4
0 ANTROPOLOGÍA Multiculturalismo, capital global y feminismos Por Gisela Carrasco Miró el 5 febrero, 2015 @giselacarrmiro ¿Quién puede borrar las huellas?[1] ¿Es el multiculturalismo la alternativa a la imposición de la cultura dominante a ‘las otras’? ¿Cómo son las ‘otras’ culturas representadas en ese discurso? Las explicaciones fraccionadas de leer la realidad ya no son suficientes para entender un presente complejo e inter-conectado por el capital global. Desde los planteamientos teóricos y las prácticas políticas de mujeres y feminismos en Latino América y el Caribe, y en concreto de los feminismos disidentes, se ha evidenciado como las construcciones desde la diversidad y diferencia son complejas y contradictorias. En estos espacios se retan y proponen nuevas formas de vida liberadora que trascienden la forma unilateral de entender las sociedades “Las herramientas del amo no desmantelarán nunca la casa del amo”. — Audre Lorde Está claro que la noción de multiculturalismo viene dada como un programa político y no como una característica de nuestras sociedades, pues siempre (con sus variantes) éstas han sido diversas [2]. El multiculturalismo –la coexistencia pacífica de diversos mundos (y también ‘estilos de vida’cultural)- se sustenta en la ilusión pre- constituida de lugares simbólicos diferenciados y particulares, e imagina un excitante mestizaje cultural del cual surgirán las resoluciones a los conflictos. Pero, ¿es el multiculturalismo la alternativa a la imposición de la cultura dominante a ‘las otras’? ¿Cómo son las ‘otras’ culturas representadas en ese discurso? Slavoj Žižek nos alerta que el multiculturalismo es ‘un racismo con distancia’, una forma de racismo negado, auto-referencial: desde una posición (vacía) global, se respeta la identidad del Otro reafirmando, de esta manera, la propia superioridad. En otras palabras, el multiculturalismo no opone al Otro los valores particulares de su La muerte en el parto: el embarazo y la búsqueda de ayuda 23 febrero, 2015 La Metamorfosis de Faccio 23 febrero, 2015 Un lugar para la Democracia. Sobre el proyecto de las Naciones Unidas 23 febrero, 2015 Invertir socialmente es rentable: Ship2b y su plan «B» para cambiar el mundo 23 febrero, 2015 Revolución ética, la llave a nuevos mundos 19 febrero, 2015 Introduzca qué buscar... CONSULTE LOS NÚMEROS PUBLICADOS SUSCRÍBASE AL NEWSLETTER Nombre: Apellidos: Correo electrónico: Enviar 2015 > Ene Feb Mar Abr May Jun Jul Ago Sep Oct Nov Dic LETRAS ARTES HISTORIA ANTROPOLOGÍA SOCIEDAD OPINIÓN CINE MÚSICA CIENCIAS BABEL

05/02/2015 Revista Cultural

Embed Size (px)

DESCRIPTION

http://revistamito.com/multiculturalismo-capital-global-y-feminismos/

Citation preview

Page 1: 05/02/2015 Revista Cultural

0ANTROPOLOGÍA

Multiculturalismo, capital global y feminismosPor Gisela Carrasco Miró el 5 febrero, 2015  @giselacarrmiro 

¿Quién puede borrar las huellas?[1]

¿Es el multiculturalismo la alternativa a la imposición de la cultura dominante a ‘lasotras’? ¿Cómo son las ‘otras’ culturas representadas en ese discurso? Las

explicaciones fraccionadas de leer la realidad ya no son suficientes para entender unpresente complejo e inter-conectado por el capital global. Desde los planteamientos

teóricos y las prácticas políticas de mujeres y feminismos en Latino América y elCaribe, y en concreto de los feminismos disidentes, se ha evidenciado como las

construcciones desde la diversidad y diferencia son complejas y contradictorias. Enestos espacios se retan y proponen nuevas formas de vida liberadora que trascienden

la forma unilateral de entender las sociedades

“Las herramientas del amo no desmantelarán nunca la casa del amo”. — Audre Lorde

 Está claro que la noción de multiculturalismo viene dada como un programa políticoy no como una característica de nuestras sociedades, pues siempre (con susvariantes) éstas han sido diversas[2]. El multiculturalismo –la coexistencia pacífica dediversos mundos (y también ‘estilos de vida’cultural)- se sustenta en la ilusión pre-constituida de lugares simbólicos diferenciados y particulares, e imagina un excitantemestizaje cultural del cual surgirán las resoluciones a los conflictos. Pero, ¿es elmulticulturalismo la alternativa a la imposición de la cultura dominante a ‘las otras’?¿Cómo son las ‘otras’ culturas representadas en ese discurso?

Slavoj Žižek nos alerta que el multiculturalismo es ‘un racismo con distancia’, unaforma de racismo negado, auto-referencial: desde una posición (vacía) global, serespeta la identidad del Otro reafirmando, de esta manera, la propia superioridad. Enotras palabras, el multiculturalismo no opone al Otro los valores particulares de su

La muerte en el parto: elembarazo y la búsqueda deayuda23 febrero, 2015

La Metamorfosis de Faccio23 febrero, 2015

Un lugar para la Democracia.Sobre el proyecto de lasNaciones Unidas23 febrero, 2015

Invertir socialmente esrentable: Ship2b y su plan «B»para cambiar el mundo23 febrero, 2015

Revolución ética, la llave anuevos mundos19 febrero, 2015

Introduzca qué buscar ...

  CONSULTE LOS NÚMEROS PUBLICADOS

           SUSCRÍBASE AL NEWSLETTER

Nombre:

Apellidos:

Correo electrónico:

Enviar

2015 ▼ >

Ene Feb Mar Abr

May Jun Jul Ago

Sep Oct Nov Dic

LETRAS ARTES HISTORIA ANTROPOLOGÍA SOCIEDAD OPINIÓN CINE MÚSICA CIENCIAS BABEL

Page 2: 05/02/2015 Revista Cultural

propia cultura (no es directamente racista). Sin embargo, este trata a cada culturalocal como si estuviera encerrada en su propia y ‘auténtica’ comunidad cuya mayoríadebe ser ‘estudiada’ y ‘respetada’ cuidadosamente. Es en este respeto multiculturalpor la especificidad del Otro que se encuentra la propia afirmación de superioridaddel multiculturalista. En este contexto, la diversidad cultural es un producto discreto,esencializado, no tocado por la realidad circundante. Los ‘otros’ son vistos como“piezas de museo” que se convierten en puramente emblemáticas para la sociedad. Asu vez, el multiculturalista, preocupado por entender, interpretar y proponer (oimponer) como los ‘otros’ deben cambiar, se olvida de preguntarse qué posición tieneen la sociedad y como ha llegado ahí. Es decir, los privilegios que el sujeto tiene en lacadena de poderes, no le permiten cuestionar su propio poder en la reproducción delas estructuras y la representación que este/a hace de/la Otro.

La virgen de Guadalupe, 1978. Yolanda López

Uno de los aportes importantes de las feministas Aura Cumes y Gladys Tzul Tzul hasido evidenciar estas situaciones a partir de las ideas folclorizadas de las mujeresindígenas dentro los discursos multiculturalistas. En ellos, ya sea en forma deprogramas de cooperación/desarrollo o en diferentes movimientos sociales (incluidoslos de izquierdas), las mujeres indígenas son representadas de forma monolítica yhomogenizadas en un todo ‘la mujer indígena’: el pasado (o la nostalgia del pasado),pobre, víctima, con colores vivos, anclada en la comunidad, ignorante, concomportamientos y movilidades ‘apropiados’, siempre preparada para contar suhistoria y de ser ayudada. Son el objeto (no el sujeto) de estudio de relatosetnográficos, o descritas en ejemplos (o ‘casos de estudio’) siendo la experiencia de ‘lamujer indígena’ generalizada y universalizada.

“‘Sólo podemos ser indígenas” si hablamos de cierta manera, y tiene que

POPULAR COMENTARIOS TEMAS

Seguir a @revistamito 930 seguidores

«Invertir socialmente es rentable: Ship2b y su plan «B» para cambiar el mundo», vía @revistamito por @crecescreando revistamito.com/invertir‐socia…

Retwitteado por Ship2B

Emmanouela Varoucha @emma_var

Abrir

«Osculum», vía @revistamito por @isamagina revistamito.com/osculum/

Emmanouela Varoucha @emma_var

«Manuel Fernández: “Lo mejor que ha sucedido desde los ochenta ha sido la globalización de la moda”»,vía @revistamito revistamito.com/manuel‐fernand…

Emmanouela Varoucha @emma_var

Abrir

Emmanouela Varoucha @emma_var

5h

5h

5h

5h

Tweets

Redactar un nuevo Tweet...

Mito | Revista Cultural

+ 312

Seguir +1

Colabore para hacer grande este proyecto 

Mito | RevistaCulturalby revistamito.com

Read Magazine

La imagen personal, laestrategia más certera deAlejandro Magno22 diciembre, 2014

« N’être » : Le nouveau romande Charline Effah23 diciembre, 2014

Devotos del silencio: otrahistoria que contar11 febrero, 2015

Page 3: 05/02/2015 Revista Cultural

haber un sujeto -cuya voz autorizada- para patentar nuestras identidades ypensamientos, al decir que “efectivamente somos indígenas y nuestrosparadigmas también lo son”. [3]

Siguiendo esta lógica, vemos como la sed de ‘lo auténtico’ lleva al multiculturalista ahacer tests de autenticidad y así comprueba su condición de sujeto: ‘¿es ella‘realmente’ una indígena?’. En este sentido, ‘la mujer indígena’ solo puede mover labalanza si el poder sigue residiendo en el lado de sus interlocutores (la vozautorizada) y siga, de este modo, sirviendo a intereses multiculturalistas ydesarrollistas. La amenaza de desestabilizar esta balanza, resulta en sudesaprobación como sujeto: “si no es ‘auténtica’, ya no nos interesa”. Por lo tanto,existe una tolerancia con el ‘Otro-folclórico’ pero no con el ‘Otro-real’.

Hoy, más que nunca, es posible creer que el capital es respetuoso y tolerante de ladiversidad cultural. Más aún, podemos llegar a pensar que desde esta lógica sepromueve y fomenta dicha diversidad. Este marketing multicultural de los estados-nación y las empresas es un ejemplo paradigmático de la paradoja del discursomulticulturalista. A pesar de que el multiculturalismo se presenta como ‘diverso’ y‘particularmente-étnico,’ paradójicamente, éste se basa en un proceso global y dehomogenización, ambos propios de la lógica del capital global. Esto ocurre porque, adiferencia de lo que nos proyecta el multiculturalismo, no existe una comunidad-origen que sea un fin en sí misma (una entelequia en sentido aristotélico), sino queésta ya está mediada por el capital y las huellas históricas del colonialismo y elpatriarcado no se han borrado.

Al desviar del centro de atención la identidad política (de género, etnia, sexualidad oclase) y colocar el cuestionamiento del sistema-mundo capitalista, se destapa elmulticulturalismo, ya no como un ‘arcoíris de culturas’, sino como una estrategiadonde ser diferentes significa ser desiguales. El capitalismo, en su fase neoliberal,junto a la lógica multiculturalista y la división (sexual) internacional del trabajo, senutren de la construcción homogénea del sujeto ‘otro’. Es decir, se alimentan de lacreciente y constante sustracción de la mano de obra de la periferia[4],principalmente de las mujeres indígenas y afro-descendientes, para la práctica de laplusvalía así como la presencia a gran escala de las cadenas globales del cuidado y,por ello, el necesario entrenamiento ‘humanístico’ hacia el consumismo. De estemodo, se siguen manteniendo relaciones de poder (neo)colonial y patriarcal, con unmodelo modernizador, para dar continuidad al control, no sólo de los territorios yrecursos, sino de los saberes, cuerpos, producciones e imaginarios de ‘los otros’ y ‘lasotras’.

Anarkia Boladona, Grafiti en una pared de Rio, Brasil. Daniel Lobo

Sin embargo, desde hace un tiempo, diferentes experiencias políticas desde el

Imperativos con música4 enero, 2015

La legibilidad de lasdemocracias5 febrero, 2015

Page 4: 05/02/2015 Revista Cultural

pensamiento feminista disidente han canalizado, de manera colectiva, nuevas formasde construcción del sujeto. A diferencia de las reivindicaciones unidimensionalescentradas en ver a los subordinados como el problema, los feminismo disidentescritican las identidades políticas rígidas e imaginan y crean formas con las quedesafiar los poderes en sus múltiples dimensiones. En los márgenes de la disidencia,las mujeres indígenas, negras, pobres, lesbianas más que ser ‘sujetos esencializados’que reivindican características culturales, sociales y biológicas como algonaturalmente dado, son vistas como diversas y construidas por los múltiplesprocesos y huellas históricas. Desde esta mirada, las opresiones son comprendidas apartir de las conexiones y articulaciones, desafiando conjuntamente al sistema-mundo a través de estrategias subversivas y nuevos significados. Ochy Curiel[5]

subraya:

“No se trata de incluir o no a las mujeres negras y pobres, eso es muyneoliberal, la diversidad incluye pero no modifica ni cuestiona. Es algo máscomplejo: entender por qué hay mujeres negras y pobres. Y esta es la mayordiferencia que tenemos con los postulados de la interseccionalidad, quecreen que sumando identidades se va explicar la subordinación de lasmujeres. No vale incluir otras opresiones, sino ver y entender la opresión ycómo se articula, y analizar cómo cada una de nosotras y en colectivo y conotros movimientos sociales, estamos o no reproduciendo esa lógica. Y estosignifica entender los lugares de privilegio que tenemos.”

Desde los aportes de los feminismos disidentes y subversivos aprendemos adesmantelar el imaginario unidimensional, racista, sexista y capitalista delmulticulturalismo. Esto nos ayuda a ver que no se trata de ‘incluir’ o jerarquizaropresiones, sino de entender y analizar cómo estas se conectan y articulan en unsistema-mundo. Esta visión global, nos permite desafiar las políticas neoliberales dehoy día, ver las opresiones más allá de una discriminación por color de piel y/o sexoy/o identidad sexual y/o clase. Las identidades ya no son estáticas y prediseñadas,sino cuestionables. Nos sirven como un elemento identificador de historias ysituaciones, pero no como un objetivo político. Es aquí que Ochy Curiel le da sentidoa la famosa frase: “Olvídate que soy negra, pero nunca te olvides que soy negra”[6].

Centrar los debates en si una cultura es ‘más’ o ‘menos’ ‘progresiva’ que la otra o si lasmujeres indígenas son ‘más’ o ‘menos’ sumisas que las blancas o las mestizas, no nosdeja comprender cómo y porque se dan determinadas situaciones y qué implica estopara y en la vida de las personas. El multiculturalismo y su proyecto sobre lasdiferencias culturales, deja intacto los procesos de homogenización propios de labase del sistema capitalista perpetuando y agravando, de esta forma, lasdesigualdades existentes. Cuestionarnos las causas que llevan a cada vez máspobreza, xenofobia, racismo en nuestras sociedades, nos permite actuar desde una‘solidaridad en la lucha común’[7] descubriendo, de esta manera, que el atollado en elque estoy es en el que también está ‘el Otro’.

Imagen de portada: ¿Quién puede borrar las huellas? 2003. Regina Jose Galindo

Para saber más…

Anzaldúa, Gloria. 1987. Borderlands/La Frontera The New Mestiza. San Francisco: Aunt Lute

Avtar Brah (2004). Diferencia, diversidad y diferenciación. En Otras inapropiables. Feminismosdesde las fronteras. Varias autoras, 107-136.Madrid, España: Traficantes de sueños; Mapas.

Butler, J. 2001. El género en disputa. México. Programa Universitario de Estudios de GéneroUniversidad Nacional Autónoma de México.

Cumes, Aura 2009. Multiculturalismo, género y feminismos: Mujeres diversas, luchas complejas.Participación y políticas de mujeres indígenas en América Latina Quito: FLACSO – Sede Ecuador :Ministerio de Cultura del Ecuador. 2009

Curiel, Ochy. 2007. “La Crítica Poscolonial desde las Prácticas Políticas del Feminismo Antirracista”,en: Colonialidad y Biopolítica en América Latina. Revista NOMADAS. No. 26. Instituto de EstudiosSociales Contemporáneos-Universidad Central. Bogotá.

Spivak, Gayatri Chakravorty. “Can the Subaltern Speak?” in: Cary Nelson Editor) and LawrenceGrossberg (Editor). Marxism and the Interpretation of Culture. University of Illinois Press. October1, 1988. p. 271-313. Paperback, 738 pages, Language English, ISBN: 0252014014.

Žižek, S. 2004. “From politics to biopolitics….and back”South Atlantic Quarterly, 103.