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PAPELES PARA EL DEBATE . SISTE MAS DE INFORM ACI ÓN PARA LA GESTiÓN CLíN I CA. Pone n ci as pr e sen tado s dur an te la s VII Jo rna das de D oc umenta ció n Méd ica. Ali ca nte 17 y 18 de oct ubre de 1996 7. GESTiÓN CLíNICA Pablo López Arbeloa Director médico Hospital de Cruces. Bilbao l. De la práctica clínica a la gestión clínica El desarrollo de lo que se ha venido a denominar Gestión clínica nace de un razonamie nto muy simple y evidente. lo mejar forma de obtener un mayor rendimien- to de los recursos san itar i os es fomen t ando una buena práctico clinica. Uno práctica clinico basada en la ade- cuación del uso de los rec ur sos diagnósticos y terapéuti- cos, en lo precisión y en la agilidad . Complementariamente, la Gestión Clinica supone la asunción de la gestión de los recursos por parte de los profesionales sani tarios rompiendo de es ta forma con el tradicional divorcio entre los valares asistenciales y las va- lores empresariales, que continuamente conviven en el mundo sani tario. Una práctica clinica efectivo provoca un usa efectivo de los recursos. La trascendencia de es ta afirmación es fundamental para la incorporación de lo gestián clinico como una forma diferente de hacer las cosas en los hos- pitales. la invo!ucración de médicos y enfermeras /os en la gestión de su hospital es básica en este nueva modela de hospital. la razón fundamen tal que justifica esta nece- sidad es que los comportamientos clinicos se reflejan en unos hábitos, costumbres y formo de hacer la medicina. El dotar a estos hábitos de las opart unas dosis de dedica- ción, puesto 01 dio, adecuación en el uso de procedi- mien t os y agilidad, es una de los objetivos básicas de la Gestión Clinica. Cama pueden camprobar, existen nume- rosos profesionales en nues t ros hospita les que llevan mu- chos años practicando Gestión Clínico. 11 . Un hospital diferente Uno de los aspectos mós relevantes de las Reformas sanitarias de los paises occidentales son los cambios que se van o producir en los sis temas de financiación de los hospitales. Estos van o posar de ser centras que tienen garantizado un presupuesto con un compromiso sin ries- go de mejorar sus resultadas , o ser una verdadero empre- sa . Como tal se financiará o través de lo actividad que realice, asumirá los beneficios o riesgos de sus actuaciO" nes y se verá obligado a competir en el mercado sanita- ria. Estos hechas provocarán importantes modificaciones en los correlaciones de fuerzas de codo hospital que se enfocarán en mayar medida o mejorar la competitividad del Centro. Estos cambios en la organización de las hospitales van o modificar ostensiblemente los estilos de direccián. Lo si tuación actual en la que existe una organización \e- rárquica, con uno gran brecho entre las cargos directivos 27 y los diferentes responsables de Servicio a Unidad va o sufrir un gran aplanamiento, motivado por una mayor pre- sencio de los segundos en la gestión del hospi tal. lo cu l turo empresarial que analizo produccián, cali- dad y coste de las prestaciones asistenciales dejará de ser un patrimonio exclusivo de los dir ec ti vos y necesaria- mente deberá de ser asumida por el conjunto de los pro- fesionales del hospital. El hospital configura la empresa que estará constituido por un conjunto de servicios, cado uno de los cuales t en- drá un cometido establecido. los servicios llegarán a acuerdos operativos que permitan coordinar sus actuacio- nes en una atención sanitario en la que el carócter mu[ti- disciplinar codo vez adquiere más importancia. Llegado el caso y con el interés de conseguir una mayor operativi- dad se podrán producir alianzas estratégicas en t re servi- cios con un corócter general (especialidad médica y qui- rúrgico homóloga) o parcial (unidades de mama, cáncer de colon, etc. I Esta configuración basada en un modelo en el que los servicios se es tablecen como soportes fu ndamentales de los prestaciones asistenciales, debe ir asociado o una mayor autonomía de gestión como único método de con- seguir que orienten sus actitudes y aptitudes a lo búsque- da de uno mayor eficiencia. Tal y como sucede en lo ac- tualidad, los valores que en mayor medido estimulan a los equ ipos humanos en la continua mejoro de los resu lta- dos serán lo satisfacción por el trabajo bien realizado (prestigio profesionoll y el beneficio social de sus actua- ciones. lo outonomio de gestión pretende asociar o estos valores lo capacidad de pa rt icipar activament e en las decisiones que influyen en el servicio, adquirir una mayor responsabilidad con los resultados obtenidos y compartir los beneficios o pérdidas derivados de sus comporta- mientos. El nuevo perfil del Jefe de Servicio debe sumar o su función asistencial, la nuevo faceta de gestor y es to impli- co la asunción del binomio riesgo/beneficia. Se le debe de dotar de suficiente au toridad poro dirigir y orientar los transformaciones necesarios. Esto autoridad emanará de su capacidad natural paro asumir lo figuro de lider, pero debe de estar reforzada por un mayor margen de manio- bra en la toma de decisiones que repercuten en su uni- dad 111. Orientación de la gestión clínica hacia el proceso asistencial En lo ac tualidad, lo organizacián hospitalario pivota en torno 01 Servicio como Unidad Funcional y el dispositi- vo asistencial aplicado se enfoco al paciente individual- mente. Este sistema organizativo, que supuso un gran logro de lo jerarquización hospitalaria , hoce que los com- ponentes técnicos de lo atención sean apropiados pero, PAPflESMEDlCOS 19Q7; 6 (31 27-38

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PAPELES PARA EL DEBATE .

SISTEMAS DE INFORMACIÓN PARA LA GESTiÓN CLíNICA. Ponencias presen tados duran te las VII Jornadas de Documentación Médica. Alicante 17 y 18 de octubre de 1996

7. GESTiÓN CLíNICA

Pablo López Arbeloa Director médico Hospital de Cruces. Bilbao

l. De la práctica clínica a la gestión clínica

El desarrollo de lo que se ha venido a denominar Gestión clínica nace de un razonamiento muy simple y evidente. lo mejar forma de obtener un mayor rendimien­to de los recursos san itarios es fomen tando una buena práctico clinica. Uno práctica clinico basada en la ade­cuación del uso de los recursos diagnósticos y terapéuti­cos, en lo precisión y en la agilidad.

Complementariamente, la Gestión Clinica supone la asunción de la gestión de los recursos por parte de los profesionales sani tarios rompiendo de esta forma con el tradicional divorcio entre los valares asistenciales y las va­lores empresariales, que continuamente conviven en e l mundo sanitario.

Una práctica clinica efectivo provoca un usa efectivo de los recursos. La trascendencia de esta afirmación es fundamental para la incorporación de lo gestián clinico como una forma diferente de hacer las cosas en los hos­pitales. la invo!ucración de médicos y enfermeras/os en la gestión de su hospital es básica en este nueva modela de hospital. la razón fundamental que justifica esta nece­sidad es que los comportamientos clinicos se reflejan en unos hábitos, costumbres y formo de hacer la medicina. El dotar a estos hábitos de las opartunas dosis de dedica­ción, puesto 01 dio, adecuación en el uso de procedi­mientos y agilidad, es una de los objetivos básicas de la Gestión Clinica. Cama pueden camprobar, existen nume­rosos profesionales en nuestros hospitales que llevan mu­chos años practicando Gestión Clínico.

11 . Un hospital diferente

Uno de los aspectos mós relevantes de las Reformas sanitarias de los paises occidentales son los cambios que se van o producir en los sistemas de financiación de los hospitales. Estos van o posar de ser centras que tienen garantizado un presupuesto con un compromiso sin ries­go de mejorar sus resultadas, o ser una verdadero empre­sa . Como tal se financiará o través de lo actividad que realice, asumirá los beneficios o riesgos de sus actuaciO" nes y se verá obligado a competir en el mercado sanita­ria. Estos hechas provocarán importantes modificaciones en los correlaciones de fuerzas de codo hospital que se enfocarán en mayar medida o mejorar la competitividad del Centro.

Estos cambios en la organización de las hospitales van o modificar ostensiblemente los estilos de direccián. Lo si tuación actual en la que existe una organización \e­rárquica, con uno gran brecho entre las cargos directivos

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y los diferentes responsables de Servicio a Unidad va o sufrir un gran aplanamiento, motivado por una mayor pre­sencio de los segundos en la gestión del hospi tal.

lo culturo empresaria l que analizo produccián, ca li­dad y coste de las prestaciones asistenciales dejará de ser un patrimonio exclusivo de los di recti vos y necesaria­mente deberá de ser asumida por el conjunto de los pro­fesionales del hospital.

El hospital configura la empresa que estará constituido por un conjunto de servicios, cado uno de los cuales ten­drá un cometido establecido. los servicios llegarán a acuerdos operativos que permitan coordinar sus actuacio­nes en una atención sanitario en la que el carócter mu[ti­disciplinar codo vez adquiere más importancia. Llegado el caso y con el interés de conseguir una mayor operativi­dad se podrán producir alianzas estratégicas entre servi­cios con un corócter general (especialidad médica y qui­rúrgico homóloga) o parcial (unidades de mama, cáncer de colon, etc. I

Esta configuración basada en un modelo en el que los servicios se establecen como soportes fundamentales de los prestaciones asistenciales, debe ir asociado o una mayor autonomía de gestión como único método de con­seguir que orienten sus actitudes y aptitudes a lo búsque­da de uno mayor eficiencia. Tal y como sucede en lo ac­tualidad, los valores que en mayor medido estimulan a los equ ipos humanos en la continua mejoro de los resu lta­dos serán lo satisfacción por el trabajo bien realizado (prestigio profesionoll y el beneficio social de sus actua­ciones. lo outonomio de gestión pretende asociar o estos valores lo capacidad de participar activamente en las decisiones que influyen en el servicio, adquirir una mayor responsabilidad con los resultados obtenidos y compartir los beneficios o pérdidas derivados de sus comporta­mientos.

El nuevo perfil del Jefe de Servicio debe sumar o su función asistencial, la nuevo face ta de gestor y esto impli­co la asunción del binomio riesgo/beneficia. Se le debe de dotar de suficiente autoridad poro dirigir y orientar los transformaciones necesarios. Esto autoridad emanará de su capacidad natural paro asumir lo figuro de lider, pero debe de estar reforzada por un mayor margen de manio­bra en la toma de decisiones que repercuten en su uni­dad

111. Orientación de la gestión clínica hacia el proceso asistencial

En lo actualidad, lo organizacián hospitalario pivota en torno 01 Servicio como Unidad Funcional y el dispositi­vo asistencial aplicado se enfoco al paciente individua l­mente. Este sistema organizativo, que supuso un gran logro de lo jerarqu ización hospitalaria , hoce que los com­ponentes técnicos de lo atención sean apropiados pero,

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lÓPEl MBElCA. P -GESTIÓN CLíNICA

en cambia, carentes de una adecuada planificación y programación,

Este hecha es una realidad constatada y sentida par las profesionales, que reconocen que se practica una buena asistencia médica en nuestros hospitales, pero ad­vierten la necesidad de realizar mejoras en la organiza­ción.

La mejora del sistema, indudablemente, y reproducien­do la experiencia de otras empresas del sector servicias, debe venir auspiciada por la orientación de la organiza­ción hacia el procesa asistencial, salvaguordanda las de­rechas individuales del paciente.

La orientación de la Gestión Clínica hacia el procesa asistencial se centra en dos contenidos:

1 . La protocolización de los procesos asistenciales.

2. Lo utilización de los Sistemas de Clasificación de Pacientes como instrumentos que permitan lo medida de lo cantidad de la atención médica prestada.

l. Protocolización de los procesos asistencia/es

El encauzamiento de las decisioens clinicas y la proto­colización de cuidados es un elemento bósico en la me­jora de la funcionalidad de nuestras hospitales aportando fiabilidad y rapidez a la actividad asistencial. Comple­mentariamente es un robusto mecanismo de aseguramien­to de la calidad.

Las protocolos utilizadas habitualmente tienen un desa­rrolla parcial, limitóndose a incorporar, sobre todo en el caso de las protocolos médicos, aspectos relacionados con el diagnóstico y el tratamiento. Sin duda esta constitu­ye una parte fundamental de cualquier protocolo pera no deja de ser limitada. Se deberia tener una visión más am­plia e integral del procesa asistencial y además contem­plar coma fundamental la necesidad de controlar su grada de cumplimentación .

El protocolo debe contemplar el proceso asistencial de forma integral desarrollando por lanlo los siguientes puntos:

l. Establecer un objetivo clinico que especifique los estóndares de resultados y la expectativa de recupera­ción del paciente. Deben constar, par tanto, aspectos re­lacionados con mortalidad, complicaciones, secuelas, tiempo de ingreso, tiempo de convalecencia, controles posteriares, calidad de vida, etc.

2. Describir las componentes diagnósticos y terapéuti­cas del proceso. Este es el aspecto habitualmente desa­rrollado por los protocolos médicos. Hace referencia ex­plici ta a los criterios diagnósticos y terapéuticos de las di­ferentes patolagias.

3. Planificar los criterios diagnósticos y terapéuticos del proceso. Se deberón diseñar circuitos de decisión en la mayor parte de los procesos asistenciales. Esto es, pla­nificar en tiempo real y de forma cuantitativo los diferen­tes componentes diagnósticas y terapéuticos de las pato­logias mós h?bituales.

4. Disponer de Sistemas de Supervisión . Deben dise­ñarse sistemas de supervisión que permitan conocer de

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forma ógil y continua el grado de cumplimentación de di' chos protocolos. todo sistema de supervisión puede ser algo complejo, o, en todo caso, costoso, aunque sólo sea por el liempa y la dedicación que requieren. Es im­prescindible, par tanlo, realizar un esfuerzo para estable­cer parómetras accesibles, cuantificables y sencillas, que puedan ser registradas par personal entrenada y que re­flejen directa a indirectamen te la calidad del procesa asistencial. La organización sanitaria , tanta a nivel hospi­talaria cama de atención primaria , debe ser capaz de su­ministrar a las unidades funcionales información puntual y periódica sobre las diferentes paró metros previamente es­tablecidos.

Otra aspecto garante de calidad es el establecer, en relación a temas que se consideren bósicas a fundamen­tales, sistemas de alarma o centinela qLe permitan detec­tor inmediatamente las casos que sobrepasen las rangos establecidas. El sistema imfarmático debería ser capaz de captar inmediatamente este tipa de desviación y co­municarla a las correspondientes unidades asistenciales.

5 . Incorporar la visión del usuario. La orientación del sistema sanitaria hacia el proceso asistencial coloca al usuaria en un papel protagonista no sólo cama receptar de servicios sioo coma crea dar de opinión sobre algunos aspectos relacionados con los mismos. Incorparar al usua­rio a este tipo de funciones va a resultar muy dificil par la falta de tradición en este sentido.

En cualquier caso la opinión del usuario puede ser en­riquecedora entre afros en los siguientes aspectos:

01 Organización del método de informacián al paciente.

bl Organización del servicia de atención al paciente y aspectos relacionados con la osistenc:a social.

el Elaboración y desarrolla de las documentas relaciona­dos con el consentimiento informado.

di Participación coma miembros de las comités éticas y de ensayos clínicos.

el Opinión sobre las componentes del cuidada básica del enfermo.

Las protocolos deben ser elaboradas par los propias miembros de las diferentes unidades asistenciales. Esto es necesario ya que el protocolo debe ser asumido como algo pasitiva e incorporado o la labor asistencial diaria , y por el hecho básica de que comparar la actividad can un punto de referencia tiende en si mismo a meiorar el procesa.

En cualquier caso es imprescindible que los conteni­dos técnicas de cualquier protocolo estén en consonancia con las líneas generales establecidas par las sociedades cientificas, a por comités de expertos, o par experiencias clínicas referenciadas bibliogróficamente.

2. la utilización de los Sistemas de Clasificación de Pacientes (S.C.P.)

La medido de la actividad desarrollada en los Centros asistenciales, en su vertiente cuantitativa y cualitativo, es un elemento fundamenta l para la evaluación de resulta­dos.

Lo práctico médico requiere de uno mejoro continuo de los Sistemas de Información que permi tan monitorizar su evolución y que se muestren sensibles o los cambios en los comportamientos clínicos y a las mejaras de la gestión.

los indicadares desarrollados en la década de las ochenta han servido para cuantificar la actividad realiza­da de una forma general siendo incapaces de conside­rar las características clínicas y la complejidad de los pa­cientes.

Por otra parte, la Clasificación Internacional de Enfer­medades (ICD - 9CMI ha permitido codificar los diag­nósticos de los pacientes y permite la identificación selec­tiva de casos clínicos, lo que ha supuesta un impartante avance para la actividad docente e investigadora . Sin embargo sus excesivas categorías (12.0001 Y sus crite­rios de clasificación (etiológicos y topogróficos) la con­vierten en una herramienta de valor limitado en el área asistencial.

Fruto de estas reflexiones nacen los Sistemas de Clasi­ficación de Pacientes (SCP) que pretenden agrupar pa­cientes de parecidas características clínicas y de consu­mo de recursos.

los sistemas mós difundidos en la actualidad son las Grupos de Diagnósticos Relacionados (GDR) y Patient Management Categories (PMC). Ambas fueron desarro­llados en EE.UU. donde son utilizados desde el año 1983. En Europa, y desde 1989, casi todos los paises, con mayor o menar grado de desarrollo, tienen proyectos de incorparación de las SCP en sus sistemas de informa­ción.

los aportaciones de la utilización de los SCP en la gestión clínica san numerosas pero se podrían resumir en los siguientes puntos:

• Agrupan las altas de pacientes hospitalizados en un número limitado de categorías en función de sus coracte­risticos clínicos. Es decir, incorporan una gran capacidad de síntesis.

• Establecen los componentes óptimos de cuidados de los diferentes grupos de pacientes.

• Incorporan los estándares de calidad de las diferen­tes cotegorios, que hocen referencia a tasas de mortali­dad, gravedad, complicaciones hospitalarias, infección nosocomial, etc.

• Establecen el índice Case Mix cama reflejo de la intensidad de recursos necesarios poro cada paciente y, por la tanto, permiten usar la complejidad de los pacien­tes en la medida de la actividad. Este indicador es utili­zado en numerosos países occidentales como sistema de financiación de los centros sanitarios.

los SCP que miden lo actividad desarrollada en régi­men de hospitalizacián deben complementarse con herra­mientas que, siguiendo la mismo filosofía de diseño, eva­lúen la actividad realizada en consultas , urgencias y ex­ploraciones complementarios.

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LÓ?EZ ARBHOA. P -GESTIÓN CLiNICA

IV. Los Sistemas de Información (SI). Un pilar básico en la Gestión Clinica

la incopración de la Gestión Clinica va a influir deci­sivamente en los SI fundamentalmeote en dos aspectos:

• la necesidad de compartir SI entre clinicos y gesto­res de tal forma que sirvan simultáneamente a ambos co­lectivas en el análisis de la situación actual y en la toma de decisiones. En esta línea seró necesario diseñar nue­vas indicadores y cuadros de mandos en las que presumi­blemente las sistemas de clasificacián de pacientes van a tener un protagonismo destacado.

• los SI deben de respaldar de cerca la práctica clini­ca. En los últimos años, se han realizado un esfuerza im­portante dirigido fundamentalmente a departamentos cen­trales (Admisión, Archivos, Quirófanos, laboratorios, Ra­diología , etc.). sistemas bósicos y núcleo central para la integración de los SI hospi talarios. Los servicios asisten­ciales indudablemente se han beneficiado de estos mejo­ras, logrando una historia clínica mós accesible, una pla­nificación de ingresos y quirófanos que les ha aportado simplicidad y agilidad en los procedimientos y una infor­matización de los laboratorios y radiología que ha redu­cido notablemente los tiempos de respuestas. Sin embar­go, y salva algunas excepCiones, los SI han estado aleja­dos del apoyo directo a la próctica clínica.

Indudablemente una de las causas que han motivado que estas herramientas no hayan tenido el desarrollo es­perado es la dificultad que entraña su diseño. También, como he mencionado previamente, la necesidad de dis­poner de unos niveles de información que han sido apor­tados por la mecanización de los Servicios Centrales.

las óreas de actuación generales de apoyo a la próc­tica clinica en relación a los SI podrían ser las siguientes:

1. Gestión de órdenes médicos y planificación de cui­dados. Establecimiento de sistemas que instrumenten y co­ordinen la génesis de los distintas órdenes médicas inte­grando en las mismas el tratamiento farmacológica, los cuidados de enfermería , y las peticiones a quirófanos, ra­diología, labora torios, dietética, etc. Estos mecanismos de coordinación van a suponer uno importante innova­ción en las Unidades de Enfermería, logrando reducir no­tablemente la burocracia que hoy ocupa un notable tiem­po a médicos y enfermeros en las plantos de hospi taliza­ción. Simultáneamente se incrementarón los niveles de se­guridad y fiabilidad .

2. Gestión de protocolos asistenciales. Uno de los elementos tradicionalmente ligados a lo calidad asisten­cial es el establecimiento de protocolas de actuación que sirvan como guía en lo aplicacióo de los planes diagnós­ticos y terapéuticos. La informatización de estos procesos va o permitir que esta guía de cuidados esté más cerca del clínico y le ayude de una forma interactiva en lo toma de sus decisiones. De nuevo adquiriremos agilidad, precisión y seguridad. Complementariamente, el anólisis de los diferencias entre los componentes diagnósticos y terapéuticos esperados con los realmente obtenidos, per­mitiró realizar evaluaciones de lo calidad asistencial mós precisas .

3. Acceso a la infarmación clínica del paciente. la historio clínica es y seguiró siendo durante muchos años

PIIPElESN.ÉDíCOS )997 6131 2ns

lÓPEZ ARBElOA, P "3ESfIÓN CliNICA

el centro de lo información clínico del paciente. Sin em' bargo, su manejo planteo por uno porte problemas de accesibilidad y por otro, problemas de manejo, localizo' ción y procesamiento de la información que contiene.

En los últimos años, el desorrollo informótico de los hospitales ha conseguido que numerosos datos clínicos se encuentren en soporte magnético, fundamentalmente rela' cionados con servicios generales clínicos. Recientemente se ha avanzado en lo incorporación de informes médicos o los bases de datos correspondientes o informes de alto, informes de exploraciones complementarios u otro tipo de informes. Esto último aportación, complementoriamente ha supuesto uno gran ayudo o lo edición de informes o través de todos los técnicos de ofimótico. Por lo tonto el clínico puede tener o su disposición un gran volumen de información clínico que indudablemente le va o facilitar su trabajo, y le puede ayudar o que sus decisiones sean mós precisos.

4. Nuevos Cuadros de Mondo poro analizar lo evolu' ción del servicio. Tradicionalmente los cuadros de mondo han sido establecidos por los directivos. los responsables de los servicios acceden o los mismos pero no se sienten plenamente identificados con sus indicadores. Su insensi' bilidad o los aspeclos clínicos de los pacientes, unido o los escasos índices que evalúan con rigor lo calidad asis' tencial hoce que muchos Jefes de Servcio no realicen un seguimiento continuado de lo evolución de su servicio.

El diseño de nuevos cuadros de mondo debe de estar presidido por lo atención o los necesidades de informo' ción de los servicios. Deben de incarporar lo descripción de los procesos mós frecuentemente atendidos, y los indio cadores del resultado asistencial que permitan uno mejor monitorización de lo próclica clínico. También los datos económicos que reflejen el consumo de recursos, bien en unidades económicos o en utilización de recursos asisten~ ciales, deben de ser un elemento guío de su desarrollo.

V. Fomento de autoevaluación

lo calidad de la asistencia sanitario ha sido siempre una necesidad perseguido por los profesionales sanito' rios, principalmente de una manero intuitivo.

La auloevaluación clínica es el análisis crítico y siste­mótico de la calidad de los cuidados médicos, incluyen' do los procedimientos utilizados en el diagnóstica y en el tratamiento, el uso de los recursos y los resultados clini' cos, osi como la calidad de vida resultante paro el po' ciente. Es una comparación sistemática y cuantificada entre actuaciones médicas específicos y los patrones ha· bituales con el fin de identificar los oportunidades paro aumentor la calidad de los cuidados del paciente.

No me vaya extender en la descripción de técnicos relacionados con lo calidad asistencial. Sí me gustaría re­saltar la necesidad de convencer e ilusionar 01 clínico en la asunción del liderazgo en el desarrollo e implantación de dichos técnicos. A mi juicio es la único forma de con' seguir que las mejoras detectadas en los programas de calidad y otras mejoras que hoy somos incapaces de de­tector sean aplicados y percibidos de uno formo inmedia' ta por los usuarios.

PAPElES MÉDICOS 1 QQ7. 6 ¡31 2738 30

VI. Autonomía de gestión

lo autonomio de gestión es lo guindo de la gestión clínico y uno exigencia razonable del clínico o asumir los valores empresoriales en lo gestión Oe su servicio. Por otra parte, es una consecuencia lógica en la madurez que deben de presidir los relaciones entre clínicos y ges' tares.

Los principales instrumentos que resumen la autonomía de gestión son:

1. lo Gestión de recursos humanos.

2 . El Presupuesto clínico y la cuento de resultados.

l. Gestión de recursos humanos

El éxito de lo gestión clínico depende en gran medido de lo capacidad de crear en nuestros Servicios y Unida· des Funcionales grupos humanos cohesionados y motiva' dos par los logros del equipo.

Se debe entender el trabajo en equipo como un todo que tiene objetivos comunes generales y objetivos pro­pios profesionales, tendentes 01 bien común. lo partici' poción de los individuos en los equipos conduciró o una transformación de lo mentalidad de los personas posan' do de uno formo de pensar funcionarial, exenta de ries' gas, acomodaticio y desmotivadoro o un sentimiento de orgullo corporativo propio de lo pertenencia a un equipo que trabajo poro lo obtención del éxito en sus diferentes objetivos.

lo creación y mantenimiento de estos equipas humo' nos preciso de lo figura de líder que oriente el rumbo y sea capaz de delegar y motivar o los individuos en la consecución de los objetivos comunes.

Paro ello es imprescindible que dispongo de herra' m ientas de gestión que refuercen su autoridad natural e incrementen su margen de maniobro en lo política de mo­tivación. Entre estos instrumentos podemos identificar los siguientes:

• Capacidad de planificar los recursos humanos ne­cesarios así como su perfil profesional. Distribución del personal de acuerdo o los necesídades de lo Unidad.

• Participación activo en lo selección del personal.

• Capacidad de seleccionar los modalidades de con· tratación que sean más operativas en lo solución de cado problema.

• Política de motivación e incentivación.

2. Presupuesto clínico y cuenta de resultados

Asumir la gestión de recursos materiales y económicos financieros completo lo gestión clínico integrado.

Supone introducir en lo mentalidad del clínico elemen· tos empresoriales y comerciales y necesoriamente debe de ir asociado o lo sensación de riesgo/beneficio que todo actividad empresarial comparta.

Poro ello debe de dotarse o codo Servicio o Unidad Funcional de un contrato programo que establezco su contenido asistencial y que esté respaldado por un presu' puesto clínico.

GUE RRE RO FE ~ i'\W\IDEI. M RTANClA EN LA ELECCIÓN DE lOS S1STEIMS (): INFORtMClÓN ADECUAOOS

Simultóneamente cada Servicia dispandró de una cuenta de explotación que permita identificar beneficia a pérdidas derivadas de su actividad. Dentro de esto cuen­ta se consideraría como ingreso aquellas cantidades que el hospi tal es capaz de facturar o través de su contrata programo y como gastos los correspondientes a personal , fungibles, estancias, consumo de laboratorio, radiologia, etc., en definitivo, los gastos generados poro el desarro­llo de su actividad asistencial.

El Jefe de Servicio o Unidad deberó de asumir su res­ponsabilidad en relación a los resultados de la cuento de explotación. En el caso de generar pérdidas se pondró de manifiesto su incapacidad de logror los objetivos de su servicio.

En el coso de obtener beneficios, éstos se deberían de transformar en inversiones en equipamiento y en incen­tivoción del personal de la Unidad de acuerdo a unos cri­terios pactados con anterioridad .

8. IMPORTANCIA EN LA ELECCiÓN DE LOS SISTEMAS DE INFORMACiÓN ADECUADOS

Mariano Guerrero Fernández Director Gerente. Hospital Universitaria Virgen de la Arri­xaco. Murcia.

INTRODUCCiÓN

Podemos aceptor el término "Gestión Clínico " como un mod~lo de gestión de servicios sanitarios y mós con­cretamente como un modelo de dirección de hospitales, dónde el protagonismo es de los profesionales clínicos y se potencian los actividades que mejoran los resultados y el uso racional de los tecnologías. Es decir, se trota de garantizar la próctica clínico apropiado.

La evolución del gasto sanitario en los últimos años ha inducido que los esfuerzos en el anólisis del sistema sani­tario se dirijo mós haCia lo búsqueda de lo eficiencia en lo gestión de recursos asignados que hacia lo garantia de lo eficacia y efectividad del dispositivo socio-sanitario. Es ésto la razón y no la aseveración de que actualmente

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estén definidos ambos atributos de lo próctica clinica ,en particular, y del sistema sanitario, en general.

Considerada la eficiencia como uno característico bó­sica que legitima al sistema sanitario público y hoce ren­table o viable al privado, el objetivo pasa por ajustar lo producción de servicios sanitarios de acuerdo a los recur­sos asignados, dentro de lo considerado adecuado so­ciosanitariamente, abarcando no sólo las aspectos cientí· fico y técnicos sino también los legitimas aspiraciones de los ciudadanos y de los profesionales sanitarios.

Lo eficiencia del dispositivo asistencial, como empresa productora de servicios de gran impacto social, podemos fragmentarla, encontrando uno efiCiencia social, otra pro­ductiva o técnica y otra clínica o de gestión clinica.

Lo eficiencia social es la expresión de la maximiza­ción del bienestar social a través de los dispositivos asis­tenciales .

La eficiencia técnico es sinónimo de lo producción de servicios sanitarios intermedios o primarios, sani ta rios o no, incluyendo tanlo determinaciones analíticas, explora­ciones radiográficas, etc., como gastos de mantenimiento de la estructura y funcionamiento Igastos de limpieza, electricidad , etc.l.

Se trata de producir servicios bósicos e integrantes del proceso asistencial, con independencia del uso que se haga de los mismos. Este tipo de eficiencia es una res­ponsabilidad mós directa de la estructura organizativa y directivo.

La eficiencia clinica, como responsabilidad directa de los profesionales clínicos se bosa en la ulilización racio­nal de los servicios intermedios sanitarios en el propio acto asistencial. Es la base de la próctica clínica de cali­dad, apoyada en conceptos de apropiada próctica clíni­ca y en la ética de la asistencia sanitaria. En ello se inclu­yen no sólo las conclusiones del consenso en lo utiliza­ción de las tecnologías sanitarias perfectamente evaluo' das, sino también el abordaje diagnóstico y terapéutico de los pocientes, tales como protocolos clínicos o guías para la buena próctica clínica como vía para la acredita­ción del proceso asistencial, de acuerdo a los avances científicos y técnicos . Acreditar el manejo de pacientes aiustóndolos según los riesgos o soportar, puede ser uno de las alternativas en este campo de la gestión de servi­cios sanitarios.

Herramientas para la Gestión Clínica

El concepto de gestión clínica, aunque basado en la propia evolución de lo ciencia médico , significa o lo vez, uno ruptura parcial con la estructura de nuestras empresas sanitarias, no sólo en su organización sino también en el propio proceso de toma de decisiones.

En este sentido, como todo proceso de cambio, debe de basarse en las expectativos de los profesionales y de los clientes del sistema, aunque abordando lo estrategia como si de un proceso de reingeniería sa nitaria se trota~ ro , dónde el anólisis de lo fundamental y el rediseño radi­cal de los procesos son lo único formo de conseguir me­joras evidentes .

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GUEl!l!f FERNÁNDEZ, P -lMPQRTANQA EN LA ELECCIÓN DE 105 StSTEIY'IAS DE INFORMACiÓN ADECUAOOS

La geslión clínica como sinónimo de práctico clínico apropiado debe de basarse en lo consecución, como antes expresóbamos, de eficacia y seguridad, puesto de manifiesto con lo elabaración de ensayos clinicos con tecnologias sanitarios, de efectividad basado en el anóli­sis de lo próctica clínico cotidiano y evaluado parcial­mente o través del indicadar negativo launque útil), cono­cido como martalidad evitable. Igualmente paro lo conse­cución de lo ca lidad clínico es preciso que concurro uno valaración ético que abarque tonto lo equidad en el ac­ceso Isistemas de financiación público), como lo acepta­bilidad de lo población. En último lugar también se preci­sa de la eficiencia en la próctica clínica.

Todos estos atributos precisan paro su control de siste­mas de información ISII adecuados, pero o lo vez es ne­cesario implantar uno nuevo organización centrada en 105 clientes.

A. Sistemas de información para los clientes

En el desarrollo de 105 sistemas de información, deben de tenerse en cuento todos 105 premisas integrantes de lo calidad de lo asistencia sanitario. En primer lugar lob­viando lo situación actual bastante generalizado, en lo que 105 clientes del sistema sanitario de financiación pú­blico estón en situación de cautividad), las expecta tivos de los clientes deben de ser tenidos en cuento, incidien­do en 105 procesos "bósicos" que generan valor paro el cliente y que no coinciden con los considerados como im­portantes o relevantes por los profesionales del sistema.

Actualmente no basto con decir que 105 presupuestos se cumplen, sino que se deben de gastar en mejorar la salud o mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Es en este sentido cuando un anólisis de los expectativos de 105 cl ientes del sistema sanitario cobra sentido real.

Los encuestas de salud, 105 planes de salud y sobre todo un revolucionario e innovador programo de recrien" loción 01 diente, sería uno extraordinaria herramienta poro el lema que nos ocupa. La relación entre un servicio de salud y los ciudadanos-clientes debe pasar por lo re­definición de lo que se le ofrece y por lo que se le exige. El SI diseñado paro cubrir estos imperativos no tiene una base clinica en sentido estricto, pero sin embargo, contri" buye o que lo próctica clínico, en el sentido mós amplio, sea adecuada. Se trata de posicionar al paciente en el eje de la arganización.

El SI debe aportar información para tomar decisiones ante las preguntas siguientes: ¿Cómo participan los ciu" dadanos en la regulación del sistema sanitario? ¿Cómo se podría facilitar esto cuestión? El SI integrada, basado en la identificación del paciente a través de la tarjeta sa­ni taria individual, puede ser una solución para conocer cualita tivamente las necesidades de las pacientes . Pero no seria suficiente, parque esta cuestión es de mayar utili­dad poro las profesionales del sistema, poro 105 gestares a para las políticas. Al ciudadana se le debe de ofrecer en términos comprensibles una posibilidad de opinar na sólo en lo financiación y el modelo sanitario sino también en la tamo de decisiones del procesa asistencial, acep­tando que poro ello es preciso invertir en educación sani" taria. Consentir informada mente sería una garantia para la participación.

PAPEIES I\l1l{)COS 1997, 6 ¡3) 2738 32

En el casa concreta de las hospitales, la histaria clini­ca unificada can la relación de las servicios prestadas, el perfil diagnóstico y terapéutica a través del episodio clíni­ca, deben ser algunas de las características irrenuncia­bles del SI de asistencia especializada, yo la vez inse­parable del SI de atención primaria .

S. La organización para la gestión clinica

Antes de adentrarnos en los SI cama herramientas de gestión clínico en el sentido más estricto, es preciso inci" dir en la necesidad de abardar el cambia arganizativo cama tecnología para la gestión clínica.

Es necesaria una nueva organización paro nuestros empresas sanitarios que permita adentrarnos con garan" tias en el renovada concepto de la gestión clínica a de la buena próctica clínica.

Nuestras organizaciones se han desarrollada mós de acuerda a las espectativas de 105 propias profesionales del sistema que de acuerda a las necesidades de 105

clientes. Hablamos de servicias médicos coma la célula de la organización, obviando que la perversidad de la cuestión radica en la innegable compartimentación de la asistencia sani taria generada can el advenimiento del de­sarrolla tecnológica Ipor otra porte de incalculable valor para las servicias sanitarias de las países desarrolladas) y en la fragmentación del procesa asistencial, cama si la salud , la enfermedad y toda el espacia intermedia !inclu­ye la prevención y la educación para la salud), na fueran uno continuidad.

Debemos avanzar hacia uno organización mós cen­trada en las necesidades de las clientes, en el propia pro­ceso asistencial y en \0 asistencia continuada, sin que ella contravenga el desarrolla científica, el concepto de flexibilidad clínica y la autonomía profesional , favorecien­do que la organización migre desde la posición actual de los servicias médicas lbasados mós en la influencia de las especialidades médicas que en las necesidades de 105 pacientes), hacia la multidisplinaredad, ya que la concurrencia de diferentes técnicos en el manejo de en" fermedades o de tecnologías es más frecuente codo dío. El paciente recorre servicios médicas que luchan por mantener su identidad , pasa por diferentes exploraciones patrimonio de otras especialidades, cruza las delimitadas barreras entre la atención especializada y la atención pri­maria , pero se corece de una visión integral de su proce­so. La organización se ha inventado la conocida "hoja de interconsulta N

, como un adhesivo, consciente de la fragmentación.

La nueva organización debe hablar de equipos de proceso, de evaluación de resultados, de anólisis de las habilidades y de jefes que ejerzan el liderazgo y na el control.

La solución seria, por una parte, la agrupación de las profesionales y de sus tecnologías de acuerda al anólisis de la casuísti co y en consecuencia o los características de 105 clientes, obviando el hermetismo de la organiza­ción basada en 105 servicios, creando grupos multidisci­plinarios de profesionales en torno a líneas de producto sani tario entendible epidemiológica y clínicamente la modo de empresas mós autónomas dentro de las propias

GUERRERO fEI1NANDEZ, M WJ'ORTANCIA EN lA ELECC DE lOS SISTEMAS DE INfOítf.AACIÓN ADECUAOOS

hospitales), en constante adaptación, tonto o los nuevos prestaciones, o los nuevos perfiles profesionales yola evolución de lo próciica médico.

Uno vez resuelto lo reorientación cliente y el cambio organizativo de la empresa sanitaria, podemos adentrar­nos en el cómo llevar o cabo este proceso de cambio. Sin dudo, se ha de hacer con mós información, mayor accesibil idad y sobre todo, mejar utilización, paro que lo práctico clínico se base en el análisis de lo evidencía .

C. Sistemas de información para la gestión clinica. Las herramientas adecuadas

los SI son un conjunto abstracto, unitario y coherente de elementos humanos y tecnológícas relacionados, cuyo finalidad concreto es facilitar lo tomo de decisiones. Po­dríamos afirmar que su objetivo consiste en fomentar un mejor manejo de lo inrormoción y uno mayor partici­pación del médico u otro profesional sani tario, compagi­nando el liderazgo de los gestores sanitarios profeSiona­les con el de los profesionales médicos, los cuales deben de actuar con gran autonomía.

El SI debe de integrar los aspectos administrativos, clí­nicos y financieros yo la vez favorecer el proceso de asistencia gestionado (managed care), incorporando el concepto de práctico clinica basoda en lo evidencio , comparando nuestros resultados con los considerados me­jores de acuerdo 01 avance tecnológico. Yo que lo eficiencia es un término relativo el evaluarla en un proce­so o intervención clínica tiene que ser en comparación con otro. Simplemente se tro to de disponer de informa­ción que permito comparar los diferentes modelos de próctica clínico entre diferentes profesionales, servicios médicos, hospitales o países, ante un grupo de pacientes similores desde el punto de visto sociosonitario, o través de un ajuste de riesgos.

El SI debe de permitirnos volorar lo realidad clínico de inicio, identificar los oportunidades de mejoro, esta­blecer necesidades de diseño de procesos, favorecer e impulsor condiciones favorables de lo estructuro organizo­tiva que impulse el cambio y sobre todo, debe permitir­nos comparar y evaluar el proceso asistencial o sociosa· nitario, así como el coste y lo calidad del mismo.

Debe permí tir evaluarse lo ingeniería de lo tomo de decisiones, paro que con un plan de mejoro , se inere­mente el servicio y su calidad a lo vez que se d isminuye el tiempo de respuesto y el coste.

Como valor añadido, los SI en los que ha de basarse lo gestión clínico, potencian lo integración de los dos cul­turas existentes en los hospitales: lo de los clinicos y lo de los gestores, devolviendo o los clínícos lo responsabilidad del día a día del proceso osístencíol , permitiendo o los gestores ocupar su tiempo en lo evaluación de la calidad y lo eficiencia del servicio, permitiendo el posicionamien­to de lo empresa desde uno visión competi tivo.

A lo largo de lo último década, se ha posado de lo casi absoluto inexistencia de información paro lo tomo de decisiones o lo existencia de uno ingente contidod de lo mismo, aunque debemos de aflrmor que mucho de lo in­formación generado no ha tenido ninguno utilidad .

33

Al desarrollo de los SI de corte cuantitativo, han segui­do los cualitativos, que aportan informoción paro lo eva­luación. Se troto de SI que persiguen lo gestión de lo ca­suístico , uno vez reconocidos los perversidades de lo gestión de lo producción (como ejemplo baste señalar los ingresos y estancias innecesarios) .

Podemos distinguir como SI poro lo ges tión clínico aquellos que aportan informoción sobre:

• la definición cualitativa del proceso asistencial y su proceso de ingeniería, con especificación de sus componentes esenciales.

• El nivel de eficiencia clinica , evaluando los variacio­nes en el abordaje de pacientes .

• lo evaluación económico de los procesos.

Los SI para la evaluación cualitativa del servi­cio sanitario y sus componentes esenciales

El producto "al to post-hospitalización" es el identifica­do, estando recogido de formo habitual en el CMBD (Conjunto Mínimo Básico de Datos) , los SI basados en lo identificación del episodio y lo gestión de lo información que genero el CMBD han contribuido de uno formo ex­cepcional 01 concepto de gestión clínico ,

lo definición de lo producción del área de hospitali­zoción o través de los herramientas agrupadoras de pa­cientes: GRD, PMC, APACHE, DS u otros (cuadro 1), ha aportado uno nuevo dimensión o los SI.

Cuadro 1 Herramientas de los agrupadores

de pacientes GRO y PMC

GRO

Categorías Diagnósticos mayores 25 GRD más frecuentes % Casos extremos índice Funcional jndice Case-Mix Peso medio relativo

PMC

Líneas de producio Porcentaje de Intensividad Relativo jndice de Severidad Altos Potencialmente Ambulatorios Análisis de los complicaciones Anólisis de los Comorbilidades Vías de Gestión de Pacientes

El análisis de lo casuístico global de un sistema sanita­rio, de un hospital , de un servicio clínico, de un grupo etario incluso el análisis de un grupo de pacientes clínica­mente entendibles y con similar consumo de recursos, Ta­blas 1, 11,111 , IV,

I1APf(CSMÉDlCOS lQQ7. 6(31 77·38

GUERREro FERNÁN~Z. M .wK:NITAN::LA EN lA ElECQf)N DE LOS SISTEMAS ~ lNFQR,lMOÓN AOfC:UA()(Y.

Tabla 1. Distribución de los GROs más frecuentes. INSALUD 1995

NÚM. GRD I DESCRIPCiÓN N.' % % ESTANCIA DESV. PACIENTES ACUMULADO MEDIA TIPICA

1 373 I PARTO SIN COMPliCACIONES 51 214 6,28 6,28 3,42 4,23 2 470 I NO AGRUPABLE 20273 2,49 8,76 11,37 77,11 3 39 PROCED.SOBRE CRISTAliNO CON O SIN VITRECTOMA 20.034 2,46 11,22 2,78 3,03 4 88 ENFERMEDAD PULMONAR OBSTRUCTIVA CRÓNICA 13947 1,71 12,93 12,27 49,13

5 372 PARTO CON COMPliCACIONES 12640 1,55 14,48 4,08 3024

6 127 INSUFICIENCIA CARDIACA & SHOCK 12424 1,52 16,00 11,23 9,45 7 777 ESOFAGITIS, GASTROENI & TRASI DIGESTIVOS MISCElAN, 11,982 1,47 17,47 3,97 4,60

8 14 TRAST CEREBROVASCUlARES ESPECíFICOS EXCEPTO AIT 11.769 1,44 18,91 14,51 18,19 9 162 PROC SOBRE HERNIA INGUINAL & FEMORAL EDAD> 17 SIN CC 10.662 1,31 20,22 4,37 3,69

10 410 QUIMIOTERAPIA 9.766 1,20 21,42 3,67 6,13

Tabla 2. Caracteristicas de las altas por servicias periodo: 1-1-94 / 31 - 12-94 Hospital de San Juan. Alicante

SERVICIO ALTAS

('lo) ESTANCIA R,I,S, íNDICE DE PRESENCIA POTENCIALMENTE

N,' MEDIA SEVERIDAD COMPLICACIONES AMBULATORIAS

ClR 1.294 11,7 5,5 1,232 1,7 3,9% 36,0% TOC 1.180 10,7 4,2 0,616 1,0 0,5% 8,1% MIN 820 7,4 10,8 1,309 3,0 146% 5,5% TRA 795 7,2 6,8 1,155 2,0 2,5% 18,9% MOl 769 7,0 8,8 1,298 2,2 10,0% 5,1% GIN 755 6,8 5,8 0,824 1,1 0,4% 43,6% CAR 744 6,7 7,3 1,288 1,6 2,3% 1,1% ONC 730 6,6 7,6 0,962 1,7 1,4% 2,5% OFI 719 6,5 2,2 0,697 1,0 0,0% 86,1% URO 458 41 4,7 1,355 1,6 1,5% 12,0% NER 413 3,7 9,3 1,301 2,5 5,1% 4,6% NEM 411 3,7 7,5 1.172 2,2 4,4% 1,0% ORL 397 3.6 4,3 0,654 1,2 0,5% 59,4% NEM 276 2,5 5,6 0,742 1,5 0,7% 16,7% CMX 251 2,3 5,6 1,141 1,4 0,4% 46,6% ASC 251 2,3 4,5 0,681 1,6 0,8% 13,1% lAC 212 2,9 6,7 0,853 1,5 10,4% 23,1% PRE 202 1,8 3,9 0,662 1,5 1,5% 26,2% CTO 108 1,0 8,2 1,083 2,3 0,0% 1,9% MNU 87 0,8 1,5 0,646 1,0 0,0% 0,0% RTE 86 0,8 2,7 0,724 1,0 0,0% 36,0% UMI 50 0,5 7,8 1,623 3,6 22,0% 0,0% HEM 45 0,4 9,7 1,401 2,3 4,4% 11,1% CPl 1 0,0 7,0 1,786 2,0 0,0% 0,0%

TOTAL 11,054 100,0 6,2 1,027 1,7 3,6% 21 ,9%

Tabla 3. Distribución de los GROs más frecuentes. Hospital Ramón y Cajal año 1995 CEGA: 2843

NÚM, GRD DESCRIPCiÓN N,'

% % ESTANCIA DESV. PACIENTES ACUMULADO MEDIA TIPICA

1 323 CÁLCULOS URINARIOS CON Ce. &/0 lITOTRIPSIA EXTRACOR 764 3,35 3,35 1,86 4,83

2 39 PROC. SOBRE CRISTALINO CON O SIN VlTRECTOMIA 710 3,12 6,47 1,90 3,05

3 14 TRASI CEREBROVASCUlARES ESPEcíFICOS EXCEPTO AlT 840 2,11 8,57 15,76 13,60 4 541 TRAS. RESPIRATORIOS EXCPT INFECCIONES, BRONQUITIS 414 1,82 10,40 19,4 22,43

5 410 QUIMIOTERAPIA 379 1,66 12,06 8,55 9,31

6 119 LIGADURA & STRIPPING DE VENAS 363 1,59 13,65 1,43 1,45 7 55 PROC. MSCElÁNEOS S08RE OíDO, NARIZ, BOCA 310 1,36 15,01 5,97 7,63 8 167 APENDICECTOMíA SIN DIAGN PRINCIPAL COMPLICADO 289 1,27 16,28 3,22 2,14 9 127 INSUFICIENCIA CARDIACA & SHOCK 275 1,21 17,49 14,08 9,47

10 708 INFEC RElAC CON HIV SIN USO DE OPIACEOS 270 1,19 18,68 21,72 17,53

PAPflESNlIOCOS1QQ7. 6131 2738 34

Cl ¡¡.~ F j.'NAN['IfZ M IMr JlT/lN(lAENLAElECC !NOf c;,SlST(MA' DI: INFC~MACIC.NAOfCtJo\OOS

Tabla 4 1.- semestre 1996. Hospital Universitario Virgen Arrixaca

Estancia media por GRD Ordenado por pacientes totales. Edad> 65 años

DESCRIPCiÓN DEL GRO GRO IPACtENTES TOTAL DíAS ESTANCIA MEDIA

%

ENFERM. PUlMONAR OBSTRUCTIVA CRÓNICA 88 PROC. SOBRE CRISTAliNO CON O SIN VlTRECTOMIA 39

INSUFICIENCIA CARDIACA & SHOCK 127

TRAST. CEREBROVASCUlARES ESPECiFICOS EXCEPTO AIT 14

REIMPlANl MAYOR ARTICUlACIÓN & MIEMBRO 209 ANGINA DE PECHO 140

La identificación de los componentes de la atención basados en la estancia media por proceso, coma tiempo de respuesta de la organización poro resolver un proceso sanitario, los rerfiles famacoterapéuticos, analíticos y ra­diográficos, e nivel de CUidados y la complelidad de las procesas, 01 comporor los resultados con grandes bases

TOTAL NACIONAL HOSPITAL DIFERENCIA

155 119

79

68 67

60

5.19 1457 11,370 9,400 1,970 3,98 592 3,860 4,974 -1,114

2.64 685 I1 350 8.670 2.679 2,27 855 14,860 12,573 2,286 2,24 1.275 21,840 19,029 2,810 2,00 547 9,160 9,116 0.043

de datos homogéneas y potrones de actuación conside­radas de calidad, evidencian diferentes modelos de abar­dale en el proceso asistenCial. El S: debe incluir esta posi­bilidad. como elemento de revisión sistemática de la eVI­dencia clínica (RSECJ. así como lo comparación con los guías de práctica clínica (cuadro 21

Cuadro 2

ADMISiÓN EXPLORACIONES DIAGNÓSTICOS COMPONENTES DE CUIDADOS P.M.C,

Antibióticos Analíticas

1I RedUCCIón f-- Terapia Física

~ Intervención Abierta Cuidados MediOS

Fracluro 15 dios eslanciol Cerrada EslanClO TOlal. 10-28 dios

- Anillo 1--Pélvlco

Sin Terapia Físico

14802

1 - RedUCCión - TroccI6n 6seo

Abierta Eslancia Tolal. 3-14 dios

Antibióticos

Fractulo Analíticas

Abierla Praduclos Sanguíneos

14803

1 Caido casual 1-- An,;1o ---- Intervención

Traumatismo Pélvlco CUidados MediOS

Hemalama R,oyos X - (5 dios eslanclal

Dolor en extrem Oseas ESlonclo TOlal 1556 dios

Clínico

AntibiótiCOS

Reducción rAC

1 I -Abierta 1- Terapia física 4804

Intervención Estancia Total 1421 dios H Fraclura ~

Acelabulor

rAC Sin Terapia FíSICO 1

4805 1

L- RedUCCIón 1-- Tracción Ósea

CJ Abieno Eslancia Tolal 7 4 dios

Luxación AplicaCión de Yeso

14806

1

PATIENTS MANAGEMENTS PATHS - Cadera sin Reducción Cerrado Tracción Óseo

FRACTURAS PELVIS/ CADERA Fractura Estanclo 10tol: 3·\ O dios

35 N f.1fDtCOS QQ7 6131 2731

GUERREIiIO FfRNÁNDEZ. M .\N\PORTANClA EN U\ ELECCIÓN DE lOS $1$TE/vIA$ DE INFORtv\AOÓN ADECUADOS

la evaluación sistemética de estos aspectos es funda­mental, para que el concepto de flexibilidad clínica y au­tonomía proFesional no colisione con el consenso sobre el abordaje científico y técnico en el área diagnóstico y te­rapéutico.

SI para evaluar tanto la eficiencia técnica como clínica

El SI paro lo evaluación de la eficiencia técnico o pro­ductivo tiene que incluir una definición de los productos intermedios del proceso asistencial, con independencia de la utilización que de los mismos se lleve a cabo. Se trato de evaluar lo cantidad, lo calidad y el coste, como un atributo de ésto, de codo uno de estos procesos inter­medios, yo sean sanitarios (determinaciones analíticas, elc.). como no sanitarios (manten imiento de estructuras,

limpieza, etc.).

En sentido estricto, esto evaluación está fuero de lo que se entiende por gestián clínico, pero es de gran im­portancia paro la eficiencia global del proceso asisten­

cial.

Lo eficiencia como término comparativo pone de ma­nifiesto variaciones en la práctico clínico (VPC) , como va­riaciones sistemáticas en los tasas estandarizados de un procedimiento clínico en un determinado agregada po­blacional, y cuya base ha de encontrarse preferentemen­te en la discrecianalidad de las decisiones clinicas indivi­duales.

Los VPC evidencian a su vez una insuficiente base científica en una na proporción de práctica médica habi­tual, adaptándose estilos de práctica diferentes ante pa­cientes con el misma riesgo. Pora evidenciar estos cues­tiones podemos utilizar SI que nos aporten estancias me­dias por proceso, como expresión de la respuesta de un dispositivo asistencial ante un grupo de pacientes homo­géneo y concreto (cuadro 31. Asimismo el SI debe prove­er la detección de las casos extremas "outlier5'.

36

Cuadro 3 Estancia media / 4 Bases de Datos

GRD=337. Prostatectomía transuretral

12!,-----------------------------,

10

8

6

4

2

O +-----T-----T-----T-----,---~ N 92 N 93 CAV 93 HUSJ 94

EM O 10,3 9,69

N 92 Minislelia de Sanidad 1992

N 93 !v\inisle/io de Sanidad 1993

8,36 3,46

CAV 93 Canselerlo de Sanidad Camunidad Valenciana 1993

HUSJ HaSDlfOl Universllallo Son Juan de Alicon1e IOQa

El análisis de las readmisiones por el mismo proceso en un periodo determinado, las altas potencialmente am­bulatarias. los ingresos y estancias innecesarias (AEPI (Tabla VI nos debe permitir conocer cuáles son los grupos de pacientes y las líneos de producción de nuestros hos­pitales que nos hocen ser competitivos frente a aquellos que precisan de un esfuerzo de gestión. También el SI tiene que permitir evaluar, con indicadores sintéticos, la eficiencia clínica aunque sea sólo de algunos procesos.

GLfI1I/W"''' Ff I1NA.'\ICtl. M ~rANClA EN lA ElECCIÓN DE LOS SlSTEf..M,S DE lNfOI1MACJÓt.,J ADECUAOOS

Tabla 5 Hospital Ramón y Cajal, causas de inadecuación de las estancias

Enfermedad cerebravascular (GRO-014)

34-Procedimientos puede hacerse externo

25-Pend,ente de pruebos

32No se presto atención a dar alta

53No se dispone de trtlo. alterna tivo

53No se dispone de instalación alternativa

42-la familia rechaza instalaciones alternativas

24-Días de no trabajo

30-Alta planeado pero Sin órdenes escntas

41-Falta preparación en la familia 3%

54, 1%

~----------------------59-Debería hospitalizarse en crónicos 2,8%

~----------------------21-Problema de calendario paro pruebas 2.4%

~-----------------Sobre el total de días inadecuados (362)

Sistemas de información para la definición económica del producto sanitario

luro en lo génesis del gasto de las instituciones sanitarias, yen el impacto económico de las decisiones clínicos.

las causas que mós han influido en el desarrollo de potentes SI para la evaluación de lo gestión clinica han sido las evoluciones de los costes sanitarios en las últimas décadas. Hay que aceptar que a la largo de estos años se ha producido una sonitarización de los sistemas de in­formación y que se tiende o un ajuste de los costes sanita­rios o través de decisiones clínicas, considerándose los gastos sanitarios una consecuencia de las decisiones clí­nicas.

Todas las iniciativas desarrolladas para la evaluoción de los costes sonitarios, bien sean de un hospital (como pueden haber sido los anólisis de lo finonciación y el Contra to Programal. bien el desarrollo de sistemas que evoluan el coste por servicia clínico (proyecto Signa 11. como el coste par proceso utilizando los sistemas de agrupación de pacientes homogéneos GRD, PMC, (Signo 111. han aportado onte todo uno extraordinario cul-

Todos los diferentes proyectos: el Sistema de Informa­ción Económico (SIE) de lo Comunidad Valenciana (Tabla VII. el SIGNO del Insalud, etc., no han eslada exentos de problemas, entre otras cuestiones par la propia enver­gadura del proyecto. En el caso concreto del SIGNO el esludio ha tenido una sene de limitaciones debidas a lo falta de homogeneidad en los criterios de imputación de los costes par servicio clínico, el diferente desarrollo de la gestión analítíca en el conjunto de los hospitales, el grado de informatización de las óreas asistencial yeco­nómica y lo no separación de los costes enlre la hospitali­zación y de las demós óreas de actividad.

Sin embargo, actualmenle la evaluación de los cosles debe de realizarse desde el enfoque de la próctica clíni­ca, ya que es la formo mós idónea de conseguir resulta­dos duraderos.

Tabla 6 Costes Hospital de San Juan. Coste de GRO

GRO CDM T DESCRIPCiÓN COSTE PROCESO % EM

039 02 O INTERVENCIONES CRISTAliNO 149.225 4,5 1,8 014 01 M TRASI CERESROVASC. ESPECIF EXCEPTO AIT 223.866 2,0 9,0 162 06 O PO HERNIA INGUI/FEMOR > 17 SIN CC 149.335 1,7 2,9 371 14 O CESÁREA SIN CC 261.870 1,7 7,9 127 05 M INSUFICIENCIA CARDIACA Y SHOCK 278.396 1,6 7,4 140 05 M ANGOR PECTORIS 160.072 1.5 6,9 359 13 Q PO UTER/ ANEXOS POR NEO MAL SIN CC 285825 1,4 8,7 167 06 O APENDICES/DiA PRAl. COM? SIN CC 128.596 1,2 2,9 381 14 O ABORTO C/lEGRADO/ HISTERECTOMÍA 117.613 1,2 2,9 198 07 O COlESClSTEC S/EXPl SillAR SIN CC 112.258 1,1 46 060 03 O AMGDAlECTOMÍA/ ADENOIDECT < 18 94.188 0,9 2,1

37 PAPfIESMiOCo..t:; lQQ7 6 (3) 2738

GUERRERO fERNÁNDEZ. M!MPORTANCIA EN lA ElECCIÓN Df lOS SISTEMAS DE INfOR/'vV>,CION ADECUADOS

CONCLUSIONES Y COMENTARIOS

La gestión clínica como modelo en la gestión sanitario precisa de un sistema de información que garantice la consecución de las atributos que conforman la próctica clínica adecuada y de calidad, pera a la vez es necesa­ria que se produzca una participación real de las profe­sionales y de las pacientes en la tamo de decisiones sani­tarias, apayóndase ambas en una organización que fa­vorezca la garantía de la aplicación próctica clínica apropiada, cama base fundamental de la gestión clínica.

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PAPElES MEDlCOS 1997. 6 (3) 2738 38

tic. Impacte en la Gestió Hospitalaria. [tesi doctoral.] Barcelona 1990.

13. Casas M. los Grupos Relacionados con el Diagnós­tico. Experiencia y Perspectivas de Utilización. Bar­celona: Masson; 1991.

14. Young WW y cols. The Measurement of Hospi tal Case-Mix. Med Care 1982; 20: 501-512.

15. Organización Mundial de la Salud. Clasificaicón In­ternacional de Enfermedades, Novena Revisión. e.I.E.-9M.e. Ginebra: Organización Mundial de la Salud; 1979.

16. Public Health Service. International Classification of Diseases. 9 Revision. Clinical Modification. Was­hington De. Government Printing Office; 1980.

17. Ministerio de Sanidad y Consumo. Unidad de Cali­dad Total. Gestión Analítica. Hacia la Contabilidad Analítica en 105 Hospitales. Madrid; 1990.

18. Ministerio de Sanidad y Consumo. Unidad de Cali­dad Total. Programa Signo versión 2.02. Gestión Analitica. Madrid; 1990.

19. Ministerio de Sanidad y Consumo. Subdirección Gral. Evaluación Tecnológica. Proyecto P.P. P., Desa­rrollo e Implantación Sistema de Pago por Proceso en Hospitales. Madrid; 1992.

20. Ministerio de Sanidad y Consumo. Implantación de un Sistema de Pago por Proceso en Hospitales. Mo­delo de Estimación de Costes de la Actividad de hospitalización. Madrid; 1992.

21. Ministerio de Sanidad y Consumo. Secretaría Gene­ral Técnica. Sistema Nacional de Salud año 1992. Explotación de bases de CMBD. Madrid: Ministerio de Sanidad y Consumo; 1995.

22. Peiró S, Portella E. Identificación del uso inapropiado de la hospitalización: la búsqueda de la eficiencia. Med Clín (Barc) 1994; 103: 65-71.

23. Peiró S, Meneu R, Rosello ML, Martinez E, Portella E. ¿Qué mide la estancia media de los grupos relacio­nados con el diagnóstico? Med Clín (Barc) 1994; 103:413-417.

24. Peiró S, Meneu R, Rosello ML, Tobed M. Pago pros­pectivo por coso y duración de la estancia en hospi­tales privados concertados. Med Clín (Barc) 1993; 100 372-377.

25. Oterino C, Peiró S, Portella E, Marchan C, Aymerich S. Utilización innecesaria de la hospitalización. Im­portancia de la gestión a nivel de servicio. Rev Calid Asist 1994; 1: 8-16.

PAPELES DE INFORMACIÓN I

ASAMBLEA GENERAL DE LA SOCIEDAD ESPAÑOLA DE DOCUMENTACiÓN MÉDICA

Fecha de celebración: 13 de Junio de 1997 Lugar: Vigo. Sede del V Congreso Nacional de Documentación Médica

ACUERDOS TOMADOS

12 Representantes de lo SEDOM en lo Unidad de Re­ferencia paro lo ClE-9-MC de lo Secretaría General de Asistencia Sanitaria.

Lo SEDOM agradece el trabajo -arduo 01 tiempo que necesario y de gran importancia- realizado por Dña, So­ledad Sañudo Gorda y Dña, M" Luisa Tamaya Canillas, como representates de lo SEDOM en la citada Unidad de Referencia.

Se acepta su cese, o petición propio y por motivas profesionales, y se propone paro continuar en dichas to­reas o Dña. Eloísa Casado Fernández y Dña. Isabel de lo Riva Jiménez.

2" Un objetivo de lo Junto de la SEDOM o propuesto de la ultimo Asamblea celebrada en Alicante, ha sido la valoracián de los Estatutos de cada una de las Sacieda­des y su relación con la SEDOM, valorando la posibili­dad de crear uno Federación de Sociedades,.

Lo Junta Directiva de la SEDOM planteó o lo Asam­blea que después de los discusiones llevados o cabo en la propia Junto se consideraba que esto posibilidad no aportaría mayores beneficios en cuanto 01 desarrollo de lo SEDOM, proponiendo como solución mós enriquece­dora que los diferentes Sociedades que cubren áreas geogróficas mós pequeños, participen o través de sus Presidentes en los actividades de la SEDOM.

Siendo esta propuesto aprobado por los miembros de la asamblea

3" Información sobre lo situación de Papeles Médi­cos, revista de la SEDOM.

La publicación paso a ser cuatrimestral y se amplío el número de miembros que participan en el comité científi­co de redacción quedando establecido de la siguiente manero:

DtRECTOR: Miguel Morena Vernis. Hospital Miguel Serve!. Zaragoza.

COMITE CIENTíFICO - Rafael Aleixandre Benavent,

Instítuta de Estudías Documentales e Históricos sobre lo Ciencia, Universitat de Valencia - CSIe.

- Coralina Cone;o GÓmez. Hospital Marítimo de Tarremolinas. Mólaga,

- Natalia Caraminas de Da/mases, Académia de Ciéncies Mediques de Catalunya i BoIe­ars. Barcelona,

39

- Alfredo Fuentes Ruiz, Hospital Clínico Universi tario Son Carlos, Madrid,

- Alfonso Martínez Reino, Hospital Clínico Universitaria Virgen de lo Victoria, Mó­lago,

- Soledad Sañudo Gordo, Hospital del Río Ortega, Valladolid,

- Javier Yetana Laguna, Hospital de Galdakaa, Vizcaya,

4" Información y aprobación del estada de tesorería de lo SEDOM a Jun io de 1997

S" Ateniéndonos 01 articulo 12 de les estatutos de la SEDOM se procede o la renovación de los cargas de Vi­cepresidencia , Secretaría, Tesorería, Vocal de sacios ad­heridos, no sin antes agradecer o los miembros salientes: Irene Abad López (Vicepresidencia!, Pilar Rodríguez Man­zano (Secretaría) y Miguel Morena Vernis (Tesorería!, la lobar realizada tonto en el desarrollo científica de la disci­plina, en el estudia y difusión de la mismo, así cama en el asesoramiento o a iras organismos y lo colaboración can la Universidad en el órea de Documentación Médica,

Los candidaturas presentadas dentro del plazo esta­blecido en convocatorio de 16 de Marzo de 1997, fue­ron :

VICEPREStDENClA M" Francisca Abad Gordo. Instituto de Estudios Documentales e Históricos sobre lo Ciencia. Universi tat de Valencia.

SECRETARíA: Arturo J. Romos Martín-Vegue, Hospital de "Lo Fuenfría', Cercedilla Madrid.

TESORERíA: Alfonso Mortínez Reino, Hospital Clínico Universitario Virgen de lo Victoria, Mó­lago ,

VOCAlíA SOCIOS ADHERIDOS No se ha recibido ninguna candidatura.

Dichas candidaturas fueron confirmadas tras lo voto' ción de los miembros de lo SEDOM presentes en lo Asamblea. Obtuvieron coda uno de los candidatos 53 votos del total de 56 socios con derecho a emitirlo, El nú­mero de sacios de la SEDOM, a 12 de Junio de 1997 fecho de lo Asamblea General , es de 234,

6" Dentro del plan de actividades o realizar durante 1998, se propone la celebración de las VIII Jornadas Nocionales de Documentación Medico, durante el segun­do tr imestre del año, en lo localidad de Huesca y lo or­ganización de las mismos es asumida con juntamente por la Sociedad Españolo de Documentación Médico y lo Sociedad Aragonesa de Admisión y Documentación Mé­dico,

PAPELES MEOCOS 1 Q97, 6131: 3Q

PAPELES DE INFORMACIÓN II

INFORMACIÓN PERiÓDICA RECIBIDA EN ESTA REDACCIÓN SOBRE ACTIVIDADES DE INTERÉS PROFESIONAL PARA LOS MIEMBROS DE LA SEDOM

JO RNADAS Y CONGRESOS

• VII Jornadas de Información y Documenta­ción en Ciencias de la Salud

Organizo: ASABIME IAsociación Andaluza de Biblio­tecas Médicos)

Fecho y Lugar de Celebración: 6 al 8 de Noviembre de 1997. Granado

Mós información: Congresos GESTAC Tfno. 958-132949

• I Congreso Nacional de Médicos de Hospital

Organizo: OMC (Orgonización Médico Colegial. Sección de Hospitales)

Fecha y Lugar de Celebración: 5 a 7 de Marzo de 1998

Mós información: CS.P. Congresos e Imagen. Tfno . 91-4576112

• Toward an Electronic Health Record Europe '97 (TEHRE'97)

Organiza: Centre for the Advancement of Electronic Health Records Ltd.

Fecha y Lugar de Celebración: 19-22 Octubre 1997. Cumberland Hotel, London

Mós información: http://www.medrecinst.com/caehr/tehre97.html

e-mail: [email protected]

Tfno.: +44(0)12916298 38 0+44(0)1291629379.

t"-a,

• 97 European Conference EUROREC~ on the Electronic Hea lthcare Record

Organiza: PROREC (Pramotion Strotegy For European Electronic Healthcore Recordsl

Fecho y Lugar de Celebración: 27-29 Noviembre de 1997. Porís

Mós información: PROREC-Fronce. Dr. Bruno Frandji. 12, Avenue des Prés. 78180 Montigny-Ie-Bx. Tfno. +33 I 34523890

e-mail: [email protected]

PAPELES MtDICOS 1997, 6131 40 40

CURSOS

• XI Curso de Indización de Diagnósticos y Procedimientos. Utilización de la ICD-9-CM

Organiza: Servicio de Documentación Médico del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau (Barcelanal. Univer­sidad Autónoma de Barcelona

Fecho y Lugar de Celebración: 6-7 Noviembre de 1 997. Borcelona

Mós información: Secretaría del XI Curso de Indiza­ción de Diagnósticos y Procedimientos. Tfno. 93-2919312. Fax. 93-2919311.

• Diploma de Documentación en Enfermeria. 5~ Edición.

Organizo: Instituto de Estudios Documentales e Histó­ricos sobre lo Ciencia y lo Escuela Universitario de Enfer­merio. Universitat de Valencia.

Fecho y Lugar de Celebración: Noviembre de 1997 o Junio de 1998 (Viernes de 16 a 21 horasl. 155 horas

Mós información: Fundación Universidad-Empresa de Valencia. Tfno. 96-3510663. Departamento de Histaria de lo Ciencia y Documentación Médico. Facultad de Me­dicino. Valencia. Tfno. 96-3864164.

• Curso de especialización en Documentación Médica.

Organizo: Unidad docente del Hospital de la Santo Creu i Sont Pau. Universitat Aut6nomo de Barcelona

Fecha y Lugar de Celebración: 27 de Enero de 1998 a Junio de 1999 (40 créditos) (Martes, Miércoles y Jue­ves de 17 horas o 21 horasl. Hospital de la Santa Creu i Sont Pau. Barcelona

Mós información: Servicio de Documentación Médico. Hospital de lo Santo Creu i Sant Pau. Tfno. 93-2919312 de 10 o 17 horas