EL PROCESO PROYECTUAL

1. TABIQUE 1

2. TABIQUE 2

3. LA IDEA DEL HABITAR Y LA IDEA DEL DISEÑAR

4. EL MPROCESO PROYECTUAL

EL PROCESO PROYECTUAL

SISTEMATIZACIÓN DEL PROCESO INVESTIGATIVO PARA EL DISEÑO. (TABIQUE 1)

El libro Sistematización del proceso investigativo para el diseño está propuesto en forma de guía que contiene los temas a considerar para una correcta formulación del

programa arquitectónico.

El libro da una idea general de cuál es el que hacer de un arquitecto y en él se puede apreciar las fases del proceso creativo de investigación que hacen posible a través de una integración de un proceso unitario la producción de objetos arquitectónicos y urbanos. En el libro crítica y aclara los errores que se cometen en la enseñanza de la arquitectura en el taller y en el proceso investigativo a fin de evitároslos. Ya que desde la incubación, la intuición y la verificación hay ciertas consideraciones necesarias en el proceso investigativo para la creación de un objeto edificable.

Al profundizar en el tema de la investigación se empieza por definir el objeto de conocimiento basado primeramente en el análisis de una problemática que exista entre actividades humanas de cualquier tipo y el ambiente donde se desarrollen dichas actividades (morfología del edificio). Este objeto de conocimiento va limitado por un análisis de la Territorialidad y temporalidad; donde se analizan los factores del entorno que influyen y han influido en el desarrollo del problema. Y finalmente se analiza la profundidad del objeto de conocimiento. Que es una especie de conclusión de la investigación previa.

El objeto de conocimiento constituye la primera parte de la investigación y debe realizarse previa al marco teórico de referencia en donde se tiene información de los antecedentes históricos, culturales, económicos, ideológicos, políticos, biológicos, entre muchos otros que valiéndose también de investigaciones y registros anteriormente hechos, ayudan a comprender la zona de estudio. El marco teórico se utiliza para estructurar un guion de secuencia temática en el que a partir temas determinantes se van desarrollando subtemas de cada uno, para finalmente sacar de cada grupo de temas con sus

respectivos subtemas una síntesis que previamente servirán para llegar a una conclusión que ayude a formular el programa arquitectónico.

Los temas determinantes son de muchos tipos, e incluyen clima, hidrología, geohidrología, edafología, capacidad agrícola y capacidad de uso urbano actual del suelo. Cada uno de ellos con sus diferentes subtemas.

En el libro se da, además de un ejemplo de guion de secuencia temática, una especie de guía para realizarlo, con consideraciones, fuentes de información de departamentos gubernamentales y no gubernamentales que tienen registro estadísticos sobre todos los temas, así como indicaciones de que profesionista están capacitado para cada estudio que se requiera.

EL PROCESO DE TRABAJO DEL ARQUITECTO COMO UN PROCESO CREATIVO DE

INVESTIGACIÓN HACIA LA PRODUCCIÓN DE OBRAS DE ARTE.

Las carencias culturales, sociales y económicas, artísticas así como el abuso de estas carencias por parte de monopolios capitalistas, el mal uso de las áreas urbanas para el uso de masas empobrecen y afectan la arquitectura; no solo en su forma estética, sino en su forma útil y óptima en que se podría desarrollar.

El arquitecto debe tener una formación integra que le permita determinar los problemas arquitectónicos en base a las actividades específicas que realiza la creciente población y que necesitan desarrollo estructural. Para esto es necesario que el arquitecto pueda definir su objeto de conocimiento, para elaborar su marco teórico y posteriormente su secuencia temática que a modo de conclusión debe contener ya una concepción básica de cómo resolver armoniosamente el funcionamiento de las actividades humanas.

La incubación es la idea que se tiene de cómo resolver el problema análogo con el programa arquitectónico, esta idea va madurando; supliendo cada vez mejor las exigencias técnico-constructivas del programa utilizando de apoyo métodos gráficos.

Cuando esto pasa y se encuentra una solución con una idea definitiva del objeto se llega entonces a otro proceso llamado intuición. Y a partir de este punto es que se puede materializar su solución a partir de una detallada representación gráfica donde inicia la etapa de verificación, y que pasa por la construcción y hasta la puesta en servicio.

En la producción arquitectónica se parte de lo concreto de la realidad; como el hecho de que gran parte de la sociedad habita en un lugar inadecuado donde no pueden desarrollar óptimamente sus actividades, dichas actividades estand determinadas por una sociedad capitalista, en donde el bienestar social no interés. Al reflexionar sobre ello, el arquitecto lo convierte en objeto por conocer y con ello crea un programa Arquitectónico. Este proceso de producción refiere a lo concreto pensado. Y finalmente se llega al proceso llamado lo concreto formado; que comprende desde la concepción de imágenes artísticas formales, hasta la construcción de la obra arquitectónica.

(“el arquitecto parte de lo concreto de la realidad, abstrae, conoce, y con ello llega a representarlo en el pensamiento, como concreto pensado; genera imágenes, encuentra la adecuada y la materializa en obras , que renuevan lo concreto de la realidad en lo concreto transformado”).

El libro menciona los conocimientos, aptitudes y habilidades propias de un arquitecto. Que derivan de la realidad concreta de su trabajo artístico y de su habilidad de solucionar problemas sociales. Por ello el arquitecto debe tener una formación en su sensibilidad Tanto artística como social, conocimiento en las teorías sociales y las teorías del arte, para poderlos aplicar a objetos de conocimiento específicos y complementario a esto también es necesario un amplio conocimiento práctico.

El PROCESO PROYECTUAL.

El proceso a partir del cual se lleva a cabo el diseño, más que una serie de pasos a seguir es un hilo conductor entre las etapas, no es una mera calificación adjetiva del hacer, sino un resultado particular y concreto de un trabajo. La cuestión principal radica en cómo se actúa dentro del quehacer arquitectónico. No como pensamos que es, sino como pensamos a través de este.

La finalidad de este hacer proyectual es la idea de construir o edificar lugares como objetos que regulen nuestra estancia entre las cosas (proyectar con la finalidad de construir). Con el fin de satisfacer una necesidad que en principio fue lo que llevo a su elaboración. Estos productos no están sometidos a un modelo previo de cómo hacerlos y tampoco se hacen al azar; son un proceso que inicia en la abstracción de cuál es la mejor manera de

suplir una necesidad y cuál es el mejor modo de organizar arquitectónicamente los elementos de tal problema y generar un nuevo orden de los materiales con lo que se construye aunque estos condicionen al mismo tiempo las posibilidades de su ejercicio.

Lo que el proceso del diseño transforma no es en si el objeto arquitectónico sino la idea de forma que este deberá tener pretendiendo que la expresión verbal que le da inicio se logre figurativamente.

En el acto proyectual se busca un uso inédito del material arquitectónico, que aunque sea derivado de una ejercitación anterior de la propia práctica, se busca reinventarla a partir de una mejor interpretación de la necesidad. Este proceso de diseño en el que se busca materializar la idea fomentada por una propuesta formal para hacer algo. Se basa primeramente en expresiones y representaciones a través de adecuaciones graficas que conforman expresiones representativas y posteriormente la identidad arquitectónica del nuevo objeto; dándole estructura figurativas que conforme a un proceso de razonamiento va madurando hasta que se obtiene una actividad proyectual; Lo que identificamos como proceso es el progreso de una causa, con el fin de obtener un fin determinado. Donde el sentido utilitario le da origen y destino.

El diseño arquitectónico es elaborado con la finalidad de prefigurar la forma de un objeto que además de lo anterior ya mencionado debe ser habitable y edificable de tal modo que las partes que estén dispuestos de una forma arquitectónica posea una comunicación estética.

Las actividades sociales y sus demandas definen la existencia, producción y consumo de los objetos arquitectónico; por lo que estos deben tener una finalidad social y humana, ya que su configuración es el resultado de las formas de expresión cultural de una sociedad en relación con el entorno en el que habitan.

EL PROCESO DE TRABAJO DEL ARQUITECTO COMO UN PROCESO CREATIVO DE

INVESTIGACIÓN HACIA LA PRODUCCIÓN DE OBRAS DE ARTE (TABIQUE 2)

Tabique 2 es un texto que habla sobre la arquitectura y su proceso para la producción de

obras de arte.

Se divide en cuatro temas cuyo

objetivo principal es la mejora de la

enseñanza y aprendizaje de la

arquitectura.

El primer tema nos habla sobre la

realidad social en México y su arquitectura. Nos cuenta que en México, la forma

dominante de las edificaciones están más determinadas por la capital y la obtención de

las ganancias, que a la finalidad de humanizar a la población.

Manifiesta a la tendencia monopolista que enmarca la forma arquitectónica como la

culpable; a su vez, proclama una educación con visión realista, que se produzcan obras

de arte, y ya no construcciones al servicio de las consignas del capital, pero sobre todo

mayor sensibilidad.

El segundo tema nos enmarca que hay que

conocer al pueblo con el que se trabaja, pues el

arquitecto a partir de ahí, podrá resolver los

problemas arquitectónicos con los que se trabajará, analizando las actividades sociales

que requieren desarrollo, determinando así las forma del soporte material. Donde este, al

estar investigando, deberá auxiliarse de las aportaciones técnico-metodológicas vigentes,

tanto en material de teoría social, como de teoría del Arte; incluyendo la relación del

hombre con la naturaleza, y las leyes y reglamentos (estrucutrales e infraestructurales).

El arquitecto al tener todo el análisis de lo antes mencionado, se pone en estado de

“incubación”, que es en donde se generarán ideas y las plasmará en croquis, bocetos,

grabaciones, etc. , para su futuro desarrollo , y que en efecto, logre estrar a prueba desde

su representación (diseño), hasta ser puesta al servicio del usuario.

El arquitecto, parte de la realidad, donde se enfrenta a la forma deshumanizada y

empobrecida de los objetos edificados, y lo convierte en un objeto por conocer y resolver;

generando a su vez una imagen formal que más tarde se materializará, dirigido al fin de

dar una forma humanizada que corresponda a las actividades y necesidades humanas,

radicando su valor estético con el propósito de que sea entonces una obra arquitectónica.

E s por ello que el egresado de la carrera de Arquitectura, debe poseer conocimientos,

habilidades y aptitudes para el proceso creativo dentro de una obra arquitectónica.

Como ya se mencionó anteriormente, el arquitecto primero debe de conocer las

condiciones sociales en las que se encuentra la sociedad, para más tarde entras en el

proceso de la construcción. Por lo que es necesario que el egresado, haya desarrollado la

sensibilidad para percibir, sentir, disfrutar de su obra arquitectónica. Pues finalmente

nuestro trabajo es determinar la forma estética de objeto edificable que faciliten la

reproducción y transformación de las actividades sociales concretas, tomando en cuenta

(si es que se trabaja en nuestro país), las determinaciones de nuestra formación social o

en determinado caso del lugar donde se trabaja.

EL PROCESO PROYECTUAL Y SUS ESTRATEGIAS DE APRENDIZAJE

Este texto trata sobre el diseñador y el objeto. Cuenta que para poder realizar un objeto

hay que identificar la naturaleza de los materiales con los que se trabaja, realizándose en

el proceso, un análisis del mismo.

Oriol Bohigas, dice que el estudiante de arquitectura, no puede quedarse con el puro

conocimiento que se tiene sobre diseño, más bien que este tiene que adaptarlo a su

propia maneta de ver el mundo.

Por otra parte Vittorio Gregotti expresa que lo que determina e identifica a una obra

arquitectónica es su maleabilidad, su forma de ser. Porque la finalidad del diseño es que

un objeto llegue a concretarse en su materialización para poder ser utilizado o habitable

en caso de ser algo arquitectónico.

La cuestión teórica por resolver en el ejercicio proyectual, es como se actúa en el

quehacer arquitectónico, no como pensamos que es; sino como pensamos a través de

este y cómo actuamos cuando ya está finalizado.

Después de esto, hay que ir identificando el proceso del diseño a través del orden que se

le ha dado a los diversos materiales que lo constituyen para su condición arquitectónica,

que no son los materiales de construcción.

Ya en la proyección, se plantea un uso al material arquitectónico, pues durante esta, se

generan imágenes con las cuales es posible representar objetos de la realidad

controlando sus rasgos figurativos. Se relacionan con el uso social y particular, con la

cultura y el contexto donde actúa (condición histórica).

Cabe mencionar que en la proyección, se genera una estructura del proyecto que es lo

que caracteriza a la obra, y consiste en la relación de los materiales con los aspectos

ideológicos, técnicos, económicos o históricos.

En conclusión, la práctica del diseño implica absolutamente a la creatividad, pues es

cómo podemos percibir lo que todavía no es. Y en el caso de la arquitectura, la intensión

es el entorno habitable que se crea a través de la figura, iniciando con el factor propósito

como una necesidad en cualquier acto creativo, sin olvidar lo estético.

Dice Gregotti que lo sobresaliente es que en la medida que se va precisando el concepto,

también se irá precisando la figura. Y tiene sentido, pues en un principio se generarán los

primeros rasgos figurativos del objeto, que dará pie a su desarrollo. A esto se le conoce

como conceptualización.

El propósito final del diseño, radica en la definición figurativa del entorno físico habitable.

LA IDEA DEL HABITAR Y LA IDEA DEL DISEÑAR

La idea del habitar es un texto que habla sobre el espacio que habitamos en

consecuencia de un ambiente físico y cultural, como expresión de la identidad de nuestra

sociedad.

Dice que cada uno de nosotros hacemos nuestro ambiente, y este mismo nos hace a

nosotros; que se ve reflejado en las diferentes manifestaciones arquitectónicas y urbanas.

La idea del habitar se refiere a la contractibilidad de

los objetos que habitamos, entendiendo la condición

del ambiente que lo identifica, en sentido de la

apropiación y adecuación de un sitito para convertirlo

y considerarlo como un lugar propio, a través de una

manifestación cultural, relacionándolo con su

ubicación como el contexto en el que se produce.

Narra que habitamos al ser parte de objetos, y, que

somos habitados por objetos, al ser ellos parte de

nosotros mismos. Y tiene razón, pues la casa o edificio en donde habitamos, es un objeto,

y este objeto también forma parte de nosotros como consecuencia de un ambiente físico y

cultural.

Por otra parte, la idea del diseñar nos dice que el diseñar arquitectónico se elabora y

desarrolla partiendo de un propósito, para que después este llegue a ser materializado,

pero sobre todo con las características del lugar en donde se encontrará , que sólo tendrá

sentido hasta que este sea habitado.

La finalidad del diseño contra de que un producto tenga una utilidad y sea estético. Nos

menciona Sánchez Vázquez, que no tiene sentido un proyecto estético, si este no cuenta

con una función; así mismo que no tiene caso que tenga una función, si no va a ser un

producto que lleve un proceso de humanización de la materia.

La idea del arquitecto es que este pueda

relacionar y conectar lo demandado en un

objeto mediante una interpretación figurativa

del mismo. Es decir, a través de la definición

de su figura y del orden con que se comunica.

En conclusión, un buen diseño es aquel que

formula propuestas ambientales relativas a la

idea del habitar, a través de la figura

arquitectónica, dándole un valor social que le

da sentido y finalidad al proyecto.