben ser testigos y

apóstoles de ese amor del Corazón de Cristo y de María. Cuyo fin de esta devo-

ción es la perfección de nuestro amor a Dios y a las personas.

Pidamos al Corazón admirable de nuestra Madre María que nuestros corazones

se asemejen al suyo y puedan ser uno en el Corazón de Jesús. Que como segui-

dores de Jesús Buen Pastor el amor sea nuestro programa de vida cristiana. Y que

lleguemos a ser verdaderos apóstoles de la misericordia y del amor en Jesús y

María.

San Juan Eudes, infúndeme el puro deseo de ser tod@ de Jesús. Pueda yo con-

templarte en el Corazón de María y preparar el mío para que habites en el. Indú-

ceme hacia el abandono total en el Corazón amante de Jesús y consérvame en la

fidelidad del amor admirable de María. Amén. Hna. Lucía Sánchez - Quito

Colonias vacacionales

Pomasqui 2012

L@s voluntari@s vivimos una experien-

cia maravillosa:Jacqueline Jurado, Gabriel

Alarcón, Evelyn Aray, Leonardo Suarez,

Hugo, Chistian Cheme, Jennifer Sánchez y

Diana Castellanos, con el fin de que l@s

niñ@s y adolescentes tengan unas vaca-

ciones inolvidables, además de promover

la participación social de l@s niñ@s, fo-

mentar valores morales y religiosos, dar

paso a la diversión y crear un espacio don-

de l@s jóvenes pudieron invertir su tiempo libre en algo bueno y dife-

rente.

L@s niñ@s aprendieron de mí y yo pude aprender de ell@s. Mientras

se iban desarrollando las colonias vacacionales, también se fue creando

una amistad muy fuerte entre voluntari@s, al final, la despedida fue

triste, pero al mismo tiempo alegre por habernos conocido.

Las dinámicas, juegos, momentos de oración, talleres: básquet, futbol,

guitarra y artesanías, fueron un éxito. Pudimos notar que l@s niñ@s

cada día mejoraron sus destrezas en los diferentes ámbitos.

Tuvimos mucha acogida por

parte de l@s niñ@s, padres

de familia, las Hermanitas

del Buen Pastor, esto, día a

día incentivaba nuestra labor

como voluntari@s. Durante

este tiempo primola respon-

sabilidad en las actividades

que realizábamos y en el cui-

dado de l@s niñ@s.

Jaque Jurado—Pomasqui

Que puedo decir sobre esta gran Santa, la ver-

dad no sé por dónde empezar. Bueno les voy a

contar lo que me a gustado de ella y después

ustedes averiguan más.

Nació un 31 de julio de 1796, en una isla de

Francia, llamada Noirmoutier, su nombre de

pila fue Rosa Virginia, sus padres eran Julián

Pelletier y Ana Mourain. Su padre fue medico

de profesión.

Nació justo el día en que se celebraban las fies-

tas de San Ignacio de Loyola, era una chica

muy traviesa como cualquier otra. Una tarde

de juego en el bosque de Chaise observó que

un anciano, despojado de su peluca duermía profundamente, le robó su peluca,

se fue corriendo y la colocó en la casa del mismo anciano.

De pequeño nosotr@s también éramos así, verdad? Lo que quizás no hicimos es

por la noche antes de dormir hacer examen de conciencia. Ella, sí lo hacía está

ves después de haber hecho sufrir al anciano dijo: “que dolor ayúdame Señor

hacer mas buena, te lo prometo nunca más hare daño a nadie”.

Cuántos de nosotros ahora lo hacemos? Yo personalmente de pequeño nunca

hice esto y ustedes amig@s?

A Rosa Virginia le encantaba las cosa difíciles y arriesgadas un día al jugar en un

hermoso recoveco que era la gruta de san Filiberto, patrón de la isla, les dijo a

sus amigas hagamos pronto de este lugar un escondite para rezar juntas a nuestro

Buen Jesús. Y así lo hacían cada día.

Una vez una religiosa de las Hermanas Ursulinas le pre-

gunto ´´Rosa Virginia serás un ángel o un demonio´´ y

Rosa Virginia le dijo no madre YO SERÉ RELIGIOSA,

la hermana se sorprende y le dice: ¿con ese carácter?,

pero Rosa Virginia le dice lo sé tengo que luchar para

corregirme pero YO SERÉ RELIGIOSA.

Para María Eufrasia la Eucaristía es la vida, el amor, el

consuelo, y su tesoro.

El resto de la vida de esta gran Santa la podrán investigar en:

http://www.goodshepherdsisters.org/sp_foundress.htm

Cristian Cheme—Pomasqui

Que lindo fue compartir con

l@s voluntari@s en la sema-

na de formación del 9 al 13

de julio. Ante todo los felicito

por ese sí generoso que le

dieron a Jesús Buen Pastor.

Fue una semana muy intensa

cargada de emociones y mu-

chos conocimientos, donde

cada uno de los participantes

pudo conocer más sobre las

obras de la Congregación del

Buen Pastor, las responsabili-

dades que se tiene al ser un/a

voluntari@, el perfil de un Buen Pastor, siguiendo los pasos de Jesús, la impor-

tancia del por qué y cómo leer la Biblia en-

tre otros temas.

Algo que me gustaría resaltar y com-

partir con tod@s es el proyecto de evange-

lización que cada comunidad de misericor-

dia realizó. Los temas de los proyectos

fueron: “No al Aborto, si a la Vida”, “Jesús

Buen Pastor, un modelo a seguir” y “ te in-

vitamos a JUMISE”; esto lo realizamos en

las calles de Chiriyacu y en el Centro Co-

mercial el “Recreo”. Como voluntaria fue maravilloso tener la experiencia de ex-

presar mi FE antes los demás, compartir con la gente que nos miraba evangeli-

zando, muchos hicieron comentario como: “qué raro es ver a jóvenes haciendo

esto”, “solo los evangélicos lo hacen. ¿ustedes son católicos?”, “es bueno saber

que hay jóvenes que si quieren a Dios”; entre otras cosas.

Otro día tan esperado fue, el día del envió donde cada un@ realizaba su compro-

miso ante Dios y los presentes, la emoción embargó a más de uno ya que durante

el tiempo compartido la amistad se fortaleció y al saber

que ese día nos separábamos, era muy triste.

Los invito a cada uno de ustedes querid@s jóvenes a

que se unan a esta gran familia de voluntari@s y vivan

esta experiencia inolvidable que siempre llevaran en su

corazón y que de seguro marcara su vida y ustedes

marcaran la diferencia.

Carmen salamea - Voluntaria

¨Los dones y la llamada de Dios

son irrevocables¨

(Rom 11, 19)

Dios siempre llama al corazón, a

la vida, a la interioridad, al yo profundo

de la persona.

La vocación es un don, una experiencia

que muchas de las veces, no es tan fácil

de entender, sin embargo, es una reali-

dad tan cierta, que ha cambiado mi vida,

una novedad que hizo que lo deje todo por Él, una aventura que en la medida que

voy adentrándome en ella, la descubro maravillosa y con grandes retos.

Al entrar cada vez más en el misterio de la vocación, tomo conciencia de que el

¨dejarlo todo¨ por amor a Él, es la prueba dura y real por la que pasa cada día mi

respuesta; la experiencia de un camino de escucha, que exige total abandono en

Jesús, apasionarme por su vida y su Reino; un camino incierto muchas de las ve-

ces, en el que el único punto de partida es la fe. Una fe que pasa por los momentos

de Cruz y de Resurrección. Una fe que reclama radicalidad, vivir hasta las últimas

consecuencias.

El camino de la vocación es una aventura fascinante, tiene sus exigencias, sus re-

nuncias y sus glorias. Una experiencia que cada día puedo sentirla como ¨regalo

de Dios¨, esa llamada de ¨estar con él¨ y ser portadora de su ternura y miseri-

cordia a las personas en estado de vulnerabilidad, necesitadas de una mano que

las levante, de un corazón que escuche…de una palabra que les anime.

En la reciente experiencia apostólica (misión) que tuve la oportunidad de compar-

tir con l@s niñ@s del ¨CENIT¨ en el Centro de Apoyo Escolar ubicado en el mer-

cado ¨Camal¨, de conocer su realidad y ser parte de sus sueños y anhelos, puedo

descubrir en la inocencia de los más pequeños, el amor de Dios. Un amor que quie-

re llegar a la vida de todo aquel que quiere recibirlo, un amor infinito.

La llamada de Jesús ha sido para mí, desde un inicio, una invitación a salir de mis

seguridades y lanzarme a algo nuevo, grande y misterioso…la vocación es un don

que cada día me sorprende…es Dios el que me sorprende…y me hace sentir que es

su gracia la que me sostiene en este camino.

Doy gracias a Dios por permitirme vivir y compartir la vocación en comunidad, con

mujeres que también son invitadas a vivir este hermoso carisma del Buen Pastor,

cada una desde lo que somos descubrimos los dones que Dios ha puesto en cada

una y nos enriquecemos y apoyamos mutuamente.

Para muchos, seguir a Jesús puede resultar una locura, algo que no tiene sentido;

para mí, es una locura, que encuentra su sentido en el Amor, en ese encuentro,

con quién me ha amado primero.

Seguir tras las huellas de Jesús, el Buen Pastor, experimentar su amor, encarnar

su ternura y misericordia es reconocerme humana y necesitada y saber que des-

de la experiencia personal del encuentro con Él puedo ser portadora de su amor,

ternura y misericordia hacia los más necesitados.

Confío que el Señor por su gran misericordia siga sosteniendo y confortando mi

vocación.

Hna. Lucía Sánchez

Es un grupo muy unido, me abrió sus puertas para acercarme

mucho más a Dios y poder cambiar mi mundo y el de los de-

más, a pesar del poco tiempo que llevo como integrante, me

han enseñado que nada es fácil en la vida, pero con su voz de

aliento me han dicho: “no estás sola” ,”Dios te quiere, te cui-

da y nunca te abandona”.

En los problemas que últimamente se me han presentado,

ell@s han estado junto a mí, para que no me deje derrumbar

y mantenerme en pie, para no llorar y mejor brindar una linda

sonrisa al mundo y a mí misma. Cada momento que paso con

ell@s, son tan especiales, no tengo palabras para expresarlo,

es lo mejor, se siente un ambiente de amor y paz que hace

que olvides tus cosas y digas TODO VA ESTAR BIEN.

El tiempo de vacaciones fue tan especial, participar de las colonias con l@s

niñ@s. Por primera vez fui animadora de un grupo, antes no tenía la experien-

cia, sin embargo, a pesar del miedo que sentía al principio, confié en mí misma y

con el pasar de los días me sentí orgullosa de mí y del trabajo que logré, con

unos pequeños angelitos que me enseñaron muchas cosas, aprendí a tener pa-

ciencia con ellos, porque no la tenía, ahora ya la tengo jajaja.

En fin JUMISE para mí significa todo: amor, ternura, comprensión, amor a Dios.

Este grupo me ha enseñado y me sigue enseñando cosas muy positivas para el

resto de mi vida. Soy una chica loca y feliz que trata de hacer la diferencia con

los demás jóvenes de mi edad, en vez de andar en malos pasos como la droga, el

alcohol, incluso el robo, aquí me ayudan a ver la vida muy distinta, claro con

alegrías, llantos y mucho amor, hoy sé que la vida no es fácil para llegar a estar

junto a mi Diosito, para eso tengo que brincar mis obstáculos y por fin llegar a

mi meta.

Agradezco a Dios por ponerme en un rumbo que ni pensaba estar hace mucho

tiempo atrás, ahora me siento confiada y segura que lo que quiero es estar ahí,

porque tengo muchos propósitos y metas que cumplir.

DESDE EL MOMENTO QUE PUSE MIS PIES EN JUMISE ME CONVERTI

EN UNA VOLUNTARIA EUFRASIANA ENTREGADA A TODO POR DIOS

Y POR LOS QUE ME RODEAN PARA HACER EL

BIEN SIN MIRAR A QUIEN

TODO ESTO SIGNIFICA JUMISE PARA MI UNA

OPORTUNIDAD DE ACERCARME MUCHO MAS A

DIOS. ANDY PANDA—QUITO

Hablar de esta obra es algo maravilloso, ya que abarca muchas cosas para

la superación de un niñ@ o adolescente en situación de riesgo.

La Hermana María Augusta Arellano, quien fundó, CENIT, lo hizo pen-

sando en las niñas que trabajan en los mercados situados al sur de Quito.

En la actualidad este Centro brinda apoyo a l@s niñ@s que no han termi-

nado la primaria. Para que estudien y en 3 años reciban su certificado que

les sirva para ingresar a cualquier centro de estudios secundarios. Además

de conocimientos teóricos también reciben talleres de panadería, cerámica

y manualidades.

CENIT, da la oportunidad a las jóvenes adolescentes de prepararse en la academia Artesanal

Rosa Virginia, donde las jóvenes se preparan en el ciclo básico, y además reciben el título de

maestras en Corte, Confección y Bordado. Después de sus 3 años de formación diseñan su pro-

pia ropa y al final d cada año realizan una exposición y desfile de las prendas confeccionadas.

Contamos con el programa: Rescate de Calle, donde un grupo de voluntari@s extranjeros y na-

cionales van a los mercados: San Roque y Camal, para hacer recreación, oración, talleres mo-

tricidad fina, valores y preparación de los nuevos candidatos que iniciarán su instrucción bási-

ca..

El CEA es otro programa de CENIT, l@s niñ@s reciben refuerzo pedagógico, que les ofrecen

los voluntari@s y un educador tanto en la mañana como en la tarde. Además se les acompaña

en la catequesis y tienen la oportunidad de beneficiarse del almuerzo y colaciones dentro del

Centro.

CENIT cuenta con un buen equipo de trabajo que acompaña a niñ@s, adolescentes y sus fami-

lias en los departamentos de: psicología, trabajo social, enfermería, el comedor popular, mi fa-

mily, voluntari@s y el apoyo de las Hermanas de la Congregación del Buen Pastor.

Realizar un apostolado aquí es genial, ya que se puede ver la realidad de los niñ@s y adoles-

centes, brindarles lo mejor de nosotr@s. Sobre todo nuestro amor y tiempo porque sabemos que

es lo que más necesitan.

Joven anímate para que tú también puedas formar parte de esta maravillosa Obra, como volun-

tari@s por un mes o un año y poder brindarle tu ayuda necesaria en esta Institución.

http://www.cenitecuador.org/

Que Santa María Eufrasia y Jesús Buen Pastor bendiga

a CENIT y a cada uno de ustedes.

Evelyn Aray Voluntaria Salesiana.

CENIT

(Centro de la Niña Trabajadora) Congregación de las Hermanas del Buen Pastor

Hola amig@s de Huellas Juveniles:

Les Cuento que el 31 de Julio del

presente año, con gran alegría y di-

versión, JUMISE de Portoviejo, ce-

lebró el cumpleaños de la persona

que nos ha enseñado que todo es po-

sible si lo realizamos con amor.

VIVA SANTA MARIA EUFRASIA……

La celebración fue en la tarde donde participamos de una serie de

juegos que lo quisimos llamar 100% EUFRASIANOS, los ganado-

res recibieron medallas, fue chévere y divertido compartir todos

los grupos juntos: Amigos, Rebaño, Misioneros, las Hermanas

Nélida, María Isabel y la voluntaria María del Carmen.

Todos como una gran familia, porque eso es para mí Jumi-

se ,además contamos con la presencia de la Hermana Francisca, ca-

riñosamente Panchita, que fue parte de nuestra alegría.

Previo a esta celebración, realizamos la novena en honor a nuestra

patrona Santa María Eufrasia, nos reuníamos en diferentes casas,

allí reflexionábamos, aprendíamos y conocíamos más sobre ella.

Le agradezco la DIOS, a Santa Eufrasia, las Hermanas del Buen

Pastor por permitirme vivir esta alegría y experiencia que hace cre-

cer mi espiritualidad.

Les ánimo a tod@s l@s chic@s a experimentar lo que es ser parte

de la familia de JUMISE.

Dios los bendiga, un beso

Génesis Veliz Palacios—Portoviejo

Se impone lo material. Con todas sus fuerzas. No se adormece. En todas las estaciones. Siem-

pre está en temporada. Los cuerpos a la carta. Para eso están los salones de belleza, gimnasios,

clínicas de cirugía estética, y demás santuarios de placeres. Nos lanzan sus cebos, con el mismo

cuidado y mimo, que lo hacía mi abuelo cuando iba a pescar truchas al río Sil. El bombardeo

publicitario nos engancha. Es un negocio redondo. Lo refrendan las estadísticas que nos sitúan

a la cabeza de este mercado en la Unión Europea. Estar a la última moda y lucir un buen tipo se

ha convertido, para muchos, en el salvoconducto para alcanzar el clímax del gusto y vivir del

cuento. Un placer que, por otra parte, a veces, nos deja más sinsabores que sabores placenteros.

El de ser dominados, por ejemplo. Para hacernos ver otra cosa está la tele y las revistas del coti-

lleo. Que sientan cátedra, por desgracia. Nos proponen estereotipos corporales que nos encien-

den la ilusión.

El cuerpo ya no se considera como realidad típicamente personal, como señal de identidad. Se

reduce a pura materialidad y apariencia. No importan los retoques con tal de saborear las mieles

del goce. Ya mismo surge una nueva hipoteca. La del cuerpo. Y los bancos y entidades crediti-

cias serán dueños de nosotros, aún más si cabe. Claro. Los arreglitos valen un riñón y parte del

otro. Haber si por lo menos desgrava en Hacienda. Somos cuerpos vendidos. Y todo por una

boca bien dibujada y carnosa para seducir y rejuvenecer el look. O por unos pechos llenos de

silicona. Encima no son de oro, ¡jolines! Hasta es posible cambiar la mirada. Es la imagen de

una felicidad encerrada en el círculo vicioso del deseo más instintivo, que, para más INRI, pro-

mueve la esbeltez como sinónimo de salud y estética, mientras que la obesidad se relaciona con lo insano y anti-

estético. Para colmo de males, nos ofrecen el peso perfecto, las medidas perfectas... Consecuencia de todo ello, la

anorexia. Los jóvenes, ya se sabe, necesitan tener modelos a imitar. Lo físico es la guinda. Luego resulta que, con

tantas chapuzas corporales, chapoteo de tatuajes y demás pluscuamperfectos colgantes, ni nos reconocemos en el

cuarto de baño. Otro gallo nos cantaría, sí los figurines no cotizasen en exclusiva. Hemos perdido el más común de

los sentidos, el de mirarse a sí mismo con buenos ojos, aceptar lo que uno es, y lo que tiene, y decirse todos los

días, lo que el enamorado dice a la flor. Es la mejor medicina para la salud y el bienestar.

Vivimos unos momentos donde todo vale, como cultura y cultivo. Incluido el culto al cuerpo. La publicidad es tan

pujante y repetitiva que, no pocas personas, piensan que se es más feliz en función del grado de belleza física alcan-

zado. Siempre juvenil y sin arrugas. No se acepta que pasen los años y el cuidado corporal llega a convertirse en

algo obsesivo y en un valor absoluto. Hemos caído en la trampa de considerar la vida del ser humano como una

mercancía de consumo. Cuestión grave para vivir a corazón abierto. Todas estas contradicciones y situaciones pa-

radójicas de bellezas exteriores, son síntomas de falta de armonía entre la lógica del bienestar y la lógica de los va-

lores éticos fundados en la dignidad de la persona.

La nueva plasticidad del cuerpo, se ha puesto de moda. Poco importa lo espiritual. Lo físico, lo que entra por los

ojos a primera vista, cada día es menos auténtico. ¿Quién lo diría? Las distintas clínicas son capaces de metamorfo-

searnos, y escapar, así, de nuestro cuerpo biológico. ¡Qué cara! ¿Y si yo me gusto, por qué cambiar? Prefiero ser un

don Quijote y cambiar la sociedad. Para que se fije más en lo interno. En lo del corazón verdadero. En lo de la po-

esía en los labios. Y en lo de respirar el aroma de una mirada inocente que se injerta en el alma, con todo el amor

del universo. ¡Esto sí que me libera y me asciende a las alturas!

La felicidad no la da un cuerpo dotado de hermosura, sino otros valores como pueden ser la entrega incondicional a

los demás. La donación de uno mismo. Eso es lo que hay que fortalecer y reforzar. Lo que no se hace. Cada día, a

poco que miremos a nuestro alrededor, notaremos la sed de alegrías, a pesar de tantos festines. La diversión verda-

dera es aquella que nos engrandece. Nos pone majos. Como si llevásemos un ángel a nuestro lado. Esos rostros de

belleza sí que imprimen encanto. Esa dulzura, estilo y buen gusto, no es posible conseguirla en ninguna clínica o

salón de belleza.

El capitalismo salvaje nos puede tanto, que nos atonta. Hasta hacernos perder la razón de ser, nuestra identidad y

carácter, nuestros modales intrínsecos que nos vigorizan y vivifican, sobre todo en lo de ser una señorita de buen

ver o un señor de buen vivir. Que no pasa, desde luego, por tener solamente un cuerpo diez. En cualquier caso, si

deseamos llegar a la consecución de la alegría y ser un poco más felices, estoy convencido de que hemos de avan-

zar en una rigurosa ascética personal que nos haga más de los afectos (fondos) y menos de los aspectos (formas).

Lo más gozoso es quererse uno antes por lo que se es, una persona en busca de la verdad y de sus creencias. Lo

demás son aditamentos que nos atrapan y nos esclavizan.

http://es.catholic.net/jovenes/439/2848/articulo.php?id=12882