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Nicaragua 2009Nicaragua 2009
Impacto de la crisis Impacto de la crisis económica en la niñez y la económica en la niñez y la
adolescenciaadolescencia
Federación Coordinadora Nicaragüense de Federación Coordinadora Nicaragüense de ONG que trabaja con la Niñez y la Adolescencia ONG que trabaja con la Niñez y la Adolescencia
Economía orientada al mercado externo
Liberalización económica desde los noventa. Orientación exportadora dominante sobre la producción orientada el mercado interno,
Apertura comercial (TLC, integración económica centroamericana)
Política pública priorizó dinamizar el crecimiento económico, dejando la reducción de la pobreza como un producto del mismo (acciones sociales para amortiguar el impacto del ajuste en la economía).
Estado quedó como promotor del acceso a mercados, para el desarrollo de infraestructura vial, la agilización del mercado de tierra, trabajo, capital y conocimientos, para fortalecer la competencia y competitividad de las empresas
El Estado fue disminuyendo su peso en la prestación de servicios públicos esenciales.
Crecimiento y reducción de pobreza moderados
La economía nacional ha mostrado un crecimiento anual moderado, 3.3% promedio en los últimos cinco años
Leve impacto en la reducción de la pobreza. Entre 1993 y el 2005 la pobreza disminuyó apenas en un 2%
El crecimiento se verá afectado por la crisis mundial, pues ha venido siendo impulsado por las exportaciones, cuyos mercados principales son Estados Unidos, Europa y Centroamérica.
La recesión en los países desarrollados afectará directamente nuestra economía.
De acuerdo a las más recientes proyecciones gubernamentales, la economía podría crecer entre 1.5 y 2%, mucho menor que el 4.5% previsto en el Programa Económico Financiero 2007-2010.
El impacto de la crisis
I. En las exportaciones
Las tres principales fuentes de ingreso de divisas del país provienen de la exportación de café, el turismo y las remesas familiares. Estos rubros se verán afectados por la crisis, con distinta intensidad y en diferentes momentos.
Caída del volumen y precios de las exportaciones principales
Café, maní, ganado en pie, carne y lácteos, azúcar, frijol, banano, tabaco en rama y productos elaborados de tabaco, langosta, camarones, pescado fresco, oro, productos químicos y de madera, bebidas y rones.
En dependencia del momento y tipo de impacto, así será el efecto en las diversas regiones del país. Región Central: caficultura, tabaco, frijol y ganadería. Región del Caribe: pesca y captura de camarones y langostas. Región del Pacífico: azúcar, otras manufacturas, ganadería, carne y lácteos y banano, manufacturas
La demanda de productos de zona franca (textiles y otros), cuya exportación se hace al mercado norteamericano, también se está reduciendo. Son 120 empresas, proporcionando 87,500 empleos directos y unos 262,000 empleos indirectos principalmente en Managua y los departamentos de la Región del Pacífico.
El impacto de la crisis
II. En las remesas y el turismo
Se espera una disminución de la actividad turística y de los ingresos por ese concepto, que en el 2008 ascendieron a 277.8 millones de dólares. El flujo principal de turistas se recibe de Centroamérica y los Estados Unidos. Más de la mitad de los empleos del sector turísticos son femeninos.
Como consecuencia de la recesión en Estados Unidos y del debilitamiento de la actividad económica en Costa Rica y España, se han disminuido las fuentes de trabajo para migrantes nicaragüenses, quienes están perdiendo más empleos que otros segmentos sociales, lo que determinará una reducción del flujo de remesas.
Las remesas reportan ingresos por unos 800 millones de dólares para Nicaragua, aproximadamente el 15% del PIB. Se estima que unos 400,000 hogares reciben remesas en el país, con un promedio mensual de 175 dólares. Un 68% de los receptores son mujeres y el 45% vive en el área rural.
El ingreso de las remesas es un complemento clave a los ingresos familiares para sus gastos de consumo cotidiano, educación, gastos contingentes de salud, mejoras de viviendas, algunas inversiones y cierto ahorro
El impacto de la crisis
III. En otros sectores
El sector de la construcción, especialmente de viviendas, ha venido decayendo desde el año pasado por la reducción de la capacidad adquisitiva de sectores medios y el incremento de precios en los materiales de construcción. Actualmente, se encuentra virtualmente paralizado, a causa de las restricciones de acceso al crédito hipotecario y las altas tasas de interés del sistema financiero.
El sistema financiero nacional tendrá una menor disponibilidad de
fondos y por tanto podría ofrecer menos crédito que en el período pasado, dificultando el acceso de las empresas a capital de trabajo. Las tasas de interés se mantendrán elevadas, considerando que el riesgo país es alto.
La crisis afectará a muchas pequeñas y medianas empresas por las
dificultades adicionales de acceso a financiamiento y la reducción de la demanda de sus productos y servicios.
La inversión privada nacional puede ser mucho menor que el promedio
de los años anteriores. Es muy probable una disminución del flujo de inversión extranjera que ya era relativamente reducido.
El impacto de la crisis
IV. Disminución de ingresos de las familias
Por pérdidas de empleo
Disminución de las remesas desde el exterior
Deterioro de los ingresos en el sector informal
Deterioro del salario real de los trabajadores y trabajadoras
Impacto principal en sectores urbanos por precios elevados de alimentos
Otros problemas que afectan la economía
Tensiones derivadas de fenómenos naturales en los años anteriores (Huracán Félix)
Inestabilidad en la propiedad costera y agraria
Discurso político ha dado señales confusas y de inestabilidad para la inversión nacional y extranjera
La crisis política y de gobernabilidad: Denuncias de fraude en elecciones municipales de noviembre
2008 Confrontación política y polarización política interna
Las acciones del gobierno frente a la crisis
La política económica está orientada a:
Conservar la estabilidad fiscal y financiera, la sanidad del sistema financiero nacional y su disponibilidad de recursos.
Facilitar la operación de las empresas y el acceso a mercados para sostener la dinámica económica
La política fiscal está orientada a:
Ajustar el presupuesto a una menor disponibilidad de recursos, por disminución de ingresos tributarios y de cooperación externa por problemas de gobernabilidad y transparencia en las elecciones municipales del 2008.
Reducción del presupuesto de educación básica y salud pública, y gastos operativos del resto de instituciones
Priorización del programa de inversión pública, infraestructura, agua, reparación de escuelas y unidades de salud
El impacto en la niñez
La crisis afectará, en mayor medida, a los niños, niñas y adolescentes de las familias que se encuentran en peor condición de pobreza, que carecen de recursos para enfrentar contingencias.
Actualmente el 22.2% de los niños y niñas menores de cinco años se encuentra en condición de pobreza extrema; en similar condición está el 22.7% de quienes tienen entre 6 y 11 años y el 21.2% de adolescentes entre los 12 y 14 años.
Es más probable que afecte a la niñez y adolescencia de las familias urbanas pobres que a las rurales que tienen mayor acceso a la producción de alimentos.
En el área rural puede afectar, en mayor medida, a quienes actualmente están en condición de extrema pobreza, tienen poco acceso a los servicios básicos y, a quienes dependen de padres y madres asalariados en ocupaciones del sector agro exportador.
El impacto en la niñez
Los niños, niñas y adolescentes cuyos padres y madres laboran en las zonas francas, en la construcción, rubros agrícolas o pecuarios vinculados a la exportación, el sector pesquero, los servicios y el comercio, podrán ser afectados de forma importante por el cierre temporal de empresas, la cancelación de cierto tipo de producción o servicios o las acciones para disminuir costos y gastos en las empresas o en las instituciones estatales.
El deterioro del salario real reducirá la capacidad adquisitiva de los ingresos de las familias de trabajadores y trabajadoras.
La disminución del flujo de remesas podría afectar a unas 400,000 familias que dependen de ese dinero para completar su gasto en alimentos, educación y salud para los niños, niñas y adolescentes.
La reducción de los ingresos por la disminución de la actividad económica productiva, comercial y de servicios, afectará a quienes laboran por cuenta propia y en el sector informal. Muchas mujeres jefas de familia se encuentran en esta condición.
Impacto en la niñez
La reducción presupuestaria al Ministerio de Educación, al Ministerio de Salud y al Ministerio de la Familia, afecta directamente la capacidad de estas instituciones de prestar adecuadamente los servicios actuales, en cantidad y calidad.
Al cancelarse la contratación de nuevas plazas y reducirse el presupuesto, se hace imposible la ampliación de servicios, lo que puede agravar la situación actual de estancamiento en la cobertura de educación primaria y la ya baja cobertura del sistema público de salud. Se continúa alejando la posibilidad de alcanzar las metas establecidas en los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
En particular, la disminución de fondos para medicamentos en el sistema de salud pública, dejará a las unidades con menores posibilidades de responder a la demanda y obligará, aún más, a las familias más pobres, a disponer de sus escasos recursos para enfrentar sus necesidades de salud más urgentes.
Riesgos principales de los más pobres
Padecer algún grado de desnutrición infantil o agravar el actual y en consecuencia un mayor riesgo de padecer enfermedades. Actualmente, más de 135,000 niñas y niños menores de cinco años, sufre de algún grado de desnutrición crónica.
Una mayor inasistencia o abandono de la escuela primaria o secundaria, por las dificultades económicas de las familias. En 2007, la tasa de escolarización de primaria fue 86.5% y la de secundaria, un 46%.
Abandono de estudios técnicos o universitarios de jóvenes, de ambos sexos, que actualmente los sostienen usando las remesas familiares.
Más niños y niñas obligados a realizar trabajos por alguna remuneración, para compensar los menores ingresos familiares.
Riesgos principales de los más pobres
Una mayor tendencia a la migración de padres y madres, con los consecuentes resultados de desintegración familiar y el impacto en niños, niñas y adolescentes que quedan al cuidado de familiares.
Ser víctimas de violencia intrafamiliar.
Ser víctimas de la violencia delincuencial que está elevándose en el país.
Los adolecentes y jóvenes, corren un mayor riesgo de caer en condiciones de marginalidad social, pues con menor o nulo acceso al mercado de trabajo o al sistema educativo, pueden verse involucrados en situaciones de mayor consumo de alcohol y drogas, violencia social, delincuencia común y redes delictivas.
Algunas estrategias
Realizar un trabajo de incidencia con el gobierno y la Asamblea Nacional para asegurar la integridad del presupuesto para la salud pública y la educación básica, así como de aquellos programas orientados a compensar el daño en niños, niñas y adolescentes que se encuentran en condición de marginalidad y de los programas orientados al ejercicio de los derechos de la niñez y la adolescencia.
Trabajar con el Ministerio de Educación para asegurar que la ejecución del programa de nutrición escolar se esté realizando en las comunidades en condición de pobreza, que por las características y naturaleza de la crisis, estén siendo más afectadas.
Demandar al Ministerio de Educación la conservación íntegra de las plazas actuales de educadoras y educadores de preescolar.
Demandar al INSS, que mantenga, durante el presente año, el derecho de atención en salud a los hijos e hijas de trabajadores asegurados que sean despedidos en este período.
Algunas estrategias Incidir para que el gobierno nicaragüense plantee a los gobiernos
de los Estados Unidos, Costa Rica y España un cese a las deportaciones de los migrantes indocumentados. Las organizaciones que trabajan con la niñez y la adolescencia pueden incidir en sus organizaciones amigas en esos países para lograr el mismo objetivo.
Promover un acuerdo de responsabilidad social empresarial, con las empresas y bancos que operan el envío y recepción de remesas, para reducir el precio de cada transacción.
Las organizaciones que trabajan con la niñez y la adolescencia pueden realizar un esfuerzo de priorización de acciones de apoyo, para dirigirlas a aquellas comunidades que estén siendo particularmente afectadas. Es importante que exista un trabajo de concertación, generador de sinergias, que evite la duplicación de esfuerzos entre las organizaciones en los distintos territorios.
Promover una concertación de acciones entre las organizaciones no gubernamentales internacionales que trabajan con niñez y adolescencia.
Algunas estrategias
Analizar la situación y perspectivas con las Comisiones Municipales de la Niñez y Adolescencia, las Casas del Adolescente o comisiones similares, para concertar acciones y recomendar medidas que puedan ser ejecutadas por las autoridades locales, las empresas, los productores, las iglesias y las organizaciones de la sociedad civil.
Concertar con las autoridades municipales la priorización de su gasto social en función de las familias que se están siendo mayormente afectadas y para enfrentar los mayores riesgos que padecen niños y niñas en cada caso.
Utilizar profusamente los medios de comunicación en todos sus espacios, para sensibilizar a la población, a padres y madres, sobre la necesidad de priorizar el interés de niñas, niños y adolescentes.
Solicitar a los países que han suspendido los fondos de apoyo presupuestario (63 millones de dólares), reorientarlos para financiar programas de contingencia social frente a la crisis, administrados por un fondo especial para ser ejecutado por las organizaciones de la sociedad civil.
