Perdido en las AméricasEl Viaje Sin Visión Estratégica del Presidente Bush a América Latina

Daniel RestrepoEl ProyEcto dE las amEricas, cEntEr for amErican ProgrEss

Si llego a ser presidente, miraré al Sur, no como una idea adicional, sino como un compromiso fundamental de mi presidencia.

George W. Bush, Miami, FL, 25 de agosto 2000

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El Presidente Bush está a punto de salir en un viaje de cinco países por las Américas que subrayar el fracaso total que ha sido su proyecto de traer al cabo su promesa de hace seis años de revo-

lucionar las relaciones en las Américas. Sin duda el tono de cooperación del presidente ocultará las políticas estancadas que han guiado las relaciones de los Estados Unidos con las Américas durante gran parte de la administración del Presidente Bush. La retórica no es suficiente.

El Presidente Bush viaja a Brasil, Uruguay, Colombia, Guatemala, y México en un momento de cam-bio político, social, y económico profundo en las Américas. Seis años de descuido y mal manejo han dejado a los Estados Unidos sin una estrategia coherente para sacar el máximo de las oportunidades y para manejar los desafíos que esos cambios representan. Ni seis días de oportunidades de fotografías con el presidente ni un año (de siete) de compromiso con la región puede llenar ese vació.

Al Presidente Bush nunca le ha faltado retórica inspirada sobre las Américas. Con frecuencia él ha declarado la importancia de la necesidad de la cooperación y solidaridad entre los países del hemisfe-rio. Con el paso de tiempo la realidad no se ha visto lo suficiente detrás de esta retórica. La Adminis-tración Bush se ha enfocado en pocos instantes en asuntos de América Latina y lo han hecho en una manera que recuerda a la Guerra Fría.

Ese descuido interrumpido por anacronismo ha alejado de los Estados Unidos a muchos, dentro y fuera del gobierno, a través de las Américas que de otra manera hubieran estado abiertos al compro-miso y liderazgo de Estados Unidos. El prestigio y la influencia de los Estados Unidos en las Améri-cas están en uno de los niveles menores en varias generaciones, una realidad que afectará las políticas e intereses de los Estados Unidos por varias décadas. Para frenar esta caída y para crear una visión estratégica para las Américas requiere innovación y audacia. A pesar de su nueva retórica de justicia social, la agenda del Presidente durante su viaje de seis días reflejará poco de ambas.

La continuación del apoyo estadounidense para Plan Colombia, que convierte a Colombia al mayor recipiente de ayuda estadounidense fuera del Medio Oriente y Afganistán, no abre ningún campo nuevo. Variaciones de la temática “comercio, no ayuda” en Guatemala, y quizás hasta en Uruguay, no reflejan los cambios a la realidad actual donde políticas basadas en el comercio no han respondido eficazmente a demandas populares para el desarrollo económico.

Cualquier declaración en México sobre apoyo para una reforma integral migratoria sin un compro-miso de utilizar el capital político necesario en los Estados Unidos es, simplemente, más de lo mismo. Y en Brasil, la nueva propuesta del presidente será tímida e incompleta. No se realizarán las posibi-lidades transformativas de una relación basada en el etanol entre los Estados Unidos y Brasil sin un compromiso verdadero y acción por parte de los Estados Unidos.

De la misma manera, la iniciativa regional de la administración en Centro América contra las marras, que les de un apoyo importante a países que están luchando contra el efecto desestabilizador del cri-men, deja atrás la necesidad de programas de prevención basadas en las comunidades y depende casi exclusivamente en la aplicación de fuerza.

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Si este viaje del presidente hubiera ocurrido al principio de su presidencia y no cuando el presidente está llegando débilmente al final, la retórica y simbolismo que serán lo llamativo del viaje quizás hubieran sido suficientes. No ahora. En los temas claves de cada país que visitará el presidente un compromiso tan limitado ya no es suficiente.

Brasil

Por mucho tiempo, la política de los Estados Unidos ante las Américas ha sufrido de la practica de intentar aplicar políticas creadas en otras partes del mundo a las Américas sin tomar en cuenta diferencias importantes en circunstancias en el hemisferio occidental. El viaje del Presidente crea una oportunidad de reorientar las relaciones entre los Estados Unidos y Brasil de una manera que le daría la vuelta a esta dinámica. (Vea Brasil según los Números para ver un resumen breve de la importancia de las relaciones bilaterales.)

Los intereses de Estados Unidos de vigorizar nuestra economía, aumentar seguridad energética de largo plazo, y combatir el cambio climático global deberían ser claves para una nueve visión estraté-gica para las Américas. La creación de una relación cooperativa y dinámica entre los Estados Unidos y Brasil fundada a base de combustibles renovables seria un paso para adelante crucial. Acciones coop-erativas como estas ayudarían a sincronizar las políticas de los Estados Unidos ante las Américas con una reorientación de las políticas estadounidenses agrícolas y de desarrollo y comercio internacional que podría contener la promesa de rehacer nuestro futuro.

Aunque el viaje del presidente diera un paso en dirección apropiada necesitamos más que retórica y acuerdos de cooperación técnicos sobre etanol. Es hora de dar pasos concretos para crear el mer-cado global que los biocombustibles necesitan para ser competitivos con combustibles basados en el carbón. Se tiene que crear más acceso al mercado estadounidense para el etanol brasilero y cooperar de manera real con Brasil para crear, empezando en nuestros vecinos más pobres, la infraestructura y capacidad de producción alternativa por las Américas. A pesar de que el sector privado tendrá un papel importante en la expansión del mercado de combustibles alternativos, los gobiernos de Brasil y Estados Unidos tienen que crear las condiciones para que esos esfuerzos se puedan realizar y tienen que estar dispuestos a hacer inversiones claves iniciales.

Uruguay

A pesar de que se puede construir una razón estratégica para la inclusión de Uruguay en el itinerario del Presidente, la parada parece subrayar el verdadero, y no bien ocultado, motivo del viaje—ha-ciendo una demostración de combatir la percibida influencia de Hugo Chávez. Haber llegado al punto donde la parada del Presidente para tomarse la foto con el presidente de centro-izquierda de Uruguay Tabaré Vázquez es un acontecimiento demuestra cuanto trabajo se ha generado para los Estados Unidos de manera innecesaria por los últimos seis años de descuido y mal manejo. (Vea Uruguay según los Números.)

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No hay un número significativo de uruguayos que viven en Estados Unidos ni de ciudadanos es-tadounidenses que viven en Uruguay. A pesar de que los Estados Unidos ayudaron al gobierno de Uruguay durante su crisis financiera de 2002, los Estados Unidos le da muy poco en ayuda a Uru-guay. El presupuesto presidencial para el año fiscal 2008 solo tiene una petición, de $187 millones para Educación y Entrenamiento Militar Internacional, para Uruguay.

Un socio pequeño de MERCOSUR, una organización sur americana compuesta de Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay, y Venezuela, es el único país en el itinerario del presidente para el cual la mayoría de sus importaciones no provienen de los Estados Unidos. Sin embargo un acuerdo marco sobre co-mercio e inversiones (TIFA según sus siglas en inglés), Uruguay no parece tener mucho apetito para lo que promueve la administración Bush como curativo para todas las Américas—un tratado de libre comercio con los Estados Unidos.

Bien puede ser que la visita del presidente, que ha desencadenado tensiones políticas entre el gobi-erno de Vázquez y pueda motivar demostraciones populares en Montevideo, complique más que mejore las relaciones bilaterales con Uruguay.

Colombia

La parada del Presidente Bush en Colombia traerá de manera nada intencional atención a otro fallo tradicional de la política de los Estados Unidos ante las Américas—la personalización exagerada de la política pública. Como quizás con ninguna otra parte del mundo, Estados Unidos en sus relaciones con las Américas tiene la tendencia de simplificar temas complejos hasta que una persona llega a rep-resentar esos temas. Este proceso de personificación se completa con la tendencia de ver a esa persona como “hombre bueno” o “hombre malo.”

El presidente colombiano Álvaro Uribe es el “hombre bueno” más reciente que se encuentra enfren-tado con una crisis que podría llegar a deteriorar su reputación de manera permanente y complicar la búsqueda de intereses estadounidenses en Colombia de una manera innecesaria. El escándalo de la “para-política” que ha empezado a dar luz a conexiones entre la clase gobernante de Colombia y los paramilitares colombianos de lo que se hablado por mucho tiempo pero que no se ha confirmado oficialmente crea un desafío grande para la administración Bush.

Crea el desafío no porque los intereses de los Estados Unidos de combatir el narcotráfico y promover la seguridad hayan cambiado en Colombia como resultado del escándalo. Los intereses no han cambiado. Sino al acercarse el escándalo al Presidente Uribe con las detenciones de ocho congresistas colombianos oficialistas y del ex-confidente del presidente y ex-director de la policía secreta colombi-ana, la personificación de los intereses de los Estados Unidos en la persona del Presidente Uribe bien puede resultar en distraer de la necesidad de continuar el apoyo para Colombia.

Lleguen hasta donde lleguen las conexiones entre los paramilitares y la clase gobernante de Colombia, hay un aspecto profundamente importante del escándalo de la “para-política” que debe ser llamativo a la administración Bush en la formación de la futura ayuda de los Estados Unidos para Colombia. El que algunas de las instituciones colombianas tienen lo necesario para tratar este problema tan

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grande es un acontecimiento bueno. La impunidad ha atormentado a Colombia por mucho tiempo. Si la investigación de la “para-política” puede terminar con esta línea de impunidad podría marcar un momento clave en los largos esfuerzos de realizar una Colombia con paz y estabilidad.

Los casi $5 mil millones en los últimos siete años que los Estados Unidos han dado a Colombia han ayudado a estabilizar el país. A largo plazo, los Estados Unidos tienen un interés en la estabilidad de Colombia, pero para avanzar los intereses fundamentales de Estados Unidos esa estabilidad tiene que empezar a cortar el flujo de narcóticos de Colombia a los Estados Unidos que hoy se encuentra casi sin freno. Hasta el punto que los problemas del narcotráfico de Colombia se puedan resolver en Co-lombia, una política eficaz dependerá, en parte, en la introducción de gobernación civil en partes del país que casi nunca han tenido esa presencia. Se tiene que reorientar, por lo menos en parte, la ayuda de los Estados Unidos que hasta ahora ha favorecido de manera llamativa el intento de aumentar la capacidad de las Fuerzas Armadas de Colombia y la policía nacional. En combinación con desar-rollo sostenible alternativo, la introducción de autoridad civil a regiones monopolizadas por mucho tiempo por las guerrillas o los paramilitares debería ayudar a que Colombia lograra romper sus ciclos de generaciones de violencia que ahora se alimentan de recursos sacados del narcotráfico.

Esta tarea resulta más difícil por la inserción formal de los paramilitares en las estructuras del poder de Colombia. Aún si al hacerlo le cae mal a su aliado cercano, el Presidente Bush tiene que dejar claro que es esencial dedicar los recursos suficientes y la seguridad requerida para los que están investigando el escándalo “para-política” y los posibles testigos, incluyendo los que pueden tener información ver-gonzosa, o peor, para políticos importantes colombianos. (Vea Colombia según los Números.)

Guatemala

Guatemala es un país que da luz a las crecientes interconexiones en las Américas y las posibilidades, los desafíos, y los imperativos para los Estados Unidos y los demás países de las Américas asociados con esa interconexión.

El factor más obvio que está impulsando el acercamiento de los Estados Unidos y Guatemala es que más de uno en cada diez guatemaltecos vive en los Estados Unidos hoy. En 2005, Guatemala re-cibió casi $3 mil millones en remesas, casi toda proviniendo desde los Estados Unidos. Esa cantidad contribuyó más del diez por ciento del Producto Interno Bruto anual de Guatemala. A pesar de que los flujos de remesas son casi iguales a los flujos comerciales entre Guatemala y los Estados Unidos, es probable que el Presidente Bush subraye la asociación de Guatemala en CAFTA como lo clave de la vibrante relación económica entre los Estados Unidos y Guatemala que beneficia ambos países.

El Presidente debe pensar más en la verdadera naturaleza de la relación económica entre los Esta-dos Unidos y Guatemala y el motor mayor en esa relación—la migración económica de Guate-mala a los Estados Unidos. Cayendo victima de la cansada polémica de “comercio, no ayuda,” el presupuesto del año fiscal 2008 del Presidente Bush solo contiene $35,8 millones en ayuda para Guatemala. Los Estados Unidos tienen que ayudar más a que Guatemala logre un crecimiento y desarrollo económico sostenible.

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Un compromiso renovado de los Estados Unidos en inversión social como lo que se encuentra en la propuesta del Senador Bob Menendez (D-NJ) para la formación de un Fondo de Inversión y Desar-rollo Económico Social aumentaría los recursos que se podrían utilizar en combinación con políticas inteligentes de comercio para beneficiar países como Guatemala. Ayuda de este tipo es clave para aquellos a los que el comercio afecta de manera negativa y a los que no les llegan los beneficios del comercio. Más crecimiento económico en Guatemala ayudaría a cambiar las raíces de lo que conduce a demasiados de sus ciudadanos a emigrar quitando del países muchos de los trabajadores sólidos con las características de tomar riesgos y tener la iniciativa que son tan claves para sostener la economía de cualquier país a largo plazo.

Cambiando la dinámica social y económica en uno de los países más pobres de la región también disminuiría la fuerza de unas de las interconexiones más perniciosas entre los Estados Unidos y Gua-temala—las pandillas internacionales. A pesar de que es casi cierto que el Presidente Bush elogiará la iniciativa contra las pandillas recién anunciada por el Fiscal General Alberto Gonzalez y sus homólo-gos en Centro América, esta iniciativa es una respuesta parcial, si acaso. Repitiendo los fracasos del pasado de ver todos los problemas que tienen un elemento policial como algo que solo tiene solu-ción policial, la iniciativa nueva pone más fe en la eficacia de un aumento en operaciones policiales que merece tomando en cuenta las experiencias del pasado. Los esfuerzos anti-mara más eficaces en Centro América y en los Estados Unidos, donde el problema centroamericano con maras empezó antes de que el problema se amplificara en la región con la deportación de sus miembros desde los Estados Unidos, han combinado acciones inteligentes policiales con prevención y tácticas basadas en las comunidades. Los esfuerzos de los Estados Unidos contra las pandillas en Centro América tienen que reflejar estas experiencias y no solo hablar sobre ellas. (Vea Guatemala según los Números.)

México

Una de las relaciones bilaterales más importantes que tiene los Estados Unidos en el mundo es su relación con México. Desafortunadamente, no se ha tratado así.

A pesar de que las relaciones entre los Estados Unidos y México llegan más allá del tema de inmi-gración, la adopción de una reforma migratoria integral en los Estados Unidos se ha convertido en una condición previa a la posibilidad de entrar en la clase de relación estratégica que el Presidente Bush ha prometido y fracasado en crear por mucho tiempo con respeto a México. Mientras el último díctame de la política de los Estados Unidos ante México es la ley del muro de 2006, que podría resultar en un 700 millas de muros en la frontera de 2.000 millas, hay poca razón para creer que México llegará a ser tratada con la importancia estratégica que tanto merece.

Como será con respecto a todo el viaje, no se podrá evaluar la eficacia de la visita del Presidente Bush a México hasta ver lo que a su regreso a Washington. Las acciones y no la retórica que utiliza fuera de casa indicarán si el viaje ha sido un verdadero éxito. Los Estados Unidos y México necesitan poner atrás el debate feo sobre la inmigración en los Estados Unidos. Para seguir de manera seria los temas que están en el corazón de las relaciones entre los Estados Unidos y México es esencial dejar atrás la animosidad creada por la busca de ventajas políticas al norte de la frontera.

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La oportunidad política para lograr una reforma seria no durará hasta que los trabajadores emigran-tes terminen la cosecha del próximo otoño. Si el Presidente de verdad quiere una reforma, tiene que dejar solamente de hablar y tiene que empezar a utilizar cualquier capital político que le quede para crear un consenso bipartidista en el Congreso. Específicamente, él tiene que buscar el apoyo de los elementos de su propio partido en ambas cameras del congreso que no son xenófobos para rápidam-ente traer al cabo una reforma migratoria integral.

A pesar de que es absurdo pensar que los Estados Unidos pueda manejar eficazmente los desafíos de la inmigración sin involucrar a México de manera seria en la discusión, el Presidente Bush ha hecho eso en años recientes. Paradójicamente, ahora, si el presidente no puede lograr traer al fin una refor-ma migratoria integral será imposible enfocar el sistema político estadounidense en las políticas que son necesarias para ayudar a generar el crecimiento económico y estabilidad del mercado laboral en México que beneficiaria a largo plazo a México y los Estados Unidos.

Llamadas para un Fondo Norte Americano de Inversión para dar impulso a la clase de inversiones en infraestructura, educación y salud que son claves para el futuro compartido de México y los Estados Unidos, aún proviniendo de buenas intenciones, no tienen posibilidades de realización si el presidente no puede acabar la reforma migratoria. Discusiones sobre como aumentar la competitividad de Norte América o de más cooperación anti-narcotica y policial son importantes y bien vistas pero distraen de lo que tiene que ser la tarea central—la reforma migratoria integral. (Vea México según los Números.)

Conclusión

Los Estados Unidos necesitan reorientar su política ante las Américas para reflejar la interconexión que hoy define la región. Se tiene que dejar atrás una política de los Estados Unidos ante las Améri-cas de descuido, reacción (o reacción excesiva), y manejo de crisis. La búsqueda de los intereses de los Estados Unidos en una manera clara dejaría a los Estados Unidos más fuerte, más prospero, y más seguro. También ayudaría a avanzar la democracia con desarrollo social y económico por todas las Américas—un interés que beneficiaria todo el hemisferio.

Quizás, con el paso del tiempo, miraremos el viaje del Presidente Bush como el primer paso en la dirección para tener una visión estratégica ante las Américas que tanto necesitamos. El record del presidente ante las América sugiere que en vez de eso se entenderá como un último gesto de retórica vacía de una trayectoria que empezó con tanta esperanza pero que acabó con tan poco logro.

Daniel Restrepo es el Director del Proyecto de las Américas en el Center for American Progress. Para hablar con el para entrevistas, por favor ponerse en contacto con Vanesa Cardenas, Directora de Prensa, 202.841.8112 o vcardenas@americanprogress.org. El Proyecto de las Américas que forma parte del Center for American Progress enfoca sus esfuerzos en cuanto a la relaciones entre EEUU y los demás países de las Américas y la posición y lugar de EEUU en las Américas. El Proyecto tiene como objetivo elaborar reco-mendaciones novedosas para hacerle frente a estas realidades tan sujetas a cambios continuos, así como también estimular la participación activa del conjunto de los medios de comunicación para lograr una mejor difusión al público de sus propuestas en una forma rápida, efectiva y clara.

Brasil según los NúmerosCategorías, Grados, y Datos Diversos

Referencias: CIA World Factbook, Energy Information Administration, Inter-American Development Bank, International Monetary Fund, Latinobarómetro, New York Times, U.S. Department of State, Washington Post, Washington Office on Latin America, Folha de Sao Paolo.

0La dependencia de Brasil en las importaciones energéticas es exactamente cero. En 2006, Brasil logro la independencia energética a base de su producción de etanol y la producción petrolera doméstica.

1Brasil es el país con la mayor población en América Latina, con 188 millones de habitantes. Se habla más portugués que español como lengua materna en Sur América.

1,1 Brasil es 1,1 vez mayor que la parte continental de los Estados Unidos.

2,7 Mil millones de dólares fueron enviados de Estados Unidos a Brasil como remesas en 2005.

6 Es el sexto país con el Producto Bruto Interno por habitante más alto de América Latina con un nivel de $5.176,55 en 2006.

7Solo el siete por ciento de los brasileros consideran la delincuencia el problema mayor de su país a pesar de la atención internacional dada al crimen en Brasil. El desempleo (20 por ciento) y la salud (14 por ciento) fueron identificados como problemas superiores.

9 La novena economía en el mundo basada en la paridad de poder adquisitivo.

9,6 El nivel de desempleo de 9,6 por ciento es el octavo de América Latina en 2006.

19 El porcentaje de brasileros que tiene una opinión favorable del Presidente Bush, comparado con el 28 por ciento que tiene una opinión favorable de Fidel Castro, y el 17 por ciento con una opinión favorable de Hugo Chávez.

19,2 El porcentaje de exportaciones brasileras que va a los Estados Unidos, el socio comercial mayor de Brasil en el 2005.

31 El porcentaje de brasileros que viven bajo la línea de la pobreza, es el quinceavo país de América Latina.

40 El porcentaje del consumo de gasolina que ha sido remplazado por etanol.

54 La tarifa impuesta por los Estados Unidos por cada galón de etanol de Brasil importado es 54 centavos.

76 El porcentaje de brasileros que tiene una opinión por lo menos favorable del Presidente Lula de Silva.

70 El porcentaje de la producción global de etanol producido por Brasil y Estados Unidos. Brasil es el país que exporta más etanol en el mundo.

70 El porcentaje de vehículos vendidos en Brasil que pueden utilizar etanol o gasolina.

600.000–1,2 M El número de brasileros estimados que viven en Estados Unidos.

Colombia según los NúmerosCategorías, Grados, y Datos Diversos

Referencias: Banco de la República, CIA World Factbook, Center for International Policy, Inter-American Development Bank, International Monetary Fund, International Herald Tribune, Latinobarómetro, U.S. Department of State, Washington Post, Washington Office on Latin America, United Nations High Commissioner for Refugees.

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El mayor socio comercial de Colombia es los Estados Unidos, contribuyendo el 28,5 por ciento de las importaciones. Los países que siguen son México (8,3 por ciento), China (7,6 por ciento), Brasil (6,5 por ciento), y Venezuela (8,3 por ciento). Los Estados Unidos también es el destino principal para las exportaciones colombianas recibiendo el 41,8 por ciento de todas las exportaciones en 2005, el último año del que hay cifras completas.

1 Millón de colombianos viven en los Estados Unidos.

2,2 Mil millones de dólares fueron mandados como remesas desde los Estados Unidos a Colombia en 2005.

3 Con 43.593.035 habitantes en julio de 2006, Colombia es el tercer país de América Latina en términos de población.

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Hay tres grupos armados principales en el país: Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) han existido desde hace más de 40 años; el Ejercito de Liberación Nacional (ELN), con quien el gobierno está en discusiones previas sobre unas posibles negociaciones de paz; y las recién desmovilizadas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC). El Departamento de Estado estadounidense califica cada uno de estos grupos como un grupo terrorista internacional.

4 Colombia tiene la cuarta tasa de desempleo de América Latina.

5 Es el 5º recipiente de ayuda externa de los Estados Unidos y el mayor fuera del Medio Oriente y Afganistán. Colombia debe recibir aproximadamente $600 millones durante el año fiscal 2007.

8 Numero de miembros del congreso colombiano que han sido detenidos en los últimos meses como parte del creciente escándalo “para-política” que se trata de los vínculos entre los políticos y los paramilitares colombianos.

14 El Producto Interno Bruto por habitante de $2.763,32 fue el catorceavo de América Latina en 2006.

15 Colombia está entre las 15 fuentes principales de petróleo para los Estados Unidos. Colombia exporta más de 260.000 barriles de petróleo cada día.

39El porcentaje de colombianos que tiene una opinión favorable del Presidente Bush comparado con el 21 por ciento que tiene una opinión favorable de Fidel Castro y Hugo Chávez y el 31 por ciento con una opinión favorable del Presidente de Brasil Lula de Silva.

49,2 El porcentaje de colombianos que vive bajo la línea de pobreza, el séptimo nivel más alto de América Latina.

60 Por ciento de las flores cortadas para el mercado de los Estados Unidos provienen de Colombia, el segundo país del mundo de exportación de flores frescas.

73 Tasa de aprobación del Presidente Álvaro Uribe Vélez.

90 Porcentaje de la cocaína consumida en los Estados Unidos que se produce en Colombia.

170.000El numero aproximado de personas que fueron forzadas a huir de sus hogares el año pasado por los conflictos internos en Colombia. Décadas de violencia ha creado una de las poblaciones desplazadas internas más grandes del mundo de unos 3 millones de personas en 2006.

Guatemala según los NúmerosCategorías, Grados, y Datos Diversos

Referencias: CIA World Factbook, Harvard Human Rights Journal, Inter-American Development Bank, International Monetary Fund, Latinobarómetro, Office of the United States Trade Representative, U.S. Census Bureau, U.S. Department of State, Washington Post.

1Ganadora del Premio Nóbel de la Paz quien está buscando la presidencia de Guatemala en las elecciones de septiembre de 2007. Rigoberta Menchú, la líder del movimiento de derechos de indígenas, anuncio el 21 de febrero su intención de buscar la presidencia guatemalteca.

1,5 Millones de guatemaltecos viven en los Estados Unidos según cálculos oficiales.

2 El segundo mayor porcentaje de sus ciudadanos que viven bajo la línea de pobreza de América Latina con el 75 por ciento viviendo bajo esas circunstancias.

2,9Mil millones de dólares fueron enviados como remesas desde los Estados Unidos a Guatemala en 2005 comparado con cifras parecidas de exportaciones ($3,5 mil millones) e importaciones ($3,1 mil millones) entre Estados Unidos y Guatemala en 2006.

5 El Producto Interno Bruto por habitante de $2.107,53 en el 2006 era el quinto menor de América Latina.

7El numero de países que firmaron el tratado de libre comercio CAFTA-DR que entró en vigencia en Guatemala el 1 de julio de 2006. Los países que firmaron el tratado son los Estados Unidos, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, y la Republica Dominicana. Costa Rica es el único país que no ha ratificado el tratado.

7,5 Por ciento de los trabajadores guatemaltecos están sin empleo.

9 Con 12 millones de habitantes en 2006, la población de Guatemala es la novena de América Latina.

30El porcentaje de guatemaltecos que tiene una opinión favorable del Presidente Bush, comparado al 27 por ciento con una opinión favorable de Fidel Castro, el 25 por ciento con una opinión favorable de Hugo Chávez, y el 31 por ciento con una opinión favorable del Presidente de Brasil Lula de Silva.

36El numero de años de conflicto armado interno antes de que el gobierno de Guatemala llegara a firmar acuerdos de paz con la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG) para terminar un conflicto que resulto en 200.000 muertos.

45 Tasa de apoyo popular del Presidente Oscar Berger.

50,1 Por ciento de las exportaciones de Guatemala van a los Estados Unidos su socio comercial principal. Las destinaciones que siguen son: El Salvador (12,1 por ciento), Honduras (7,3 por ciento) y México (4 por ciento).

340 El numero estimado de pandillas o maras en Guatemala con más de 8.000 miembros en todo el país.

1Aproximadamente un millón de ciudadanos estadounidenses viven en México, representando el mayor número de ciudadanos estadounidenses que viven fuera del país y el 25 por ciento de todos los ciudadanos estadounidenses que viven en el exterior.

2 Con 107.499.525 habitantes en 2006, México es el segundo país de América Latina en términos de población.

2Exportando casi 2 millones de barriles cada día y con una producción estimada de casi 3,5 millones de barriles cada día en 2005, México le exporta más petróleo a los Estados Unidos que cualquier otro país en el mundo salvo uno.

2 El Producto Interno Bruto por habitante de $7.593,53 en 2006 era el segundo más alto de América Latina.

4,6 Tasa de desempleo, la tercera más baja de América Latina en 2006.

5El número de estados a los cual el Presidente de México Felipe Calderón ha desplegado aproximadamente 24.000 policías federales y soldados en una ofensiva contra narcotraficantes por todo México empezando desde su toma de posesión el 1 de diciembre de 2006.

9 El noveno porcentaje mayor de América Latina de gente que vive bajo la línea de pobreza. El 40 por ciento de mexicanos viven debajo de esa línea.

15 El numero de mexicanos extraditados a los Estados Unidos desde México bajo acusaciones relacionadas al narcotráfico como parte de la ofensiva contra narcotraficantes al comienzo del sexenio del Presidente Calderón.

16 Se estima que 16 millones de mexicanos viven en los Estados Unidos.

23,5 Mil millones de dólares fueron remetidos desde los Estados Unidos a México en 2005.

29El porcentaje de mexicanos que tiene una opinión favorable del Presidente Bush comparado con el 22 por ciento que tiene una opinión favorable de Fidel Castro, el 13 por ciento con una opinión favorable de Hugo Chávez y el 40 por ciento con una opinión favorable del Presidente de Brasil Lula de Silva.

45El precio por libra de tortillas de maíz, un elemento básico de la dieta mexicana. El precio está al doble de lo que era hace un año. El aumento en precio, fomentado en parte por el crecimiento rápido del consumo de etanol en los Estados Unidos, ha causado problemas para los pobres de México quienes reciben el 40 por ciento de su proteína diaria del consumo de tortillas de maíz.

60 Tasa de aprobación del Presidente Calderón.

85,7El porcentaje de las exportaciones mexicanas que van a su principal socio comercial, los Estados Unidos, de donde también provienen más del 50 por ciento de sus importaciones. Ningún otro país contribuye más del 8 por ciento de las importaciones o exportaciones mexicanas.

226,9 El porcentaje del aumento en comercio entre Estados Unidos y México desde el comienzo de Tratado de Libre Comercia en 1994.

400 El numero de personas, según el gobierno mexicano, que mueren cada año tratando de cruzar la frontera de Estados Unidos y México sin autorización.

700El numero de millas de barreras designadas para ser construidas en la frontera entre Estados Unidos y México según el proyecto de ley llamado el Secure Fense Act aprobado por el Presidente Bush en octubre de 2006. El Presidente de México Calderón ha declarado que el muro en la frontera mutua de 2.000 millas es “ofensivo.”

México según los NúmerosCategorías, Grados, y Datos Diversos

Referencias: BBC News, Center for Strategic and International Studies, CIA World Factbook, Inter-American Development Bank, International Monetary Fund, Latinobarómetro, Migration Policy Institute, Pew Hispanic Center, Prensa Latina.

Uruguay según los NúmerosCategorías, Grados, y Datos Diversos

Referencias: CIA World Factbook, Inter-American Development Bank, International Monetary Fund, Latinobarómetro, Office of the United States Trade Representative, U.S. Department of State, Washington Post, World Trade Organization.

2 Uruguay tiene la segunda población menor de América Latina con 3,4 millones de residentes en 2006.

3 Con 22 por ciento de su población que vive bajo la línea de pobreza, Uruguay tiene el tercer nivel más bajo de pobreza de América Latina.

4 El Producto Interno Bruto por habitante de $5.809,61 en 2006 era el cuarto más alto de América Latina.

7,2

Como ningún otro país que visitará el Presidente Bush en este viaje, la mayoría de las importaciones en Uruguay no provienen de los Estados Unidos. Solo el 7,2 por ciento de las importaciones provienen de los Estados Unidos, estando detrás de los socios de Uruguay en el MERCOSUR Argentina (22,2 por ciento) y Brasil (21,7 por ciento) y de Rusia (11 por ciento). Sin embargo, los Estados Unidos es el destino principal para las exportaciones uruguayas (20,6 por ciento).

10,5 Tasa de desempleo, la sexta mayor de América Latina.

12El porcentaje de uruguayos que tiene una opinión favorable del Presidente Bush comparado con el 28 por ciento que tiene una opinión favorable de Fidel Castro, el 32 por ciento con una opinión favorable de Hugo Chávez y el 31 por ciento con una opinión favorable del Presidente de Brasil Lula de Silva.

22Han pasado 22 años desde que una serie de gobiernos militares cedieron control a gobierno civiles elegidos democráticamente en Uruguay. Juan Maria Bordaberry, uno de los presidentes durante los gobiernos militares, fue detenido en noviembre de 2006 en conexión con los asesinatos al principio de los años 1970s de dos legisladores uruguayos.

34Solo 34 por ciento de los uruguayos que participaron en una encuesta en 2006 creen que una persona que nace pobre puede llegar a ser rico. Ese nivel de creer en la posibilidad de movilidad económica dejo a los uruguayos como los más pesimistas de los 18 países latinoamericanos que formaron parte de la encuesta. En contraste, el Perú fue el país más optimista en este sentido con el 74 por ciento creyendo en la posibilidad de avance económico significativo.

39 El porcentaje de los uruguayos que identificaron el desempleo como el problema mayor para su país en 2006. El segundo problema, con el 10 por ciento, era la economía.

62 Tasa de aprobación del Presidente Tabaré Vázquez. Vázquez, el entonces alcalde de Montevideo, le presentó al Presidente George H.W. Bush las llaves de la ciudad en 1990.

110 Millones de dólares fueron remetidos a Uruguay en 2005.