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UNIVERSIDAD SANTO TOMAS DE AQUINO SEDE FLORIDABLANCA LA POETICA DEL ESPACIO Gastón Bachelard MATERIA: TEORIA Y PROYECTO PRESENTA: María José Pacheco 21402470 Carlos José Sánchez 2131369 David Bernal 2131136 Juan pablo Gómez 2131133

La Poetica Del Espacio

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UNIVERSIDAD SANTO TOMAS DE AQUINO

SEDE FLORIDABLANCA

LA POETICA DEL ESPACIOGastón Bachelard

MATERIA:

TEORIA Y PROYECTO

PRESENTA:

María José Pacheco 21402470

Carlos José Sánchez 2131369

David Bernal 2131136

Juan pablo Gómez 2131133

Leonardo Pinilla 2121551

BIOGRAFIA

Nació el 27 de junio de 1884 en Bar-sur-Aube. Sus padres eran unos modestos vendedores de periódicos y tabaco. 

Cuando finalizó los estudios secundarios trabajó en la oficina de correos de Remiremont hasta el año 1906 y más adelante en París entre 1907 y 1913. A pesar de estar trabajando sigue estudiando y se licencia en matemáticas en 1912. Su afán era el de ser ingeniero, pero se vio truncado por el inicio de la I Guerra Mundial y su alistamiento en el ejército. 

Al fin de la contienda, es nombrado profesor de física y química en Bar-sur-Aube. La teoría de la relatividad echó por tierra sus ideas sobre la física, por lo que se dedica al estudio de la filosofía occidental, obteniendo una segunda licenciatura en letras en 1920. Más tarde obtiene una cátedra tras aprobar una oposición y realiza su doctorado en 1927. En 1930 da clases primero en Dijon y luego en La Sorbone de historia y filosofía de las ciencias hasta 1954. 

Además de filósofo, crítico y epistemólogo, fue también poeta. En 1934, publicó El nuevo espíritu científico, y en 1938, La formación del espíritu científico. Su obra más importante sobre epistemología es El materialismo racional (1953). Sus análisis sobre lo imaginario están recogidos en libros que tienen que ver con su psicoanálisis de los elementos: Psicoanálisis del fuego (1938), El agua y los sueños (1942), El aire y los sueños (1943) La tierra y la ensoñación de la voluntad (1948). 

Estas obras muestran una gran influencia de Carl Gustav Jung, sobre todo de sus ideas sobre la energía espiritual y la oposición ánima/persona. Bachelard dedicó los últimos años de su vida a una búsqueda más poética: La poética del espacio (1957) y La poética de la ensoñación 1960).  

Se le concedió la Legión de Honor en 1951 y el Gran Premio Nacional de las Letras. 

Gastón Bachelard falleció el 16 de octubre de 1962 en París. 

BIOGRAFIA

PENSAMIENTO DEL AUTOR

En cuanto a su producción intelectual, Bachelard hizo de su pensamiento un pensamiento escrito. Por eso es que, quizás, y así indican sus seguidores, la obra de Bachelard no es sistemática en cuanto a una línea específica de cuerpo teórico uniforme, sino que más bien se trata del crecimiento intelectual progresivo de su autor en dos órdenes: la filosofía de la ciencia y la filosofía de la imaginación, la epistemología y la teoría estética. Por eso se habla de un pensamiento “andrógino”, término con que él mismo se “definía” para referirse a sus sugerencias teóricas. En tal sentido, basta mencionar los títulos de sus obras que, como se puede apreciar, corresponden simultáneamente a sendas preocupaciones teóricas del autor.

Una filosofía andrógina

Con palabras tomadas del mismo Bachelard, su pensamiento sería el de una “filosofía andrógina”. Si en su epistemología Gastón Bachelard sugiere un pensamiento del progreso, en su estética sugiere un pensamiento del regreso. En la dialéctica (o aparente ambivalencia) de ambas propuestas, tratará de promover una poética de la voluntad, o un pensamiento de la presencia eternamente diferida en relación con una apariencia por trascender.

La obra de Gastón Bachelard es una obra de ruptura, de posición contra la herencia del siglo XIX, tanto hacia las filosofías clásicas (empirismo, racionalismo) como hacia la marginación que determinados dominios antropológicos de la cultura occidental sufren en nuestra racionalidad. Uno de esos dominios sería el de la “imaginación creadora”. Por tanto, Bachelard va a ocuparse de la imaginación creadora a modo de objeto de estudio, intentando la búsqueda de un estatuto ontológico de lo imaginario. Pero para abordar el problema de la imaginación creadora, en su ámbito cultural y antropológico, este filósofo procede por vía de la des conceptualización.

El trabajo de Gastón Bachelard resulta particularmente interesante porque marca una ruptura en el campo epistemológico.

Bachelard postula la necesidad de leer históricamente la relación filosofía-ciencia. Esta innovación abre de una manera asombrosa las perspectivas desde las cuales pensar la ciencia y da lugar a una nueva corriente epistemológica capaz de dar cuenta de los cambios producidos en el terreno del conocimiento científico.

Pensar la historicidad del saber científico implica, necesariamente, descubrir la filosofía subyacente en las nociones que el discurso científico maneja en cada época. En la medida en que esas nociones son conceptualizadas por el discurso del filósofo, están inmersas en una teoría del conocimiento que condiciona o es consecuencia de la manera con que el científico se acerca a su objeto. Esta relación entre el conocimiento y su objeto es la que analiza Bachelard. En La filosofía del no, intenta dar cuenta de la historicidad de un concepto específico: el de “masa”. Muestra cómo el desarrollo de este concepto coincide, en cada momento de su historia, con una concepción filosófica diferente. Este descubrimiento trae consecuencias sumamente importantes para la epistemología.

En primer lugar, se produce una pluralización de la filosofía, que nos induce a pensar una inversión y un desplazamiento en la relación filosofía/ciencia. Este hecho trae consigo una dialectización de la razón científica.

PENSAMIENTO DEL AUTOR

En segundo lugar, Bachelard problematiza la concepción tradicional del objeto de conocimiento. Si la razón es histórica, entonces el objeto de conocimiento es construido. Para Bachelard, la realidad no es inmediata sino que ella es producida por el trabajo del científico. La teoría es la verdad que busca su realización. “La realización priva sobre la realidad”. El objeto de la ciencia siempre está más allá de los objetos usuales. Existe una ruptura en la objetivación. Un objeto nunca es independiente de la interpretación y esa interpretación depende de la aproximación histórica.

El planteo de una historicidad de los conceptos científicos cuestiona tanto a la razón arquitectónica cartesiano-kantiana como al “dato claro, limpio, seguro, constante” del realismo ingenuo y el positivismo. Pero Bachelard profundiza aún esta idea: la historia de las ciencias nos muestra que “se conoce en contra de un conocimiento anterior, destruyendo conocimientos mal adquiridos”. “Hay que plantear el problema del conocimiento en términos de obstáculos”.

Bachelard define el “obstáculo epistemológico” como aquel conocimiento previo o hábito de pensar que, en un momento dado, impide a la ciencia formular correctamente un problema. Estos obstáculos no son obstáculos externos tales como la complejidad del fenómeno ni los límites del entendimiento humano, sino que están dados por nuestra manera inmediata de aproximarnos al objeto. Lo que es “claro y distinto”, lo evidente sólo entorpece el trabajo de la ciencia. También, en algún momento del desarrollo del conocimiento científico, el cúmulo de conocimientos anteriores, puede constituirse en un obstáculo para la investigación.

Bachelard califica a esta trama de obstáculos subjetivos, constitutivos de nuestro modo de acercarnos al objeto, como un “inconsciente del trabajo científico”. Se trata, principalmente del lenguaje ordinario y la experiencia común, pero también de conceptos que fueron útiles a la ciencia en un momento dado y pasan luego a convertirse en trabas que es necesario superar.

El punto de partida del conocimiento no es jamás un punto cero. “La ignorancia es una trama de errores positivos, tenaces, solidarios”. Toda experiencia objetiva, nos dice Bachelard, es la corrección de un error subjetivo.

El nombre del libro describe perfectamente el artilugio entramado en él, es decir que analizará el espacio en cuanto a todo lo que poéticamente se refiere a él. Esto es, todos los sentimientos y prejuicios (como ideas preconcebidas) que tenemos de la imagen y que nos remiten con la ensoñación a una serie de valores prestablecidos por distintos factores. Estos factores no le importa estudiarlos a Bachelard; no entran en su campo de estudio y se los deja a los psicólogos como profesionales del psicoanálisis del individuo particular.

Dice Bachelard que la imagen poética tiene un ser propio, a ella le pertenece ontológicamente su propiedad de ser, de la que se valen los autores para hablar de ella; de la que ellos tienen de la misma. Hay muchas imágenes que se transmiten en el tiempo de la misma manera y con los mismos valores, variarán dependiendo delos padecimientos que hayan transcurrido los distintos autores pero la imagen súbita y conceptual pertenece al colectivo o en su caso a la tradición cultural. Esto nos lleva a hablar de la problemática que supone la conceptualización general de varias imágenes poéticas en el conjunto de una obra literaria, sobre el predominio de unas o de otras, sobre su jerarquía, resuelta según Bachelard ya que en esénciala imagen no remite más que puramente a su origen y este es inmutable.

En la Introducción al libro señala que las imágenes que estudiará son sencillas, imágenes dice del espacio feliz. Espacios de posesión que son amados por valor humano. El espacio es vivido y debe de ser tratado desde todas las parcialidades de la imaginación. Esta poética espacial se desgrana en las siguientes líneas a modo de hilo conector entre los textos literarios que ensarta Bachelard mientras narra el relato de su pensamiento que tantas veces se entrecorta, se pierde o directamente se esfuma

LA CASA. DEL SOTANO A LA GUARDILA. EL SENTIDO DE LA CHOZA

El primer ejemplo de poética espacial es la casa, que se plantea en dos apartados. El primero se centra en la casa misma, desde el sótano a la buhardilla así como del sentido que tiene de choza en su versión más histórica. El segundo en cuanto a la casa y el universo. El principal problema que plantea estudiar la casa es la especie de atracción de imágenes que se concentran en torno a ella; ¿es posible encontrar una esencia íntima del valor de casa? La respuesta radica en tratar la casa como un objeto, en su primigenia función de domes, de proteger al huésped. La casa para Bachelard constituye un cosmos antropológico. Todo espacio habitado lleva como esencia de ser la casa, todas sus habitaciones tienen valores de onirismo constantes. En esto actúa la ensoñación que nos transporta a través del recuerdo hasta dar con una propiedad inmemorial del hogar. En este sentido, no pueden darse memoria e imaginación por separado. La una se proyecta sobre la otra constituyendo una comunidad del recuerdo y de la imagen. Aun así se debe precisar que para Bachelard el recuerdo es algo así como un teatro del pasado puesto que de forma innata seleccionamos y almacenamos solo una parte de todo aquello que vivimos, por ello no es posible asegurar con precisión los hechos pasados del yo, ya que están Tergiversados Por nuestra propia memoria.

RESUMEN

La casa también actúa como un eslabón dentro de la trayectoria del hombre. Es cuerpo y alma de él. Es el primer mundo del hombre, desde donde se lanzará al mundo y su sociedad. El ser de la casa adquiere a medida que va creciendo todas las circunstancias que le rodean y que a su vez lo forman y educan. La vida se empieza bajo la protección de la casa; cuando más vulnerables somos a todo tipo de agentes la casa nos guarda y nos asiste. Es el momento en que se entrelaza una relación entre el ser y el objeto, la casa, que más tarde o más temprano abandonaremos para arrojarnos a otro fuego, a otra casa. Y es que siempre nos refugiamos en la casa ya que forma parte de nuestro grupo de costumbres orgánicas, se inscribe nuestra jerarquía vital.

Más allá de los valores positivos de protección que tenga la casa se establecen además otros distintos relacionados con el ensueño. Valores que permanecen aun cuando la casa ya no existe, incluso más fuertes; “centros de tedio, centros de soledad, centros de ensueño que se agrupan para constituir la casa onírica, más duradera que los acuerdos dispersos de la casa natal”. Son estos valores oníricos los que luego se trasvasan al resto de la comunidad. La casa soñada puede no pasar de ser un acto imaginativo, pero debe satisfacer las necesidades del individuo que la proyecta dotándola de confortabilidad, solidez e incluso se intenta hacerla codiciable para el otro. Debe degustar para sentirnos satisfechos con nuestro proyecto de casa. También reflejará todas las consecuciones epistemológicas que hayamos tenido de otras diferentes y las añadiremos a prototipo, creando un ente perfeccionado desde la tradición vivida de la casa natal.

Bachelard diferencia dos tipos de imágenes de la casa, como un ser vertical y como un ser concentrado. La verticalidad es asegurada por la polaridad entre sótano y buhardilla, de arriba abajo. El tejado es la parte más sufrida de la casa, protege al hombre de las inclemencias de la naturaleza y el tiempo. A su vez es un lugar desnudo, que nos permite ver la estructura interna de la casa, el esqueleto de nuestro hogar, a la vez que sentimos la magnificencia de su diseño y nos asombramos complacidos de habitar dentro de ella. El sótano es oscuro, irracional, el ensueño del hombre participa en él de manera misteriosa y cautelosa. Representa también el miedo, Edgar Allan Poe en sus cuentos sabe reducir todas estas imágenes y jugar con el sentimiento de terror y enclaustramiento, puesto que el sótano está rodeado por entero de tierra. La idea de la verticalidad se agudiza cuando pensamos en los verbos de acción que supone llegar o al tejado o al sótano, al uno se sube y al otro se baja.

De otra manera, la casa es imaginada como un centro de condensación de la intimidad donde se acumula el ensueño. La casa como choza nos llama a un centro de casa mayor, a una entidad primigenia libre de todo prejuicio e imagen previa. La choza aumenta su zona de protección aun siendo la planta de construcción más simple, sigue el tópico del Locus amoenus. El ermitaño es el habitante prototípico dela choza que vela en el horizonte como un faro, su luz se desprende del calor de su interior. La choza nos llama a que entremos y nos sentemos bajo su amparo, se condensa así una imagen de refugio.

LA CASA Y EL UNIVERSO

La casa se pone a prueba en todo momento. Baudelaire sumerge la casa en el invierno, la rodea de nieve y la hace destacar como paraíso artificial en su alrededor. Todas las características de la casa se activan cuando se acumulan las contradicciones. El invierno también puede evocarnos un recuerdo de la felicidad de habitarla. El invierno aumenta el valor de habitación de la casa. Al disminuir sus posibilidades en el exterior, el interior reconoce un aumento de todos sus valores más íntimos. Para Rilke los agentes climáticos son más duros y ofensivos en la ciudad que en la casa

de campo. Esto es una apuesta clara por la comicidad derogar, establece una dialéctica entre ella y todo aquello que la rodea y afecta. El hombre suele ver dichos designios de la naturaleza como terribles signos de fuerzas superiores del universo que no comprende. Tiende a buscarle una razón de ser más allá de responsabilizarlo en unos varemos climáticos determinados. La casa que esta siendo abatida, que lucha o que resiste a una tormenta, un tornado o un ciclón viene a dar ejemplo de resistencia épica. Frente a la hostilidad del cosmos, los valores humanos de protección y seguridad se imponen en la casa imaginada. Esta transposición de lo humano a la casa viene a reforzar la idea de la casa como condensadora y defensora de la intimidad.

EL CAJON, LOS COFRES Y LOS ARMARIOS

Otro espacio poético para el son los cajones, cofres y armarios, lugares de intimidad para el hombre el cual siempre intenta mantener a salvo suyo. Estos elementos le sirven para ocultarse y ordenarse dentro del continuum de la vida. A la hora de definir el cajón se debe diferenciar entre la metáfora y la imagen. La metáfora se sirve de las imágenes para establecer un nuevo lenguaje literario que no tiene por qué ser relativo a esas imágenes. La imagen obra desde la imaginación absoluta y es un ente en sí mismo; no tiene otra referencialidad más que la suya propia. Es peligroso convertir una metáfora en pensamiento ya que esta no debería ser más que un accidente de la expresión; es una falsa imagen puesto que no tiene voluntad productora de expresión. Por ello las imágenes de la intimidad o del secreto se deben alejar de la metáfora y reflejarse en los ensueños de la imagen.

El armario, el escritorio y sus cajones, el cofre y su doble fondo, son verdaderos órganos de la vida psicológica secreta. Sin ellos nuestra intimidad no tendría modelos en los que cobijarse. El espacio del armario es un espacio de intimidad que no se abre a cualquiera, reina en él el orden, que nos recuerda a la historia de la familia, en el sentido de que la memoria se reconoce como un armario. Dice Bachelard que “los muebles complejos realizados por el obrero son un testimonio bien sensible de una necesidad de secretos, de una inteligencia del escondite”. Aquí entra en juego la cerradura, como mecanismo que permite abrir el microcosmos interior del cofre o del armario. Toda cerradura es un llamamiento a descubrir algo oculto; para un ladrón es un

EL NIDO

El nido es la casa del pájaro. Hace mucho tiempo que lo sé, mucho tiempo queme lo han dicho. Se trata de una historia tan vieja que vacilo en repetirla, en repetírmela. Y sin embargo, acabo de revivirla. Y recuerdo, con una gran simplicidad de la memoria, los días en que, en mi vida, he descubierto un nido vivó. ¡Qué raros son, en una existencia, estos recuerdos reales! Sí se profundizan un poco los ensueños ante un nido, no se tarda en tropezar con una especie de paradoja de la sensibilidad. El nido - lo comprendemos encarnan- es precario y, sin embargo, pone en libertad dentro de nosotros un ensueño de la seguridad. ¿Cómo es posible que su fragilidad evidente no detenga semejante, ensueño? La respuesta a esta paradoja es sencilla: soñamos como fenomenólogo que se ignora. Revivimos, en una especie de ingenuidad, el instinto del pájaro. Nos complacemos en acentuar el mimetismo del nido todo verde entre el verde follaje. Lo hemos visto decididamente, pero decimos que estaba bien escondido. Ese centro de vida animal está disimulado en el inmenso volumen de la vida vegetal. El nido es un ramillete de hojas que canta. Participa de la paz vegetal. Es un punto en el ambiente de dicha de los grandes árboles.

LA CONCHA

La naturaleza tiene un modo muy sencillo de asombrarnos: la de hacer engrande. Con la concha que llamamos comúnmente la Gran Pila, vemos a la naturaleza realizar un inmenso sueño de protección, un delirio de protección y obtener, a fin de cuentas, una monstruosidad de la protección.

La naturaleza puede hacer cosas grandes, el hombre imagina lo grande con mayor facilidad. En un grabado de Cork inspirado en una composición de Jerónimo Bosco, conocida con el nombre de La concha navegando Sobré el agua, puede verse una enorme concha de mejillón donde se han instalado una decena de personajes, cuatro niños y un perro. Hay una hermosa reproducción de esta concha habitada por los hombres en el bello libro de Lafonte sobre Jerónimo Bosco. Esta hipertrofia del sueño de habitar todos los objetos huecos del mundo, se acompaña con escenas grotescas propias de la imaginación de Bosco. En la concha los navegantes se dan la gran vida. El sueño de tranquilidad que queremos realizar cuando "nos metemos en nuestra concha", queda perdido por la voluntad de delirio que caracteriza el genio del pintor. Después del ensueño hipertrofiado, hay que volver siempre al ensueño que se designa por su simplicidad primera. Se sabe muy bien que hay que estar solo para habitaren una concha. Viviendo la imagen se sabe que se consiente la soledad. Habitar solo. ¡Gran sueño! La imagen más inerte, la más físicamente absurda, como la de vivir en la concha, puede servir de germen a un tal sueño. Ese sueño nos viene a todos, a los débiles, a los fuertes, en las grandes tristezas de la vida, contra las injusticias de los hombres y del destino. Como ese Salvin, ser de tristeza blanda, que se consuela en su cuarto exiguo porque es exiguo y puede decirse: "¿No tenía ya ese cuartito, ese cuarto profundo y secreto comuna concha? ¡Ah!, los caracoles no conocen su dicha”. “A veces la imagen es muy discreta, apenas sensible, pero actúa. Dice el aislamiento del ser replegado sobre sí mismo.

EL RINCÓN

Iniciamos haciendo una descripción de un espacio en común de una construcción, un espacio el cual muchos no tenemos en cuenta, el autor comenta de este espacio todo lo que sucede en el pensamos que es un espacio oscuro, inseguro, hasta sentimos en el soledad creemos todo esto porque es lo que siempre hemos pensado de este espacio sin llegar a preguntarnos sobre el mismo o sin llegar a conocerlo de una mejor manera, nos referimos al rincón ya sea de una casa o de cualquier otra construcción siempre será el mismo un espacio encerrado por dos muros dos lados abiertos en donde se plantea en el texto que pueden ser la puerta un espacio que funciona como una cueva. Se plantea que allí la persona conoce a sus ser ya que entra en un lugar donde lo encuentra, el rincón es una se mi caja.

El autor nos plantea la historia de infancia de una joven mujer quien construyo su casita en el rincón de una embarcación, y desde este espacio ella se empieza a conocer, encuentra el ser que en una infancia se había perdido por motivos de las novelitas de televisión quienes les cambiaban el mundo a todas las personas o a todos los jóvenes que apenas estaban viviendo o conociendo su infancia, hay muchos relatos en esta parte del libro todos queriéndonos decir que hay un universo inimaginable afuera de nosotros y que desde el rincón podemos conocer mucho más de todo el universo, dice que el universo es inimaginable y que solo nos quedamos inmóviles en un solo espacio sin conocer el resto del espacio existente, como por ejemplo ella podría quedarse solamente conociendo el espacio de su casita en el rincón del barco, o podría conocer más allá de esa pequeña embarcación.

Dice que la telenovelitas es un obstáculo que pinta cosas bonitas en la imaginación de aquella persona que las observe, las pinta desde otro modo y al conocerlas no podemos resolver estas situaciones de manera rápida ya que todo no fue como se vio o como la novelita lo mostro.

Y que esa embarcación con relación a la amplitud del mar era muy distante era algo muy pequeño para las infinidades de cosas que el mal le podría mostrar y conocer.

También nos comenta que en la infancia todos vemos muchas cosas, el autor pone de ejemplo a Leonardo Da Vinci quien criticaba o aconsejaba a los pintores que vieran desde otro punto de vista más realista a la naturaleza que su imaginación fuera más amplia cuando plasmaran un retrato de ella.

También cita el ejemplo la imaginación de un joven quien al acostarse en su cama y mirar hacia arriba ve en el techo el mapa de Europa, nos muestra muchos ejemplo que nos ponen a preguntarnos sobre la infinidad de cosas que el universo tiene para nosotros, y que no podemos quedarnos ahí solamente en un espacio, tenemos que conocer todo lo que nos rodea todo lo que la naturaleza tiene para nosotros.

El poeta conoce más el detalle de la naturaleza que el pintor, lo que Leonardo Da vinci decía, ya que el pintor no plasma las grietas o huecos que un muro puede tener no ve las líneas reflejadas ahí, si no que su punto de vista es menos detallado.

Y dejando atrás el punto de vista de cada persona, lo que piense cada ser humano y racional nos comenta el escritos que tenemos que ser soñadores, de relacionar todo con el sueño de imaginarnos cosas cada vez que hagamos algo y que seamos convincentes a la hora de imaginar permitiendo ir más allá de las barreras que imaginemos cada paso que hacemos si nos imaginamos una escalera tenemos el punto de vista que hay que subirlas y que hay que bajarlas pero si imaginamos la escalera sabemos que hay que tener en cuenta el número de escalones a subir que toca uno por uno y paso por paso ya sea para bajarla o subirla ; conociendo las cosas detalladamente y saber todo de ellas. Sonar y vivir todo lo que estamos haciendo.

LA MINIATURA

En esta parte hablamos de las miniaturas que el escritor muestra en sus cuentos de hadas, la relación y opinión que existe entre el psicólogo y el filósofo. Para el psicólogo el escritos crea un mundo de miniaturas en un pequeño garbanzo y dice que no entra en la realidad de lo fantástico señala que el escritor se divierte haciendo esto, y para el filósofo se es necesario plantear un problema fenomenológico y que hay que tener objetividad con lo que el escritor quiere trasmitirle al lector. Ahora el texto nos pone como ejemplo una historia de hadas donde el escritor crea un mundo en miniatura donde el lector tiene que despertar su talento de ensueño a la hora de leer esto, con el talento que el escritor crea esta diminuta historia y que con mucho agrado crea los mejores lugares.

A la hora de entrar en este lugar hermoso vemos la dimensión de lo pequeño y que a partir de ahí, siguen creándose más espacios diminutos y bellos, y que a partir de las de las pequeñas casitas que se pueden apreciar nos trasladamos a un punto de nuestra infancia donde jugábamos con

casitas con muñecos y con muchos juguetes en donde dejábamos que nuestra imaginación volara y nos decía mucho creando una breve historia sin ser un escritor o poeta.

Iniciamos este párrafo con la imaginación; que tenemos que imaginarnos muchas cosas tenemos que dejar que nuestra imaginación vuele y nos muestre cada vez más cosas que no sabíamos en donde no solo el escritor o el poeta profundicen en sus breves historias y cuentos, donde su imaginación hacen de un mundo diminuto algo supremamente gigante y fascinante para el lector.

Muestran el ejemplo de un pintor que se encuentra en su celda quien plasmo en un mural de la misma un gran túnel con un fascinante tren a una escala muy diminuta, y que cuando sus amigos vienen a buscarlo él les pide un poco de tiempo para el entrarse y subirse a este diminuto tren; no es de esperar que los amigos le crean si no que se echan a reír de lo que está diciendo y dicen que su estado mental es diminuto pero al cabo del momento este pintor se vuelve lo suficientemente pequeño y se sube a esta máquina de vapor y esta empieza a moverse por el estrecho espacio del túnel botando su humo por su chimenea por el movimiento ejercido.

Nos muestra como la imaginación lo es todo, nos dice que a partir de la imaginación y de la miniatura puede llegar a adquirir muchas cosas, que él se siente dueño del mundo tanto su poder de imaginación y de miniaturizarlo sea posible para conocerlo todo (el mundo).

Hay que rebasar la lógica para vivir lo grande que existe dentro de lo pequeño.

Tenemos varios ejemplos en donde las personas ven más allá de lo que son de su profesión que llevan y que se centran en la importancia de conocer los objetos de manera minuciosamente como por ejemplo el botánico quien ve un flor desde su punto de vista más pequeña donde conoce más allá de lo que en si es una flor llega hasta el interior de la misma y conoce como esta se comporta.

En esta parte hablamos de la observación que hay que tener a las cosas, también que hay que mirar como si tuviéramos una lupa detalladamente las cosas conociendo parte por parte el objeto que queremos conocer; pero también hay que prestar atención ya no con la lupa si no prestar atención con lo que observamos.

Nos dice que el ensueño con la imaginación hacia una lectura hace que nos traslademos de un mundo a otro mundo lleno de muchas posibilidades de muchos colores de mucha imaginación en donde todo es posible y divertido y que tenemos que centrarnos en lo que estamos leyendo el sentido y sentimiento que hay que tener a la hora de leer un cuento o una lectura profundizar en todo llegar a un límite diminuto, mirando desde muchos puntos de vista y detalladamente cada cosa de mirar las cosas desde lo más pequeño hasta lo más grande y de lo más grande a lo más pequeño encontrando una relación en ella.

El ensueño hace de un soñador que pueda cumplir con lo que ha querido trasladarlo hacia muchos rincones, sentir en todo su cuerpo lo divertido y el sentido de una lectura y que lleva más allá su conocimiento, más allá de lo que no conocía y llego a conocer.

El autor nos cita muchos ejemplos de otros escritores quienes plasman historias de personajes diminutos pero que a la hora de leer todos estos cuentos o historias son fascinantes y también inmensas y que el sentido de la misma nos lleva a preguntarnos más y a leer minuciosamente y detalladamente este texto, el sentido de grandeza que existe en una breve historia.

Todo soñador solitario sabe que oye de otro modo cuando cierra los ojos. Para reflexionar, para escuchar la voz interior, para escribir la frase central, condensada, que dice el "fondo" del

pensamiento ¿quién no ha oprimido sus párpados con el pulgar y los dos primeros dedos apretando con fuerza? Entonces el oído sabe que los ojos están cerrados, sabe que la responsabilidad del ser que piensa, que escribe, está en él. El relajamiento vendrá cuando vuelvan a abrirse los párpados.

LA INMENSIDAD ÍNTIMA

La inmensidad es, podría decirse, una categoría filosófica del ensueño. Sin duda, el ensueño se nutre de diversos espectáculos, pero por una especie de inclinación innata, contempla la grandeza. Y la contemplación de la grandeza determina una actitud tan especial, un estado de alma tan particular que el ensueño pone al soñador fuera del mundo próximo, ante un mundo que lleva el signo de un infinito. Por el simple recuerdo, lejos de las inmensidades del mar y de la llanura, podemos, en la meditación, renovar en nosotros mismos las resonancias de esta contemplación de la grandeza. Pero ¿se trata realmente entonces de un recuerdo? La imaginación por sí sola, ¿no puede agrandar sin límite las imágenes de la inmensidad? ¿La imaginación no es ya activa desde la primera contemplación? De hecho, el ensueño es un estado enteramente constituido desde el instante inicial. No se le ve empezar y, sin embargo, empieza siempre del mismo modo. Los dos espacios, el espacio íntimo y el espacio exterior vienen, sin cesar, si puede decirse, a estimularse en su crecimiento. Designar, como lo hacen con todo derecho los psicólogos, el espacio vivido como un espacio afectivo no llega, sin embargo, a la raíz de los sueños de la espacialidad. El poeta va más a fondo descubriendo con el espacio poético un espacio que no nos encierra en una afectividad. Sea cual fuere la efectividad que colorea un espacio, sea triste o pesada, en cuanto está expresada, expresada poéticamente, la tristeza se modera, la pesantez se aligera. El espacio poético ya expresado, adquiere valores de expansión. Pertenece a la tristeza del ex.

LA DIALECTICA DE LO DE AFUERA Y DE ADENTRO

La dialéctica de lo de dentro y lo de fuera está implícitamente relacionada con la poética del espacio. El ser y el no ser, lo abierto y lo cerrado son las metáforas más comunes para referirse a estados cualidades del ensueño y el espacio. Si se intenta trascender todas las situaciones posibles se enfrenta uno con el ser del mundo en un aquí  o allí. El principal problema de esta dialéctica es hacer concreto lo de dentro y vasto lo de fuera. La oposición no es clara ni sincera. Las diferencias entre ambas se desdibujan en muchos ámbitos y nos damos cuenta de que la dialéctica de lo de dentro y lo fuera se multiplica y diversifica en innumerables matices.

Al entrar un poco en detalle de la parte lingüística, nos damos cuenta que esta formada por adverbios y verbos, que nos dan como resultado palabras y frases, y las palabras a su vez están formadas por prefijos y sufijos. En el texto nos damos cuenta por el ejemplo de allí y aquí que las palabras siempre se debilitan dándonos los filosofemos de la lengua francesa (lengua natal del autor).

Al relacionar esto con el ser se puede observar que toda expresión lo desfija por lo tanto el ser debe ser el ser de otra expresión y no perderse en un espiral. Y para ello se debe evitarse los a conglomerados verbales aprovechando la movilidad de las lenguas modernas. Entonces nosotros si nos basamos del significado de la vista y sabiendo que el ser existe empezaríamos a desconfiar del verdadero significado de visión pues sabemos que esta existe pero no se puede observar. Pero si podemos observar la parte externa del ser humano y no el interior de él; planteando problemas

antropológicos de lo de adentro y lo de afuera; calificándolos bajo distintos parámetros a estas dos palabras.

Y teniendo que utilizar la imaginación para obtener algo surrealista de lo que el ser es por dentro para poder entender e interpretar de la mejor manera el funcionamiento del subconsciente, dejando de lado cualquier tipo de control racional.

LA FENOMENOLOGIA DE LO REDONDO

La redondez del ser solo puede aparecer en la meditación fenomenológica. A la esfera se le suele atribuir verbalmente el valor de la perfección; un voz a voz cuenta que la perfección es lo enemigo de lo bueno. Esto es que al intentar alcanzar la perfección absoluta nos perdemos en ella y en su circularidad ya que empieza y acaba en el mismo punto. Lo redondo es comienzo y es fin. Incluso la literatura ha llamado estructura circular al recurso de empezar y comenzar en el mismo punto.

Pero en si esta redondez nos perdemos en lo que siempre se ha pensado como perfecto ya que solamente nos basamos en sus colores o en la intensidad de la línea nos estaríamos olvidando del trasfondo de esta. Que es lo que normalmente pasa en la vida ya que esta no es precisamente circular como la plantea Van Gogh porque en el transcurso siempre se encontraran problemas que interrumpirán lo perfecto del círculo.

En el libro "La Poética del Espacio” el autor elabora distintas temáticas por medio de las cuales busca entender la relación del hombre con mundo, Bachelard realiza un estudio fenomenológico, es decir, un estudio de los fenómenos lanzados a la conciencia.

Al hablar de la casa considera que esta imagen esta compuesta por medio de una compilación tanto de recuerdos e imágenes que tenemos de cada casa en la que alguna vez hayamos vivido, como de aquellas en las que vayamos habitar la imagen de casa, no debe verse como objeto, sino como esta habitado el espacio y como vivimos el día a día. Al mismo tiempo, es importante entender que la calidad de la casa u hogar no va mano a mano con la idea de lujo. La calidad de este me determina por medio de la comodidad. En la casa, el ser encuentra un albergue. Es por esto que el filósofo plantea que el beneficio principal del hogar, de la casa... es más que cualquier otra cosa, albergar el ensueño. La casa protege al soñador. La casa nos permite soñar en paz.

Ahora bien, esta idea de casa se dividió en pensamiento, recuerdos y sueños, y a su vez, estos elementos se ven unidos por el ensueño El autor propone que entre mas compleja sea la casa, mas recuerdos caracterizados contendrá, Los espacios los llenamos de recuerdos, ya sean sufridos o gozosos. Pero al mismo tiempo, podemos borrarlos del presente y recuperados por medio de sueños.

Mas adelante, el autor realiza un análisis del invierno debido que según el, las condiciones que establecen esta determinada estación refuerza la felicidad del habitar. Esta idea se hace evidente en la cita textual: "¿Una agradable habitación no hace más poético el invierno, y no aumenta el invierno la poesía de la habitación?" El invierno hace el refugio “más cálido, más dulce y más amado". (“Cuando el refugio es seguro la tempestad es buena"). La casa en el invierno se convierte en una casa protectora.

"La casa luchaba bravamente. Primero se quejó; los peores vendavales la atacaron por todas partes a la vez, con un odio bien claro y tales rugidos de rabia que, por momentos, el miedo me daba escalofríos. Pero ella se mantuvo.”,

Es entonces que a raíz de esta idea, viene la relación de casa con madre, debido a que como nuestra madre, la casa lucha por nuestra protección, nos da calidez y paz. Vemos esta idea reflejada en la cita: “La casa se estrechó contra mí como una loba, y por momentos sentía su aroma descender maternalmente hasta mi corazón. Aquella noche fue verdaderamente mi madre.”

Ahora, en continuación a esta idea de la relación del exterior y el interior, plantea situaciones completamente opuestas. Ahora el interior se ve como un espacio oscuro, en tinieblas, y el exterior, como un espacio completamente iluminado. Existe un momento o punto de relación entre ambos lugares (dentro y fuera). Por tanto, este vínculo o relación, la mayoría de las veces, lo representamos por medio de ventanas, aberturas, huecos, etc... Ya que permiten una conexión directa, con el inmenso universo que la ventana genera. Esta idea es evidente en la cita: “Y aquí (dentro) no hay apenas espacio; y tú te calmas casi, pensando que es imposible que algo demasiado grande pueda sostenerse en esta estrechez… Pero fuera, fuera todo es desmedido

ANALISIS

Seguidamente analiza el símbolo del cajón, los cofres y los armarios Para el autor, la imagen de los cajones y los cofres encierran o disimulan los secretos del ser En los armarios y los cajones guardamos lo más personal e íntimo de nuestra vida. Los corfes contienen infinitas cosas inolvidables tanto para nosotros como para aquellos quienes les legaremos nuestros tesoros. Es por tanto que se puede decir que el pasado, el presente y un futuro se hallan condensados es estas imágenes.

En conclusión, después de haber analizado ciertos temas del texto "La poética del Espacio" del filosofo Gastón Bachelard, es importante destacar que este texto es de gran valor a nivel arquitectónico porque realiza un estudio de la casa y logra explicar de manera sumamente rica como la casa sirve como instrumento de análisis del alma humana y el ser en si.

El autor elabora distintas temáticas por medio de las cuales busca entender la relación del hombre con mundo. En este texto Bachelard realiza un estudio de los fenómenos lanzados al alma de la casa como tal. Debido a que podemos observar claramente como Bachelard conceptualiza la idea de la casa como un instrumento de análisis del alma humana.Al hablar de la casa, Bachelard considera que esta imagen esta compuesta por miedo de una compilación tanto de recuerdos e imágenes que tenemos de cada casa en la que alguna vez hayamos vivido, como de aquellas en las que vayamos habitar. Ahora bien, es importante que la imagen de casa, no se vea como objeto, sino mas bien desde un punto de vista fenomológico el como esta habitado el espacio y como vivimos el día a día en determinado rincón del mundo. Al mismo tiempo, es importante entender que la calidad de la casa u hogar no va mano a mano con la idea de lujo. Mas bien, dependiendo del grado de humildad del hogar, la calidad de este me determina por medio de la comodidad. En la casa, el ser encuentra un albergue. Establece muros y paredes para así generar un confort a tal vez de la ilusión de protección. Es por esto que el filósofo plantea que el beneficio principal del hogar o de la casa es más que cualquier otra cosa, albergar el ensueño. La casa protege al soñador. La casa nos permite soñar en paz.

CONCLUSION

PRIMER EJEMPLO: LA CASA

El hombre intenta que su entorno sea lo más parecido a su Casa, por esa necesidad de protección.

Entonces nuestra vida está basada en encontrar esa comodidad, en que cada espacio nos genere sensaciones similares a las que sentimos en nuestra casa, esta casa diseñada o pensada a través de las casas anteriores en las que habitamos, esta es la razón por la que siempre le hacemos mejoras o remodelaciones incluso por esta razón el ser humano siempre está pensando en cambiar de vivienda.

El mundo externo a nuestra casa, (nuestro trabajo, colegio o cualquier actividad realizada fuera de nuestra vivienda) nos trasmite sensaciones que son necesarias en nuestra vida, pues este entorno nos brinda las condiciones para esa casa, esta es la razón por la que muchas personas habitamos en muchos lugares pero solo en uno nos sentimos plenamente cómodos, es la razón por la que siempre volvemos a nuestra casa para comenzar el nuevo día.

Una casa que aun siendo la más sencilla o la más lujosa, brinda las mismas sensaciones para las personas que están habitándola.

EJEMPLOS

SEGUNDO EJEMPLO: LA PUERTA

La puerta de mi habitación, de la piel de un árbol muerto, tan vacía de alma y corazón, muda, sorda y ciega. Confidente y guardiana, barrera de mi mundo al mundo, que seria de mí ser, de mis secretos, de mi vida si no fuera por ella? Es la frontera que me permite vivir lejos de la vida, vivir en mi, es ella misma quien me conecta con todo desde mi adentro desde mi sueño a la realidad, mi puerta marrón y vieja, de tanto cortar tras ella, ha aprendido a susurra, me hace coros cuando me deja pasar y vigía a toda que deje entrar con un seguro nos brinda paz, confidencia oscuridad para compartir mi propia alma con la mujer con esa que la puerta deje pasa.

TERCER EJEMPLO: LA ESCALERA

Los escalones de la vida unos tras otro, cuando escogí andar por suerte del destino obligado a crecer sin saber te encontré mi primera meta, subir, culminar, escalón tras escalón me enseñaste desde el interior de mi hogar, desde mi cuna a tropezar, mis fuerzas todas de alcanzar a sortear el alto de cada contrahuella una a una con descanso al voltear solo para retomar el impulso y treparte, me preparaste para el mundo , para triunfar, sin temor de volver a empezar, desde la intimidad de mi casa a la profundidad del mundo real.

CUARTO EJEMPLO: LA DUCHA

Después de un día largor, no te importa, después de un día pesado, no te importa, después de cualquier jornada la que sea, no le das nada de importancia pues siempre que abro la llave, siempre me abrazas te llevas todo, porque así desnudo cargo con culpas con recuerdo con deudas con penas que no son mías ni tuyas pero te las llevas por el sifón, si estoy solo o no, no te importa pues igual son abrazas nos haces tuyos nos acercas, entro solo o con ella y siempre salgo nuevo como nacido al mundo puro nacido de tu aura fría o caliente a la galaxia de oscuridad

QUINTO EJEMPLO: EL CANGREJO ERMITAÑO

El cangrejo ermitaño es un animal un poco inusual que cabe analizarlo en el siguiente ejemplo, esta crustáceo posea un abdomen blando el cual lo convierte vulnerable a daños, por esto mismo este animal lleva su “casa” a donde va, esta interpretación de hogar aplicándola hacia este cangrejo nos muestra que un hogar necesita brindar seguridad y comodidad, este cangrejo busca caparazones de caracoles muertos para apropiarse de ellos como su vivienda la cual debe llevar consigo a todas partes pues es su única fuente de seguridad, su elemento que le brinda la confianza de moverse pues si no la tuviera estaría expuesto al peligro, la única forma de que este abandone su hogar es cuando ha crecido lo suficiente y necesita, por obligación un nuevo hogar el cual se adapte a sus necesidades de tamaño. La relación interior exterior en la abertura por la cual el cangrejo asoma sus patas para desplazarse o por donde sale completamente para cambiar de concha.

Este crustáceo tiene un concepto de vivienda con un aspecto principal que es la seguridad, un elemento del que depende para vivir pero cabe resaltar que este no construye o fabrica su casa, el busca un elemento que pueda cumplir con lo que requiere.