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Sedibac 50 Revista OTOÑO 2008 Societat per a l'Estudi i la Difusió de la Teràpia del Dr. Bach de Catalunya

Revista Sedibac

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Page 1: Revista Sedibac

Sedibac 50Revista

OTOÑO 2008

Societat per a l'Estudi i la Difusió de la Teràpia del Dr. Bach de Catalunya

Page 2: Revista Sedibac

SumarioViernes Activos

Imagen de la portadaClematis.Foto cedida por Antonio Pereiro

Grupo de redacciónRaquel GonzálezSilvia González ArikiRicardo OrozcoAntonio Pereiro

Han colaborado en este boletínCarmen AlmansaJordi Cañellas

Rosa Castelló VegaM≤ Lluïssa FranchEna GonzálezRaquel GonzálezAlex OnarRicardo OrozcoJosep Lluís PujolLuisa RainerSaira Rivas SuárezBoris RodríguezMarisa RomeroM≤ del Mar RuizPilar Vidal Clavería

Maquetación y compaginaciónAlbert Casans QueraltTel. 93 750 25 [email protected]

PreimpresiónSistemes d'EdicióTel. 93 480 83 [email protected]

ImpresiónEl Tinter, sal (empresa certificada ISO 14.001 i EMAS)Tel. 93 357 00 50 / Barcelona

SedibacValència, 459-461. Entlo.1≤ / 08013 BarcelonaTel. 93 247 88 71 [email protected] / http://www.sedibac.org

Horario de atención al público:Lunes y Miércoles: de 16:00 a 20:00 hMartes, Jueves y Viernes: de 10:00 a 14:00 h

Colaboraciones:Para colaborar con la revista contactar a la oficina o por correo electrónico: [email protected]

Impreso en papel reciclado

Sedibac www.sedibac.org Revista núm. 50 OCTUBRE-NOVIEMBRE-DICIEMBRE 2008

Sedibac

Calendario Viernes Activos

EditorialRaquel González

Temas y flores

Energía: misterio y controversiasAlex Onar

1928-2008: 80 años de las tres primeras Flores de Bach

Pilar Vidal Clavería

Hambre, amor y Flores de BachCarmen Almansa

Trabajo científico de investigación cubano: Algo mássobre fibromialgia y Flores de Bach

Dra. Saira Rivas Suárez

Alergia: ∂cómo se vuelve alérgica una persona?Rosa Castelló Vega

La Signatura de las Flores de Bach... Water Violet Jordi Cañellas

Pequeños retratos: Grandes necesidadesRicardo Orozco

Cuento: En el bosqueMarisa Romero

Poema: Las súplicas de Water Violet Ena González M.

CasosTrastorno por dependencia y obsesivo-compulsivo de la personalidad

Boris Rodríguez

Caso curioso de alergiaMª Lluïssa Franch

Ver para creerMaría del Mar Ruiz Herrera

OzaleéLuisa Rainer

Correo de Sedibac

Promoción del Congreso de Sedibac

03 Conferencia: Cómo elaborar remedios florales.

Impartida por Raquel GONZÁLEZ.

10 Conferencia: Obsesividad: personalidad y tras-torno y su tratamiento floral. Impartida por Ri-

cardo OROZCO.

17 Conferencia: Las Flores de Bach y la fisiología de los órganos en MTCH. Impartida por Pablo

NORIEGA.

24 Profundizando en CERATO.

31 La Castañada: Taller de panellets, degusta-

ción y proyección de los castaños del siste-

ma Bach. Coordina: Enric HOMEDES, en la sede,

c/. València, 459-461, Entlo. 1ª.

07 Conferencia: Trastorno de Déficit Atencional y Flo-res de Bach. Impartida por Josep Maria BATLLE.

14 Conferencia: Inteligencia Emocional y Flores de Bach. “Sedúcete para seducir”. Impartida por

Maria Dolors UTRERA.

21 Conferencia: Tres años en la protectora Els Amics dels Animals de la Noguera: Enfoque de trabajo, dinámica y aportación de casos. Impar-

tida por Enric HOMEDES.

28 Profundizando en ROCK WATER.

05 Conferencia: La entrevista y la relación tera-péutica. Claves para un buen diagnóstico. Im-

partida por Montse CHANDO.

12 Profundizando en GENTIAN.

19 FIESTA DEL SOLSTICIO, en la sede.

NOTA: Los artículos de esta revista sólo representan la opinión de los autores y no

la de SEDIBAC como colectivo. El mismo criterio rige para los casos expuestos y las

flores con que han sido tratados. Las colaboraciones se publican sin reducciones de

ningún tipo y son seleccionadas por la redacción de la revista.

Estas actividades son gratuitas y abiertas al público, tienen lu-

gar en el Centre Cívic “Pati Llimona”, Regomir, 3, Barcelona,

los viernes a las 19 h. A 2 minutos de la Plaza Jaume I. Metro:

L4 Jaume I / L3 Liceo. Para más información, ponerse en con-

tacto con SEDIBAC: [email protected] - www.sedibac.org

FE DE ERRATAS

En el número 49, página 40, donde dice:

[email protected] debe decir

[email protected]

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www.sedibac.orgD.L.: B-8213-2007 ISSN: 1888-2447

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El 27 de noviembre se cumple el 72 aniversario de

la muerte de Edward BACH. Mientras esto escribo, la

medianoche marca otra fecha importante: el fin del

verano (Samhain) y la llegada de la oscuridad. Para

la tradición celta el día 1 de Noviembre da comien-

zo el Nuevo Año. Esta fiesta representa la muerte

simbólica del Dios Sol y la entrada en la mitad oscu-

ra del año. A partir de este momento ya no se reco-

gen más flores, ha llegado el fin de la cosecha. Pero

para aquéllos que supieron cosechar en el tiempo de

la Luz, la oscuridad no significa muerte, sino la tran-

sición a un nuevo renacimiento, un viaje a las profun-

didades, un volar hacia adentro... Quizás en esta no-

che, más que en ninguna otra en la rueda del año,

sentimos la cercanía de nuestros ancestros, nues-

tros maestros espirituales, y cómo no, de aquellos

seres cuyo legado ha calado hondo en nuestras al-

mas. Y es en esta noche, cuando lo invisible se hace

visible, que somos más permeables a ese otro lugar

donde el tiempo y el espacio no existen.

Bajo este umbral mágico, entre el cielo y la tierra,

BACH se preparaba para continuar su viaje. Por unos

instantes, lo imagino esbozando una sonrisa al re-

cordar la anécdota de la famosa maleta que conte-

nía zapatos en vez de morteros y brazos de mortero,

y que algún duendecillo travieso (sabiendo lo que le

esperaba) cambió de lugar. Tras la sonrisa... la acep-

tación. Hacia donde se dirige, los zapatos ya no son

necesarios. Sin equipaje, libre de las ataduras del

cuerpo, se encamina vestido tan sólo con la sereni-

dad del que conoce su misión.

Y para esta nueva andadura, siente que la llamada

es ahora para buscar otras flores de perfume más

sutil y delicado, en otros campos y por otros cami-

nos. Precisamente el 1 de Noviembre de 1936, Día

de Difuntos para la tradición cristiana, BACH escribe

a su equipo de colaboradores: “Hay momentos como éste en que espero una invitación a algo que no sé muy bien.” Pero para su alma, conocedora de otras tan-

tas muertes y renacimientos, se acercaba el mo-

mento de abandonar “este día de colegio” y prose-

guir su aprendizaje en una escuela, sin duda, de

grado superior.

Hoy, para los que aún estamos aprendiendo las lec-

ciones básicas, es un día para honrar su legado y

toda la luz que trajo a nuestras vidas.

Aunque su marcha fue prematura, no dejó tras de sí

ninguna sombra, pues su mensaje de amor por toda

la creación encendió en nuestros corazones una lla-

ma que no se apagará nunca. Mientras esto escri-

bo, cuando ambos mundos se tocan, en la noche más

mágica del año, la estancia se llena de presencias in-

visibles. No es momento para la tristeza, sino para

el agradecimiento. Demos gracias a todos aquellos

que nos han ayudado a convertirnos en lo que hoy

somos.

Gracias, Edward BACH, por señalarnos el camino a

casa.

Samhain, el camino hacia la luzpor Raquel González

Samhain el caminEditorial

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Por lo tanto la magnitud del tra-

bajo se expresa por W = m×g×d = 10 kg × 9.8 m/s2 × 1 m = 98 Joule, es

decir obtenemos un trabajo dife-

rente de cero. Sin embargo si nos

trasladamos de forma horizon-

tal una distancia de 100 metros

con la misma piedra de 10 kg le-

vantada 1 metro sobre el nivel del

piso el trabajo es cero. ¿Por qué?

Simplemente porque la fuerza

gravitatoria al ser perpendicu-

lar al desplazamiento hace que

su componente Fd a lo largo del

movimiento horizontal sea cero.

Este hecho perturba profunda-

mente a mucha gente cuando se

enteran por primera vez. Protes-

tan diciendo que: ¡Es claro y evi-

dente que la persona hizo traba-

jo, ya que la persona transpira, se

pone roja y además respira agita-

damente mientras carga tamaña

piedra durante 100 metros! Pero

todo se aclara cuando uno cono-

ce la fuente de la confusión. Ésta

se genera porque la mayoría de

las personas piensan en el traba-

jo definido coloquialmente como

un esfuerzo realizado. Y esto no

Energía: misterio y controversia

bien definido mediante la senci-

lla fórmula: W = Fd × d, siendo W

el trabajo efectuado por la fuer-

za F (presupuesta constante en el

caso más sencillo) sobre un cuer-

po, Fd es la componente de esa

la fuerza en la dirección del des-

plazamiento y d la distancia re-

corrida por el móvil a lo largo de

dicha dirección. La unidad de tra-

bajo en el sistema MKS (abrevia-

ción de metro=m, kilogramo=kg y

segundo=s) es el Joule definido

como Joule = Newton × m (recor-

dando que Newton = kg × m/s2).

Para ejemplificar este concepto,

analicemos a continuación el tra-

bajo hecho por un hombre al le-

vantar una piedra de 10 kg a una

altura de 1 metro sobre el sue-

lo. En este caso el hombre hace

un trabajo W en contra del cam-

po gravitacional dado por la fuer-

za F = m × g, donde m es la masa

del cuerpo y g la aceleración de la

gravedad. Es muy importante ob-

servar que la dirección de la fuer-

za gravitatoria apunta vertical-

mente hacia el suelo, justo en la

misma línea del desplazamiento.

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Alex [email protected]

Introducción

Uno de los conceptos más pro-

fundos con el que trabajan fí-

sicos (y científicos en general) y

terapeutas de medicina alternati-

va (radiestesia, acupuntura, reiki,

homeopatía, Flores de BACH, etc..)

es el concepto de energía. En el

diccionario de la academia espa-

ñola, el término energía viene de-

finido brevemente como:

“Potencia activa de un organis-mo. Capacidad para obrar o pro-ducir un efecto. Fuerza de volun-tad, tesón en la actividad. (Fis.) Facultad que posee un cuerpo o sistema para realizar un traba-jo. (Fam.) Energético, enérgico, energizar (Larousse, 1994)”.

Es decir, se tienen diferentes sig-

nificados dependiendo del contex-

to donde se utiliza. Si no se toma

en cuenta este hecho, el concepto

mismo puede resultar muy con-

fuso como sucede, por ejemplo,

con el concepto de trabajo. Para

el físico, este término esta muy

Page 5: Revista Sedibac

mas proviene de la comprobación

experimental efectuada en los la-

boratorios una y otra vez. Histó-

ricamente este concepto nació

hace algunos siglos a raíz de que

varios científicos se dieron cuen-

ta de que, no importando qué tan

complicada fuera la evolución de

un sistema físico, un “número” se

conservaba. A este “número” los

físicos le llamaron energía y a la

ley asociada con la conservación

de esta cantidad se le conoce hoy

en día como la ley de la conserva-ción de la energía. En verdad esta

es una idea muy abstracta, por-

que es un principio matemático.

No es la explicación de un meca-

nismo o de algo concreto en sí. Y

ciertamente es un hecho muy raro

de que podamos calcular cierto

“número” y que cuando termina-

mos de observar que la naturale-

za haga sus trucos y calculamos

el número otra vez, éste sea el

mismo. Puesto que esta idea es

abstracta ilustraremos su signifi-

cado mediante una analogía.

En palabras del propio Feyn-

man (Feynman et al, 1971), ima-

ginemos un niño, tal vez “Daniel el travieso”, que tiene unos blo-

ques que son completamente in-

destructibles, que no pueden divi-

dirse en partes. Cada uno es igual

al otro. Supongamos que tiene 28

bloques. Su madre lo coloca con

los 28 bloques en una habi-

tación al comenzar el día. Al

final del día, por curiosidad,

ella cuenta los bloques con

mucho cuidado, y descubre

una ley fenomenal –haga lo

que haga con los bloques,

¡siempre quedan 28!. Esto

continua por varios días,

hasta que un día hay solo 27

es cierto. El trabajo definido en

física no esta relacionado con el

término coloquial, pese a que uti-

licen la misma palabra. A conti-

nuación veremos cómo se utiliza

el término de energía en física y

cómo se utiliza en medicina alter-

nativa. Por último se realiza una

breve discusión y se dan algunas

sugerencias y conclusiones para

ambas áreas.

Energía vista por el físico

En física el concepto de energía y

su conservación es reciente y se

introduce a partir de los traba-

jos sobre colisiones de Huygens

y Leibnitz en el siglo XVII. Aunque

ellos la nombraron vis viva (fuerza

viva), ya que originalmente este

concepto nace dentro del área de

la dinámica clásica de partículas,

posteriormente se dieron cuenta

que este concepto en realidad era

mucho más extenso y abarcaba

todas las áreas de la física, por lo

que se decidió usar el término de

energía para denotar esta gene-

ralidad. Una de las explicaciones

más hermosas sobre el concep-

to de energía, tal como la utiliza

hoy en día el físico, se presenta

prácticamente a nivel de divul-

gación en The Feynman Lectures on Physics, Vol. I. Resumiendo los

puntos principales de esta expo-

sición, se tiene que en física uno

de las características principales

que tiene el concepto de energía

es que ante todo es un concep-

to cuantificable. Existen expresio-

nes o fórmulas matemáticas muy

precisas para calcularla depen-

diendo de la forma en que se ma-

nifiesta. La veracidad de las mis-

bloques, pero una pequeña inves-

tigación demuestra que hay uno

bajo la alfombra –ella debe mirar

por todas partes para estar segu-

ra que el número de bloques no

haya cambiado-. Un día sin em-

bargo, el número parece cambiar

–hay sólo 26 bloques-. Una cuida-

dosa investigación indica que la

ventana estaba abierta, y al mi-

rar hacia afuera se encontraron

los otros dos bloques. Otro día,

tras una cuidadosa cuenta, ve que

¡hay 30 bloques! Esto causa una

gran consternación, hasta que

sabe que Bruce, su amiguito, vino

a visitarlo, trayendo sus bloques

consigo y que dejó unos pocos en

la casa de Daniel. Después de se-

parar los bloques adicionales cie-

rra la ventana, no deja entrar a

Bruce, y entonces todo anda bien,

hasta que una vez cuenta y en-

cuentra sólo 25 bloques. Sin em-

bargo hay una caja en la habita-

ción, una caja de juguetes, y la

madre se dirige a abrirla, pero el

niño dice:¨No, no abras mi caja

de juguetes¨, y llora. A la madre

no le está permitido abrir su caja

de juguetes. Como es extremada-

mente curiosa y algo ingeniosa

(como todas las madres), inven-

ta un ardid. Sabe que un bloque

pesa 100 gramos, así que pesa la

caja cuando ve los 28 bloques y

encuentra que pesa 500 gramos.

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En seguida desea comprobar el peso de la caja nuevamente, resta 500

gramos y divide por cien. Ella descubre lo siguiente:

En seguida parece que hubiera algunas nuevas desviaciones, pero un es-

tudio cuidadoso indica que el agua sucia de la bañera está cambiando de

nivel. El niño está lanzando bloques al agua y ella no puede verlos porqué

está muy sucia, pero puede saber cuántos bloques hay en el agua agre-

gando otro término a su fórmula. Ya que la altura original era de 15 centí-

metros y cada bloque eleva el agua medio centímetro, esta nueva fórmu-

la sería

En el aumento gradual de la complejidad de su mundo, ella encuen-

tra una serie completa de términos que representan modos de calcu-

lar cuántos bloques están en los lugares donde no está permitido mi-

rar. Como resultado encuentra una fórmula compleja, una cantidad que

debe ser calculada y cuyo valor siempre permanece constante (en este

caso 28). ¿Cuál es la analogía de esto con la conservación de la energía?

El aspecto más notable, que debe ser abstraído de este cuadro, es que

no hay bloques. Quítese el primer término en las dos fórmulas previas y

nos encontramos calculando cosas más o menos abstractas. La analogía

tiene los siguientes puntos. Pri-

mero, cuando estamos calculan-

do la energía, a veces algo de ella

deja el sistema y se va, y a veces

algo entra. Para verificar la con-

servación de la energía debemos

de tener cuidado de no agregar

ni quitar nada. Segundo, la ener-

gía tiene un gran número de for-

mas diferentes y hay una fórmu-

la para cada una de ellas. Estas

son: energía gravitacional, ener-

gía cinética, energía calórica,

energía elástica, energía eléctri-

ca, energía química, energía ra-

diante, energía nuclear, energía

de masa, etc. Si hacemos el total

de las fórmulas para cada una de

las contribuciones, no cambiará

a excepción de la energía que en-

tra y que sale.

Es importante darse cuenta que

en la física actual no se sabe qué

es la energía. Por ejemplo no se

tiene un modelo de la energía

como si fueran pequeñas gotas

de un tamaño definido. Sin em-

bargo, hay fórmulas para calcu-

lar cierta cantidad numérica, y

cuando las juntamos todas nos da

¨28¨, siempre el mismo núme-

ro. El concepto de energía des-

de el punto de vista físico es algo

abstracto, en el sentido de que no

nos informa sobre el mecanismo

o las razones por la que existen

las diversas fórmulas. Se obser-

va además que las unidades con

las que se mide la energía son

las mismas que se utilizan para

medir trabajo, es decir Joule, en

efecto existe una relación muy

importante entre ambos concep-

tos proporcionada por el famoso

Teorema de Trabajo-Energía.

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Energía: misterio y controversia / Alex Onar

(peso de la caja) - 500 gramos

100 gramosnúmero de

bloques vistos)( = 28+

= 28

(peso de la caja) - 500 gramos

100 gramosnúmero de

bloques vistos)( + +

(altura del agua) - 15 centímetros

0,5 centímetros+

Page 7: Revista Sedibac

peutas manifiestan sentir piquetes

o un ligero hormigueo en el centro

de la palma de las manos (chakra

secundario) cuando trabajan con

la energía, o bien una ligera pre-sión o cosquilleo en el entrecejo

(tercer ojo). También otras perso-

nas o terapeutas manifiestan sen-

sación de manos hinchadas o ma-nos crecidas en un principio, pero

posteriormente esa sensación se

pasa a la totalidad del cuerpo.

Una de las características princi-

pales que tiene esta energía para

el terapeuta es que la misma tie-

ne una cualidad. Percibir la cua-

lidad o de qué tipo es la energía

Energía vista por el terapeuta

Para el terapeuta la energía es

una entidad básica del universo

que ya era conocida por las dife-

rentes civilizaciones desde la an-

tigüedad. En todas ellas se hacía

referencia a una fuerza de origen

desconocido, que tenía un carác-

ter creador, sanador, armoni-

zador y que se le utilizaba como

un camino de vuelta a la recupe-

ración de la salud, la alegría y el

amor (Simone y Bertuccio, 2003).

Por lo general se parte del hecho

de que todos los objetos, anima-

dos e inanimados emiten cier-

ta radiación desconocida a la

cual se le llama energía. Muchas

personas que perciben la ener-

gía lo hacen de forma diferente.

Entre ellas algunos la perciben

como movimiento, por ejemplo

sus cuerpos o partes de ellos, así

como ciertos objetos como son

péndulos u otros dispositivos se

mueven siguiendo trayectorias

circulares o cuasi-circulares o

entran en un movimiento de va-

y-ven cuando entran en campos

energéticos particulares. Otros la

perciben a través de sus manos

o su piel como un calor que flu-

ye de una región a otra, por ejem-

plo cuando cierta energía se en-

cuentra bloqueada en el cuerpo,

y se logra destrabar mediante al-

gún tipo de terapia, esta energía

en exceso que sale del cuerpo se

siente como un flujo de calor. Al-

gunos terapeutas incluso la lo-

gran ver distinguiendo varios ti-

pos de energía por sus diferentes

colores. Otras personas las per-

ciben como distintos olores, que

otros no perciben. Algunos tera-

con la que se está entrando en

contacto, trae información funda-

mental para realizar el diagnósti-

co. Otra característica fundamen-

tal de esta energía, y que todos

los terapeutas saben, es que la

misma impacta directamente en

la conciencia del ser humano.

Esta radiación que percibe el te-

rapeuta toca lugares muy profun-

dos ubicados dentro del mundo

emocional e incluso espiritual del

hombre. Lo cual trae beneficios

sobre el cuerpo humano, cuerpo

hecho por cierto de la misma ma-

teria tal cual como la conocen hoy

los físicos y los científicos en ge-

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Page 8: Revista Sedibac

neral. El mundo holístico tampo-

co sabe a ciencia cierta qué es la

energía, sin embargo día tras día

comprueban la efectividad de sus

métodos y la realidad de la misma

a través de su práctica y resulta-

dos clínicos, muchos de ellos in-

cluso asombrosos.

Sugerencias y conclusiones

A nivel fundamental, la pregun-

ta de ¿qué es la energía? perma-

nece todavía en el misterio más

profundo tanto para los científi-

cos como para el mundo holísti-

co. Sin embargo a nivel de defini-

ción operacional y manipulación

de la misma corresponden a dife-

rentes territorios del conocimien-

to, seguramente complementa-

rios, pero sin puntos en común

comprobados de forma experi-

mental hasta el día de hoy. Esto

último, en realidad al terapeuta

no le preocupa, ya que cada día, a

través de su trabajo clínico corro-

bora la relación existente entre

mente-cuerpo, a través del con-

cepto de energía que ellos uti-

lizan. Para ellos, como la ener-

gía influye sobre la conciencia y

esta última se encarga de mover

la materia misma que componen

los cuerpos con vida (donde rei-

na la energía, tal como la cono-

cen los físicos), existe un punto de contacto o un puente entre es-

tos dos mundos aparentemente

tan distintos. Sin embargo para el

mundo científico, mientras esta

hipótesis no sea corroborada a

nivel experimental, y por lo tan-

to pueda manejarse cuantitativa-

mente vía la matemática, todavía

seguirá existiendo un abismo de

incomprensión entre ambos te-

rritorios. Aquí es donde me atre-

vo hacer algunas sugerencias pa-

ra acercar ambas posturas.

Sugerencia para los físicos y los

científicos en general

Si quieren conocer otros aspectos

de la realidad y por lo tanto a la

energía tal como la conciben los

terapeutas de la medicina alter-

nativa, tienen que ir más allá del

método con el que usualmente

abordan el estudio de la natura-

leza, el cual básicamente estipu-

la la existencia de las cosas como

todo aquello que se puede pesar,

tocar o medir. En lo más profun-

do se sabe que en realidad hay

una verdad mayor detrás de todo

esto, y que existen muchas for-

mas de conocer el mundo, una de

ellas es a través de la vida mis-

ma (la cual no tiene nada de me-

dible, ni de cuantificable y menos

de reproducible), otra es a través

de nuestras emociones, de nues-

tras sensaciones y otras muchas

posibilidades más. Todo el mundo

sabe que las ideas existen, pese

a que hasta ahora ninguno haya

atrapado una en algún laborato-

rio para que TODOS la podamos

ver. Sólo sabemos de su existen-

cia a través de sus efectos. Así

mismo, todos hemos sentido al-

guna vez alegría o tristeza, pese a

que nadie haya medido o atrapa-

do esta emoción alguna vez. Para

acercarnos al mundo de la ener-

gía tal como los terapeutas la ma-

nejan hay que volver a contactar con nuestra percepción. Tenemos

poca conciencia de qué percibi-

mos, y de cuándo y cómo lo per-

cibimos. Parte de la culpa de ello

la tiene nuestra ’’civilización mo-

derna’’, que se ha encargado de

adormecer nuestras sensaciones

vía la educación, en ciertos casos

extremadamente racionalista; el

exceso de atención hacia objetos

externos, muchos de ellos tec-

nológicos y artificiales, esto nos

ha desnaturalizado y distraído, a

tal grado que nos hemos alejado

sobre manera de nuestra propia

naturaleza perceptiva. Existen

muchas personas que de forma

natural, casi como un don, perci-

ben fácilmente la energía. Otros

necesitan contactarse con ella a

través de ejercicios especiales,

o realizando cambios de medios,

por ejemplo saliéndose de las

ciudades y entrando más en con-

tacto con el campo, para hacer-

se conscientes de su existencia a

través de las múltiples manifes-

taciones que tiene. Pero lo que es

cierto es que, una vez que se lo-

gra entrar en contacto con esta

realidad, uno queda tan asom-

brado que se produce una inme-

diata expansión de conciencia al

darnos cuenta que la naturaleza

es mucho más profunda y mara-

villosa de lo que habíamos ima-

ginado.

Sugerencia para los terapeutas

Cuando hablen de energía tal

como la utilizan, no utilicen fór-

mulas de ningún tipo. Porque ello

implica inmediatamente entrar

al mundo de lo cuantificable. La

energía tal como la maneja el te-

rapeuta hasta el día de hoy no ha

sido medida y por lo tanto cuan-

tificada. En efecto, es muy co-

mún en nuestra época ver im-

preso en libros de la Nueva Ola

la famosa ecuación de Einstein

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Energía: misterio y controversia / Alex Onar

Page 9: Revista Sedibac

E=mc2 que relaciona

la masa y la energía.

Ello con la idea de dar

credibilidad y funda-

mentar la relación en-

tre materia y energía

tal como ellos la cono-

cen en su práctica clí-

nica. Pero atención, al

poner una expresión

matemática, inmedia-

tamente entramos al

mundo de lo medible, y

por lo tanto de lo com-

probable experimental-

mente. En efecto, los fí-

sicos han comprobado

y siguen comproban-

do cuantitativamente

la ecuación de Einstein

en los grandes acelera-

dores de partículas, al

estudiar el fenómeno de creación

y aniquilación de materia den-

tro del área de Física de Partícu-

las. Pero cuidado, la E que apare-

ce en la fórmula de Einstein es la

energía tal como la concibe el fí-

sico, acordémonos de ello, como

un misterioso número abstracto

que se conserva antes y después

de los procesos naturales, no im-

portando qué tan complicados

sean y de ninguna manera es la

energía tal como la concibe el te-

rapeuta. Nos encontramos ahora

como en el ejemplo del concepto

de trabajo mencionado al princi-

pio, el cual puede ser un término

muy confuso si no se especifica

de antemano en qué campo es-

tamos y qué significado es el que

allí tiene. Por ello, para no crear

confusión y escepticismo dentro

del mundo científico, se sugiere

mejor no utilizar fórmulas. Tam-

poco es recomendable definir la

energía utilizada por el terapeu-

ta vía definiciones dadas por fí-

sicos célebres. Recordemos que

los físicos dan otro significado

al concepto de energía y por muy

famosos que ellos sean, esto no

va a dar mayor credibilidad al

concepto de energía como ya la

conciben los terapeutas, porque

la verdad de la existencia de esa

energía proviene de su práctica

clínica, por sobre todas las co-

sas. Se concluye que, pese a que

actualmente existe toda una ten-

dencia a la unificación, y que esta

tendencia sigue creciendo día a

día: estos dos mundos, a la fe-

cha, aún no están unidos. Sigue faltando un puente (experimental), que sin duda tarde o temprano

se encontrará, y esto lo sabemos

sobre todo los terapeutas que

trabajamos y creemos día a día

en la relación mente-cuerpo vía

la energía. Mientras ello no se

dé, tenemos que ser lo más ho-

nestos posible sobre la situación

actual, en aras de la claridad y

la no-confusión, acerca de este

concepto que ha sido y seguirá

siendo, tan importante para la

humanidad.

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Energía: misterio y controversia / Alex Onar

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1928-2008: 80 años de las tres primeras Flores de Bach

El 24 de septiembre de 1928 el

doctor BACH cumplía 42 años.

Como dice Nora Weeks, ese año

fue fundamental en su vida ya que

en él nació su nueva obra.

Cuando a finales de ese mes de

septiembre, paseaba en una de

sus visitas a Gales por la orilla

del río Usk, cerca de Crickhowell,

su intuición y capacidad de obser-

vación lo acercaron a las flores de

IMPATIENS.

Paseaba días enteros por los

campos, ya que quería averi-

guar cómo intervenir en el estado

emocional o mental de las perso-

nas, e intuía que esos remedios

estarían en la naturaleza.

Podría ser, como nos dice Julian

Barnard en su libro Forma y Fun-ción, que empezara buscando un

remedio para sí mismo.

Según algunos de los colabora-

dores del doctor BACH, era rápi-

do a la hora de tomar decisiones.

Rápido en actuar y rápido en per-

der la calma, e impaciente ante la

lentitud de los demás, caracterís-

ticas comunes al aspecto negati-

vo de IMPATIENS y que él mismo de-

fine en:

Los Doce Sanadores y Otros Re-medios (1936):

Soledad

IMPATIENS

Para los que son rápidos de pensa-miento y en la acción, y quieren que todo se haga sin vacilación ni retra-so. Cuando están enfermos quieren recuperarse pronto. Les resulta muy difícil tener paciencia con las personas lentas, pues les parece un error y una pérdida de tiempo, y se esforzarán porque éstas sean más rápidas en todos los aspectos. Con frecuencia prefieren trabajar y pensar solos, para poder hacer todo a su propio ritmo.

IMPATIENS es una planta que pro-

viene del Himalaya. Fue introdu-

cida en Gran Bretaña en 1839 y se

ha hecho muy común, debido pre-

cisamente a sus características

particulares de crecimiento rápi-

do e invasor.

Los Doce Sanadores y los Siete Ayudantes (1934)

La Impaciencia no es nativa de este país, pero crece a la perfección a lo largo de las orillas de algunos ríos galeses. Las flores de esta planta tienen colores diversos y sólo de-berán ser escogidas las que os-tenten un maravilloso y suave co-lor malva.

El Dr. BACH reconoció en IMPATIENS,

unas características que resonaban

con él mismo y empezó a preparar

el remedio homeopáticamente y no

por el método solar, que no descu-

briría hasta mayo de 1930.

Destaca también la utilización de

Impatiens como remedio para el

dolor, ya que el Dr. BACH lo había

sentido durante gran parte de su

vida y pudo comprobar en sí mis-

mo la efectividad de la esencia.

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Pilar Vidal Claverflawww.pilividal.com

Rio Usk

Page 11: Revista Sedibac

descuidando así sus obligaciones diarias. Cambian su atención de una empresa a otra con rapidez.

Tienen tendencia a estrechar lazos demasiado fuertes con otras per-sonas, y se colocan bajo su poder; esto ocurre voluntariamente y sin miedo, y puede estar asociado con un profundo afecto y el deseo de no separarse jamás. La personalidad más fuerte puede usar su influen-cia adversamente durante toda la vida; o llamarlos después de su muerte; esta es la razón de la au-sencia de lucha que presentan ante la enfermedad.

No se aferran demasiado a la vida: ésta no representa mucho para ellos; muestran poca resistencia a la enfermedad; parecen no tener miedo a la muerte, ni deseos de ponerse bien. Son plácidos, tran-quilos, resignados a su enferme-dad, no por valentía, sino por indi-ferencia.

Presentan de este modo dos fases: estáticos con referencia a los idea-les y, en la enfermedad, tranquili-dad resignada.

El remedio les brinda estabilidad, y coloca al paciente en un plano más práctico; le hace “poner los pies sobre la tierra”, lo que le permite cumplir su labor en este mundo.

En 1934 nos habla del estado de

ánimo de CLEMATIS.

Los Doce Sanadores y los Siete Ayudantes (1934)

El estado de ánimo que corres-

ponde a:

Los Doce Sanadores y los Cuatro Ayudantes (1933)

Impatiens es con frecuencia de gran valor en el caso de dolores in-tensos, en que se trata de aliviar el dolor y calmar al paciente.

En ese último trimestre de 1928

dos flores más entraban en la lis-

ta de sus remedios: CLEMATIS y MI-

MULUS.

Entre Abergavenny y Crickhowell,

en los caminos del río Usk, cre-

cían ambas flores. No sabemos

cuál de ellas escogió primero, ya

que buscaba plantas que pudie-

ra utilizar en su consulta y que

guardaran relación con la perso-

nalidad de sus pacientes.

En 1930, cuando había estudiado

un elevado número de casos con

la utilización de los remedios me-

diante la trituración homeopática,

escribió en el Homeopathic World

en relación a CLEMATIS:

Algunas consideraciones funda-mentales sobre la enfermedad y la curación

Los remedios y sus tipos:

Clematis (Clemátide) / El Estático

Para aquellos que “viven en sue-ños”; viven con sus ideales, pero no son muy prácticos. Con frecuencia aman los libros y se pierden en su lectura, sobre todo en los años jó-venes.

Se dejan entusiasmar por movi-mientos religiosos o patrióticos, siendo temporalmente absorbidos,

CLEMATIS. Cuando el paciente está adormilado o soñoliento o soñador; no pone interés en las cosas; pare-ce ausente.

La Clemátide adorna nuestros se-tos en muchas partes del país don-de hay suelos gredosos.

Y en 1936 cuando había estableci-

do los 7 epígrafes para distribuir

sus 38 remedios sitúa a CLEMATIS

en el de la falta de interés por las

circunstancias presentes:

Los Doce Sanadores y Otros Re-medios (1936)

Falta de interés por las circuns-tancias presentes

CLEMATIS

Para los soñadores que nunca es-tán totalmente despiertos y no sienten gran interés por la vida. Gente tranquila, no muy feliz en sus actuales circunstancias y que vive más en el futuro que en el pre-sente; viven a la espera de tiempos más felices, cuando sus ideales se conviertan en realidad. En la enfer-medad algunos hacen muy pocos esfuerzos o ninguno por recuperar la salud, y en algunos casos inclu-so llegan a desear la muerte con

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El remedio para este tipo de mie-do es el Mimulus, que se extrae del Mímulo, una hermosa planta bas-tante parecida al almizcle. Crece en corrientes de aguas claras y en las orillas de los ríos.

El Dr. BACH nos dejó un gran ca-

mino abierto. La utilización de su

sistema de tratamiento sigue vi-

gente y su práctica está consoli-

dada: son numerosas las publica-

ciones que se registran cada año.

Un ejemplo de esto último lo te-

nemos en el Cuaderno Botánico de Flores de Bach de Jordi Cañellas,

que justamente en este 2008, a

los 80 años del descubrimiento

de las primeras Flores de BACH,

nos ofrece con la visión de la Sig-

natura un acercamiento al cono-

cimiento botánico de las plantas

de las que el Sistema BACH extrae

sus esencias.

Nora Weeks, en su libro Los Des-cubrimientos del Dr. Edward Bach: Las Flores y su Poder Curativo, nos

recuerda lo que BACH solía decir:

“Quiero hacerlo muy simple. Si tengo hambre cortaré una lechuga de la huerta para la cena. Si estoy asustado y enfermo, tomaré una dosis de Mimulus”.

más, no tenemos tiempo de sentir aprensión por nuestras enferme-dades personales.

El miedo desempeña hoy una im-portante labor en la intensificación de la enfermedad, y la ciencia mo-derna ha aumentado el reinado del terror al dar a conocer al público sus descubrimientos, que no son más que verdades a medias.

En su célebre conferencia en

Wallingford también escoge el

tema del miedo al hablar de sus

remedios:

Conferencia de Wallingford (24 septiembre de 1936)

Los remedios

Los remedios que se prescriben en el caso del “miedo”.

Los miedos normales en muchos de nosotros son: miedo a los ac-cidentes, miedo a la enfermedad, miedo a que el mal empeore, mie-do a la oscuridad o a estar solo, a los ladrones, al fuego; miedo a la pobreza, a los animales, a otras personas, etc. Miedos a cosas defi-nidas, haya o no razones para ello.

la esperanza de una vida mejor; o quizá, con la esperanza de reen-contrarse con algún ser querido al que han perdido.

Una de las verdaderas causas de

la enfermedad para el Dr. BACH

es el miedo y todos lo sentimos

como una de las emociones bási-

cas. Quizá sea por ello que el se-

gundo o tercero de los remedios

fuera precisamente MIMULUS.

En 1931, al escribir Cúrese Usted Mismo hace hincapié en superar-

lo en dos de sus capítulos:

Cúrese Usted Mismo (1931)

Capítulo cuatro

No tengamos miedo de zambullir-nos en la vida: estamos aquí para obtener experiencia y conocimien-to, y poco aprenderemos si no en-frentamos las realidades y pone-mos todo nuestro empeño.Otra ayuda fundamental puede ser para nosotros desechar el miedo. El miedo en realidad no tiene lugar en el reino humano, puesto que nues-tra divinidad interior, que es noso-tros, es inconquistable e inmortal, y si sólo nos diéramos cuenta de ello, nosotros, como hijos de Dios, no tendríamos nada que temer.

Capítulo siete

En esta era, el miedo a la enfer-medad ha aumentado hasta con-vertirse en un gran poder dañi-no, puesto que abre las puertas a las cosas que tememos y así éstas llegan más fácilmente. Ese miedo es en realidad un interés egoísta, pues cuando estamos seriamente absortos en el bienestar de los de-

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“Las necesidades básicas del ser humano son sólo dos: el hambre y el amor”

Sigmund Freud

En este trabajo se describen

algunas de las esencias flora-

les del sistema BACH que pueden

servirnos de ayuda cuando no te-

nemos una relación “sana” con la

comida. Cabe señalar como ad-

vertencia importante que proble-

mas severos como anorexia, buli-

mia y obesidad grave, entre otros,

requieren un tratamiento espe-

cializado, aunque la terapia floral

pueda colateralmente servir de

ayuda.

Centrando la temática de este ar-

tículo, ¿a qué tipo de problemas

con la alimentación está dirigi-

do este trabajo? Como es cono-

cido las esencias florales de BACH

tratan principalmente los “pade-

ceres” emocionales de la perso-

na frente a un asunto, no el asun-

to en sí (el “cómo lo vive” y no el

“qué”). Esto es, si la persona tie-

ducen mejoras temporales, por-

que están dirigidas al síntoma y

no a la causa.

Como señala Menéndez (2006) “la alimentación va asociada a toda nuestra historia emocional. Nues-tro cuerpo es un organismo que se pone en marcha gracias al alimen-to físico, la comida, y al alimen-to emocional, el amor, el afecto. Si esto último falla, la mente busca canales para expresar su malestar. La compulsión ante la comida, la inapetencia, la necesidad de perder peso, la incapacidad para ganarlo o cualquier desorden alimentario son algunos de los canales que nues-tra psique utiliza para avisarnos de que algo no marcha como debiera. La alimentación, por tanto, no sólo nos sirve como fuente de energía; también puede tener la capacidad de acallar conflictos psicológicos que no podemos expresar”.

La ingesta de alimentos constitu-

ye un proceso de comunicación,

de significados emocionales. Con-

fundir la comida con las emocio-

ne “unos kilos de más” y lo vive

estupendamente, no se requie-

re de ninguna esencia floral; en

todo caso puede ser un síntoma

de salud emocional en un mundo

tan influido por la imagen. Tam-

poco es una cuestión objetiva, ya

que por ejemplo una bella mujer

con un cuerpo espléndido puede

tener una relación de “dolor” con

la alimentación y con su imagen.

Alimentación e historia emocional

La forma en que nos relacio-

namos con la comida está muy

conectada con nuestro mundo

emocional. Aunque existen otros

factores importantes (genéticos,

educacionales, culturales, entre

otros), una relación inadecuada

con la comida –en mi opinión- ha

de enfocarse como un síntoma o

consecuencia de conflictos emo-

cionales de la persona. Es por

ello que las dietas fracasan una y

otra vez (a menudo empeorando

el problema) o, como mucho, pro-

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Carmen [email protected]

Page 14: Revista Sedibac

algo, calmarse, aliviar el aburri-

miento o la depresión y conso-

larse en momentos de tristeza o

angustia. Aceptar un trozo de tar-

ta de cumpleaños porque recha-

zarlo sería antisocial, premiarse

con un poco de chocolate al con-

cluir una ardua tarea, o beber sin

ganas una cerveza o una copa de

vino cuando hacemos vida social

son prácticas de la vida cotidiana.

No es frecuente que de niños se

nos ayude a identificar las emo-

ciones. Es habitual en nuestra

sociedad experimentar dificultad

para identificar lo que está sin-

tiendo y expresarlo. En un mun-

do de tanto conocimiento y cul-

tura, la mayor parte de nosotros

somos grandes analfabetos emo-

cionales. Las personas que su-

fren trastorno del comporta-

miento alimentario tienen una

gran confusión sobre sus esta-

dos emocionales internos, in-

cluidas las sensaciones de ham-

bre o saciedad. Quienes recurren

a la comida o la rechazan como

forma de compensar sus emo-

ciones probablemente hayan

aprendido desde niños a mini-

mizar, negar o no mostrar ante

otras personas lo que están sin-

tiendo.

Es por ello que, personalmen-

te, cuando un cliente en el espa-

cio de la consulta floral me soli-

cita ayuda para su “incómoda o

dolorosa” relación con la comida,

siempre le indico “que éste es un

tema que irá mejorando a lo largo

de su proceso”, evitando tratar-

lo como un objetivo en sí mismo,

ya que es un síntoma de algo ha-

bitualmente profundo y arraiga-

nes es algo frecuente. Las per-

sonas, en ocasiones, recurrimos

a la comida para sentirnos mejor

cuando nos sentimos, por ejem-

plo, frustrados, ansiosos o solos.

La tristeza o la rabia son emocio-

nes que nos pueden llevar a co-

mer sin tener hambre o a no co-

mer cuando deberíamos hacerlo.

Durante el primer año de vida,

los niños aprenden a conocer el

mundo utilizando su boca. La pri-

mera relación de afecto es la

que se desarrolla entre el bebé

y quienes le alimentan. Así pues,

se genera una relación básica que

perdurará durante toda nuestra

vida: el afecto y la nutrición.

Cuando el niño no recibe una ade-

cuada atención, ya sea por exceso

(ofreciendo comida ante cualquier

malestar), o por defecto (negli-

gencia), probablemente crecerá

en la perplejidad y la confusión,

sintiéndose incapaz de distinguir

cuándo tiene hambre de cuan-

do está satisfecho y, en el futuro,

tendrá dificultad para diferenciar

entre la necesidad de alimento y

otras necesidades o emociones.

También en el ámbito familiar se

crean diferentes patrones de in-

teracción en los que se utiliza la

comida con fines distintos a la

nutrición, puede ser usada como

arma ofensiva o defensiva, como

castigo o recompensa.

A partir del momento en que

un padre da a su hijo una galle-

ta o un caramelo para consolar-

lo y que se tranquilice, la comida

se transforma en algo emotivo y

no sólo físico. Desde la infancia,

la comida se utiliza para celebrar

do que habrá que ir descubrien-

do. Citando de nuevo a Menéndez

(2006):

“Es inútil, perder tiempo y energías controlando obsesivamente la dieta cuando el peso del conflicto se de-sarrolla en el mundo de los afec-tos. (...) La boca que se cierra y se abre a la comida es la misma boca que quiere hablar. Desamor, aban-dono, culpa, rabia, celos, rivalidad, angustia o tristeza son algunos de los sentimientos que pueden es-tar intentando expresarse a través de los conflictos con la alimenta-ción (...). Cuando nuestra boca no pronuncia lo que sentimos, traga para aliviar la tensión emocional. (...) En ocasiones, las dietas inten-tan controlar algo que no podemos controlar por dentro como el sen-tir que no somos quienes quere-mos ser. Por ello, sólo cuando uno comienza a quererse realmente puede afrontar una dieta saluda-ble. De lo contrario, se puede lle-gar a pensar que se está intentan-do controlar algo que va más allá de los kilos (...). Los trastornos ali-mentarios aparecen cuando inten-tamos tapar con la comida conflic-tos que no podemos resolver de otra forma (...) cuando un abismo separa lo que somos de lo que nos gustaría ser”.

Flores de Bach y alimento

Cualquier emoción puede expre-

sarse a través de un conflicto con

la comida. Por tanto, cualquie-

ra de las 38 esencias florales de

BACH puede servirnos de ayuda.

He aquí una selección personal:

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constituyen un núcleo emocio-

nal que pueden actuar a modo de

mapa emocional (unas llevan a

otras y se retro-alimentan).

“Por no comerme al otro me

como lo que pillo”

Comer o dejar de hacerlo por es-

tar enfadado es algo que ocurre

más en mujeres que en varones,

ya que tradicionalmente a éstas

se les ha reprimido mostrar ra-

bia. Las personas que creen que

no tienen derecho a enfadarse o

las que se asustan mucho ante

sus propias reacciones de enfado

son más propensas a usar la co-

mida inadecuadamente. Sucede

que la persona se siente rabiosa

La comida como auto-castigo y

auto-exigencia

Las esencias florales relaciona-

das con la auto-condena, auto-

castigo o auto-destrucción son,

en mi opinión, muy importantes

en el tema que nos ocupa. Aun-

que la persona, en la mayor parte

de los casos, dependiendo de su

grado de auto-conocimiento, no

sea consciente de esta relación:

“El exceso de comida me daña, •

así expío mis culpas”.

PINE, cuando la persona se sien-

te culpable (consciente o no) y

se castiga “poniéndose a rebo-

sar”. Coincido con Menéndez

(2006) en que cualquier emoción puede expresarse a través de un conflicto con la comida, pero el más espectacular es la culpa: “Es un sentimiento inconsciente que se calma comiendo”.

“Me aborrezco, me doy asco” •

(por los kilos de más)

CRAB APPLE, a la persona le des-

agrada enormemente su as-

pecto (hasta darse “asco”). Esta

esencia nos hace retornar a un

estado de proporción. Ayuda a

amar al propio cuerpo, a retor-

nar a un estado de dignidad.

“Sólo el orden y auto-control in-•

terno pueden salvarme” (al me-

nos tengo control sobre lo que

como)

ROCK WATER se pondrá muy es-

tricto con la dieta (que será ri-

gidísima), y claro, vivirá mucha

angustia a través de estados

CHERRY PLUM.

Estas cuatro esencias (PINE, CRAB

APPLE, ROCK WATER y CHERRY PLUM)

pero no lo ve o lo ve pero no se lo

permite (soy “niña buena” o “ten-

go miedo a las consecuencias de

expresar mi enfado”), entonces el

estado HOLLY (puede que sano1)

inicial se vuelve contra la perso-

na, y se transforma en WILLOW.

Desde ahí sólo la comida me cal-

ma “esa ansiedad que me provoca

esta situación”, que tienen como

base ese enfado o resentimiento.

Por no hacer daño al otro me lo

hago a mi, de diferentes formas,

una de ellas puede ser atiborrán-

dome de comida.

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1 Miedo, trsiteza y rabia son emociones bá-sicas desagradables pero funcionales.

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“Comer calma mi vacío”…”un

estómago sin fondo”

Compulsión a gratificarse alimen-

tándose como revancha ante la fal-

ta de nutrición afectiva y la insatis-

facción de sentimientos de rechazo

anteriores. HEATHER, es así una de

las flores principales en la relación

disfuncional con la comida. Es un

estado emocional que se sustenta

en un sentimiento de vacío (fijación

oral: “no hubo bastante teta de

mamá”), aunque la persona no sea

consciente de ello, sino de una ne-

cesitad de llenar un agujero… por

ejemplo, con comida.

En momentos de mayor sole-

dad afectiva puede “arramblar”

con el frigorífico. Heather rela-

ciona “inconscientemente” la co-

mida con la falta de compañía,

atención y afecto. Por otra parte,

aunque puede carecer objetiva-

mente de este afecto también tie-

ne dificultad de nutrirse, es así un

“pozo sin fondo” o un “estómago

sin fondo”.

“Comer calma mi ansiedad”

De entre las emociones que pue-

den conducir a un uso inadecua-

do de la comida destaca la ansie-

dad. Generalmente la ansiedad

es más intensa cuanto menos se

conoce la causa que lo provoca.

En general podrían incluirse aquí

las esencias florales relacionadas

con estados de ansiedad y angus-

tia (Orozco, 2004), destacando por

la frecuencia en el tema que nos

ocupa:

AGRIMONY• que calma su ansie-

dad con la comida. Puede sentir

que “algo le pasa y no sabe lo

que es”, está desconectado de

sus emociones y actúa compul-

sivamente. O puede saber qué

le pasa, pero trata de auto-en-

gañarse, o minimizar el asunto,

calmar su hipersensibilidad al

dolor con “comida” (o “comida

como analgésico emocional”).

ASPEN• , es un estado de mucha

angustia y ansiedad que pre-

cede a “atracones” como for-

ma de calmar esa preocupación

inespecífica.

“Mi problema con el peso es

genético”

Cuando el problema del sobre-

peso o la obesidad es genético y

la persona lo vive así la esencia

WALNUT, como en otros síntomas

físicos relacionados con la heren-

cia, ayuda a romper el lazo, pa-

trón o vínculo de la constelación

familiar.

“¿Qué puedo hacer? Cada uno

es como es”

Si la persona vive con resigna-

ción (que no con aceptación) sus

“kilos de más”, sintiendo que no

hay posibilidad de cambio porque

“soy así”, la esencia WILD ROSE

puede ser de ayuda.

“La comida me puede”

CENTAURY, dificultad de límites, de

“limitar” la ingesta en este caso,

esencia que como Patrón Trans-

personal (Orozco 1996 y 2003)

ayuda a cortar con las adicciones,

porque “nos someten”, en este

caso “adicción” a la comida.

CHERRY PLUM ayuda en el mante-

nimiento de la voluntad cuando

existe una presión “me lo como –

no me lo como” (y “me lo comí”

y me siento culpable (PINE) y des-

preciable (CRAB APPLE)).

¿Otras posibilidades? (para

pensar más)

CHICORY - WILLOW, ayudaría en la

necesidad de estar siempre acu-

mulando y en la dificultad de

soltar, en este caso kilos. Re-

cordemos que en Patrones Trans-

personales (R. Orozco) WILLOW y

CHICORY son dos estados de reten-

ción. Y en el Sistema BACH (Juan

Bautista, 2007) constituyen una

pareja flor de personalidad-flor

espiritualizada.

La pareja AGRIMONY – WALNUT tam-

bién estaría indicada para quie-

nes necesitan de la obesidad

como escudo protector. Constitu-

yen también una pareja floral en

el Sistema BACH anteriormente

mencionado.

Anti-dieta, cambio de hábitos y Flores de Bach

Aunque este escrito tiene un en-

foque más “anti-dieta” que de

“ayuda en la dieta”, mientras va-

mos aprendiendo a conocer y res-

petar nuestras emociones, algu-

nas esencias florales que pueden

ayudarnos, si decidimos cortar

con hábitos dañinos para nuestra

salud física y/o emocional, a te-

ner en cuenta pueden ser:

HEATHER• , si sufrimos de “ansie-

dad oral”. Necesitamos tener

algo en la boca (palabras, ciga-

rros, comida, etc.). Sensación

de insaciabilidad.

GENTIAN• , “el gran facilitador” (R.

Orozco), también de las dietas,

¡cómo no! Si nos desanimamos,

frustramos o desalentamos

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Hambre, amor y flores de Bach / Carmen Almansa

Page 17: Revista Sedibac

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cia presentada al III Congreso

Nacional de Terapia Floral, Be-

nalmádena, 27 noviembre. Dis-

ponible en: http://flobana.org/

OROZCO2.htm

Sociedad para el Estudio y la Difusión de la Terapia del Dr. Bach de Cataluña

Hambre, amor y flores de Bach / Carmen Almansa

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CENTAURY• , cuando sen-

timos que la comi-

da “nos puede”, para

ayudarnos a romper

con la dependencia.

WALNUT• , ayuda a rom-

per con hábitos ad-

quiridos y que que-

remos dejar atrás.

Cuando las costum-

bres y reuniones fa-

miliares nos desvían

de nuestro propósito.

AGRIMONY• , no sólo por ser un

gran ansiolítico del sistema

Bach, sino para ayudarnos en

la conciencia emocional y en

sentir que podemos hacernos

cargo de nuestras emociones.

Aunque no aconsejo tomarla

más de 4 veces por día, ya que

una toma frecuente en deter-

minadas personas que acusen

AGRIMONY de forma arraigada en

su carácter puede provocar un

efecto contrario al inicio.

Y “cualquier otra del total de

las 38” ya que nunca está de-

más recordar que éstas son sólo

ideas, sugerencias… un “ejercicio

de pensar floralmente sobre un

tema”, parafraseando a S. Veilati;

y no una fórmula, sino posibilida-

des cuya lectura puede “hacernos

caer en cuenta”.

Recuerden que también pue-

den usarse las Flores de BACH

para cocinar, la cocción, según E.

Grecco (2007), potencia su efec-

to, y sin duda, ¡puede ser todo un

disfrute!

ante los retrocesos en nues-

tros planes de cambio de hábi-

tos alimenticios, que nos puede

llevar a abandonar el intento.

ROCK WATER• , si el exceso de ri-

gidez con el que abordamos el

tema se convierte en un impe-

dimento más que en una ayuda.

CHERRY PLUM• , si hay dificultad en

focalizar la voluntad en nuestro

objetivo y disminuir el miedo (y

la tentación) “a caer” en hábitos

alimenticios dañinos (en canti-

dad o calidad).

CRAB APPLE• , para ayudarnos a

ser más amables con nosotros

mismos y más objetivos con

nuestro físico. Cuando nos sen-

timos “que ese alimento en sí

o ese exceso de alimento” nos

está “ensuciando por dentro”.

Cuando el deseo de vernos li-

bres de “esos kilos de más que

nos sobran y nos pertenecen”

toma más importancia de la

que tiene.

WHITE CHESTNUT• , para romper el

vínculo del pensamiento obse-

sivo, para dejar de pensar en la

dieta, en la comida. Cuando la

comida es una obsesión.

CHESTNUT BUD• , para el hábito de

caer una y otra vez en eso que

no deseamos, para aprender

de nuestra conexión emocio-

nes-comida y “pillarnos” en el

momento en el que la comida

sustituye el sostenimiento de

la emoción. Para ayudarnos a

tener conciencia de que “esa”

emoción nos impulsa a la co-

mida.

Page 18: Revista Sedibac

En el boletín 44 expusimos los

resultados generales de este

estudio, realizado en pacientes

con fibromialgia, pero pensamos

que es importante detenernos

en la metodología y en algunas

reflexiones teóricas surgidas en

torno al mismo.

Se realizó un estudio descriptivo

relacional. Se tomó como mues-

tra de trabajo 13 pacientes con el

diagnóstico de fibromialgia que

cumplieron los criterios para su

diagnóstico establecidos en 1990

por el Colegio Americano de Reu-

matología [1].

El método utilizado para la selec-

ción de las flores se basó en 2 as-

pectos básicos del diagnóstico de

las dolencias físicas con flores de

BACH, según Dietmar Krämer [2]:

La determinación de las zonas •

activas.

La determinación de las zonas •

silenciosas.

La determinación de las zonas

activas

Se considera zonas activas son

aquellas localizadas en el cuerpo

y que manifiestan alteraciones

mediante determinada sensación

o síntoma físico; como dolor loca-

lizado y sensibilidad a la presión,

elementos, que se incluyen en el

diagnóstico o determinación de

los puntos dolorosos característi-

cos de la fibromialgia.

Comenzaremos el análisis con la

relación que se estableció entre

dos mapas topográficos conoci-

dos: la localización de los puntos

de gatillo2 [1] y las zonas cutáneas

corporales de Krämer Wild [12].

Con esta superposición, se logró

determinar las flores que coinci-

den con las posibles zonas dolo-

rosas en cada paciente.

La relación obtenida con la su-

perposición de ambos mapas, se

observa en la tabla 1.

Si se analiza a fondo la tabla ob-

servamos que algunas flores se

presentan de forma reiterati-

va en la zona correspondiente a

los puntos de gatillo, ellas son:

[1] WILD ROSE; [2] ASPEN; [3] ROCK

WATER; [4] VERVAIN; [6] OLIVE; [7]

WATER VIOLET y [8] OAK.

A pesar de que el dolor en la fibro-

mialgia es preferentemente ge-

neralizado se encontró en nues-

tro estudio algunas regiones mas

afectadas por el dolor que otras.

ª

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o ªAlgo más sobre Fibromialgia y Flores de Bach

por Dra. Saira Rivas Suárez1

1 Especialista de primer grado en MGI. Master en Psicología Médica. Diplomada en Terapia Floral Residente de Medicina Interna del Hospital Universitario Arnaldo Millian Castro de Santa Clara, Cuba.

2 Según criterios diagnósticos del Colegio Americano de Reumatología 1990

Puntos de gatillo Zonas cutáneas de las flores de Bach

Page 19: Revista Sedibac

igualar las temperaturas de to-

das las compresas. Al transcurrir

este tiempo se le pide al paciente

que nos diga en cual de las regio-

nes cutáneas presenta cualquie-

ra de las siguientes alteraciones:

Presión; Frío; Calor; Parestesias

o sensación de quemazón; Dolor.

A las zonas de la piel, que pre-

sentaron cualquiera de ellas se

les llamó, zonas silenciosas ac-

tivadas y constituyeron la base

para analizar la frecuencia con

que algunas flores eran necesa-

rias en los pacientes con esta pa-

tología, en ocasiones, sin esta-

blecerse aún, un síntoma físico

definido en ella.

En el gráfico siguiente se mues-

tran las flores encontradas con

mayor frecuencia en nuestros pa-

cientes al hacer el diagnóstico to-

pográfico basado este método:

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Es interesante señalar que se re-

portaron alteraciones en zonas

ASPEN en el 100 % de los pacien-

tes, y un 92,3 % en zonas WILD

ROSE. Estas dos flores coinciden

en las mas frecuentes encontra-

das al hacer el análisis de la co-

rrespondencia de los mapas cor-

porales y los puntos de gatillo.

Discusión de los resultados

Después de realizar un análisis

de los pacientes con fibromial-

gia por ambos métodos, nos da-

mos cuenta de que los caminos

nos llevan a un resultado equiva-

lente o sea, se constata que las

flores obtenidas en el diagnosti-

co corporal son similares. Esta

Gráfico 1. FLORES MAS FRECUENTES ENCONTRADAS EN EL DIAGNÓSTICO

TOPOGRÁFICO GENERAL POR EL MÉTODO DEL DR. SPOSATO

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1 1 1 1 1 1 1

12

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2

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Tabla 1. LOCALIZACIÓN TOPOGRÁFICA DE

LAS FLORES EN LOS 18 PUNTOS DE GATILLO

3 Según criterios diagnósticos del Colegio Americano de Reumatología, 1990.

Estas se señalaron en la tabla con

un color gris.

La determinación de las zonas

silenciosas

Las zonas silenciosas son aque-

llas que sufren una alteración

pero no manifiestan cambios de

ningún tipo a nivel físico. Para de-

terminar su presencia se utilizó la

metodología del Dr. Ezio Sposato

[3] modificada. La misma consis-

te en colocar el paciente, en re-

poso, en decúbito supino. Se le

colocan 38 compresas húmedas

con una dilución acuosa de cada

una de las esencias, en las zonas

correspondientes a las flores de

BACH. Se mantiene el paciente en

reposo durante 15 minutos para

Localización del punto Flor correspondiente

de gatillo

Occipucio: bilateral WATER VIOLET

Cervical bajo: derecho ASPEN

izquierdo VERVAIN

Trapecio: bilateral OLIVE

Supraespinoso: derecho VERVAIN

izquierdo ASPEN

Segunda costilla: bilateral OAK

Epicóndilo lateral: bilateral WILD ROSE

Glúteo: cuadrante superior

externo derecho WILLOW

externo izquierdo CHERRY PLUM

Trocánter mayor: derecho ROCK WATER

izquierdo WILD ROSE, SCLERANTUS

Rodilla: derecho ROCK WATER

izquierdo WALNUT

Fuente: Mapas topográficos de Krämer Wild - localización

de los puntos de gatillo3

Page 20: Revista Sedibac

metodología de trabajo corrobo-

ro lo propuesto por un análisis

personológico y mas allá, trans-

personal de estos pacientes y de

la sintomatología encontrada. A

continuación se realizará un bre-

ve análisis de algunas de las flo-

res mas frecuentes:

WILD ROSE• , se corresponde con

los puntos dolorosos de epi-

cóndilos de forma bilateral y en

la zona izquierda del trocanter

mayor del fémur, es interesan-

te señalar de esta flor, que di-

versos autores [4,5,6,7] coinci-

den en la apatía y resignación

ante la vida sin hacer el menor

esfuerzo por cambiar o mejorar

las cosas, que domina a estas

personas. Si tomamos una cita

de BACH, nos ayudará a enten-

der las características de esta

flor observada en los pacien-

tes que padecen esta enferme-

dad: ”la resignación, que hace que uno se convierta en un mero pasajero incapaz de observar el viaje de la vida, abre la puer-ta a quien sabe cuantas influen-cias adversas que nunca tendrían oportunidad de conseguir ad-misión en nuestra vida, si nues-tra existencia diaria mantuvie-se consigo el espíritu de alegría y de aventura” [5]. El patrón trans-

personal la subexpresión [6], en-

cajaría también perfectamente

con síntomas de la enfermedad,

tales como debilidad o cansancio

fácil y depresión.

ASPEN• se corresponde con los

puntos dolorosos de cervical

bajo derecho y región del supra-

espinoso. Es una flor del miedo

fundamentalmente a lo desco-

nocido, sensación de que algo

terrible va a suceder y la per-

sona no puede precisar de que

se trata, miedos sutiles e inex-

plicables que pueden acechar

de día y de noche, y la perso-

na teme con frecuencia contar

a los demás [4,5,6,7]. Al relacio-

narlo con un miedo metafísico

con lo abstracto e inmaterial y

darle como patrón transperso-

nal la incorporeidad [8], nos en-

caja con el no sustento orgáni-

co del dolor de esta patología, al

no encontrarse en ellos trastor-

nos degenerativos ni inflamato-

rios en dichas zonas dolorosas.

Al tener una relación evidente

con el campo astral, hace que

estas personas sean” energé-

ticamente esponjosos” [6] que

unido a la apatía explicada ante-

riormente nos daría explicación

a la variedad de síntomas subje-

tivos y cambiantes como sensa-

ción de hinchazón, síndrome del

intestino irritable, dismenorrea

y otros. También es una flor que

tiene relación con lo onírico y en

esta enfermedad existe eviden-

temente un trastorno de sue-

ño que se sugiere como inicio

de las alteraciones, al no tener,

la mayor parte de los pacientes,

un sueño reparador, por tan-

to, se levantan cansados. En al-

gunos estudios se ha detecta-

do que el EEG muestra, que en

la fase 4 el sueño normal (mo-

vimientos oculares lentos) está

interrumpido muchas veces por

numerosos intervalos de ondas

alfa [9], que podría caracteri-

zar al sueño ASPEN con frecuen-

tes pesadillas, con esta flor se

ayudaría mucho a los pacien-

tes a filtrar una serie de esco-

rias energéticas con lo que tie-

nen problemas.

ROCK WATER• se encuentra en

el trocánter y rodilla derecha,

esta flor se caracteriza por re-

presentar formas de compor-

tamiento y actitudes estrictas,

rígidas y se ha utilizado como

patrón transpersonal en el caso

de cristalización o rigidez está-

tica, crónica de carácter no in-

flamatorio [6], esta flor se rela-

cionaría con la rigidez y tensión

muscular de esta enfermedad

por lo que estaría muy bien in-

dicada de forma local u oral.

VERVAIN• , flor que coincide con los

puntos cervical bajo derecho y

supraespinoso izquierdo, esta

flor le vemos un aspecto mas

transpersonal en estos pacien-

tes sobre todo en los momentos

de crisis agudas de dolor y con-

tracturas musculares, donde la

sobre expresión estaría dada

por un dolor puntual irradiado.

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Algo más sobre fibromialgia y flores de Bach / Dra. Saira Rivas Suárez

Page 21: Revista Sedibac

agotamiento y la aparición de

los síntomas dolorosos acom-

pañados de rigidez, contractu-

ras mantenidas y tensión típi-

cos de esa patología.

OLIVE• , flor que se ubica en la re-

gión bilateral del trapecio es

una flor de especial importan-

cia en los pacientes con fibro-

mialgia por la constante debili-

dad generalizada que presentan

los mismos esta flor fue reco-

mendada por BACH “para quie-

nes han sufrido mucho física y

mentalmente y se encuentran

tan fatigados o exhaustos que

sienten que y no tienen fuerzas

para realizar ningún esfuerzo

mas. La vida cotidiana repre-

senta un arduo trabajo y no les

brinda ningún placer” [5].

WATER VIOLET• , flor que se en-

cuentra en la zona correspon-

diente a la región occipital bi-

lateral, es la llamada flor del

aislamiento, su patrón trans-

personal, la rigidez estática, se-

gún el Dr Orozco [6], permitiría

enmarcar los síntomas de los

pacientes fibromiálgicos, so-

bre todo la rigidez y la tensión

mantenida localmente sobre

esta zona occipital , muy mani-

fiesto en horas de la mañana o

después de realizar algún pe-

queño esfuerzo con los brazos

elevados.

OAK• , es la flor que encontramos

localizada de forma bilateral en

la segunda costilla, a pesar que

no es tan frecuentemente re-

portada esta zona como doloro-

sa si lo es en el diagnóstico ge-

neral. Desde una perspectiva

psicológica el OAK se caracte-

riza por rigidez mental impor-

tante [8] y de gran incapacidad

para percibir señales de can-

sancio y otras señales corpo-

rales [8] pues es probable que

por ello se sobrecargue física y

mentalmente hasta el máximo

Bibiografía

[1] VIDAL NEIRA L., MARTÍNEZ VILLAVERDE J.,

HDEZ. MARTÍNEZ A., Síndrome de fi-

bromialgia y reumatismo psicó-

geno. En VIDAL NEIRA L., AGUILA J.,

RISCAYA J.. Bases y principios en Reu-

matología. 2ª ed. Perú: Boehringer

Ingelheim; 1997. p. 370-385.

[2] KRAMER, D. Nuevas terapias flora-

les de Bach. Málaga: Editorial Si-

rio S.A. 1989.

[3] SPOSATO, Ezio. La Medicina Ritrova-

ta. Xenia Milan. 1998.

[4] VEILATI, S. 2000. Tratado comple-

to de terapia floral, 445 pp., Edaf y

Moralaes S. A, Madrid.

[5] BACH POR BACH. Obras completas, es-

critos florales, Buenos Aires: Edi-

ciones Continente, S.R.L., 1993.

[6] OROZCO, R. Flores de Bach: Manual

para Terapeutas Avanzados. Barce-

lona: Ediciones Indigo; 1996.

[7] OROZCO, R. Flores de Bach. Diag-

nóstico diferencial. Barcelona:

Ediciones Indigo; 1998.

[8] OROZCO, R. Flores de Bach Manual

de aplicaciones locales. Barcelo-

na: Ediciones Indigo; 2002.

[9] NEECK, G., CROFFORD, LJ. Neuroen-

docrine perturbations in fibromyal-

gia and chronic fatigue syndrome.

Rheum Dis. Clin. North Am. 2000

Nov; 26(4): 989-1002. Disponible

en: http://www.fibromialgia.com.

br/novosite/index.php

[10] BARNARD, Ju-

lian. Las plan-

tas sanado-

ras de Edward

Bach. 1988.

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Algo más sobre fibromialgia y flores de Bach / Dra. Saira Rivas Suárez

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Conclusiones

La fibromialgia es una patología

donde se aprecian gran diversidad

de síntomas y donde predomi-

na el dolor, que tiene la caracte-

rística de tener una gran varia-

bilidad clínica y en su evolución.

Por eso con frecuencia es nece-

sario utilizar diferentes formulas

florales en el seguimiento a lar-

go plazo de los pacientes afecta-

dos. Basados en el análisis rea-

lizado anteriormente sugerimos

utilizar a ASPEN y WILD ROSE duran-

te todo el seguimiento de los pa-

cientes y valorar la utilización del

resto de las flores en dependen-

cia de la sintomatología puntual

en cada paciente y en cada mo-

mento de la terapia.

Page 22: Revista Sedibac

Alergia: desorden en el siste-

ma inmunológico. Exceso de

liberación de histamina. Del griego

Allos Ergo que significa reacción

alterada. Este concepto fue intro-

ducido por Von Pirquet en 1906.

Sistema inmunológico: está for-

mado por un conjunto de meca-

nismos que protegen al organis-

mo de infecciones, a través de la

identificación y la eliminación de

agentes patógenos.

La respuesta inmune es la forma

con la que el cuerpo reconoce y

se defiende a sí mismo de bacte-

rias, virus y substancias que pa-

recen extrañas y dañinas para el

organismo.

La referencia más antigua a la in-

munidad se produjo durante la

plaga de Atenas en el 1430 a.c.

(historia de la guerra del Pelopo-

neso). Ducídides notó que algu-

nas personas que se habían recu-

perado de un brote anterior de la

enfermedad (plaga) podían aten-

der a los enfermos sin enfermar

de nuevo. Esta observación de in-

munidad adquirida fue utilizada

por Louis Pasteur en el desarro-

llo de las vacunas y en su teo-

ría microbiana de la enfermedad.

Sin embargo, no se confirmó que

los microorganismos fuesen a la

causa de las enfermedades infec-

ciosas hasta 1891, cuando Robert

Koch enunció sus postulados, por

los que recibió el premio Nobel

en 1905. En 1901 con el descubri-

miento del virus de la fiebre ama-

rilla por Walter Reed se confirmó

que los virus son patógenos hu-

manos.

La mayoría de las reacciones

alérgicas son el resultado de la

respuesta exagerada del sistema

inmunitario, ante una situación

de “alarma”, por la presencia de

cualquier agente considerado ex-

traño, al que se denomina antíge-

no. El propósito del sistema in-

munitario es mantener fuera del

cuerpo las agresiones de micro-

organismos, tales como bacte-

rias, virus y hongos, y destruir

cualquier microorganismo infec-

cioso que lo invada. Así pues, el

sistema inmunitario está forma-

do por una red compleja y vital

de células y órganos que prote-

gen al cuerpo de las infecciones,

por lo tanto, las alergias son al-

teraciones del sistema inmuni-

tario. Cuando una sustancia no-

civa, como por ejemplo, polvo,

moho o polen, entra en contacto

con una persona que es alérgica

a esa sustancia, el sistema inmu-

nitario reacciona produciendo an-

ticuerpos, que “atacan” al alerge-

no para impedir los síntomas que

ésta puede provocar como:

Respiración sibilante•

Comezón•

Moqueo•

Lagrimeo•

Escozor ocular•

Dolor de cabeza•

Mareo •

Debilidad•

Confusión•

Dificultad de concentración•

Trastornos gastrointestinales•

Etc…•

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ªAlergia: ∂cómo se vuelve alérgica una persona?

por Rosa Castelló [email protected]

Page 23: Revista Sedibac

drome Químico Múltiple” (SQM)

cuyos síntomas son:

Fatiga•

Pérdida de memoria•

Cambios de humor•

Ansiedad•

Disnea•

Dolor de cabeza•

Mareo •

Debilidad•

Confusión •

Opresión pectoral•

Trastorno gastrointestinal•

También llamada enfermedad

medioambiental del siglo XX. Na-

die sabe cuantos enfermos de

SQM existen, pero los trabajos de

investigación de los doctores Mi-

ller Bell e Iris Bel, les llevaron a la

conclusión de que muchas perso-

nas están afectadas sin saberlo.

Muchos pacientes afectados de

SQM han sido diagnosticados

como aquejados de trastornos de

tipo psiquiátrico: ansiedad o de-

presión, aunque estos diagnósti-

cos son sistemáticamente recha-

zados por el propio paciente.

1-2% de estos. Debemos conside-

rar pues que la versión psicológi-

ca, en la que la persona odia un

alimento en cuestión y cree que

éste le produce una reacción de-

terminada, puede centrarse en

cualquier alimento o bebida.

Podemos encontrar diferentes ti-

pos de alergias y considerar que,

las diferentes substancias am-

bientales que producen alergia,

son normalmente proteínas, se

denominan alérgenos, con un nú-

mero casi ilimitado, aunque las

más importantes son:

Alimenticias•

Polen• (gramíneas, árboles, ma-

lezas)

Ácaros del polvo•

Hongos•

Picaduras de insecto• (abejas,

etc.)

Animales domésticos•

Metales• (Níquel, plomo, etc.)

Inflamación producida por libe-

ración de mediadores directa-

mente desde los linfocitos. Los

síntomas más frecuentes son

eczemas en la zona de contac-

to más directa con la piel.

Disolventes orgánicos, pintu-•

ras, lacas para acabados

Plaguicidas, humos diversos•

Polvo• (madera, remolacha,

azúcar)

Productos de perfumería •

(champú, colonias, barnices de

uñas, quitaesmaltes, desodo-

rantes, etc.)

Productos químicos• (plástico,

látex, etc.)

Síndrome de respuesta a las

substancias químicas, síndrome

de alergia total denominado “Sín-

Los síntomas de la reacción alér-

gica varían dependiendo del tipo

y la cantidad del alergeno encon-

trado, y de la manera que el siste-

ma inmunitario reaccione frente

a él. Las alergias pueden afectar

a cualquier persona sin tener en

cuenta la edad, el sexo o la raza.

Suelen aparecer frecuentemente

en la infancia; aunque el primer

episodio puede producirse a cual-

quier edad y aparecer de nuevo

después de muchos años de re-

misión.

Curiosamente las alergias pueden

ser hereditarias, por una cuestión

hormonal genética. El estrés, el

humo o los irritantes del medio-

ambiente, también pueden jugar

un papel importante en el desa-

rrollo de las alergias. La especia-

lidad médica que estudia las en-

fermedades relacionadas con los

procesos alérgicos es la alergo-

logía, estrechamente relacionada

con la inmunología, la dermato-

logía y la neumología, puesto que

en los procesos alérgicos inter-

viene el sistema inmunitario y su

respuesta aparece en la piel, el

aparato respiratorio y digestivo.

Aunque no se debe confundir la

alergia a los alimentos con la in-

tolerancia a los alimentos, que se

distingue de las alergias en que

éstas provocan una respuesta del

sistema inmunitario activando la

inmunoglobulina E (IgE). Las in-

tolerancias se deben, en general,

a déficit enzimáticos que impiden

la adecuada metabolización del

nutriente. Algunos estudios de la

agencia alimentaria británica FSA

sugieren que entre el 20-30% de

la población creen ser alérgicos,

cuando sólo lo es realmente el

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Alergia: ¿cómo se vuelve alérgica una persona? / Rosa Castelló Vega

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TEMAS

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Page 24: Revista Sedibac

nombre como “ciencia en experi-

mentación” claro está, estamos

hablando de la llamada: Psico-

neuroinmunología. Estudia los

impulsos sensoriales en el cere-

bro, las funciones nerviosas, los

cambios en los niveles hormo-

nales y las reacciones inmunita-

rias. Es decir, estudia las relacio-

nes neuroendocrinas que unen el

alma con el cuerpo.

El Dr. Juan Cantos, psiquiatra clí-

nico de Barcelona, nos ha confir-

mado, basándose en su experien-

cia clínica de muchos años, que

curiosamente los pacientes psi-

cóticos no suelen desarrollar pa-

tologías alérgicas, puesto que su

aplanamiento afectivo hace que

sus emociones estén separadas

de la respuesta física. Poseen una

mente segmentada con estímulos

de dolor diferentes. Sin embar-

go los neuróticos, cuyas emocio-

nes se encuentran a flor de piel,

suelen ser muy propensos a este

tipo de trastornos. Por ejemplo,

los pacientes con asma presen-

tan un perfil psicológico y emo-

cional y una conducta diferentes

Sin embargo, esto nos presen-

ta una incógnita ¿están relacio-

nados la aparición de síntomas

alérgicos con la psiquis huma-

na? ¿Pueden las emociones ser

el desencadenante de la reacción

del sistema inmunitario ante es-

tas substancias?

El Dr. Carlos Crisci (profesor de

alergia e inmunología de la Uni-

versidad Nacional de Rosario, Ar-

gentina, Presidente de la sociedad

latinoamericana de alergia, asma

e inmunología) hace la siguien-

te afirmación “se conoce que mu-

chas de las moléculas que actúan

como mediadores en el proce-

so de la inflamación de la enfer-

medad alérgica acceden al cere-

bro y tiene efecto sobre el sistema

nervioso”. Y de hecho, e inversa-

mente, muchos mediadores que

se liberan en el sistema nervioso

a partir de situaciones de stress

emocional actúan sobre las célu-

las del sistema inmunitario, par-

ticularmente sobre los linfocitos

y pueden predisponer a una res-

puesta de tipo alérgico. Eviden-

temente el cerebro se mueve por

impulsos nerviosos y mediadores

por lo que podemos decir que el

pensamiento más sutil tiene un

origen molecular. Por tanto, si al-

guien tiene algún problema psí-

quico y padece una alergia, nos

podemos encontrar con que al

tratar el problema psíquico des-

aparezca la alergia o al revés.

Sin embargo, el Dr. Crisci aclara

que a nivel científico se está lejos

de reconocer, todavía, que la aler-

gia pueda tener una causa pura-

mente psicológica. Todo esto se

presenta como una gran incógni-

ta a la que incluso se le ha puesto

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Alergia: ¿cómo se vuelve alérgica una persona? / Rosa Castelló Vega

del resto. No aceptan la severi-

dad de su enfermedad, no siguen

con rigor los tratamientos, suelen

tener malas relaciones familia-

res e incluso con el terapeuta que

les atiende. Como podemos ver,

manifiestan un alto componente

emocional. Si se les ayuda a con-

trolar sus emociones el riesgo de

crisis disminuye.

Curiosamente parece que la cien-

cia se va acercando cada dia más

a los conceptos que de forma cla-

ra y brillante nos transmitió el Dr.

BACH, acerca del concepto salud-

enfermedad.

En su discurso del 1 de noviem-

bre de 1928 ante la sociedad ho-

meopática de Londres nos dijo:

”la ciencia trata de demostrar que

la vida es armonía, un estado de

afinación o una evidencia de que

no todo está vibrando armónica-

mente” definición de la enferme-

dad que hacía evidente la orienta-

ción de sus nuevas ideas.

En su libro, “Cúrese Ud. Mismo”,

nos decía también: “cualquier

p q

e va acercando o cada ddiaiaa m ás

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h íí id l i

Page 25: Revista Sedibac

preocupación, miedo o depresión

no atendida correctamente, pro-

voca la pérdida de la paz y la se-

renidad y es llevada al cuerpo me-

diante los nervios, provocando la

desorganización del correcto fun-

cionamiento de los órganos y teji-

dos.” Como podemos observar el

Dr. BACH se adelantó en el tiempo.

Si algún día la psiconeuroinmu-

nología deja de ser una ciencia en

experimentación, quizás sea posi-

ble demostrar que la terapia flo-

ral del Dr. BACH no sólo cubre los

aspectos emocionales que pue-

den provocar la disfunción en los

niveles hormonales, que a su vez

provocan las exageradas reaccio-

nes del sistema inmunitario ante

la presencia de cualquiera de los

efectos externos que hemos enu-

merado. Quizás la terapia floral,

bien utilizada, nos lleve a tratar

los desagradables efectos de este

desarreglo del sistema inmuni-

tario llamado alergia. Podemos

y tenemos herramientas a ni-

vel transpersonal para tratar los

síntomas una vez se han instau-

rado, y tenemos también la for-

ma de tratar esas emociones que

desencadenan de una forma sutil

este tipo de trastornos.

Veamos algunos ejemplos. Tome-

mos los síntomas que hemos visto

antes, uno por uno, y veamos la re-

lación con las esencias florales que

nos ayudarán a poder aliviarlos.

Nota: Tengamos en cuenta que

nosotros no tratamos enferme-

dades sino enfermos por lo que

no podemos dejar de considerar

la tipología y la forma de sentir de

cada individuo.

La nuestra es una medicina “del

alma”, y todos los días de mi vida

lamento que el Dr. BACH nos deja-

ra tan pronto y no pudiera profun-

dizar más en su maravilloso sis-

tema. Por ello, animo a los que

estamos aquí, a que trabajemos

con la terapia floral del Dr. BACH

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Alergia: ¿cómo se vuelve alérgica una persona? / Rosa Castelló Vega

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Alergia: ¿cómo se vuelve alérgica una persona? / Rosa Castelló Vega

antes y después de la apa-

rición de las alergias, tra-

tando la causa y el efecto.

Parece ser que las terapias

florales, hasta ahora con-

sideradas “un acto de fe”,

van convirtiéndose en una

realidad. Y ya para terminar

sólo quiero decir algo que

ya todos sabéis…

CON LA TERAPIA FLORAL

PODEMOS HACER UNA

MEDICINA PREVENTIVA

ARMONIZANDO ALMA Y

PERSONALIDAD.

Page 27: Revista Sedibac

fuera así, no estaríamos hablando

sólo de orgullo o elitismo, sino de

realidad al sentirse distinto a los

demás (recordemos que distinto

no significa mejor). El hecho de

hundir poco sus raíces en el ba-

rro nos habla de escasa relación

con el inconsciente, pero su per-

manencia en el agua nos habla de

vitalidad y emocionalidad, aspec-

tos que durante alguna fase de la

vida de WATER VIOLET están presen-

tes en exclusiva, ya que solamen-

te presentará raíces flotantes

durante la floración y un tiempo

después: verano a otoño.

Los tallos se encuentran sumer-

gidos excepto en el momento de

la floración, cuando salen al ex-

terior. Cuanto más cercana se

encuentra la floración, más ta-

llo sale del agua. La personali-

dad que se ocultaba se empieza

a manifestar y será la esencia de

la flor lo que le permitirá vencer

el aislamiento afectivo. Los ta-

llos sumergidos son delgados y

muy frágiles, mientras que los ta-

llos florales son algo más grue-

sos, rectos y rígidos. Así, los ta-

Water Violet (hottonia palustris)1

Esta es una planta excepcio-

nal entre las flores de BACH, ya

que se trata de una planta acuá-

tica. Sus raíces, como el Loto, se

hunden en el barro, en acequias

de drenado de agua y charcas de

aguas con escaso movimiento

pero que tienen una característi-

ca en común, siempre se trata de

aguas extraordinariamente lim-

pias. Posee otra clase de raíces

que a menudo no llegan ni a hun-

dirse en el barro y flotan, como

arrastradas por la corriente. Por

lo tanto, parte de sus raíces viven

inmersas en un elemento menos

denso que la tierra, más sutil, una

octava por encima del elemen-

to tierra. Quizás por ese motivo

WATER VIOLET se siente diferente a

los demás y sólo la presencia de

sus hermanas WATER VIOLET le per-

mite sentirse comprendida. Si eso

llos acuáticos son frágiles en el

exterior pero cumplen bien su pa-

pel dentro del agua. Las persona-

lidades Water Violet son fuertes y

adaptables en su elemento pero

extremadamente frágiles cuando

no se encuentran en él. Parecería

que Water Violet tiene en su ais-

lamiento una protección, por su

sentimiento de fragilidad (tallos

y hojas frágiles sostenidas por el

agua, pero que fuera de ella pier-

den toda consistencia). El tallo

floral es rígido y duro en compa-

ración, para permitir sostener el

peso de sus flores. Además es un

tallo que sale al aire, al contacto

con el elemento que deberá com-

partir con la mayoría, pero la cer-

cana presencia de las flores da

una fuerza y seguridad (ya mani-

festada en este tallo), que contri-

buye a disminuir su necesidad de

aislamiento.

Sus hojas son alternas y plumo-

sas (con su limbo profundamen-

te dividido) y se encuentran su-

mergidas bajo el agua. Water

Violet tiene polimorfismo, es de-

cir que la forma de sus hojas es

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La signatura de las Flores de Bach...ª

por Jordi Cañellaswww.eljardidelesessencies.com

1 Artículo extractado del libro: ≈Cuaderno bo-tánico de flores de Bach. Una guía científica para ver el alma de las plantas a partir de su signaturaΔ publicado en junio del 2008, por Integral-RBA. Barcelona.

Page 28: Revista Sedibac

bastante variable, conforme va-

ría la edad de la planta y según

el lugar en que viva, lo cual nos

lleva a pensar que las relaciones

con el mundo de las personali-

dades WATER VIOLET podrán diferir

mucho entre sí. El agua simboli-

za las emociones, en las relacio-

nes con el exterior los tipos WATER

VIOLET esconden sus emociones y

se relacionan escasamente o so-

lamente con las que están en su

mismo medio (afinidad, sobreto-

do, con otros WATER VIOLET). La di-

ficultad que tiene que trascen-

der es entender que el medio los

hace distintos, pero no mejores.

Más sensibles y sutiles, pero no

mejores. Más inaccesibles para

aquellos que no crecen en sus

mismas condiciones, pero no me-

jores. La personalidad WATER VIO-

LET tiene que adaptarse al “cam-

bio de medio” que significa tratar

con personalidades más terres-

tres, o aéreas o ígneas, como lo

hace la planta a los cambios en

el nivel de las aguas. En esos mo-

mentos, fortalece sus raíces an-

cladas en la tierra y sus hojas. No

lo escoge voluntariamente pero

sale victoriosa de esas adapta-

ciones necesarias. Las hojas de

WATER VIOLET, como las de la ma-

yoría de plantas acuáticas que

se mantienen sumergidas, apar-

te de sus funciones convenciona-

les como hojas que son, tienen

más desarrollada su función de

absorción, pudiendo penetrar en

su interior agua y sustancias di-

sueltas en ella. De manera que

un agua contaminada las afecta-

rá en sobremanera, mucho más

que si esa misma agua se derra-

mara sobre las hojas de plantas

terrestres. Su necesidad de evitar

la contaminación es doble, a tra-

vés de sus raíces y también a tra-

vés de sus hojas. El aislamiento

en sitios inaccesibles a la conta-

minación (lejos de la contamina-

ción emocional humana, podría-

mos traducir) les hace preferir la

soledad, pero más bien como una

necesidad, que como un elitismo.

Además nos encontramos con las

hojas profundamente divididas,

que nos indican una alternancia

en sus relaciones con los demás,

de manera que a veces se relacio-

narán activamente y acto seguido

podrán inhibirse totalmente, qui-

zás ante el miedo de que aque-

llo que han mostrado sea tomado

como una invitación a una poste-

rior invasión de su medio.

Las flores, de cinco pétalos, tie-

nen un centro amarillo, color que

señala la expansión y el aporte de

mayor lucidez mental y el color

malva pálido de sus extremos que

es sedante del sistema nervioso y

tiene las propiedades de la diso-

lución, impulso, valor, libertad, e

inspiración, factores que ayuda-

rán en el cambio de planteamien-

to que tiene que hacer un WATER

VIOLET para rehacer su vida de una

forma participativa y social. Si-

guiendo el orden de los colores

podríamos pensar que la esencia

de WATER VIOLET aporta en primer

lugar calma y valor, para disol-

ver los patrones antiguos (colo-

res malva) y después expandirse

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La signatura de las flores de Bach... Water Violet (hottonia palustris) / Jordi Cañellas

(color amarillo del centro). Po-

demos asociar los patrones an-

tiguos con su preferencia por el

agua, que en síntesis es más an-

tigua que la tierra, que fue el úl-

timo elemento en materializarse.

Se sabe que las plantas acuáticas

son una vuelta al agua de plantas

terrestres, que habían evolucio-

nado de las algas, que al no en-

contrar un espacio ecológico, de-

cidieron ocupar de nuevo el agua

para encontrar menos competen-

cia por los recursos. Esto signifi-

ca un aislamiento consciente en

su nueva etapa evolutiva. Sus flo-

res están formadas por un tubo,

lo que también nos conecta con la

necesidad de un cierto tiempo de

uso de esta esencia para revertir

dicho estado negativo. Estas flo-

res están abiertas hacia delante,

lo cual nos dice que dicha esen-

cia ayuda a trabajar en lo relacio-

nal, en lo cotidiano, en el día a día

y sus relaciones.

Sus frutos son cáp-

sulas llenas de se-

millas. Estas semi-

llas se hunden en el

agua y al germinar

segregan una bur-

buja de aire que las

lleva de vuelta a la

superficie, donde se

moverán con toda li-

bertad hasta que un

tiempo después de-

cidan echar raíces.

Como en el caso de

los niños WATER VIO-

LET, autosuficientes,

libres, tranquilos,

como si fueran más

sabios que lo que

les corresponde por

edad.

Page 29: Revista Sedibac

Cuando esto escribo, el siste-

ma floral de BACH goza de una

creciente buena salud. A veces

pienso que es como un niño pe-

queño que empieza a dar sus pri-

meros pasos, sorprendiendo con

sus prometedoras destrezas. De

alguna manera es como si en los

últimos 20 años hubiera desper-

tado de un dulce y prolongado le-

targo de medio siglo.

De hecho, si revisamos cronológi-

camente la bibliografía en diver-

sos idiomas, vemos que entre la

muerte de BACH (1936) y fines de

los 80 hay un desolador desierto,

apenas salpicado por algún oasis

a cargo de Nora Weeks, Chance-

llor y poco más.

La pregunta que a veces me hago

es la siguiente: ¿Qué hubiera he-

cho un VERVAIN bastante positivado

como BACH si hubiera sabido que

su obra iba a permanecer aletar-

gada por la friolera de 50 años?

Es una pregunta difícil de con-

testar. Por una parte tenemos un

hombre que supervisaba, yo diría

que casi obsesivamente, todos los

pasos de su obra y, en este senti-

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Pequeños retratos: Grandes necesidadesª

por Ricardo [email protected]

do, las cartas a Daniels, su editor,

dejan poco margen de duda.

Por otra, hay testimonio de sus

encendidas conferencias con el

objeto de divulgar su labor en el

aquí y ahora. Recordemos tam-

bién cuando el Colegio de Médi-

cos lo expedienta por anunciar

su nuevo sistema de flores en la

prensa. Sin duda era un pione-

ro temperamental, y los Vervain

quieren cambiar las normas, son

rebeldes e impacientes cuestio-

nadores de lo preestablecido (en

este caso las bases de la medi-

cina alopática, nada más ni nada

menos). Quieren las cosas ya,

aquí y ahora.

Respondiendo a la pregunta an-

terior sobre lo que hubiera hecho

BACH, yo creo que habría escrito

más. A diferencia de otros cam-

peones del conocimiento huma-

no: Hanneman, Jung, Freud… el

no dispuso de más de 80 años de

vida y de no menos de 40 para de-

fender y aclarar no pocos de sus

trabajos más importantes. Sólo

sobrevivió 14 meses a su última

esencia (MUSTARD) con una salud

precaria. Literalmente no tuvo

tiempo.

Por supuesto habrá quien piense

que escribió lo justo y necesario,

pero al menos para mí resulta di-

fícil concebir un BACH redactando

a modo de Nostradamus y dejan-

do importantes mensajes encrip-

tados para ser descifrados por

generaciones futuras.

Volviendo al asunto de los tama-

ños, tenemos pequeños retratos

(en ocasiones apenas un párra-

fo) de descripción original. El pro-

blema es que estas descripcio-

nes no plantean la síntesis de lo

que hace la esencia a todo nivel.

Es como una foto instantánea, un

flash, de algo más dinámico: la

personalidad y sus trastornos.

Creo que uno de los problemas

actuales en la comprensión y uti-

lización de las flores reside en

confundir estos pequeños archi-

vos con el campo de actuación to-

tal de la esencia. Territorio, por

otra parte, del que todavía esta-

mos muy lejos. Por ejemplo, el

retrato que BACH hace de CLEMA-

Page 30: Revista Sedibac

TIS es una secuencia de un CLE-

MATIS, bastante light, poco negati-

vizado, que aún puede permitirse

ser soñador y somnoliento. Pue-

de haber un CLEMATIS positivado,

que sería alguien bien despier-

to, idealista práctico, bondadoso y

gentil, pero también existe el ex-

tremadamente negativizado: un

psicótico totalmente embotado,

absolutamente despersonalizado

y con el deseo abolido (lo que ya

entroncaría con WILD ROSE). Como

vemos, nuestro benefactor sólo

describe un momento de ese arco

dinámico en el devenir de una

personalidad y su trastorno.

Ante esta escasez de información

en origen, todos los autores apor-

tamos visiones, experiencias so-

bre las esencias, etc., en un afán

de suplir esta carencia inicial. El

problema, a veces, es que se ter-

minan dando por válidas y proba-

das competencias florales que a

lo mejor sólo existen como espe-

culación intelectual.

Otros, en cambio, intentarán adap-

tar y comprimir la realidad que

ven a los retratos iniciales de BACH,

en una batalla donde la gran per-

dedora es la objetividad. Segura-

mente a casi todos re-

sultará evidente que

somos los terapeu-

tas los que nos tene-

mos que adaptar a lo

que vemos y percibi-

mos y no la informa-

ción a lo que creemos

y pensamos. No pode-

mos simplificar arti-

ficialmente el mundo

sólo para hacerlo más

manejable a nuestra

mente…

Creo que estamos ante un dilema

de difícil solución. Lo más realis-

ta, tal vez consista en situar los

pequeños y preclaros retratos de

BACH en otras visiones contrasta-

das de la personalidad. Por ejem-

plo, la psicología contemporánea

ha estudiado durante décadas, de

forma rigurosa y científica, la na-

turaleza humana y ofrece descrip-

ciones completas, psicodinámi-

cas y coherentes. Y quien dice la

psicología, también puede incluir

otras visiones, como el eneagra-

ma, etc. Esta tarea no es tan com-

plicada como parecería, aunque

requiere dedicación y estudio.

Para dar un ejemplo, podemos si-

tuar de forma natural y evidente a

MIMULUS en el contexto de la per-

sonalidad evitadora; CENTAURY en

la dependiente; WATER VIOLET en la

esquizoide. ELM, OAK, ROCK WATER y

CRAB APPLE en la personalidad y el

trastorno obsesivo de la persona-

lidad. Y así sucesivamente1.

Encontraremos bajo estas catalo-

gaciones abundante información,

muy matizada, que nos permite

entender muchas de las aparen-

tes contradicciones que habíamos

observado en tantas personas.

Estoy de acuerdo en que habrá

quien piense que si esto no será

etiquetar a la gente, encajonarla,

etc. En realidad lo que estoy pro-

poniendo es documentarnos más

sobre la forma en la que funcio-

na la mente y las relaciones in-

terpersonales. Aunque las flores

parezcan simples, la mente hu-

mana, las emociones y la monta-

ña rusa en la que a menudo via-

jan, no lo son en igual medida,

creo que para nadie.

Lo contrario puede llevar (está lle-

vando), a vivir y comprender las flo-

res como en una especie de burbuja

totalmente distanciada de la rea-

lidad humana. Y esto, en realidad,

sólo puede

conducir a

la infrauti-

lización del

magnífico le-

gado que el

Dr. BACH nos

brindara.

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1 El producto de un primer intento de esta compaginación fue el siguiente libro: In-teligencia Emocional y Flores de Bach. Tipos de Personalidad en la Psicología Contemporánea. Boris Rodíguez y Ricardo Orozco. Epsilon, Barcelona, 2005.

Pequeños retratos: Grandes necesidades / Ricardo Orozco

Page 31: Revista Sedibac

-¡Oh! Es culpa mía. Lo siento.

Perdóname - Siguió diciéndome.

Seguí mi camino y caminé mucho

rato. Hasta que llegué a un ro-

ble y me senté a descansar. No sé

cuanto tiempo pasó, pero de re-

pente me di cuenta de que siem-

pre había sombra debajo de sus

ramas. Creo que me leyó el pen-

samiento.

-Yo nunca descanso, soy fuerte

y generoso con todo el que llega

hasta mí.

-Pero… ¿no te cansas?

-Estoy aquí para trabajar, es mi

obligación- Me contestó.

-Bien, bien. He de irme, pero an-

tes ¿podría darte un abrazo para

agradecerte por esta sombra que

me has ofrecido?

-Mira niña, a mi no me gustan los

abrazos. Eso son tonterías. No

tengo tiempo, he de seguir dan-

do sombra.

-Bueno, pues… gracias.

Encontré un bosque con ár-

boles magníficos y empecé

a adentrarme en él siguiendo su

camino.

De pronto encontré un pino alto

que me decía:

-Mírame, soy alto y tengo mis ra-

mas desgarbadas y sin forma. Yo no

soy como mis primos de allí aba-

jo, que son pinos de copa redonda-

me dijo con mucha tristeza.

-Pero eres un pino al fin y al cabo-

le dije intentando animarlo.

-Perdona, perdona, ya sé que soy

un pino pero…. ¡Oh! Claro, es que

yo no merezco ser de otra mane-

ra. Yo tengo la culpa de ser así.

Deberían cortarme para no mo-

lestar en el…

-¿Pero adonde vas?- me gritó.

-He de irme, he de seguir mi ca-

mino.

-¡Oh! Perdona, perdona seguro que

te he molestado con mis rollos.

-Volveré a verte. Adiós.

Y seguí mi camino. Hasta que

sentí un susurro que no sabía

bien de donde venía. Pero no. No

se trataba de un susurro, era más

bien como una queja. Había algo

que refunfuñaba. Me acerqué ha-

cia un sauce.

-Yo, yo podría haber sido tan fuer-

te como él o tan alto como el

olmo. Pero… ¡Claro! Han cogido

el mejor sitio en el bosque sin te-

nerme en cuenta. Ellos tienen la

culpa de que yo esta aquí.

-Pero tu sitio es muy bonito. Po-

dríamos dar una fiesta a tu alre-

dedor. Sería fantástico- Le dije.

-¡Ja!... Para fiestas estoy yo.

- Además, niña, si yo estoy mal es

por culpa de los demás, así que…

si yo estoy mal, ¿por qué los de-

más tienen que estar bien?

-Vete, vete eso es lo que hacen

todos cuando se les dicen cuatro

verdades.

-Adios sauce, volveré cuando es-

tés mejor.- contesté.

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En el bosqueª

por Marisa [email protected]

Page 32: Revista Sedibac

-No vayas a venir a hacerme fies-

tas. ¿Me oyes?-

Después de la reprimenda del

sauce seguí mi camino.

-¿Y tú que árbol eres?- pregunté.

-Soy un alerce.

-¿Y qué te pasa?

-Qué me siento pequeño.

-¿Pequeño?

-Si. No puedo crecer como los de-

más. Puede ver a mi amigo pino,

me llevo muy bien con él.

-Pero… ¿Lo has intentado?.

-No, pero... No puedo.

-Primero deberías intentarlo. ¿No

crees?

-No, no, no puedo de verdad. No

pierdas el tiempo conmigo: no lo

puedo intentar.

-Bueno, pues hasta pronto. Cuí-

date. Adios.

Seguí mi camino y me detuve al

lado de un riachuelo topándome

con un olmo) precioso.

-¡Caray! Qué bonito eres.

-Ya lo sé. La verdad es que estoy

muy contento de ser como soy:

perfecto. ¿No crees?

-Claro, como todos los demás ár-

boles- contesté.

-Bueno eso habría que sopesarlo.

Siempre se puede mejorar algo.

-¿Y cuál es tu misión, aquí

solito?

-Mi misión es avisar de que

el río no se desborde. Soy el

que avisa a todos los demás

y nadie lo hace como yo. No

podrían poner a otro árbol

en mi lugar porque no sabría

hacerlo como yo. Es un tra-

bajo de gran responsabilidad.

Bueno, he de dejarte, tengo

que seguir vigilando el río.

-Adios.

-Adios.

Caray con el olmo, pensé. Un

poquito de su autoestima al pino

y al alerce no le irían nada mal.

Crucé el río y me adentré en un

bosque de castaños preciosos.

¡Qué bien me sentía ahí!

-No debes apegarte a nada, ni

darle tantas vueltas a las cosas y

aprender de los errores- escuché.

-¿Qué?- dije alucinada.

-¡Ah! No es nada. Se trata de mi

parte que trata el desapego, la

cháchara mental y el aprendizaje.

Pero tengo otra. ¿La conoces?

-Si, la angustia.

-Bien. Vuelve cuando quieras y

coge de mí la parte que más ne-

cesites.

-Adios.

-Adios.

Seguí caminando y sentí una voz.

-Soy un manzano silvestre y me

acepto tal y como soy. Es impor-

tante aceptar las imperfecciones

para purificar el alma.

-Eres muy sabio. Pero… ¿Cómo

es que a este lado del bosque los

árboles me hablan en el aspecto

positivo? No lo entiendo.

-¡Ah! Es porque a este lado del

bosque nos cayó una estrella.

Ella nos ayuda a todos a superar

nuestros traumas.

-Quiero conocerla.

-¿No puedes escucharla?

-No, no la oigo como a vosotros-

respondí.

-Quizás sea porque no quieres.

Ella te ayudará. Dale permiso

para curarte y te curará-.

-¡Mamá! ¡Mamá! Quiero agua...

-¡Oh! Carla, cariño, he tenido un

sueño en el que los árboles me

hablaban.

-Pero mamá, eso no es ningún sue-

ño. ¡Los árboles siempre hablan!

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En el bosque / Marisa Romero

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Vuelvan estoicos a impartir virtudes,

salga del caos la región sombría,

incólume nos deje la apatía

y que anule el dolor de multitudes.

Cesen temor, pasión, vicisitudes.

∑Ciencia olvidada, con afán porfía!

tráenos la paz, la luz, sabiduría

y a aliéntanos excelsas pulcritudes.

Las súplicas de Water Violetª

Ena González M.

“La virtud es ciencia”

Sócrates

Cómo salirme de este estanque mío

∂Con un sable colgado a la cintura

y olvidarme del Dios en que confío?

Mucho añoro adentrarme en la espesura,

en bucólicos prados, ir a un río

donde pueda bañar tanta amargura.

Page 34: Revista Sedibac

Mujer; 65 años; estudios supe-

riores (jubilada); vive sola; tie-

ne un hijo y dos nietos.

Motivo de Consulta: Insomnio

y depresión

Este cuadro tiende a agudizarse

desde hace poco más de seis me-

ses, pero lleva más de diez años

con tratamiento por psiquiatría.

Acude a esta modalidad de tra-

tamiento por sugerencia de una

amiga. Siente que el tratamien-

to con psicofármacos ya no es

tan efectivo. El estado de ánimo

depresivo ha sido una constan-

te después de la muerte de su

padre (en un accidente) ocurrida

hace más de cuarenta años. Sin

embargo, no es hasta hace diez

años, a raíz de un episodio de-

presivo mayor cuando realizó un

intento de suicidio, que comien-

za el tratamiento por psiquiatría.

Las preocupaciones actuales es-

tán centradas en los problemas

laborales, de relación con su hijo

y el estado de salud de uno de sus

nietos. Padece además de hiper-

tensión arterial (HTA).

Para realizar una exploración

adecuada e integral, la entrevis-

ta es apoyada por los resultados

de dos pruebas, el Inventario Clí-

nico Multiaxial de Personalidad

de Millon (MCMI-II) y el Inventa-

rio de Pensamientos Constructi-

vos (CTI). La integración de los re-

sultados queda plasmada en el

siguiente resumen:

Persona excesivamente responsable, meticulosa, organizada, cumplidora y dependiente. Cumple los criterios diagnósticos para un Trastorno de la personalidad por dependencia y un Trastorno obsesivo-compulsivo de la personalidad. En el momento ac-tual las preocupaciones, la apatía y el desánimo presentes en el estado de-presivo enmascaran sus característi-cas obsesivas. Su principal problema radica en que tiene dificultades para tomar acciones concretas, tendien-do a obsesionarse y a ≈darle vueltasΔ en su cabeza a las preocupaciones; si-

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Trastorno por dependencia y obsesivo-compulsivo de la personalidad

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Boris Rodrí[email protected]

tuación que la agrava el hecho de te-ner un pensamiento lleno de este-reotipos. La historia y evolución de sus estados de ánimo y episodios de-presivos, reúnen los criterios para ser catalogados como un trastorno dis-tímico, al que se le sobreañaden epi-sodios depresivos mayores.

Integración de la personali-

dad, siguiendo los esquemas de

Edward BACH:

Aunque la paciente muestra un apego y dependencia excesiva, pre-firiendo mantenerse en un segun-do plano, se aprecia un nivel de in-gerencia en la vida de su hijo que no es propio de un CENTAURY; por lo que pensamos en CHICORY como curador; el patrón de responsabi-lidad que ha matizado sus accio-nes durante la mayor parte de su vida, responde a un esquema OAK de ayudante, mientras que los prin-cipales focos de preocupaciones que matizan la situación actual reúnen los requisitos para integrar la cate-goría de RED CHESTNUT.

Page 35: Revista Sedibac

La variación de la fórmula se pro-

dujo de la siguiente forma:

En la cuarta consulta se agrega HO-NEYSUCKLE a la fórmula inicial, por tener ≈sueños incongruentesΔ, con eventos de su pasado y HORNBEAM, para elevar más su nivel de activi-dad, pues le cuesta ≈arrancarΔ por las mañanas. En la quinta consulta se sustituye HONEYSUCKLE por AGRI-MONY, pues los sueños se han torna-do angustiosos, se retira HORNBEAM, pues ya se siente con ánimos. En la sexta consulta se retira AGRIMONY de la fórmula, pues los sueños han des-aparecido. Se agregan GENTIAN y HORNBEAM, pues tuvo una gripe y se encuentra un poco deprimida y desanimada. En la séptima consulta el nieto ha empeorado. La fórmu-la cambia radicalmente, se mantie-nen CHICORY y RED CHESTNUT, se retiran GENTIAN, HORNBEAM, CHE-RRY PLUM y STAR OF BETHLEHEM; se agrega WILLOW, por el resentimien-to hacia la nuera (la culpa de no ha-ber estado atenta a los problemas del nieto) y retorna el AGRIMONY por el tormento, quedando la fór-

2. Facilitar el análisis, por parte de la paciente, del sentido de la enfermedad y el mensaje que ésta le transmite a la paciente y las habilidades que debe ganar para transcenderla.

3. Planificar acciones concretas, fi-jadas por la paciente, para acer-carse a experiencias gratifican-tes fuera del entorno familiar.

Se orientó ingerir la fórmula seis

veces por día, a intervalos regu-

lares y sin interrumpir para ello

los horarios de sueño. La primera

reconsulta se produjo a la sema-

na y las siguientes oscilaron en-

tre quince y veintiún días.

La evolución del caso fue muy fa-

vorable. El cuadro depresivo re-

mitió con bastante rapidez, al

punto que en la tercera consulta

ya la paciente había logrado pres-

cindir de los psicofármacos (la

reducción de las dosis fue super-

visada por su psiquiatra). Comen-

zó a practicar Tai-Chi, donde ha

hecho nuevas relaciones y a visi-

tar antiguas amistades.

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Trastorno por dependencia y obsesivo-compulsivo de la personalidad / Boris Rodríguez

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Diagnóstico Multiaxial

Eje I. Trastorno distímicoEje II. Trastorno de la personali- dad por dependencia Trastorno obsesivo- compulsivo de la personalidad Esquema BACH: CHICORY- OAK-RED CHESTNUT

Eje III. HTAEje IV. Vive solaEje V. (4) Moderado

Estrategias

1. Equilibrio de las polaridades: Fomentar una postura más acti-va en la búsqueda de soluciones.

2. Contrarrestar las perpetuacio-nes: disminuir la intensidad de sus preocupaciones por los asuntos de su hijo; potenciar la adquisición de habilidades au-tónomas.

Tácticas:

1. Adecuar la fórmula: se exclu-ye el OAK, pues no se consideró como prioritario para tratar los

problemas más acuciantes que nos refiere la paciente. Se man-tiene CHICORY, por los compor-tamientos de ≈engancheΔ, que se solapan con los de dependen-cia; RED CHESTNUT, por las pre-ocupaciones y el temor por los demás; CHERRY PLUM, por la conciencia de que no puede ha-cer nada por sobreponerse y el evidente descontrol que acarrea y STAR OF BETHLEHEM, pues es una pauta de respuesta que sur-ge a raíz de un acontecimien-to traumático (la muerte de su padre). Composición de la fór-mula: CHICORY / RED CHEST-NUT / CHERRY PLUM / STAR OF BETHLEHEM.

Page 36: Revista Sedibac

mula: CHICORY / RED CHESTNUT / WILLOW / AGRIMONY. En la oc-tava consulta llega más activa, ha mermado el resentimiento hacia la nuera, aunque se la nota más locuaz y excitada. Se agrega HEATHER, por la locuacidad; VERVAIN, por la sobreexcitación y WALNUT, por estar muy expuesta a las influencias del medio. En la novena consul-ta se encuentra mejor, el nieto va evolucionando favorablemente, se la observa más distante de los problemas de su hijo; ha comenzado a ocuparse de su casa, pues ≈la tenía muy desatendidaΔ. Está un poco más obsesiva, aunque reconoce que puede controlar y eliminar los estresantes del medio (consistente con la acción de WALNUT). En la décima consulta manifiesta que se siente muy bien, que piensa man-tenerse con la fórmula y que volverá en caso de recaer. Se le sugiere que ingiera la fórmula con una frecuencia de dos veces por día. Hace más de un año de este encuentro y la recaída aun no ha ocurrido.

En el Gráfico-1, sugiero al lector que se fije cómo disminuye el

patrón dependiente (3) de trastorno a estilo de personalidad;

mientras que el patrón obsesivo-compulsivo (7), sobre el que

no se trabajó con las esencias correspondientes, no se modi-

ficó, tendiendo a incrementarse de forma ligera, en la medida

que la paciente recobraba su autonomía.

En lo que respecta al pensamiento constructivo global (PCG),

experimentó un ligero aumento. El área más beneficiada, fue

el de la eficacia (EFI), pudiendo verse cómo aumenta el nivel

de actividad en la búsqueda de soluciones (act). Cuestión que

coincide con nuestros objetivos de trabajo. (Gráfico-2).

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Trastorno por dependencia y obsesivo-compulsivo de la personalidad / Boris Rodríguez

Gráfico 1. REEVALUACIÓN ANUAL DE LA PERSONALIDAD (MCMI-II, ESCALAS 1-8B)

1 2 3 4 5 6A 6B 7 8A 8B

1a APLICACIÓN 2a APLICACIÓN

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Gráfico 2. REEVALUACIÓN ANUAL DEL PENSAMIENTO CONSTRUCTIVO (CTI)

PCG EFI act

1a APLICACIÓN

2a APLICACIÓN

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Page 37: Revista Sedibac

sulta difícil adaptarse a la vida en

común.

Le preparé un frasco de esencias

y un colirio.

Frasco de esencias: CENTAURY –

WALNUT – CHERRY PLUM - GENTIAN –

SCLERANTHUS – WILLOW – BEECH

Colirio: BEECH – SCLERANTHUS –

CRAB APPLE – VERVAIN

CENTAURY

Por ser una persona muy sensi-

ble, sobre todo con los demás, lo

que muchas veces le lleva a un

exceso de entrega, sintiéndose

sometida y angustiada. En este

caso la ayuda mucho en el some-

timiento que le provoca la alergia

al plátano.

WALNUT

Esta esencia le ayuda a proteger-

se de la influencia de los demás,

pudiendo distanciarse, controlan-

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CASOS

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do más su exceso de entrega. Es

evidente que también la protege

del efecto que le produce el es-

tar cerca del árbol que le provoca

esta alergia tan fuerte.

Contribuirá en su adaptación a la

vida de pareja y a mejorar en la

relación con sus padres, sin de-

pender tanto.

CHERRY PLUM

El descontrol que le provoca di-

cha alergia, tanto psíquica como

físicamente, es muy fuerte. Este

es el motivo de incluir esta esen-

cia en la fórmula. Ya hemos co-

mentado que sólo se controlaba

(no del todo) con corticoides. To-

Caso curioso de alergiaª

por Maria Lluïssa Franch

Paciente: Mujer

Edad: 27 años.

La primera vez que entrevisté a

Luna (nombre imaginario). Fue

en la oficina donde trabajaba. Es-

taba sola, con lo que pude hacer

la entrevista sin prisas y aprove-

chando la hora de cierre.

Luna estaba cansada de pruebas,

vacunas y de tantas visitas a dife-

rentes médicos especialistas que

pudieron saber a qué tenia aler-

gia. Para poder controlarse, ade-

más de las vacunas, tenía que

tomar corticoides con mucha fre-

cuencia sin conseguir encontrar-

se bien del todo. Cuando tenía un

brote estornudaba sin parar, le

lloraban los ojos, además de una

rinitis que le dejaba la nariz con

una dolorosa irritación.

Luna es una persona muy sen-

sible, generosa y servicial. A ve-

ces demasiado. Vive con su pa-

reja pero le cuesta mucho estar

separada de sus padres y le re-

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dos sabemos los efectos secun-

darios de tomar en exceso di-

cho medicamento. Con la toma

de esta esencia, además de te-

ner controlado el proceso de sín-

tomas tan agobiantes y molestos,

adquiere la serenidad para no en-

fadarse con tanta facilidad, y en

momentos poco oportunos, con

las personas que más quiere.

GENTIAN

Esta flor ha sido esencial para

conseguir el éxito en todo el pro-

ceso. Cuando se padece una aler-

gia tan fuerte como la que tiene

Luna es muy fácil desanimarse al

ver que ningún tratamiento mé-

dico consigue curar del todo. La

confianza y la fuerza que le da

Gentian para continuar la Terapia

Floral con ilusión, consigue que

Luna vuelva a sonreír y a estar

contenta con lo que le rodea. Le

ayuda a mirar hacia delante con

optimismo.

SCLERANTHUS

Es necesaria para todo proce-

so de inestabilidad y alternancia.

Generalmente las personas con

alergia suelen ser muy sensibles

a los cambios climáticos, de am-

biente etc. Con la toma de SCLE-

RANTHUS los episodios de crisis se

reducen y cada vez hay menos pe-

riodos de alergia y mayor tiempo

de estabilidad tanto física, como

mental y emocional.

WILLOW

Es evidente que sufre una irrita-

ción muy fuerte de nariz, gargan-

ta y ojos. La toma de esta esen-

cia le calma el picor y le ayuda a

desterrar la inquietud y la rabia

que le produce el respirar con di-

ficultad, estornudar y el lagrimeo

constante.

BEECH

La tolerancia es necesaria en

todo y para todo. Esta esencia ha

conseguido que Luna pueda estar

cerca de lo que en un principio le

provocaba la alergia, el árbol del

plátano. En este caso refuerza

mucho la acción de WALNUT.

Durante los dos o tres primeros

meses, la frecuencia de las tomas

era de cada dos horas, aunque al

principio las ingería incluso du-

rante la noche si era necesario.

Después las tomó seis veces al

día y, al cabo de medio año, cua-

tro veces hasta que superó el pro-

blema. Fue un año de tratamien-

to continuo y, durante el segundo

año, las tomó en periodos de tres

meses en primavera y otoño. Ac-

tualmente estamos en contacto.

Me pide las esencias como pre-

vención en febrero, pero en rea-

lidad creo que la ayudan men-

talmente, ya que no ha vuelto a

sufrir aquellos episodios tan des-

agradables.

Es importante señalar que ha

sido un tratamiento con una fór-

mula fija. Si cuando tenía lugar

la entrevista le hacía algún cam-

bio que creyera necesario, volvía

a tener síntomas de alergia que,

aunque suaves, le molestaban.

Pensé en no cambiar la fórmula

durante el proceso y esto funcio-

nó. Mantenerla por tanto tiempo,

no lo había hecho nunca. Es un

caso especial o curioso.

El colirio también le ayudó mucho

que, con CRAB APPLE para limpiar-

le los ojos y VERVAIN para rebajar la

inflamación que le producía el la-

grimeo constante, consiguió que

le quedaran los ojos completa-

mente sanos. Le comenté que al

colirio lo usara sólo durante una

semana y después debía preparar

uno nuevo, ella lo usó para lim-

piar las fosas nasales con lo que

sentía un gran alivio.

Luna ha sido mamá, es feliz y

de momento su alergia sigue sin

aparecer.

Caso curioso de alergia / Mª Lluïssa Franch

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Ver para creer

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CASOS

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≈Por lo general, es relativamente fácil analizar a las personas y cla-sificarlas según su personalidad. Ahora bien, suele ser más difícil enfocarse en uno mismo y anali-zarse con rigurosa honradez; sin embargo, esto es precisamente lo que debes hacer para encontrar los cambios que necesitas. Uno de los propósitos de descubrir tu propia personalidad consiste en saber de qué forma afectas a los demás. Consciente o inconscien-temente, la gente percibe tu per-sonalidad, y sus reacciones son una indicaciónΔ.

P. Yogananda

VER PARA CREER 3: Sarcoma de Kaposi

Este es el caso de JVM, un pa-

ciente con pluripatologías y

plurimedicado. Cuando vino a la

consulta impresionaba su grave-

dad y su avanzado deterioro físico.

Este señor, de 68 años, tiene

asma bronquial tratado con inha-

ladores de corticoides desde hace

20 años, EPOC (enfermedad pul-

monar obstructiva crónica) severo

con oxigenoterapia domiciliaria,

hiperuricemia, diabetes mellitus

tipo II, taquicardia supraventricu-

lar, insuficiencia renal secunda-

ria a vasculitis que afecta a pul-

món y riñón, en tratamiento con

inmunosupresores; viene en si-

lla de ruedas con disnea de repo-

so (no puede caminar porque se

ahoga), tiene temblores en todo

el cuerpo, la coloración de su piel

es cianótica.

Durante la entrevista me comen-

ta que viene por las manchas de

las piernas, que tiene desde hace

4 años y que han ido aumentan-

do de forma lenta: son lesiones

papulosas eritematovioláceas de

hasta 10 cm, con costras, edema

duro e hinchazón de las piernas,

le hicieron biopsia diagnosticán-

dole Sarcoma de Kaposi. El dice

estar bien, bromea, habla poco

y se nota que oculta, dice que lo

suyo no tiene solución, se siente

inútil por no poder hacer nada,

ya que antes trabajaba mucho. Le

cuesta hablar porque se ahoga,

y esto se nota que le molesta ya

que no lo puede ocultar, cosa que

creo que haría si pudiera. La con-

versación es superficial, no pue-

do profundizar.

Le preparo el siguiente trata-

miento con Flores de BACH:

1.- Crema para aplicar 2 veces al

día: Aloe vera, esencias de lavan-

da, romero y caléndula:

CRAB APPLE• : como limpiador.

RESCUE REMEDY• : para equilibrar

la zona.

VINE• : por el líquido acumulado

en las piernas.

ELM• : para el dolor y el desbor-

damiento.

WILLOW• : por ser una patología

crónica.

CHICORY• : por la congestión y re-

tención de líquidos.

GENTIAN• : por la fragilidad de la

piel.

ª

M≤ del Mar Ruiz [email protected]

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nefrólogo le dice que había mejo-

rado mucho, aunque era eviden-

te que seguía siendo un pacien-

te grave.

Al año de tratamiento Floral tie-

ne que ir a urgencias con dolor

en un costado, no tenía ganas de

hablar. Se queda ingresado con

fractura de varias costillas. Se-

gún la familia estaba narcotiza-

do por efecto de la medicación.

Las heridas de las piernas em-

pezaron a sangrar, él se debili-

tó mucho, apenas podía respirar,

pero luchaba contra su enferme-

dad. Su hija, al verle sufrir y lu-

char sin quejarse, llegó a decirle

“que lo dejara ya”. Él se aferraba

a la vida. Creo que se dejó llevar

al ver el sufrimiento de su fami-

lia. Falleció en el hospital.

2.- Fórmula: 4 gotas 10 veces al

día:

AGRIMONY• : parece ser su Flor

tipo, porque oculta, por la tor-

tura, por todo...

OAK• : porque se siente inú-

til al no poder hacer co-

sas, por la sobrecarga de su

pluripatología.

LARCH• : para la incapacidad fun-

cional.

GORSE• : porque cree que no tiene

solución y viene empujado por

la familia.

STAR OF BETHLEHEM• : como restau-

rador a todos los niveles.

ASPEN• : por los temblores de

todo el cuerpo.

ELM• : para el dolor y el desbor-

damiento en general.

Cuando el paciente se va de la

consulta sale contentísimo, como

si se hubiese curado.

A los dos meses y medio lo vuelvo

a ver apreciándose una mejoría

espectacular, tanto en el Sarcoma

de Kaposi, como en su estado ge-

neral, ya que el paciente viene an-

dando sin disnea de reposo, aun-

que a veces, tiene fatiga. Como se

puede ver en las fotografías el as-

pecto de sus piernas ha mejora-

do mucho: no hay dolor, las cos-

tras negras han desaparecido, las

manchas se han atenuado y la co-

loración ha pasado del vináceo a

un eritema más normalizado.

El tratamiento se mantiene con

visitas periódicas, modificándo-

lo según lo requiera el pacien-

te y sus síntomas. Mejora de la

disnea, aunque con períodos de

recaída, y de los temblores. El

Realmente no llegué a conocer-

le en profundidad. Esta mezcla

AGRIMONY-OAK, que bromea, cam-

bia de tema, permite el apoyo de

todos, no interioriza y por lo tan-

to no exterioriza lo interior por

desconocimiento, exteriorizando

sólo lo exterior, lo socialmente

aceptable..., me parece una au-

téntica tortura. Lo más sorpren-

dente es que todo esto nos causa

sufrimiento y nos cuesta apren-

der nuestras lecciones. No so-

mos capaces de ver aquello que

tenemos que cambiar, y si lo ve-

mos, muchas veces lo dejamos

de lado porque pensamos erró-

neamente que no nos interesa,

o no podemos... y nos autoenga-

ñamos. Pienso que en Agrimony

esto se complica más. En mi ex-

periencia profesional veo que son

pacientes difíciles, ya que no mi-

ran hacia su interior, ni quieren

mirar (¿tal vez crean encontrar

algo espantoso?), y aquí nace el

autoengaño, hacia sí mismos y

hacia los demás, del cual no son

conscientes.

Ver para ceeer / Mª del Mar Ruiz Herrera

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CASOS

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VER PARA CREER 4: CALLO EN EL PIE

Esta paciente, de 77 años, viene a

la consulta con un callo muy do-

loroso en la cara plantar del pri-

mer dedo del pie izquierdo. Que-

ría operarse, ya que tiene una

artrosis generalizada con defor-

midad severa de ambos pies, de

los que la he intervenido cinco

veces por otras patologías.

La paciente dice que no puede

más, que está desesperada por el

dolor que no le permite caminar.

Le comento que le voy a prepa-

rar un tratamiento con Flores de

BACH para la cirugía, que toma-

rá desde el día anterior a la cita

quirúrgica:

AGRIMONY• : para la ansiedad que

genera una cirugía, para afron-

tar aquello que no nos gusta.

CRAB APPLE• : como profilaxis,

para mantener la herida limpia.

ELM• : para el dolor postoperato-

rio.

STAR OF BETHLEHEM• : por el trauma

quirúrgico, para que cicatrice la

herida.

VERVAIN• : como antiinflamatorio.

WALNUT• : como hemostático para

prevenir hemorragias, para

adaptarse al cambio.

GORSE• : porque está desespera-

da.

ROCK WATER• : por la artrosis, por-

que dice que no bebe agua.

Además le pongo una crema con

GORSE y ROCK WATER, y la cito 4

días después para realizarle la

cirugía.

El día de la intervención me co-

menta que ha estado a punto de

no venir porque no le había doli-

do nada. Decido no operarla, y la

mando a casa preparándole una

crema con las Flores anteriores,

para que se la ponga dos veces

al día. Dos semanas después la

Ver para creer / Mª del Mar Ruiz Herrera

vuelvo a ver, sigue sin dolor y sin

callo, como muestra la fotografía

de 3 meses después.

La paciente vuelve 2 años más

tarde con un hematoma líquido

en la misma zona del callo, donde

le hago curas hasta su comple-

ta curación. Durante este periodo

no sigue ningún tratamiento con

Flores. Un año después el callo

recidiva. La paciente quiere ope-

rarse, y así lo hago.

A veces es importante reflexio-

nar sobre el comportamiento de

los pacientes ¿porqué tantas ci-

rugías?, ¿acaso sea una forma de

autoagresión, como lo es el que

se destruya el cartílago articu-

lar en las artrosis?, ¿tal vez sea

una forma de llamar la atención o

un exceso de autocentramiento? ,

¿porqué no quiso realizar un tra-

tamiento Floral si anteriormente

había obtenido buen resultado?.

Si fuésemos capaces de percibir

aquello que no vemos, compren-

deríamos los caminos por los que

nos conduce nuestro Ser y nues-

tro ego. Por eso, creo que es tan

importante el respetar las deci-

siones de los pacientes aunque

nos parezcan irracionales.

Page 42: Revista Sedibac

taba eliminando el anestésico.

Cada minuto-2 minutos le daba

otra toma, siempre que la pedía.

A los 20 minutos estaba más lú-

cido y empezaba a moverse por la

habitación. Cuando lo hacía cogía

el gotero por la pipeta y se lo lle-

vaba adonde iba. Pasados otros

20 minutos ya estaba como siem-

pre, jugando y con todos sus re-

flejos en plenas facultades.

Os cuento esta historia no por lo

rápido de la recuperación, que

ya la imaginaba, sino por la im-

presión que me causó ver cómo

él sabía que las esencias le esta-

ban ayudando a pesar de sus alu-

cinaciones, cómo lamía el gotero,

cómo se lo llevaba adonde fuera y

cómo una vez recuperado dejó de

pedirlas. Ahí no había mente juz-

gando sino puro instinto. Ozaleé

me confirmó lo que mi alma ya

sabe: que las flores son un rega-

lo divino.

Me despido con el deseo de que

hayáis disfrutado leyendo esta

historia de verano tanto como

cuando yo la viví. Salud y Amor.

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ªªOzaleé y las flores

Me presento como aficionada

y enamorada de las esen-

cias florales. Con ellas cuido de

la salud y del crecimiento de mi

familia y de nuestro entorno. Vi-

vimos en el campo y mi familia y

vecinos están formados por seres

de distintas especies, como Oza-

leé, protagonista de esta historia

que me dispongo a contaros.

Ozaleé es nuestro perro, un ca-

chorro de pastor vasco de 7 me-

ses. Eran principios de julio y

hacía unos días que sacudía la

cabeza como si algo le molesta-

se, pero ese día ya se quejaba. Le

llevamos al veterinario quien con-

firmó que tenía una espiga clava-

da e infectada en el oído derecho.

Ozaleé no se estaba quieto, así

que para poder sacársela el vete-

rinario optó por anestesiarlo.

Según me informó, el anestési-

co era seguro pero alucinógeno y

me recomendó que dejase a Oza-

leé durante las próximas dos ho-

ras en una habitación tranquila y

a solas. Al llegar a casa y a pesar

de lo poco lúcido de su estado no

se separaba de mí, así que pre-

paré unas flores y me senté con

él. La mezcla consistía en: RESCUE

REMEDY por lo límite de la situa-

ción; Árnica para la intervención y

para su rápida recuperación; STAR

OF BETHLEHEM por el trauma, real-

mente lo pasó mal, no dejaba de

temblar; CLEMATIS para que se re-

conectase y dejase de alucinar;

CRAB APPLE para eliminar el se-

dante y para la infección de oído y

Heather por su reacción de no se-

pararse de mí.

Desde el momento en que me

senté con él en mi regazo y le di

la primera toma, no paró de la-

mer el gotero y mis manos, que

era donde ponía las gotas para

dárselas. Pensé que quizás tenía

sed y que por eso lamía con tan-

ta ansiedad así que le puse agua

cerca. Pero no, bebió un poco y en

seguida volvió a lamer el frasco y

mis manos sin parar, todo el rato,

con verdadera necesidad.

Empezó a jadear muy intensa-

mente, es la manera de los pe-

rros de sudar e imagino que es-

Luisa Rainer

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