Analisis- de La Corrupcion Generalizada en El Pais

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Ahora todos se rasgan las vestiduras con lvarez, pero hace seis meses l era muy bien recibidoDomingo, 25 de mayo de 2014 | 11:13 am

MEMORIAS. Jos Ugaz presentar en junio un nuevo libro al que ha titulado 'Caiga quien caiga', que cuenta hechos inditos de su paso por la Procuradura Anticorrupcin.Abogado penalista. Miembro del directorio internacional de Transparencia Internacional, presidente de Protica, primer procurador anticorrupcin. Prepara un libro de memorias para junio de este ao.Nunca imagin Jos Ugaz cunto cambiara su vida despus de aquella llamada que le hizo Alberto Bustamante los primeros das de noviembre del ao 2000. Su exprofesor de Derecho Administrativo y entonces ministro de Justicia lo convocaba para pedirle que lo asesore en el encargo que le haba dado Alberto Fujimori: encarcelar a Montesinos. Ugaz no dud en aceptar el pedido. Confiaba en la honestidad de Bustamante (fallecido el 2008) pese a las discrepancias polticas que tenan. Y esa confianza no le fue mal pagada. Cuatro o cinco das despus de su nombramiento, Fujimori lo quiso botar, entre otras cosas, por declarar a la prensa que se investigara la corrupcin "caiga quien caiga". Las afirmaciones de Ugaz hacan que el todava Presidente se sintiera amenazado. Cargo de conciencia que le llaman. Pero Bustamante le dijo a Fujimori que si sacaba a Ugaz, l tambin se ira."Me qued porque Bustamante salv mi pellejo", recuerda y nos hace otras revelaciones. Santiago Fujimori le hizo dos propuestas: en 1992, ser contralor de la Repblica y, posteriormente, que sea vocero de su hermano Alberto en el divorcio con Susana Higuchi. A la luz de los hechos, tom las decisiones correctas.Fue el primer procurador anticorrupcin que se nombr en el pas. Catorce aos despus, hemos pasado de una corrupcin generalizada a nivel de gobierno central a una corrupcin descentralizada. Qu pasa con nosotros? Hay lecciones que no aprendemos? Somos un pas condenado a ser corrupto?Yo dira en primer lugar que nada es comparable a la corrupcin de Fujimori y Montesinos. A partir de lo que est pasando en ncash dicen: S, tal como Montesinos.... No, no, no, es otra dimensin. La corrupcin sistmica de la estructura del Estado que afect al Per en la dcada del fujimorato est muy lejos de parecerse a lo que vemos hoy da y no tiene precedente tampoco en la historia anterior......Coincido en que la corrupcin fujimorista es diferente a lo que estamos viendoEs otro animal! En segundo lugar, en el Per es claro que la corrupcin es un acompaante histrico. Qu estamos viendo ahora? Las consecuencias de la descentralizacin del poder. Cuando el poder est concentrado, la corrupcin gira en torno al poder concentrado. Cuando se desconcentra el poder, se desconcentra la corrupcin. El abuso de la delegacin de poderes es lo que estamos viendo hoy.Coincido en que hay distancias entre ambos momentos, pero seguimos hablando de corrupcin en el Estado. Por qu le sigue siendo fcil robar a quien llega al poder?Robert Klitgaard, una de las personas que mejor ha estudiado los temas de corrupcin, deca que la corrupcin es la consecuencia de la concentracin del poder, la amplia discrecionalidad de los funcionarios pblicos, y la falta de aplicacin de la ley. Simplificando un poco esa frmula, yo dira que la corrupcin tiene que ver en trminos gruesos con la impunidad, porque cuando hay un acto ilegal que no genera una consecuencia para quien lo comete, eso puede determinar una serie de actos de repeticin. La impunidad es como el combustible que se echa en la fogata.Pero despus de la dcada fujimorista, uno podra pensar que la lgica de las autoridades sera: si Fujimori, que fue Presidente, est preso y con l exministros, exmagistrados, exgenerales, mejor no toco la plata del Estado!Bueno, es una buena pregunta, porque efectivamente, al poco tiempo de la cada de Fujimori viene el gobierno de Toledo y su asesor principal termina preso por un acto de corrupcin. Luego viene el gobierno de Garca y un gabinete entero cae por actos de corrupcin. Finalmente, llega este gobierno y el vicepresidente tiene que renunciar porque fue sorprendido en un acto de corrupcin. Esta tendencia a la repeticin tiene que ver por un lado con ciertas lagunas de impunidad, pero tambin con cmo est estructurado el Estado peruano, las faltas de control, y tambin de alguna manera con elementos culturales que han desplazado una cultura de la legalidad, que es la que debera orientar la conducta de los ciudadanos, por una cultura de sacarle la vuelta a las normas.Adems, somos un pas con mucha tolerancia a la corrupcin. Y tenemos esa terrible frase de "no importa que robe, pero que haga"Protica mide hace ms de diez aos las percepciones de corrupcin en el Per y persistentemente el 75% de la poblacin es indiferente ante ella. Esa indiferencia, por cierto, se expresa en frases tan nefastas como esta de roba pero hace. Ese conformismo y ese asumir que as son las reglas es una consecuencia de la falta de confianza en quienes dirigen el destino del pas y del efecto de espiral que produce ver que las personas que deberan dar un ejemplo de conducta, apuestan por su beneficio personal sin que haya consecuencias.Por qu nos cuesta tanto reaccionar como pas ante temas como la corrupcin? Sabemos todo lo que pas hasta que cay el rgimen fujimorista y ahora hemos tenido que ver morir a Ezequiel Nolasco para darnos cuenta que algo andaba mal.Ah tenemos que hacer un anlisis seccionado. Por un lado, vera qu est pasando con la ciudadana, y lo que est pasando es lo que mencionamos hace un momento: hay indiferencia, hay esta suerte de resignacin de que somos as y esto no va a cambiarEstamos resignados a que siempre habr corrupcin en el pas?Ah, pero sin duda y eso se expresa en ese 75%... Anoche vea un programa de televisin que hizo una encuesta sobre si Fujimori deba recibir una pensin, y una seora de condicin muy humilde dijo que s se le debera dar una pensin porque s, l rob pero afect slo a los ricos. A los pobres no nos afect. Esa seora no es consciente de que todo lo que se roba al Estado en el caso del fujimorato una cifra de varios cientos de millones de dlares tiene un impacto en su menor nivel de atencin de salud, vivienda, educacin para sus hijos, etc. Entonces, hay una suerte de anomia social porque las consecuencias de la corrupcin a veces no son tan visibles o comprensibles para la ciudadana.Qu pasa con los mecanismos de control y fiscalizacin de nuestro pas que no pueden detectar situaciones como las que ocurran en ncash y otros gobiernos regionales no hace un mes ni medio ao, sino mucho tiempo atrs?Ah hay una combinacin que puede ser muy peligrosa. Por un lado, hoy da no cabe duda de que las instituciones que estaban llamadas a poner coto a esto fueron infiltradas. Hemos visto a jueces, fiscales, y policas que formaban parte de esa organizacin. En la maana escuchaba un programa de radio y pensaba que ahora todos se rasgan las vestiduras con lvarez, pero hace seis meses l era muy bien recibido, por ejemplo, en ese programa. Los propios periodistas tenan una tolerancia y una convivencia con este seor que era invitado para hablar del Canon cuando deba responder sobre otros temas.Todos hemos fallado en mayor o menor medida.Yo creo que aqu fall la sociedad peruana en su conjunto, ms an cuando haba lecciones ya dadas del proceso anticorrupcin de la dcada pasada que no han sido tomadas. Entonces, en primer lugar hubo un problema de infiltracin de estas organizaciones corruptas en sectores importantes del Estado que son precisamente los llamados a investigar, procesar y sancionar y por otro lado, creo que est la indiferencia de la que hemos estado hablando antes, de decir bueno, eso pasa en ncash, a m no me afecta. Esta indiferencia a lo Bertolt Brecht hace que el problema no nos afecte hasta que llega a nuestra puerta.Aos atrs se deca que la Procuradura Anticorrupcin tena el peso de la Fiscala o la Polica en la persecucin del crimen, pero el ex procurador Arbizu dice que hace un ao, junto al procurador del Santa, advirti de toda esta situacin.Ha perdido peso la Procuradura que ya nadie hace caso al procurador?(Sonre) A ver, la Procuradura no es otra cosa que la institucin que representa la defensa del Estado en el contexto de una investigacin penal. Es verdad que la Procuradura tuvo una relevancia desmedida en sus inicios porque el sistema de justicia estaba colapsado. Conforme se ha ido normalizando la situacin, la Procuradura ha ido volviendo al nivel que le corresponde, aunque hay que decir tambin que es verdad que hubo un desmontaje intencional desde mi punto de vista para bajarle el perfil.En qu momento?Yo dira que hacia el final del gobierno de Toledo y el inicio del gobierno de Garca era evidente que la intencin era mantener una Procuradura sin voz, sin recursos y probablemente sin los cuadros tcnicos que se requeran. Creo que ah hubo un desmontaje que termina, precisamente, cuando regresa este mpetu que trae el nuevo gobierno y se designa al procurador Arbizu. Creo tambin que ahora el procurador Salas est cumpliendo un papel muy destacado en el rol que le corresponde cumplir, pero no le pidamos al procurador que sea el Fiscal de la Nacin o el presidente de la Corte, ese no es su papel. Hay que ver dnde estn esas responsabilidades.El Ministerio Pblico y el Poder Judicial no actuaron......No solamente no actuaron, actuaron activamente para encubrir que es peor. Por otro lado, hay instituciones que uno no puede decir que han sido infiltradas, pero teniendo un mandato constitucional para hacer investigaciones que puedan determinar irregularidades en el sector pblico, no lo han hecho. Y me refiero a la Contralora.Por qu la Contralora estuvo ausente en auscultar lo que estaba ocurriendo con los recursos pblicos en ncash, Cajamarca, Tumbes ? El contralor Fuad Khoury dice que en los ltimos 5 aos denunci a casi 2 mil funcionarios pblicos y que slo once fueron condenados.Puede ser cierto eso, no puedo poner en duda la palabra del contralor. Pero yo he escuchado tambin de los operadores de justicia y me ha tocado verlo en ms de una oportunidad, que no se producen condenas porque los reportes de Contralora son bastante deficientes, porque confunden irregularidades administrativas con delitos, porque hacen acusaciones sin tener pruebas, porque no hay la calidad tcnica que exige el rigor de una investigacin penal Pero aqu no se trata de sealar con el dedo a otro, se trata de que todos hagamos un acto de contricin y de conciencia y evaluemos dnde es que estamos fallando y por qu despus de haberse descubierto lo que se descubri del ao 2000 en adelante, seguimos debatindonos en un ciclo de alta corrupcin.Reincidimos.Yo participo en foros internacionales sobre corrupcin y el caso peruano de la lucha anticorrupcin contra Fujimori y Montesinos es un caso emblemtico de un proceso exitoso. Claro, cuando uno tiene que contar qu pas despus, nos da mucha vergenza decir que despus de todo este esfuerzo hoy estamos en una situacin, no voy a decir igual que la de antes, pero no tan buena como debera ser despus de las lecciones que hemos aprendido.Que no aprendimos, ms bienAh hay un tema de liderazgo, porque creo que si los presidentes que sucedieron a Fujimori hubieran tenido una actitud distinta Yo trabaj con el presidente Toledo los primeros seis meses de su gobierno, pero usted recordar que tena congresistas que atacaban permanentemente a la Procuradura, que estaban involucrados en actos de contrabando y defraudacin de rentas por importacin de autos; haba un congresista que trat de contarnos el cuento de que tena una biblioteca de un milln de dlares cuando tena diez libros y otro que jur "por Dios y por la plata", y l lo permiti y toler estando en el poder. Fall el liderazgo tico. Lo mismo ocurri en el siguiente gobierno y el actual.Ni Toledo ni Garca ni Humala han tenido un verdadero liderazgo tico ante la corrupcin?Ni estos tres ni los anteriores tampoco! Perdn, en los gobiernos democrticos precedentes tuvimos escndalos y del gobierno militar ni le hablo. En los aos de conciencia que yo tengo, el nico gobierno del que puedo decir claramente que fue transparente y no tolerante con los actos de corrupcin fue el gobierno de Paniagua. Fue un gobierno de transicin, fue muy breve, y no sabemos qu hubiera pasado luego. Pero, digamos, para m (Paniagua) era un personaje extraordinario. Entonces, es un problema histrico y creo que tiene que ver con la clase dirigente de este pas que no toma decisiones y no reflexiona..En el caso del presidente Humala, actualmente tenemos denuncias contra algunos ministros por conflicto de intereses y est el caso Onagi. Usted ha dicho sobre l, que le preocupa que tenga "una actitud ambivalente".Fjese, yo tengo la percepcin de que el presidente Humala es una persona honesta. Si uno mira la composicin de su gabinete, creo que en esencia es un gabinete de gente honesta. Es verdad que han aparecido estos cuestionamientos por conflictos de intereses. Por lo que he podido leer, en el caso del ministro de Energa y Minas, creo que es una denuncia fabricada por intereses econmicos de otra naturaleza, y el caso de esta seora en el ministerio del Interior habr que mirarlo con cuidado. Entonces, yo no creo que este gobierno sea esencialmente corrupto, a diferencia de otros donde uno miraba a sus altos funcionarios y tena varios aos de prontuariado. Pero eso no basta pues. En un pas como el Per, eso no basta.Qu ms se necesita? Qu le falta al presidente Humala?Necesitamos un lder que ms all del discurso tome decisiones, ponga los mecanismos a funcionar. Por ejemplo, existe la Comisin Nacional Anticorrupcin que tiene proyectos interesantsimos, pero nadie habla de ella y hay cosas ah que no funcionan porque no hay voluntad poltica. Corresponde al presidente de la Repblica poner la voluntad poltica para que este pas se conduzca en trminos adecuados, reduciendo los nichos de corrupcin, promoviendo niveles de integridad en la poltica, los negocios, la funcin pblica. Eso sin voluntad pblica no funciona.Estos llamados que est haciendo el Presidente en sus ltimas apariciones para que ayudemos a los gobiernos regionales a "sacudirse" la corrupcin no bastan.Me da la impresin de que el Presidente est ms a la defensiva que pensando en proponer alternativas al pas. Adems, anda de muy mal humor ltimamente y cada vez que le preguntan, contesta molesto porque siente que lo estn atacando. Pero ese no debera ser el tono de su discurso. l debera tener propuestas vanguardistas en esta materia, sobre todo, si l no es un corrupto, porque no tiene rabo de pajaHasta donde sabemos.Obviamente. Yo al seor Humala no lo conozco, pero la percepcin que tengo y lo que ha pasado estos aos me dan la impresin de que no es una persona comprometida con la corrupcin. Pero insisto en que el elemento central es la voluntad poltica. Si hubiera voluntad poltica, habra que ordenar el Estado en funcin de una poltica nacional anticorrupcin y ah tendran que estar sentados en una misma mesa, planificando, la Contralora, la Fiscala, la Unidad de Inteligencia financiera, la Polica porque la grosera con que se delinque en este pas y la poca consecuencia que eso trae es un combustible para seguir alimentando esta hoguera de corrupcin en la que nos debatimos en estos tiempos.Hay quienes creen que las comisiones parlamentarias que se abren para investigar a los presidentes salientes son persecutorias y desacreditan la figura presidencial. He ledo algunos comentarios suyos al respecto. Las cree necesarias?Yo me he opuesto por principio y he dicho que el Parlamento debera dedicarse a lo que es su cometido principal, producir leyes y fiscalizar al Poder Ejecutivo. Los rganos de investigacin son los rganos tcnicos, para eso estn la Fiscala, el Poder Judicial, y la Polica. Cuando un rgano poltico se aboca a investigar, los intereses polticos priman. Debo reconocer que a veces los niveles de corrupcin que han infiltrado la Fiscala, el Poder Judicial o la Polica hacen que las investigaciones no caminen y en algunos casos, muy contados, el Congreso hace que avancen. Yo reducira a su mnima expresin la labor investigativa del Congreso, que no es lo mismo que eliminar su labor fiscalizadora.